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Y como si fuera poco, cada día pesa sobre mí (nosotros) la preocupación por todas las iglesias.

¿Cuando alguien se siente débil, no comparto yo (compartimos) su debilidad? ¿Y cuando a


alguien se le hace tropezar, no ardo yo (ardemos) de indignación? 2 Corintios 11:28-29

A nuestros amados hermanos y hermanas alrededor del mundo:

Qué la gracia y la paz de Dios nuestro Padre y Jesús nuestro Señor y Salvador estén con ustedes. Desde
el Jubileo de Las Misiones del Mundo de Portland del año 2005, ha habido numerosas cartas de
advertencias sobre división proveniente de los líderes de la antigua Iglesia de Cristo Internacional (ICOC)
contra los McKeans y la Iglesia de Portland. El 3 de octubre de 2005, Kip McKean recibió una carta
firmada por más de sesenta evangelistas y ancianos quienes tienen graves preocupaciones y
acusaciones con relación a su carácter, sus motivos y habilidades para construir su ministerio. Otra vez
más, el tema central trató sobre división. Dependiendo de la situación, bíblicamente, la división puede
ser pecado (Romanos 16:17-18) o simplemente el efecto santo por la predicación de la Palabra. El
apóstol Juan fue testigo de esto durante el ministerio de Jesús: De nuevo las palabras de Jesús fueron
motivo de disensión entre los judíos. Muchos de ellos decían: Está endemoniado y loco de remate.
¿Para qué hacerle caso? Pero otros opinaban: Estas palabras no son de un endemoniado. ¿Puede
acaso un demonio abrirles los ojos a los ciegos? (Juan 10:19-21). Esta carta abierta está escrita en
honor a Dios, por la “preocupación que tenemos por todas las iglesias,” y en defensa del ministerio de la
Iglesia de Cristo Internacional de Portland, y a nuestros queridos amigos, Kip y Elena McKean.

Una Perspectiva Histórica

“Donde no hay visión, el pueblo se extravía; ¡dichosos los que son obedientes a la ley! (Proverbios
29:18-KJV). El liderazgo es parte crucial y necesario en el plan de Dios de evangelizar las naciones.
Durante el Sermón del Monte, Jesús toca el típico asunto de nuestro día, cómo reconocer “a qué
hombre” seguir? Jesús dice, “Del mismo modo, todo árbol bueno da fruto bueno, pero el árbol malo
da fruto malo. . . Así que por sus frutos los conocerán ¨[a un verdadero o falso profeta].” (Mateo
7:17-20). La respuesta de Jesús no fue complicada, él simplemente les dijo a los discípulos ¡que miraran
el fruto! Es obvio cómo Dios ha usado dinámicamente a los McKeans para avanzar Su Reino. El relato de
los “30 futuros discípulos” en la sala de la casa de los Gempels en Boston, Massachussets, en junio del
año 1979, es altamente conocido. Mientras el Espíritu de Dios se movía en la restauración de las
sagradas Escrituras, esta “cansada banda” de 30 cristianos empezó un “movimiento de crecimiento de la
iglesia” sin precedentes históricos. Para julio del año 2000, Dios multiplicó estos pocos en una hermandad
causando impacto en el globo con iglesias en más de 170 naciones. Este grupo de iglesias, antiguamente
conocidas como el Movimiento de Boston, adoptó el nombre de La Iglesia de Cristo Internacional en
1994. En un esfuerzo para asegurar que las iglesias suplieran las necesidades de los pobres, se fundó
HOPE World Wide en 1991. Kip sirvió como el primer Presidente de la Junta Directiva, ejerciendo esa
posición durante 10 años. Él permitió que los Gempels y el personal administrativo organizaran a los
discípulos de las iglesias de ICOC como el único recurso en todos los proyectos de HOPE World Wide.

