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“AÑO DEL BUEN SERVICIO AL CIUDADANO”

APENDICECTOMÍA
ASIGNATURA Técnica Operatoria

DOCENTE Dr. Javier Mego

INTEGRANTES Ledesma Gonzáles, María Isabel


López Vilela, Priscila
Molocho Quiróz, Eugenio N.
Parillo Condori,Dany Ximena
Paulino Córdova, Alexander Hiver
APENDICECTOMÍA

Es el tratamiento quirúrgico inmediato (no


mayor de 24 horas) de todo paciente con
cuadro sugestivo de apendicitis aguda.
Preparación operatoria
-Reposo
-NPO x6h
- CFV
- Hidratar NaCl 9%o x1000 cc …40 gotas por minuto
- Ceftriaxona 1g EV C/12h
- Metronidazol 500 mg EV c/8h
- Ketorolaco 30 mg EV c/8h
Además de contar con sus análisis preoperatorios.
Anestesia
Es preferible la anestesia por inhalación. Sin
embargo es satisfactoria la anestesia raquídea.
En el paciente muy grave puede estar indicada la
anestesia local.

Posición
Decúbito supino.
1. Incisión. Diéresis de pared abdominal por planos
hasta cavidad peritoneal.
2. Identificación de hallazgos.
3. Apendicectomía AML. Ligadura de
mesoapéndice y apéndice.
4. Coprostasia y exéresis de apéndice.
5. Recuento completo de gasas.
6. Síntesis de pared por planos.
Todas las muestras se envían a patología.
Incisión y exposición
• La gran mayoría de los apéndices se aborda de manera
satisfactoria a través de la incisión inferior derecha con
separación muscular, que es una variación del procedimiento
original de Mc Burney.
• Si el paciente es una mujer y no se dispone de una valoración
laparoscópica, muchos especialistas prefieren un corte en la
línea media para exponer la pelvis.
• Cuando existen pruebas de formación de absceso, la incisión
debe practicarse directamente sobre él.
Diéresis por planos

Piel

TSC

Músculo Oblicuo Mayor

Músculo Oblicuo Menor

Músculo Transversal

Fascia Transversall

Peritoneo
Se profundiza primero hasta la
aponeurosis de la capa muscular externa.
En la incisión con divulsión muscular se
separa la aponeurosis del musculo oblicuo
mayor desde el borde de la vaina del recto
hasta el flanco, hacia fuera y paralelo a sus
fibras (figura4).

Con el músculo oblicuo mayor sostenido


hacia un lado mediante separadores, se
desgarra el músculo oblicuo menor en
forma paralela a sus fibras hasta la vaina
del recto (figura5) y en dirección de la
cresta iliaca (figura6).

En ocasiones se cortan la fascia transversal


y el músculo con el oblicuo menor, pero si
se abre la fascia transversal con el
peritoneo se crea una estructura fuerte
para reparación.
Puede abrirse la vaina del recto 1 o 2 cm
para obtener exposición adicional (figura
7).

Se toma el peritoneo entre pinzas, primero


el cirujano y a continuación el ayudante
(figura8). El cirujano libera la prensión
original, la levanta nuevamente cerca de
las pinzas del primer ayudante y comprime
el peritoneo entre las pinzas con el mango
del bisturí para liberar el intestino
subyacente. Esta maniobra para proteger
el intestino es importante y siempre debe
llevarse a cabo antes de abrir el peritoneo.

Tan pronto se incide el peritoneo (figura


8), se pinzan sus bordes a los apósitos de
gasa húmedos que ya rodean la incisión
(figura 9). Se hacen cultivos del líquido
peritoneal.
Como regla, cuando se encuentra el
ciego casi de inmediato es mejor
desplazarlo hacia la incisión, sostenerlo
con una pinza de gasa húmeda y
extraer el apéndice sin buscarlo
alrededor en forma ciega en el
abdomen (figura 10).

