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Los Hombres Son de Marte, Las Mujeres Son de Venus
Los Hombres Son de Marte, Las Mujeres Son de Venus
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Type Book
State Borrowed
Temas importantes
Resumen
Los hombres son de
Marte y las mujeres
son de Venus:
El señor “arréglalo-
todo” y la Comisión
de mejoramiento del
hogar:
Los hombres se
meten en sus cuevas
y las mujeres hablan:
Cómo estimular al
sexo opuesto:
Hablar diferentes
idiomas:
Los hombres son
como bandas
elásticas:
Las mujeres son
como olas:
El descubrimiento
nuestras
Temas
importantes
El libro habla sobre las
diferencias que hay
entre un hombre y una
mujer y porque es
importante conocerlas a
fin de tener una mejor
relación romántica. Se
hace siempre énfasis
en que la pareja tiene
que respetar los
tiempos, necesidades y
naturalezas del otro así
como las propias.
Conocer las diferencias
entre uno y otro hacen
una convivencia sin
conflictos que se vuelve
cada vez más linda con
el tiempo.
En Marte hablar y dar consejos es algo intimo, solo cuando alguien necesita
ayuda sin otra manera de resolver el problema.
No les gusta que les invalidan los sentimientos dándoles consejos cuando
ellas cuentan sus sentimientos.
Cuando están en este modo, les cuesta prestar atención al resto de cosas.
Los hombres se sienten abrumados con tanto de que hablar y tratan de dar
soluciones a los problemas.
Ambos sexos reaccionan con disgusto con la forma de aliviar el estrés del
opuesto.
Los hombres pueden llegar a olvidarse del mundo con sus problema.
Los hombres se paralizan al dar consejos y ver que las mujeres los rebotan,
eso los hace sentir inútiles y los confunde.
Total, hay que tener en cuenta los tiempos del otro y tener respeto.
Los marcianos deben entender que las mujeres necesitan ser escuchadas y
no aconsejadas. Además, pueden distraerse con su relato y beneficiarse
ambos.
Las mujeres deben darle espacio a los hombres de poder solucionar sus
asuntos.
Todo esto está bueno, pero hay que recordar que uno solo no tiene problemas
Hay algunos problemas que se presentan cuando los hombres tienen que dar
amor y las mujeres recibir.
Ambas cosas los altera, ya que los pone en una situación vulnerable de
necesitar a los demás con el temor de ser rechazados o abandonados.
Se pueden sacar muchas conclusiones de esto. Pero las lecciones que más me
llamaron son:
Uno como hombre tiene que aprender a dar amor sabiendo que si se
equivoca se puede arreglar, y no que porque una relación está bien no tiene
que mejorarse. De no ser así, la relación cae en una rutina que mata el amor.
Las mujeres tiene que poner límites en sus relaciones, tienen que equilibrar
cuanto reciben y cuanto sienten que dan. Sobre todo ponerlo en palabras
con su pareja. Sino una cae en la infelicidad por el solo hecho del miedo al
rechazo.
En una relación, ambos deben ser consientes que ambos merecen recibir y
deben dar, LO QUE EL OTRO NECESITA.
Los padres tienen una importancia enorme en el futuro de sus hijos. Los
padres son modelos de las relaciones de sus infantes, si su relación se
encuentra alguna falla significativa, su hijo la tomará como que eso es lo
normal. Su vida será condicionada.
Cuando las mujeres hablan, los hombres callan. Esto trae una
malinterpretación de las cosas.
Las mujeres tienen que aprender a despreocuparse por los hombres y los
hombres a preocuparse y estar atentos a su mujer.
Así mismo, la mujer debe respetar la cueva del hombre y no dejarse llevar
por su naturaleza venusina. Si una quiere que su hombre salga de la cueva,
debe dejarlo a su suerte y proporcionarle confianza siempre que pueda.
Las mujeres chocan con ese ciclo, ya que las hace sentir rechazadas, el otro no
tiene interés.