En octubre del año 2001, Kip y Elena se dirigieron a los 10,000 discípulos de la Iglesia de Cristo
Internacional de Los Ángeles confesando con lágrimas, sus pecados de arrogancia, orgullo y falta de
preocupación por los débiles, los cuales produjeron mucho dolor a su familia y al ministerio. Para poder
trabajar en su arrepentimiento, humildemente tomaron un año sabático. Por noviembre del año 2002 en la
Reunión por la Unidad en Los Ángeles, Kip oficialmente renunció como Evangelista Mundial de Misiones,
no porque él pensara que no estaba calificado para ejercer su papel, sino en un esfuerzo por mantener la
unidad entre los líderes y las iglesias. Así como Kip y otros han testificado antes, la “ironía” de la Reunión
por la Unidad en LA fue la de traer supuestamente unión pero al final produjo una gran desunión.
Tristemente, todos los Líderes del Sector Mundial fueron llamados a renunciar. Esto resultó en la
disolución de la visión de un liderazgo central en las Iglesias de Cristo Internacional. Es de hacerse notar
que en este momento la ICOC tal como la conocimos dejó de existir.

Casi inmediatamente, lo que se conocía como la ICOC en los Estados Unidos, se fragmentó en iglesias
autónomas. Ya no había evangelistas principales unificando grupos de iglesias. La división fue profunda
entre los líderes. Muchos de ellos cuestionaron o se opusieron a los principios de las Escrituras sobre las
cuales los Líderes del Sector Mundial construyeron este movimiento, tales como: iglesias compuestas
solo por discípulos comprometidos; cada discípulo es llamado a ser evangelístico; cada discípulo tiene
una relación de discipulado uno-a-uno; cada discípulo se involucra en un pequeño grupo evangelístico —
charla bíblica; bautizan solo a discípulos; tienen noviazgos y se casan solo con discípulos; los
evangelistas pastorean y sirven como ligamento para la hermandad unificada; un fuerte ministerio de
mujeres; y una visión realista de hacer discípulos de todas las naciones. Numerosas iglesias empezaron a
ir en diferentes direcciones a causa de que la autonomía se expandió. En muchos casos esto resultó en la
negociación de los principios bíblicos, así como en el debilitamiento del llamado desde el púlpito a
obedecer la Palabra por medio de una vida de rectitud. Muchos de los que nos visitan en Portland
reportan que sus iglesias predican a un “Jesús diferente, un evangelio diferente con un espíritu
diferente” (2 Corintios 11:3-6).

El Arrepentimiento Trae Inspiración

Como líderes de la Iglesia de Portland que acompañamos a los McKeans día a día en la predicación del
evangelio, testificamos que hay un verdadero arrepentimiento en sus vidas de sus pecados del pasado.
Apreciamos la cercanía que gozamos con ellos. Genuinamente, escuchan nuestras preocupaciones y
respetan nuestras opiniones en la toma de decisiones tanto en el ministerio como en los asuntos de la
vida. Dios ha sido capaz de desarrollar y forjar un equipo unido aquí en el ministerio de Portland. Nos
parece interesante que muchos de los que firman la carta del 3 de octubre del año 2005 contra los
McKeans, no han visitado Portland o ni siquiera han tenido una comida con los McKeans en los
dos últimos años.

Como todos sabemos ahora, Kip está en sus 50 años de edad. Es un hombre experimentado, humillado
por Dios con un aprecio especial por el débil. Ha desaparecido en gran medida la severidad,
insensibilidad y la falta de paciencia que identificó su carácter en el pasado. Como Pedro, Kip pecó
profundamente pero se ha arrepentido y esto ha resultado en un cambio para mejorar. Obviamente,
los que estamos cerca de Kip nos damos cuenta de la necesidad del discipulado debido a nuestra
naturaleza. Estamos trabajando con Kip para que se le pueda retar más fácilmente. Esto es muy
importante para todos nosotros. Kip reconoce que ha escrito palabras imprudentes en nuestros boletines
que han herido a otros. En particular lamenta y se arrepiente de no haberse comunicado con los lideres
de la Iglesia de Nueva York para escuchar “el otro lado” de la historia antes de publicar el artículo sobre
esa Iglesia (Proverbios 18:17). Ahora, antes de que algún artículo sea publicado, lo revisamos y también
lo enviamos a otros fuera de Portland para su edición. Estamos discipulando a Kip para que reconozca a
aquellos individuos e iglesias que lo merecen, que están “fuera” de la influencia directa de Portland. De
acuerdo con nuestra experiencia, vemos que verdaderamente él está apreciando y respetando a aquellos
que tienen puntos de vista diferentes al suyo.