Tal vez sea necesario cortar las


inserciones peritoneales del ciego con
la finalidad de facilitar la extirpación del
apéndice. Una vez que se extrae este
último, puede tomarse su mesenterio
cerca de la punta con una pinza y
regresarse el ciego a la cavidad
abdominal.
- A continuación se aísla la cavidad peritoneal con compresas de gasa húmeda (figura 11).
- Se corta el mesenterio del apéndice entre pinza y se ligan con cuidado los vasos (figura
12). Es mejor colocar un punto por transfixión que ligar el contenido de las pinzas porque
no es raro que, cuando las estructuras se hallan bajo tensión se retraigan los vasos de la
pinza y ocasionen después una hemorragia hacia el mesenterio.
- Una vez que se ligan los vasos éste último, se machaca la base del apéndice con una pinza
de ángulo recto (figura 13).
Se mueve 1 cm la pinza de ángulo recto hacia
la punta del apéndice. En seguida hay que ligar
el apéndice justo en el borde proximal de la
porción machacada (figura 14) y colocar en el
nudo una pinza recta. Se hace una sutura en
bolsa de tabaco en la pared del ciego en la
base del apéndice, con el cuidado de no
perforar vasos sanguíneos en donde estaba
insertado el mesenterio del apéndice (figura
15).

Debe sostenerse hacia arriba el apéndice; se


aísla el ciego con gasa húmeda para prevenir la
contaminación y se corta el apéndice entra la
ligadura y la pinza (figura 16)
Hay que seccionar la ligadura en la base del apéndice y
empujar hacia adentro con la pinza recta en la ligadura
del muñón con el objeto de invaginar éste último dentro
de la pared cecal. Se abren las mandíbulas de la pinza y se
extrae esta última a medida que se anuda la sutura en
bolsa de tabaco. Puede fijarse la pared del ciego con
pinza para tejidos, con lo cual se invierte el muñón
apendicular (fugura 17).

Luego se lava el área con solución salina tibia y se coloca


el epiplón sobre el sitio de la operación (figura 18 y 19)

Si existe un absceso localizado o una perforación cerca de la base, de tal manera


que no es posible cerrar el ciego con seguridad, o bien la hemostasia es
deficiente, puede ser aconsejable instalar un drenaje (blando y liso).
Método alternativo
• En algunos casos, con el fin de prevenir la rotura de un apéndice
agudo distendido, es más seguro ligar y cortar la base del apéndice
antes de llevarlo hacia la herida quirúrgica.
• Cuando no se encuentra con facilidad el apéndice, la búsqueda
debe seguir la tenia anterior del ciego, que conduce directamente a
la base del apéndice sin importar cuál sea su posición.
• Si se identifica el apéndice retrocecal, es preciso escindir el
peritoneo parietal paralelo al borde externo del apéndice a través
del peritoneo. Esto permite disecar el apéndice para liberarlo de su
posición atrás del ciego y en el recubrimiento peritoneal del
músculo psoasiliaco.
• En ocasiones el ciego puede situarse en el cuadrante superior o en
realidad en el lado izquierdo del abdomen si no hubo rotación. A
veces está indicado incrementar el tamaño de la incisión e incluso
practicar una segunda incisión.
Cuidado posoperatorio
• Se conserva el equilibrio de líquidos. Tan pronto
remiten las náuseas se suministran sorbos de agua.
Se aumenta la dieta de manera gradual.
• Cuando se halló alguna prueba de sepsis peritoneal,
se administran dosis frecuentes de antibióticos. Es
aconsejable la aspiración gástrica constante y el
balance hídrico electrolítico.
• La localización pélvica de pus aumenta si se coloca al sujeto
en posición semisedente. Se le permite salir de la cama tan
pronto lo justifique su estado general. Se instituye profilaxis
contra trombosis venosa profunda.
• Cuando existen signos persistentes de sepsis es necesario
considerar una infección de herida o un absceso pélvico o
subfrénico.
• Cuando se advierta presencia de sepsis prolongada, los
estudios seriados de imágenes mediante TAC unos 7 días
después de la operación suelen revelar el sitio causal.
APENDICECTOMÍA LAPAROSCÓPICA

VENTAJAS DESVENTAJAS
 Menor dolor posoperatorio.  Mayor costo del equipo.
 Puede acortar la estadía  Operador dependiente.
hospitalaria.  Mayor tasa de abcesos
 Puede resultar en un retorno intraabdominales.
más rápido de la función  Mayor duración del
intestinal. procedimiento.
 Retorno más rápido a la
actividad normal.
 Mejores resultados estéticos.

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