Está en la página 1de 11

Document downloaded from http://www.elsevier.es, day 21/12/2017. This copy is for personal use.

Any transmission of this document by any media or format is strictly prohibited.

Rev Argent Radiol. 2014;78(1):49-59


2014

VOLUMEN 78

RE VISTA ARGENTINA DE RADIOLOGÍA

NÚMERO 1

R E V I S TA A R G E N T I N A D E R A D I O L O G Í A
www.elsevier.es/ rar
Sociedad Argentina de Radiología www.elsevier.es/rard

HISTORIA

Humberto Horacio Carelli: pionero de la radiología argentina

Humbert o Horacio Carelli: Pioneer of radiology in Argent ina

A.E. Buzzia,b, * y C. Gottab,c

a
Facult ad de Medicina, Universidad de Buenos Aires, Buenos Aires, Argent ina
b
Capít ulo de Hist oria y Humanidades de la Sociedad Argent ina de Radiología, Argent ina
c
Facult ad de Medicina, Universidad del Salvador, Buenos Aires, Argent ina

Recibido en oct ubre de 2013; acept ado en oct ubre de 2013

Uno de los propósit os fundament ales del Capít ulo de Hist o- remont a a 1523 y deriva de la palabra francesa pionnier, que
ria y Humanidades de la Sociedad Argent ina de Radiología es significaba «soldado de a pie que prepara el camino para el
poner en perspect iva hist órica nuest ra profesión y, al hacer- ej ércit o». Est a, a su vez, proviene de un vocablo del francés
lo, rendir homenaj e a los logros de los pioneros. ant iguo: paonier («soldado de a pie»), el cual se origina, a la
Recient ement e hemos publicado las cont ribuciones origi- vez, en el t érmino peón, que remit e a una «persona ut iliza-
nales argent inas a la radiología mundial1. En efect o, dent ro da por ot ros para sus propios fines»3-6.
de nuest ra especialidad, hay muchas innovaciones int roduci- El sent ido figurado de «una persona que va primero o hace
das por médicos argent inos que han t enido una repercusión algo primero» es de 1605, pero lo que queremos resalt ar es
global (acept ando que los aport es originales son los que, en la ot ra part e del concept o: además de ser el primero, un
el moment o de su aparición, implicaron un progreso clínico pionero prepara el camino para ot ra persona. Y est a es una
o t écnico real). La import ancia de una cont ribución original t area act iva, no pasiva. Es decir, un pionero lleva a cabo
se mide en relación con el nivel de conocimient o alcanzado una acción pensando en sus cont inuadores, porque t iene en
en un período det erminado, aunque a veces el progreso de cuent a que alguien va a seguir la obra. Por ello, t rat a de
la medicina haya t erminado invalidando o relegando esas allanar el camino, al mismo t iempo que lo crea. Desde est a
conclusiones2. perspect iva, el origen et imológico de la palabra result a re-
Humbert o Horacio Carelli, en est e sent ido, fue un pione- velador, ya que designa a alguien que es ut ilizado por ot ros
ro. Según indica la definición de la palabra, un pionero es para sus propios fines. Como dij o Isaac Newt on en una cart a
alguien que incursiona por primera vez en alguna act ividad a Robert Hooke: «Si he podido ver más lej os, fue solo porque
humana, que abre nuevas áreas de pensamient o, invest iga- me paré en los hombros de un gigant e»7. Ciert ament e, un
ción o desarrollo; o bien que es el primero o se encuent ra pionero es un gigant e.
ent re los primeros en cualquier campo del progreso. Tam- Humber t o Horacio Carelli nació el 11 de noviembre de
bién puede ser la primera persona en conocer una región, 1882 en Mercedes, una localidad ubicada cien kilómet ros al
la responsable de abrir algo para que los demás lo ocupen y oest e de la Ciudad de Buenos Aires. Allí, realizó sus primeros
desarrollen. Sin embargo, el origen de la palabra pionero se est udios en una escuela rural 8.

* Aut or para correspondencia.


