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Práctica Para la Sanación Mental

& El Deshacimiento del Ego


por Nick Arandes
(Basado en las enseñanzas de Un Curso de Milagros)

Me gustaría compartir lógicamente como ésta simple práctica opera de forma que la
mente la puede asimilar antes de poder aplicarla y experimentar su beneficio. Por lo tanto
hay que primero reconocer como el sistema de pensamientos del ego funciona, de forma
que podamos entonces emplear el sistema de pensamientos del Espíritu Santo para
erradicarlo y restaurar la mente a su estado natural, el cual es paz, serenidad, tranquilidad,
y quietud.

Empecemos:

1) Dentro de la única Mente que hay, la cual se está observando a si misma, se proyecta
una idea descabellada que se cree estar sola y separada, la cual le llamamos el ego.

2) Esa idea descabellada proyecta una imagen, la cual es el cuerpo físico, el “yo” que cree
que está escribiendo esta nota. ;o)
Es por eso que no tenemos libre albedrío, pues la causa (ego) que nos proyecto, nos
proyecta con un guión ya escrito. Ese guión es nuestra vida tal y como se esta
desenvolviendo.

3) A través de ese “yo”, cuerpo y sus sentidos físicos, se ven o perciben imágenes (el
mundo que aparenta estar afuera de nosotros).
Ahora “yo” creo que estoy viendo un mundo aparte de mi. Solo que el mundo
que veo, al igual que el “yo” que creo que soy, somos parte de la misma ilusión,
solo que a niveles diferentes. “Tus pensamientos están en tu mente, tal como tú
estás en la Mente que te concibió.” T-30.III.6:7

4) El cerebro que creemos que esta dentro del cuerpo, también conocido como nuestro
intelecto le da un significado a esa imagen o experiencia que creemos estar observando.
5) Ese significando genera un sentimiento o emoción que sentimos en el cuerpo.
6) Ese sentimiento que sentimos en el cuerpo solo justifica dos cosas, uno; la creencia de
que somos un cuerpo ya que lo que sentimos da testigo es esa creencia, y dos; que la
imagen o experiencia que estamos viendo o experimentando es real, y por lo tanto lo que
sentimos tiene que estar directamente relacionado con la imagen o experiencia que
estamos viendo o experimentando.

Esa es la historia que la mente errónea se hace a si misma para poder justificar lo que el
cuerpo esta experimentando. Esa “justificación” es lo que el ego interpreta como soy
víctima del mundo que veo, pues no está reconociendo que todo lo que ve esta sucediendo
en la mente y no afuera.

Si embargo, mientras estamos teniendo la experiencia de estar en este mundo, ¿que es lo


que de verdad queremos experimentar? Sentirnos feliz, llenos de paz y regocijo.

Dado ese el caso, la lógica nos diría que para experimentar eso tendríamos que cambiar el
significado que le damos en nuestras imágenes en nuestra mente, (paso #4) de forma que
podamos cambiar la emoción que sentimos, y podamos experimentar paz y felicidad.
Solo que hay un pequeño problema, y es que lo primero que sucedió, que aunque nunca
sucedió, pero ese aparenta ser el caso, no fue la imagen que proyectamos, sino que la
causa que nos proyecto a nosotros, la culpabilidad interna que dio lugar a la imagen que
se le conoce como el “yo”.

Ese “yo” que creo ser, observa imágenes las cuales fueron proyectadas con el propósito
de generar el miedo que se experimenta en el cuerpo como emociones dolorosas o
placenteras, de nuevo con el propósito de hacernos creer que de verdad existimos.

Sin embargo dada la naturaleza de este mundo dual, toda emoción, independientemente
de lo que hagamos, va a continuar fluctuando entre el placer y el dolor, ya que nuestras
imágenes van a cambiar, no necesariamente porque nosotros mismos queramos
cambiarlas, sino que por que el proyector que nos proyecto a nosotros tiene una agenda
descabellada, y es que suframos hasta que experimentemos la muerte física.

Pero hay otra forma de vivir en este mundo, donde nuestras imágenes, ni el cuerpo físico
tendría el poder de cambiar nuestro estado mental de paz y felicidad. Pero para eso,
tenemos que identificarnos con el Maestro que puede hacer esa transformación mental
por nosotros. Y ese es el propósito de esta practica, una practica que se puede efectuar
con los ojos abiertos, cerrados, incluso en medio de una experiencia que aparente ser
dificultosa.

