Mi trabajo siempre ha girado en torno al cuerpo humano, a su representación figurativa en el
medio pictórico, por ende, el retrato. Así, mi obra incurre en las representaciones de cuerpo completo y de algunas partes específicas. El retrato se vuelve una representación del individuo, al mismo tiempo que es autorretrato ya que implica un depósito de elementos sensibles o simbólicos por mí parte. El propósito de mi trabajo es denotativo, y parte del cuestionamiento: ¿Cuál es el estado actual del retrato en el mundo contemporáneo del arte? A partir de ahí, mi entendimiento de los distintos modos de representación del individuo surgen de la comprensión histórica del retrato, como este género se encuentra en mantenencia a pesar de sufrir cambios drásticos a partir de las nuevas formas de representación y de reconocimiento, es así que la imagen propia de uno toma distintas acepciones en tiempos actuales, por lo que mi obra se da a partir de las nociones de identidad múltiple, auto identidad, del yo, del otro, y de la alteridad.
Es necesario percatarse de la existencia de este acontecimiento actual donde la multiplicidad
del individuo se vuelve intencional, donde el yo se proyecta con duda de manera racional. Durante mi formación artística me he mantenido afín al figurativismo, siempre he tenido un interés por desarrollar la técnica de los grandes maestros de la pintura tradicional, aunque me he incursionado en etapas de experimentación donde he aprovechado las distintas cualidades de la pintura para experimentar con el espacio representado en el cuadro.
En la obra titulada “Aire”, la idea del yo disoluido se da a partir de un reconocimiento del
individuo en las cualidades del aire, desprendiéndose de todo, aligerando su existencia, en este cuadro la representación del parecido (función mimética) del sujeto queda constituida por las características que lo identifican (el cuerpo y sus rasgos fisonómicos) y la representación de su esencia por su dialogo e integración con las cualidades del aire. Aludiendo al desapego del yo y a la necesidad de visualizarse desde el otro, en este caso una identidad basada en una libertad que remite a un elemento natural.