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INTRODUCCION.-
Los seres humanos estamos visualmente orientados. Desde las paredes de las
cavernas en Lascaux, Francia las cuales sirvieron como lienzo para el hombre hace
unos 40,000 años, hasta la actual demanda de utilizar interfaces gráficas, "las
imágenes no sólo pueden considerarse como el medio de comunicación más efectivo
pero contienen una mayor cantidad de información cuando se le compara con las
palabras escritas o ideas conceptuales."
En efecto, de acuerdo a los autores David Lewis y James Green, quienes han escrito
acerca del mejoramiento de la memoria, dicen que "la mente retiene las imágenes
mucho mejor que las palabras, números o conceptos abstractos."
Dada la sofisticación del sistema de la visión humana, la predilección del ser humano
por las imágenes es sorprendente, no sólo una gran parte del cerebro esta dedicada a
la visión y al análisis visual sino que también la capacidad de transporte de
información (el ancho de banda) de nuestro sistema visual es mucho mayor que el de
cualquier otro de nuestros sentidos.
De todas las imágenes y pinturas conocidas, el rostro humano es la más importante
como fuente de información. Cuando hablamos cara a cara con otra persona,
obtenemos mayor información de las expresiones faciales, más que de sus palabras o
calidad de voz combinadas.
De hecho, los psicólogos han determinado que cuando hablamos cara a cara, sólo el
siete por ciento de lo que es comunicado es transferido por el significado de las
palabras. Otro treinta y ocho por ciento proviene de cómo las palabras son dichas.
Eso deja al cincuenta y cinco por ciento restante de la comunicación, tomar la forma
de señales visuales.
El problema es que en el ambiente global de los negocios de ahora las
comunicaciones cara a cara han llegado a ser una práctica costosa, con un alto
consumo de tiempo por lo que es, frecuentemente omitida. Se hace uso entonces de
medios como el teléfono, el fax o el modem para satisfacer las necesidades de
comunicación corporativas. " La videoconferencia ofrece hoy en día una solución
accesible a esta necesidad de comunicación, con sistemas que permiten el transmitir
y recibir información visual y sonora entre puntos o zonas diferentes evitando así los
gastos y pérdida de tiempo que implican el traslado físico de la persona, todo esto a
costos cada vez más bajos y con señales de mejor calidad ". Estas ventajas hacen a la
videoconferencia el segmento de mayor crecimiento en el área de las
telecomunicaciones.
CAPITULO 1.- SISTEMAS DE VIDEOCONFERENCIA.
7.1 GENERALIDADES.
Con el inicio de la "era espacial" el 4 de Octubre de 1957, se abrió un nuevo capítulo
en el campo de las comunicaciones de larga distancia en el planeta Tierra. Fue en
esta fecha cuando los rusos lanzaron exitosamente al espacio el primer satélite
artificial, llamado Sputnik 1. Luego de esto y hasta la actualidad, la tecnología
espacial ha avanzado tanto, que lo que algún día parecía un sueño imposible de
realizar o una fantasía perteneciente a un cuento de Julio Verne, hoy nos parece
totalmente normal y forma parte de la vida cotidiana en nuestro planeta.
Los equipos que se han creado para poder conseguir la anhelada "conquista del
espacio" son muy variados, desde pequeños cohetes y antenas, hasta sofisticados
satélites y naves espaciales capaces de llegar a la luna o a cualquier planeta del
sistema terrestre.
Un sistema completo de comunicaciones satelitales, comprende básicamente dos
segmentos: el segmento espacial, constituido por un satélite de comunicaciones, y un
segmento terrestre, que comprende el equipo utilizado para comunicarse con el
mismo.
En este capítulo nos centraremos en los satélites artificiales particularmente en los
de comunicaciones y en las estaciones terrenas que se utilizan para poder
comunicarse con estos.
7.2 SATÉLITES.
Los satélites artificiales son objetos construidos por el hombre y colocados en órbita
alrededor de la Tierra o de cualquier otro cuerpo celeste, con el objeto de realizar
investigaciones científicas, reconocimientos militares, estudios meteorológicos,
facilitar las comunicaciones, etc.