Pues ¿como la ponemos en práctica para sanar la mente? Primero que nada cuando a
nuestra mente llegue un pensamiento, ya sea por alguna experiencia que tuvimos, o algo
que vimos o alguna interacción con alguien que nos cause algún tipo incomodidad
emocional, es ahí donde empezamos a emplear esta practica empezando por decir
GRACIAS! Es mas bien una actitud de agradecimiento.

¿Por qué? Debido a que lo que se nos está dando es otra oportunidad para sanar, de lo
contrario continuaremos repitiendo esa experiencia una y otra vez, dado que no es la
primera vez que nos encontramos experimentando esa proyección. La experimentamos
quizás muchas veces en esta vida ilusoria, o en otras, pasadas, al igual que futuras, si no
sanamos esa causa.

“Las pruebas por las que pasas no son más que lecciones que aún no has emprendido
que vuelven a presentarse de nuevo a fin de que donde antes hiciste una elección
errónea, puedas ahora hacer una mejor y escaparte así del dolor que te ocasionó lo que
elegiste previamente.” T-31.VIII3:1

Empecemos:

1) Mientras sentimos ese sentimiento en nuestro cuerpo, miramos de frente ese


pensamiento que estamos asociando con ese sentimiento, solo que no vamos a juzgar
ni lo que sentimos, ni lo el pensamiento, pues los dos son ilusorios. Solo estamos
dandonos la oportunidad de verlos con un nuevo Maestro, el Espíritu Santo.
2) Sin resistencia alguna, elegimos la paz interna. O mejor dicho, estamos abiertos a
que la paz interna se exprese a través de nosotros. A lo que me refiero cuando digo sin
resistencia alguna, es que no estamos tratando de cambiar lo que sentimos, ni tampoco
estamos juzgando lo que vemos ni lo que sentimos. Sencillamente estamos en una
posición pasiva viendo y sintiendo. Es como un río que nos lleva. No juzgamos nada de
lo que vemos, al igual que no tratamos de nadar en ninguna dirección, solo fluimos a
donde el río nos valla a llevar, confiando en la sabiduría del río y no la nuestra.

3) Dentro de ese espacio de no resistencia, donde el ego esta tratando de hacer todo
lo posible para mantener nuestra mente enfocada en lo que sentimos o vemos (en lo
que no es real), podemos decir la siguiente oración:

“Espíritu Santo, en este momento elijo la paz, y la extiendo a todo. No se lo que nada
significa, solo se que Tu paz es lo único que anhelo. Confío en que Tu sabes que hacer,
yo solo estoy dispuesto a mantener mi atención en Ti y nada mas.”

Con esa actitud de no resistencia y completa fe y confianza, el Espíritu Santo puede hacer
Su trabajo sin interferencia alguna de nuestro juicio, pues lo que el Espíritu Santo en si
esta deshaciendo, es la culpabilidad interna, la parte de la mente que se cree estar
separada de si misma (ego).
Esta oración no se puede llevar a cabo si lo que queremos es resolver algún problema o
tratar de eliminar o cambiar algo por dos razones. Uno: al querer eliminar o cambiar
algo, primero tendríamos que hacerlo real en nuestra mente. ¿Pues que sentido haría
intentar cambiar algo que no existe? Es por eso que no juzgamos, solo observamos sin
juicio ni resistencia alguna, confiando en el proceso. Y dos: al querer cambiar algo lo que
en realidad estaríamos haciendo, es pedirle al Espíritu Santo que mantenga nuestra
creencia en la separación, solo que nos gustaría que las imágenes que no nos gusten
fuesen reemplazadas por unas mas placenteras.

