Traducción y Corrección

LYNN
Lectura Final, Diseño y Edición 2
IPHI
EPUB
MARA 01/2023

¡Y no olvides comprar a los autores, sin ellos no podríamos

disfrutar de tan preciosas historias!
 Enamorarme de un asesino en serie obsesivo era lo último
en mi lista de cosas por hacer.
Nací en un mundo de villanos, por lo que no fue una gran
sorpresa cuando mis hermanos se enamoraron de los
monstruos más retorcidos de todos. Un “reparador” sociópata.
Un policía psicópata sádico cuyo nombre pertenece al
diccionario junto a corrupción.
Tal vez soy yo el que está loco, pensando que podría tener
algo parecido a una vida normal. La peor parte es que ni
siquiera puedo culparlos por mi matrimonio no tan perfecto que
se derrumba y se quema, o mis luchas como padre soltero.
¿Pero cuando mi hijo de tres años desaparece y aparece una
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nota de rescate exigiendo un intercambio por el asesino en serie
que mis cuñados mantienen encerrados en un sótano?
Sí, los estoy culpando por eso. Y destrozaré el mundo para 01/2023
recuperar a mi hijo. Incluso si eso significa mantener a un
Demonio atado a mi lado.
James es algo mucho más peligroso que Silas y Malcolm: es
un asesino desquiciado y santurrón que cree que tiene una
misión de Dios para castigar a los pecadores que lo quebraron
en primer lugar.
También es mi única esperanza de volver a ver a mi hijo,
porque cuando te embarcas en un viaje por el infierno, quieres
un demonio en tu equipo.
Es cuando termina en mi cama que se convierte un
problema completamente diferente.
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LUCA

—Llegas tarde —anunció Malcolm desde la parrilla tan pronto

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como salí del jardín trasero y entré al patio, donde una barbacoa
estaba en pleno apogeo.
Mi hermano menor, Valentine, lo miró con reproche. 01/2023
—No seas grosero —dijo, levantándose de su silla de mimbre.
Saltó hacia mí como el labrador retriever de seis pies que era y
se arrodilló para sonreírle al niño a mi lado. —¡Oye, hombrecito!
¿Estás listo para algunos fuegos artificiales?
—¡Sí! —Dijo Timothy alegremente.
—Vamos, vamos a conseguir algunas bengalas —dijo Val,
ofreciéndole la mano.
—Nada que pueda volar los dedos —les grité. —¡O
extremidades!
—Es bueno que Val finalmente tenga a alguien de su misma
edad mental para jugar —reflexionó Enzo, ofreciéndome una
cerveza.
La tomé con gratitud, abriendo la tapa en el borde de la mesa
de picnic. Todos estábamos reunidos en la casa de la familia, en
la que Enzo y Silas vivían actualmente. Era el jefe de operaciones
y Enzo era el jefe de la Familia, así que tenía sentido.
A pesar de que estaba bastante seguro de que vivir en los
suburbios de clase alta era la idea personal del infierno de Silas,
en realidad no parecía importarle. Haría cualquier cosa por mi
hermano y, a pesar de mis temores iniciales y actuales sobre su
relación, incluso yo podía verlo.
Sin embargo, definitivamente se veía fuera de lugar, con su
cabello canoso y su traje gris de cinco piezas que
probablemente había costado todo el PBI de un país pequeño.
—Lo siento, llegamos tarde. Mi abogado necesitaba obtener
mi firma en algunos documentos, y tomó mucho más tiempo de
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lo que pensaba —dije, pasándome una mano por el cabello. Se
estaba haciendo más largo de lo que normalmente permitía, ya
que no había tenido exactamente tiempo para dormir un 01/2023
momento, y mucho menos para ir a una cita con mi peluquero.
Si no lo veía, pronto sería un hippie como Val.
Mientras tanto, él y Enzo se veían más felices y saludables que
nunca. Yo era el hermano del medio, pero empezaba a sentirme
mayor que Enzo y estaba seguro de que lo parecía últimamente.
Había algunas hebras de gris en mi cabello oscuro ahora, y no
era ningún misterio cómo habían llegado allí.
Enzo frunció el ceño, un tinte de preocupación en sus ojos.
—No te preocupes por eso. Todo el mundo sabe que estás
pasando por mucho en este momento. ¿Sigue todo encaminado
con el divorcio, o…?
—Sí —respondí. —Todo debería estar finalizado el próximo
mes.
 —Wow —dijo Enzo, recostándose en su silla. —¿Cómo te
sientes acerca de eso?
Vi un destello de luz por el rabillo del ojo y miré hacia arriba
para ver a Valentine corriendo como un demonio mientras
Timothy lo perseguía con un puñado de bengalas, riendo como
un maníaco.
—No estoy seguro —admití, tomando un trago de cerveza. —
Supongo que no me he permitido pensar en ello, ¿sabes? Mi
matrimonio ha terminado. Ha sido por un largo tiempo. Ahora,
solo se trata de hacerlo oficial y recoger las piezas—. Incluso
mientras hablaba, sonaba como si mi voz viniera de otro lugar.
—Aun así —dijo Enzo, aclarándose la garganta. —Sé que
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hablar de sentimientos y esa mierda no es lo nuestro, pero si
alguna vez necesitas hablar…
—Lo sé —dije, tomando otro trago. —Gracias. 01/2023
—Muy bien, todas las partes excesivamente procesadas y
totalmente indeseables de las vacas y cerdos se han cocinado lo
suficiente para evitar intoxicaciones alimentarias y otras
responsabilidades —anunció Silas, colocando un plato de
hamburguesas y perritos calientes a la parrilla en la mesa frente
a nosotros. —Es hora de celebrar un documento del Congreso
que ni una sola maldita persona en esta mesa ha leído.
—Festivo —dije rotundamente, mirando a Enzo. —Tenemos
que hacer la Navidad en tu casa este año.
Enzo puso los ojos en blanco, tomando el plato de su esposo.
—Se comportará bien. Sin embargo, no hay promesas sobre el
Día de Acción de Gracias.
Valentine se acercó y sentó a Timothy en su asiento elevado
antes de sentarse a la mesa. Sabía que tratar de recuperarlo era
una causa perdida, pero la verdad era que no me importaba
tener una niñera en los eventos familiares. Fue la única vez que
tuve un descanso en estos días.
Y eso me hizo sentir aún más como un padre de mierda.
¿Hubo una versión paterna de la depresión posparto? Porque si
era así, estaba casi seguro de que lo tenía.
Incluso cuando Timothy estaba en lo de Carol, lo que parecía
ser cada vez menos frecuente, no era como si realmente tuviera
un descanso. Todo lo que hice fue preocuparme.
Me preocupaba que ella no le prestara suficiente atención y
que él comenzara a notar la misma apatía que había
caracterizado a nuestro matrimonio durante los últimos dos
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años. Me preocupaba que ella fuera a dejarlo con sus padres
mientras salía de fiesta con sus amigas, probablemente
buscando al siguiente chico al que pudiera dejar. Me 01/2023
preocupaba que ella hiciera otro giro por ser madre, buscara la
custodia total que inicialmente había evitado y decidiera que
estaba tan enojada conmigo que no me dejaría verlo en
absoluto.
Dada la reputación de mi familia, ella probablemente lo
tendría bastante fácil en el sistema judicial.
Incluso ahora, me encontré evadiendo la conversación porque
la guerra en mis pensamientos nunca terminó. Malcolm y Silas
estaban hablando de trabajo, y por lo general me desconecté
como una cuestión de autoconservación, pero últimamente, me
estaba costando mantener los ojos abiertos por otras razones.
—¿Luca? —La voz de Valentine cortó el ruido y levanté la
vista. A juzgar por el hecho de que él y todos los demás en la
mesa me miraban preocupados, me había distraído un poco
más de lo que pensaba.
—Sí, lo siento —dije, frotándome los ojos. —¿Qué es?
Valentine y Malcolm intercambiaron una mirada, y por la
expresión del primero me di cuenta de que estaba diciendo con
los ojos: —¿Ves? Te lo dije.
—Timmy solo estaba preguntando si podía ver al gato —dijo
Valentine enfáticamente.
—¿El gato? —Pregunté, parpadeando. —¿Qué gato?
Ahora Silas y Enzo intercambiaban una mirada. Todos habían
estado juntos una fracción del tiempo que Carol y yo teníamos
y, sin embargo, ambas parejas actuaban como si hubieran
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formado un vínculo telepático o algo así.
—Silas lo recogió en un trabajo —dijo Enzo con tristeza.
Siempre había sido más un amante de los perros, pero Silas era 01/2023
alérgico. Presuntamente. —Ahora tenemos un gato.
—¿Tienes un gato? —Pregunté dubitativo, mirando a mi
cuñado.
—Su nombre es Hannibal —dijo Silas con orgullo.
—¿Quiero saber por qué su nombre es Hannibal? —Pregunté,
muy en contra de mi buen juicio.
—Cuando la encontré, se estaba comiendo la cara de un
hombre —dijo Silas con naturalidad.
Me atraganté con el bocado del perrito caliente que acababa
de tomar. Realmente debería haberlo sabido mejor.
—Ojalá no hubiera preguntado.
Valentine hizo una mueca, pero eso no le impidió comer.
—Ella es un caparazón de tortuga —continuó Silas. —¿Sabías
que algunos de ellos son quimeras? Se absorben entre sí en el
útero. Puedes hacer una prueba de ADN en una pierna y volverá
con un ADN completamente diferente al de la cabeza.
—Tuve un caso como ese hace unos años —reflexionó
Malcolm. —La videovigilancia mostró al tipo entrando en la
escena del crimen, cortado y seco, pero no pudimos obtener
una coincidencia de ADN. Resultó que había absorbido a un
gemelo en el útero. Debería haber visto lo suaves que eran sus
brazos femeninos.
—Eh —resopló Enzo. —Hablando de saltarse el día de la
pierna.
—Está bien, ¿sabes qué? Bien, puede ver a tu gato caníbal
mutante —dije, levantando las manos. —Por favor, deja de
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hablar de las escenas del crimen frente a mi hijo.
—Vamos, chico —dijo Silas, levantando a Timothy de su
asiento elevado. —Vamos a ver a Hannibal. 01/2023
—¡Gatito! —Timothy gritó feliz.
Para mi disgusto, el niño amaba a Silas. Malcolm también. Por
otra parte, en el mundo que habitamos, estar rodeado de
psicópatas sobreprotectores probablemente no era lo peor que
le podía pasar. Al menos les importaba más que a su propia
madre.
—No te preocupes —dijo Enzo. —El gato ha tenido todas sus
vacunas.
—Esa es realmente la menor de mis preocupaciones en este
momento —murmuré.
—Te ves crudo —dijo Malcolm. —¿Cuándo fue la última vez
que dormiste?
—Vete a la mierda, también, Mal.
 —Solo está preocupado por ti, Luca —dijo Valentine. —Todos
lo estamos.
A juzgar por la forma en que Enzo se había quedado en
silencio, esta no era la primera vez que hablaban de esto. A mis
espaldas.
—¿Qué es esto, una intervención? —Pregunté.
—Si es necesario —dijo Malcolm. Empezaba a sentir que
estaba al otro lado de uno de sus interrogatorios.
Suspiré.
—He estado quemando la vela en ambos extremos
últimamente, pero estoy bien.
—No te ves bien —dijo Valentine. —Sabes, hay una razón por
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la cual la privación del sueño se usa como tortura. Tienes que
descansar un poco. ¿Por qué no dejas que Mal y yo nos
llevemos a Timmy por una noche o dos? Te da la oportunidad 01/2023
de recuperar algo de sueño.
Miré entre ellos con cautela.
—Mira, aprecio la oferta, pero ustedes tienen su propia
mierda de la que ocuparse, y realmente no quiero que mi hijo
vuelva a hablar como John Wayne.
—Alguien tendrá que enseñarle al niño a disparar bien y
seguro que no serás tú, niño bonito —se burló Malcolm—. Te
he visto en el campo de tiro.
Lo fulminé con la mirada.
—Nadie tiene que enseñarle nada de esa mierda, en realidad.
No quiero que Timothy tenga nada que ver con esta mierda. No
es asunto de nuestra familia, y seguro como el infierno que no
es tuyo.
 —Eso no es muy práctico, Luca —argumentó Enzo. —El niño
es un DiFiore. Debería saber de dónde viene.
—Saber y ser parte de esto son dos cosas diferentes —
respondí. —Si quieres un heredero, tú y Silas pueden ir a hacer
girar su esperma juntos en un baster de pavo o lo que sea que
hagan ahora, y dejarme fuera de esto.
Enzo solo puso los ojos en blanco.
—Deberíamos hacer eso —dijo Valentine, aferrándose al
brazo de Malcolm mientras se inclinaba hacia su esposo. —
Imagina tener un montón de pequeños tú y yo corriendo.
—Gracias por darle ideas, Luca —dijo Malcolm rotundamente.
—Por favor, ¿déjame cuidar a Timmy durante el fin de
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semana? —Valentine suplicó. —Soy prácticamente un ama de
casa aburrida en estos días, de todos modos. Atiendo a mis
pacientes en mi oficina en la planta baja, así que podré vigilarlo 01/2023
todo el tiempo. Y te prometo que haré que Mal cierre todo con
llave en la caja fuerte.
—¿Por qué tengo la sensación de que no estás hablando solo
de las armas? —Pregunté con cautela.
Antes de que Valentine pudiera responder, la puerta corrediza
de vidrio que conducía a la casa se abrió y Timothy salió
corriendo, cargando un gato gordo negro y naranja en sus
brazos mientras corría por el césped como un torpe fugitivo con
Silas pisándole la cola.
—Ten cuidado —gritó Silas al pequeño, luciendo más
angustiado de lo que nunca lo había visto. —Y no le acaricies el
pelaje hacia atrás, es muy sensible.
—Mi marido, el susurrador de gatos —dijo secamente Enzo.
Suspiré, pasándome una mano por la cara.
 —Creo que me vendría bien dormir un poco. Pero solo por la
noche. Y si algo sale mal, tendré mi teléfono encendido todo el
tiempo.
—Por supuesto —dijo Valentine con entusiasmo.
—Su hora de acostarse es a las siete —continué—. Y no dejes
que vea nada que te hubiera hecho orinar en la cama cuando
eras un niño. Especialmente si tiene marionetas. No ha sido el
mismo desde que vio la cinta VHS de HR Pufnstuf en el ático.
—Las siete en punto y sin marionetas —dijo Valentine
pacientemente—. No es gran cosa. ¡Oye, Timmy! ¿Quieres venir
a pasar la noche conmigo y con el tío Mal?
—¡Sí! —Timothy gritó, finalmente devolviéndole el gato a un
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Silas de aspecto muy acosado.
El gato no parecía molesto, pero Silas la abrazó contra su
pecho y acarició su pelaje con ternura como una especie de 01/2023
villano de Bond. Al menos hasta que notó que Enzo lo estaba
filmando y se partía de risa.
Mi familia estaba jodida. De eso, no había duda, pero a pesar
de lo tentador que había sido aislarme después del divorcio, era
bueno estar cerca de ellos. Y ver a mi hijo tan feliz y rodeado de
gente que lo amaba era todo lo que realmente podía pedir.
Aunque la mitad de ellos fueran psicópatas.
 2

