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Prevención de la
neumonía nosocomial
Luis Álvarez Rocha, Mónica Mourelo Fariña

INTRODUCCIÓN
La neumonía nosocomial (NN) es, en orden travenosos domiciliarios, en programa de diá-
de frecuencia, la segunda o tercera infección lisis, etc.) (2).
nosocomial (IN) después de la infección del
tracto urinario relacionada con sondaje y la in- Tanto por su incidencia como por la morbi-
fección asociada a la herida quirúrgica, aun- mortalidad que conlleva, es necesario conocer
que en las unidades de cuidados intensivos y poner en práctica un conjunto de medidas
(UCI) suele ser la primera IN con una morbi- encaminadas a prevenir la aparición de la NN.
mortalidad y un coste económico anual ele- Esto es especialmente importante en las UCI
vados. En este sentido, conviene recordar que donde, a pesar de que sólo representan en
la mortalidad directamente relacionada con torno al 15-20 % del total de las camas de
la NN suele oscilar en torno al 30 % (1). Por un hospital, se concentran la mitad de las in-
otra parte, también hay que señalar que ac- fecciones nosocomiales más graves, entre las
tualmente dentro del concepto de NN se en- que destaca la NAVM (3). La necesidad de VM
globan tanto la neumonía que aparece des- y su duración es uno de los factores de riesgo
pués de 48 horas de ingreso hospitalario como más importantes para la aparición de NN, y
la neumonía asociada a ventilación mecánica la incidencia de esta infección en los pacien-
(NAVM), que es la que se desarrolla tras 48 ho- tes en VM es unas 23 veces mayor que en
ras de ventilación mecánica (VM), y la neu- los no ventilados (4). La identificación y el
monía asociada a otros cuidados sanitarios (pa- seguimiento de los pacientes en riesgo de
cientes ingresados en residencias de la tercera desarrollar una NN, junto con la formación
edad, hospitalizados en los 3 meses previos del personal sanitario y la aplicación de prác-
durante más de 2 días, con tratamientos in- ticas de control efectivas, son la base para la
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prevención de ésta. En los hospitales en que gestivo, y su paso al árbol traqueobronquial


se aplicaron las medidas adecuadas, la inci- a través de aspiraciones repetidas; b) fuente
dencia de este tipo de IN se redujo el 20 % exógena: encaminadas a controlar la llegada
(5). de los microorganismos al pulmón como con-
secuencia del empleo de material deficiente-
Un programa de prevención de la NN ha de mente esterilizado, del quebranto de las nor-
incluir todas las estrategias dirigidas a controlar mas básicas de asepsia durante la realización
los distintos factores de riesgo que pueden de una maniobra invasiva, de la transmisión
existir. Algunos de ellos son inherentes al pro- de gérmenes entre distintos enfermos a tra-
pio enfermo (quemado, con lesión cerebral, vés de las manos del personal sanitario con
enfermedad pulmonar obstructiva crónica una higiene/desinfección incorrecta, etc., y
[EPOC], etc.) y, por tanto, difícilmente modi- c) diseminación hematógena o por contigüi-
ficables, pero otros dependen de condiciones dad de otra infección: el tratamiento precoz
externas al paciente sobre las que sí se puede y adecuado de la infección será el componente
actuar. Las distintas medidas de prevención más importante en este apartado.
podrían dividirse según los mecanismos pato-
génicos de la NN sobre los que actúen en: Pero, desde un punto de vista más práctico,
a) fuente endógena: pretenden evitar la colo- en el presente capítulo las clasificaremos en
nización por microorganismos potencialmente dos grandes grupos: prevención no farmaco-
patógenos de la orofaringe y del tracto di- lógica y farmacológica.

MÉTODOS NO FARMACOLÓGICOS DE PREVENCIÓN


Medidas básicas misión entre pacientes de los microorganismos
causantes de las IN. Por ello, el lavado/desin-
La existencia de un sistema de vigilancia y con- fección correcto de las manos, antes y des-
trol de la IN, con participación multidiscipli- pués del contacto con el enfermo o con el ma-
nar, es un aspecto fundamental para la pre- terial empleado en su atención, es básico
vención de la neumonía. Ayudará a una para la prevención de las IN, incluida la NN
selección más adecuada del tratamiento anti- (2-4). La concienciación por parte del perso-
biótico empírico de la NN y a instaurar las nal sanitario del enorme valor de esta medida
medidas de prevención más adecuadas en cada ha de ser un objetivo prioritario en cualquier
momento, incluyendo situaciones con presencia plan de prevención de la IN. En este sentido,
de microorganismos multirresistentes (2, 3). hay que recordar que con el empleo exclu-
sivo de agua y jabón convencional no se con-
De entre el conjunto de medidas básicas, pa- sigue una desinfección adecuada de las ma-
rece oportuno destacar la importancia de, al nos. En varios estudios se ha confirmado que
menos, tres de ellas. Por una parte, la ade- el lavado con soluciones antisépticas conse-
cuación del personal sanitario, en número y guía una reducción mayor y más duradera de
capacitación, a la carga asistencial existente es la carga bacteriana, con un efecto benefi-
algo imprescindible. La sobrecarga de trabajo cioso sobre la tasa de IN (9, 10). En la actua-
y la presencia de personal no entrenado fa- lidad, se recomiendan las soluciones o los ge-
vorecen el no cumplimiento de las medidas de les de base alcohólica, con los que se ha
prevención (6, 7). Por otra, también es nece- demostrado un mejor nivel de cumplimiento
saria la realización periódica de cursos de for- del lavado de manos y una desinfección más
mación que ayuden a mantener al día los co- eficaz(9, 11). Al mismo tiempo, se recuerda
nocimientos del personal de la UCI (8). Y, por que han de evitarse los anillos, las pulseras o
último, hay que resaltar la importancia de las las uñas postizas, ya que dificultan la desin-
manos de los trabajadores sanitarios en la trans- fección y favorecen la aparición de reservo-
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PREVENCIÓN DE LA NEUMONÍA NOSOCOMIAL 159

