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LA ACEQUIA DEL DIABLO

LEYENDA DEL DISTRITO DE SAN CLEMENTE DEL SECTOR DE


CAUCATO – PERÚ

Cuéntase por los antiguos pobladores que el diablo, cansado de sacrificar la


vida de humildes personas en común acuerdo con el hacendado, solicito en
forma directa la vida de Manuel Montero, quien a tal petición, que para él era
amigable, acepto con petulancia y altanería; pero primero tenia que el Satanás
aceptar la propuesta que le ponía a cambio de su vida, y cual era la condición
de Manuel Montero , como siempre pensaba hacerlo rentable , incluso a
muerte , quiero antes de que me quites la vida que prohibiciones de agua m i
hacienda y tu mismo debes traerlo mediante el excavado de un zanjón desde el
río Pisco, hasta aquí y debes hacerlo antes de que el gallo cante de otra
manera mi vida no la tendrás.

De repente el mayordomo de la hacienda que hasta esos instantes


contemplaba hacia el horizonte pasivamente, todo aquel día diabólico
espectáculo , le vino a la mente una sorprendente idea para salvar de tan
infausta muerte a su apreciado amo y hacer que el fantasma desaparezca sin
cumplir las exigencias hecha por Montero cambio de su Vida, el de llevar agua
a la hacienda.

Urbano Mayordomo de la hacienda desde un lugar no sospechado por Manuel


Montero, vivía la atmósfera de una insoportable tensión, y nerviosismo al llegar
la hora pactada y cada vez era mas la desesperación de Manuel Montero veía
que le quedaban solo minutos de vida a medida que el diablo avanzaba, él se
sentía morir. El Mayordomo vivía con el cada momento de desesperación.

Mi amo dijo el humilde mayordomo Urbano enterado en el establo por boca del
hacendado de todo el peligro que corría la vida de su amo es fácil hacer cantar
al gallo que cante antes de la hora habitual.

Son las 2:30 y recién cantará a las 4:00 a.m. de la mañana pero los gallos de
nuestro corral recién canta a las 5:00 a.m. de la mañana y como hacer que
cante el gallo con cierta admiración pregunto Don Manuel Montero, mi señor...
amo dijo su mayordomo consiga Ud. un espejo grande yo traeré al gallo del
corral y ya vera lo que sucede.

Manuel Montero, en este momento sintió insurgir en su alma un destello de


aliento, como soplo vital que despierta la sombra de la somnolencia de un
espíritu que se moría y haciendo un esfuerzo insólito camino rápidamente al
dormitorio en busca del espejo, mientras el mayordomo en busca del gallo mas
atrevido.

El mayordomo de la hacienda sabia perfectamente como hacer que el gallo


cante a cualquier hora del día o de la noche.

El mayordomo de la hacienda de Caucato, se encontraba ya en el interior de la


habitación con uno de los gallos traídos del corral que había tenido docenas de
pelea, la inquietud del gallo se dejaba entrever, el humilde mayordomo, lo
sujetaba fuertemente para evitar su fuga. Solo esperaba que su amo y señor
Manuel Montero trajera el espejo del dormitorio a donde se dirigió rápidamente,
minutos antes. El mayordomo, ante la demora de Manuel Montero levantó la
mirada, curiosamente, curioseando la puerta de ingreso del dormitorio por
donde había ingresado, el hacendado con gran sorpresa pudo observar
pedazos de vidrio y el marco de un espejo semidestrozado.

Que había pasado, mientras el mayordomo fue al corral en busca del gallo,
Manuel Montero rehén de su propia desesperación, quiso llevar el espejo,
cayéndose como un fardo en el suelo y haciéndose el espejo en mil pedazos.

Manuel Montero, ensangrentado buscaba otro espejo, estos acontecimientos


sucedían rápidamente mientras el mayordomo recordaba algunos hechos
malévolos por su amo pero así le quería ayudar.

Eran aproximadamente las 3:30 a.m. de la mañana mientras a lo lejos se


escuchaban extraños ruidos como de un tropel de obreros en actividad. Era el
cruel ruido de lampas , carretillas , picos, que luchaban para romper el duro
suelo de yeso (tiza) y concluir la obra que le prometio el fantasma , se trazara
para tener en sus manos la vida del hacendado.
Manuel Montero presentía que el tiempo había pasado ya un siglo y tenia la
esperanza de escuchar en cualquier momento el cántico del gallo, sin embargo
recién eran las 2:35 a.m. de la mañana y los gallos no cantaban a esa hora.