Muchas mujeres sienten que los hombres se alejan cuando ellas se acercan,
lo que ocurre es que el afecto sacia la necesidad amorosa de los hombres y
El libro también detalla que sucede con una pareja que pasa todo el día junta:
Las parejas deben ser independientes entre sí. Aprender a hacer cosas sin
el otro. Muchas veces, mostrar afecto es estar solo y feliz. Esto puede
alegrar a tu pareja. No sean un chicle.
Que ella haya pasado un ciclo y ahora se sienta mejor, no implica que un
problema se haya resuelto. Tal vez, luego vuelve con otro problema o el
mismo. Esto ocurre porque es cíclico, como una ola.
No hay que rescatar a una mujer y mucho menos impedir que toque fondo,
de no ser así, se queda como un potus.
Acá cagamos.
Ella necesita ser escuchada porque tiene derecho a estar perturbada, pero él
no puede escucharla correctamente, y también tiene derecho a ser libre.
Se puede evitar las discusiones apoyando las necesidades del otro, sin tener
que negar la naturaleza de ninguno.
Una mujer tiene derecho a sentirse mal y su pareja debe hacer todo lo
posible para apoyarla sin salir de su naturaleza masculina.
CUIDADO CONFIANZA
COMPRENSIÓN ACEPTACIÓN
RESPETO APRECIO
DEVOCIÓN ADMIRACIÓN
REAFIRMACIÓN APROBACIÓN
TRANQUILIDAD ALIENTO
Tanto hombres como mujeres pueden entender y solicitar las necesidades del
otro sexo, pero esto no será posible antes de que reciban sus necesidades
primarias, ya que sin ellas ambos sexos no son capaces de recibir otras.
Una mujer recibe cuidado, ella se siente amparada por alguien, y eso le
hace confiar en la otra persona. Cuando un hombre recibe confianza, siente
que hay una persona que de verdad piensa que su forma de hacer las cosas
está bien, y no hay mejor manera de alegrar a un hombre que esa. Esto es
recíproco.
Cuando un hombre escucha con empatía y sin dar consejos, ella se siente
comprendida. Cuando ella cree ciegamente que él hace todo lo que está a
su alcance por la relación, él se siente aceptado.
Cuando una mujer siente que tiene un trato único, como si ella fuera especial
entre las demás, siente devoción. Cuando a un hombre le expresan que sus
virtudes y formas de hacer las cosas son las necesarias para resolver los
problemas en la relación, el se siente admirado, no hay nadie como él.
Una forma de entender como se siente un hombre con el amor cuidadoso que
recibe una mujer es pensar en la fábula del caballero de la brillante armadura.
Con todos estos inconvenientes a la hora de llevar a cabo una buena relación, es
útil aprender a expresar lo que una mujer y hombre quieren que les digan.
Hay que esperar a que él se sienta amado para que se deje de resistir al
cambio. Por mientras, acéptelo tal como es.
Como para cerrar un toque este capítulo, las mujeres necesitan un amor
cuidadoso y los hombres un amor de confianza. Recordad activamente las
necesidades de los otros resulta esencial para el correcto desarrollo de una
relación.
Debido a que iniciar una discusión puede acarrear graves consecuencias, hay
quienes optan por evitarlas, cuando termina siendo peor:
Simular es una técnica más femenina, consiste en hacer como que todo está
perfecto por temor a discutir. Lo que termina pasando es que la mentira se
acaba y la burbuja explota, a veces muy mal.
Una persona que recibe poco amor tiende a herir más en las discusiones. Con
una persona con todas sus necesidades afectuosas saciadas es complicado
esperar que las discusiones terminen en algo tan grave.
En las discusiones no molesta el choque de ideas, sino el cómo se las expone a
esas ideas. No debaten el que, sino el como.
Decir “Lo lamento”. No siempre son las palabras que uno debe usar, por eso
es importante en momentos de neutralidad hacer el ejercicio con su pareja
de preguntarle como le gusta que le respondan cuando esté enojada o
perturbada.
