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No es necesario desesperarse por ciertos comportamientos que perduran en caso de los niños.

Son simplemente la señal de la amplitud de sus heridas invisibles.

¿Qué pasa si digo algo equivocado?


Muchos padres adoptivos se ponen nerviosos al hablar con sus hijos de la adopción por la
posibilidad de decir algo equivocado o quedarse sin respuestas. Así, es posible que se
sientan agobiados, incómodos siempre que alguien del entorno habla sobre la adopción

Según los especialistas, los padres adoptivos se preocupan tanto porque creen que
deberían ser padres perfectos, a pesar de que la perfección no existe. Sin embargo, para
convertirse en madre y padre adoptivo se ha pasado por una elaboración de un informe
psicosocial, una visita domiciliaria, un informe de idoneidad, etcétera, todo lo cual no debe
ser superado por unos padres biológicos. Por otra parte, lo han hecho porque deseaban tener
un hijo intensamente y, posiblemente, uno de ellos, no podía de forma natural y, muy
posiblemente, han tenido que esperar durante años. Todo ello hace que ahora que
experimenten un sentimiento de tener que devolver “el mayor regalo de sus vidas” en forma
de ser “padres perfectos”.
Todo lo anterior les lleva a convertirse en “superpadres” para volver a demostrar, una vez
más, que merecían ser padres. Aún así, deberíais comprender que el perfeccionismo es
agobiante y contraproducente y, por tanto, hay que aceptar que todos – incluidos vosotros,
padres adoptivos- somos seres imperfectos, afortunadamente, y no agobiarse ni agobiar a
vuestro hijo. Si asumimos que somos imperfectos lucharemos por conseguir llegar a
expectativas cada vez mayores; de lo contrario, nos anquilosamos en esperanzas poco

Ningún padre es perfecto pero si lo haces lo mejor que puedes serás “lo bastante bueno”.
Esto también se aplica al hablar con tu hijo de la adopción. Nadie tiene todas las
respuestas y tampoco hay respuestas perfectas. Algunas de las preguntas de tu hijo
pueden tocar tus fibras más sensibles y hacerte sentir inseguro. Esta reacción es normal y es
mejor que la sepas anticipar. Recuerda que, si crees que has cometido algún error al
explicar la adopción a tu hijo, en casi todos los casos se puede corregir.
De cualquier manera, sí que hay cosas que deberíais evitar decirle como: “tu madre
biológica no te quería y te abandonó” o “era drogadicta”. Aunque sean ciertas, es mejor
hacer comentarios sobre las circunstancias en que vivían sus padres biológicos (eran
adolescentes, no tenían dinero,…) sin hacer ningún juicio de valor ni de moralidad.

Procurad no decir de sus padres biológicos que son sus “padres verdaderos o padres
naturales” ya que, desde el momento, que lo adoptasteis vosotros sois sus padres verdaderos
y naturales, legal y emocionalmente. Los términos padres biológicos, son precisos y no le
restan importancia a su condición.

Cómo explicar la adopción al hijo. Casos según edades


diferentes
 Bebés. Hay una fuerte discrepancia entre los especialistas acerca de si debe usarse la
palabra “adopción” o “adoptado”. Algunos de estos expertos opinan que decir “eres mi
precioso niño adoptado” al ritmo en que se mece la cuna es positivo, porque ayuda a
verbalizar a los padres la adopción de forma cálida y positiva.
 Niños en edad preescolar. Los especialistas creen que los preescolares no fijan el
concepto de adopción aunque les sea explicado desde un punto de vista muy simplista.
Se puede producir, entonces, el error de que, muchos padres, crean que sus hijos no
van a necesitar más explicaciones.
 Niños en edad primaria. Conocen los hechos básicos de la vida y pueden hacer
preguntas al ver a una mujer embarazada como, por ejemplo, si él creció en la barriga
de mamá y hay padres que optan por contarle la verdad y otros que evitan la respuesta
con una mentira lo cual, más tarde, posiblemente puede acarrearle consecuencias. En
cualquier caso, lo peor que se puede hacer es ignorar la pregunta ya que los niños
pequeños tienen mucha imaginación y pueden inventarse una explicación mucho más
extravagante que la realidad. No hay que cargarle con las razones por las que los
padres biológicos escogieron la adopción ni con el angustioso camino de los padres
adoptivos hacia la adopción del niño.
 Preadolescencia. Entre los 8 y 11 años, la mayoría de niños adoptados empezarán a
preguntar cosas como: ¿Quién organizó la adopción? ¿Cómo se organizó? ¿Dónde está
tiene mi partida de nacimiento? Es buena idea mostrarles sus partidas de nacimiento y
compartir con ellos mucha de la información que se tiene dependiendo de cada caso.
En esta edad son muy críticos y ven las cosas en términos de bueno y malo – sin
términos medios–. Sin embargo, pueden empezar a entender que algunas veces los
niños necesitan ser adoptados y que la adopción es una buena manera de formar
familias. Es una buena idea sacar el tema de la adopción periódicamente, en
momentos adecuados.
 Adolescentes. A causa de su creciente sexualidad, las preguntas sobre su identidad y
los intentos de separación-individuación y convertirse en adultos, lo más probable es
que los adolescentes hagan preguntas sobre la adopción. Pueden empezar a entender
algunas de las razones por las que los padres biológicos, a veces, no son capaces de
cuidar a un niño, tales como ser demasiado joven, la falta de aceptación de la
familia, o problemas financieros. Tu hijo adolescente puede estar preparado para oír
toda o casi toda la información sobre sus padres biológicos y sus razones para escoger
la adopción. No obstante, muchos adolescentes tienen un ego muy frágil y podría ser
mejor revelar alguna información negativa cuando sea más maduro –por ejemplo, si el
niño fue el resultado de una violación o que los padres biológicos tenían grandes
problemas con él.
¿Por qué no debes engañar a tus hijos adoptivos?
Investigaciones pasadas animaban a los padres a hacer creer a sus hijos adoptados que eran
hijos biológicos. Afortunadamente, investigaciones más recientes han demostrado que esta
conclusión no es válida e incluso es dañina. Estos son algunos de los motivos más
importantes por los que no deberíais engañar a vuestros hijos adoptivos:

