Oración de la Comunidad

(11-MAR-22)
"No hay camino para la paz, la paz es el camino”
 ORIENTACIONES PARA LA
ORACIÓN

Tal vez haga mucho tiempo que no estás un rato a solas con Jesús, o quizás ésta sea
la primera vez que te dispones a rezar frente a Jesús expuesto en el Santísimo
Sacramento. Estas orientaciones son para ayudarte a aprovechar este ratito de
oración:
Lo primero que te sugerimos es que te arrodilles delante de Jesús, le mires sobre el
altar y hagas una breve oración de adoración, en la que reconozcas toda su
grandeza como verdadero Hijo de Dios hecho hombre y todo el amor que te ha
manifestado a lo largo de tu vida. Puedes pedirle que sea Él mismo quien disponga
tu corazón para poder escucharle y aceptar sinceramente lo que Él quiera decirte
en esta noche. También puedes invocar al Espíritu Santo, Maestro interior de
oración, o dirigirte a María y pedirle que te introduzca en la intimidad con el Señor.
Canto: “No adoréis a nadie”

No adoréis a nadie a nadie más que a Él

No adoréis a nadie a nadie más que a Él
No adoréis a nadie a nadie más
No adoréis a nadie a nadie más
No adoréis a nadie, a nadie más que a Él

Porque solo el nos da la libertad

Porque solo el nos da la libertad
No adoréis a nadie a nadie más
No adoréis a nadie a nadie más
No adoréis a nadie, a nadie más que a Él
 PARA
PENSAR

• Hoy vivimos tiempos convulsos, pandemias, terremotos y ahora una guerra.

Nunca en nuestros días, podíamos pensar que viviríamos una etapa tan inestable
como ésta. Hoy especialmente queremos y deseamos la paz, para el pueblo
ucraniano y para todos nosotros.
• Hoy vamos a realizar una oración muy especial por la Paz en el Mundo.
• El Señor nos ha dado libre albedrío, debemos admitir que algunos humanos usan
este don de Dios para hacer la guerra, para esclavizar, matar o robar ... Orar por la
paz en el mundo no es solo mostrar compasión, también es el deber del cristiano
porque es decirle a Dios que lo amamos por esta libertad de acción que nos dio ...
• Pidamos esta noche por la Paz en el mundo.
Canto: “Magnificat”

Magnificat, magnificat
Magnificat anima mea Dominum
Magnificat,magnificat
Magnificat anima mea
Los salmos nos resultan cercanos porque
son oraciones surgidas del corazón en
momentos culminantes de la vida.
Pueden ser súplicas desgarradas o
alabanzas exultantes, llenas de alegría y
gratitud. Pero en todos ellos late, tras la
voz que pronuncia los versos, una
confianza profunda: la certeza de que
son palabras dirigidas a un Dios que
escucha.
 1
Hijos de Dios, aclamad al Señor,
aclamad la gloria y el poder del Señor,
aclamad la gloria del nombre del Señor,
postraos ante el Señor en el atrio sagrado.
 2
La voz del Señor sobre las aguas,
el Dios de la gloria ha tronado,
el Señor sobre las aguas torrenciales.
 3
La voz del Señor es potente,
la voz del Señor es magnífica,
la voz del Señor descuaja los cedros,
el Señor descuaja los cedros del Líbano.
 4
Hace brincar al Líbano como a un novillo,
al Sarión como a una cría de búfalo.
 5
La voz del Señor lanza llamas de fuego,
la voz del Señor sacude el desierto,
el Señor sacude el desierto de Cadés.
 6
La voz del Señor retuerce los robles,
el Señor descorteza las selvas.
En su templo un grito unánime: «¡Gloria!»
 7
El Señor se sienta por encima del aguacero,
el Señor se sienta como rey eterno.
El Señor da fuerza a su pueblo,
el Señor bendice a su pueblo con la paz.
 SALMO

Hijos de Dios, aclamad al Señor,

La voz del Señor lanza llamas de fuego,
aclamad la gloria y el poder del Señor, la voz del Señor sacude el desierto,
aclamad la gloria del nombre del Señor, el Señor sacude el desierto de Cadés.
postraos ante el Señor en el atrio sagrado.

La voz del Señor sobre las aguas, La voz del Señor retuerce los robles,
el Dios de la gloria ha tronado, el Señor descorteza las selvas.
el Señor sobre las aguas torrenciales.
En su templo un grito unánime: «¡Gloria!»
La voz del Señor es potente,
la voz del Señor es magnífica,
El Señor se sienta por encima del aguacero,
la voz del Señor descuaja los cedros,
el Señor descuaja los cedros del Líbano. el Señor se sienta como rey eterno.
El Señor da fuerza a su pueblo,
Hace brincar al Líbano como a un novillo,
el Señor bendice a su pueblo con la paz.
al Sarión como a una cría de búfalo.
Canto: “Aleluya (Taizé)

¡Aleluya, aleluya, aleluya!

Lectura del
Santo
Evangelio
según San Juan
 REFLEXIÓN

 Todos los días en la Misa se pronuncian estas palabras: “tú que dijiste a
tus discípulos «la paz os dejo, mi paz os doy» no tengas en cuenta
nuestros pecados sino la fe de tu Iglesia y, conforme a tu palabra
concédele la paz y la unidad”.
 “Danos la paz. La paz nuestra de cada día, dánosla hoy”.

Pensemos un poco en el verdadero significado de estas frases que

repetimos en cada misa.
Vayamos palabra por palabra interiorizando su mensaje.
Canto: “Paz Señor”

Paz Señor en el cielo y la tierra, paz Señor en las olas del mar, paz
Señor en las flores que mueren sin saberlo la brisa al pasar, tu que
has hecho las cosas tan bellas y les das una vida fugaz por señor tu
mirada sobre ellas y devuelve a los hombres las paz. Hoy he visto
señor en le cielo suspendidas de un rayo de luz dos paloma que
alzaron el vuelo con las alas en forma de cruz, Haz que vuelvan de
nuevo a la tierra las palomas que huyeron Señor y la llama que
enciende la guerra se conviertan en paz y amor.
 PETICIONES

 
Canto para cada petición:

“Kyrie eleison ”
“Christe, eleison”
Después de las peticiones todo el que quiera puede
hacer una petición personal en voz alta.
Todas peticiones que hemos dicho y todas las que
están en nuestro corazón, se las presentamos al
Padre y lo pedimos unidos con la oración que Cristo
nos enseñó
En esta noche pedimos muy especialmente por la paz y lo haremos rezando juntos la oración,
propuesta por el Papa Francisco para pedir la paz. Y a continuación, rezaremos juntos el Padre
Nuestro.
0RACIÓN: “POR LA PAZ”

Señor, Dios de paz, ¡escucha nuestra súplica!

Abre nuestros ojos y nuestros corazones,
y danos la valentía de decir: ¡Nunca más la guerra!
¡La guerra destruye todo!
Infúndenos el valor de construir la paz.
Mantén encendida en nosotros la llama de la esperanza para
que tomemos con paciente perseverancia opciones de
diálogo y reconciliación, de modo que finalmente triunfe la
paz.

Amén
Canto: “A el sea la gloria”

Todo es de mi Cristo por el y para el

Todo es de mi Cristo por el y para el
A el sea la gloria
A el sea la gloria
A el sea la gloria Por siempre amen
¡¡GRACIAS POR
COMPARTIR TU TIEMPO Y
TU ORACION!!