Buenos Das SENTIDO DE FORMACION PRCTICA DEL ABOGADO
La dinmica en la multiplicidad de actividades del Abogado le impone una
independencia absoluta exenta de cualquier presin, principalmente de aquella que resulte de sus propios intereses o influencias exteriores. Esta independencia es necesaria para mantener la confianza en la Justicia, y en la imparcialidad del Juez. El Abogado debe, por lo tanto, evitar cualquier atentado contra su independencia y estar atento a no descuidar la tica profesional con objeto de dar satisfaccin a su cliente, al Juez o a terceros. Independencia es necesaria para la actividad jurdica, como para los asuntos judiciales, por lo tanto, el consejo dado por el Abogado a su cliente carecer de validez, si ha sido dado para complacer, o por inters personal, o bajo efecto de una presin exterior. Las relaciones de confianza no se pueden dar, si existe alguna duda sobre la honestidad, la probidad, la rectitud o la sinceridad del Abogado. Para ste ltimo, estas virtudes tradicionales constituyen obligaciones profesionales. Parte de la naturaleza misma de la misin del Abogado que ste sea depositario de los secretos de su cliente y destinatario de comunicaciones confidenciales. Sin la garanta de la confidencialidad no puede haber confianza. El secreto profesional est, reconocido como Derecho y deber fundamental y primordial del Abogado, por lo tanto, con independencia de criterio, el abogado podr negarse ante cualquier persona o autoridad a contestar cualquier cuestin que lo lleve a violar el secreto profesional. Por ello, el abogado debe respetar el secreto de cualquier informacin confidencial transmitida a l por su cliente, ya sea que se refiera al propio cliente, o bien a terceros en el marco de los asuntos de su cliente. Esta obligacin de guardar secreto no est limitada en el tiempo. El Abogado har respetar el secreto profesional a cualquier persona que colabore con l en su actividad profesional. Finalmente, el profesional del derecho se debe a s mismo y a su misin de auxiliar de la justicia otorgada por la ley, una conducta ntegra y ceida a los parmetros de lo moral, de la equidad, desprendimiento de sus propios intereses con tal de favorecer
plenamente aquellos del cliente que son siempre el motivo de su