Algo que tenemos que considerar en relación con el estado actual de las iglesias, es que desde octubre
del año 2001—cuando los McKeans tomaron el año sabático—todas las decisiones de liderazgo
relacionadas con nuestra familia de iglesias se han tomado con muy pocas opiniones o involucramiento
de Kip. También debemos notar que debido al debilitamiento en la confianza y a la independencia del
liderazgo local, a Kip no se le ha permitido ni invitado a predicar y por ende, tampoco a ayudar a varias
congregaciones que Dios le permitió construir en su oportunidad, como Boston y LA. La experiencia de
Kip no es única. Otros evangelistas que han dado su “sangre, sudor y lágrimas” para construir iglesias
están siendo igualmente apartados y desconectados de sus “hijos espirituales.” Las relaciones cercanas
que una vez atesorábamos se han dañado a causa de las paredes levantadas por la autonomía de la
iglesia y por la pecaminosa falta de perdón.

Debemos hacer una pausa y preguntarnos, ¿qué le ha pasado a nuestra confraternidad en estos últimos
cuatro años por la falta de influencia de Kip y de un liderazgo central? En lugar de predicar la palabra de
Dios, muchas iglesias han disminuido drásticamente y ha reinado la tibieza. Por ejemplo, la iglesia de LA
ahora tiene menos de 6000 miembros; la Iglesia de Boston ha decrecido de 5000 a 2000; Phoenix ha
decrecido de 1000 miembros a 600; Londres ha decrecido de 2000 miembros a alrededor de 1000
[1]
distribuidos en ocho diferentes iglesias autónomas . La condición actual de muchas de las iglesias de la
ICOC, no debe atribuirse solamente a Kip como se ha dicho en estas cartas hirientes. Debemos dejar de
culpar a los McKeans continuamente por la tibieza de las congregaciones donde no han ejercido
influencia por cuatro años, y que cada quien reconozca su responsabilidad personal. En su amor,
Jesús llama al arrepentimiento a aquellos líderes que son culpables de permitir la tibieza en sus
iglesias (Apocalipsis 3:15-20).

Personalmente, hemos sido refrescados por la humildad con la que Kip dirige nuestra congregación en
Portland. En julio del año 2003, los McKeans vinieron a Portland después que sufrimos las consecuencias
del enfriamiento destructivo que siguió a la carta de Kriete. Muchas de nuestras congregaciones
alrededor del mundo, especialmente en los Estados Unidos, experimentaron un destino similar.
Nos quedamos con menos de 100 miembros. Dios ha avanzado poderosamente Su evangelio
durante los dos cortos años que han estado en Portland. Esta “evidencia de la gracia de Dios”
puede ser vista en la multiplicación de los discípulos en la Iglesia de Portland hasta llegar a 300
“discípulos bautizados y comprometidos”, y con una asistencia de 450 los domingos, una
membresía y asistencia que nunca antes se habían obtenido en los 14 años de historia de la
Iglesia de Portland (Hechos 11:21-24). Semanalmente, los perdidos han sido bautizados, los caídos han
sido restaurados, el promedio de retención es muy alto, los matrimonios están siendo salvados por medio
del discipulado, “los niños del reino” y los adolescentes “gentiles” están siendo bautizados permaneciendo
fieles, aquellos con adicción química están siendo sanados, y estamos supliendo las necesidades de los
pobres dentro y fuera de la congregación.