rios de microorganismos (2, 9). Todas las ac- piratorio posextubación no sólo no redujo la
tuaciones anteriores cobran aún más impor- tasa de reintubaciones, sino que se asoció a
tancia cuando se atienden pacientes coloni- un retraso en ésta (12 horas frente a 2 horas
zados/infectados por patógenos resistentes, y 30 minutos) y a una mayor mortalidad (25
situación en la que han de complementarse frente a 14 %) (19). A pesar de ello, en pu-
con el resto de medidas incluidas en el deno- blicaciones recientes se plantea como una
minado aislamiento de contacto. posibilidad razonable siempre que se haga una
buena selección del paciente y se siga un pro-
tocolo que no retrase la reintubación (20)
Evitar la intubación
endotraqueal y la ventilación La duración de la VMI constituye un factor de
riesgo determinante para el desarrollo de
mecánica invasiva NAVM. Aunque los resultados difieren entre
los estudios, la incidencia de NN no perma-
Tal como ya se mencionó anteriormente, la
nece constante a lo largo del tiempo. Cook
VM invasiva (VMI) es uno de los factores de
et al. (21) observaron que el riesgo acumulado
riesgo más importantes para el desarrollo de
aumenta con el paso del tiempo, a pesar de
NN, por lo que, en la medida de lo posible,
que el riesgo diario disminuye a partir del día
hay que intentar evitarla en los pacientes. La
5 (3,3 % hasta el día 5; 2,3 % en el día 10;
VM no invasiva (VMNI) es una alternativa que
1,3 % a partir del día 15). Por tanto, con-
ha demostrado su eficacia en grupos selec-
viene tener en cuenta todas las estrategias que
cionados de pacientes. En 1995, Brochard et
contribuyan a disminuir los días de VM, tal
al. observaron en un trabajo aleatorizado que
como ocurre con la utilización de los proto-
la VMNI en individuos con exacerbación aguda
colos de sedoanalgesia en los que se incluya
de su EPOC redujo de forma significativa la
una interrupción diaria de ésta y protocolos
tasa de intubaciones endotraqueales y de com-
de destete con los que, mediante una reduc-
plicaciones, además de la estancia y la mor-
ción de la administración de fármacos sedan-
talidad hospitalaria (12). Posteriormente, otros
tes y de una aproximación controlada a la re-
estudios confirmaron estos hallazgos (13) y
tirada de la ventilación, se consigue acortar el
ampliaron los posibles beneficios a pacientes
tiempo de VM y minimizar los riesgos que la
con fallo respiratorio hipoxémico e inmuno-
acompañan (22, 23).
deprimidos (14, 15). Las infecciones nosoco-
miales, y particularmente la NN, se encontra-
ban entre las complicaciones cuya tasa
mejoraba con el empleo de VMNI (16). De
Sondaje e intubación nasal
todas formas, los pacientes que más se be- frente a oral. Tipos de tubos
nefician de esta modalidad ventilatoria son endotraqueales
aquéllos con exacerbación aguda de su EPOC
o con edema agudo de pulmón. En estos dos La sinusitis está identificada como un factor
tipos de enfermos Girou et al. observaron un de riesgo para la aparición de NN, ya que fa-
disminución significativa de la tasa de NN (20 cilita la aspiración de secreciones infectadas
frente a 8 %) con el empleo de VMNI (17). hacia las vías aéreas inferiores (24). Por otra
parte, la presencia de un cuerpo extraño (tubo
La reintubación, tal como demostraron Torres o sonda) en las coanas nasales dificulta la ade-
et al. (18), aumenta el riesgo de desarrollar NN cuada aireación y el drenaje de los senos pa-
en individuos subsidiarios de VM, por lo que ranasales y favorece su infección. En diversos
ha de evaluarse cualquier estrategia que pueda estudios se ha observado que la intubación
ayudar a controlar su frecuencia. Sin embargo, nasotraqueal puede aumentar el riesgo de apa-
la VMNI no parece ser la mejor alternativa en rición de sinusitis (25, 26). Por tanto, a pesar
este grupo de pacientes. La utilización indis- de que no existen estudios aleatorizados que
criminada de VMNI en sujetos con fracaso res- comparen las dos vías de acceso, se recomienda
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la vía oral como mejor opción de intubación Por último, se están estudiando métodos que
endotraqueal y de sondaje gástrico en un in- dificulten la formación de biopelículas en los
tento de disminuir la incidencia de sinusitis no- tubos endotraqueales, a fin de eliminar el re-
socomial y, secundariamente, la de NAVM (25). servorio que suponen las bacterias que pue-
den sobrevivir en ellas. En experimentación
En los pacientes con intubación endotraqueal animal se ha visto que el empleo de tubos
habitualmente se produce en la zona subgló- impregnados de plata se acompañó de un des-
tica un acúmulo de secreciones de proceden- censo en la colonización respiratoria por mi-
cia orofaríngea por encima del balón de neu- croorganismos potencialmente patógenos (30),
motaponamiento. A pesar de la presencia de pero aún falta la confirmación en el hombre
este balón, los fluidos acumulados pasan a la antes de recomendarlos. El empleo de anti-
tráquea distal, lo que facilita la colonización del bióticos en forma de aerosol y de nuevos ma-
árbol respiratorio inferior y el desarrollo pos- teriales en la construcción de los tubos po-
terior de una NN. En un intento de reducir dría reducir o impedir la adherencia bacteriana
este riesgo se han propuesto dos medidas. En a ellos (31).
primer lugar, se recomienda mantener la pre-
sión del balón de neumotaponamiento del tubo
por encima de 20 cmH2O. Rello et al (27), en Sistemas de aspiración
un estudio sobre factores de riesgo de NAVM, de las secreciones
observaron que el mantenimiento de la presión
por debajo de este nivel fue uno de los facto-
traqueobronquiales
res más importante asociados de forma inde-
Clásicamente se han estado empleando siste-
pendiente a la aparición de este tipo de NN
mas de aspiración abiertos con sondas estéri-
(riesgo relativo [RR], 4,23; intervalo de confianza
les para la eliminación de las secreciones que
[IC] del 95 %, 1,12-15,92). En segundo lugar,
se acumulan en el árbol traqueobronquial del
la aspiración de estas secreciones subglóticas
paciente en VM. En un intento de reducir la
acumuladas por encima del neumotapona-
importancia de la fuente exógena en la apa-
miento puede reducir la tasa de NAVM. Hay
rición de la NAVM, se han diseñado sistemas
tubos endotraqueales diseñados especialmente
de aspiración cerrados con el fin de disminuir
para este fin, con una luz dorsal que permite
la manipulación y la contaminación de las
la evacuación de estas secreciones. En el mismo
vías respiratorias. Sin embargo, hasta ahora no
estudio (27), el fallo en la eliminación de las
se han observado beneficios con estos nue-
secreciones subglóticas se asoció a un mayor
vos sistemas, por lo que no se recomienda su
riesgo de NAVM (RR, 7,52; IC 95 %, 1,48-
uso sistemático. En un metaanálisis reciente
38,07). Aunque no todos los estudios demos-
que incluye 15 trabajos no se encontraron di-
traron este efecto beneficioso, en la actuali-
ferencias significativas en la tasa de NAVM ni
dad estos tubos especiales se consideran una
en la mortalidad al emplear sistemas abiertos
alternativa razonable en la prevención de la NN.
o cerrados, aunque estos últimos tienen un
En un reciente metaanálisis (28), que abarca
coste más elevado (32).
cinco estudios con un total de 896 pacientes,
se observó que la utilización de estos sistemas
de aspiración subglótica redujo a casi la mitad
la incidencia de NAVM (RR, 0,51; IC 95 %,
Manejo de las tubuladuras
0,37-0,71), sobre todo a expensas de la dis- de los ventiladores.
minución de las neumonías precoces. De to- Sistemas de humidificación
das formas, aunque faltan estudios que eva-
lúen adecuadamente este aspecto, el mayor La colonización bacteriana de los circuitos de
coste de estos dispositivos en relación con los los ventiladores que se va produciendo con
tubos convencionales es un factor que debe te- el paso de las horas puede favorecer la con-
nerse en cuenta al tomar una decisión (29). taminación del aire inspirado y, por tanto, el
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PREVENCIÓN DE LA NEUMONÍA NOSOCOMIAL 161

