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Antes de juzgar, fjate bien que tus ojos que estn tan pendientes de los posibles errores de tu hermano,

No sean ciegos a tus propios errores

Antes de juzgar, recuerda que:

Una historia tiene siempre dos versiones y

Las dos versiones son verdaderas.

Antes de juzgar, piensa que

lo que hoy ests condenando

Podra convertirse en tu realidad maana.

Antes de juzgar, recuerda que inevitablemente,

Hay en cada historia, una parte muy pequeita

A la que tu nunca podrs llegar

Antes de juzgar, escucha en el silencio de tu corazn

Generalmente es all donde encontramos las grandes verdades.

Antes de juzgar, entiende que no sern mil palabras

Las que te aclararn los malos entendidos

Todo lo contrario, te con fundirn ms

Antes de juzgar, observa los ojos,

Son mucho mas reveladores que las palabras.

Ellos nos darn la prueba irrefutable de la verdad.

Antes de juzgar, observa atentamente a tu alrededor

Piensa cuantos han sido juzgados y condenados injustamente.

Antes de juzgar recuerda que,

Tu mismo, puedes ser

Vctima de calumnias y

cualquier momento puede suceder

no sepas o no puedas defenderte.

Antes de juzgar, mrate en el espejo

Y observa con atencin tu semblante,

Piensa en tu vida y

pregntate si ests en condiciones

de ser juez de tu hermano

Antes de juzgar, recuerda que

Cristo fue juzgado, condenado y crucificado

Sin derecho a la defensa

El verdadero justo es aquel que se siente culpable, a medias, de tus faltas.

Slo el idiota y el genio infringen la ley hecha por el hombre; y son los que estn mas cerca del corazn de Dios.

Slo cuando te persiguen te vuelves veloz.

Es posible que un hombre se suicide en defensa propia.

Puedes juzgar a los dems slo segn el conocimiento que tengas de ti mismo. Dime ahora: Quin de nosotros es culpable y quin es inocente?

Incluso las mscaras de la vida, son mscaras de un misterio profundo.

Quien puede poner el dedo en la lnea que separa el bien del mal, es el que podr tocar la orla del vestido de Dios.

Si tu corazn es un volcn, Cmo esperas que florezcan rosas en tus manos?

A menudo pedimos prestado a nuestro maana , para pagar las deudas de nuestros ayeres.

La diferencia entre el hombre mas rico y el mas pobre no es sino un da de hambre y una hora de sed.

La generosidad no consiste en que me des lo que necesito mas que tu, sino en que me des lo que tu necesitas mas que yo.

Cuando das la espalda al sol, no ves ms que tu sombra.

MERCEDES

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