JAMES

Los pasos resonaron a través del corredor de cemento afuera,

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y supe de inmediato por su cadencia particular que era Silas que
venía a visitarme.
Justo a tiempo. 01/2023
Escuché el chirrido de la cerradura automática afuera antes de
que la puerta se abriera, raspando el piso, y entró Silas, luciendo
como un dios aburrido entre bacterias.
Cuando se trataba de la compañía que solía tener, eso no
estaba demasiado lejos.
—Bueno, estoy impresionado —dijo con su habitual voz
sedosa, caminando casualmente para pararse frente al vidrio
que nos separaba. —Ese es el segundo guardia esta semana que
has empujado a un ataque de nervios.
—Por favor. Esa es terminología antigua —me burlé. —Tyler
tuvo un brote psicótico leve, pero el último fue una psicosis
total. Eso es lo que obtienes por recoger las sobras del
Departamento de Estado.
 —¿Qué puedo decir? La NSA se estaba secando —dijo
rotundamente. —Por curiosidad, ¿qué es exactamente lo que
estás tratando de lograr?
—¿No es obvio? —Pregunté. —Su atención.
Los ojos de Silas se entrecerraron. Fue un ligero cambio, pero
siempre había podido leer incluso los cambios fisiológicos más
pequeños en cualquier persona como un libro, desde que era un
niño.
¿Y Silas? Él era mi libro favorito. Uno que nunca me cansé de
releer.
Ese rasgo era la razón por la que una vez me había
encontrado tan útil, y ahora, iba a asegurarme de que era lo que
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me convertía en una espina en su costado.
—Felicitaciones, entonces. Lo tienes —dijo, arrastrando una
silla desde la esquina de la habitación. 01/2023
Hice una mueca. El sonido del raspado en el concreto fue
como si clavos oxidados se clavaran en mi cerebro. Este lugar
estaba tan bajo tierra que prácticamente funcionaba como una
cámara de privación sensorial.
Se sentó, inclinándose sobre el respaldo de la silla para
observarme por unos momentos, sus ojos plateados fríos y
evaluadores mientras me estudiaban.
Conocía esa mirada. Era una que me había dado mil veces
antes. La mirada que dejaba claro que yo era la rata de
laboratorio y él el científico. En este momento, estaba tratando
de encontrar la forma más conveniente de desarmarme sin
volverme inútil.
Me dio esa sensación cálida y hormigueante por todas partes.
Como en los viejos tiempos.
 —Vamos, Silas —me burlé. —Puedes mentirle a todo el
mundo, incluso a ti mismo, pero no puedes mentirme a mí.
Debe aburrirte. Una criatura tan simple e inocente…
Seguramente la novedad de vivir con tu mafioso suburbano ya
se ha desvanecido. Anhelas el caos. Lo necesitas, y yo soy eso, al
menos.
—Lo eres —estuvo de acuerdo. —Y hubo un momento en que
eso me atrajo, pero he superado el caos. En cuanto a que Enzo
me parece aburrido, tú eres el que te mientes a ti mismo si
realmente piensas eso. Pero dado el hecho de que hiciste todo
lo posible para tratar de quitármelo, no creo que ese sea el caso.
La ira me atravesó al escuchar el nombre de Enzo en sus
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labios, pero sabía que no debía mostrarlo. Durante años, Silas
había tratado de purgarme de toda emoción y hacerme como
él. Había fallado, pero había logrado enseñarme a enmascararlo. 01/2023
Especialmente de él.
Para colmo de males, o más bien, asesinato, considerando el
hecho de que había tratado de matarme en una explosión
literal, se había ido por alguien que era exactamente mi opuesto
en todos los aspectos. Enzo era el tipo de hombre que pasaba
horas en el gimnasio y probablemente ni siquiera había tenido
una tarjeta de biblioteca. Él era ancho y musculoso, un gran
bruto mafioso de principio a fin. Yo era alto pero delgado, y
ahora estaba demacrado por los meses que pasé aislado y casi
muerto de hambre. Todavía era atractivo, no tenía sentido la
falsa humildad de negar eso, pero había algo en mis fríos ojos
azules que parecía desanimar a la gente.
 Sin embargo, no importaba. El único hombre que siempre
había querido se sintió atraído por mi tipo particular de locura, o
al menos, lo había estado.
Aparentemente, Silas ahora prefería los cachorros grandes de
ojos marrones, a un hombre que podía matar sin un segundo de
remordimiento.
—No durará —dije una vez que confié en mí mismo para
hablar sin mostrar debilidad. —Eventualmente, te aburrirás de
compartir tu cama con ese bufón. Anhelarás la compañía de
alguien que sea tu igual intelectual.
—¿Es eso lo que eres? —Preguntó, su tono tan cortante como
sus palabras.
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Me burlé con una risa.
—Por eso estás aquí, ¿no? Estoy seguro de que has inventado
alguna pretensión. Algo sobre lo que quieras preguntarme. Tal 01/2023
vez incluso un poco de tortura. Y por todos los medios, estoy
más que feliz de darte lo que te has estado perdiendo. Dudo
que ese chico tonto pueda soportar ni una fracción de tus
impulsos sádicos. Debe ser una tortura, tener que ser amable.
Fingiendo ser humano.
—Te sorprendería lo que Enzo puede soportar —dijo
secamente. —Pero hay algo que me gustaría saber, en realidad.
—Soy todo oídos, amor —dije, reclinándome en mi silla.
—Alec Loran —dijo Silas, mirándome fijamente. —¿Dónde
está?
—Ahh —ronroneé. —Ahora ahí un nombre que no he
escuchado en mucho tiempo. ¿Sigue manejando papeles?
 —Sé que acudiste a él para empezar de nuevo —dijo Silas. —
Esa es la única forma en que podrías haberte mantenido fuera
de mi radar durante tanto tiempo.
—Tienes razón —reflexioné. —Lo hice. Y puedo ver por qué lo
estarías buscando, considerando que lo contrataste para
ayudarme a desaparecer. Es decepcionante cuando las cosas no
salen como queremos, ¿no?
El destello de irritación en sus ojos me dijo que tenía razón.
Claro que la tenía. Y Silas se estaba debilitando, porque alguna
vez no habría traicionado nada en absoluto.
No… no más débil. Se estaba convirtiendo en humano, y para
un hombre como él, eso era mucho peor.
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—¿Me lo vas a decir o no? —Preguntó aburrido.
—Te lo diré —dije, inclinándome hacia adelante para mirarlo a
través del velo de mi cabello demasiado crecido. —Si me follas. 01/2023
Sus rasgos afilados se tornaron hacia abajo en una máscara de
insensible desaprobación. Se puso de pie y se dio la vuelta sin
decir una palabra, pero cuando llegó al guardia en la puerta, se
detuvo.
—No le des de comer durante unos días —le dijo al guardia
en un tono frío que yo conocía bien. —Y nada de agua hasta
que comience a mostrar signos de deshidratación severa.
—Sí, señor —dijo el guardia, asintiendo en reconocimiento.
La puerta se cerró detrás de ellos, y sentí que mis hombros
temblaban con una risa apenas contenida cuando escuché a
Silas alejarse.
El sabor metálico de la sangre en mi boca me alertó del hecho
de que me había mordido el labio.
 ¿Estaba riendo o llorando? Era difícil de decir, ahora que
estaba pensando en ello.
No estaba realmente seguro de que hubiera tanta diferencia
cuando se trataba de él.