desarrollo de NAVM. Basándose en este he- dos sistemas (39). Si tenemos en cuenta los
cho, hasta la década de 1980 se recomendaba costes, sobre todo asumiendo que no es ne-
el cambio sistemático de las tubuladuras con cesario el cambio sistemático de los filtros se-
una periodicidad en torno a las 48 horas (33). gún el tiempo de funcionamiento, posible-
Estudios posteriores han demostrado que el mente sean éstos la primera alternativa de
aumento del intervalo de cambio no se acom- humidificación y haya que reservar los siste-
paña de una mayor incidencia de NAVM (34, mas activos modernos para los pacientes más
35). Por ello, actualmente no se recomienda problemáticos (36, 39).
el cambio rutinario de los circuitos en fun-
ción del tiempo, sino sólo si hay contami- Además, es muy importante la formación del
nación macroscópica de éstos (sangre, secre- personal sanitario en el correcto manejo de to-
ciones, etc.). dos estos dispositivos, especialmente en lo que
se refiere a la eliminación de los condensados
El aire inspirado empleado durante la VM ha en los circuitos y a la administración de tera-
de estar convenientemente acondicionado en pia en forma de aerosol en estos pacientes,
cuanto a temperatura y a humedad a fin de manteniendo una limpieza adecuada de todo
evitar lesiones de la mucosa traqueobron- el material empleado (8).
quial y de conseguir una correcta fluidificación
de las secreciones. La no consecución de es-
tas condiciones facilitará, entre otras compli- Posición semiincorporada
caciones, el desarrollo de NAVM. Los siste- de los pacientes
mas de humidificación activa empleados
inicialmente con cascadas de agua caliente fa- La aspiración de secreciones orofaríngeas es
vorecían la formación en los circuitos de im- uno de los principales mecanismos de desa-
portantes condensados de agua que se colo- rrollo de NN. En los pacientes con alteración
nizaban fácilmente y que, al pasar al árbol del nivel de conciencia, y también en sujetos
respiratorio, predisponían al desarrollo de una sanos durante el sueño, es un hecho relativa-
NN, además de servir de reservorio de dise- mente frecuente (40). Este problema alcanza
minación de patógenos nosocomiales a otros mayor importancia en los pacientes en VM,
pacientes. Posteriormente, se han ido desa- con sonda nasogástrica, que se mantienen
rrollando sistemas de humidificación pasiva (fil- en decúbito supino (41). En este tipo de pa-
tros intercambiadores que aprovechan el ca- cientes, al emplear isótopos radiactivos como
lor y la humedad del aire espirado) con los que marcadores se ha comprobado que, en com-
se consigue un acondicionamiento correcto de paración con el decúbito supino, la posición
los gases durante la VM (36). En diversos tra- semiincorporada (45º) no protege completa-
bajos se ha observado incluso una menor in- mente del reflujo gastroesofágico pero sí re-
cidencia de NAVM con el empleo de estos duce de forma significativa la aspiración bron-
filtros, aunque tenían algunas limitaciones me- quial (41). Drakulovic et al. (42), en un estudio
todológicas que condicionan la aplicación de aleatorizado sobre 86 pacientes en VM de-
sus resultados (exclusión de pacientes de ma- mostraron una reducción significativa de la
yor riesgo de obstrucción de la vía aérea, con incidencia de NAVM en el grupo de enfer-
secreciones espesas, etc.) (37). Además, la me- mos que se mantuvieron incorporados a 45º
jora del diseño de los sistemas de humidifi- (8 frente a 34 %; p = 0,003), y el efecto fue
cación activa, con el empleo de resistencias aún más importante en los sujetos con nutri-
de calentamiento en las ramas inspiratoria y ción enteral. Por tanto, si no existe contrain-
espiratoria del circuito, ha hecho que la tasa dicación, todos los pacientes en VM han de
de NAVM no se vea influida por el sistema mantenerse en posición semiincorporada como
de humidificación elegido (38). Por ello, no forma de prevenir la aparición de NN. Con-
existe una evidencia que haga más recomen- viene señalar que, aunque necesaria, no es
dable la humidificación con cualquiera de los una medida fácil de implementar, por lo que
