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Numero 11
Numero 11
SUMARIO
Editorial Pág.1
Autorizar el mundo. Por Pablo Pineau Pág. 4
Marzo de 2007 Apuntes sobre la autoridad y la escuela.
AÑO 2 Por Mariano Narodowski Pág. 5
mos
Reporte de investigaciones.
N o s m u d a Por Gabriela Diker Pág. 6
eléfonos
Nuevos t 662
Entrevista a Jorge Apel Pág. 10
Autoridad. Acción y autonomía.
11)4824.0
(0 Por Estanislao Antelo y María Aleu Pág. 12
966
(011)6698.1 4° piso J. La filatelia en la escuela Pág. 14
Vidt 2198
JL
CP: C1425D
Publicación de distribución gratuita para las 22.800
escuelas primarias/EGB 1 y 2 de Argentina.
Permitida su reproducción citando la fuente.
La construcción de la
autoridad en la escuela
Lo que Ud. va a encontrar en las páginas de este primer número Todo esto puede ser relativamente cierto. Pero aún si lo es, la
de 2007 de 12(ntes), papel y tinta para día a día en la escuela no son pregunta del millón es: ¿qué hacer?
indicaciones acerca de qué hacer con el problema de la autoridad Obvio que no tengo la solución al problema (nadie la tiene). Pero
JORNADAS
en la escuela. Sería muy presuntuoso proponérselo y en realidad se me ocurren dos cuestiones que son resultado de algunas discu-
no es una tarea posible y eso por varias razones. La primera, que siones e intercambios con docentes de distintas escuelas. Pasaré a
se trata de un problema complejo en el que intervienen múltiples desarrollar brevemente ese par de conclusiones provisorias.
factores, muchos de los cuales exceden el marco escolar, aunque Una de esas conclusiones tiene que ver con lo siguiente: entiendo
obviamente lo impliquen. En segundo lugar porque, tratándose, que hoy la construcción de un modelo de autoridad debe, más
como dice el título, de una construcción, es imposible pensarlo allá de su contenido específico, ser fruto de una construcción
fuera del contexto en que vive cada institución. Lo que quiero de- colectiva, institucional, en el que la autoridad no sea atributo
cir con esto es que no hay una forma de construcción única para del docente sino de la institución y todo lo que ella instituye. En
lo que es autoridad como si se tratase de una mera abstracción. efecto, no parece haber peor modo de construir autoridad que
En tanto construcción, hay sujetos concretos en contextos con- hacerlo como una epopeya individual, que cada docente encara
cretos en los que dicha construcción puede ser posible. Y si bien por sí mismo. Porque entonces, sí, dependerá de los atributos per-
existen algunos atributos que caracterizan la noción de autoridad sonales de cada docente y convengamos que no todos tenemos las
y el modo en que la misma se manifiesta en la vida social y en la mismas potencialidades a tal efecto. Esta construcción se realiza a
escuela en particular, existen tantos constructos de “autoridad” través del trabajo cotidiano en el que los docentes efectivamente
como instituciones existen en la realidad. forman parte de un equipo en el que se consensúan criterios y
No voy a ser redundante con algunas de las interesantes aprecia- hasta se validan los disensos en la medida que son conocidos por
ciones que sostienen los especialistas convocados para escribir en todos y constituyen parte del rico intercambio de experiencias
este número. Pero sí me gustaría plantear, a modo de introduc- y pareceres que debería darse entre sus miembros. Los alumnos
ción, algunos elementos que espero sirvan para la reflexión. deben ver a cada docente como parte de un todo, es decir, donde
En primer lugar es evidente que se trata de un problema que cada docente está respaldado fuertemente por el resto del equipo,
nos preocupa a todos. Da la sensación de que hoy es difícil sus pares y directivos. Esta noción de respaldo no significa que
de formación sostener una imagen de autoridad frente a los alumnos, quienes todos sean uniformes en su manera de pensar y actuar, sino que
parecen cuestionar todo dejándonos en una especie de situación el docente pueda transmitir en su trabajo cotidiano a los alumnos
docente de orfandad, en la medida en que entendemos que contar con el que lo que dice y hace es fruto de un trabajo en equipo y de
atributo de la autoridad frente a nuestros alumnos es una de las discusiones que se dan en su seno. Cuando digo construcción
continua 2007 condiciones fundamentales que hacen posible que nos paremos colectiva, no pienso sólo en las normas o cuestiones disciplinarias
frente al aula y podamos llevar a cabo nuestra tarea cotidiana de de la escuela, pienso en todos los asuntos que interesan en una es-
enseñar. Y he ahí, creo, uno de los vericuetos por los que creo es cuela: normas, pero también contenidos, organización cotidiana,
posible entrar en la cuestión. En efecto, da la sensación de que la eventos, vínculo con las familias, proyectos, etc.
autoridad es un atributo separable de nuestra tarea, mucho más Como siempre, quizás, una analogía extraída de otras disciplinas
relacionado con un rasgo de nuestra personalidad: hay quienes te- pueda servirnos de ayuda. Los psicólogos saben que en una familia
nemos un “carácter más fuerte” o somos más seguros en nuestros es importante la presencia activa de una función materna y una
vínculos sociales, lo que predispone a que podamos enfrentarnos función paterna para la constitución de la personalidad del niño.
a los alumnos con mejor o peor “background”. O bien, da la im- Si uno entendiera estas funciones como un atributo de personas
presión de que existen muchos chicos, grupos, familias, etc. para reales y concretas, los chicos pertenecientes a familias donde algu-
quienes el docente no tiene autoridad alguna (o muy limitada) no de los padres falta sufrirían carencias constitutivas graves. Sin
para imponer los criterios propios del trabajo áulico. O que la embargo se sabe que no es así. Pongamos el caso de una madre
Información sociedad ha modificado los modos de “acreditación” de la auto- soltera que cría a su hijo sola: ¿cómo aparece la función paterna?
en páginas 8 y 9. ridad llevando las relaciones sociales a un nivel de horizontalidad Aparece desde la misma madre. Una función es cont.