En este punto, vale la pena recalcar que los satélites artificiales propiamente dichos,
son aquellos que se colocan en órbita alrededor de la Tierra; aquellos que son
ubicados girando alrededor de otros planetas, son conocidos como "sondas
espaciales". Existen otros artefactos que los científicos suelen ubicar girando
alrededor del sol. Estos son conocidos como "planetoides".
A continuación se describen los tipos de satélites más importantes:
7.2.1 Tipos de Satélites.
Satélites pasivos: Se denomina así a aquellos que no llevan ningún instrumento
de medida en su interior y cuyos movimientos son controlados y estudiados desde la
Tierra.
Satélites activos: Contrariamente a los pasivos, estos llevan todo tipo de
equipamiento en su interior, para poder realizar mediciones y observaciones exactas
de los cuerpos celestes y del espacio exterior. Entre estos instrumentos están:
cámaras fotográficas, detectores de radiaciones, fuentes de energía eléctrica, cámaras
de televisión, radios, detectores de meteoritos, etc. Obviamente, el equipamiento del
satélite depende del objetivo por el cual éste fue puesto en órbita y de su capacidad
de carga. Dentro de esta clasificación tenemos:
Satélites para realizar investigaciones científicas: Originalmente, el
principal propósito de cualquier satélite de hecho, los primero satélites fueron
lanzados con este objetivo era el de realizar estudios del espacio interior y de lo que
existía más allá de la atmósfera terrestre. Gracias a dichos estudios espaciales y al
avance de la tecnología, actualmente es muy fácil observar y estudiar cuerpos celestes
utilizando un satélite, sin preocuparse por la interferencia que produce la atmósfera
terrestre. También se utilizan satélites para estudiar el sol y las estrellas.
Satélites de comunicaciones: Son satélites que orbitan alrededor de la Tierra y
cuyo objetivo es facilitar las comunicaciones terrestres. Esta es tal vez la aplicación
tecnológica más importante de los satélites artificiales. Sin embargo, debido al
avance constante de la tecnología, los satélites están siendo relegados por otros
medios de comunicación más baratos y rápidos. Entre ellos tenemos a las
microondas y a la fibra óptica. En muy poco tiempo, estos sistemas tomarán el lugar
de los satélites y los desplazarán por completo, en lo que se refiere al campo de las
comunicaciones.
Satélites de navegación: Estos artefactos proveen los medios necesarios para
señalar con precisión cualquier lugar sobre la Tierra, y llegar a conocer exactamente
cualquier posición en el globo terráqueo, realizando cálculos basados en el Efecto
Doppler. Así, conociendo la órbita del satélite, cualquier posición desconocida puede
llegar a calcularse exactamente al realizar mediciones del aumento o decremento de
la frecuencia de radio emitida por satélite mientras órbita la Tierra.
Satélites meteorológicos: Estos satélites utilizan instrumentos altamente
sensitivos para obtener datos y fotografías de la atmósfera y sus componentes, para
luego usarlos en los modelos atmosféricos generados por computadores, que son la
base de los pronósticos climáticos.
Además, los datos del satélite proveen información sobre los océanos, desiertos y
áreas polares, donde los reportes meteorológicos convencionales eran imposibles o
muy limitados. Es posible localizar tormentas, nevadas, cerros, cordilleras, corrientes
de aire y de gas, neblinas y brumas, condiciones congelantes para los mares, y
dirección y velocidad de los vientos.
Para poder tomar fotografías exactas y muy claras, los satélites están equipados con
cámaras ópticas e infrarrojas, con las cuales es posible abarcar áreas inmensas que
no sería posible fotografiar utilizando otros medios.
Satélites para observación de la tierra y el mar: Para poder realizar
observaciones de este tipo, los satélites están dotados con ciertos sensores especiales,
a través de los cuales pueden distinguir entre la tierra y el agua, ciudades y campos, e
inclusive entre plantaciones de maíz y plantaciones de trigo. Todos estos datos sirven
para obtener información sobre los recursos existentes en la tierra y el mar. Además,
gracias a esto se pueden realizar mapeos exactos de áreas remotas de la Tierra. Por
otro lado, los Geólogos y otros especialistas utilizan dicha información para la
explotación mineral, reforestación, conservación del suelo y control de inundaciones
y derrumbes.