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hay que prestarle una atención especial. En un nutrición adecuada ayudará a mitigar estas con-
trabajo en el que se evaluó la aplicabilidad de secuencias adversas. Aunque no siempre ha de-
esta medida se comprobó que durante el mostrado sus beneficios, la alimentación pre-
85 % del tiempo del estudio no se conseguía coz en esta situación es algo para tener muy
mantener la posición a 45º (43). en cuenta. Artinian et al. (47) observaron una
reducción aproximada de la mortalidad intra-
UCI y hospitalaria del 20 y el 25 %, respecti-
Camas oscilantes. vamente, en los pacientes en que se consiguió
Fisioterapia respiratoria iniciar nutrición enteral (NE) en las primeras
48 horas. Sin embargo, como contrapartida,
La mayoría de los pacientes graves encama- también encontraron que la NE precoz se aso-
dos tienen una importante limitación de mo- ció a un mayor riesgo de NAVM (12,9 frente
vilidad debida a la presencia de sedoanal- a 9,5 %). Esta circunstancia ya es conocida y,
gesia y/o conexión a múltiples dispositivos por eso, se recomienda emplear medidas que
externos. Como consecuencia, la imposibili- reduzcan la distensión gástrica y el riesgo de
dad de movilizar las secreciones y la aparición aspiración durante la NE. Entre ellas podemos
de atelectasias es un riesgo importante de señalar la reducción de opiáceos y de medica-
desarrollo de NN que hay que tener en cuenta. ción anticolinérgica, la comprobación rutinaria
En algunos trabajos realizados preferentemente de los residuos gástricos, el empleo de proci-
en pacientes quirúrgicos y neurocríticos, el em- néticos y de sondas gástricas de pequeño ca-
pleo de camas oscilantes se asoció a una re- libre, además de la administración de la NE en
ducción de la tasa de NN (44). Sin embargo, perfusión continua (48, 49). En una revisión sis-
la falta de consistencia del beneficio, la limi- temática (48), cuando se analizaron los resul-
tación metodológica de los trabajos que lo eva- tados de diez estudios que comparaban la per-
luaron, así como el coste y los riesgos asocia- fusión de NE al estómago o al intestino delgado,
dos (desconexión de dispositivos, etc.), hacen se observó que esta última se asoció a un ma-
que no se pueda recomendar su uso siste- yor aporte caloricoproteico y a la necesidad de
mático (45). un tiempo menor para alcanzar la dosis nutri-
cional pretendida, además de a un descenso en
Del mismo modo, la fisioterapia respiratoria y la tasa de reflujo gastroesofágico. La adminis-
de drenaje postural podría ayudar a prevenir tración en intestino delgado se acompañó, asi-
la aparición de NN. De hecho, Ntoumenopoulos mismo, de una reducción de la incidencia de
et al. (46) demostraron una reducción signifi- NAVM (RR, 0,76; IC 95 %, 0,59-0,99), aun-
cativa de la NAVM (8 frente a 39 %; p = que no existió diferencia en la mortalidad en-
0,02) con su aplicación. Pero aún se necesi- tre los grupos (48). En relación con el intento
tan más estudios que confirmen estos bene- de disminuir el riesgo de reflujo y de aspiración,
ficios, y sus ventajas respecto al empleo de en los últimos años se está investigando con
incentivos o a la realización de ejercicios con sondas modificadas. Orozco Levi et al. (50), em-
respiraciones profundas, así como el tipo de pleando una sonda nasogástrica con un balón
pacientes en los que estaría más indicada. de baja presión a nivel esofágico, demostraron
una reducción del reflujo gastroesofágico y de
la aspiración bronquial del contenido gástrico.
Tipo de nutrición El método resultó seguro al menos durante
8 horas, pero se necesitan más estudios que
La fase de aumento del catabolismo que acom- confirmen los beneficios.
paña a la situación de estrés presente en dis-
tintos grados en los pacientes críticos provoca Aunque la NE es la primera alternativa, en los
secundariamente una alteración en los sistemas pacientes que no la toleren, o en los que los
defensivos del organismo y un mayor riesgo riesgos sean elevados (distensión gástrica, alto
de complicaciones infecciosas. El inicio de una volumen de residuos, etc.), la nutrición pa-
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PREVENCIÓN DE LA NEUMONÍA NOSOCOMIAL 163

