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El Misterioso Caso del

Hombre de Romanos 7
Colosenses 3:5-9
LOS DOS ERRORES DE NOVATO

Hay dos errores contra los cuales los hijos de Dios, particularmente los que apenas han
comenzado a confiar en su gracia, deben especialmente guardarse. El primero, sobre el que
ya se ha insistido, es el de fijarse en sus propias obras, confiando en alguna cosa que
puedan hacer, para ponerse en armonía con Dios. El que está procurando llegar a ser
santo mediante sus propios esfuerzos por guardar la ley, está procurando una
imposibilidad. Todo lo que el hombre puede hacer sin Cristo está contaminado de amor
propio y pecado. Solamente la gracia de Cristo, por medio de la fe, puede hacernos santos.
CC pag 60.
El error opuesto y no menos peligroso es que la fe en Cristo exime a los hombres de guardar
la ley de Dios; que puesto que solamente por la fe somos hechos participantes de la gracia de
Cristo, nuestras obras no tienen nada que ver con nuestra redención. CC pag 60.
El Misterioso Caso del Hombre de Romanos 7
Romanos 7:14-25
14. Porque sabemos que la ley es espiritual; pero yo soy carnal, vendido bajo pecado.
15. Pues lo que hago, no lo entiendo, pues no hago lo que quiero; sino lo que aborrezco, eso hago.
16. Y si lo que no quiero, eso hago, apruebo que la ley es buena.
17. De manera que ya no soy yo quien lo hace, sino el pecado que mora en mí.
18. Y yo sé que en mí (esto es en mi carne) no mora el bien; pues el querer está en mí, pero el hacer
el bien no.
19. Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, éste hago.
20. Y si hago lo que no quiero, ya no soy yo quien lo hace, sino el pecado que mora en mí.
21. Hallo, pues, esta ley, que cuando quiero hacer el bien, el mal está en mí.
22. Porque según el hombre interior me deleito en la ley de Dios;
23. mas veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y me lleva cautivo a
la ley del pecado que está en mis miembros.
24. ¡Miserable hombre de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte?
25. Gracias doy a Dios por Jesucristo nuestro Señor: Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de
Dios; mas con la carne a la ley del pecado.
De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es;
2 Corintios 5:17
las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y


Jeremías 17:9
perverso; ¿quién lo conocerá?

Sobre toda cosa guardada guarda tu corazón; porque de él


Proverbios 4:23
mana la vida.

En el agua se refleja el rostro, y en el corazón se refleja la


Proverbios 21:19
persona

Proverbios 21:19
Cuando el corazón ha sido renovado por el Espíritu de Dios, el hecho se manifiesta en la
vida. Al paso que no podemos hacer nada para cambiar nuestro corazón, ni para
ponernos en armonía con Dios, al paso que no debemos confiar para nada en nosotros ni en
nuestras buenas obras, nuestras vidas han de revelar si la gracia de Dios mora en
nosotros. CC pag 58.

3. Vuestro adorno no sea exterior con peinados ostentosos, atavíos de


oro, o vestidos lujosos,
1 Pedro 3:3,4
4. sino interno, del corazón, en incorruptible belleza de un espíritu
manso y tranquilo, que es de gran valor ante Dios.

Es cierto que puede haber una corrección del comportamiento externo, sin el poder
regenerador de Cristo. Un corazón egoísta puede ejecutar obras generosas. ¿De qué medio
nos valdremos, entonces, para saber a qué clase pertenecemos? CC pag 58.
El amor es de Dios, no puede producirlo u originarlo el corazón inconverso. Se encuentra
solamente en el corazón donde Cristo reina. "Nosotros amamos, por cuanto él nos amó
primero". 1 Juan 4:19

PASO 1

Cuando venimos a Cristo, como seres errados y pecaminosos, y nos hacemos participantes
de su gracia perdonadora, nace en nuestro corazón el amor a él. CC pag 59.

Cuanto más cerca estéis de Jesús, más imperfectos os reconoceréis, porque veréis más
claramente vuestros defectos a la luz del contraste de su perfecta naturaleza. Esta es una
evidencia de que los engaños de Satanás han perdido su poder y de que el Espíritu de
Dios os está despertando. CC Pag 65.

¿Aman ahora las cosas que en un tiempo aborrecían y aborrecen las cosas que en otro
tiempo amaban?
PASO 2

Se notará un cambio en el carácter, en las costumbres y ocupaciones. La diferencia será


muy clara e inequívoca entre lo que han sido y lo que son. El carácter se da a conocer, no por
las obras buenas o malas QUE DE VEZ EN CUANDO se ejecutan, sino por la tendencia de
las palabras y de los actos en LA VIDA DIARIA. CC pag 58.

PASO 3

Cuando es implantado el principio del amor en el corazón, cuando el hombre es renovado


conforme a la imagen del que lo creó, se cumple en él la promesa del nuevo pacto: "Pondré mis
leyes en su corazón, y también en su mente las escribiré" (Hebreos 10: 16).
"Este es el amor de Dios, que guardemos sus mandamientos" "El que dice: Yo le conozco, y
no guarda sus mandamientos, es mentiroso, y no hay verdad en él" (1 S. Juan 5: 3; 2: 4)
Hay quienes han conocido el amor perdonador de Cristo y desean realmente ser hijos de
Dios; sin embargo, reconocen que su carácter es imperfecto y su vida defectuosa, y están
propensos a dudar de que sus corazones hayan sido regenerados por el Espíritu Santo.
A los tales quiero decirles que no se abandonen a la desesperación.
Tenemos a menudo que postrarnos y llorar a los pies de Jesús por causa de nuestras
culpas y errores; pero no debemos desanimarnos. Aun si somos vencidos por el enemigo,
no somos arrojados, ni abandonados, ni rechazados por Dios. No; Cristo está a la
diestra de Dios e intercede por nosotros. Dice el discípulo amado: (1 S. Juan 2: 1).

Cuando está en el corazón el deseo de obedecer a Dios, cuando se hacen esfuerzos con ese
fin, Jesús acepta esa disposición y ese esfuerzo como el mejor servicio del hombre, y
suple la deficiencia con sus propios méritos divinos. Pero no aceptará a los que pretenden
tener fe en él, y sin embargo son desleales a los mandamientos de su Padre. 1 MS pag
449.
El quiere que os reconciliéis con él, quiere ver su pureza y santidad reflejadas en
vosotros. Y si tan sólo queréis entregaros a él, el que comenzó en vosotros la buena obra
la perfeccionará, hasta el día de Jesucristo. Orad con más fervor; creed más
plenamente. CC Pag 65.
El Secreto de Job
Job 1:1,7,8,5
1. Hubo un varón en tierra de Uz, que se llamaba Job; y este hombre era perfecto y
recto, temeroso de Dios y apartado del mal.
7. Y dijo Jehová a Satanás: ¿De dónde vienes? Y respondiendo Satanás a Jehová, dijo:
De rodear la tierra y de andar por ella.
8. Y Jehová dijo a Satanás: ¿No has considerado a mi siervo Job, que no hay otro como
él en la tierra, varón perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal?
5. Y acontecía que habiendo pasado en turno los días del convite, Job enviaba y los
santificaba, y se levantaba de mañana y ofrecía holocaustos conforme al número de
todos ellos. Porque decía Job: Quizá habrán pecado mis hijos, y habrán blasfemado a
Dios en sus corazones. De esta manera hacía todos los días.

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