Correo elect rónico: alfredo.buzzi@diagnost icomedico.com (A.E. Buzzi).

ht t p:/ / dx.doi.org/ 10.7811/ rarv78n1a09


0048-7619 © 2013. Sociedad Argent ina de Radiología. Publicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.
Document downloaded from http://www.elsevier.es, day 21/12/2017. This copy is for personal use. Any transmission of this document by any media or format is strictly prohibited.

50 A.E. Buzzi y C. Got t a

Sus padres, ambos inmigrant es it alianos, se casaron en la Ant oine Béclère y, en Burdeos, aprendió elect rot erapia con
Argent ina y fundaron una familia numerosa. Su padre fue Jean Alban Bergonié12.
cónsul de It alia en Mercedes hast a 1889, cuando el mat rimo- Ya de vuelt a en la Argent ina, t erminó su carrera de me-
nio decidió mudarse a Buenos Aires para que sus hij os reci- dicina en 1909 y, dos años más t arde, recibió su diploma de
bieran educación. Por ese ent onces, Carelli t enía 7 años8. Doct or con la t esis «El t rat amient o de la leucemia con rayos
En 1901 ingresó a la Facult ad de Medicina de la Univer- Roent gen»13 (fig. 2). Al igual que en muchos ot ros lugares, en
sidad de Buenos Aires. Muy pront o, ya como est udiant e de esa época era más sencillo int roducir los rayos X en la t era-
primer año, most ró int erés en la radiología y fue nombrado pia que en el diagnóst ico. Al respect o Carelli escribió: «Es
asist ent e de la cát edra de Física Médica, a cargo de ot ro fácil most rarse escépt ico e incrédulo. Con est a act it ud nadie
presursor, el Dr. Jaime Cost a (f ig. 1). Allí, t rabaj ó hast a est á obligado a demost rar conocimient os en la mat eria, por
19049,10. lo que puede esconderse det rás de una cómoda máscara de
Cost a comenzó a enseñar radiología en l a cát edra de ignorancia e indiferencia»12.
Física en 1897 y Carelli fue uno de sus colaboradores do- Tras f inalizar el doct orado, cont inuó su carrera acadé-
cent es. Junt os t rat aron exit osament e t umores de piel con mica en l a Universidad de Buenos Aires: se convir t ió en
los nuevos rayos9,11. Además, en ese moment o, Carelli t enía Profesor de Radiología en la Facult ad de Odont ología y Pro-
un pequeño consult orio privado, donde ponía en práct ica fesor Honorario de Radiología en la Facult ad de Medicina9.
sus conocimient os sobre fisiot erapia. A pesar de ser t oda- Sin embargo, Carelli aseguraba: «El radiólogo no recibe su
vía un est udiant e universit ario, el famoso ciruj ano Ricardo formación en la Universidad. Él t iene que est ar preparado
Finochiet t o escribió al respect o: «Aquellos años de práct ica t ant o en la práct ica como en la formación t eórica. Solo con
privada no deben considerarse como el ej ercicio ilegal de la una sólida formación médica y radiológica es posible ser un
medicina, ya que no había ot ras personas en la ciudad que radiólogo, y no solo mediant e la adquisición de una máquina
supiesen cómo ut ilizar est os import ant es recursos t erapéu- de rayos X»14.
t icos»12. Baj o est a perspect iva, se unió a un grupo de radiólogos
En 1903 la Facult ad de Medicina creó el Inst it ut o de Fi- j óvenes y en 1917 fundó la Sociedad Argent ina de Radiolo-
siot erapia en el Hospit al de Clínicas. Est a inst it ución se gía. Al comienzo ocupó el cargo de vicepresident e y luego,
convirt ió en el ent orno adecuado para llevar a cabo ciert as durant e dos períodos, fue su president e15.
invest igaciones que, si bien en un inicio fueron recibidas con Su car r er a hospi t al ar i a f ue i mpor t ant e, per o cor t a
sorpresa, t erminaron desarrollándose a un alt o nivel debido (1911-1925), ya que su t rabaj o principal lo ej ercía en su con-
a su propio éxit o. Jaime Cost a fue el direct or y Carelli, de sult orio privado. Tal es así que est e se convirt ió en uno de
nuevo, uno de sus colaboradores11. los mej or equipados de t oda América del Sur 16 (figs. 3 y 4).
Ent re 1906 y 1907 Carelli viaj ó a Europa para acompañar Nadie aplicó como lo hizo Carelli el mét odo t erapéut ico
a un ínt imo amigo gravement e enfermo que buscaba una de Bergonié17 (est o es, los ej ercicios musculares provocados
últ ima esperanza. Est ando en París, asist ió al ser vicio de eléct ricament e) (fig. 5), ni t ampoco ningún radiólogo logró