flagrante y a una debilidad congénita de las normas. simbólica y se da a partir de la manera en que la pag 2
madre (en su vínculo, su comunicación, su relación con su hijo) falsos, eso sucede y es lógico, es normal. Lo que ocurree es que si
hace presente en su discurso, en sus acciones, en sus actitudes, queremos ser realmente profesionales, tenemos que saber que esos
una función de padre. Lo hace de mil maneras distintas: no deja sentimientos existen, pero que deben ser elaborados debidamen-
dormir a su hijo en su cama, invoca normas, invoca autoridad de te2 para no perder de vista que nuestra tarea consiste en enseñar
un tercero (a veces inexistente físicamente), tiene otros intereses y ayudar a los chicos a ser mejores personas de lo que son. La
que no son su hijo, etc.1 Con la noción de autoridad pasa algo autoridad se construye como efecto del trabajo serio, responsable,
similar: el docente tiene que poder transmitir que hay un tercero el entusiasmo por el conocimiento, por enseñar. Todos sabemos
(la institución, con sus normas, el equipo docente, la dirección) que hay docentes con una buena cuota de sadismo (claro, civiliza-
que está de alguna manera “detrás” de sus actos, sus palabras, do, es raro que un docente aparezca estrangulando a un alumno,
sus acciones, sus actitudes no sólo cuando encara alguno de los pero sí que lo “haga sufrir” de mil modos). Todos sabemos que
famosos “problemas de conducta” sino en todos los actos del día: hay docentes que en un acto en que hay alumnos actuando o
cuando saluda, cuando enseña, cuando pide, cuando da, etc, etc, presentando un trabajo mandan mensajitos desde su celular, etc.,
etc. Y para que el docente pueda transmitir ese respaldo, aun sin etc. Por lo que, nada de todo esto tiene sentido si uno no asume
proponérselo, tiene que haber efectiva y realmente una institu- un compromiso ético con lo que hace.
ción respaldándolo (lo que no significa apañándolo) a través del En síntesis, la autoridad es una construcción. Esa construcción
trabajo en equipo, construyendo un NOSOTROS con el que debería ser un producto institucional (directivos, docentes,
todos puedan identificarse. Identificarse críticamente, no como alumnos, padres, no docentes). Cada uno desde su lugar y sus
parte de una masa indiferenciada. atribuciones. Porque no todos los votos valen lo mismo. Y esa
Y concomitantemente con esto, la segunda conclusión que quiero construcción se hace trabajando. Esto no significa que no vaya a
transmitir: la construcción de la autoridad no se efectúa antes haber padres o chicos que “patoteen a docentes”. Esto no significa
o después del trabajo de enseñar, como si fuera una condición que no sea necesario una fuerte discusión acerca del significado y
separada del trabajo de enseñanza cotidiano. No hay un “tengo los contenidos que debe tener la autoridad en nuestro tiempo y
que tener autoridad para que me respeten y así poder enseñar”. nuestra sociedad. Pero es una manera de mirar las cosas.
Está comprobado que los alumnos respetan fundamentalmente
a los docentes que trabajan, que ponen su esfuerzo para que el Por Gustavo Gotbeter
alumno aprenda, que es justo aunque pueda equivocarse, que 1> Estas menciones son meros ejemplos. En esta caracterización estoy siendo un tanto reduccionista,
no goza “bochando” ni siquiera a esos alumnos a quienes tantas pero vale para lo quiero transmitir.
veces tenemos ganas de “retorcerle el cogote”. Porque no seamos 2>`Alguna vez deberíamos tratar este tema en profundidad.
Cursos en preparación:
• Problemas actuales en la gestión de Instituciones
educativas.
AUTORIZAR EL MUNDO Doctor en Educación (UBA). Profesor universitario (UBA, UNLu) y en institutos
de formación docente. Integrante del Área de Educación y Sociedad de FLACSO.
Ha escrito diversos libros y artículos sobre historia, teoría y política de la educa-
Por Pablo Pineau ción. Actualmente ocupa la presidencia de la Sociedad Argentina de Historia de
la Educación.
La desigualdad era la única relación habilitada entre los sujetos, De acuerdo a esto, como sostiene el epígrafe de Steiner, la mejor
negándose la existencia de planos de igualdad o de diferencia. forma de autorización es la que se desprende de creer que el
Esto estimuló la construcción de mecanismos de control y conti- acto educativo vale la pena, y que puede inaugurar condiciones
nua degradación hacia el subordinado: «el alumno no estudia, no inesperadas. Así, si en las primeras clases es lícito que el docente
lee, no sabe nada». Cabe agregar, finalmente, que esta relación determine qué enseñar en uso de su autoridad pedagógica, debe
se repite entre el docente y sus superiores. La autorización sigue ser un fuerte objetivo que a lo largo del desarrollo del curso se
un camino jerárquico de un solo sentido, donde los ya autorizados expliquen los porqués, y a su vez aceptar que los alumnos pue-
autorizan a los nuevos. Al respecto, un profesor puede decir: “A den comprenderlos, pero no necesariamente compartirlos. Y que
mí no me tienen que autorizar mis alumnos porque ya me auto- también, en este último caso, no necesariamente el docente debe
rizaron mis docentes”, basándose en la comprensión del proceso modificarlos. En ese juego irreductible de posiciones y sujetos,
educativo como una operación mediante la cual los ya-Completos los habremos autorizado a crecer. Y lo habremos hecho nosotros
completan a los aún-Incompletos. también.
autoridad y la escuela
Tella. Su último libro es Dolor de Escuela, Editorial Prometeo.
Diccionario En una escuela, nada de todo esto ocurre entre adultos y niños.
El Diccionario de la Real Academia Española, en su vigésima se- Los alumnos no eligen voluntariamente a sus maestros ni le dele-
gunda edición del 2001 nos dice que la palabra autoridad viene gan sus decisiones. Es más, ni siquiera están en condiciones de
del latín auctoritas, -atis y brinda seis acepciones posibles, todas elegir no ir a la escuela. No los suponemos capaces de tomar esas
ellas femeninas: decisiones por sí mismos y por eso tomamos cuenta de ellos. Les
enseñamos a dialogar. Les enseñamos a acordar.
.Poder que gobierna o ejerce el mando, de hecho o de derecho. Los educadores éramos (¿lo somos?) esas personas diferentes que
.Potestad, facultad, legitimidad. nos hacíamos cargo de los chicos. Hacerse cargo en un sentido
.Prestigio y crédito que se reconoce a una persona o institución profundo, visceral, con técnica pero con pasión. Por eso, la última
por su legitimidad o por su calidad y competencia en alguna ma- palabra es nuestra: todo proceso de participación para que los
teria. alumnos tomen decisiones estará propuesto por el educador y es
.Persona que ejerce o posee cualquier clase de autoridad. este el que asume todos los riesgos de su tarea. Muchas veces,
.Solemnidad, aparato. esa última palabra es “no” y debemos estar dispuestos a sostener-
.Texto, expresión o conjunto de expresiones de un libro o escrito, lo a pesar de las presiones. Podemos equivocarnos, claro. Y cuan-
que se citan o alegan en apoyo de lo que se dice. do nos equivocamos debemos reparar. Pero ni los riesgos, ni los
errores ni las presiones nos eximen dejar de ser lo que somos.
