Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Leo Strauss Filosofia Politica PDF
Leo Strauss Filosofia Politica PDF
1. El p r o b l e m a d e la f i l o s o f ía p o l ít ic a
I
rios, lo que llaman “autoritario” estoy seguro de que
no es otra cosa que una caricatura de todo lo que ellos,
como buenos demócratas, rechazan. O cuando hablan
de los tres principios de legitimidad (racional, tradi
cional y carismático), su . simple expresión “rudnízación
| del carisma” descubre un pensamiento protestante o
| liberal que ningún judío conservador o ningún católico
podría aceptar: a la luz del concepto de “rutinización
I; del carisma”, la génesis de la Halakah, sacada de las
|: profecías bíblicas, por una parte, y la génesis de la
í Iglesia católica, sacada de las enseñanzas del Nuevo
Testamento, aparecen necesariamente como casos de
“rutinmción del carisma”. Si se me objetase que los
juicios de valor son, en efecto, inevitables en las cien
cias sociales^ pero tienen solamente un carácter con-
: dicional, contestaría de este modo: ¿no son esenciales
% estas condiciones en lo que respecta a los fenómenos
í sociales?, ¿no tiene el científico social que asumir ne-
|j cesaríamente que una vida social sana en este mundo
es algo bueno, del mismo modo que la medicina asume
necesariamente que la salud y la longevidad sana son
Cosas buenas? ¿No están todas las afirmaciones fácticas
28 ¿Qué es filosofía política? j ¡
I
basadas en condiciones o presunciones, aunque nunca j :
se planteen como problema mientras estemos conside- ;
rando los hechos como hechos (por ejemplo: que existe h
el "hecho”, o que todo lo que ocurre tiene una causa)? >
La imposibilidad de construir una ciencia política I
avalorativa puede ser explicada en términos muy sim- j
pies. La ciencia política presupone la distinción entre j
supuestos políticos y supuestos -que no lo son; presu- :
pone, por tanto, alguna clase de respuesta a la pregun- .
ta ¿qué es lo político? Para llegar a ser verdaderamen- >
te científica, la ciencia política tendrá que plantearse |
este problema y resolverlo explícita y adecuadamente. ¡
Pero es imposible definir qué es lo político, como aque- |
lio que concierne a la polis, el “país” o el “estado”, sin ¡
contestar previamente al problema de qué es lo que i
constituye una sociedad de esta clase. Una sociedad, |
por otra parte, no puede ser definida sin aludir a sus {
fines. El intento más conocido de definir “el estado” j
sin hacer referencia a sus fines se admite que conduce 1
a una definición derivada directamente del tipo del “es- |
tado moderno” y que por completo sólo es aplicable a I
este tipo de estado; se trataba de un intento de definir )
el estado moderno sín haber definido antes el estado. f
Aceptando la definición del estado, o mejor de la so- I
ciedad civil, en relación con sus fines, sin embargo, ad~ I
mitimos un módulo a cuya luz tendremos que juzgar I
las acciones y las actividades políticas. Los fines de la |
sociedad civil juegan necesariamente como módulo para J
juzgar las sociedades civiles.
2) La exclusión de los juicios de valor se basa en
la presuñcioñ"cle'que la razón humana es esencialmente
incapaz de resolver los conflictos entre valores distintos :
o entre sistemas de valores diferentes. Pero esta pre
sunción, aunque generalmente se la considera como un
hecho, nunca ha sido sometida a prueba, Su compro
bación requeriría un esfuerzo semejante al que condujo
a la concepción y elaboración de la Crítica de la razón
pura; requeriría una crítica comprensiva 4e la ragqn
El problem a de la filosofía 'política 29
2. La s o l u c ió n c l á s ic a