Adicionalmente, en un esfuerzo por predicar en todas partes la Palabra, dos iglesias en el estado de
Oregon han sido plantadas recientemente, en Eugene y Corvallis, casas de la Universidad de Oregon y
de la Oregon State University, respectivamente. Para reiterar, ¡esto es para la gloria de Dios! 1 Corintios
3:7 enseña, “Así que no cuenta ni el que siembra ni el que riega, sino sólo Dios, quien es el que
hace crecer.”

Más aún, muchas iglesias han pedido ayuda, soporte, guía y entrenamiento a Kip y a Elena y a la Iglesia
de Portland, por medio de un discipulado santo. Estas iglesias incluyen Salt Lake City, Utah; Savannah,
Georgia; Syracuse, New York; Montreal, Canadá y Santiago de Chile, Chile, y su primera iglesia plantada
en Viña Del Mar. Antes del discipulado de los McKeans muchas de estas iglesias estaban disminuyendo
en membresía, y causaban muy poco impacto en sus ciudades. Hoy, Dios está siendo glorificado por el
modelo de iglesia que Portland es, en su imitación a lo que Dios desea en bautismos, restauraciones y el
celo por la confraternización (1 Tesanolisenses 1:4-10).

Acusaciones Contra Kip y Portland

Cuando se resumen las numerosas cartas de advertencia, hay cuatro acusaciones distintivas contra Kip y
la Iglesia de Portland, que tienen que ver con el tema de la división:

1. Reclutamiento de discípulos para Portland


2. Utilización de un lenguaje desagradable en contra de otras congregaciones
3. Discipulado a iglesias que no están en el área geográfica de Portland
4. Discipulado de congregaciones recientemente fundadas de discípulos que dejaron las antiguas
iglesias ICOC

1. La Acusación de Reclutamiento
Con respecto a la acusación de reclutamiento, se ha insinuado que con frecuencia, los discípulos más
fuertes y más fructíferos son los que han sido “jalados” a Portland. La otra acusación que coincide con
este cargo, es que muchos de los que se alejan están “arrastrando” consigo mismos la recuperación de
sus congregaciones madre. Les pedimos que entiendan que la mayoría de los que han venido a Portland
se mudaron aquí por sus heridas espirituales o debido al temor que sienten por el bienestar espiritual de
sus hijos. Creemos que Dios toca el corazón de los discípulos para mudarse a Portland desde Florida,
Georgia, Louisiana, Tennessee, Texas, California, Idaho, New York, Massachussets, Illinois, Hawaii,
Alaska, Utah, Nevada, Ohio, Missouri y Kansas. Deberíamos preguntarnos, ¿por qué muchos de los
que han venido de todas partes de Estados Unidos han tomado, como es considerado hoy, una
decisión audaz y controversial solo para venir y visitar la Iglesia de Portland? Simplemente
respondemos, han venido con la esperanza de un reavivamiento personal. ¿Han visto una iglesia
perfecta? ¡No! Sin embargo, todos acordamos que Dios ha formado en la congregación un “nuevo
corazón” después de aprender de los pecados y errores del pasado. Una promesa Bíblica que ilustra lo
que Portland experimenta puede encontrarse en Ezequiel 36:24-28, “Los sacaré de entre las naciones,
los reuniré de entre todos los pueblos, y los haré regresar a su propia tierra. Los rociaré con agua
pura, y quedarán purificados. Los limpiaré de todas sus impurezas e idolatrías. Les daré un nuevo
corazón, y les infundiré un espíritu nuevo; les quitaré ese corazón de piedra que ahora tienen, y
les pondré un corazón de carne. Infundiré mi Espíritu en ustedes, y haré que sigan mis preceptos
y obedezcan mis leyes. Vivirán en la tierra que les di a sus antepasados, y ustedes serán mi
pueblo y yo seré su Dios.”