Figura 2 Tesi s «El t rat ami ent o de l a l eucemi a con rayos


Figura 1 Jaime Cost a (1860-1909). Roent gen»13.
Document downloaded from http://www.elsevier.es, day 21/12/2017. This copy is for personal use. Any transmission of this document by any media or format is strictly prohibited.

Humbert o Horacio Carelli: pionero de la radiología argent ina 51

Figura 3 Consult orio de Carelli, Sección de Elect rot erapia.

Figura 4 Consult orio de Carelli, Sección de Elect rot erapia. Figura 5 Consult orio de Carelli, Sección de Elect rot erapia,
con el equipamient o para el «mét odo de Bergonié».

curar como él epit eliomas cut áneos, bocios, hiperhidrosis, este precursor fue la protección radiológica (en 1926 escribió
lumbalgias, neurit is, adenit is, et c.9,12,18,19 (fig. 6). Además, la un informe complet o sobre el t ema).
calidad de sus radiografías era insuperable y, de hecho, todos En 1920 la import ancia del neumoperit oneo en la explo-
los casos radiológicos difíciles eran derivados a su consultorio ración radiológica del abdomen se puso en relieve. Después
porque él era capaz de obt ener t odas las incidencias nece- de las primeras obras de Kelling, Jacobaeus, Lorey, Weber,
sarias para el diagnóst ico12 (figs. 7 y 8). Sin embargo, Carelli Raut emberg, Goet ze, St ein y St ewart, Carelli fue uno de los
enviaba sus informes, pero nunca las películas14 (quedaban pr imeros en t odo el mundo en ut ilizarlo y es posible que
en sus archivos). Debido a est a act itud y a su poca afición por haya sido el único en obt ener su máximo benef icio cien-
la fluoroscopia (fig. 9), recibía crít icas de muchos colegas. De t ífio20. Por esa ápoca, en su primera publicación, «El neu-
t odos modos, ante el reproche por su poco t rabaj o fluoroscó- moperit oneo en la exploración radiológica del abdomen»,
pico, él solía responder: «Yo no me voy a vender en pedaci- describió 83 casos con 250 radiografías21 (t odas realizadas en
t os»14. Ciert ament e, una de las preocupaciones cent rales de su práct ica privada) (figs. 10-13).
Document downloaded from http://www.elsevier.es, day 21/12/2017. This copy is for personal use. Any transmission of this document by any media or format is strictly prohibited.

52 A.E. Buzzi y C. Got t a

Figura 6 Consult orio de Carelli, Sección de Radiot erapia.

Figura 7 Consult orio de Carelli, Sección de Radiodiagnóst ico.

Carelli no solo fue de los primeros en el mundo en em- sición (fig. 16). A pesar de que est a mesa no se ut ilizó mucho
plear el neumoperit oneo diagnóst ico, sino que t ambién fue (dado que el neumoper it oneo no era muy popular por su
el que sacó el mayor provecho cient ífico22. Además, hay que incomodidad e incluso por su peligro), en Argent ina fue muy
dest acar que fue el primero en combinar el neumoperit oneo út il para el est udio de la hidat idosis abdominal12 (fig. 17).
diagnóst ico con la hist erosalpingografía23 (para 1925 publicó En 1921 publicó un art ículo sobre neumopielograf ía con
un t rabaj o con Robert o Gandulfo y Albert o Ocampo). Est a int roducción de una sonda uret ral hast a la pelvis renal 24
t écnica se denominó más adelant e «ginecografía» (fig. 14). (fig. 18). Est e mét odo había sido sugerido por Burkhard y Po-
St ein y Arens hicieron lo mismo en 192620. lano en 1907 y en 1910 Albers Schonberg había report ado un
A su vez, Carelli diseñó un disposit ivo para evit ar el reflu- int ent o sin éxit o, pero el único ant ecedent e eran t res casos
j o del medio de cont rast e y fij ar el cuello ut erino (fig. 15), present ados por Licht enberg y Diet len en 191125.
y creó una mesa radiológica específica para est os procedi- Ese mismo año, Carelli anunció su cont ribución más im-
mient os que permit ía obt ener radiografías en cualquier po- port ant e a la radiología diagnóst ica: un nuevo procedimien-
Document downloaded from http://www.elsevier.es, day 21/12/2017. This copy is for personal use. Any transmission of this document by any media or format is strictly prohibited.

