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INSTITUTO HENAO Y ARRUBLA

PRUEBA DE FILOSOFÍA GRADO 11

Philosophy third term Exam eleventh


Grade
Nice Citizen, With Human
Richness, Self Powered, Honest
and Peace Facilitator
PREGUNTAS DE SELECCIÓN MÚLTIPLE CON ÚNICA RESPUESTA
- (TIPO I)
Las preguntas de este tipo constan de UN enunciado y de CUATRO
posibilidades de respuesta entre las cuales debe escoger SOLO UNA,
la que considere correcta, y rellenar el ovalo correspondiente en la
HOJA DE RESPUESTAS.

El hombre protagonista de su destino:

El espíritu del Renacimiento llevó a Pico Della Mirandola a afirmar que el destino del
hombre no viene de lo Alto, no está determinado por nada material ni espiritual, sino
que surge del hombre inocuo: " La suerte es hija del Alma". El hombre pasa de ser un
mero espectador en el Medioevo a tener confianza en si mismo y convertirse en artífice
de si mismo y su destino. En la Florencia del S.XV se escriben textos de exaltación a la
grandiosidad humana, destacando la famosa oración sobre la dignidad del hombre de
Pico de la Mirandola, en la que de forma sencilla y sublime se recoge la nueva imagen
del hombre que el califica y apellida como: "el gran milagro y animal admirable". La
grandeza del hombre reside en su libertad para hacerse a si mismo, esto es, en
convertirse en libre escultor y modelador de si mismo. Cuenta, Pico, que una vez que
Dios terminó la creación del mundo, buscó alguien que apreciara el plan de tan grande
obra, amara su hermosura y admirara su grandeza; fue entonces cuando creó al hombre
y le dio libertad para escoger el camino que quisiera en directa alusión al mito de
Prometeo, narrado por Platón en Protágoras. El hombre no tiene una naturaleza fija,
concreta y determinada, él es el artífice de su propia suerte y según lo que cultive
aquello florecerá. El hombre puede emplear mal su grandeza, pero la meta tiene que ser
la perfección, por ello Pico dice que debe apoderarse de nuestra alma una cierta santa
ambición de no contentarnos con lo mediocre sino anhelar lo bueno y tratar de
conseguirlo con todas nuestras fuerzas. La libertad es una llamada hacia la perfección,
hacia la plena realización; se desvanece el mito del Pecado Original rompiendo con la
concepción medieval. Para, Pico, el hombre se hace a si mismo, actuando en el mundo,
es dueño y señor de todas las cosas, modelador de sí mismo y del mundo. La libertad no
es una meta sino un punto de partida para el proceso de realización de las
potencialidades humanas. Bruno, también está contra la astrología y afirma que el
verdadero cielo se encuentra en nuestro espíritu; el hombre necesita desarrollar el
intelecto dejando el ocio de lado. Pompornazi, es otra corriente distinta a la de Pico,
afirma con la misma intensidad la excelencia del hombre; la libertad quedaba limitada
por el inmutable orden de las cosas a las cuales todos los seres están atados. Pompornazi
es el máximo representante del aristotelismo paduano; en su libro: De incostationibus
reduce a causas naturales todos los fenómenos maravillosos o milagros que se atribuían
a causas sobrenaturales. Defiende una concepción de la naturaleza rígidamente
naturalista y determinista (carácter antropológico). El orden de la naturaleza es único e
indestructible y el hombre está ligado y atado a ella; en nombre de la razón científica,
Pompornazi atacará y polemizará a Pico, al que acusa de moverse por razones
extracientíficas. Este califica el hombre de " Miraculu Magnum ", por su intelecto
especulativo por el que puede convocar el orden del mundo y el margen de libertad
posible dentro de las leyes generales de la naturaleza. En segundo lugar por su intelecto
operativo que le permite actuar en el marco que le impone el orden universal y en tercer
lugar el método ético, es decir la virtud universal que podemos lograr en esta vida.
Pompornazi sostiene un punto de vista naturalista respecto al alma sin que sea lícito
pensar en una vida inmortal. La grandeza del hombre reside en su virtud moral que es
recompensa de sí misma; el valor de la vida humana no depende de la duración de la
miseria. Para, Pico, el hombre alcanzó la perfección cuando se modula a sí mismo y
exalta la libertad sobre la necesidad. Pompornazi reduce la libertad al marco de las leyes
de la naturaleza y se realiza cuando actúa normalmente. El hombre puede recuperar la
acción de los astros mediante su comportamiento moral. Estos son los dos polos
opuestos del Renacimiento.

