Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Moscas
Moscas
Era Bárbara. Estaba decidida a no dejarle vivir en paz. Aún con todo, y
después de todo, conservaba su número de teléfono.
Él pagaba el resto de recibos. Por eso, desde las dos últimas semanas
vive sin electricidad ni agua corriente. Y desde que Bárbara se asomó a
la ventana colándose en el jardín, y pudo ver todo aquel desastre, vive
con las cortinas corridas, veinticuatro horas. Joder, cómo la odia.
Bárbara es su calendario.
1
- ¿Qué quieres?
- Hablar, solo hablar.
- Voy a colgar.
- Solo dedícame un momento, por favor…
- No pienso perder ni un solo segundo más.
- … y no volveré a llamar.
Bárbara piensa que todo lo que es importante para ella debería serlo
también para los demás. Es una de esas personas que devoran libros
ridículos de autoayuda y manuales divulgativos de psicología cutre, y lo
que es peor, tratan de aplicarlo en la vida real.
Cada vez que Bárbara o alguien comienza una frase con “es importante
que…” o alguna fórmula similar, puedes apostar a que le sigue un
consejo barato de algún gurú gilipollas.
- ¿Sabes lo que es importante para mí? Mis putos discos. ¿Por qué
no me traes mis discos, eh, Bárbara, eh, cielo, quieres? ¿Qué
cojones has hecho con ellos?
- Los vendí, saqué unos doscientos euros. Me compré dos bolsos.
Jódete.
- ¿Sí? Bien, yo me he comido a tu perro. Que te jodan, buenas
noches.
2
La botella de ginebra y el calor del fuego, la noche cerrada y las moscas.
Joder, cómo detesta a esas putas moscas. Está borracho y las odia y
ese puto hedor y el teléfono y su pierna llena de astillas y todo. Ve una
mosca en la pared.
Cada vez hace más calor, pero él se siente helado, está perdiendo
sangre.