Humbert o Horacio Carelli: pionero de la radiología argent ina 53

Figura 10 Neumoperit oneo diagnóst ico normal. Se muest ran


los órganos abdominales delineados por aire21.

Figura 8 Consult orio de Carelli, radiología dent al.

Figura 11 Neumoperit oneo diagnóst ico de un caso de hidat i-


dosis abdominal 21.

Figura 12 Neumoperit oneo diagnóst ico most rando pat ología


renal. A la izquierda se observa un carcinoma renal y a la dere-
Figura 9 Carelli efect uando un examen àuoroscópico. cha, un quist e hidat ídico renal 21.
Document downloaded from http://www.elsevier.es, day 21/12/2017. This copy is for personal use. Any transmission of this document by any media or format is strictly prohibited.

54 A.E. Buzzi y C. Got t a

Figura 13 Neumoperit oneo diagnóst ico pelviano21.

Figura 14 Ginecograf ía. La hist erosalpingograf ía muest ra la


cavidad uterina normal completa con lipiodol, así como la trompa
de Falopio derecha. El t ubo de la izquierda se alarga, mient ras
el neumoperit oneo muest ra el cont orno del út ero ligerament e
agrandado y una masa redonda en el ovario izquierdo23.

Figura 15 Pinzas Carelli. Figura 16 Mesa Carelli.


Document downloaded from http://www.elsevier.es, day 21/12/2017. This copy is for personal use. Any transmission of this document by any media or format is strictly prohibited.

Humbert o Horacio Carelli: pionero de la radiología argent ina 55

t o para el est udio de los riñones26. En cont ra de su propia


opinión, el neumoret roperit oneo diagnóst ico fue llamado
«neumo-riñón». Est e fue el mét odo radiológico de elección
para la exploración de los riñones y el ret roperit oneo duran-
t e más de 40 años (fig. 19).
Si bien el urólogo alemán Paul Rosenst ein, de forma inde-
pendient e y simult ánea, publicó t ambién en 1921 un art ículo
en el que describía un procedimient o similar de ret roneu-
moperit oneo27, las t écnicas diferían en algunos punt os: Ro-
senst ein ut ilizaba oxígeno, mient ras que Carelli empleaba
dióxido de carbono, inyect ando la mit ad del volumen ut i-
lizado por el urólogo. Él había observado que el dióxido de
carbono se absorbía más rápido que el oxígeno y, por ello,
se generaban menos molest ias en los pacient es. Además, el
oxígeno que usaba Rosenst ein provocaba muert es por em-
bolia gaseosa. En lo que respect a al abordaj e del espacio
perirrenal, est e t ambién era diferent e25.
Carelli dio una ser ie de conferencias y demost raciones
práct icas en universidades, sociedades cient íf icas y con-
gresos, t ant o en la Argent ina como en el ext ranj ero. Ent re
1921 y 1922 viaj ó a Est ados Unidos, Francia, Alemania y el
Reino Unido, donde su mét odo y su mesa fueron elogiados
por los cient íficos de más alt o nivel.
Parece que 1921 fue un año muy impor t ant e en la vida
de Carel li, ya que, además del per f ecci onami ent o del
neumoperit oneo, el desarrollo de la neumopielografía y la
int roducción de ret roneumoperit oneo, se casó. Su esposa,
Figura 17 Humbert o Carelli usando su mesa. Violet a Warwick Skelt on, era una j oven art ist a de la comuni-
dad brit ánica en Buenos Aires. En una de sus pint uras mues-
t ra la obra de su marido (fig. 20).
La opera magna de Carelli en el servicio público fue el dise-
ño y la creación del Inst itut o Municipal de Radiología y Fisio-
terapia (hoy, Hospit al Municipal de Oncología «Maria Curie»).
El proyect o comenzó en la sesión del Concej o Deliberant e
del 19 de diciembre de 1924, cuando los concej ales Carlos

Figura 18 Neumopielograf ía. Un caso con dos cálculos en la


pelvis renal 25.