renteral (NP) es la forma indicada de nutri- glutamina o grasas poliinsaturadas), a pesar


ción precoz en el paciente crítico. Sin embargo, de que algunos estudios han observado una
conviene no olvidar su mayor coste y los ries- tendencia a mejor evolución clínica con me-
gos asociados, como la aparición de sepsis nor tasa de infecciones y de tiempo de venti-
relacionada con catéter o la atrofia de las ve- lación mecánica, todavía no ha demostrado
llosidades intestinales, que podrían facilitar la de forma suficiente su utilidad en el campo
translocación bacteriana. de la prevención de la NAVM, y se precisan
más estudios en este sentido y en el de sus
Por último, la llamada inmunonutrición (adi- efectos sobre la mortalidad para dicha utilidad
ción de nutrientes específicos como arginina, (51).

MÉTODOS FARMACOLÓGICOS DE PREVENCIÓN


Profilaxis antibiótica y otros lo hacen con los pacientes sobre los
que asientan (ancianos, presencia de comor-
El empleo de antibióticos, cualquiera que sea bilidades, etc.) (53). Pero un grupo impor-
su finalidad y la vía de administración elegida, tante de ellos se relacionan con los tratamientos
siempre se acompaña de un riesgo de incre- antibióticos empleados en el control de las in-
mento, a medio-largo plazo, de la presencia fecciones originadas por estos microorganis-
de microorganismos multirresistentes. El tracto mos. En estos casos podemos vernos obliga-
digestivo de los pacientes se convierte en uno dos a emplear alternativas menos eficaces o
de los principales reservorios de estos patóge- más tóxicas y, sobre todo, aumenta la tasa de
nos, desde donde se van a diseminar, causando tratamientos empíricos inapropiados. Esto úl-
distintas IN tanto en el propio individuo como timo, cuya frecuencia oscila entre el 8 y el
en los enfermos vecinos (52). Además del ma- 60 %, es uno de los factores más importan-
yor coste del tratamiento que supone, la im- tes asociados de forma independiente a la mor-
portancia de los patógenos multirresistentes talidad hospitalaria del enfermo crítico (53).
está determinada por la superior morbimorta-
lidad que habitualmente se asocia a las infec- Las estrategias tendentes a controlar el pro-
ciones que causan. No todos los estudios que blema de la multirresistencia pueden dividirse
analizaron el problema consiguieron demostrar en dos grandes grupos: control de la infección
la existencia de una mortalidad directamente y política antibiótica (52, 53). En el primero
relacionada con la infección de etiología mul- se incluyen las medidas básicas ya menciona-
tirresistente, y muchos pacientes fallecieron con das en el apartado anterior (sistema de vigi-
la infección más que a causa de ella (53), lancia, lavado de manos, aislamiento de con-
Pero sí es un efecto secundario de la multi- tacto, optimización de la limpieza ambiental,
rresistencia claramente identificado, tal como etc.). El segundo comprende todo el conjunto
se ha visto entre otros en el caso de la bac- de medidas que buscan un uso más racional
teriemia por Staphylococcus aureus resistente de los antimicrobianos. Entre ellas cabe des-
a meticilina (SARM) (odds ratio [OD] 1,93; IC tacar el empleo de criterios farmacocinéticos
95 %, 1,54-2,42) (53). De igual modo, la NAVM y farmacodinámicos al utilizar estos fárma-
causada por SARM se puede acompañar de cos, o la implementación de medidas admi-
una prolongación de la estancia en la UCI que nistrativas e informáticas de control, o la res-
prácticamente duplica la de la causada por tricción temporal o la rotación de antibióticos,
SARM (53). Los factores responsables de este además de la reducción de los tiempos de
aumento de la morbimortalidad son múlti- tratamiento para algunas IN y la aplicación
ples. Unos se relacionan con los propios mi- de desescalonamiento terapéutico (inicio em-
croorganismos, aunque en general la multi- pírico de antibioterapia de amplio espectro
rresistencia no se acompaña de mayor virulencia, para reducir la tasa de tratamientos inapro-
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164 NEUMONÍA NOSOCOMIAL EN PACIENTES CRÍTICOS

