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Memoria Arquitectónica
Nuestra primera premisa es evitar tocar la playa en rasante baja dado que es lo
más escaso, delicado y la razón de ser del club. Las playas solo contienen
equipamiento temporal como los racks para kayaks, botes ligeros o tablas de
surf y alguna terraza con un café o restaurante fabricado con estructura ligera y
fresca. Se busca por lo tanto despejar la vista y evitar la contaminación visual de
las dos ollas naturales para un máximo disfrute por parte de los usuarios:
Se toma como segundo aspecto troncal la vialidad que ya de por si a nivel
vehicular conecta ambas zonas del club bajando incluso a nivel de playa. Sobre
esto queremos incentivar el recorrido peatonal o por bicicleta y que el auto solo
permanezca estacionado durante la estancia de los socios. Las personas con
discapacidad motora o mayores de edad podrán hacer uso de vehículo eléctrico
recargable que los desplace a una velocidad acotada por las instalaciones. El
resto del recorrido como señalan los diagramas se hace por vía peatonal o
ciclovía acompañando las pistas ya ejecutadas con el fin de optimizar el costo
de construir nuevas rutas y maximizar el espacio de estancia.
La tercera premisa es la visual y la sectorización. Las dos grandes explanadas
servirán para acoger la zona de campers y bungalows, con una explanada menor
para la zona de camping. Se evita trasladar a los campistas en una etapa final
(pudiendo ocurrir en una etapa inicial) a la cota baja de la playa misma por un
tema de incompatibilidad de usos. En los tres casos cuentan con un Clubhouse
y área de piscina. La zona deportiva está en la cota alta cerca de la zona de la
subestación dado que por su actividad no requiere tener uso de las mejores
visuales hacia el mar. La ubicación obedece a emplear la topografía existente
optimizando en lo posible los aterrazamientos (necesarios en todos los casos) y
los costos de excavación.