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01/2023
 3

LUCA

Me había imaginado un agujero en la pared o tal vez una

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cueva, pero mientras seguía a Silas por los sinuosos pasillos de
la prisión subterránea, rápidamente me di cuenta de que este
lugar era completamente funcional, incluidos los guardias 01/2023
apostados en cada esquina.
Cuando Silas me llamó y me pidió que vigilara a su prisionero
secreto, me sorprendió cuando menos. Aparentemente, el tipo
que originalmente se suponía que debía estar con él se había
ido, desaparecido o algo así. Sabía por las quejas de Valentine
que Silas y Malcolm habían estado alternando turnos de doce
horas para asegurarse de que tenían cobertura, así que acepté
por el bien de mis hermanos.
Eso y había una parte de mí que sin duda tenía curiosidad,
considerando que yo era la única persona que nunca había
conocido al infame James, también conocido como Demon,
también conocido como el ex jefe de Valentine, Chris.
Era un hombre de muchos nombres y no pude evitar tener la
curiosidad de querer ponerles una cara, incluso si iba en contra
de mi política habitual de tener lo menos que ver con las
tonterías de Silas y Malcolm como fuera posible.
Y eso incluía la prisión subterránea secreta que
indudablemente estaba violando una tonelada métrica de leyes
nacionales e internacionales.
—He tenido razones para usarla a lo largo de los años —
comentó mi cuñado, como si leyera mis pensamientos.
—Estoy seguro de que lo has hecho —murmuré. —¿Cuántos
prisioneros hay aquí en este momento?
—Por el momento, solo James y un antiguo socio que me
traicionó —respondió con indiferencia. Como si mantener a la
gente en su propia mazmorra personal fuera parte del curso.
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Para él, probablemente lo era.
No era como si tuviera alguna simpatía por Demon. Lejos de
ahí. Pero todavía era mucho a lo que acostumbrarse. Pensé que 01/2023
el mundo en el que había crecido era duro y despiadado, pero al
menos teníamos reglas. En su mayor parte, la gente las cumplió.
Este mundo también tenía reglas. Personas como Silas y
Malcolm simplemente las hicieron y las siguieron solo cuando lo
consideraron oportuno.
—¿Lo desapruebas? —Silas preguntó en un tono de
complicidad.
—Para nada. Quiero decir, ¿quién de nosotros no tiene un
calabozo financiado con fondos privados para mantener a sus
enemigos sin el debido proceso o el estado de derecho?
Silas dejó de caminar y, cuando se dio la vuelta, me
sorprendió descubrir que su expresión era de diversión en lugar
de la molestia que esperaba.
 —Si recuerdas, entregarlo a la policía era el plan original.
Hasta que apuntó a tus hermanos.
—No cambia el hecho de que tenías este lugar listo —
respondí.
Silas hizo una pausa como para considerarlo.
—No. No es así.
Siguió caminando antes de detenerse frente a una gran puerta
al final del pasillo.
—Deberías estar al tanto de algo —dijo. —James es
notablemente hábil en la manipulación. No conoce fronteras ni
limitaciones.
—¿Qué estás diciendo? ¿Crees que voy a tener un colapso o
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algo así? —Pregunté, sin molestarme en ocultar mi irritación.
—Los hombres más fuertes lo han hecho —comentó, como el
completo idiota que era. 01/2023
Fruncí el ceño.
—Que te jodan a ti también.
—No es nada personal —dijo encogiéndose de hombros. —
Sería descortés no advertirte de lo que te espera. Deberías tratar
sus amenazas como procesables por precaución, incluso si está
atrapado aquí.
—¿En serio? —Pregunté. —Tenemos, ¿cuántos pisos bajo
tierra?
—Un animal enjaulado es siempre el más peligroso —dijo
Silas con calma. —Pero no son solo las amenazas físicas. Sabe
cómo meterse en tu cabeza. Te hará cuestionar las cosas. Él te
hará enojar. Él aislará tu debilidad y se aprovechará de ella de
maneras que nunca pensaste que fueran posibles. Él eleva lo de
“joder la mente” a una forma de arte.
 —Sí, puedo ver por qué ustedes dos eran tan cercanos —dije
secamente. —Verdaderamente lástima que no funcionó.
—Debes resistir la tentación de comprometerte con él, sin
importar lo que diga —dijo Silas. —No importa cómo intente
agitarte. Si le das cualquier cosa, encontrará la manera de usarla
en tu contra.
—Sí, lo tengo —murmuré. —Confía en mí, no tengo intención
de entablar una conversación con este espeluznante.
Silas me miró fijamente durante unos momentos con esa
expresión en blanco, como si me estuviera haciendo una especie
de escáner de retina, antes de que finalmente se diera la vuelta y
deslizara su tarjeta en el lector de la pared.
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Las dos puertas plateadas se abrieron con una ráfaga de aire.
Me había imaginado una celda húmeda con barrotes de hierro,
pero este lugar se parecía más a las cámaras de detención de un 01/2023
supervillano. Las paredes de color gris claro probablemente
hacían que el espacio pareciera más grande de lo que era, pero
aun así era innecesariamente grande para una sola persona.
No es que el prisionero tuviera todo para vagar. Había una
caja de vidrio más pequeña en el interior de la habitación, de
diez por diez como máximo, amueblada únicamente con un
colchón desnudo en el piso, un inodoro en la esquina y una silla
de metal actualmente ocupada por el único ocupante de la
habitación.
Me detuve al otro lado de la puerta y dejé que Silas fuera el
primero en acercarse mientras yo estudiaba la celda. Era la
primera vez que me encontraba cara a cara con el infame
Demon, y no estaba seguro de lo que esperaba, pero
ciertamente no era el hombre frente a mí.
 No era particularmente alto o musculoso. De hecho, parecía
casi desmejorado con pómulos demacrados y una constitución
menos que imponente, aunque eso fácilmente podría haber
sido el resultado del año y el cambio que había pasado en
cautiverio. Ciertamente no estaba recibiendo el tratamiento
lujoso. Su piel hambrienta de sol era antinaturalmente pálida,
con círculos oscuros bordeando los ojos del tono de azul más
gélido que jamás había visto. En comparación, hacían que el de
Silas pareciera casi cálido. Su cabello castaño claro estaba
desgreñado, enmarcando una mandíbula dura y rasgos
angulosos que podrían haber parecido lo suficientemente
agradables si no fuera por esos ojos.
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La forma en que siguieron a Silas mientras entraba en la
habitación no era tímida ni amenazadora. Como un depredador
acechando a su presa, y estaba bastante seguro de que era raro 01/2023
que alguien viera a mi cuñado así.
No me prestó ninguna atención, lo cual estuvo bien. A pesar
de lo modesto que parecía a primera vista, había algo en la
energía del tipo que me tenía nervioso. Como dos acordes
disonantes que emiten una frecuencia antinatural que el oído
humano simplemente no debería escuchar.
—Mira quién es —dijo Demon en tono burlón. Sin embargo,
había algo agradable en ello. Profundo, pero no demasiado. Un
poco en el lado hosco. Su mirada viajó hacia mí, y la sonrisa que
tiró de sus labios agrietados inmediatamente me desengañó de
cualquier noción de amabilidad. —Y trajiste al hermano
aburrido. Qué divertido.
Levanté una ceja, pero no dije nada. Si eso era lo peor que
tenía, no estaba realmente preocupado. Aburrido no era
exactamente un insulto viniendo de un tipo como él. Demonios,
aburrido era mi plan de cinco años ahora que las cosas
finalmente se estaban calmando después del divorcio.
—Considérate afortunado de que no haya traído a Malcolm —
dijo Silas.
Demon sopló una bocanada de aire a través de sus fosas
nasales.
—Debes haberte quedado sin guardias en los que confíes.
Por una fracción de segundo, la irritación se mostró en el
rostro generalmente inexpresivo de Silas. Bueno, si nada más,
este espeluznante ciertamente era capaz de meterse debajo de
la piel de Silas.
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—Me pregunto, por qué será eso.
Demon solo sonrió malévolamente, recostándose en su silla.
—No puedes echarme la culpa de todo a mí. Sé cuántos 01/2023
recursos debes estar desviando para vigilar a Enzo y el negocio
familiar. Ese es el precio de tener un mafioso como mascota,
supongo. Al menos Malcolm escogió a un insignificante don
nadie la primera vez. Aunque, eso tampoco funcionó tan bien
para él, ¿verdad?
Silas apretó la mandíbula y su mirada se oscureció. Eran
cambios sutiles que nadie más podría haber notado, pero
estaba empezando a pensar que él era el que necesitaba
controlar sus reacciones.
—Es una solución temporal, te lo aseguro —dijo Silas. —No te
preocupes. Espero escuchar que te has portado bien esta noche;
de lo contrario, tu situación empeorará mucho.
—¿Lo prometes? —James preguntó con amargura.
 Una sonrisa peligrosa y familiar tiró de la comisura de los
labios de Silas.
—No me tientes—. Silas se volvió hacia mí, pero me di cuenta
de que todavía estaba molesto. —¿Estás bien para que me vaya?
—Probablemente lo mejor —respondí, ganándome una
mirada de él.
—Tienes mi número. Te sugiero que lo uses, incluso ante la
menor provocación.
—Sí, lo tengo. —Suspiré. —Fuera de aquí. Estaré bien.
Silas miró una vez más a su prisionero y asintió de mala gana,
abriendo la puerta para salir.
—Muchacho valiente —se burló Demon, mirándome desde el
26
otro lado de la habitación como un gato mirando a un ratón.
Miré alrededor de la habitación en busca de una silla y
encontré una apoyada contra la pared más alejada. Tenía la 01/2023
sensación de que a los otros guardias no les gustaba estar más
cerca de su protegido de lo que absolutamente tenían que
estar.