Cuando los fieles llegaron al año siguiente y en mayor proporción de cantidad


de personas, faltando escasamente 100metros, para llegar al santo lugar,
observaron junto a la iglesia un inmenso gato negro que al son se movía la cola
orinaba de una manera extraña, momentos este, en que las voces de los
visitantes se debitaro, el acento fue solemne algo se presagiaba, apagaronse
las risa y la voz se hizo grave y sorda como los golpes del azadón que caban la
tumba. Todo esto pensaba en lo más hondo el mayordomo.

El mayordomo de la hacienda de Caucato Urbano, dudó por un instante y quiso


abandonar en su desdichado destino a su amo, pues todavía no llegaba con el
espejo. Tal vez quería expresar con esta duda que la muerte de los tiranos y
profanos es la ultima razón de los esclavos; pero no podía explicar su propia
indecisión y elevo su voluntad al legendario de la divinidad.

Manuel Montero, por fin aparece con el espejo, salió del dormitorio con un
espejo d e aproximadamente un metro de largo por 60 cm. de ancho. Momento
en este en que se esfumaron todos los recuerdos del mayordomo. y ordeno
como después de llegado a un largo y fatídico viaje a su amo, que el espejo
pusiera al frente del gallo. El animal al ponerse al frente y mirarse en el espejo
no vacilo un instante para reconocer equivocadamente que estaba en forma,
frente a un nuevo rival. Se revelo ante su propio dueño que lo sujetaba, levanto
las extensa alas con brusquedad mostrando en cada de sus peleas que
siempre lo había logrado, en sus batallas de peleas de gallos.

Mientras Manuel Montero en la habitación desesperado, en estado de presa del


pánico al cruel tormento de muerte en la habitación con temor que el diablo
selo llevara como lo prometio en cuerpo y alma si le ganaba el pacto que había
realizado.

En el horizonte lejano de la hacienda hacia el norte (Camacho) el mayordomo


de la hacienda de Caucato pudo observar rápidamente cuando el diablo a
escasos metros faltaba terminar el excavado del extenso canal prometido por el
diablo, del río Pisco a Caucato; el mayordomo se sorprendió de tan anhelada
obra y escalofriante aterrador suceso satánico.

En ese entonces Manuel Montero ordenó a su mayordomo que sujetara al


espejo para que pusiera al frente del gallo; en ese entonces el gallo al mirarse
al espejo penso que era otro gallo. Montero lo sujetaba en esos instantes el
gallo con brusquedad levanto las extensas alas y al no soltarlo el gallo canto.
De esta manera ganándole la apuesta al pacto fantasmal.

Al ocurrir esto, el fantasma satánico; enfurecido al oír cantar al gallo paro la


excavación del esquía, al no culminar su obra, cuando solamente le faltaban
escasos metros par cumplimiento de la de su obra, pero no antes lanzar un
fuego al cielo, el fantasma tenia planificado en esa misma noche llevarse el
cuerpo y alma definitivo como su esclavo eterno.

Años mas tarde, por el transcurso de los años muy avanzado de edad don
Manuel Montero murió de una enfermedad muy desconocida, sus familiares lo
estaban en el velatorio su cuerpo en su sala principal, con una intensa luz
luminosa, en esos vientos de escalofriante penetro en la habitación, las luces
se apagaron, los perros comenzaron a ladrar tristemente, cuando prendieron
las luces de unos minutos después se percataron a ver el ataúd el cuerpo de
Montero ya no se encontraba por completo el fantasma satánico y perverso,
cumplió su palabra.

Los familiares de Manuel Montero tuvieron que poner en el ataúd troncos de


plátanos y luego a proceder el traslado al cementerio para su entierro. Los
familiares retornaban a Caucato del sepelio, en el camino un gato negro
inmenso, que al son movía la cola, gritando de una manera extraña de un
momento lanzo fuego candente en forma de una estrella en el camino, leyenda
contado por sus antiguos pobladores de Caucato, se dice que retorno del
infierno convertido en Centauro clamando perdón en las catacumbas,
subterráneos de Caucato a la media noche, el centauro tiene la marca de
anticristo en la frente vagando en perdón de Dios. No hay mal que dure 100
años poder que dure para siempre.

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