Nombre: Esteban Saúl Vilema Lazo

Profesora: María Esther Granda Kuffó

Fecha: 20 de diciembre del 2017
Paralelo: 5

La otra cara de la explosión

A través de los años, la actividad minera no ha cesado sus actividades alrededor del mundo,
e incluso se han intensificado en lugares y países en los que se tenían áreas protegidas de
estas actividades, como ha sucedido en Ecuador, en donde se ha dado cabida a la minería a
cielo abierto, que constituye una de las nuevas técnicas que aparentemente son más eficientes
y que sin embargo vienen causando un fuerte daño social y ambiental que, de ninguna
manera, compensa los supuestos beneficios económicos de los que tanto nos han dicho.
Si bien es cierto, las actividades mineras han existido alrededor del mundo desde los
principios de la humanidad, aportándonos nuevas materias primas y dando paso al
surgimiento de industrias que trabajen los metales y minerales, verbigracia, la mina de
Sudáfrica es la más grande del mundo respecto a la extracción de diamantes; sin embargo,
no podemos negar el terrible daño que han provocado a los ecosistemas. Tal como nos dice
Paulina Ledergerber-Crespo (2008): “Por experiencia en otros países puedo asegurarle que
al deforestar y cavar gigantes cráteres se producen horribles ruidos que espantan a los
animales que pierden su territorio y mueren, los gases químicos se dispersan por la atmósfera
a varias regiones, tierra y agua, con destrucción irreversible. La minería a cielo abierto supone
una mayor facilidad para extraer los materiales, gracias al uso de grandes maquinarias, que,
sin embargo, deterioran casi en su totalidad el ambiente en el que se trabaja.” Así también
debemos tener en cuenta los beneficios que han tenido en otro países que son de primer
mundo, a diferencia de Ecuador en donde no se debería intensificar esta actividad, En el 2007
la producción de cobre en Arizona, en su mayoría al cielo abierto, alcanzó el 60% de la
producción total de los Estados Unidos, 750 mil toneladas métricas con un valor de 5.54
billones de dólares generando 10.300 empleos, más el oro, la plata y el molibdeno que se
encuentran en ciertas minas de cobre.
Otro de los grandes problemas, puntualizando, es la falta de conciencia de los obreros sobre
su entorno, hemos visto cómo las comunidades son altamente afectadas, no solo con la
pérdida de recursos sino con su soberanía, como se indica en un artículo del Diario "EL
COMERCIO" (2012): "La minería a gran escala se ha convertido en una creciente causa de
conflictos sociales y ambientales”. Pero los obreros también están altamente expuestos a
enfermedades y accidentes mortales, y soportan todo esto, algunas veces sin exigir las
respectivas seguridades, por la promesa de un pago, que no es una justa compensación a todo
lo que se exponen en el proceso, además de afectar a la economía de las comunidades
aledañas. Hay, a la par, un alto costo humano por el aumento de enfermedades, como cáncer
y males del sistema nervioso y respiratorio por residuos minerales. (Paulina Ledergerber-
Crespo, 2008)
En conclusión, no podemos negar que las actividades mineras han significado un aporte
económico, y en algunas ocasiones han servido para estabilizar la economía de un país, si se
encontraba una gran fuente de materiales, sin embargo, se podría considerar que ya se ha
explotado suficiente, y que las nuevas técnicas no sirven sino para optimizar la extracción,
pero no se ha pensado en optimizar la reducción del daño o incluso la regeneración del
terreno, por lo que es prioritario tomar conciencia de los daños y el increíble impacto que
genera esta actividad para con la sociedad en general.

Referencias Bibliográficas

Paulina Ledergerber-Crespo. (2008). LA MINERIA A CIELO ABIERTO ES SUICIDA

PARA EL ECUADOR. 2017, de OCMAL Sitio web: https://www.ocmal.org/4229/
ARTURO CEBALLOS DELGADO. (2017). A CIELO ABIERTO . 2017, de El diario Sitio
web: http://www.eldiario.ec/noticias-manabi-ecuador/229717-a-cielo-abierto/