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Respecto de las consignas planteadas en este foro, en base a la lectura del texto y consideraciones

personales, indudablemente no vivimos en una sociedad ilustrada, es ms, nos encontramos sumamente
alejados de dicha construccin.
Kant consideraba que deba existir cierta libertad para alcanzar la ilustracin, deban romper ese auto-
culpable estado de minora de edad. En nuestra sociedad, y en la mayora de las sociedades modernas, no
se da ni una, ni otra.
Desde el espectro gubernamental se busca de todas maneras restringir la libertad, con polticas pblicas de
ndole demaggicas, que consisten en planes sociales que no terminan siendo ms que dadivas
contenedoras de un estrato social numeroso, y a su vez polticas educativas que disfrazadas de inclusivas
tienden a disminuir los contenidos acadmicos y la exigencia. Esto sin mencionar la mentada fractura social
marcada por la ideologa.
Desde el punto de vista del individuo, esa cultura del no trabajo, del "alguien lo har por uno", de la
marcada innecesaridad de formacin para un futuro promisorio ha sido promovida y afianzada a raz de las
polticas pblicas, sobretodo en los ltimos 20 aos signados por el neoliberalismo. Y a decir verdad, parece
difcil producir "el" quiebre que posibilite la superacin de la minora de edad, en trminos estrictamente
Kantianos. En relacin a la faz individual, debemos sumar un aditivo que reviste de una importancia
mayscula, por un lado esos planes demaggicos obtienen/compran voluntades lo que claramente conduce
a una imposicin de pensamiento, y por otro lado y de manera ms general o global, los medios de
comunicacin, haciendo hincapi en los grandes multimedios que indiscutidamente son formadores de
opinin, logrando que un importante porcentaje de personas, sin espritu critico, sean conducidos a la
imposicin/conviccin de una idea especifica.

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