Leccin 1

EL INGRESO A LA FAMILIA DE DIOS

La vida cristiana empieza con un nacimiento espiritual por la fe en el Seor
Jesucristo (Juan 3:3).
La exigencia de Jesucristo es Os es necesario nacer otra vez (Juan 3:7). Nacer de
nuevo implica un comienzo absolutamente nuevo. Este milagro es universalmente
necesario, si uno quiere ser miembro del Reino de Dios.
El Nuevo Nacimiento es algo que Dios hace a favor del hombre, cuando el hombre
est dispuesto a rendirse a Dios (Juan 1:13; Efesios 2:8). El nuevo Nacimiento es
una transformacin espiritual, radical y total. Es un cambio interno que se refleja en la
conducta externa del hombre.
El Nuevo Nacimiento Dios lo realiza cuando la persona se arrepiente de sus pecados
y rinde toda su vida a Jess y acepta a Jess por la fe como nico Seor y Salvador.
El hombre acepta vivir bajo el seoro de Jesucristo. (Juan 1:12).
En el Nuevo Nacimiento ha nacido en su alma una nueva vida. El hombre recibe una
Nueva Naturaleza y Nuevo Corazn. El hombre se convierte en una Nueva Criatura.
En el Nuevo Nacimiento pasa lo siguiente:
La Vida y Naturaleza de Dios son engendradas en nosotros (Juan 1:13; 1 Pedro
1:23)
En el momento en que usted, en un acto de fe, recibi a Cristo, muchas cosas
ocurrieron. He aqu algunas de ellas:
1. Cristo entr en su vida (Apocalipsis 3:20)
2. Sus pecados le fueron perdonados (Colosenses 1:14)
3. Usted ha llegado a ser hijo de Dios (Juan 1:12)
4. Usted recibi Vida Eterna (Juan 5:24)

5. Usted comenz a vivir el gran propsito para el cual Dios lo cre (Juan 10:10; 2
Corintios 5:17; Gnesis 1:27-28)

As que, el hombre nuevo, es aquel que nace a la Vida Cristiana y comprende que la
Vida Cristiana es una vida de cambios, orientados hacia lo nuevo. Estos cambios se
reflejarn en nuestra conducta y apariencias diarias (2 Corintios 5:17). La persona no
se ver presionada a cambiar, porque el cambio es algo natural, pues ha sido llena
de la naturaleza de Dios, y la obediencia es la manifestacin del Nuevo Nacimiento a
una vida de consagracin voluntaria a Jess como Rey y Seor ( 1 Juan 2:3)