Está en la página 1de 2

Estudios y Capacitaciones

¿Dónde estás parado hoy? ¿Si miras para atrás, que ves? ¿Qué hiciste o estás haciendo
para enfrentar el día de mañana?
¿Terminaste el secundario y no sabes si seguir estudiando o no? ¿Dejaste el secundario
por la mitad? ¿Tenés materias previas? ¿No lograste terminar la primaria?
Estudiar no se trata de tener una gran profesión para ganar mucha plata, el estudio es
una herramienta que mantiene nuestra mente ágil, nos prepara, da seguridad, confianza,
firmeza, nos hace útiles en los caminos de Dios.
Pensemos en esto:

Hay personas que no pueden estudiar (personas mayores que vos, infancia
trabajadora...). Están en desventaja para integrarse en la sociedad. Este no es tu caso.
Sos afortunado por vivir en una sociedad que te ofrece oportunidades educativas, es
decisión tuya beneficiarte de ellas. No dejes pasar la oportunidad.

La educación ayuda a las personas a forjar un pensamiento más crítico y autónomo, a


crecer personalmente como seres sociales y competentes, a tener ideas propias y a
adoptar un posicionamiento más claro y consecuente ante las diversas situaciones que
tarde o temprano se plantean en la vida.

Un joven reflexionaba de esta forma: “lo que me suele pasar es que me propongo hacer
algo y no lo cumplo, me cuesta ponerme a estudiar... Nunca he hecho un horario. A
veces llego a pensar que el problema de lo que me pasa es que no tengo motivos para
estudiar, es un aburrimiento, una rutina...” El estudio no es algo que se hace a sí
mismo, es algo que necesita ser motivado (estimulado) para que nazca y se mantenga.
Encontrará la motivación para el aprender, pensá a dónde querés llegar, cuál es tu meta,
y no vas a parar de capacitarte hasta alcanzarla. Sin objetivos damos vueltas en círculos.
(Donde no hay visión, el pueblo se extravía. Proverbios 29:18)

BUSCANDO MOTIVOS PARA ESTUDIAR


Parábola de los talentos

Un hombre rico dio a uno de sus criados cinco monedas. Al segundo le dio dos
monedas y al tercero le dio una moneda. Me las devolveréis cuando regrese. Marchó
de viaje y al cabo de un tiempo regresó. Llamó a sus criados y les pidió las monedas.

El primero había negociado con las monedas y le entregó diez. “Bien, siervo bueno y
fiel. Sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré. Entra en el gozo de tu señor.” Le
dijo

El segundo de la misma manera negocio y le entregó cuatro. ““Bien, siervo bueno y


fiel. Sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré. Entra en el gozo de tu señor.”
dijo

El tercero por miedo a perderla, la enterró y se la entregó.” “¡Siervo malo y perezoso!


¿Sabías que cosecho donde no sembré y recojo donde no esparcí? Por lo tanto, debías
haber entregado mi dinero a los banqueros, y al venir yo, habría recibido lo que es mío
con los intereses. Quitadle la moneda y dadlo al que tiene diez.
A modo de moraleja: tenemos la obligación moral de aumentar lo que recibimos.
Tenemos que CRECER como personas y eso significa desarrollar al máximo nuestras
capacidades para realizar nuestra aportación al desarrollo y beneficio de nuestra
colectividad.

Muchas veces para interpretar la palabra de Dios también necesitamos conocimientos,


hay palabras que no utilizamos a diario y por no conocerlas podemos darle un sentido
incorrecto a lo que Dios quiere hablarnos a través de ella.

Estudiar nos abre puertas, nos lleva a conocer más gente (profesores, maestros,
auxiliares, directivos) quienes necesitan conocer a Cristo. Si tenemos la visión de Dios
incorporada en nuestras vidas, a todo lugar que vayamos vamos a hablar del Señor.

Retoma de donde te quedaste, no pierdas tiempo, proponete metas claras, hoy en día hay
muchas oportunidades (colegio nocturno), Dios quiere usar tu vida más allá de lo que
vos imaginas. No te conformes con tu experiencia, capacitate y anhela saber más.
Preparate para servir a Dios excelencia. Saca de tu boca el YO NO PUEDO, porque con
Cristo podemos hasta lo imposible.

Metete en los estudios de la iglesia, conocé a fondo la palabra de Dios para cerrarle la
boca al enemigo cuando venga a desafiarte.

El tiempo es AHORA.

A los jóvenes: Seguro que cualquiera de las personas mayores pueden decirle a los
jóvenes que aprovechen a estudiar ahora, lo que pasaron por la experiencia saben que a
medida que crecemos se hace cada vez mas difícil estudiar (pero no imposible)

También podría gustarte