piados, seguido de su ajuste de acuerdo con renteral podrían mostrar resultados positivos
los resultados microbiológicos). Los estudios en grupos seleccionados de pacientes. Sir-
que han evaluado la eficacia de las distintas vent et al. (58), en un estudio controlado y
medidas de política antibiótica no muestran aleatorizado sobre un total de 100 pacientes
resultados uniformemente positivos, como ocu- con traumatismo craneal o accidente vascular
rre, por ejemplo, en el caso de la rotación an- cerebral, Glasgow ≤ 12 y VM > 72 horas, con
tibiótica, ya que la evidencia disponible hasta el empleo de cefuroxima 1,5 g/12 horas, ob-
ahora habla de una eficacia limitada para pre- servaron ya el primer día una reducción sig-
venir el desarrollo de las resistencias (54). Sin nificativa de la incidencia de NAVM en el grupo
embargo, el uso racional y combinado de las activo (24 frente a 50 %; p = 0,007), sobre
medidas mencionadas sí resulta útil, y por tanto todo a expensas de la NN precoz, sin efecto
están indicadas para el control de este im- sobre la mortalidad. Pero, antes de recomen-
portante problema (52, 54). Incluso alguna dar su empleo son necesarios nuevos estu-
de ellas se asoció a una reducción de la tasa dios con mayor tamaño de la muestra, que
de NAVM. La sustitución de ceftazidima por confirmen los beneficios y valoren los efectos
ciprofloxacino durante un periodo de 6 me- a largo plazo.
ses se acompañó de una disminución signifi-
cativa de la NAVM (11,6 frente a 6,7 %; La profilaxis antibiótica mejor evaluada hasta
p = 0,02), sobre todo a expensas de una me- el momento es la conocida como desconta-
nor incidencia de NN causada por microorga- minación digestiva selectiva (DDS), orientada
nismos multirresistentes (55). prioritariamente al control de la fuente endó-
gena de la NN. Esta pauta, tal como la pre-
Todo lo comentado hasta ahora ha de te- conizó el grupo de Stoutenbeek, consta de
nerse en cuenta a la hora de valorar el em- tres componentes (56):
pleo de antibióticos en la prevención de la NN,
tanto en el diseño de estudios que evalúen 1. Digestivo. Aunque se han empleado al-
su eficacia, como en la consideración de la im- gunas variantes, está constituido por la
portancia de los resultados y en la decisión asociación de polimixina E, tobramicina y
de en qué situación y tipo de pacientes ha de anfotericina B (PTA). Esta combinación de
usarse. antibióticos no absorbibles —pues se pre-
tende evitar efectos sistémicos—, se aplica
Hay varias formas de aplicar la profilaxis anti- en forma de pasta en la zona orofaríngea
biótica en la prevención de la NN, y se han y, como solución, en la gastrointestinal,
valorado en diversos estudios. Así, en la dé- con el fin de eliminar los microoganismos
cada de 1970 se utilizó la instilación endo- potencialmente patógenos que estén co-
traqueal de polimixina con el ánimo de redu- lonizando el tracto digestivo. De forma im-
cir la incidencia de este tipo de IN (56, 57). portante, los antibióticos elegidos no tie-
Tras un beneficio inicial, se desechó por la apa- nen actividad anaeróbica, ya que se quiere
rición de flora multirresistente que determinó respetar la flora anaerobia intestinal, que
un aumento de la tasa de NN y de su morta- constituye el mecanismo natural de resis-
lidad. En el momento actual no existe evidencia tencia a la colonización por agentes pa-
científica suficiente como para recomendar tógenos.
esta modalidad de profilaxis en la NN, aun- 2. Antibiótico parenteral. Habitualmente se
que sí puede ser un campo de estudio pro- administra una cefalosporina de tercera ge-
metedor en pacientes de alto riesgo, en el que neración con actividad antineumocócica,
también habrá que tener en cuenta el método con el fin de prevenir las NAVM precoces
elegido para la administración del antibiótico, causadas por flora comunitaria que colo-
ya que la consecución de partículas de aero- niza el tracto digestivo del paciente en el
sol de 1-5 micras parece de gran importancia momento de ingreso en el hospital. Suele
(57). Por otra parte, los antibióticos por vía pa- mantenerse exclusivamente los 3 o 4 pri-
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PREVENCIÓN DE LA NEUMONÍA NOSOCOMIAL 165