Figura 20 Cuadro de Violet a Warwick Skelt on de Carelli sobre


Figura 19 Neumoret roperit oneo diagnóst ico. A la izquierda se la obra de su esposo. (La pint ura se encuent ra en el aula de la
observa un est udio normal y a la derecha, un quist e renal 26. Sociedad Argent ina de Radiología.)
Document downloaded from http://www.elsevier.es, day 21/12/2017. This copy is for personal use. Any transmission of this document by any media or format is strictly prohibited.

56 A.E. Buzzi y C. Got t a

Figura 22 Planos de Inst it ut o Municipal de Radiología y


Figura 21 Humbert o H. Carelli. Fisiot erapia.

Figura 23 Const rucción del Inst it ut o (1926).

Figura 24 El Inst it ut o en 1931.


Document downloaded from http://www.elsevier.es, day 21/12/2017. This copy is for personal use. Any transmission of this document by any media or format is strictly prohibited.

Humbert o Horacio Carelli: pionero de la radiología argent ina 57

Manacorda y Ángel Giménez present aron un proyect o de or- Dresde, Erlanger, Rudol st adt , Viena, Par ís y Londres12, y
denanza en el que se estudiaba la creación de un Inst itut o de compró gran part e del equipamient o12 (fue un caso único, ya
Radiología y Fisioterapia dot ado de los element os cient íficos que no solo adquirió más de lo planeado, sino que devolvió
y t écnicos más modernos. Para ello, se organizó una comi- part e del dinero que no fue necesario invert ir).
sión const it uida por los Dres. Humbert o Carelli, Alfredo La- La confección de los planos del Inst it ut o est uvo a cargo
nari, Ant onio Denucci y Oct avio Fernández, y presidida por el del arquit ect o Ernest o Vaut ier y la const rucción fue comple-
Direct or de la Administ ración Sanit aria y Asist encia Pública, t ada por el arquit ect o Emilio O’ Seeger. Algunas de sus salas
Dr. Abel Zubizarret a. La creación del inst it ut o fue aprobada son copias del Inst it ut o Finsen de Copenhague (fig. 22).
por el Concej o Deliberant e el 25 de noviembre de 192528. La const rucción comenzó en 1926 (fig. 23) y se inauguró
Carelli (f ig. 21) fue el encargado de viaj ar a Europa, en en 19318 (fig. 24). En su moment o, la inst it ución se convirt ió
represent ación del Gobierno de l a Ciudad de Buenos Ai- en el est ablecimient o fisiot erapéut ico más import ant e del
res, para seleccionar el inst rument al y los aparat os para el mundo. Carelli fue su direct or desde la apert ura hast a 1938,
Inst it ut o. En ese t iempo, visit ó muchas fábricas y ser vicios cuando present ó su renuncia (figs. 25 y 26). En 1955, el Go-
radiológicos de Est ocolmo, Copenhague, Berlín, Hamburgo, bierno Nacional aut orizó a ponerle al Inst it ut o el nombre de
Carelli, pero unos meses más t arde el Gobierno de la Ciudad
decidió crear en ese edificio el Inst it ut o Municipal de Onco-
logía. Carelli se opuso al cambio, t ant o del nombre como de
las funciones, ya que de est a forma se anulaban los propósi-
t os originales (de hecho, la oncología se incluía ent re ellos).
Al f inal de su carrera fue muy famoso y recibió muchos
honores (figs. 27 y 28). Sin embargo, como radiólogo se le
reprochó su t rabaj o aislado, sin una conexión regular con un
hospit al. Al respect o, el famoso ciruj ano argent ino Ricardo
Finochiet t o defendió la act it ud de Carelli argument ando que
cualquier ot ra opción habría sido cont raproducent e. Según
su punt o de vist a, un médico dedicado solament e al ámbi-
t o privado era necesario, ya que los pacient es part iculares
t ambién t enían derecho a ser t rat ados con dedicación ex-
clusiva12.
Carelli murió el 30 de enero de 1962, víct ima de un epi-
t elioma cut áneo8,12. De acuerdo a su volunt ad, sus rest os
fueron cremados. Durant e un homenaj e, su amigo Alej an-
dro Ceballos lo descr ibió con est as pal abras: «De j oven
era ágil y fuer t e. Como hombre se acent uaron sus carac-
t er íst icas f ísicas. Tenía el t ipo del sur de Europa, de es-
t at ura regul ar, erect o, bronceado, con una frent e alt a y
Figura 25 Carelli en su despacho de Direct or del Inst it ut o ancha, acent uada por una calvicie premat ura (fig. 29)…Su
(Diario «La Prensa», 21 de enero de 1932). ligero exof t almos daba f uer za a su mirada, sin eliminar

