Jesucristo y el

Celo
Jn. 2:17
Entonces se acordaron sus discípulos
que está escrito: El celo de tu casa me
consume.
 Por su Labor
• Desde temprano (Lc 2:49)
Entonces él les dijo: ¿Por qué me buscabais? ¿No
sabíais que en los negocios de mi Padre me es
necesario estar?
• Sin temor (Mt 15:12-13)
Entonces acercándose sus discípulos, le dijeron:
¿Sabes que los fariseos se ofendieron cuando oyeron
esta palabra? Pero respondiendo él, dijo: Toda planta
que no plantó mi Padre celestial, será desarraigada.
 En La Adoración
• Reverente (Jn. 2:14-16)
y halló en el templo a los que vendían bueyes, ovejas
y palomas, y a los cambistas allí sentados. Y
haciendo un azote de cuerdas, echó fuera del templo
a todos, y las ovejas y los bueyes; y esparció las
monedas de los cambistas, y volcó las mesas; y dijo a
los que vendían palomas: Quitad de aquí esto, y no
hagáis de la casa de mi Padre casa de mercado.
 En Su Misión
• Por la Palabra (Mt 5:18)
Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo
y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley,
hasta que todo se haya cumplido.
• Con sus discípulos (Mt 8:25-26)
Y vinieron sus discípulos y le despertaron, diciendo:
¡Señor, sálvanos, que perecemos! El les dijo: ¿Por qué
teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose,
reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza.
 En Su Misión
• Denunciando el error (Mt 23:13)
Mas ¡ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas!
porque cerráis el reino de los cielos delante de los
hombres; pues ni entráis vosotros, ni dejáis entrar a
los que están entrando.
 En Su Misión
• Anunciando lo que era necesario (Mt 16:21-23)
Desde entonces comenzó Jesús a declarar a sus
discípulos que le era necesario ir a Jerusalén y padecer
mucho de los ancianos, de los principales sacerdotes y
de los escribas; y ser muerto, y resucitar al tercer día.
 En Su Misión
• Comprometido (Mt 16:22-23)
Entonces Pedro, tomándolo aparte, comenzó a
reconvenirle, diciendo: Señor, ten compasión de ti; en
ninguna manera esto te acontezca. Pero él,
volviéndose, dijo a Pedro: ¡Quítate de delante de mí,
Satanás!; me eres tropiezo, porque no pones la mira en
las cosas de Dios, sino en las de los hombres
 En Su Misión
• Haciendo lo necesario (Jn 19:28-30)
Después de esto, sabiendo Jesús que ya todo estaba
consumado, dijo, para que la Escritura se cumpliese:
Tengo sed. Y estaba allí una vasija llena de vinagre;
entonces ellos empaparon en vinagre una esponja, y
poniéndola en un hisopo, se la acercaron a la boca.
Cuando Jesús hubo tomado el vinagre, dijo:
Consumado es. Y habiendo inclinado la cabeza,
entregó el espíritu.
 1Pe 2:21
Pues para esto fuisteis llamados;
porque también Cristo padeció
por nosotros, dejándonos
ejemplo, para que sigáis sus
pisadas