Usted, mujer, cuando esté perturbada hágalo saber con vocabulario literal,
así su hombre no provocará malentendidos.
Al principio . .
Al principio los hombres recuerdan las pequeñas cosas y las mujeres
demuestran su aprecio afectuosamente. Pasa tiempo en la relación y estas
cosas no deben olvidarse.
Algunas de las mejores maneras para sumar puntos siendo hombre son:
Ofrezca ayuda con los quehaceres cuando vea que se siente mal o
perturbada
Compre boletos para alguna actividad que ella disfrute, conciertos, ballet,
opera
Cuando se alojen en un hotel, pida que los reciban con algo especial
Haga una lista de arreglos y déjela para que ella pueda escribir,
complétela
La ira
La tristeza
El miedo
El pesar
El amor
La carta de amor se puede escribir siempre que uno se sienta mal. Ayuda
además de a las relaciones a entender los sentimientos de uno y así, verlos
de un punto de vista un poco más crítico. Te hace pensar.
Compartir la carta
Esto ayuda a que la otra persona comprenda lo que siente, anima al cambio
de su parte, promueve la confianza y aumenta la intimidad entre la pareja.
No piense que hace lo que usted pidió solo por la carta, confíe en que esta
dando lo mejor de si. Que ya lo intente habla de que le importa.
Evitar adicciones
Es importante saber si tenemos algún sentimiento reprimido dentro. Esos
sentimientos reprimidos nos pueden llevar a las adicciones, hay que darles
un espacio.
Siento que lo más acertado de este capítulo fue la forma de hacernos visible
lo que sentimos. Si no hacemos eso, lo que sentimos nos come desde
dentro. Es importante nosotros entender lo que sentimos y recibir apoyo y
amor, así no dejar que lo insignificante nos juegue una mala pasada.
El segundo paso
El tercer paso
Los refunfuñidos
Estos son los ruidos que un hombre hace antes de hacer un pedido. No
implican que odie hacer el pedido, es solo una manera de expresar lo
concentrado que estaban en esa tarea que con el pedido, tuvo que dejar de
lado. No comience discusiones ni dé razones de su pedido, es un pedido, no
una exigencia.
Poder elegir entre hacer un pedido o no hacerlo, con libertad, y saber que sin
importar la respuesta, usted será amado.
Hay algunas formas de recordar que estas cosas no son producto de nuestras
parejas:
¿Cómo lo combatimos?
Es importante hacer saber a su pareja hasta que punto uno se siente
desatendido. Es importante que la pareja empatice con lo que uno sintió y
juntos busquen la manera de remediarlo.
La mejor metáfora para describir al amor es pensar en un jardín cuidado por dos
personas en un año. Las distintas estaciones son:
La primavera:
La primavera en el amor todos la conocemos, parece que no va a acabar y
que solo tiene cosas buenas para nosotros, es la más querida por lejos y la
gente cuando piensa en el amor solo piensa en ella. No vemos los errores en
nuestra pareja y sentimos que es infinita.
El verano:
El calor ya empieza a molestar. Uno se da cuenta que su pareja tiene
defectos, y que tiene que trabajar para poder sacar la maleza de su jardín y
quitar las plantas muertas. Requiere trabajo y es aquí donde la mayoría de
El otoño:
Nos puede parecer lindo, es una estación de dar gracias y donde
entendemos que el trabajo da sus frutos. El libro no la describe muy bien,
pero pienso que se refiere al punto donde todo llega la rutina y la gente tiene
que recordar todo lo lindo de su jardin.
El invierno:
La más fría lejos, uno puede verla como el asesino del amor. Los hombres se
meten en sus cuevas, las mujeres en sus pozos y parece que todo
lentamente muere. Los sentimientos reprimidos florecen, la convivencia se
hace imposible, la banda elástica ya no tiene fuerza y la ola se rompe. Es
importante recordar que el amor tiene esto, y si nos rendimos en esta
estación podemos llegar a perdernos volver a ver la primavera!
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