2. Utilización de un Lenguaje Desagradable en Contra de otras Congregaciones


Esta acusación depende del punto de vista con que se vea, ya que los discípulos se están preguntado,
“¿Por qué Kip está siendo acusado de divisionista por sus escritos en los boletines de la Iglesia de
Portland y en la página Web de UpSideDown21? ¡Consideramos estos mensajes refrescantes! Una de
las razones principales de esta reacción negativa hacia los mensajes de Portland que algunos consideran
contienen “un lenguaje desagradable”, es que muchas de nuestras preciadas iglesias hermanas en
América están tibias o están muriendo, y encuentran el mensaje convincente. Gracias a Dios que algunas
pocas han estado bien, como la Ciudad de México liderada por Josué Ortega; la Iglesia de Cristo de
Hamption Roads en Virginia, liderada por Mike Fontenot; Singapore, liderada por John Louis; Yakarta en
Indonesia, liderada por Harliem Salim, y Delhi en India, liderada por Dinesh George. Otras Iglesias están
dando grandes pasos para el reavivamiento. Éstas incluyen: San Antonio, Baltimore, Gainesville y
Charlotte. Sin embargo, como podemos ver en la Biblia cuando el mensaje duele y la espada corta,
la reacción pecaminosa es silenciar o matar al mensajero. En Génesis 37, motivados por los celos,
los hijos de Jacobo “… lo odiaron… por sus sueños… Vengan, vamos a matarlo…” (Genesis 37:8,
20) [La carta original dice Génesis 37:8, 19] No solo vemos este principio en el AT, pero Jesús mismo fue
“rechazado” y asesinado por Su mensaje (Hechos 3:14). En la actualidad, entre la página Web de la
Iglesia de Portland y UpSideDown21 juntas, cuentan con mas de 10.000 computadoras conectándose
cada mes y con mas de un millón de visitas. Muchos cristianos y pequeños grupos de discípulos
alrededor del mundo, reportan por medio del correo electrónico, que están espiritualmente sostenidos por
el mensaje publicado cada semana.

3. Discipulado a Iglesias fuera de nuestra Área Geográfica


La tercera razón, es que el ministerio de Portland está siendo acusado de divisionista debido al
discipulado que ejerce a iglesias que están fuera de su área geográfica, el estado de Oregon. En 1982,
Dios puso en el corazón de Kip y de los líderes de Boston, un plan para evangelizar el mundo. Primero,
construyeron “iglesias pilares” en las mega-ciudades más influyentes del mundo. De ahí, plantaron
iglesias en las capitales cercanas de la nación. Después, los equipos misioneros fueron plantados en las
ciudades de tamaño mediano de esas naciones. Finalmente, los discípulos deberían esparcirse a los
pueblos pequeños y villas, y como consecuencia, evangelizando las naciones. Utilizando el antiguo plan
de ICOC, la mayoría de los que se oponen a Kip creen que son evangelistas ubicados en cada hemisferio
geográfico de influencia que pueden reconstruir todas las iglesias en su región entera. No obstante, no
vemos que esto esté ocurriendo. Una excepción es el excelente esfuerzo de Josué Ortega quien vive en
la Ciudad de México. No solamente Josué pastorea a las iglesias de México y Centroamérica, sino que
también ayuda a coordinar la expansión del evangelio en áreas no tocadas en este campo geográfico (2
Corintios 10:13). Para ayudar en la recuperación de Sudamérica, discipulamos a Santiago de Chile.
Algunos dicen, “¿Por qué las iglesias de Florida no está haciendo esto, desde que históricamente eso les
correspondería?” Sí, siguen siendo un ejemplo en el generoso sacrificio financiero para las misiones del
tercer mundo, pero el liderazgo de Santiago sintió que la fe que presenciaron en la Iglesia de Portland
hizo a la Iglesia de Portland un modelo que ellos querían imitar. Una situación similar es cierta en
Montreal, Canadá. Es bueno recordar que debido a la desesperación, ambos liderazgos de estas
iglesias iniciaron el contacto con Portland. Ellos nos visitaron y se inspiraron por lo que vieron.
Fue allí donde le pidieron a los McKeans que los discipularan. Interesante es ver el sentido de
“violación” de una influencia geográfica como Sacramento, donde le pidieron a Scott Green que los
discipulara y se uniera al “grupo de familia de iglesias del Noroeste” de Seattle. Sin embargo,
históricamente, Sacramento era del encargo de San Francisco. (Sacramento está a solamente 70 millas
de San Francisco, y a 750 millas de Seattle). ¿Está nuestro hermano Scout siendo divisivo por ayudar a
iglesias que no están en su región geográfica de los Estados Unidos? ¡No! Por lo tanto, ¿es “divisivo” e
“irrespetuoso” para nosotros discipular a Santiago y a Montreal que están en diferentes áreas geográficas
del mundo? Obligados por el amor de Cristo, ¿debemos ignorar su súplica de ayuda? (2 Corintios 5:14).