meros días, hasta que el componente di- tor más importante para la reducción de la
gestivo alcanza niveles de eficacia. NAVM tardía. El componente gastrointestinal
3. Mantenimiento de unos niveles de higiene no parece ser necesario para el control de las
adecuados que controlen la fuente exó- infecciones, pero sí podría desempeñar cierto
gena de la neumonía, y de cultivos de vi- papel en el mantenimiento de menores gra-
gilancia que permitan controlar la eficacia dos de endotoxemia y de activación de la
de la DDS y la posible aparición de resis- cascada inflamatoria y, sobre todo, en la eli-
tencias. minación del reservorio intestinal de microor-
ganismos multirresistentes gracias a que se
La DDS se empleó inicialmente en pacientes alcanzan altas concentraciones intraluminales
traumatizados en VM, en los que se preveía de antibiótico.
que ésta durara más de 3 días (56). Poste-
riormente se ha ido ampliando el espectro de A pesar de los beneficios obtenidos en la re-
pacientes en los que se aplicó incluyendo tanto ducción de la NN y de la mortalidad, el riesgo
a enfermos médicos como quirúrgicos, infec- de generar a largo plazo un incremento de
tados o no en el momento del inicio de VM los niveles de resistencia bacteriana ha sido el
(59). En la actualidad se han publicado más principal limitador de la difusión del uso de la
de sesenta estudios aleatorizados y más de diez DDS. Este problema se ha detectado en al-
metaanálisis que evalúan tanto aspectos de efi- guno de los trabajos publicados, especialmente
cacia como de seguridad de la descontamina- a expensas de un aumento de la incidencia
ción. En un metaanálisis publicado en el año de SARM (56). Sin embargo, en la actualidad
1993 (59), en el que se incluyeron datos de hay ya trabajos que, con un tamaño de la
4.142 pacientes procedentes de 22 trabajos, muestra y un tiempo de seguimiento amplios,
se observó una reducción significativa de la in- no encuentran que la aparición de microor-
cidencia de NAVM en el global de la pobla- ganismos multirresistentes constituya un pro-
ción estudiada (OR, 0,37; IC 95 %, 0,31-0,43), blema significativo, siempre que la aplicación
y de la mortalidad en el grupo de enfermos de la DDS se haga con un control adecuado.
en los que se había utilizado la pauta com- De Jonge et al. (61), en un estudio aleatori-
pleta de DDS (antibióticos tópicos y endove- zado y controlado (grupo DDS, n = 466; grupo
noso) (OR, 0,8; IC 95 %, 0,67-0,97). Ade- control, n = 468), observaron que, además
más, cuando se calculó el número de pacientes de una reducción significativa de la mortali-
que habría que tratar para prevenir una in- dad intra-UCI (15 frente a 23 %; p = 0,002)
fección respiratoria o una muerte, resultó ser y hospitalaria (24 frente a 31 %; p = 0,02),
de 6 y 23, respectivamente. Los trabajos y los existió una colonización significativamente me-
metaanálisis posteriores confirmaron mayori- nor por bacilos gramnegativos resistentes a
tariamente estos resultados (56, 60), y ya hay ceftazidima, a ciprofloxacino, a imipenem, a
al menos tres trabajos que, de forma indivi- polimixina E o a tobramicina en el grupo de
dual, han demostrado una reducción signifi- la DDS (16 frente a 26 %; p = 0,001). Ade-
cativa de la mortalidad (entre el 35 y el más, la colonización por Enterococcus spp re-
75 %) (56). La población estudiada en estos sistente a vancomicina fue similar en ambos
últimos estuvo constituida por 546 y 934 pa- grupos (1 %), y no se detectó la presencia de
cientes de UCI mixtas, y por 107 pacientes SARM en ninguno de ellos.
quemados.
Por tanto, a la luz de estos resultados cree-
De una forma concisa, a la vista de los resul- mos que la DDS es una forma de profilaxis
tados publicados se pueden asumir distintas antibiótica útil para la prevención de la NAVM,
funciones para cada uno de los componentes cuya aplicación está indicada en el grupo
de la DDS (56). El antibiótico parenteral resulta de pacientes subsidiarios de VM prolongada
imprescindible para el control de las NAVM (≥ 72 horas). Dentro de ellos, el mayor bene-
precoces. La aplicación orofaríngea es el fac- ficio parece obtenerse en los enfermos con
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166 NEUMONÍA NOSOCOMIAL EN PACIENTES CRÍTICOS