Figura 26 Carelli con el personal del Inst it ut o (1934).


Document downloaded from http://www.elsevier.es, day 21/12/2017. This copy is for personal use. Any transmission of this document by any media or format is strictly prohibited.

58 A.E. Buzzi y C. Got t a

su dul zura. Tenía una vehemencia en el discurso (f ig. 30) médicas. La fundación de la Sociedad Argent ina de Radio-
que le confería poder de convicción. Era firme y decidido, logía, el ref inamient o del neumoper it oneo, el desarrollo
pero modest o. Poseía el cult o a la amist ad, a pesar de una de la neumopielograf ía, la int roducción del ret roneumo-
cier t a t imidez que podr ía most rarlo lej ano» (Ceballos A. per it oneo, la combinación de neumoper it oneo e hist ero-
Discurso de homenaj e a Humber t o Carelli, enero 1962). salpingografía («ginecografía»), la concepción del Inst it ut o
Fue un hombre dot ado de una int eligencia singul ar y un de Radiología y Fisiot erapia, y el diseño de inst rument os
escr it or prolíf ico de est ilo claro y conciso. Su dedicación y l as mesas r adi ol ógicas especial es (t odo en menos de
a la labor profesional, a las mej oras t écnicas, al est udio e 10 años) lo convir t ieron en un pionero de l a radiología.
invest igación lo puso en la primera línea de las j erarquías Además, ha sido el primero en ut ilizar con éxit o t odos los

Figura 27 Carelli recibe su diploma de Miembro Fundador de Figura 29 Humbert o H. Carelli.


la Sociedad Argent ina de Radiología, de manos del ent onces
president e Guido Got t a (1951).

Figura 28 Carelli rodeado de amigos, colegas y pacient es Figura 30 Humbert o H. Carelli.


durant e un homenaj e.
Document downloaded from http://www.elsevier.es, day 21/12/2017. This copy is for personal use. Any transmission of this document by any media or format is strictly prohibited.