 Sería una injusticia para vuestro hijo.


 Supondría un engaño para él y para vosotros mismos.
 Vuestro hijo se acabará enterando por su entorno y se sentirá desconcertado; ello puede
conllevar que deje de confiar en su familia. Vuestro hijo se va a enterar que
es adoptado. Es lo primero que debéis aceptar los padres adoptivos y es mucho más
sano y justo que esa información la reciba por parte de sus padres.
Consejos para decirle a tu hijo que es adoptado
1. Empieza cuanto antes
A los 3 años es un buen momento para ir empezando a hablar con el niño sobre ello ya que
es una edad en la que empiezan a fijarse en las mujeres embarazadas y a hacerse preguntas
como, por ejemplo, si él salió de la barriga de mamá.

2. La adopción no es un tabú
En la edad pre-escolar, los niños no van a comprender el concepto de adopción, pero sí es
una buena oportunidad para trasmitir el mensaje de una manera cálida y con
cariño. Y hablad de la adopción con naturalidad, normalizando la situación.

3. No dar largas y detalladas respuestas


Contestar de una manera comprensible a sus preguntas sin necesidad de añadir detalles.
Siempre hay que adaptar las respuestas al vocabulario de la edad del niño. En la edad pre-
escolar los niños piensan en términos sencillos y concretos.

4- Explícalo cómo si fuera un cuento


Los cuentos son instrumentos muy válidos para transmitir valores e ideas a nuestros hijos y,
además, a través de ellos se facilita la comprensión de una idea compleja, lo que hace que el
niño entienda la historia y se queda con los detalles.

5. Una conversación que se debe repetir tantas veces como sea necesario
Estar dispuestos a repetir esa conversación todas las veces que haga falta ya que el
procesamiento cognitivo de nuestro hijo va madurando y por tanto, va haciéndose cada vez
preguntas más complejas según avanza su edad.

6. Decírselo antes que se lo digan


Si retrasamos el momento de explicárselo, puede suceder que el niño adoptado ya
haya recibido la noticia por parte de otros, corriendo el riesgo de que no lo hayan
comunicado de una forma positiva y que el niño se sienta engañado y desconcertado y se
pregunte en qué más cosas le habrán engañado sus padres.
7. Estábamos muy ilusionados preparando tu llegada
Una manera adecuada de contárselo a nuestros hijos adoptivos puede ser: “cariño, tú estabas
en la barriga de otra señora, mientras, mamá y papá estaban deseando que nacieras y
estábamos muy ilusionados preparando tu llegada a casa. Cuando naciste fuimos los padres
más felices del mundo. Y desde que llegaste somos una familia con mucho más amor”.

8. Eres el niño más amado del mundo


Hay que transmitir la idea de que era un niño muy deseado. Pensar en las primeras
emociones que sentisteis al saber de vuestro hijo, la primera vez que le visteis… de una
manera positiva y con mucho amor.

Si eres padres y te encuentras en una situación similar o tienes algún familiar que tiene
dudas y le gustaría hablar con un psicólogo, consulta gratis con un psicólogo online en
Siquia o habla directamente con la psicóloga Dolors Mas.

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