Progreso e Historia:

Los humanistas introdujeron una modalidad de pensamiento historiográfico que rechazó


la visión teológica y provindecialista de la historia, que había dominado en la Edad
Media y había reducido la historiografía a una mera crónica y narración de hechos
milagrosos. Los humanistas buscaron descubrir los principios que rigen la sucesión de
los acontecimientos humanos; la historia tiene una trama que corresponde descubrir al
historiador, unos pensaban que la trama era de carácter trágico, pues la humanidad había
pasado de una edad de oro que se había perdido para siempre, el devenir histórico era un
proceso de decadencias; otros, sostuvieron la idea de progreso histórico, pues veían un
mundo más habitable que antaño. Los que sostuvieron la idea de progreso estuvieron de
acuerdo en afirmar que la raíz y la causa del mundo, residía en el poder creador del
hombre y en su voluntad. La superioridad de los clásicos se debía a su educación
mundanera, que exaltaba a los hombres activos, en tanto la religión cristiana gratificaba
a los humildes y contemplativos que ponen el sumo bien en el desprecio de las cosas del
mundo. Así pues, la causa de la antigua prosperidad y la actual miseria, dice
Maquiavelo: se debe al valor y actividad de los primeros y a la cobardía de los
segundos. Guicciardini, continuador del pensamiento político de Maquiavelo, desprecia
la tradicional virtud y antropomorfa de la naturaleza. El punto donde se separa
radicalmente el pensamiento mágico del pensamiento científico, reside en la cuestión
del método de investigación. Galileo, frente a la anarquía metodológica sostiene un
método único y preciso para la construcción del saber científico. Las distintas clases de
magias, permiten el uso de diferentes métodos de interpretación de la realidad y todos
valen para alcanzar la verdad, por ello Galileo piensa que ningún fruto duradero se
puede lograr con ella. El método científico es único y es aquél que parte de la
experiencia sensible y concluye en las demostraciones; el mundo de los sentidos (dice
Galileo) no es más que un jeroglífico sin descifrar y por eso no puede haber ciencia si
junto a las experiencias sensibles, no se llevan a cabo las demostraciones necesarias en
las que las matemáticas se convierten en instrumentos indispensables de prueba.
Observación y demostración serán los dos elementos indispensables de su método
científico, que producirán la llamada revolución científica del S. XVII. La verdad o
falsedad se debe conocer por la experiencia y cuando existan demostraciones
matemáticas; las diferencias entre la nueva ciencia y la tradicional forma de entender el
saber filosófico acerca de la naturaleza se reduce a: utilización de distintos lenguajes,
distintos métodos y pretensiones o métodos diferentes. La ciencia necesita un lenguaje
preciso y exacto, distintos conceptos de método y de demostración; el camino de la
ciencia es el único posible para la inteligencia humana, por lo que deben centrarse en
ese saber, había que abandonar la filosofía especulativa por la ciencia experimental. La
ciencia no puede basarse en fantasías, sino en hechos verificables; propone una
disciplina de la mente, sometida a un método que permita un saber sólido y seguro de la
humildad cristiana y alaba al hombre con ambición; ambos dan mucha importancia a la
suerte. Maquiavelo, vio que la historia está sometida a un perpetuo movimiento
ascendente o descendente y que está influenciada por factores imposibles de prever. No
obstante gran parte de los asuntos humanos dependen de su propia virtud, no somos
dioses pero tampoco sujetos pasivos sometidos a la diosa Fortuna. También Bodino, en
línea con Maquiavelo y Guicciardini, concibe el desarrollo de la Historia como un
proceso de cambios sucesivos en los que la fortuna juega un papel importante. Otra
teoría afirmó la posibilidad para el hombre de un progreso sin límite y sin
condicionamientos de ningún tipo (Pico, Campanella y Bruno). Para ellos, el hombre
proyectándose hacia el futuro puede llegar a serlo todo. Bruno, al rechazar el mito de
una originaria edad dorada, concibe el progreso como un continuo alejarse de las formas
rudimentarias de la vida humana, ascendiendo de la bestia hasta el hombre. Hay que
huir de la ociosidad y la pasividad.

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