La autoridad es, como se ve, muchas cosas. La autoridad es Por eso, cualquier convicción democrática y de respeto de los de-
poder, gobierno y ejercicio del mando. Es una facultad para ejer- rechos de los chicos sostiene que la autoridad y la asimetría que
cerlo. Es legitimidad o reconocimiento para actuar. Autoridad es la fundamenta son ineludibles en cualquier escuela. Necesitamos
también la persona que ejerce ese poder. Es el rito por medio del seguir discutiendo acerca de la mejor forma de su ejercicio, de-
cual lo hace. Es la referencia para apoyar lo que se hace o lo que bemos construir métodos didácticos que tiendan a una autoridad
se deja de hacer. Es la ley. justa y que desarrollen en los alumnos altos niveles de autonomía
para que cuando adultos ellos puedan tomar sus propias decisio-
nes y puedan hacerse cargo de las mismas.
Escuela
La escuela había sido siempre la imagen palmaria de la autoridad
en cualquiera de las seis acepciones enumeradas. Pocos osaban
desafiar esa autoridad y todos contribuían a sostenerla. La legi- Ley
timidad de la autoridad de la escuela era irrebatible y el mero La asimetría existente entre adultos y niños está regulada por un
hecho de ser un docente brindaba autoridad; es decir, posibilidad conjunto de normas acerca de lo que está bien y lo que está mal.
de ejercicio de poder. Esa legitimidad podía ser cuestionada en su Los adultos y los niños deben practicar esa ley pero desde luga-
ejercicio pero no en su origen: un maestro podía hacer las cosas res diferentes porque los adultos son los que la estipularon y los
mal y demostrar que no era un buen maestro pero eso no dañaba responsables principales de su cumplimiento, y si bien tratamos
la legitimidad del “ser maestro”. de que los chicos participen en esa construcción de acuerdo a la
El poder de la escuela y del maestro eran datos insoslayables edad y a los intereses, es indudable que la responsabilidad acerca
a punto tal de que hasta los castigos físicos eran relativamente de la transmisión de lo correcto es adulta.
tolerados. Por eso, la pedagogía asumía con tanta fuerza este
postulado que durante siglos estuvo preocupada no por la auto- Por lo tanto, más que cumplir con la ley, los niños tienen derecho
ridad sino por el autoritarismo, no por el poder sino por el abuso a la ley porque su internalización efectuada de una forma creativa
de poder. A diferencia de lo que pasa ahora, el problema antes aunque rigurosa es el único camino posible para construir su pro-
no era construir autoridad porque la autoridad estaba construida pia ley. Formarse con ley puede llegar –debe llegar- a que algunas
previamente a su ejercicio cotidiano. El problema era desarrollar de las mismas sean cambiadas por adultos que introyectaron
una autoridad que no se “exceda” ni dañe. El cometido era que viejas leyes cuando niños y que ven la necesidad de renovarlas.
los maestros no maltraten y que cuando aplicaren sanciones o Los que se educan sin ley se forman en la perversión, la anomia,
castigos lo hagan ateniéndose a un método racional y exacto en el la idea de que todo da lo mismo y que lo único que importa es la
que la sanción favorecería al alumno y no significase una simple salvación individual.
descarga emocional del adulto.
Desde el fin de la primera guerra mundial, toda la pedagogía
occidental se mostró proclive a equilibrar la autoridad escolar Adulto
tendiendo a evitar el desborde autoritario. Los docentes fueron Ser educador significa asumirse como un adulto autónomo, con
aprendiendo a no sobrepasarse en el ejercicio de una autoridad pensamiento propio y con responsabilidad sobre sí mismo y sobre
que “naturalmente” les era brindada por la sociedad. los alumnos. Ser educador significa estar concientes de que somos
portadores de la ley (ley que muchas veces está para ser revisada),
y que en tanto responsables acarreamos la última palabra.
Asimetría Tal vez la mayor victoria ideológica de la dictadura militar de
La razón que posibilitaba la existencia de la autoridad escolar era 1976 es habernos hecho creer que toda forma de autoridad es ne-
la asimetría; es decir, la radical diferencia existente entre las par- cesariamente represión, prohibición, terrorismo, tortura, muerte.
tes, en este caso, entre maestros y alumnos, entre adultos y niños La construcción de una autoridad justa y confiable dentro y fuera
o adolescentes. Si la relación entre esas partes fuese simétrica, de la escuela es una parte fundamental para la reconstrucción de
una parte se corresponde y equivale a la otra. Al contrario, cuando la escuela que se merecen nuestros alumnos.
la diferencia entre partes es asimétrica se supone la no-correspon-
dencia, la no-equivalencia.
En la escuela, docentes y alumnos no son equivalentes ni se co-
rresponden porque hay uno de ellos que debe responsabilizarse y
velar por los otros. Tal vez valga la pena recordar que los educa-
dores, y no los alumnos, estamos a cargo.
En muchas relaciones entre seres humanos, las partes se corres-
ponden y equivalen y el mecanismo sano que se utiliza para el
vínculo entre ellas es el acuerdo en base a un conjunto de reglas
aceptadas voluntariamente. Las relaciones de amistad, el matri-
monio, las sociedades laborales o la militancia política suponen
la adhesión voluntaria de personas iguales entre sí y si en algunos
casos existe una posición de mando se debe a que los iguales han
delegado la autoridad que poseían.
REPORTE DE Doctora en Educación. Investigadora Docente en la Universidad Nacional de Ge-
neral Sarmiento. Vicepresidenta del Centro de Estudios Multidisciplinarios (CEM).
INVESTIGACIONES
Autora de numerosos artículos en revistas especializadas y libros, entre los que
se encuentran La formación de maestros y profesores: hoja de ruta, junto a Fla-
via Terigi; Educar: ese acto político; Infancias y adolescencias: teorías y experien-
cias en el borde; Una ética en el trabajo con niños y jóvenes (en coautoría con
Por Gabriela Diker Graciela Frigerio). Además recibió becas y distinciones de distintos organismos
internacionales.