Demon pareció algo sorprendido cuando me hundí en la silla
a unos pies del cristal. No vi ninguna razón para ser un tonto,
pero tampoco iba a fingir miedo de él. Incluso si probablemente
debería haberlo tenido.
—¿Tienes algún poder telequinético que desconozco? —
Pregunté irónicamente.
—Realmente debe estar desesperado si envió al suave.
—¿El suave? —Repetí, levantando una ceja. —Y aquí pensé
que era Val.
—Él es el neurótico —aclaró, como si fuera obvio. —Enzo es el
tonto, y tú eres el tierno y pequeño amor que se casó con su
novia de la escuela secundaria. Pensé que eso era bastante
obvio.
Me burlé.
—Sí, bueno, lo del matrimonio no funcionó muy bien, si eso
cuenta para algo.
La forma en que sus labios temblaban en las comisuras era
prueba de lo que ya supuse, que era que él ya lo sabía. Por
supuesto que lo hizo. No estaba seguro de cómo, pero si Silas
tenía razón acerca de que él era un maestro manipulador, y él
era incluso una fracción de bueno en eso que el mismo Silas,
pensé que probablemente tenía formas de obtener información
de la gente. Sin duda, era una prueba para ver cuánto sabía,
27
cuánto le importaba saber, sobre mí.
Los resultados fueron desconcertantes.
—Oh, sí —comentó. —Mis más sinceras condolencias. 01/2023
Supongo que ese es el precio que cobra el negocio familiar,
¿no?
—Algo así —respondí.
Él sonrió, inclinándose hacia adelante.
—Supongo que podrías ver el lado positivo.
—¿Sí? ¿Y qué podría ser eso? —Pregunté, haciendo mi mejor
esfuerzo para sonar aburrido. Sabía que Silas no quería que
hablara con él en absoluto, y probablemente había muchas
razones para eso. Aun así, parecía más arriesgado parecer débil,
y no había ninguna duda en mi mente de que Demon sabría mis
razones para el silencio de radio. Vería que Carol era una
debilidad que podía explotar, y aunque probablemente también
había algo de verdad en eso, no necesitaba confirmarlo.
 —Las cosas no terminarán como lo hicieron entre tus padres
—respondió inocentemente, aunque me di cuenta de que
estaba observando de cerca mi reacción.
Di una pequeña risa.
—Nunca tuve tanto en común con mi viejo —respondí. —No
creo que eso sea algo de lo que realmente deba preocuparme.
—Eso es lo que dicen todos —respondió. —Estoy seguro de
que eso es lo que te dijiste a ti mismo cuando tuviste a ese
adorable bebé en tus brazos por primera vez también. Que no
ibas a ser como tu padre. Que no ibas a joder eso de la forma
en que los jodió a los tres.
—¿Hay algo malo con eso? —Pregunté. —¿Con querer hacer
28
algo mejor por tu propio hijo que lo que tus padres hicieron por
ti?
Sus labios temblaron en una pequeña sonrisa. 01/2023
—Los mejores planes de ratones y hombres a menudo salen
mal.
—Burns —murmuré, apoyando mi pie izquierdo sobre mi otra
rodilla. —No te habría fijado en el tipo de poesía.
—Oh, me imagino que hay todo tipo de cosas que no sabes
sobre mí —comentó. —Pero realmente no puedo decir que sea
al revés.
—¿No? —Pregunté. —Sabes mucho sobre mí, ¿verdad?
Demon hizo una pausa como si lo considerara.
—Sé que probablemente eres el más sensato de tu familia —
respondió. —Lo suficientemente sensato como para saber que
todo esto va a terminar desastrosamente. Lo suficientemente
desastroso como para hacer que tu matrimonio parezca una
historia de éxito.
 —Te refieres a Silas y Malcolm —le dije.
—¿Quién más? —Preguntó. —Si dejas que los zorros entren
en el gallinero, no te sorprenderás cuando haya un baño de
sangre.
—No estoy seguro de cuánto cierto hay ahí —admití,
decidiendo no negarlo. —Pero en realidad no importa lo que yo
piense, ¿verdad? Mis hermanos son adultos y pueden tomar sus
propias decisiones.
Podría negarlo por mantener la apariencia de un frente unido,
pero él era demasiado inteligente para creer eso. Estaba
bastante seguro de que mi lenguaje corporal solo con Silas le
había dicho todo lo que necesitaba saber sobre nuestra relación.
29
Y realmente no tenía suficiente confianza en mis propias
habilidades de engaño para arriesgarme. Especialmente no
cuando hacerlo solo serviría para convencer a Demon de que 01/2023
estaba hurgando en un punto débil.
—¿Pueden, sin embargo? —Desafió. —Cuando se trata de
monstruos como Silas y Malcolm, ¿realmente puede existir algo
así como el libre albedrío?
—Esa es una pregunta interesante —comenté. —Si estuviera
en Filosofía 101, estoy seguro de que me daría mucho en qué
pensar.
Su rostro se dividió en una amplia sonrisa.
—Bravo, Luca —dijo en un tono de falso elogio. —Silas te
entrenó bien. No muestres debilidad.
—No tiene mucho sentido eso, ¿verdad? —Pregunté. —Todos
tenemos una debilidad. Incluso tú.
 Su diversión se desvaneció tan repentinamente que me
pregunté si todo era una broma. Probablemente era más seguro
asumir eso cuando se trataba de él.
—Mi debilidad no es un pequeño tonto precoz que se
tambalea sin poder hacer nada.
Por primera vez, fue una lucha para enmascarar mi ira.
—No, pero no estoy tan seguro de que un sociópata de seis
pies de altura que solo me quiere vivo para poder hacerme
sufrir sea una debilidad mucho mejor.
James soltó una risa seca y amarga.
—Sí, eso es ciertamente lo que a Silas le gustaría que pensara
el mundo. Tal vez incluso él lo crea.
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—¿Pero tú no? —Pregunté. —Si realmente crees que Silas
todavía se preocupa por ti, tal vez tú eres el tonto.
Era un error antagonizarlo. Lo sabía, pero no era como si él no 01/2023
me hubiera amenazado a mí y a los míos antes de que nos
conociéramos. Estaba bastante seguro de que no había forma
de salir de su lista de mierda una vez que estabas en ella, así
que mejor no parecer intimidado.
Sin embargo, en lugar de tomar represalias, se rio.
—Maravilloso. Eres mucho más divertido que los demás. ¡Y
tienes más mordidas de las que esperaba! ¡Qué agradable
sorpresa!
—Me alegro de poder proporcionarte algo de diversión —le
dije, mirando deliberadamente alrededor del espacio vacío. —
Me imagino que se vuelve poco divertido, día tras día sin nada
que hacer y sin nadie con quien hablar, excepto personas que
desearían que estuvieras muerto.
 —Oh, yo no diría eso —reflexionó, reclinándose en su silla
para tocarse la sien—. Hay mucho que hacer aquí.
—Correcto. Eres una especie de súper genio, ¿eh? —Pregunté,
cruzándome de brazos. —¿Supongo que estás planeando tu
gran escape y venganza allí?
—Algo así —respondió. —¿Quieres saber qué te voy a hacer
cuando salga?
Fingí considerarlo.
—No puedo decir que sí —respondí finalmente. —Nunca he
sido fanático de los spoilers. Las sorpresas son agradables de
vez en cuando.
Él sonrió.
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—Veremos qué tan agradable termina siendo. Y veremos si
eres tan valiente cuando estemos cara a cara.
—La valentía no es lo mío —dije encogiéndome de hombros. 01/2023
—Los cobardes viven.
Él se rio.
—A veces, sí. Pero también mueren de mil muertes.
—Nunca me he creído eso —admití. —Simplemente parecía el
tipo de lógica que los hijos de puta imprudentes como Enzo
usaban para justificar sus acciones.
—Una teoría interesante —reflexionó. —Siempre podríamos
ponerlo a prueba.
—Si te hace sentir mejor fantasear sobre lo que me vas a
hacer cuando salgas de aquí, sé mi invitado —le dije
encogiéndome de hombros. —Pero hay dos pies de vidrio a
prueba de balas entre nosotros y todo un búnker en la parte
superior, así que no creo que vayas a hacer realidad esos planes
en el corto plazo.
 —Tal vez no —admitió. —Pero nunca está de más planificar
con anticipación.
—¿Y qué vas a hacer exactamente cuando tengas éxito? —
Pregunté. —Una vez que hayas eliminado a todos los que
podrían interferir con tus planes, ¿entonces qué? ¿Vas a
mantener a Silas encerrado en un armario hasta que vea el error
de sus caminos y se enamore locamente de ti?
Me di cuenta de que había tocado un nervio por la mirada en
sus ojos.
—Lo siento, ¿ese tema estaba fuera de los límites? —
Pregunté. Cuando no respondió, presioné: —Esto es puramente
una cuestión de curiosidad. Siéntete libre de ignorar la
32
pregunta, pero ¿qué es exactamente lo que ves en él, de todos
modos?
—¿Estás preguntando porque quieres saber qué veo en él, o 01/2023
qué ve Enzo? —Desafió. —Porque puedo garantizarte que esas
son dos respuestas muy diferentes.
Resoplé.
—Ambos, supongo.
Parecía estar realmente pensando en ello.
—Dicen que la familiaridad engendra desprecio —respondió
finalmente—. Supongo que cuando todo lo que tienes es
desprecio para empezar, produce resultados diferentes.
—¿Es así? —Pregunté dudoso. —Y aquí pensé que tenía algo
que ver con el hecho de que te perdonó la vida cuando fue
contratado para matarte.
A juzgar por el brillo asesino en sus ojos, había tocado otro
nervio. No estaba seguro de por qué me estaba molestando con
un juego tan imprudente. Ciertamente no estaba en mi carácter,
y por lo general no dejaba que la gente me afectara. Hasta
ahora, realmente no lo había hecho, al menos no hasta donde
yo sabía.
No, esto era otra cosa. Extrañamente, tuve la sensación de que
era... curiosidad.
Tal vez yo era el tonto.
De cualquier manera, Demon se calló y no dijo una palabra
por el resto de la noche. No es que realmente me quejara.
Decidí dejarlo bastante bien solo y saqué el libro que estaba
leyendo en mi teléfono. Lo había terminado y comenzado otro
cuando el nuevo guardia de Silas vino a relevarme.
Teniendo en cuenta el hecho de que Demon aún no había
33
vuelto a hablar, me sorprendió cuando me llamó cuando salía
por la puerta.
—Dile a Silas que te envíe de nuevo en algún momento — 01/2023
comentó. —Ha sido un placer.
Miré hacia atrás por encima del hombro en contra de mi buen
juicio.
—Claro —dije secamente. —Supongo que ya veremos.
 4