4. Discipulado de Congregaciones Recientemente Fundadas de Discípulos que Dejaron las


Antiguas Iglesias ICOC
En el año 2003, de acuerdo con la repercusión de la destrucción de la Reunión por la Unidad y de la carta
de Kreite, surgió un nuevo grupo de líderes, la mayoría provenientes de la “Iglesia de Cristo” tradicional.
Condenaron “el pasado” y rara vez hablaron con los McKeans. Esto se hizo muy notable cuando se
disolvió el liderazgo central de ICOC, considerado por la Iglesia de Cristo tradicional, como no apegado a
las Escrituras. Cambiar la identidad de casi todas las congregaciones de la antigua ICOC en
América de “Iglesia de Cristo Internacional” a simplemente “Iglesia de Cristo”, evidencia aún más
la influencia de la Iglesia de Cristo tradicional. Kip se opuso a esto y escribió de su preocupación en
Revelación por Medio de la Restauración III.

Debido a que ahora estas iglesias están construidas bajo el concepto de autonomía, las falsas paredes
teológicas evitan cualquier llamado al arrepentimiento y a la unidad por un líder evangelista externo, tal
como Pablo le dio a la Iglesia de Corintio un líder en 1 Corintios 4:14-17. “No les escribo esto para
avergonzarlos, sino para darles un consejo, como a mis propios hijos, pues los amo. Pues aunque
ustedes, como cristianos, tengan diez mil instructores, padres no tienen muchos. Padre de
ustedes soy yo, pues les anuncié el evangelio por el cual quedaron incorporados a Cristo Jesús.
Así pues, les ruego que sigan mi ejemplo. Por esto les envié a Timoteo, mi querido y fiel hijo en el
Señor. Él los hará recordar mi conducta como creyente en Cristo Jesús, conforme a lo que enseño
en todas las iglesias por donde paso.” Dios construyó la unidad por medio de líderes evangelistas que
enseñaron el mismo mensaje “en todas las iglesias por donde paso.” Pablo también envió a Tito a
Creta como líder evangelista para “arreglar” las iglesias. “Cuando te dejé en la isla de Creta, lo hice
para que arreglaras lo que quedaba por arreglar y para que, en cada pueblo, nombraras ancianos
de la iglesia, de acuerdo con lo que yo te encargué” (Titus 1:5). Las congregaciones locales deben
desarrollar un liderazgo maduro para la toma de decisiones diarias (1 Timoteo 5:17). No obstante, en
tiempos difíciles, las congregaciones locales necesitan una autoridad externa reconocida, como Pablo en
Corintios, para ayudarles a resolver los problemas y conflictos, y preservar la unidad y el crecimiento de la
fe.