¿ES POSIBLE UNA EDUCACIÓN SIN AUTORIDAD?: prueba de que la autoridad ha fracasado: “únicamente un punto
de vista explícitamente o implícitamente funcionalista podrá con-
UNA MIRADA SOBRE EL PROBLEMA DE LA AUTORI- fundir la autoridad con el poder o con la violencia: de la similitud
observable de la ‘función’ (la obediencia), se deduce el modus
DAD EN LA EDUCACIÓN ESCOLAR DE ADOLESCEN- operandi (el mando coercitivo). No hay, en efecto, autoridad sin
obediencia. Pero lo contrario no es cierto. También obedecemos
TES Y JÓVENES1 a instancias que, sin embargo, carecen de autoridad. Y si obede-
cemos incluso a la fuerza, esta obediencia no confiere a aquélla
Las constantes alusiones a la indiferencia de los alumnos, la falta autoridad alguna.(...) Así enunciada, la autoridad no sólo excluye
de disciplina y, en su versión más extrema, a los fenómenos de todo recurso a los medios de coerción, sino que también se anula
violencia en la escuela secundaria, remiten de manera más o me- por el uso de la violencia. Por eso se opone a toda forma de auto-
nos directa, a la llamada “crisis de autoridad” en las instituciones ritarismo. Sólo aquel que por sí mismo no posee autoridad recurre
educativas a las que asisten adolescentes y jóvenes. a los medios de coerción” (Tassin, 2002:158-9). En este sentido
Esta crisis se reconoce en la escuela bajo dos perspectivas que Arendt ha señalado que la autoridad implica una obediencia en la
constituyen dos aspectos del mismo problema. Por un lado, en- que los hombres conservan su libertad.
contramos que la llamada crisis de autoridad en la escuela, y, en Los alumnos entrevistados en nuestra investigación, en general
particular, la crisis de la autoridad docente, se expresa básica- distinguen autoridad de coerción, más allá de que el efecto de
mente en términos de “falta de respeto a la autoridad”, la cual ambos tipos de vínculo sea el mismo. De hecho, la mayor parte de
se manifestaría a través de las transgresiones a las normas, la los entrevistados señala que los profesores que les merecen mayor
desobediencia, la indiferencia, la agresión, etc. En esta perspec- respeto no suelen recurrir a sanciones:
tiva, se suele atribuir la llamada falta de respeto a la autoridad
exclusivamente a los alumnos y se la asocia con componentes Con la de biología por ejemplo no aplica sanción, pero igual le hace-
individuales (falta de maduración, “carácter”, etc.), con factores mos caso, y a la de físico-química también (alumno 7º año EGB)
sociales y culturales y/o con situaciones familiares. En contraposi-
ción con esta mirada que responsabiliza a los estudiantes, encon- A uno que por nada ponga sanción yo no lo respeto (alumno 8º año
tramos en la escuela otra perspectiva que centra el problema en EGB)
los profesores, puntualizando no la falta de respeto a la autoridad,
sino más bien la “falta de autoridad” o la falta de legitimidad para Si el respeto a la autoridad no es resultado de la aplicación de
ejercer la autoridad. mecanismos de coerción, si, como dicen algunos alumnos, el uso
De una perspectiva o de otra, parece evidente que las bases de indiscriminado de modalidades coercitivas puede generar even-
ejercicio de la autoridad docente están siendo conmovidas, sea tualmente obediencia pero no respeto, cabe preguntarse qué es
porque los alumnos “no los respetan” sea porque los mismos do- lo que hace que los alumnos acepten la orientación de algunos
centes no la ejercen. A la vez, las modificaciones en los sistemas profesores y no la de otros. Si la autoridad no procede “obligando”
disciplinarios introducidas en los últimos años, alteran los proce- al otro a hacer algo (recordemos que según Arendt, la autoridad
dimientos coercitivos tradicionales en la escuela media y la efica- supone una obediencia en la que se conserva la libertad), ¿será
cia de la sanción como recurso disponible para poner en juego en que procede persuadiéndolo?
las situaciones en las que la autoridad encuentra su límite.2
Ahora bien, si la autoridad de los profesores de las escuelas a las
que asisten adolescentes y jóvenes se ve conmovida, si los meca- Autoridad no es persuasión
nismos de coerción y disciplina tradicionales están deslegitimados
y además, las nuevas estrategias de convivencia son percibidas co- Siguiendo con Arendt, lo contrario de la coerción, es decir el uso
mo ineficaces para instalar unas condiciones institucionales en las de la persuasión o incluso la argumentación -recurso cada vez más
que el trabajo educativo sea posible, cabe preguntarse: ¿es posible utilizado en las escuelas en el marco de los regímenes de convi-
una educación sin autoridad o asistimos a una reconfiguración de vencia-, tampoco supone ejercicio de la autoridad. Esto explicaría
las bases que sustentan el ejercicio de la autoridad en la escuela? que cuando se les preguntó a los alumnos si les parecía necesario
¿en qué casos, bajo qué condiciones los estudiantes reconocen que un profesor discuta con ellos las normas que establece (de
autoridad en sus docentes? comportamiento en clase o vinculadas con la asignatura que dicta)
o incluso si creían que era conveniente que les explicara su senti-
do, la mayor parte responde que no.
Autoridad no es coerción No, porque estamos en la escuela y hay que respetar lo que dicen los
profesores (alumno, 8º año EGB)
La definición del concepto de autoridad ha sido y es objeto de
extensos y complejos debates en el campo de la teoría política E:¿preferirías que los profesores discutan este tipo de normas con los
y la sociología. En primer término cabe señalar que el concepto alumnos?
de autoridad aparece generalmente asociado al de poder. Aunque A: No, bah, si los alumnos tienen algún problema que se lo digan,
algunas veces se los ha utilizado como sinónimos -en cuyo caso pero que no les pregunten a los alumnos por qué.
la cuestión de la relación entre uno y otro no constituye un pro- E: Y ¿Por qué?
