Simn Navarro, veintitrs aos, ciego, no se detuvo y dio un paso en el
aire y perdi el equilibrio y solt el bastn y se hundi en el agua y antes de llegar al fondo estaba muerto. La Rambla, en una siesta de julio estaba silenciosa y solo muy a lo lejos se mova un barco. Cuando qued ciego y con muchas cicatrices en la cara (a las que nunca pudo ver) Simn se refugi en una doble oscuridad. Pese a que no le deba importar, se irritaba si alguien encenda la luz donde l estaba. Cuando aprendi a baarse, a comer, a vestirse y a hacer todo solo acept sentarse a la mesa o en el living, frente a la ventana. Pero cuando miraban la televisin l volva al cuarto y apretaba las rendijas de la celosa y quedaba en la cama respirando fuerte. Y cuando aprendi a guiarse con un bastn que le aseguraron que no era blanco, adquiri la costumbre de salir y de or a la gente durante largo rato. Como a veces oy chistes, volvi a contarlos y todos dijeron que ya era feliz. Dos hombres hacan preparativos para zarpar su barco y Simn escuchndolos trataba de descifrar qu era lo que hacan y cuntos eran. Taco de mujeres, voces de mujeres jvenes, se acercaron, estuvieron junto a l (hubo un silencio) y se alejaron. Pobre!Qu cara! Y es ciego, viste el bastn blanco? De Mattos, Toms. La gran sequa. Ediciones de La Banda Oriental. Montevideo, 1984.