JAMES

Luca nunca volvió después de la primera vez. Fue una

34
decepción, de verdad. Era, con diferencia, el menos nocivo de
los tres hermanos DiFiore, y tampoco era demasiado duro para
la vista. Estaba empezando a entender el atractivo de los 01/2023
grandes ojos marrones de cachorrito y más músculo que
cerebro.
En su lugar, había tres nuevos guardias, dos del tipo habitual
de endurecidos ex miembros de las fuerzas especiales que
esperaba. El tercero tenía el comportamiento suave de un
mafioso típico, pero sin ninguna gracia social. En el momento en
que entró y vi el brillo de maldad en sus ojos, supe que era un
problema.
Y supe que él era la forma que había tomado el último castigo
de Silas.
Lo probé hablando una vez, y la primera vez, me dislocó la
mandíbula. Después de eso, parecía ser extra desagradable para
el deporte.
 Esa tarde, aparentemente era el campeonato mundial. Ni
siquiera estaba seguro de lo que había dicho para enojar a este,
pero eso probablemente fue el resultado del traumatismo
craneal. Cuando un puño gigante vino volando hacia mi cabeza,
solo esperaba que fuera algo bueno.
Cuando mi cabeza golpeó el suelo de piedra con un crujido
nauseabundo, sentí que la oscuridad fluía por los bordes. Pude
ver botas caminando hacia mí. Cada vez que se levantaban del
suelo, se les pegaban hilos pegajosos de sangre.
Me invadió una sensación familiar de déjà vu cuando me
encontré transportado fuera del momento presente y un
recuerdo del pasado. El olor a sangre y suciedad era el único
35
hilo que los unía.
Eso y la oscuridad.
Un rayo de luz a través de la puerta rota, eclipsado por la 01/2023
sombra de un hombre que cruzaba tambaleándose la
habitación, chocando contra los muebles mientras se agarraba
el ojo derecho. La sangre se derramaba a través de las yemas de
sus dedos tan libremente como las maldiciones arrastradas que
brotaban de sus labios mientras arañaba su herida.
Me senté acurrucado en el armario, mis rodillas pegadas a mi
pecho, mientras agarraba el cuchillo de cocina ensangrentado
en mi palma. Mi cuerpo temblaba por la adrenalina, mi corazón
latía como un conejo en mis oídos, tan fuerte que apenas podía
escuchar los sonidos del hombre furioso maldiciendo a mi
madre mientras se tambaleaba por el pasillo.
Escuché su voz, suave y empalagosa, mientras trataba de
convencerlo de que se quedara y dejara que lo tratara. Era la voz
que siempre usaba con los hombres que entraban y salían de
nuestro pequeño apartamento de dos habitaciones como una
puerta giratoria.
Conmigo, ella tenía otra voz. Una que era áspera y dentada, al
igual que la hoja agarrada en mi pequeño puño. No estaba
seguro de qué versión de ella era real. No estaba seguro de que
hubiera una verdadera ella.
De todos modos, la mayor parte del tiempo, me sentía más
como una muñeca que como un niño real, así que tal vez ella
era de la misma manera. Tal vez no éramos personas en
absoluto. Tal vez los hombres que vinieron y nos usaron a
ambos como juguetes hasta que se aburrieron y se fueron
tenían razón todo el tiempo.
36
La puerta principal se cerró de golpe y sacudió el pequeño
remolque, y me abracé más fuerte, escondiendo mi cara en mis
rodillas. No podía dejar de temblar, a pesar de que el filo del 01/2023
cuchillo se clavaba en mi pierna.
La luz envolvió el pequeño espacio, y cuando miré hacia
arriba, todo lo que vi fue una silueta familiar cuando mi madre
me agarró por la muñeca y me sacó del armario.
—James, ¿qué hiciste? —Gritó, arrancando la hoja de mi
agarre lo suficientemente fuerte como para que la fuerza me
enviara de vuelta al suelo.
Todo lo que podía hacer era mirarla, mi garganta estaba
demasiado apretada para hablar. Todavía podía sentir la mano
del hombre envolviéndola. Tenía miedo de que me dejara un
moretón y me metiera en problemas si la maestra enviaba a
alguien a nuestra casa nuevamente, así que usé el cuchillo que
había robado del cajón de la cocina la noche anterior mientras
mi madre estaba en la otra habitación con otro hombre.
 Ni siquiera estaba seguro de por qué había pensado en
tomarlo, pero lo había escondido debajo de mi colchón. Había
sido tan fácil. Mucho más fácil que la alternativa, pero ahora,
cuando me encontré mirando a mi madre, me di cuenta de que
había evitado un castigo solo para enfrentarme a otro.
Ella me había golpeado a una pulgada de mi vida esa noche,
pero valió la pena porque ninguno de los hombres que la
visitaron después de eso vino a mi habitación. Y me había
enseñado una lección muy importante.
La única persona que alguna vez iba a protegerme era yo
mismo.
37

01/2023
 5

LUCA

Las cosas finalmente comenzaban a volver a la normalidad.