blema-, por lo general, se ha considerado a la autoridad como un A: Porque cuando empiezan a hacer eso, los alumnos se empiezan
modo particular de ejercicio del poder. Esta perspectiva, que es a quejar por cualquier cosa; empiezan a tirar (sic) para hacer cada
propia de la esfera de la ciencia de la administración, considera a vez menos, terminan haciendo poco y se aprende menos. (alumno 2º
la autoridad como una relación de poder establecido e institucio- año Polimodal)
nalizado, en cuyo marco “el sujeto pasivo de la relación de poder
adopta como criterio de su propio comportamiento el mandato o En principio las respuestas dadas por adolescentes que asisten
la orientación del sujeto activo, sin evaluar por su parte el conte- a la escuela media resultan sorprendentes y no coinciden con
nido” (Stoppino, 1983:118). La autoridad provocaría obediencia la impresión generalizada que circula actualmente acerca de su
incondicional siempre que el mandato se reciba de cierta fuente, relación con las normas y con los adultos. Sin embargo, lo que
sin importar cuál es el fundamento de la autoridad, que en esta parece estar en juego aquí, es el reconocimiento de autoridad a
perspectiva puede radicar en la legitimidad del poder, tanto como los adultos que actúan como tales, que establecen unas normas,
en la violencia. unas reglas de juego que, aunque no se comprendan ni se conozca
En relación con el último punto, Etienne Tassin ha señalado de su sentido, estarían destinadas –por definición- a producir algún
manera terminante que la utilización del recurso a la fuerza es la efecto beneficioso sobre los menores. En términos conceptuales
podríamos sostener que los estudiantes rechazan las prácticas categorización de las respuestas obtenidas en las entrevistas,
argumentativas o persuasivas, dado que “la autoridad es incom- muestra que en la perspectiva de los alumnos, lo que opera como
patible con la persuasión, que presupone la igualdad y opera por fundamento de la autoridad es: a) el saber del profesor; b) la con-
un proceso de argumentación. Cuando se recurre a argumentos, fianza; c) la voluntad y el deseo de que los alumnos aprendan; d)
la autoridad está suspendida” (Arendt, 1972, citado en Tassin, el lugar que ocupan como interlocutores adultos; e) el respeto de
2002:158). las normas y de los otros. Desde ya, ninguna de estas cuestiones
Rechazar las prácticas argumentativas, supone entonces también da fundamento, aisladamente, al reconocimiento de la autoridad.
el rechazo de la instalación de una suerte de “orden igualitario” en De hecho, una nota característica del discurso de los estudiantes,
el que aparecen borradas las marcas de la asimetría que atraviesa es que en todos los casos aparecen combinados varios o todos los
toda relación pedagógica. En relación con este punto los alumnos elementos que acabamos de enumerar, en una demanda insistente
advierten que cuando un profesor se pone en pie de igualdad con de equilibrio: “ni tanto ni tan poco”.
los alumnos no hay reconocimiento de autoridad y, por lo tanto, Algunos de los elementos expuestos aquí presentan, desde nues-
tampoco respeto. tra perspectiva, dos tipos de novedades respecto de las formas
Hasta aquí, tenemos entonces que la autoridad supone siempre tradicionales de ejercicio de la autoridad docente: por un lado,
una asimetría, una estructura comunitaria jerarquizada y un res- aparecen puntualmente elementos nuevos. Entre ellos, la deman-
peto incondicional hacia la instancia reconocida como superior da de interlocución adulta, que puede vincularse con la crisis de
que no se basa ni en la coerción ni en el consenso. Lo que faltaría las familias y, su contracara, las nuevas formas de subjetividad
establecer es cuáles son las bases de ejercicio de la autoridad, o, adolescente; o la demanda de que los profesores respeten a las
dicho de otro modo, qué es lo que provoca el “respeto incondi- normas y a los otros, cuestión ésta que, en otras épocas, formaba
cional” cuando lo que se pone en juego no es ni la violencia ni la parte de los atributos morales propios del docente. Por otro lado,
persuasión. constituye una novedad el hecho de que los fundamentos de la
autoridad deban ser, en la perspectiva de los alumnos, cada vez,
demostrados. Si tradicionalmente era sobre todo la posición y
Las bases de la autoridad en la escuela desde la luego la titulación lo que garantizaba y legitimaba el ejercicio de
perspectiva de los alumnos la autoridad del docente, actualmente estos constituyen apenas
un punto de partida. El título no garantiza saber, la posición no
garantiza autoridad.
La respuesta a la pregunta por el fundamento de la autoridad no No se trata entonces de que no hay autoridad en la escuela.
puede buscarse únicamente en los atributos que posee o que ro- Mucho menos, como hemos señalado, que lo que haya sea “falta
dean a aquél que la ejerce, dado que la autoridad se “realiza” en de respeto a la autoridad”. Más bien se trata de la aparición de
el encuentro entre estos atributos y aquél que los reconoce como nuevas formas de ejercicio de la autoridad docente que suponen
legítimos. Dicho de otro modo, la autoridad “no es tal sino cuando su puesta a prueba permanente; la puesta a prueba de sus cono-
se la reconoce como tal. El respeto es la condición efectiva de una cimientos, de su capacidad para orientar a los jóvenes en su creci-
autoridad que es, a causa de su respetabilidad, la única razón de miento, para acompañarlos, para respetar las normas y a los otros;
ser de toda obediencia respetuosa” (Tassin, 2003:160). En este supone también, recordemos, la puesta a prueba permanente de
sentido es que se afirma que “la autoridad parece siempre un poco su deseo de que los chicos y chicas aprendan y de su capacidad
tautológica” (Antelo, 2003:22). Los alumnos entrevistados expre- para dar y tener confianza.
san así esa tautología: El punto es que se trata de una puesta a prueba permanente
en el marco de instituciones que, en conjunto, están perdiendo
A: …me da como que ella sabe que la tienen que respetar sin eficacia simbólica. De hecho, la llamada “crisis de autoridad
obligarlos docente”, aparece asociada en los discursos actuales a una crisis
E: ¿Y cómo sabe ella, por qué? más general que atraviesa a la escuela. Es en este marco que la
A: Y porque ella sabe que es la mayor autoridad en el curso (alumno autoridad se pone a prueba. Es en este marco que los docentes
2º año EGB) se enfrentan con la difícil tarea de reconstruir y resignificar sus
vínculos profesionales y personales con los alumnos; es en este
Me merecía respeto porque era una autoridad y tenía las cosas bien marco que se impone la necesidad de reinventar nuestro modo de
claras (alumna 3º año Polimodal) acompañar a los alumnos en su aprendizaje y en su crecimiento.
