GIMNASIO COMERCIAL LOS ANDES

HUMANIDADES SECUNDARIA

Nombre: Juliana Mora Malambo Grado: Séptimo

Introducción:

➢ Buenos días, mi nombre es Juliana Mora Malambo, soy estudiante de grado

séptimo, hoy quiero compartir con ustedes una fábula que es significativa para mí,
esta fábula aborda temáticas como la desobediencia y las consecuencias de los
excesos. El autor de esta fábula es Rafael Pombo, quien fue un escritor
colombiano.
La fábula se llama: EL RENACUAJO PASEADOR

El hijo de rana, Rinrín renacuajo pero eso no importa; bienvenidos son.

Salió esta mañana muy tieso y muy majo

Con pantalón corto, corbata a la moda Se hicieron la venia, se dieron la mano,

Sombrero encintado y chupa de boda. Y dice Ratico, que es más veterano:

Mi amigo el de verde rabia de calor,

- ¡Muchacho, no salgas! - le grita mamá Démele cerveza, hágame el favor.

pero él hace un gesto y orondo se va.

Y en tanto que el pillo consume la jarra

Halló en el camino, a un ratón vecino Mandó la señora traer la guitarra

Y le dijo: - ¡amigo! - venga usted conmigo, Y a renacuajo le pide que cante

Visitemos juntos a doña ratona Versitos alegres, tonada elegante.

Y habrá francachela y habrá comilona.

- ¡Ay! de mil amores lo hiciera, señora,

A poco llegaron, y avanza ratón, pero es imposible darle gusto ahora,

Estirase el cuello, coge el aldabón, que tengo el gaznate más seco que estopa

Da dos o tres golpes, preguntan: ¿quién es? y me aprieta mucho esta nueva ropa.

-Yo doña ratona, beso a usted los pies.

-Lo siento infinito, responde tía rata,

¿Está usted en casa? -Sí señor sí estoy, aflójese un poco chaleco y corbata,

y celebro mucho ver a ustedes hoy; y yo mientras tanto les voy a cantar

estaba en mi oficio, hilando algodón, una cancioncita muy particular.

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Mas estando en esta brillante función Y abriendo la puerta con mano y narices,

De baile y cerveza, guitarra y canción, Se fue dando a todos noches muy felices.

La gata y sus gatos salvan el umbral,

Y vuélvese aquello el juicio final. Y siguió saltando tan alto y aprisa,

Que perdió el sombrero, rasgó la camisa,

Doña gata vieja trinchó por la oreja se coló en la boca de un pato tragón

Al niño Ratico maullándole: ¡Hola! y éste se lo embucha de un solo estirón.

Y los niños gatos a la vieja rata

Uno por la pata y otro por la cola Y así concluyeron, uno, dos y tres

Ratón y Ratona, y el Rana después;

Don Renacuajito mirando este asalto Los gatos comieron y el pato cenó,

Tomó su sombrero, dio un tremendo salto ¡y mamá Ranita solita quedó!

La moraleja de la fábula "El renacuajo paseador" es:

La vanidad y la desobediencia pueden llevar a situaciones peligrosas y consecuencias no

deseadas. Es importante escuchar los consejos de quienes nos cuidan y actuar con
prudencia en nuestras decisiones, evitando caer en excesos y buscando aprender de
nuestras experiencias.