El corazón del liderazgo de la iglesia de Portland es ver al mundo evangelizado en el siglo veintiuno. Por
lo tanto, vamos a orar para dar ayuda de cualquier tipo a cualquier grupo de discípulos
“comprometidos” en cualquier ciudad. Reiteramos, tristemente, que la “estructura” formal de la Iglesia
de Cristo Internacional ha desaparecido. Consecuentemente, el concepto ideal de “una iglesia-una
ciudad” también se ha ido. Para dar un ejemplo, en Atlanta, ahora hay esencialmente siete diferentes
iglesias que pertenecían a la antigua ICOC. Para nuestro conocimiento, todos se sienten muy bien de que
a nuestro hermano Tom Brown de Los Ángeles, se le haya encomendado servir y ayudar al grupo que
recientemente de separó de la Iglesia de North River en Atlanta. ¿Provoca divisiones? Inmediatamente,
antes de que nuestro hermano Sam Laing llegara a Atenas, el grupo de Atenas se separó de la Iglesia de
Atlanta. ¿Acaso Sam provoca divisiones al ayudar y ministrar a este grupo?

Recientemente, un grupo de discípulos comprometidos, el ver que por años no había cambios en la
antigua iglesia de ICOC en Phoenix, abandonaron la Iglesia de Cristo de Phoenix Valley para comenzar
una nueva congregación. Los iniciadores y líderes de esta nueva congregación son Chris y Sonja
Chloupek. Con la esperanza de construir una congregación compuesta por discípulos comprometidos,
han buscado a Portland para recibir apoyo y han pedido a los McKeans que los discipulen. (Su carta a la
Iglesia de Portland) De la misma manera, hay una situación similar en Estocolmo, Suecia, liderada por
Argo Lips. ¿Acaso no deberíamos ayudar a aquellos que amamos como familia? Solamente en Phoenix,
hay 29 otras “Iglesias de Cristo” sin contar la Iglesia de Cristo de Phoenix Valley (antiguamente llamada la
Iglesia de Cristo Internacional de Phoenix Valley). Así como la Iglesia de Cristo de Phoenix Valley se
abraza en hermandad con otras “Iglesias de Cristo”, ¿acaso no podemos nosotros en Portland abrazar a
una congregación de discípulos comprometidos que todavía se apegan a la práctica del discipulado sin
que seamos tildados de divisivos?

Recientemente Kip compartió este correo que recibió de una de nuestras hermanas de la Iglesia de
Eugene. Decía:
“Me gustó mucho tu discurso en el Jubileo de Portland pero no entendí completamente por
qué estabas llamando a los remanentes de las iglesias agonizantes de la antigua ICOC.
Ahora entiendo. El fin de semana pasado fui con mi esposo a la iglesia donde fui convertida
y asistí al servicio Regional del domingo en la mañana. Cuando mi esposo y yo nos
mudamos de esta iglesia hace dos años, esta región tenía más de 300 discípulos. Se
reunían en uno de los locales mas grandes que había disponible en ese lado de la ciudad.
En el servicio del domingo que yo asistí había menos de 80 personas reunidas en un
pequeño cuarto rentado. Durante el servicio, renunció una pareja de ministros que había
servido por 20 años. Los conocíamos desde siempre y me rompió el corazón ver cómo
dejaban sus sueños, sin embargo, no hubo lágrimas en los discípulos, solamente silencio
total. Kip, después de este viaje yo entiendo tu preocupación. Me entristeció profundamente
lo que vi y por lo que escuché de muchos de mis amigos que todavía están ahí, me dijeron
que cientos habían dejado la iglesia en los últimos dos años, y ahora una de las regiones
autónomas ha cerrado sus puertas. Por toda la congregación no hay casi bautismos o
crecimiento, y pocos están activamente compartiendo su fe. Kip, hay muchos que todavía
recuerdan sus sueños y sus deseos para el reino, pero están muy confundidos y
desorientados acerca de qué es lo que realmente va a pasar en Portland y Eugene. Los
amamos mucho, pero ¿cuánto tiempo tenemos que esperar para ayudar a aquellos en la
iglesia que realmente quieren la ayuda?

