Está en la página 1de 4

¿Cómo se determina la rentabilidad?

Para ser exactos, por la rentabilidad simple. Es la forma


de expresar la variación del valor de un activo, durante
un periodo de tiempo, suponiendo que los beneficios
que genera se producen al final del periodo. La fórmula
es la siguiente:
• RS = (Valor final + Rendimientos – Gastos – Inversión
inicial) / Inversión inicial
Para la rentabilidad de un producto:
• R= ((P-C)/P)*100
R es la rentabilidad que queremos calcular y nos
referiremos a ella en términos de porcentaje. Por
ejemplos: 10%, 30% 50%.
P es el precio al que estas vendiendo el producto a tus
clientes.
C es el costo; es decir, a cuanto compras tú el producto
que quieres vender, o cuanto te cuesta producir un
producto en caso de que seas un fabricante.
La rentabilidad financiera, también
denominada rentabilidad de los
fondos o capitales propios, viene
dada por la comparación entre el
resultado antes de impuestos RAT
(Resultado antes de impuestos e
intereses le descontamos los
gastos financieros derivados de
financiación ajena) y los capitales
invertidos por los propietarios o
fondos propios.
Ejercicios para calcular la rentabilidad
1.-Decidimos comprar un piso por 30.000€ y al cabo de cinco años lo
vendemos por 50.000€. En esos cinco años, hemos recibido 6.000€ de
alquiler y hemos tenido unos gastos de 3.000€.

RS = (50.000 + 6.000 – 3.000 – 30.000) / 30.000 = 76,67%

2.-Compramos acciones del Banco AB por el valor de 15.000€. Al cabo


de un año las vendemos por 12.500€. En ese año hemos recibido 500€
en dividendos y nos han cobrado 150€ en comisiones.

RS = (12.500 + 500 – 150 – 15.000) / 15.000 = -14,33%


Conclusión
Determinar la rentabilidad de un producto representa en pequeña
escala saber si la empresa está cumpliendo con los objetivos para los
cuales ha sido creada: generar utilidad para los accionistas. Además,
representa si las estrategias, planes y acciones que la gerencia de
mercadeo está siguiendo son correctos o no y en consiguiente realizar
los ajustes necesarios que corrijan el problema. En el competitivo y
globalizado mundo de hoy, las empresas deben ser rentables, pero a la
vez flexibles. Muchos grandes y fuertes gigantes mundiales, han
perdido su fuerza por no estar al tanto del verdadero significado de
rentabilidad y productividad.

También podría gustarte