Satélites de propósito militar: Desde mediados de la década de los sesenta,
tanto los Estados Unidos como Rusia han puesto en órbita un considerable número
de satélites, cuyo principal objetivo ha sido el de monitorear actividades y
operaciones militares de otras naciones, detectando explosiones nucleares,
lanzamientos de misiles y realizando inteligencia electrónica, entre otras cosas. Pero
actualmente la finalidad de este tipo de satélites está dejando de ser la simple
detección y rastreo de actividades militares, para pasar a complementarse con la
destrucción de otros satélites y aeronaves enemigas.
7.2.2 Componentes Básicos:
Todos los satélites artificiales, independientemente del objeto para el cual fueron
creados y puestos en órbita, poseen ciertas características en común en lo que se
refiere a sus componentes. Por ejemplo, todos poseen radares, instrumentos
necesarios para realizar reconocimiento y monitoreo de localizaciones, y para
efectuar mediciones de altitudes. También todos poseen sensores, los cuales son
utilizados para efectuar diversas operaciones, que difieren de acuerdo al tipo de
satélites que sea y a su propósito.
Potencia eléctrica es otra característica común a todos los satélites. Aquellos que son
lanzados para ejecutar misiones que duran apenas unos cuantos días pueden operar
con baterías, las cuales cuentan entre el equipamiento obligatorio de cualquier
satélite. En algunos casos, suelen reemplazarse estas baterías por celdas de
combustible de alta eficiencia, que convierten ciertas reacciones de oxígeno e
hidrógeno en electricidad. Pero la fuente de energía más comúnmente utilizada, la
constituyen las celdas solares. Esas se encuentran ubicadas en paneles planos en
forma de "alas" o envueltas alrededor de la superficie exterior del satélite. Las celdas
solares absorben energía del sol y la transforman en la energía eléctrica necesaria
para el perfecto funcionamiento del aparato.
Las baterías son también utilizadas cuando el satélite se encuentra alejado del sol y la
energía que recibe no es suficiente para que las celdas solares funcionen
correctamente, o cuando existe algún planeta que está bloqueando la luz solar para el
satélite.
Otro componente indispensable es el equipo de control de estado, el cual se utiliza
para mantenerlo en su órbita designada, o para colocar sus antenas y sensores
apuntando correctamente hacia la Tierra, en caso de que se hayan desviado.
Los receptores y transmisores de señales son ciertamente necesarios en cualquier
satélite artificial, pero son más frecuentemente utilizados en los de comunicaciones,
debido al tipo de operaciones que estos efectúan. Estos sensores son generalmente
utilizados para enviar y recibir señales desde y hacia la Tierra, sin lo cual, el
monitoreo y control del satélite sería imposible.
Finalmente tenemos los encoders de Telemetría, que no son más que transmisores
que se encargan de medir voltajes, corrientes, temperaturas y otros parámetros que
describen la condición del equipo que se encuentra en el interior del satélite y envían
esta información a la Tierra, utilizando los transmisores. La información que se
recibe a través de un enlace de radio desde un satélite, es llamada Telemetría.
9.1.12 Subsistema de control.
El sistema de control de la videoconferencia es el corazón y el alma de la
videoconferencia porque es lo que los participantes de la conferencia tocan y sienten.
No hay duda de que la calidad del audio y el video está relacionada directamente al
codec y al modo de compresión utilizado. Sin embargo la mayoría de los
participantes de la conferencia se llegan a acostumbrar al nivel de calidad de la
imagen. El sistema de control en el panel de control situado sobre la mesa de
conferencias es lo que ellos tocan y usan día a día. Un sistema de control de la sala de
videoconferencia tiene dos componentes claves: el panel de control (el cual
normalmente se sitúa sobre la mesa de videoconferencia) y el sistema de control
central.
Figura 9.11 Vista de planta del área asignada para la sala de videoconferencia.