El Afecto que Tenemos por Ustedes

A pesar de que muchos estamos heridos por el liderazgo de la iglesia que difiere de nuestra manera de
hacer las cosas, y que quiere señalarnos y separarse de nosotros, nos rehusamos a reaccionar igual.
Dios define a la iglesia como todos los discípulos bautizados y que se mantienen fieles. Muchos quieren
reconstruir un movimiento para evangelizar el mundo. Nosotros compartimos este sueño. A pesar de que
es doloroso ser atacado y excluido injustamente, sabemos que esta fue la ruta que Jesús caminó (1
Pedro 2:21-23) Por lo tanto, les rogamos, hermanos y hermanas en Cristo alrededor del mundo,
que no consideren nuestros esfuerzos como una división en la antigua confraternidad de ICOC,
sino como sucedió con Pablo y Bernabé en Hechos 15, ellos tomaron caminos separados. Quizá
Kip es Pablo quien construirá más iglesias y los líderes que se oponen son Bernabé. Quizá Kip es
Bernabé quien fortaleció al débil Juan Marcos haciéndolo de nuevo útil, y los otros líderes son
como Pablo. No importa. Ambos están en el cielo y hay muchas almas agradecidas que están con
ellos.

Creemos que muchos están confundidos y temerosos en este momento. Les rogamos que si no
entienden lo que estamos haciendo, comuníquense con nosotros directamente y compartiremos con
ustedes nuestros corazones desde las Escrituras.

Te invitamos a que nos visites y que veas por ti mismo el fruto del Espíritu – “amor, alegría, paz,
paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio” (Gálatas 5:22-23) Kip Continúa
predicando como un “verdadero profeta” llamándonos a volvernos a Dios. Lo apoyamos a él y a
Elena y los seguiremos mientras que ellos sigan a Cristo (1 Corintios 11:1). Estamos agradecidos a
Dios por habernos escogido para ser Sus hijos, porque somos meros sirvientes inmerecedores. Estamos
agradecidos a Dios por usarnos cuando realmente no somos nada (Juan 15:5).

Continuaremos esforzándonos para abrir grandemente nuestros corazones y construir puentes con otras
congregaciones. Invitaremos a evangelistas de otras iglesias a predicar en Portland. Les rogamos que
consideren las palabras de Pablo en 2 Corintios 6:11-13, “Hermanos Corintios, les hemos hablado con
toda franqueza, les hemos abierto de par en par nuestro corazón. Nunca les hemos negado
nuestro afecto, pero ustedes sí nos niegan el suyo. Para corresponder del mismo modo… ¡abran
también su corazón de par en par!”. Estamos orando para que todos nosotros podamos unirnos y
glorificar a Dios por medio de la evangelización del mundo en el siglo veintiuno. A Dios sea toda la gloria.
Ancianos en Entrenamiento
Bob & Marcia Bertalot
Tony & Therese Untalan
Evangelistas/ Personal Administrativo
Kip & Elena McKean
Matt & Helen Sullivan
Víctor & Sonia González
DJ Comisford
Kacie Fligor
Víctor González Jr.
Otros Líderes en la Iglesia
Nick & Denise Bordieri
Merry Cariaga
Anthony Franklin
Juan Carlos & Betty García
Jeff & Meka Hernández
Alan & Lisa Hess
Lindsey Nelson
Kian & Carleen Nikzi
Russ & Lana Preston
Jeff & Debbie Thompson
Omar & Selena Valdovinos
Michael & Michele Williamson

Pie de página

¹ Nuestras mas sinceras disculpas a los discípulos de Londres. Nos informaron incorrectamente que
habían 200 discípulos fieles. Después que nuestra carta fue publicada, un hermano de Londres nos llamó
e informó que habían alrededor de 1000 discípulos pero que estaban en ocho diferentes iglesias
autónomas. (El texto original decía “… de 2000 miembros a menos de 200.”)

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