Cuba y Obama

Se cumplió ya medio siglo desde el triunfo de la revolución cubana y casi 48 años

desde aquel histórico 16 de abril de 1961 en que su líder, el comandante Fidel Castro, de
formación liberal democrática en su niñez y adolescencia, pero evolucionado durante su
lucha guerrillera hacia la ideología marxista leninista que no abandonó en su vida,
proclamó a Cuba como la primer república socialista de América.-

Fueron muchas las luchas y adversidades que esa pequeña isla debió soportar en su
posterior devenir histórico, comenzando al día siguiente con la invasión organizada por
los gusanos apátridas y el beneplácito del gobierno de EE.UU. en Bahía de los
Cochinos, de la que como tales fueron expulsados por el pueblo revolucionario y su
comandante. A principios de 1962 fue apartada de la OEA, y a los pocos meses el
presidente de EE.UU., John F. Kennedy, ordenó el bloqueo total contra Cuba que aún
continua, completado en 1964 por el embargo de alimentos y medicinas hacia la isla y
fortalecido en 1992 por la ley Torricelli, que impulsada por el presidente George Bush,
impuso sanciones a los países que comerciasen con Cuba.-

Si bien hasta fines de la década del 80 tuvo el apoyo económico de la URSS, ante la
debacle de ésta, que como dijera Fidel en memorable discurso de abril de 1992 “…Fue
un fenómeno de suicidio, de autodestrucción. Murió por la complicidad interna, por no
haber sido capaz de defenderse, por la falta de visión de dirigentes y políticos.”, no
claudicó de sus principios socialistas y pese a las presiones externas y el irremediable
comienzo del “período especial”, los profundizó con el apoyo masivo de su pueblo y la
conducción de su gran líder.-

EE.UU. mantuvo constantemente su política de agresión y amenaza a la Cuba

revolucionaria, atenuada un tanto durante los gobiernos demócratas de J. Carter y B.
Clinton pero acrecentada en los republicanos de Nixon, Reagan y los Bush.-

Ahora el presidente de la sede del gran imperio es un negro, hasta hace poco tiempo
un casi desconocido, llamado B. Obama y que debe gobernar en la más grande crisis del
sistema capitalista en toda su historia. ¿Cual será en última instancia su actitud hacia
Cuba?. Desde ya que ella dependerá de la política global que adopte frente a las
turbulencias del sistema tanto en lo internacional como en lo nacional. Si bien sus
primeros discursos y decisiones apuntan a un fortalecimiento de la economía hacia el
mantenimiento interno de fuentes de trabajo y una cierta distensión en el plano
internacional (cierre de la base de Guantánamo, retiro de tropas de Irak, etc.), dado las
pujas internas entre los que realmente ejercen el poder imperial, es prematuro
determinar cual será la línea definitiva de su gobierno y si podrá resistir la presión de los
sectores militares y ultra-derechistas que consideran que las guerras constituyen la única
forma de subsistencia del brutal sistema capitalista-imperialista.-

Cualquiera sea la postura que prevalezca, es indudable que esta crisis sistémica
aunque no sea la última y definitiva, corrobora nuestro pensar socialista de que el fin del
imperio está cada vez más cerca. No será seguramente Obama quien le de el empujón
terminal, pero si apelará a todo recurso que le sea permitido para mantenerlo
momentáneamente a flote.-

No cabe duda que el prevalecimiento de alguna de estas tendencias repercutirá de un

modo u otro en las relaciones de Cuba (único país socialista) con el resto de las naciones
dominadas por el capitalismo y en particular con EE.UU; pero el pueblo cubano y sus
líderes, imbuídos en el ejemplo de Fidel y El Che sabrán el modo de enfrentar las
circunstancias para seguir con su imbatible firmeza histórica en el sendero socialista.-