Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Distrito de Bellavista0002
Distrito de Bellavista0002
DISTRITO DE BELLAVISTA
1. HISTORIA:
Los primeros pobladores que comenzaron a poblar
el territorio de Bellavista provinieron de las zonas
rurales, sobre todo de los poblados de Huangal
Grande,
Piedra
Rodada,
Montenegro
otros
y Ayabaca.
La
actividad
En 1949 el Comit Pro Distrito, es presidido por don Jos Castro Silva y el 4 de
diciembre de ese ao se crea la Sociedad de Auxilios Mutuos Seor Cautivo. El
12 de diciembre de 1952 se crea el puesto de la Guardia Civil, con la finalidad
de otorgar seguridad a la poblacin del sector.
El 21 de octubre de 1954, por gestin del parlamentario piurano, Luciano
Castillo Colonna, se expide la Ley N 12140 firmada por el presidente del
Congreso, Ing. Hctor Boza, promulgada por el ministro de gobierno Coronel
Augusto Romero Lobo, mediante la cual el barrio se convierte en distrito, con
su capital el pueblo de Bellavista.
El 08 de diciembre de 1954 se instala el primer concejo distrital de Bellavista,
siendo elegido alcalde don Jorge Talledo Malo. Sucesivamente se fueron
dotando de los servicios fundamentales como agua, desage, energa elctrica,
centros educativos primarios y secundarios, donde se forma la juventud de este
sector. An no cuenta con educacin superior, sin embargo, toda hace prever
que la iniciativa de sus gentes poco a poco lograran ir transformando la
realidad socioeconmica del distrito Metropolitano.
A la fecha, Bellavista cuenta con la totalidad de los servicios, aunque los
beneficios del desarrollo le han sido esquivos.
Bellavista
Salve a ti pueblo viril, mi voz se inflama
Bellavista
De Sullana eres orgullo sin igual
Bellavista
Tierra noble de belleza incomparable
Eres del chira
Joven promesa por tu fe y tu valor
ESTROFAS
I
En tu cielo, cual centella brilla, el sol
Es la luz que tu sendero alumbrar
Y tus hijos con coraje y dignidad
La grandeza de esta tierra forjarn
II
Bellavista siempre erguida tu estars
Y el progreso de este Valle lograras
Pues tus hombres con trabajo y tesn
Desde el alba hasta el ocaso bregarn
III
Por tus calles y tus parques se oye un son
Es la voz de tu vibrante juventud
Que en los surcos de este valle sembrar,
La simiente de tu gloria y tradicin.