El capítulo 10 del “Diablo de los Números” trata sobre que Robert
estaba sentado en su mochila en medio de la nieve, el frio ya se le
estaba metiendo en los huesos, pero para su mala suerte no paraba de llover. Más tarde se dio cuenta que estaba en un cine de una sala pequeña que tenía 2 filas con 2 sillones, el diablo estaba sentado detrás de él, pero esta vez le había traído un monitor portátil o de bolsillo, esto significaba que todo lo que el tecleaba aparecía en la pared de adelante. este Robert comenzó a teclear los números de Bonastchi de la siguiente forma: 1,1,2, 3, 5, 8, 13,21, 34, 55,89 El viejo maestro le dijo que ahora los dividiera de la siguiente forma que el mayor dividiera al menor 1/1=1 2/1=2 3/2=1.5 5/3=1.666666 8/5= 1.6 13/8=1.625 21/13=1.6153 34/21=1.6190 55/34=1.6176 89/55=1.6181 El capítulo 11 del “Diablo de los Números” trata sobre que Robert andaba por el centro en la noche, corría tan rápido como podía porque detrás de él venía el señor Bockel mientras el corría pensaba nunca me atrapara él está mucho más gordo que yo. El pedía ayuda ya q en cada esquina salía un doble del profesor , en una esquina una mano huesuda lo agarro y lo arrastro desde la calle a un pasaje de cristal era el diablo, este le dijo ven conozco un ascensor que lleva al ultimo piso, pronto el diablo y Robert habrían llegado al piso 50. Robert le hizo varias preguntas como ¿Por qué con esos trucos sale lo que sale?, ¿Por ejemplo esa cifra enrevesada?, ¿Y el cinco?, ¿Por qué las liebres se comportan como si supieran que es un número de Bonastchi?, ¿Por qué no acaban nunca los números irrazonables?, ¿Y por qué lo que tú dices siempre cuadra?. Después de que le dio las respuestas a sus preguntas le dijo probablemente piensas que sabes como saltar los números, solo porque no te resulta difícil pasar del 2 al 2*2 y del 2*2 al 2*2*2, naturalmente 21, 22, 23, pero que pasa si saltas cero asi 1 a la 0, 8 a la0 o 100 a la 0 a lo que respondio te va a parecer gracioso pero siempre sale 1. El capítulo 12 del “Diablo de los Números” trata sobre que Robert ya no soñaba, en una palabra, ahora dormía como no había dormido nunca, eso estaba bien, pero a la larga estaba resultando un poco aburrido a lo que el se preguntaba ¿Qué habría pasado con el diablo de los números?, ¿Quizá había tenido una buena idea y no podía demostrarla? o se le había olvidado de Robert. Adiós a los sueños, pero a Robert no le gustaba esa idea, su madre estaba asombrada porque pasaba muchas horas en el jardín dibujando nudos y redes en un papel para averiguar la forma más sencilla de visitar a sus amigos. Después de tiempo el diablo apareció y le dijo Robert hasta que por fin apareces, el diablo saco de su bolsillo una tarjeta impresa con los bordes dorados, la tarjeta decía que habían invitado a Robert esa noche ya que era aprendiz de teploxatln, la firma era un garabato ilegible con aspecto de ser persa o árabe. Robert le dijo que porque no le había dicho su nombre real