Pero hay algunas ventajas: los alumnos no piden respuestas, piden
La dimensión relacional de la autoridad queda expresada elo- escucha; los alumnos no piden resultados, piden oportunidad; los
cuentemente en estas citas: estamos en presencia de alguien alumnos reconocen el deseo y la voluntad en sus profesores, y los
que habla o actúa con autoridad cuando hay otro que respeta esa respetan por ello.
autoridad. Dicho de otro modo, la autoridad es legítima y eficaz
cuando los otros implicados en la relación la consideran legítima 1- Este artículo retoma algunos resultados de una investigación sobre el tema que se está
y eficaz. Desde esta perspectiva, no hay autoridad si no hay res- desarrollando en la UNGS.
peto por la autoridad (la expresión entonces “falta de respeto a la 2- Esto no significa, claro está, que no se utilicen estrategias coercitivas en el marco de los
autoridad”, tan usual en los ámbitos escolares, no tiene sentido regímenes de convivencia (de hecho, el recurso mismo a la norma tiene un componente coercitivo).
en este marco, dado que presupone que la autoridad puede existir El punto es que en tanto estas estrategias pierden legitimidad (y eficacia) se tornan más visibles los
con independencia de que se crea en ella y se la respete). Abordar problemas vinculados con el ejercicio de la autoridad.
el problema de la autoridad docente implica entonces abordar la 3- Recordemos que el término autoridad proviene del latín, auctoritas y significa “el poder de un
cuestión del reconocimiento y la valoración de aquello que está en auctor”, el poder de un autor, es decir, de aquel que crea, que habla o actúa en el punto de origen.
la base de su ejercicio funcionando como “potencia de origen”3 4- El término autoridad también se asocia al verbo augere, que significa acrecentar, aumentar. Es
(la validez de su universo de saberes de referencia, la legitimidad decir que la autoridad no sólo tiene que ver con el origen, sino también con que aquello que se gesta,
del Estado, la eficacia de la institución escolar) y también de sus pueda crecer y desarrollarse.
posibilidades de producir algún desarrollo personal y social.4
BIBLIOGRAFÍA CITADA
Porque obedecer es, digamos, hacerle caso al profesor, y respetar es que Antelo, E. (2003). “Lo que queda del maestro”. En: Antelo, E. y otros. Lo que queda de la escuela.
pensás que lo que él dice está bien; o sea que creés en lo que él te está Laborde Ed. Rosario.
diciendo: si te dice que algo está mejor, es porque seguro está mejor Stopppino, M. (1983). “Autoridad”. En: Bobbio y otros. Diccionario de Política. Siglo XXI. México.
(alumno 2º año Polimodal) Tassin, E. (2002). “Poder, autoridad, violencia y acción política (la crítica arendtiana de la
dominación)”. En: Frigerio, G. (comp.). Educar: rasgos filosóficos para una identidad. Santillana.
¿Cuál es la valoración que hacen los alumnos? ¿qué reconocen Buenos Aires.
como fundamento de ejercicio de la autoridad docente? Una
Segundas Jornadas
JORNADAS 2007 Problemas actuales en la
gestión de instituciones educativas
Fecha Viernes 29, Sábado 30 de junio y Domingo 1° de julio
GESTIÓN Lugar Paseo La Plaza (Corrientes 1660. Sala Pablo Neruda) Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Horario viernes y sábado de 8.30 a 18 hs. Domingo hasta las 13 hs.
Los panelistas y disertantes experiencias alternativas en el fracaso escolar e investigadora. en Educación, Especialista en Derecho
que ya han comprometido su masivo (Universidad Nacional de Quilmes). Ruth Harf – Licenciada en Ciencias de Administrativo, Master en Gestión y PH D
asistencia Inés Dussel – Coordinadora del Área de la Educación y en Psicología. Profesora en Gestión orientada a Educación. Profesor
Educación de FLACSO y Doctora en Educación universitaria (UBA) y capacitadora para equipos universitario titular de Administración y
Rebeca Anijovich – Profesora en Ciencias de por la Universidad de Wisconsin-Madison de conducción en la Escuela de Capacitación de Normativa Educativa.
la Educación y Psicología, y especialista en (Estados Unidos). Profesora asociada de la la Ciudad de Buenos Aires (CEPA). Directora del Pablo Pineau – Doctor en Educación (UBA).
Formación de Formadores (UBA). Miembro de la Escuela de Educación (Universidad de San Centro de Formación Constructivista. Presidente de la Sociedad Argentina de Historia
red L@titud - Escuela Graduados en Educación Andrés) Marcelo Krinsky - Licenciado en Administración de la Educación. Profesor universitario de la
de la Universidad de Harvard. Evaluadora de Nora Elichiry - Doctora en Psicología (UBA). Coach Ontológico (The Newfield Group UBA, la UNLU e institutos de formación docente.
proyectos educativos en organismos públicos y Educacional. Profesora titular y Directora de la – USA). Profesor de Grado y Postgrado en Investigador en historia, teoría y política de la
Estanislao Antelo - Pedagogo. Doctor en de Psicología (UBA). Directora del proyecto de Consultor en Procesos de Cambio Cultural y Flavia Terigi - Licenciada en Ciencias de la
Humanidades y Artes (Universidad Nacional de investigación Relaciones familia-escuela en los Conciencia Organizacional y Personal. Educación y profesora para la enseñanza
Rosario). Licenciado y Profesor en Ciencias de la aprendizajes cotidianos (UBACyT). Rolando Martiñá - Maestro Normal Nacional, primaria. Profesora de la Maestría en Psicología
Educación (UNR). Profesor Titular de Pedagogía Jorge Fasce - Maestro Normal Nacional y Licenciado en Psicología, Posgrado en Terapia Educacional (UBA), de la Especialización
(UNR) y Problemas Educativos Contemporáneos Licenciado en Ciencias de la Educación (UBA). Familiar. Terapeuta, Asesor de Instituciones en Currículum (FLACSO), de la Maestría en
(Universidad Nacional de Quilmes). Especialista en Gestión de Políticas Públicas educativas y familias. Miembro del Programa Didáctica (UNC) y de la Especialización en
Jorge Apel – Licenciado en Psicología. Fue en Educación. Ex director de escuelas. Asesor Nacional de Convivencia Escolar, del Ministerio Políticas Educativas (Universidad Torcuato Di
Director de la Escuela Jean Piaget (Capital pedagógico en el Ministerio de Educación de Educación de la Nación. Tella)
Federal) durante 39 años. Co-coordina el blog de de la Nación. Capacitador de directores y Gabriel Noel – Antropólogo e investigador José Svartzman – Supervisor de escuelas
Clarín.com, Padre, madre, tutor o encargado – El supervisores. del Proyecto Violencia delictiva, cultura primarias de la Ciudad de Buenos Aires.
lugar de los padres en la escuela de hoy. Graciela Frigerio – Doctora en Ciencias de la política, sociabilidad y seguridad pública en Especialista en Didáctica de las Ciencias
Ricardo Baquero – Licenciado en Educación (Université de Paris V. Sorbonne). conglomerados urbanos (FLACSO-UNCPBA Sociales, profesor de Historia y Filosofía (UBA).
