A LA MEMORIA DE MI MADRE

Hoy recordamos el primer mes de tu partida y quiero decir que vivirs por siempre en
nuestra memoria. Madre, s que en el cielo estars bien, pero aqu nos haces mucha
falta. Dios te bendiga por todo y descansa en paz.

Gracias Madre por todo lo que hiciste por nosotros, por educarme con tus valores.
Por ensearme a usar los "buenos das", las "buenas tardes", el "hasta luego" y las
"gracias".

Por inculcarme el respeto a los mayores y a tratar a la gente con amabilidad.

Por acostumbrarme a pedir permiso, a saludar con una sonrisa y amar a las personas
por lo que son y no por lo que tienen.

Por ensearme a ser feliz con lo que tengo y con lo que puedo obtener.
Gracias por sacar lo mejor que haba en m. Ests donde ests, gracias Mamita linda
por haberme dado la vida, por haberme querido tanto, por sacrificarte por m y por
hacerme quien soy.

Gracias Mamita linda, que descanses en paz por toda la eternidad, que yo te recordare
y rezare por ti mientras viva.

LAS MADRES NUNCA MUEREN

Cun lejos estn aquellos das

en que alegre y placentera,
cansada de su ardua labor diaria,
en su regazo me dorma!

Con que grato embeleso recoga

la balbuciente frase pasajera
que, por ser de mis labios la primera
con maternal orgullo repeta!

Hoy, que contemplo la vida sin encanto,

al recordar su celestial cario,
de mis ojos brota el llanto,
porque, pensando en ti, me siento nio.

Un golpe di, con mi temblorosa mano

sobre su tumba venerada y triste;
saba que te llamaba en vano
porque mi madre, ya no existe.

Volv a llamar, y del imperio fro

se alz una voz que dijo: Si existe!
Las madres, nunca mueren.

Desde la tumba o desde el cielo, estar vigilante hijo mo.