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Había aceptado la oferta de Valentine de cuidar al niño un par
de veces más, y me había quedado dormido. Al menos tanto
como fui capaz de ponerme al día en unas pocas semanas 01/2023
después de años de agotamiento, pero aun así. Empezaba a
sentirme humano de nuevo.
Era el fin de semana de Carol para llevarse a Timmy, pero
cuando fui a su casa a dejarlo, ella no estaba. Ella no contestaba
su teléfono, así que supuse que todavía estaba fuera hasta tarde
a las nueve de la mañana, o se había emborrachado y dormido a
través de la alarma.
De cualquier manera, no estaba dispuesto a dejarlo en su casa,
así que lo traje de vuelta. Supuse que eventualmente llamaría,
con alguna excusa a medias y podríamos discutirlo entonces,
pero cuando vi el número de teléfono de su madre en mi
identificador de llamadas, me preocupé.
—¿Heather? —Pregunté. —¿Todo está bien?
 —Todo está bien, Luca —dijo, su voz cortés pero tensa. —En
realidad estoy llamando en nombre de Carol. Ella... se siente un
poco enferma.
—Lamento escuchar eso —dije, mirando hacia la esquina de
mi oficina, donde Timmy estaba jugando con su tren de juguete.
Era ruidoso como el infierno, pero era la única forma en que
podía hacer cualquier trabajo durante el día mientras él estaba
despierto.
Ambos sabíamos que Carol tenía resaca, así que no tenía
ningún sentido señalarle el eufemismo. Heather y Ken siempre
habían sido amables conmigo y eran personas orientadas a la
familia. El hecho de que su hija no quisiera tener nada que ver
39
con su propio hijo los afectaba, y no tenía sentido hacer las
cosas más incómodas de lo que ya eran.
—Espero que se sienta mejor —respondí. 01/2023
—Estoy segura de que ella estará bien—. Heather suspiró. —
Dado que es su fin de semana, realmente esperábamos poder
ver a Timmy. ¿Cómo te sentirías si él viniera a quedarse en
nuestra casa? Esa banda de niños que le encanta está dando un
show en Braintree esta tarde, y lo íbamos a llevar. Además, estoy
segura de que te vendría bien un descanso.
Dudé. Algo me dijo que Carol había planeado dejar a nuestro
hijo con sus padres de todos modos si ya tenían planes de hacer
una excursión en uno de los dos días que se suponía que debía
estar con ella.
Estaba jodido, pero una parte de mí se sintió aliviada. Al
menos sabía que estaría rodeado de personas que querían pasar
tiempo con él. Ken y Heather eran buenos abuelos, y teniendo
en cuenta el hecho de que Timmy no tenía ningún abuelo de mi
parte, quería que pasara el mayor tiempo posible con ellos.
—Sí, seguro. Apuesto a que le encantaría —dije. —Estoy un
poco atrasado en el trabajo, pero no quiero molestarlos a
ustedes.
—Disparates. Ahora que Ken está jubilado y yo solo trabajo
medio tiempo en el hospital, tenemos mucho tiempo libre. Él
será el punto culminante de nuestra semana —dijo alegremente,
riéndose.
—Bueno, si estás segura, eso sería genial —le dije. —Pero solo
hay una cosa. Carol también se debía quedar con él mañana por
la noche y lo dejaría en el preescolar ya que tengo una cita el
40
lunes por la mañana.
—Oh, no te preocupes por eso, nos aseguraremos de que
llegue a tiempo —me aseguró. —Solo háznoslo saber y 01/2023
podemos recogerlo también, si necesitas más ayuda.
—Está bien. Prepararé sus cosas y lo dejaré en tu casa —le
dije. Después de agradecerle, colgué y me acerqué para
sentarme junto a Timothy, sonriendo. —Oye, chico. ¿Hay más
espacio a bordo del tren?
—No —dijo, mirándome con una expresión grave. —Solo
dinosaurios.
Miré al T-Rex que sobresalía del furgón de cola y me reí.
—Ya veo. Tonto de mí. ¿Cómo te sentirías si pasas el fin de
semana en casa de la abuela y el abuelo y vas a ver Paw Parade?
—¿Paw Parade? —Sus ojos se abrieron como platos y una
enorme sonrisa se dibujó en su rostro, emitiendo mil vatios. —
¡Sí!
Me reí, alborotando el cabello del chico.
 —Bien entonces. Vamos a cepillarte los dientes y a buscar tu
mochila.
Para mi alivio, no parecía desconcertado por el hecho de que
no iba a ver a su madre, pero sabía que no debía pensar que
sería tan fácil arreglar las cosas para siempre.
Eventualmente, se daría cuenta de que faltaba algo y querría
más de lo que yo podía darle por mi cuenta. Solo esperaba que
ese día no llegara pronto.
Pasamos todo el viaje en automóvil hasta la casa de sus
abuelos cantando su canción favorita hasta el punto en que
comencé a cuestionar mi cordura. Así era la vida de un padre
soltero.
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Estaba empezando a sentir que en realidad podría estar
dominándolo, pero no sabía si eso era solo lo alto que todavía
estaba montando después de haber dormido siete horas 01/2023
completas en una noche.
Me sentí culpable por sentirme tan aliviado cuando finalmente
lo dejé con Heather y Ken. No era que no me encantara pasar
tiempo con mi hijo. Timmy era todo mi mundo, y él era lo único
de lo que no me arrepentía acerca de cómo había resultado mi
matrimonio. Lo habría hecho todo de nuevo, sabiendo que él
estaba esperando al otro lado, pero estaba tan jodidamente
cansado. Incluso cuando no lo estaba.
Sin embargo, no era como si siempre fuera a ser así. No iba a
ser joven para siempre, lo que me hizo sentir aún más culpable
por el hecho de que estaba perdiendo mi limitado tiempo con él
sintiéndome así. Se merecía mucho mejor que un padre que
siempre estaba abrumado y una madre a la que no le importaba
dónde estaba. Tenía que preocuparme lo suficiente por los dos,
sabiendo todo el tiempo que en el fondo todavía no era
suficiente.
Ponerme al día con el trabajo durante el fin de semana tomó
la mayor parte de mi energía, y preocuparme por Timothy,
aunque sabía que estaba a salvo, tomó el resto. Cada vez que
comenzaba a relajarme, me sentía culpable por disfrutar de la
paz y la tranquilidad.
Terminé llamándolo tantas veces para ver cómo estaba que
me sorprendió que Heather no hubiera bloqueado mi número,
pero finalmente tuve que decirme a mí mismo que me relajara.
Dios, me estaba volviendo neurótico.
Tal vez siempre lo había sido, y la paternidad acababa de
42
sacarlo a relucir en mí. Cualquiera que sea el caso, finalmente
me fui a la cama el domingo por la noche antes de la
medianoche por primera vez en años. Procedí a dormir a través 01/2023
de mi alarma.
Y mi reunión.
Mierda.
Cuando me desperté con una boca que se sentía como
algodón, me di cuenta de que eran más de las dos de la tarde. Y
no solo tenía media docena de llamadas perdidas de Enzo y
Johnny preguntándome por qué no me había presentado a mi
reunión, porque de alguna manera me las arreglé para poner mi
teléfono en silencio mientras dormía, sino que también tenía
treinta minutos para llegar al preescolar y recoger a Timmy.
Mierda.
Tal vez no estaba tan al tanto de toda esa deuda de sueño
como pensaba.
 Tomé una ducha a la velocidad del rayo y me vestí, de alguna
manera envié simultáneamente lo que parecía mi centésimo
mensaje de disculpa a Enzo esa semana. Siempre había sido
alguien en quien él y los demás podían confiar, como mínimo.
Siempre me había enorgullecido de eso, pero ahora...
Joder, realmente tenía que arreglarlo. Cuando Johnny era el
que constantemente tenía que tomar el relevo por mí, había un
problema serio.
Cuando fui a la escuela, recibí la mirada de reojo habitual de
algunos de los otros maestros y padres que se demoraban en el
pasillo. Llegué tarde, y no por primera vez. Ser jalado en un
millón de direcciones diferentes se vio agravado por el hecho de
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que nunca parecía capaz de llegar a una de ellas a tiempo. No
es que fuera lo suficientemente ignorante como para pensar
que mi tardanza era la razón de todas las sospechas. 01/2023
Los otros padres sabían quién era yo y qué hacía mi familia. ¿Y
cómo podrían no hacerlo? Entre el arresto de Enzo por el
asesinato del padre de mi mejor amigo, la muerte de nuestro
padre y el tiroteo en el hospital de Valentine, la familia DiFiore
había sido noticia en los últimos años, y eso sin mencionar las
empresas criminales habituales que había sido el negocio de
nuestra familia durante generaciones.
En este momento, Timothy todavía estaba en preescolar. Era
demasiado joven para que importara, pero cuando creciera y
sus compañeros de clase pudieran sumar dos y dos, las cosas