Ese es el tipo de actitud que muchas personas tienen con relación a las enseñanzas del
curso, y es por eso que tarde o temprano lo dejan a un lado, pues de nuevo, no es su ego
lo que quieren deshacer, sino que lo que de verdad quieren hacer es espiritualizarlo. Es
por eso que La Canción de la Oración de Un Curso de Milagros nos recuerda, "El secreto
de la verdadera oración es olvidar las cosas que crees que necesitas. Pedir lo concreto
es como contemplar el pecado y luego perdonarlo." C-1.4:1-2
El Dr. Kenneth Wapnick comparte en su libro, El Poder Sanador de la Bondad Volumen
Dos lo siguiente: “Recordemos, si nos centramos en cambiar lo externo lo hemos hecho
real, lo cual significa que otra vez hemos caído en la trampa del ego. El ego quiere hacer
reales los problemas del mundo y del cuerpo, porque eso es lo que nos mantiene
insensatos (sin mente), y protege al ego del poder de elegir de la mente.” Página 49

Sin embargo, los que elegimos el camino hacia la verdad, cuando empezamos a
experimentar el deshacimiento del ego, lo primero que sucede es que a un nivel muy
inconsciente empezamos a experimentar un cambio de percepción; un cambio de
mentalidad, donde una vez esa culpabilidad interna se valla siendo erradicando, no
reaccionamos ni nos sentimos afectados por experiencias y circunstancias que antes nos
afectaban, ya que lo que el Espíritu Santo nos esta enseñando de una manera muy sutil es
a identificarnos con la verdad y no con nuestras ilusiones (cuerpo físico, mundo ilusorio).
Eso nos lleva a experimentar lo que se lo conoce como la paz que sobrepasa todo
entendimiento.
Es por eso que Un Curso de Milagros siempre enfoca en la práctica, no en la teoría, ni la
lectura, ni el estudio, pues nada de eso nos va a llevar a la experiencia. Esta práctica que
acabo de compartir, es una combinación de tres extractos del curso, la cuales son;

Primero: "Él te exhorta a que lleves todo efecto temible ante Él para que juntos miréis
su descabellada causa y os riáis juntos por un rato. Tú juzgas los efectos, pero Él ha
juzgado su causa. Y mediante Su juicio se eliminan los efectos. " T-27.VIII.9:3-5

Segundo: "Cuando de alguna manera tu paz se vea amenazada o perturbada, afirma lo


siguiente: No conozco el significado de nada, incluido esto. No sé, por lo tanto, cómo
responder a ello. No me valdré de lo que he aprendido en el pasado para que me sirva de
guía ahora." T-14.XI.6:6-9

Tercero: "Deseo la paz de Dios: Decir estas palabras no es nada. Pero decirlas de
corazón lo es todo. Si pudieras decirlas de corazón, aunque sólo fuera por un instante,
jamás volverías a sentir pesar alguno, en ningún lugar o momento." W-pI.185.1:1-3

Con nuestra disposición de no resistir nada, aceptación de todo tal y como es, reconocer
que no sabemos nada, y elegir nuestra paz interna, es esto lo que prácticamente estamos
haciendo: “Si estas dispuesto a renunciar al papel de guardián de tu sistema de
pensamiento y ofrecemelo a mi, yo lo corregiré con gran delicadeza y te conduciré de
regreso a Dios.” T-4.1:4:7

Esta Práctica Se Puede Descargar A Través de Este Enlace:

http://www.fulfillyourdreams.com/PracticaDeLaSanacionMentalConNickArandes.pdf

Nick Arandes a enseñado principios espirituales y del éxito durante


más de veinte años. Ha publicado cuatro libros, ha producido CDs y
DVDs, ha escrito innumerables artículos, al igual de haber
influenciado positivamente muchas personas a través del mundo,
antes de quedarse sin hogar, sin dinero, y de haber sido
diagnósticado con un tumor en la tiroide. Aunque se podría decir
que este es el quinto libro de Nick, según él, este es en realidad su
primero porque aquí el comparte su experiencia personal
relacionada a lo que ocurre cuando uno deja su vida en las manos
del Creador. En sus propias palabras, "Aunque el camino es simple,
no es fácil. Porque se nos pide que dejemos a un lado todo lo que
hemos aprendido, con el fin de dejar que la verdad se revele a través de nosotros. Es por
eso que se dice, ‘Si vosotros permaneciéreis en mi palabra, seréis verdaderamente mis
discípulos; y conoceréis la Verdad, y la Verdad os libertará.’ [Juan 8:31,32]”

Para más información relacionado con Nick Arandes y sú trabajo con Un Curso de
Milagros, visita su página web: www.UnCursoDeMilagrosConNick.com

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