Psicopedagogía. Profesor titular de Psicología Directora de la Fundación Centro de Estudios Tandil) y del Observatorio de Violencia en Docente de Institutos de Formación.
educacional (UBA y Universidad de Quilmes). Multidisciplinarios. Directora de la Maestría en Escuelas con sede en la UNSAM.
Investigador en el proyecto Análisis de Educación (Universidad Nacional de Entre Ríos) Sergio Palacio – Abogado, Especialista
electrónico que haya indicado en el formulario el 7) Los pagos se realizan EXCLUSIVAMENTE a de descuento. Por razones operativas dicha
Procedimiento de o los cupones de pago, que podrá imprimir en su través de Pago Fácil. bonificación le será reintegrada con la entrega
inscripción para todas casa, escuela o locutorio. 8) Puede consultar las oficinas de Pago Fácil del certificado el último día de la/s próxima/s
las Jornadas 2007 5) Si cumplido ese plazo no ha recibido el e-mail más cercanas a su domicilio en www.pagofacil. jornada/s en la/s que participe.
con los cupones, por favor comuníquese con com.ar - Las vacantes quedan otorgadas solamente con
1) Ingrese en nuestra web www.12ntes.com y nosotros. pagos completos. Si abona en cuotas, recuerde
haga click en el botón Jornadas. 6) Deberá abonar el o los cupones antes de las Aclaraciones importantes: agendar los vencimientos.
2) Seleccione la Jornada en la que desea fechas de vencimiento indicadas en los mismos, - Si no tiene acceso a Internet, por favor - Toda la información detallada de cada una
inscribirse. caso contrario no podremos considerarlo comuníquese a nuestros nuevos teléfonos de de las jornadas se irá actualizando en nuestra
3) Complete todos los datos en el formulario de inscripto y deberá repetir el procedimiento a lunes a viernes de 10 a 18 hs.: (011)48240662 y página web. Por favor, no deje de consultarla
preinscripción y haga click en Enviar. disponibilidad de vacantes y a precio vigente (011)66981966 periódicamente.
4) En un plazo de tres días hábiles le serán al momento (si está abonando en cuotas, - En caso de asistir a más de una jornada en el
enviados por e-mail a la dirección de correo comunicarse para acordar nuevo plan.) 2007, a partir de la segunda obtendrá el 10%
Destinatarios Docentes de todos los niveles, Directivos de escuelas, Coordinadores/as pedagógicos/as, Supervisores/as, Funcionarios/as,
Profesionales de gabinetes, Docentes de profesorados. Profesionales y estudiantes de la educación.
Jornadas de Matemática
Actualización de su enseñanza en el Nivel Inicial y la EGB - Organizadas conjuntamente con la Red Latinoamericana de Alfabetización
Destinatarios Docentes. Directivos de escuelas. Coordinadores pedagógicos. Supervisores. Docentes de profesorados. Profesionales y estudiantes de la educación.
Jornadas de Lengua
La enseñanza de la lectura y la escritura en la escuela primaria
Temas a abordar
.¿Qué es enseñar Lengua hoy? Teorías y perspectivas sobre la lectura y la escritura.
.Leer literatura ¿Cómo se hace un lector de literatura?
.Leer y escribir en situaciones de estudio- Enseñar a estudiar-Leer y escribir en Ciencias Sociales y Naturales.
.Leer y escribir narraciones- La narración y la organización de la experiencia humana.
.Lectura, escritura y nuevas tecnologías.
.Lectura y cine.
.Lectura, escritura y reflexión lingüística- Revisión y corrección.
.Experiencias didácticas alrededor de la lectura y de la escritura: trabajo en proyecto, secuencia didáctica.
Acción y autonomía
Nacional de Rosario. Master en Edu- Especialista y maestranda en Educa-
cación por la Universidad Nacional ción (UDESA). Adscripta ad honorem
de Entre Ríos. Profesor y Licenciado de la Facultad de Filosofía y Letras
en Ciencias de la Educación por la (UBA) e investigadora en formación
Por Estanislao Antelo y María Aleu Universidad Nacional de Rosario. Ha del Proyecto UBACyT “La evaluación
escrito numerosos artículos y ensayos institucional desde la perspectiva de
en revistas nacionales y extranjeras. Es los actores. El caso particular de la
profesor de Pedagogía y Teorías de la formación de maestros y directores en
Educación y entre sus libros se desta- contexto” dirigido por Sandra Nicastro.
can Instrucciones para ser Profesor de Actualmente se encuentra realizando
Editorial Santillana y El Renegar de la su tesis de maestría “Estudio sobre
Escuela de Editorial Homo Sapiens, es- las concepciones de autoridad en los
crito en conjunto con Ana Abramowski. estudiantes de la escuela media”.
En qué se piensa cuando en la actualidad se habla de autoridades. Podemos activamente disfrutar de la nueva y atlética
consigna: el límite lo ponés vos. Pero además podemos pensar.
autoridad. Cuáles son los parámetros y perspectivas
Sólo se tiene autoridad sobre lo que puede reaccionar. La autori-
al momento de concebir en la escuela quién es el que dad supone la posibilidad de una oposición y la renuncia concien-
te y voluntaria a la realización de esa posibilidad. Si no existe la
“manda” y quién el “subordinado”. Qué paradojas y posibilidad de reaccionar no hay autoridad. La definición (que es
de Alexandre Kòjeve) toca el meollo de la cuestión. La autoridad
contradicciones se presentan en el discurso escolar cada es una relación social y en esa relación, voluntariamente, una de
las partes suspende la acción. El ejemplo tenía que ser escolar;
vez que se invoca (casi como a los dioses) a la imprescin- el dedo que señala la puerta y la consabida frase: se va inmedia-
tamente de acá…Y el otro se va, sin chistar o a regañadientes,
dible autoridad docente. El texto de Estanislao Antelo y increíblemente, pudiendo no irse, se va. Con frecuencia olvidamos
que se puede reaccionar. Es lo que hace Facundo. Reacciona y le
María Aleu propone algunas claves para reflexionar estos propina feroz golpiza a su maestro. Facundo el primitivo desenfre-
nado que está en y entre nosotros.
temas desde dos ejes tan controvertidos como necesarios
No hay Autoridad cuando hay fuerza bruta.
de presentar en la discusión cotidiana de las instituciones No existe Autoridad no reconocida. Toda Autoridad es legítima.
Para tener autoridad no hay que hacer nada.
educativas: la acción y la autonomía.
