Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
22. Que del 20% más rico de la población casi el 70% tiene deudas,
frente al 20% más pobre, de los que solo un 16,7% tienen deudas.
Que las deudas no tiene la misma finalidad, pues, unas han sido para
especular con bienes inmobiliarios – personas con 6 o 20 propiedades
inmobiliarias – y financieros y, otras, para adquirir un ‘techo’ y bienes
básicos.
29. Los distintos Gobiernos alemanes han ido reduciendo los niveles
de vida de sus ciudadanos y precarizando las condiciones laborales –
mini-empleos a 400 euros, temporalidad, salarios que tienen que ser
completados por ayudas sociales – provocando una fractura social y
un fracaso político, que con subsidios sociales a parados de larga
duración intenta maquillar un paro real que llegaría al 15%.
44. Por tanto ¿no existe la dación en pago? Nuevamente, nada más
lejos de la realidad. Las promotoras e inmobiliarias son invitadas por
los bancos a entregar sus pisos y promociones con la consecuente
extinción de la deuda, que será resarcida a los bancos con dinero
público. Los beneficios económicos generados por esta como mínimo
desastrosa gestión inmobiliaria – por no decir fraudulenta – no serán
reclamados.
45. “No hay dinero” Otra machacona y repetitiva máxima de los
responsables del fiasco financiero ¿Es eso cierto? Nada más lejos de
la realidad. Hemos visto que el dinero negado a los Estados y a las
personas es entregado por billones – sin reparos y sin control – a los
bancos. Que los bancos, las grandes fortunas y empresas – altamente
subvencionadas con dinero público – han desviado 21 billones de
dólares a los Paraísos Fiscales.
51. Esta reducción de ingresos del Estado tiene como objetivo que las
mismas personas beneficiadas por reducciones de impuestos, cuando
no, directamente, por favorecer el fraude fiscal, sean quienes, luego,
financien al Estado mediante la compra de deuda pública por la que
reciben onerosos intereses. No sólo no pagan impuestos, sino que
reciben intereses…
53. La verdad es que nos han hecho creer que éramos ricos, han
fomentado el endeudamiento para compensar que nos
empobrecíamos rápidamente y teníamos que pedir prestamos para
acceder a bienes básicos – es cierto, que algunos, a no tan básicos –.
Empero, necesarios para el funcionamiento de esta ‘economía
suicida’.
55. Del mismo modo, hay que resaltar que a menores salarios, la
población será más pobre, el país obtendrá menores ingresos, siendo
a su vez más pobre y los beneficios repercutirán, únicamente, en una
minoría.
56. Por ejemplo, de los jóvenes más del 50% se encuentra en paro y
3/4 partes de los que están trabajando lo hacen por menos del
Salario Mínimo ¿Qué familia o persona puede vivir con estos
recursos? Las personas que están de acuerdo con estos salarios de
miseria deberían trabajar por ellos dando ejemplo y no moralina.
70. Si hace más de 100 años se consiguió en los países más ricos
mediante arduas luchas obreras un paso hacia la implantación de la
jornada laboral de 8 horas – aunque los empresarios capitalistas
hubieran deseado continuar con jornadas de 14 y 16 horas – ¿Cómo
podemos seguir trabajando las mismas horas o tender a trabajar más
con las ganancias en productividad que se han producido?
76. Por ejemplo, por cada empleo precario creado en una gran
superficie se destruyen 5 empleos estables en el pequeño comercio.
Además, el monopolio favorece los abusos de poder por parte de las
grandes empresas como que del agricultor al consumidor los precios
de los productos se eleven un 400%, pudiendo llegar, incluso, al
1.000%; o que más del 60% del beneficio del precio del productos se
lo queden las grandes superficies.
79. Aun tomando los eslóganes neoliberales como ‘El excesivo gasto
público y social lastra la competitividad y el crecimiento’, el caso de
los países del norte de Europa es paradigmático. Por ejemplo, Suecia
tiene un gasto público cercano al 53%, Dinamarca al 58% o Francia
57%. En cambio, España no llega al 44%.
93. Otro argumento que cae por su propio peso es el excesivo gasto
en pensiones que en España se encuentra en el 7,9% del PIB,
mientras en la media de la UE-15 alcanza el 9,5%. Esto se debe a la
baja cuantía de las pensiones españolas que mantienen en la pobreza
a un 25% de los ancianos españoles. Más del doble de la media
europea. La importancia de las pensiones es vital, sin ellas un 68%
de nuestros ancianos sería pobre