CAPITULO 10. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Siguiendo con la serie de artículos sobre redes y TCP/IP hoy realizaremos una breve
introducción al “Sistema de Nombres de Dominio” (DNS, por “Domain Name System“).
El DNS se utiliza principalmente para la resolución de nombres, esto es, decidir qué
dirección IP pertenece a determinado nombre completo de host.
También puede descargar este tutorial en otros formatos (HTML sin decoraciones y PDF).
Usos del DNS
El DNS se utiliza para distintos propósitos. Los más comunes son:
• Resolución de nombres: Dado el nombre completo de un host (por
ejemplo blog.smaldone.com.ar), obtener su dirección IP (en este caso,
208.97.175.41).
• Resolución inversa de direcciones: Es el mecanismo inverso al
anterior. Consiste en, dada una dirección IP, obtener el nombre asociado a
la misma.
• Resolución de servidores de correo: Dado un nombre de dominio (por
ejemplo gmail.com) obtener el servidor a través del cual debe realizarse la
entrega del correo electrónico (en este caso, gmail-smtp-in.l.google.com).
Por tratarse de un sistema muy flexible, es utilizado también para muchas otras funciones,
tales como la obtención de claves públicas de cifrado asimétrico y la validación de envío de
e-mails (a través de mecanismos como SPF).
Terminología básica
Antes de proseguir, es necesario introducir algunos términos básicos para evitar confusiones
y ambigüedades. Otros términos más complejos serán tratados más adelante.
• Host Name: El nombre de un host es una sola “palabra” (formada por
letras, números y guiones). Ejemplos de nombres de host son “www“,
“blog” y “obelix“.
• Fully Qualified Host Name (FQHN): Es el “nombre completo” de un
host. Está formado por el hostname, seguido de un punto y su
correspondiente nombre de dominio. Por ejemplo, “blog.smaldone.com.ar“
• Domain Name: El nombre de dominio es una sucesión de nombres
concatenados por puntos. Algunos ejemplos son “smaldone.com.ar“,
“com.ar” y “ar“.
• Top Level Domains (TLD): Los dominios de nivel superior son aquellos
que no pertenecen a otro dominio. Ejemplos de este tipo son “com“,
“org“, “ar” y “es“.
Arquitectura del DNS
El sistema DNS funciona principalmente en base al protocolo UDP. Los requerimientos se
realizan a través del puerto 53.
El sistema está estructurado en forma de “árbol“. Cada nodo del árbol está compuesto por un
grupo de servidores que se encargan de resolver un conjunto de dominios (zona de
autoridad). Un servidor puede delegar en otro (u otros) la autoridad sobre alguna de sus sub-
zonas (esto es, algún subdominio de la zona sobre la que él tiene autoridad). Un subdominio
puede verse como una especialización de un dominio de nivel anterior. Por ejemplo,
“smaldone.com.ar” es un subdominio de “com.ar“, que a su vez lo es del TLD “ar“.
El siguiente diagrama ilustra esto a través de un ejemplo:
Los servidores con autoridad sobre los TLD son los llamados “root servers” (o “servidores
raíz“) del sistema. Estos son fijos, ya que rara vez cambian, siendo actualmente 13.
Tomemos como ejemplo el dominio “com.ar“. Este dominio pertenece al TLD “ar“.
Los servidores con autoridad sobre el dominio “ar” son:
ns-ar.ripe.net
merapi.switch.ch
uucp-gw-1.pa.dec.com
uucp-gw-2.pa.dec.com
ns.uu.net
ns1.retina.ar
athea.ar
ctina.ar
En tanto que los servidores con autoridad sobre “com.ar” son:
merapi.switch.ch
relay1.mecon.gov.ar
ns.uu.net
ns1.retina.ar
athea.ar
ctina.ar
Podemos ver que ns.uu.net, ns1.retina.ar, athea.ar y ctina.ar tienen autoridad tanto sobre
“com.ar” como sobre “ar“.
El proceso de resolución de nombres
Cuando una aplicación (cliente) necesita resolver un FQHN envía un requerimiento al
servidor de nombres configurado en el sistema (normalmente, el provisto por el ISP). A
partir de entonces se desencadena el proceso de resolución del nombre:
1. El servidor de nombres inicial consulta a uno de los servidores raíz (cuya
dirección IP debe conocer previamente).