un nivel de gravedad intermedia y con la de sagrado digestivo por úlceras de estrés (63,
aplicación de la pauta de DDS completa. Siem- 64). Con el fin de controlar este riesgo se
pre que se haga con el seguimiento correcto, han usado antiácidos, anti-H2, sucralfato o
los beneficios superan a los riesgos. Además, inhibidores de la bomba de protones. Las
hay que señalar que la prescripción de la medicaciones que aumentan el pH y el volu-
DDS es dinámica, y sus componentes pue- men gástrico (antiácidos, anti-H2 o inhibido-
den modificarse en función de los resultados res de la bomba de protones) pueden aso-
obtenidos o, incluso, suspenderse temporal- ciarse con una mayor tasa de NN. Por el
mente. contrario, con el sucralfato, al no modificar
la acidez gástrica, este problema sería me-
nor. Sin embargo, los resultados de los estu-
Higiene orofaríngea dios que trataron de comparar tanto la efi-
con clorhexidina cacia de estas medicaciones en la prevención
del sangrado como en sus efectos sobre la
La higiene de la cavidad orofaríngea con an- aparición de NN no han aportado resultados
tisépticos, sobre todo con clorhexidina, tam- concluyentes. En la mayoría de los casos no
bién se ha empleado como forma de preven- se observó una diferencia significativa en la
ción de la NN, ya que puede ayudar a controlar tasa de NAVM en función del protector gás-
la colonización por flora potencialmente pa- trico empleado (64, 65). Aunque existen al-
tógena. Aunque los resultados no son uni- gunos trabajos que favorecerían la adminis-
formes, en un reciente metaanálisis que in- tración de sucralfato porque se asocia a menor
cluye siete estudios aleatorizados se observó incidencia de NN (65), el resultado de un im-
una reducción significativa de la incidencia portante estudio multicéntrico canadiense nos
de NAVM (RR, 0,74; IC 95 %, 0,56-0,96) hace ser prudentes en ese sentido. En la pu-
(62). En el análisis de subgrupos, el conjunto blicación en la que se compara sucralfato
de pacientes subsidiarios de cirugía cardiaca con ranitidina, Cook et al. (63), sobre un to-
resultó ser el más beneficiado (RR, 0,41; IC tal de 1.200 pacientes, encontraron que con
95 %, 0,17-0,98). Sin embargo, cuando se la segunda existió un riesgo significativamente
empleó un modelo más conservador los re- menor de sangrado digestivo (RR, 0,44; IC
sultados, aunque similares (RR, 0,70), ya no 95 %, 0,21-0,92) sin diferencias en la tasa
alcanzaron significación estadística y, ade- de NAVM, ni en la mortalidad o en la estan-
más, en el análisis de la heterogenicidad del cia en UCI. Por ello, a la espera de nuevos
trabajo, ésta resultó moderada. Es decir, aún estudios parece más importante destacar el
se precisan más estudios que aclaren el papel papel de prevención del sangrado a la hora
exacto de la limpieza orofaríngea con clorhe- de elegir la medicación, sobre todo teniendo
xidina en la prevención de la NN. en cuenta la existencia de alternativas más
consistentes en la prevención de la NN que
se han ido comentado anteriormente. Ade-
más, conviene recordar que tampoco está cla-
Profilaxis de las úlceras ramente justificado el uso sistemático de pro-
de estrés filaxis del sangrado en todos los pacientes de
UCI y debería limitarse a los de mayor riesgo
El descenso de la acidez gástrica facilita su (necesidad de VM o coagulopatía) (64).
colonización por microorganismos potencial-
mente patógenos. Si a ello se añade un au-
mento del volumen intragástrico, el riesgo de Control de la glucemia
aspiración y de desarrollo de NN se multiplica
(5, 21). Por otra parte, los pacientes críticos, Existe evidencia suficiente de que la hiper-
especialmente si están en VM o presentan glucemia en los pacientes críticos se asocia a
coagulopatía, tienen un riesgo aumentado un peor pronóstico (secuelas tras episodios
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PREVENCIÓN DE LA NEUMONÍA NOSOCOMIAL 167

cardiovasculares, infecciones, etc.) que po- Otras medidas


dría mejorar con un adecuado control. En
2001, Van den Berghe et al. (66) publicaron La transfusión de concentrados de hematíes
los resultados de un estudio aleatorizado en se ha relacionado con un peor pronóstico de
pacientes quirúrgicos en VM en los que, con los pacientes, refiriéndose también a una ma-
la aplicación de un protocolo de control es- yor incidencia de infecciones (68). Incluso se
tricto de la glucemia (mantener valores de 80- ha visto que puede aumentar el riesgo de
110 mg/dl) con insulina, consiguieron una NAVM, especialmente la de aparición tardía
reducción de la mortalidad, de las bacterie- (OR, 2,16; IC 95 %, 1,27-3,66) (69). Por ello
mias, del tiempo de VM y de estancia en UCI. es recomendable ser conservador a la hora
El mayor efecto sobre la mortalidad se observó de decidir su aplicación. La presencia de he-
en los pacientes que permanecieron en moglobina < 6 g/dl, de insuficiencia respira-
la UCI más de 5 días (20,2 frente a 10,6 %; toria o de inestabilidad hemodinámica gra-
p = 0,005), sobre todo cuando el fallecimiento ves, de una extracción de oxígeno > 50 % y
se debía a fallo multiorgánico con un foco sép- de isquemia miocárdica, posiblemente sean al-
tico probado. La tasa de bacteriemias se re- gunas de las indicaciones más razonables (68).
dujo en el 46 %. Aunque faltan más estu-
dios que comprueben el efecto sobre la NAVM, Por último, el empleo de vacunas frente a dis-
si los beneficios se amplían a los pacientes mé- tintos patógenos es un campo prometedor de
dicos y cuál es el nivel ideal de glucemia que investigación. Entre otras, la reducción de la
debe mantenerse, parece correcto recomen- tasa de neumonías comunitarias graves con la
dar al menos que se busque la normogluce- consiguiente hospitalización podría ser una
mia (67). forma de disminuir secundariamente la NN (70).

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