MIDIENDO LAS DEBILIDADES Y FORTALEZAS DEL RÉGIMEN

IMPERANTE EN GUINEA ECUATORIAL

“Analizar el régimen imperante actualmente en nuestro país implica necesariamente
preguntarse, ¿cómo ha podido implementar y consolidarse y qué podría originar o acelerar
su debilitamiento o derrumbe?”

La supervivencia de un cuerpo en un entorno determinado depende de muchos

factores exógenos-de los que el cuerpo en cuestión no tiene control- y endógenos que
aquel sí puede controlar al depender de aspectos propios como la composición, forma
de vida hábitos…etc.

Esta puntualización , si bien se refiere a un cuerpo vivo entendido ese en el

sentido de las ciencias naturales o puras., también puede extrapolarse con pretensiones
comparativas a un ente sin funciones respiratorias o vitales como lo es un Estado o
cualquier régimen político, para conocer y entender las causas de su permanencia en el
tiempo, grado de apertura o represión, capacidad de adaptarse a los tiempos políticos
siempre cambiantes o las perspectivas de su durabilidad, mediante la aplicación de
técnicas y formas elaboradas por los científicos sociales politólogos, sociólogos o juristas
que, a lo largo y ancho de los años se han interesado por el estudio y la teorización de
los sistema/regímenes políticos y sociales.

Pero toda teoría necesita de una aplicación práctica aun en grado experimental
a fin de poder medir su nivel de certeza o acierto de los fenómenos sobre los que versa.
La aplicación práctica de esta afirmación categórica sobre nuestro objeto de estudio,
Guinea Ecuatorial obliga a partir de la premisa de que para nadie, al menos con mediana
inteligencia y buena fe, es ya un secreto que, desde su accesión a la independencia
política, nuestro país ha estado sumido en regímenes opresivos y autoritarios, primero
fueron los 11 años del primer Nguema los que lastraron al país a los puestos inferiores
en todos los estudio y estadísticas sobre desarrollo humano, económico y político y
social, para años más tarde y con el reinado de su sucesor , participante y colaborador
activo de la primera ruina, y golpe de Estado mediante, mantener e incluso empeorar
en ciertos aspectos dichos rankings de desarrollo nacional.
 Cuando se han cumplido cuatro lustros desde aquella revuelta palaciega que
arropó al poder a oficiales castrenses con cuestionadas convicciones democráticas, y
teniendo la vista en la dificultades que cada vez y con mayores evidencias van
asomándose el plan sucesorio de la celebrada paz reinante, toca preguntarse por las
razones que han propiciado no solo la concentración incuestionada del poder en manos
de una sola persona o puñado de ellas, sino también la creciente pérdida de espacio y
capacidad de propuesta alternativa y de actuación del resto de la sociedad, para hacer
proyecciones inductivas de lo que podríamos racionalmente esperar en nuestro futuro
político, como sociedad, comunidad de iguales en derechos y obligaciones y como
nación , capaz de exigir y merecer un lugar en dentro de la comunidad internacional.
Analizar el régimen imperante actualmente en nuestro país implica necesariamente
preguntarse, cuales son sus pros y contras, fortalezas y debilidades o lo que es lo mismo,
cómo ha podido implementar y consolidarse y qué podría originar o acelerar su
debilitamiento o derrumbe, para ello utilizaremos la matriz DAFO (debilidades,
amenazas, fortalezas y oportunidades), una de las herramientas empleadas en el estudio
y análisis económicos de organizaciones empresariales y entes públicos que por analogía
funcional, usaremos en nuestro análisis del régimen político objeto de la reflexión.

Puntualizado lo que antecede, vamos a aplicar esa matriz para hacer un análisis del
régimen imperante en nuestro país, cuáles son las debilidades y fortalezas que han
contribuido a su permanencia en el espacio y tiempo y cómo aquellas pueden
determinar su futuro a corto y largo plazo. Sin ser exhaustivos se puede decir que son
seis los aspectos característicos que, cuando se analiza el régimen político imperante en
Guinea Ecuatorial, salen a vista. Jugando unos a su favor mientras otros lo hacen en su
contra:

Destacan como debilidades:

1) La falta de unión, compromiso y lealtad entre los miembros que colaboran y

defienden el sistema, característica que comparte con la oposición. Por todos es
sabido que, muchos de los hermanos militantes y fanáticos que van envueltos en el
popó de la esfinge de la santísima trinidad, lo son por intereses personales-como la
 acumulación ilegítima de riqueza y bienes materiales, la comisión de crímenes y
delitos con la impunidad que garantiza el partido-o por compromisos y obligaciones
morales-como haber sido llevados por una novia, la esposa o un amigo al que se
debe muchos favores- y que tal como lo señalara repetidamente su Fundador,
llegado el momento muchos renegaran a su pertenencia al partido, o serán los
primeros que, con el dedo acusador señalaran a los propios hermanos militantes y
camaradas como ejecutores de los tantos males que actualmente denigran y lastran
nuestra convivencia. Esa grieta institucional es una gran debilidad del régimen que
acaso debería ser explorada, explotada y dinamitada con prudencia por la
oposición; trabajando duro para que, los enemigos de hoy sean convenientes
aliados del mañana
2) La mala imagen del régimen provocada por los excesos de sus propios miembros
y elementos destacados. Con el tiempo, los abusos y excentricidades de los
miembros y aferrados defensores del sistema les ha granjeado mala fama y
animadversión, tanto en el interior como en el exterior del país, con su máximo
exponente en la figura del vicepresidente o el niño de los juguetes caros, que un día
sí otro también exhibe tanto en nuestras calles como en las redes sociales una
riqueza obscena imposible de justificar por la vía meritocrática, sirvan de ejemplo
los incontables expedientes y procesos judiciales abiertos en su contra a lo largo y
ancho del planeta, EEUU, Suiza, Brazil, o el más sonado de todos el año pasado en
Francia, por la adquisición de inmuebles, coches de alta gama, joyas de renombre
internacional o alcohol de fabricación limitada. Todo lo cual ha dado como resultado
que el régimen encuentre más rechazo y activismo en contra, perdiendo todo
crédito o beneficio de duda sobre mala gobernabilidad, corrupción o expolio que
pudiera haber retenido a su favor.
3) Finalmente destaca también como debilidad del régimen la relativa juventud de
la sociedad oprimida. Sin pecar de excesivo exhaustivo con una mirada a pie de calle
cualquier observador avispado que haya estado en África o haya leído informes de
organismo internacionales de credibilidad se dará cuenta de que, nuestro
continente es de los más jóvenes del mundo en términos de población , lo que se
extiende a nuestro país; esta situación hace que, los cambios políticos sean más
probables ya que el espíritu de rebeldía juvenil encaja con las ansias de cambio que
pregona cualquier cambio y lucha política. Así, como ejemplos los jóvenes han sido
el motor de propulsión de cambio en casos como Egipto, Argelia, Túnez Libia, Yemen
o la que podría darse próximamente en la oprimida Uganda por el firme liderazgo
del joven músico Bobi Wine. No obstante, para que esa energía joven ayude al
cambio en nuestro país, las élites deben ser hábiles e inteligentes a la hora de
encauzar el hartazgo y enfado social, hacia el objetivo político pertinente. La energía
juvenil es maleable, y depende del tipo de estímulos que recibe del entorno para
que tome uno u otro sentido

Entre sus principales fortalezas están:

1) El haber disfrutado el país de una abonanza económica. Lo que la

proporcionado al régimen el poder necesario para comprar voluntades,
aniquilar con la relativa facilidad del “guante blanco” a aquellas que se resisten
a al precio, y consolidarse mediante campañas propagandísticas como la
construcción de grandes obras e infraestructuras sociales aun sin utilidad, la
implementación de medios de información afines que proyectan una imagen
interesada del sistema, o la promoción de unos valores e ideales que a falta de
alternativas, han acabado enroscados en el imaginario colectivo social, como
únicos deseables y posibles. Los jóvenes imitan siempre a sus padres,
compañeros y amigos y a sus líderes
2) La debilidad de la oposición política que plantea una alternativa. La desunión
que ha caracteriza al grupo de la disidencia nacional, y que comparte con el
régimen en plaza, salvando la excepción de la POC (Plataforma de Oposición
Conjunta) en el 92, ha sido siempre un arma de doble filo, a la vez que ha
imposibilitado el entendimiento y la conjunción de objetivos y unificación de
discursos y esfuerzos de lucha, ha propiciado que ante la falta de un bloque
sólido capaz de desafiar el poder implantado, este se consolidara y fortaleciera,
conquistado otros ámbitos del poder que podían haber sido un baza en su contra
o feudo por derecho propio, del bando contrario
3) Los vínculos entrelazos naturales entre el régimen, la oposición y la sociedad
civil. Eso se debe a que al ser nuestro país muy pequeño con pocos habitantes,
con valores y cultura bantú en su mayoría el concepto de familia y
hermanamiento es muy amplio y está sólidamente arraigado en la mentalidad
social, debido a ese hecho gran parte o casi toda la población tiene a miembros
de su familia dentro del régimen y en la oposición, llegando a extremos de
enemistad y enfrentamiento entre padres e hijos, hermanos, esposas y
esposos..etc, situación que a la vez que debilita al régimen lo hace también con
la oposición y que según resultado de la actual correlación de fuerzas, llegado el
caso en un futuro, puede hacer que el desmantelamiento transicional del
sistema encuentre resistencias y frenos para su efectividad y plenitud. Los
ejecutores se verán en cierto punto atados de manos y coartados, por vínculos
sanguíneos y afectivos.

A modo de conclusión, los regímenes políticos se imponen y consolidan

gracias a ciertas fortalezas y oportunidades estructurales y coyunturales, pero
también pueden ser desafiados y contestados en base a sus amenazas y
debilidades y es tarea del líder o jefe que se proponga acometer esa empresa,
analizar y estrujar la estructura a desafiar, coartando y limitando unas a la vez
que ahondando y agravando en otras en beneficio de la causa y los valores
pregonados que sostienen la conquista y lucha políticas . En el caso del régimen
vigente en Guinea Ecuatorial, la disidencia política cuenta a su favor con bazas
como la desunión dentro del propio sistema, los excesivos abusos de poder y
excentricidades materiales de sus miembros, la juventud de la población que,
con habilidad y mucho esfuerzo de concienciación, podría responder con agrado
a las llamadas de lucha para el cambio. Mientras que como principales
debilidades la oposición de nuestro país debe enfrentarse al hecho de que, la
extracción de materias primas sin control ni escrutinio ha proporcionado un
enorme poder adquisitivo y opulencia material en las manos del régimen, a los
que habrá que sumar el hecho natural de que quienes lideran la lucha y el
cambio tienen a hermanos, padres y esposas en el propio régimen que combaten
lo cual les coarta y debilita en cierta forma su determinación para derrotar al
sistema; finalmente no debe pasarse por alto la amarga realidad de la endémica
desunión y enfrentamiento dentro del propio bando opositor, lo cual disminuye
su fortaleza y capacidad de actuación frente al sistema.
 La habilidad y la manera en que los líderes y cabecillas conjuguen y manejen
todos esos elementos, determinarán el éxito o el fracaso tanto del régimen en
plaza, como de cualquier alternativa política que se posiciona en su contra.

Lenin Quinto Achebe

Joven sin oficio ni beneficio