Humbert o Horacio Carelli: pionero de la radiología argent ina 59

recursos f isiot erapéut icos de su época y en obt ener radio- 12. Fi nochi et t o R. Pr of. Dr. Humber t o Carel li (1882-1962).
grafías de buena calidad en Buenos Aires. Orient ación Médica. 1962;499:128-9.
Con Carelli y algunos más, nació la Radiología en la Re- 13. Carelli HH. Sobre el t rat amient o de las leucemias por los rayos
Roent gen. Buenos Aires: La Ciencia Médica; 1911.
pública Argent ina. Sin embargo, como explica la not a ne-
14. Carelli HH. Posición de la radiología en la medicina general.
crológica en el diario, fue una «persona modest a, recat ada
Buenos Aires: Const ancia Vigil; 1938.
y silenciosa». Una prueba de ello es la cláusula de su t es- 15. Lugo SA. Breve hist oria y desarrollo de la Sociedad Argent ina
t ament o en la que disponía no informar sobre su muer t e de Radiología. Rev Arg Radiol. 1995;59:229-32.
hast a que hubiesen pasado ocho días. Guido Got t a, Jefe de 16. Kraft G. Una visit a al Inst it ut o Carelli. Revist a Elect rot écnica.
Radiodiagnóst ico del Inst it ut o que él fundó, aseguró: «Murió 1941;27:3-8.
como le gust aba vivir: en silencio». 17. Carelli H. El ej ercicio muscular eléct r icament e provocado.
Ergot erapia pasiva o mét odo de Bergonié. La Semana Médica.
1941;33:5-24.
18. Carelli HH. La radiot erapia en el cáncer. Bolet ín del Inst it ut o
Bibliografía de Medicina Experiment al. 1934;37:938-52.
19. Car el l i HH, Pavl ovsky A. Tr at ami ent o de l as adeni t i s
1. Got t a C, Buzzi AE, Suárez MV. Cont r ibuciones argent inas t uberculosas super Þciales por la roent gent erapia. Anales del
originales a la Radiología. Rev Arg Radiol. 2009;73:37-44. Inst it ut o Municipal de Radiología y Fisiot erapia; 1935;2:165-223.
2. Agüero AL, Kohn Loncar ica AG, Sánchez NI, Tr uj illo JM. 20. Gould DM. Pioneer descript ions in obst et rical and gynecological
Cont r ibuciones or iginales de l a medicina argent ina a l a roent genology. En: Brewer AJ. Classic descript ions in diagnost ic
medi ci na uni ver sal. Revist a de Hi st or ia & Humanidades roent genology. SpringÞeld: Charles C. Thomas. p. 345-413.
Médicas. 2007;3:1-48. 21. Carelli HH. El neumoperit oneo en la exploración radiológica
3. Diccionar io de l a Real Academia Español a. Disponible en: del abdomen. Anales de la Facult ad de Medicina. 1921.
ht t p:/ / www.rae.es [consult ado 1 Sep 2013]. 22. Carelli HH. Pneumoperit oneum. AJR Am J Roent genol. 1923;
4. Or igen de las palabras. Disponible en: ht t p:/ / et imologias. 10:259-79.
dechile.net [consult ado 1 Sep 2013]. 23. Carelli HH, Gandulfo R, Ocampo A. La exploración radiológica
5. The Free Dict ionary. Disponible en: ht t p:/ / es.t hefreedict ionary. en ginecología. La Semana Médica. 1925.
com [consult ado 1 Sep 2013]. 24. Carelli HH, Finochiet t o R. Neumorradiograf ías de las vías
6. Word Reference. Disponible en: ht t p:/ / www.wordreference. urinarias superiores. Rev Asoc Med Argent . 1921;200.
com [consult ado 1 Sep 2013]. 25. Tondreau RL. Roent genology of t he urinar y t ract . En: Brewer
7. Turnbull HW, Scot t JF, Hall AR, Tilling L, edit ores. The corres- AJ. Classic descript ions in diagnost ic roent genology. Tomo II.
pondence of Isaac Newt on. Cambridge: Cambridge Universit y SpringÞeld: Charles C. Thomas. p. 1605-728.
Press; 1977. 26. Carelli HH, Sordelli E. Un nuevo procedimient o para explorar el
8. Lugo SA. Humbert o Horacio Carelli. Sínt esis. 4:31. riñón. Rev Asoc Med Argent . 1921;34:424-5.
9. Carel li HH. Ant ecedent es uni ver sit ar i os. Buenos Ai res: 27. Rosenst ein P. Pneumoradiology of kidney posit ion. A new
Denuble; 1929. t echnique for t he radiological represent at ion of t he kidneys
10. Got t a HC, Buzzi AE. Pelele, Cost a y Wimshurst . Rev Argent and neighboring organs (adrenals, spleen, liver). Z Urol. 1921;
Radiol. 2007;71:253-9. 15:447-58.
11. Buzzi A. Hist oria del ant iguo Hospit al de Clínicas a t ravés de 28. Carelli HH. Ant ecedent es del Inst it ut o Municipal de Radiología
sus Cát edras. Buenos Aires: Ediciones Médicas del Sur; 2010. y Fisiot erapia. Buenos Aires: Ed. La GráÞca; 1931.

También podría gustarte