2. Este devuelve el nombre del servidor a quien se le ha delegado la sub-
zona.
3. El servidor inicial interroga al nuevo servidor.
4. El proceso se repite nuevamente a partir del punto 2 si es que se trata de
una sub-zona delegada.
5. Al obtener el nombre del servidor con autoridad sobre la zona en cuestión,
el servidor inicial lo interroga.
6. El servidor resuelve el nombre correspondiente, si este existe.
7. El servidor inicial informa al cliente el nombre resuelto.
Ilustremos esto con un ejemplo concreto. Supongamos que el navegador necesita resolver el
nombre “blog.smaldone.com.ar“.
1. El sistema tiene configurado el servidor de nombres 200.49.156.3
(perteneciente al proveedor argentino Fibertel). Por lo tanto envía a éste
el requerimiento de resolver “blog.smaldone.com.ar“.
2. El servidor de 200.49.156.3 envía la consulta root server 198.41.0.4.
3. 198.41.0.4 le informa que el servidor con autoridad sobre “ar” es athea.ar,
cuya dirección IP es 200.16.98.2. (En realidad, informa la lista de todos los
servidores con tal autoridad, pero para simplificar el ejemplo tomaremos
solamente uno.)
4. 200.49.156.3 envía nuevamente el requerimiento a athea.ar (el cual,
recordemos, también tiene autoridad sobre “com.ar“).
5. athea.ar responde que la autoridad sobre smaldone.com.ar la tiene
ns1.mydomain.com cuya dirección IP es 64.94.117.213.
6. 200.49.156.3 envía ahora la consulta a ns1.mydomain.com.
7. ns1.mydomain.com informa que la dirección IP de
“blog.smaldone.com.ar” es 208.97.175.41.
8. Finalmente, 200.49.156.3 devuelve este resultado a la aplicación que
originó la consulta.
Mecanismos de caché
Cada vez que un servidor de nombres envía una respuesta, lo hace adjuntando el tiempo de
validez de la misma (TTL o “tiempo de vida“). Esto posibilita que el receptor, antes la
necesidad de volver a resolver la misma consulta, pueda utilizar la información previamente
obtenida en vez de realizar un nuevo requerimiento.
Esta es la razón por la cual los cambios realizados en el DNS no se propagan
instantáneamente a través del sistema. Dependiendo de la naturaleza de los mismos (y de la
configuración de cada servidor), la propagación puede tardar desde algunos minutos hasta
varios días.
Correo electrónico y resolución de nombres
Normalmente los usuarios de correo electrónico redactan su mensajes usando un cliente de
correo y enviándolo a través de un servidor SMTP provisto por su ISP o a través de un
sistema de correo vía web (webmail). En cualquier caso, una vez que el mensaje es recibido
por el servidor, debe ser entregado al destinatario. Aquí interviene el sistema DNS:
1. El servidor del emisor solicita al DNS (de acuerdo al mecanismo analizado
anteriormente), la entrada MX del dominio del receptor del mensaje. MX
significa “mail exchanger“, esto es, el nombre del servidor (o los
servidores) encargado de recibir los mensajes destinados a determinado
dominio.
2. El DNS devuelve el FQHN y la dirección IP del mail exchanger.
3. El servidor del emisor se conecta al puerto 25, mediante TCP, del servidor
del destinatario y entrega el mensaje según el protocolo SMTP.
4. El proceso podrá continuar si el servidor receptor del mensaje no es el
último de la cadena. Existen servidores que actúan como “puertas de
enlace” o “gateways” de correo electrónico, y que se encargan de recibir
los mensajes de determinados dominios para luego enviarlos a otros
servidores.
Tipos de registro en un servidor de nombres
Un servidor de nombres puede almacenar distinta información. Para ello, en cada zona de
autoridad dispondrá de entradas de distinto tipo. Entre los más importantes se encuentran:
• A (Address): Este registro se utiliza para traducir nombres de hosts del
dominio en cuestión a direcciones IP.
