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Cristóbal Colón

1451 - 1506 (Genova, Italia)

En el año de 1451 nació en Génova

(Italia) Cristóbal Colón, hijo del cardador de

lana Doménico Colombo y de Susana

Fontanarossa. Su familia era de tradición

tejedora y mantenía un taller en la parte baja

de la ciudad. Desde muy joven, Cristóbal

demostró que no tenía intenciones de

mantenerse ligado a los oficios manuales y

comenzó a probar suerte en el mar.

Sobre sus memorias, Cristóbal escribía en 1501: "De muy pequeña edad

entré en la mar navegando, y lo he continuado fasta hoy. Ya pasan de cuarenta

años que yo voy en este uso. Todo lo que falta hoy se navega, todo lo he andado".

En la década de 1470, Colón recorrió el mar Mediterráneo, llegando hasta

la isla de Quío (o Chío) y a las aguas de Túnez. Luego viajó hasta Inglaterra,

desde donde realizó una travesía a Islandia. A su regreso se estableció en

Portugal y se dedicó, junto a su hermano Bartolomé, a dibujar cartas marinas

(portulanos) para venderlas en Lisboa. De esa manera, los Colón se vincularon a

importantes geógrafos de la época como Fernao Martins o Paolo del Pozzo

Toscanelli.

También participó en empresas bélicas, como el enfrentamiento entre

Renato de Anjou y el rey de Aragón, Juan II, por la sucesión a la Corona de

Nápoles. Se afirma que, al amparo de tantas guerras y conflictos como entonces

había, ejerció de corsario, actividad muy lucrativa y reconocida hasta en los

tratados internacionales de la época.

En esta misma época Cristóbal aprendió un latín rudimentario que le

serviría para leer las obras de los sabios. Además, fue comisionado a efectuar un

viaje a las islas de Madera para adquirir un cargamento de azúcar.

Según cronistas contemporáneos, Colón llegó a las costas del sur de

Portugal (Lagos), cerca de Sagres, tras un durísimo combate naval acaecido cerca

del cabo de San Vicente, el 13 de agosto de 1476. Incendiado su barco, Colón


salvó su vida agarrándose a un remo y nadando hasta la costa. Empezaba la

estancia colombina en Portugal, que duró casi diez años, tan importantes y

decisivos como misteriosos. Dicen los cronistas que Colón, una vez repuesto,

marchó de Lagos a Lisboa, donde se dedicó al comercio.

En 1477 viajó hasta Inglaterra e Islandia, y en 1478 se movía entre Lisboa

y el archipiélago de Madeira con cargamentos de azúcar. En 1479 se casó con

Felipa Moniz de Perestrello, hija del primer gobernador de Porto Santo de

Madera, con quien tuvo a su hijo Diego, futuro virrey de las Indias.

En 1483, Colón tuvo la oportunidad de conocer las factorías portuguesas en

las costas de África. Con todo este bagaje trazó su proyecto de alcanzar las

Indias por el oeste. Pidió consejo al sabio florentino Pablo Toscanelli, quien le

indicó el camino del océano que a su juicio era más corto que el que buscaban los

portugueses por la costa de África.

Toscanelli asignaba al globo terrestre dimensiones menores de las que tiene

en realidad. Según sus cálculos, a 12.000 kilómetros al oeste de Lisboa, por el

océano, se llegaba a las costas de China. Colón, partidario también de la

redondez de la tierra, llegó a la conclusión de que la ruta más cómoda debía pasar

por las Islas Canarias desde donde bastaría navegar 5.000 Kms. al oeste para

llegar a Las Indias.

La etapa portuguesa de Colón culminó en 1485, cuando, rechazado su

proyecto por una comisión designada por el rey Juan II y muerta su esposa, se

trasladó a España junto con su hijo.

En 1485 Colón presentó su proyecto a la reina Isabel de Castilla quien

ordenó pasarlo a una comisión de monjes y nobles para que dictaminaran al

efecto. Después de seis años de gestiones ante la Corte y de haber sido rechazado

el Proyecto en dos oportunidades el proyecto fue aceptado. El 17 de abril de 1492

se firmaron las Capitulaciones de Santa Fe, "Partida de nacimiento del

descubrimiento de América", documento histórico e importantísimo que contiene

las bases y condiciones para la realización del viaje de descubrimiento. Poco

antes había tenido a su segundo hijo, Hernando, fruto de la unión con Beatriz

Enríquez de Arana.
Por las Capitulaciones de Santa Fe, Colón recibió de los Reyes el

tratamiento de Don que lo elevaba a la condición de hidalgo; el título de

Almirante de las islas y tierra firme que descubriera, con carácter perpetuo y

hereditario; el nombramiento de Virrey y Gobernador de dichas tierras, con el

derecho de proponer candidatos para el gobierno de las mismas. Por último, se le

reservó a Colón la décima parte de "cualquier mercadería, perlas, piedras

preciosas, oro, plata, especiería é otra cualquier cosa é mercaderías de cualquier

especie que se compraron, trocaren, fallaren, ganaren o hobieren dentro de los

límites del dicho Almirantazgo".

Una vez concluido el viaje que permitió a Colón arribar a costas

americanas, continuó realizando empresas para la corona de España. Sin

embargo, a pesar de haber emprendido tres viajes más hacia América y ser

reconocido como un gran navegante y explorador, nunca llegaría a saber que

había alcanzado un continente desconocido para los europeos de aquel entonces.

Asimismo, tuvo que enfrentar muchos problemas, tanto con la corona como

con los primeros pobladores de la isla La Española, debido a su incompetencia

como administrador y gobernador de las nuevas posesiones.

A los 51 años de edad, Cristóbal Colón emprendió su cuarto y último viaje

a las Indias, zarpando del puerto de Cádiz el 11 de mayo de 1502. Sus

instrucciones eran las de descubrir más tierras y buscar un paso a las codiciadas

islas de las especias.

Por otra parte, a raíz de los problemas sufridos en La Española, se le

prohibió detenerse en aquella isla y la corona despojó a Colón de sus facultades

administrativas y envió a Nicolás de Ovando como nuevo gobernador de la

colonia española. De hecho, una vez llegado a las Antillas, Ovando no permitió

el desembarco de Colón en Santo Domingo, donde pretendía cambiar uno de sus

buques por otro de mejores condiciones marineras.

El 20 de mayo de 1506 muere en una humilde casa de Valladolid y en la

más absoluta soledad, el hombre polémico y misterioso, autodidacta y gran

observador, descubrió el Nuevo Mundo el 12 de octubre de 1492, fue el primer

almirante, virrey y gobernador de las Indias, y ensenó a los hombres de mar de su

tiempo el camino a seguir para ir y volver de América.


El conductor de la más extraordinaria de las expediciones, el descubridor

de un nuevo mundo ante los ojos de los europeos, murió sin saber exactamente

cuál importante había sido su hazana.

El Continente que debió llevar su nombre fue bautizado por error con el

nombre del navegante Américo Vespucio. Independientemente de la conducta que

observara Cristóbal Colón en los diversos viajes descubridores, su trato con los

naturales y los posibles actos de corrupción, apropiación indebida de bienes que

pertenecían a la Corona española, el acontecimiento protagonizado por él en 1492

no tiene precedentes en la historia de la humanidad.

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