serían diferentes.
Ciertamente habían sido para mí mientras crecía. Yo no quería
eso para él. Quería que tuviera una vida normal, o al menos tan
normal como él fuera capaz de tener.
 A veces pensaba en dejar la Familia con J mayúscula por
completo y mudarme a algún lugar donde pudiéramos empezar
de nuevo, pero entonces ambos estaríamos separados de las
únicas personas con las que realmente podíamos contar. Y
luego estaba el hecho de que estaría lejos de Carol si alguna vez
ella se recomponía y decidía al menos tratar de ser una madre
decente.
No es que estuviera haciendo demasiado en este momento.
Me sacudí de mis pensamientos mientras me acercaba a la
recepcionista en la recepción.
—Hola. Estoy aquí para recoger a Timothy.
Ella levantó la vista de su teléfono, frunciendo el ceño.
44
—¿Timothy DiFiore?
—Ese es mi hijo, sí —dije, tratando de sonar como alguien que
no se había quedado sin paciencia hace tres años. 01/2023
Ella solo parpadeó hacia mí.
—Lo siento, pero... él no está aquí.
—¿Qué quieres decir con que él no está aquí? —Exigí.
La chica detrás del escritorio me miró con ojos muy abiertos y
temerosos, y no estaba seguro de si era la reputación de mi
familia la que me precedía, o si me veía la mitad de loco que me
sentía ahora, pero, de cualquier manera, no me importó.
—Yo... él ya fue recogido —tartamudeó, buscando a tientas
una carpeta en el cajón debajo de su escritorio. —Hay un pase
especial para recoger y dejar en su archivo para hoy. Dice que
un miembro de la familia lo inspeccionó. Tenían el código de
acceso y todo.
—Eso fue solo para dejar —dije bruscamente. —Sus abuelos
lo dejaron. Se suponía que yo tenía que recogerlo.
 —Bueno, ¿tal vez se confundieron? —Ella ofreció.
Fruncí el ceño, sacando mi teléfono. Probablemente tenía
razón, y yo estaba enloqueciendo por nada, pero no era propio
de Heather cometer un error como ese.
Por supuesto, yo era el que estaba privado de sueño, por lo
que era muy posible que yo fuera el que la había jodido.
Reproduje nuestra última conversación en mi mente, tratando
de averiguar si había dicho algo que la llevaría a creer que ella
también recogería a Timothy después de la escuela. O tal vez
Ken había entendido mal las instrucciones transmitidas y lo
recogió en su lugar.
Había mil explicaciones posibles, y traté de no torturarme con
45
las feas mientras esperaba que sonara el teléfono.
—Luca —respondió Heather en un tono agradable—. ¿Cómo
está el hombrecito? Espero que lo haya pasado bien 01/2023
contándoles a todos sus amigos de la escuela sobre el concierto.
—¿Él no está contigo? —Mi voz sonaba tensa, pero no
reflejaba del todo el estado de caos que se arremolinaba dentro
de mi cuerpo.
Hubo una pausa al otro lado de la línea que pareció durar una
eternidad, aunque no pudo ser más de uno o dos segundos.
—¿Q-qué? No. Dijiste que solo necesitábamos dejarlo esta
mañana.
Mi corazón estaba martillando de nuevo. Apenas podía
escuchar mis propios pensamientos.
—Estoy en el preescolar en este momento. Él no está aquí.
¿Ken podría haberlo recogido?
 —Yo… no, no lo creo —respondió ella, claramente nerviosa—.
Estaba conmigo cuando lo dejé esta mañana. Sabía que lo ibas a
recoger. Los dos nos despedimos y todo.
—¿Puedes preguntarle? —Pregunté, sintiéndome como si
estuviera hecho de miles de hilos que se alejaban flotando unos
de otros. —Carol. Por favor.
—Por supuesto —dijo ella temblorosa. —Los llamaré a ambos
ahora mismo al teléfono fijo.
Los siguientes minutos fueron borrosos, pero, aunque me
resultó difícil comunicarme con Carol, ella contestó con solo el
segundo timbre para su madre. Y me di cuenta por los gritos de
pánico e indignación en la otra línea que ella realmente no tenía
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ni una maldita idea de dónde estaba.
Lo que hacía que la alternativa fuera mucho peor.
Mi primera inclinación fue llamar a la policía, pero luego 01/2023
recordé que tenía una línea directa con la policía. Incluso si
Malcolm estaba técnicamente “retirado” todavía estaba
moviendo más influencias en la ciudad en su capacidad no
oficial que durante su larga e infame carrera como jefe de
policía.
En veinte minutos, la escuela estaba repleta de autos de
policía, y el mismo Malcolm estaba interrogando a la muy
inquieta empleada de escritorio que aparentemente había
dejado que mi hijo se fuera con un completo extraño.
Ni siquiera podía recordar cómo era el idiota, excepto que
llevaba un traje y se parecía “algo a mí” que era todo maldito
mafioso con una muesca.
Las imágenes de seguridad tenían que tener algo, me dije.
Pero cuando vi la mirada en el rostro de Malcolm, lo supe mejor.
 —¿Qué es? —Pregunté, acechando por el pasillo fuera de las
oficinas de la estación de policía. Técnicamente, ni siquiera
debería haber corrido libremente por el lugar, pero había
violado todas las reglas mientras trabajaba aquí, y nadie nunca
le impidió hacer nada en absoluto.
El solo sacudió la cabeza.
—Alguien sacó la cámara en el estacionamiento y en el
vestíbulo de la escuela media hora antes del momento que la
empleada del escritorio dijo que revisaran. Quienquiera que
haya hecho esto, es un profesional.
Mi estómago ya estaba retorcido en nudos, pero sentí que iba
a vomitar a pesar de no haber comido nada en la mayor parte
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de veinticuatro horas.
—Ella es una nueva empleada —dije, de repente agarrándome
de las pajitas. —Solo comencé a verla hace unas semanas. Ella 01/2023
podría ser una infiltrada.
—Ya investigué los antecedentes de la chica. Era una puta
striper de caramelos —murmuró Malcolm. —Además, los otros
profesores corroboraron su historia y los otros dos que vieron a
este tipo revisando a Timothy dijeron lo mismo. Tenía el código
de acceso y la aplicación, y dijo que era Enzo. Quienquiera que
sea, no solo sabía que estaba en la lista de recogidas aprobadas,
sino que sabía que no lo dejarías hoy, así que era la oportunidad
perfecta. Lo que significa que te han estado observando durante
mucho maldito tiempo.
—Esto es una mierda —gruñí. —¿Quién…
Me congelé cuando mi teléfono vibró en mi bolsillo. Lo agarré
y miré la pantalla solo para ver un mensaje de texto que hizo
que mi corazón se me saliera del pecho.
 <Luca DiFiore, creo que compartimos un conocido mutuo que
actualmente está en posesión de tu cuñado. Si desea volver a
ver a su hijo, me entregará a este conocido, pero todo a su
debido tiempo. Espere más instrucciones.>
—¿Qué fue eso? —Preguntó Malcolm, frunciendo el ceño.
Le entregué el teléfono, todavía completamente entumecido.
Sus ojos escanearon el mensaje rápidamente antes de apretar la
mandíbula.
—Mierda.
—Es él —dije entre dientes. —Silas dijo que ese monstruo que
ustedes mantienen encerrado tenía conexiones en el exterior, ¡y
ahora están tratando de sacarlo, usando a mi hijo como cebo!
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—No sabemos eso —murmuró Malcolm, mirando a su
alrededor. —Mantén tu voz baja.
—¿Mantener mi voz baja? —Empujé su pecho, estallando. — 01/2023
¡Esto es por mi hijo! ¡Se ha ido y es tu puta culpa!
—¿Has perdido la maldita cabeza? —Malcolm gruñó,
agarrando mi brazo y tirando de él detrás de mi espalda antes
de forzarme por un pasillo más silencioso y lejos de las personas
que nos miraban desde más abajo en el pasillo. —¿Crees que
cometer un asalto en medio de una maldita estación de policía
va a ayudar en este momento?
Tenía razón, pero yo estaba demasiado enojado para
escuchar.
—Tú eres el que hace lo que le da la gana. ¿Me estás diciendo
que ahora te importa una mierda la ley y el orden?
—Cálmate, Luca —gruñó, aflojando un poco el agarre sobre
mí. Esperaba que me golpeara y yo esperaba que lo hiciera.
Tenía suficiente energía y agresión fluyendo a través de mí que
necesitaba una salida. En cambio, puso sus manos sobre mis
hombros y me dio una mirada exasperantemente tranquila
mientras decía: —Sé que estás asustado en este momento, pero
vamos a recuperar a Timmy. Confía en mí. Lo haremos. Solo
tenemos que hacerlo de manera inteligente. Gracias a ese texto,
ahora tenemos una muy buena idea de por dónde empezar.
Sentí que mi rabia comenzaba a disminuir gradualmente,
aunque solo fuera por la promesa de desquitarme con un
objetivo más apropiado.
—Sí —dije entre dientes. —Supongo que lo hacemos.