• CNAME (Canonical Name): El nombre canónico es un alias para un host
determinado. (No define una dirección IP, sino un nuevo nombre.)
• NS (Name Server): Especifica el servidor (o servidores) de nombres para
un dominio.
• MX (Mail Exchange): Define el servidor encargado de recibir el correo
electrónico para el dominio.
• PTR (Pointer): Especifica un “registro inverso“, a la inversa del registro
A, permitiendo la traducción de direcciones IP a nombres.
• TXT (Text): Permite asociar información adicional a un dominio. Esto se
utiliza para otros fines, como el almacenamiento de claves de cifrado,
“DomainKeys” o “Sender Policy Framework“.
Bind, “el” servidor de nombres
Prácticamente el único software utilizado en los servidores de nombres de Internet es bind
(”Berkeley Internet Name Domain“), creado originalmente en la Universidad de California, y
actualmente propiedad del Internet Systems Consortium.
Este programa, distribuido bajo una licencia libre, es utilizado en prácticamente todos los
sistemas Unix del mundo. Esto ha sido considerado un problema de seguridad, al punto que
se ha propuesto la migración de algunos root servers a otro sistema, ya que la aparición de
algún problema de seguridad en bind podría implicar la caída de todo el DNS de Internet.
Uso del DNS en una red local
Ya en redes de tamaño medio (quizás más de 5 equipos) es conveniente la utilización de
DNS. Esto nada tiene que ver con el DNS de Internet (aunque el servidor local puede estar
vinculado a este sistema).
Básicamente, es conveniente montar un servidor local de DNS por los siguientes motivos:
• Agilizar el acceso a Internet: Al tener un servidor de nombres en
nuestra propia red local (que acceda al DNS de nuestro proveedor o
directamente a los root servers) se agiliza el mecanismo de resolución de
nombres, manteniendo en caché los nombres recientemente usados en la
red y disminuyendo el tráfico hacia/desde Internet.
• Simplificar la administración de la red local: Al contar con un DNS
propio (ya sea uno o varios servidores de nombres) es posible definir
zonas locales (no válidas ni accesibles desde Internet) para asignar
nombres a cada uno de los hosts de la LAN. De esta forma es posible, por
ejemplo, referirnos a la impresora de red como “hplaser.mired.local” en
vez de “192.168.0.2” y a nuestro servidor de correo interno como
“smtp.mired.local” en vez de “192.168.0.3“. (Pensemos, por ejemplo, que
ocurriría con las configuraciones de las aplicaciones si un día decidimos
cambiar el esquema de direcciones IP de nuestra red.)
Problemas del DNS
El principal problema que presenta el DNS es que, al estar basado en UDP (protocolo de
transporte que no garantiza la recepción de la información enviada), tanto las consultas como
las respuestas pueden “perderse” (por ejemplo, a causa de congestionamiento en algún enlace
de la red). Es común apreciar cómo, en el caso de servidores y redes no muy bien
configuradas, la resolución de nombres se resiente sensiblemente ante cualquier anomalía
(saturación de tráfico o del servidor de nombres local).
Otro inconveniente, que ya hemos hecho notar, es la lentitud de la propagación de las
modificaciones en el sistema, producto de la propia arquitectura del mismo.
Pero quizás el mayor problema no sea inherente al sistema mismo, sino a la pésima
configuración de los servidores de muchos ISP. Fibertel, el proveedor que utilizo, es un
notable ejemplo de esta falencia. Una buena solución a esta situación es ejecutar un servidor
de nombres en alguna PC de la red local, de forma tal que se comunique directamente con los
root servers (evitando de esta forma pasar a través de los servidores de nombres de nuestro
proveedor).
Herramientas para aprender más
En sistemas Unix el comando dig (ver “man dig“) permite realizar requerimientos “a mano”
para poder investigar un poco más sobre el funcionamiento del DNS y, cómo no, también
para detectar y solucionar problemas en la red.
Los usuarios de sistemas Windows disponen del comando nslookup (aunque no tan potente
como dig), para el mismo propósito.
Lectura adicional
Ubicación en la pila de
protocolos
Aplicación DNS
Red IP