Esas son las coordenadas elementales sobre la autoridad cuyo
estudio puede ofrecer otro destino que la degradación y el fin del
mundo. La brevedad que se nos ha solicitado impide la paciencia
1- Acción argumental pero digamos que la novedad consiste en la omnipre-
sencia de una patología que administra nuestros actos: la patolo-
¿Por qué sujetarse a la autoridad en un mundo que premia la au- gía de la acción que es también patología del espacio público.
tonomía, la iniciativa, el emprendimiento, la competencia técnica,
y el pasaje a la acción? ¿Por qué dejarse guiar en un mundo que Estudiada por Alain Ehrenberg en su instructivo libro denominado
condena la inacción, la incompetencia, la apatía, la inhibición y La fatiga de ser uno mismo, enseña, sin miramientos, la constancia
la dependencia? del exceso en las ciudades en las que vivimos. El imperativo es el
tú puedes. Sólo hazlo. Es en esa ruta donde localizamos y explica-
¿Por qué los niños y jóvenes que habitan nuestras escuelas de- mos los problemas escolares ligados al movimiento: hiperactividad
berían refrenarse, someterse, doblegarse o inmovilizarse cuando o inacción. Nos sorprende que los niños enfermen de movimiento
anhelamos exactamente lo contrario: incentivarlos, estimularlos, al mismo tiempo que los exhortamos a moverse. Patología de la
motivarlos, hacerlos capaces y competentes? acción que nos recuerda a cada instante el esfuerzo enorme que
la vida en comunidad requiere. Los viejos entrenan a los nuevos
Dios está de paro. Ese es el rumor que se escucha a toda hora. To- en el arte de soportar lo que no se comprende y en la renuncia
do está permitido y eso parece ser una auténtica tragedia. A causa voluntaria al exterminio. Uno aprende a lidiar con la perturbación
de la renuencia del Sr. a proseguir con su trabajo todo parece de lo que se aproxima demasiado. Eso se llama ser educado.
estar perdido y hacen falta retornos, volveres, restauraciones, pre- Un educado es el que deliberadamente se deja guiar. Es el que
sencias. Es ahí donde se acostumbra a situar la autoridad, primera practica diversas formas de la renuncia. Practica la autocoacción
en la lista de objetos perdidos. Retornos de valores, manos duras, pudiendo no hacerlo. Se deja amansar. Pero hay cada vez menos
límites y leyes. Volveres al viejo orden, a la vieja disciplina de la de esto. Este mundo regala surtidos de monos primitivos, sin coto.
vieja escuela, a los viejos principios, a los viejos ayeres, y al viejo Nos sorprende que una madre entre a una escuela y acabe con
y respetuoso respeto. Restauraciones de la asimetría que separa las carótidas de una maestra al mismo tiempo que la invitamos a
maestros de alumnos y que a causa de la excedida democracia, se pasar a la acción. Nos sorprende el estallido recurrente al mismo
ha degradado. Porque según dicen todo se degrada. Y por último, tiempo que, complacientes, disfrutamos y elogiamos diversos es-
presencias: de los padres, de las autoridades, de los amos, en fin, tallidos por venir. Nos sorprende el desenfreno al mismo tiempo
de alguien que venga a poner un poco de orden. que elogiamos las capacidades y el aguante. El programa básico
para vivir en comunidad se ha vuelto extraño.
Sabemos que estos reclamos se manifiestan con honda preocupa-
ción. Se escriben libros trágicos, se piden cabezas, se señala con Sabemos que la calma, la espera y el refrenamiento fueron el
el dedo. Es el vocabulario básico sobre la autoridad. Vocabulario remedio educativo para esa tendencia, indestructible en la cría
básico, complaciente y fútil. La perorata restauradora que a toda sapiens, a la indocilidad. La educación, esa sujeción primordial,
hora nos embarga, choca con la misma piedra: el mundo que hubo de ser suficientemente efectiva a la hora de amansar a las
condenamos es el que alegremente fabricamos. Despreciamos criaturas. Todo quiere indicar que ya no funciona. Los exacerbados
nuestra simiente, aquello que, solícitos, hemos ayudado a nacer. y excesivos no son sólo niños y jóvenes. Ellos, como ha sido desde
Les dijimos a los nuevos que sólo tenían que hacerlo y lo hicieron. siempre, siguen a tientas nuestras instrucciones. Los promotores
Los retoños, que se resisten a la domesticación, son nuestro más de lo que despreciamos somos nosotros, adultos. En educación la
despreciado tesoro. responsabilidad es siempre adulta y es por eso que una educación
acaba cuando el otro puede responder por sus actos. Se puede ser
Podemos entonces lanzar renovadas escatologías al ruedo. El fin un exceso viviente, pero eso tiene un precio.
del mundo, el desenfreno del libre albedrío, el caos, la definitiva
corrosión, The End. Podemos resignarnos a las nuevas reglas, por- Y en lugar de mandar las autoridades escolares (que renuncian a
12 que es totalmente falso afirmar que no hay más reglas, límites y presentarse como autoridades y prefieren ser denominados gesto-
res) tienen una modesta obsesión: que no pase nada. Lo mejor es lugar por mucho tiempo, de múltiples referentes que son juzgados
no hacer nada. Se celebra que no pase nada. Una buena gestión con un único parámetro relativo y cambiante: el que construye
es la que tiene menos siniestros. Como decía una directora en uno mismo, el del individuo soberano. Lo que parece reinar son
voz baja, en una reunión sobre la violencia escolar: nosotras (las autoridades autónomas, individuos exitosos en el dominio de
directoras) tenemos nuestras casas como Bien de familia. Y eso sí mismos que practican diariamente el ejercicio del desapego,
es todo. militantes incasables de la lucha contra la dependencia. Como
señala Richard Sennett, se trata de una de las formas del poder
¿Dónde habremos de encontrar las fuerzas capaces de enfrentarse moderno, de un poder sin protección, de figuras de autoridad que
al desenfreno que activamente (muchas veces en las escuelas pe- no pretenden cuidar de nadie. De sujetos capaces de juzgar con
ro no sólo en las escuelas) hemos promovido? ¿En las escuelas? calma y distancia a otras personas sencillamente porque no bus-
can desesperados su aprobación.
AGENDA
En todos los casos se trata de propuestas de posgrado con modalidad flexible y a distancia, en
entorno virtual para que profesionales interesados cursen sin problemas de horarios ni traslados.
Las propuestas se desarrollan en un campus que promueve el aprendizaje colaborativo a través de la
clase elaboradas por los docentes del posgrado, foros de intercambio con ellos, tutorías, electrónicas,
aulas virtuales y grupos de discusión.
Para más información consultar www.flacso.org.ar
o comunicarse por mail a diplomaycursos@flacso.org.ar
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