¿Cómo se hace una hipotesis en la Historia?

Los historiadores se parecen mucho a los detectives. Al igual que éstos van
investigando su caso motivados por un sentimiento de curiosidad, formulándose
todo tipo de preguntas. ¿Qué? ¿quién? ¿cuándo? ¿dónde? ¿por qué?. Para lograr
respuestas a estas preguntas, investigan la evidencia, hasta poder llegar a una
conclusión final.
Sin esas preguntas iniciales no se puede avanzar. Por eso es importante que te las
plantees todo el tiempo.
La mayor parte de ellas te surgirán a medida que vayas acotando el tema que
quieres trabajar, en la etapa en que estés revisando las fuentes secundarias. En
algún momento descubrirás que las preguntas que te has formulado van
delineando una posición general hacia el caso: descubrirás que has desarrollado
argumento central que explica por qué pasó lo que paso. Ese argumento o
posición es tu hipótesis inicial.
Las hipótesis son instrumentos de trabajo que se van perfeccionando. La primera
versión de tu hipótesis te servirá para puedas definir qué fuentes debes revisar y
qué hechos debes estudiar con más profundidad. Es muy probable que este
contacto directo con las pruebas afecte tus ideas y que debas reelaborar tu
planteamiento inicial. Seguramente eso te obligará a sumar nuevas fuentes. Has
todos los ajustes que te parezcan necesarios. Lo importante es lograr contar con
un buen punto de inicio que sirva para dar forma a una línea argumental sólida,
que se sustente bien en la evidencia existente, sin forzar las cosas.
>Estudio de caso
El cuarto paso que debe realizar todo investigador, luego de completar la revisión
de las fuentes secundarias, incluyendo entre ellas los recursos disponibles en
Internet, es realizar un ejercicio destinado de definir bien el ámbito cubierto por el
tema de estudio. Ten en cuenta que las investigaciones históricas implican un
enorme esfuerzo. Para que canalices bien ese esfuerzo es fundamental que inicies
el proceso pensando muy bien cuál será el tema de tu trabajo. ¿Cómo voy a
abordar mi estudio de la Guerra Civil? ¿qué aspecto de ese episodio voy a
estudiar? Lo primero que debes hacer es evaluar muy bien cuáles son tus
intereses. Es poco recomendable gastar tu tiempo y tus capacidades estudiando
materias que te desagradan. ¡Opta por lo que te interesa o lo que te emociona!. Lo
descubrirás con facilidad a medida de que revises las lecturas que te hemos
propuesto.
La revisión de los textos escritos por otros investigadores y el examen de tus
motivaciones personales te permitirá definir un área general de interés.
Seguramente esta primera demarcación temática será todavía muy general.
Tendrás que hacer un esfuerzo complementario, destinado a acotar mucho más tu
tema, para evitar que te pierdas en el estudio de algo demasiado general y difuso.
Para lograrlo debes hacer una inversión de tiempo conversando con tu profesor,
con tus amigos y revisando las notas que tomaste mientras leías.
Lo importante es que aproveches los conocimientos que has adquirido sobre el
episodio y el contexto que lo rodea, para trasformar tu interés general en un tema
apropiado para un estudio de caso, que sea abordable en un tiempo razonable.
Memoria Educa - Hipótesis en historia
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Pasos del proceso científico
Una forma en que los padres pueden alentar a sus hijos para que se interesen
por la ciencia es explicarles el proceso científico. El proceso científico es lo que
hacen los científicos cuando formulan preguntas científicas y las responden
mediante observaciones y experimentos.
Paso 1: Hagan una pregunta
Para el primer paso, ayude a su hijo a formular una pregunta; en lo posible
¡una que pueda responderse! Las buenas preguntas empiezan con palabras de
pregunta: Cómo, qué, cuándo, quién, cuál, por qué o dónde. Por ejemplo, ¿qué
taza tiene mayor capacidad? ¿Cuál de estos cuatro objetos crees que flotará en
el agua?
Paso 2: Investigar el tema
Para los niños pequeños, investigar el tema puede incluir una conversación
entre ellos acerca de lo que preguntarán. Quizás usted tenga un libro o haya
visto un programa sobre el tema. El objetivo de esta etapa es incentivar al
científico en la tarea del pensamiento.
Paso 3: Elaborar una hipótesis
Una hipótesis no es más que una buena conjetura que intenta responder la
pregunta del paso 1. Pregúntele a su hijo: "¿Qué taza crees que tiene más
capacidad, la azul o la roja? ¿Crees que el clavo flotará o se hundirá? ¿Crees
que el bote de papel aluminio flotará o se hundirá?".
Paso 4: Prueben su hipótesis haciendo un experimento
¡Esta es la parte que usted y su hijo han estado esperando! Ayude a su
científico a realizar el experimento. Aliente a su hijo para que sea un
observador atento de todo lo que sucede. Hablen de los pasos del experimento.
"Primero, llenamos nuestra jarra con agua. Luego, vertemos lentamente el
agua en la taza".
Paso 5: Analicen los datos y saquen una conclusión
Esta etapa se trata de los resultados. ¿Qué sucedió durante el experimento?
Pregúntele a su hijo: "¿El papel de aluminio flotó o se hundió?" "¿Qué taza tenía
mayor capacidad?" En esta etapa, ayude a su hijo a responder la pregunta
elaborada en el paso 1.
Paso 6: Compartan los resultados
Aliente a su hijo a hablar con sus hermanos y otras personas que lo cuidan
sobre el experimento. Haga que comente los pasos usados para realizar el
experimento y lo que ha aprendido.

Los experimentos de ciencias pueden ser rápidos y divertidos para hacer en

casa. Si comparten el proceso científico, su hijo comenzará a pensar y a
planear como hacen los científicos.