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MAS ALL DE LO QUE

VE EL HOMBRE
Contexto de la historia
Hizo, pues, Samuel como le dijo Jehov; y luego que l
lleg a Beln, los ancianos de la ciudad salieron a
recibirle con miedo, y dijeron: Es pacfica tu venida?El
respondi: S, vengo a ofrecer sacrificio a Jehov;
santificaos, y venid conmigo al sacrificio. Y santificando
l a Isa y a sus hijos, los llam al sacrificio.Y aconteci
que cuando ellos vinieron, l vio a Eliab, y dijo: De cierto
delante de Jehov est su ungido.Y Jehov respondi a
Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su
estatura, porque yo lo desecho; porque Jehov no mira
lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que est
delante de sus ojos, pero Jehov mira el corazn. 1
Sam 16:4-7
Y tena l un hijo que se
llamaba Sal, joven y
hermoso. Entre los
hijos de Israel no haba
otro ms hermoso que
l; de hombros arriba
sobrepasaba a
cualquiera del pueblo. 1
Sam. 9:2
Entonces dijo Samuel a
Isa: Son stos todos tus
hijos? Y l respondi:
Queda an el menor,
que apacienta las ovejas.
Y dijo Samuel a Isa:
Enva por l, porque no
nos sentaremos a la
mesa hasta que l venga
aqu. Envi, pues, por l,
y le hizo entrar; y era
rubio, hermoso de ojos, y
de buen parecer.
Entonces Jehov dijo:
Levntate y ngelo,
porque ste es. 1 Sam
16:11
Hasta ese momento David haba
demostrado poseer vigor juvenil, un
espritu amante y gentil e intrepidez
que emanaba de la confianza en el
Pero el poder divino. No haba sido
corrompido por el mundo. Tena un
Seor alma contemplativa que
desarrollaba en la quietud de las
se

mira el colinas de Beln. All, pastoreando


las ovejas como Moiss en Madin,
coraz adquiri un
responsabilidad y
sentido de
desarroll
n cualidades de liderazgo que deban
acompaarlo a travs de la vida.
Comentario Bblico Adventista, Tomo
2, 1 Sam 16:7

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