49

01/2023
 6

JAMES

No estaba seguro de si me había quedado dormido o me

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había desmayado, pero, de cualquier manera, cuando escuché
pasos que venían por el pasillo, mi reloj interno me dijo que era
hora de que mi guardia sádico favorito viniera a jugar. 01/2023
Ya había formulado un plan para morderle los dedos la
próxima vez que se acercaran a mi cara. Sin duda, Silas me haría
pagar por ello, pero durante esos pocos momentos felices que
pasaría viendo al guardia sangrar y retorcerse en el suelo como
un gusano en un anzuelo, era un precio que estaba más que
dispuesto a pagar.
Cuando la puerta se abrió y Silas entró junto a Malcolm y
Luca, levanté la cabeza con curiosidad.
—Ahora esto es una sorpresa —le dije, sonriendo. El corte en
mi labio escoció mientras se estiraba y probé el matiz metálico
de la sangre en mi lengua. —¿Les apetece un cuarteto,
caballeros?
—Algo así —dijo Malcolm, entrando en la habitación. Se
detuvo en el vidrio templado, examinándolo como si estuviera
considerando si quería intentar abrirlo con los puños. Él me
miró, sus ojos llenos de disgusto y rabia que no parecían
disminuir en absoluto desde la última vez que lo había visto. Se
volvió hacia Silas. —¿Qué diablos le pasó? ¿Cómo se supone
que voy a torturar al hijo de puta si ya está al borde de la
muerte?
Silas frunció el ceño y entrecerró los ojos mientras me
estudiaba.
—Debe haber cabreado a uno de los nuevos guardias.
Solté una carcajada que me dolió profundamente en el pecho.
Probablemente las costillas rotas. Estaba bastante seguro de
que también me había roto el esternón en el último intento.
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—¿Fingir así no era parte de tu castigo? —Pregunté. —¿A
quién intentas impresionar?
Silas frunció el ceño como si no tuviera ni idea de lo que 01/2023
estaba hablando.
No es probable.
—Solo abre la maldita puerta —dijo Luca entre dientes. De los
tres, él era el que parecía querer destrozarme, miembro por
miembro.
Interesante.
Y aquí pensé que había sido francamente hospitalario durante
su primera y última visita.
—Pensé que te había asustado —reflexioné.
Luca se abalanzó, pero Malcolm lo bloqueó.
—Tranquilízate —dijo Malcolm. —Nos encargaremos de eso.
—Mierda —Luca se enfureció, empujándolo hacia atrás. —Él
es parte de esto. ¡Sé que lo es, y es tu jodida culpa!
 —Te dije que no deberíamos haberlo traído aquí —gruñó
Malcolm, ignorando a Luca mientras miraba directamente a
Silas. —Está demasiado involucrado.
Antes de que Silas pudiera decir algo, Luca le arrebató algo de
la mano. La tarjeta llave. Me di cuenta de que el movimiento
repentino y audaz del hombre, por lo general de buenos
modales, lo tomó con la guardia baja y no reaccionó de
inmediato, al menos hasta que Luca pasó la tarjeta por el lector
en la superficie del vidrio y abrió la puerta.
Apenas estaba Luca dentro cuando vi un puño volando hacia
mí, y me dio en la cara, enviándome de espaldas, con silla y
todo, al otro extremo de la celda. Luca estaba encima de mí en
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un instante, a horcajadas sobre mi pecho y agarrando mi camisa
con una mano con su espalda derecha y un puño, listo para
golpearme de nuevo. 01/2023
—¿Dónde está? —Él hervía. —Sé que tuviste algo que ver con
eso, y lo juro, si un cabello en la cabeza de ese niño se lastima,
desearás que Silas te haya matado.
Lo miré a los ojos. Sus pupilas eran pinchazos y el blanco
enrojecido por el agotamiento y la rabia. Los ojos de un loco. O
un hombre aterrorizado. En su caso, las circunstancias que lo
habían traído a mi mundo una vez más lo habían llevado
claramente a un poco de ambos.
—Interesante —murmuré, chupándome el labio recién abierto
en la boca. —Déjame adivinar... ¿alguien se llevó a tu hijo?
Los dientes de Luca rechinaron y la nueva oleada de dolor y
rabia en sus ojos fue toda la confirmación que necesitaba. Su
puño retrocedió, pero una mano atrapó su muñeca antes de
que pudiera dar el siguiente golpe que probablemente me
habría abierto el cráneo. No estaba en las mejores condiciones
después de que el guardia me hiciera un número.
Miré por encima del hombro de Luca para encontrar a Silas de
pie detrás de él, su postura relajada y su expresión en blanco
mientras sujetaba a su cuñado.
—Es suficiente —dijo Silas con calma.
—Vete a la mierda —escupió Luca, tratando en vano de eludir
su agarre. —No es tu hijo el que se ha llevado este bicho raro.
—No. No lo es —dijo Silas en voz baja—. Pero también me
preocupo por Timothy. Y si no puedes creer eso, sabes que Enzo
lo ama, así que al menos deberías creer que haré lo que sea
necesario para recuperar a Timothy por el bien de Enzo.
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Luca no dijo nada, pero a pesar de que todavía miraba con el
ceño fruncido a Silas, parecía estar considerando sus palabras.
—Este no es el camino —continuó Silas. —Si él tiene algo que 01/2023
ver con esto, créeme, la tortura no es la forma de sacárselo. Y en
el estado en que se encuentra ahora, un golpe más es todo lo
que se necesita para que se produzca un daño cerebral
permanente. Entonces sería inútil para nosotros.
Solté una risa seca.
—Conmovedor.
—Tú. Silencio —siseó Silas, dándome una mirada que podría
cortar la leche.
—Tiene razón —dijo Malcolm. —Sin ofender, Luca, no tienes
lo que se necesita para obtener respuestas de ese hijo de puta.
Pero yo sí lo hago. Déjanos manejarlo, y te garantizo que te daré
el valor de tu dinero.
Luca miró a ambos, todavía furioso, pero cuando Malcolm le
ofreció la mano, soltó el brazo de Silas y dejó que el otro
hombre lo ayudara a levantarse. Me lanzó una mirada asesina
por encima del hombro antes de salir de la celda.
Silas agarró el respaldo de mi silla y la puso en posición
vertical, haciendo que el mundo girara a mi alrededor. Había
tres de él en este momento, pero el del medio era un poco más
fuerte que los demás mientras estaba de pie frente a mí, con las
manos en los bolsillos mientras me miraba, frío y calculador
como siempre.
—Sabes, cuando un niño desaparece, por lo general es el otro
padre —le dije, tragando un sorbo de mi propia sangre. No
estaba seguro de si era desde adentro o desde afuera en este
punto—. Es posible que tengas más suerte si empiezas por ahí,
54
teniendo en cuenta que no tengo ni puta idea de lo que estás
hablando. A menos que estés tan desesperado por encontrar
una excusa para volver a verme. 01/2023
—No es la madre —dijo Silas con firmeza—. Estamos seguros
de eso. Y si pensara que estás directamente involucrado,
estaríamos teniendo una conversación muy diferente.
—¿Es eso así? —Me burlé. —¿Quién sabe? Tal vez estoy
mintiendo.
La expresión de Silas no cambió.
—No fuiste tú —dijo con un tono de certeza.
—¿Y qué te hace estar tan seguro de eso? —Desafié.
—He pasado incontables horas analizando tu perfil
psicológico —respondió. —Primero cuando te estaba cazando.
Luego, cuando estaba tratando de decidir si serías útil como
aprendiz. Conozco todas las avenidas retorcidas y todos los
rincones oscuros y sucios de tu mente, James, y si hay algo de lo
que no eres capaz, una línea que incluso tú nunca cruzarías, es
dañar a un niño. De hecho, ese siempre ha sido tu detonante,
¿no es así? Los hombres que cazaste, al menos al principio,
tenían una cosa en común. Eran depredadores.
Resoplé, alejándome de él.
—Así que tengo un tipo asesino. ¿No lo hacemos todos?
—Eso depende de si los 'nosotros' a los que te refieres son
asesinos en serie —dijo Silas secamente. —En cualquier caso, no
estoy aquí porque crea que tú lo hiciste. Pero creo que tienes
una idea de quién podría haberlo hecho.
—¿Y por qué es eso? —Pregunté aburrido. Si bien
normalmente no me molestaría en una visita de Silas, la última
ronda de guardia me había dejado agotado y realmente no
55
estaba disfrutando de la compañía. Quería toda su atención, no
una audiencia.
—Porque preguntó por ti —dijo Luca entre dientes. No había 01/2023
duda de la acusación en su tono, y si lo que decía era cierto,
sería un tonto si no saltara a esa suposición.
—¿Oh? —Ahora tenía curiosidad.
—Había una nota de rescate —dijo Silas deliberadamente. —
Quien se llevó a Timothy quiere hacer un intercambio. El niño
por ti.
—Eh —dije.
La ira fresca brilló en los ojos de Luca, volviéndolos aún más
oscuros.
—Esto no es una jodida broma.
—Por supuesto que lo es —respondí. —Y tú eres claramente
el remate.
Luca se abalanzó sobre mí de nuevo, pero Malcolm lo agarró
del brazo para detenerlo.
 —Déjame ir —espetó Luca. —¿Lo escuchas? Claramente tiene
algo que ver con esto.
—No sería tan transparente si lo hiciera —dijo Silas con un
suspiro de cansancio antes de volverse hacia mí. —Pero sí creo
que tiene una idea de quién está detrás de esto. Y no creo que
deba decírtelo, James, pero quienquiera que esté al otro lado de
esto no está interesado en tu libertad.
—Tengo mi parte de enemigos —concedí. —Muchos de ellos
que comenzaron como tuyos. Y dices que no tenemos nada en
común.
Silas resopló algo parecido a una carcajada. Cerca para él, de
todos modos.
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—Sea como fuere, hay un número limitado de personas que
podrían saber que estás aquí. Alguien que no solo sabe quién
eres, sino también que sobreviviste a mi intento de sacrificarte y 01/2023
terminaste aquí.
—Eso lo reduce —estuve de acuerdo.
—¿Quién? —Exigió Silas.
No respondí de inmediato, principalmente porque estaba
tratando de revisar la lista yo mismo. Había sido cuidadoso en la
reinvención de mi identidad. Meticulosamente así. No había
nadie que debería haber sido capaz de saber que estaba vivo
además de él y el chico que me había ayudado a empezar de
nuevo, y mucho menos dónde estaba, y todavía no sabía cómo
era posible. Pero solo había una persona en la que podía pensar
que podría tener los medios, o el motivo, para localizarme.
—Te dije que no va a cooperar —dijo Malcolm bruscamente.
—El hecho de que no podamos sacarle la mierda a golpes no
significa que no podamos obtener la verdad por la fuerza—.
Una sonrisa sádica se extendió por sus labios. —Solo necesito
ser un poco creativo, eso es todo. Desollar siempre es un buen
lugar para comenzar.
Silas frunció el ceño y me di cuenta de que estaba a punto de
discutir cuando hablé.
—Lewis Capello.
Silas se congeló antes de volverse hacia mí. Vi una mirada de
reconocimiento cruzar lentamente su rostro.
—Capello —repitió. —¿Por qué ese nombre suena tan
familiar?
—Porque su hermano Efisio intentó contratarte hace años —
respondí. —Fue justo después de que me acogiste.
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Silas me miró parpadeando como si hubiera dicho algo
incomprensible.
—Te acogí —se burló. —Supongo que esa es una forma de 01/2023
decirlo.
—¿Sabes quién es este tipo? —Preguntó Malcolm.
—Como él dice, fue hace mucho tiempo —dijo Silas
pensativamente.
—Pensé que se suponía que tenías memoria fotográfica —
murmuró Luca.
—Eidético —lo corrigió Silas en tono defensivo—. Y consumo
cantidades tan grandes de información para realizar mi trabajo
que tengo que descartar cualquier cosa que sea irrelevante—.
Se volvió hacia mí. —Lo rechacé como cliente. ¿Por qué?
—Porque él trabaja en la única industria del inframundo con la
que ni siquiera tú te mancharías las manos —respondí
intencionadamente.
 Una mirada oscura apareció en los ojos de Silas. Lo sabía bien
La repugnancia se mezclaba con pura rabia asesina. Era una
versión más apagada de lo que sentía, pero todo lo era cuando
se trataba de él. Todo menos la obsesión que sentía por su
mafioso mascota.
Era una de las razones por las que le había permanecido leal
todos estos años. Incluso ahora, ya sea que lo viera de esa
manera o no. Había pocos monstruos que aún mantuvieran un
sentido del honor, incluso si solo era uno que habían
improvisado para ellos mismos.
—Venden niños —murmuró, sus labios se curvaron sobre las
palabras con disgusto.
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—En una escala que haría vomitar al diablo —respondí. —Por
supuesto, eran más una operación de poca monta en ese
entonces, pero Lewis ha llevado el negocio familiar a nuevas 01/2023
profundidades de depravación. Y la infamia. Incluso en ese
entonces, tenían suficientes amigos en lugares altos que no
podías eliminarlos como lo hiciste con la mayoría de las
personas de su clase que fueron lo suficientemente tontos como
para oscurecer tu puerta.
—Está volviendo a mí —dijo Silas. —Me parece recordar a
cierto senador que estaba íntimamente relacionado con la
familia.
—Oh, todavía son bastante acogedores lo último que escuché
—le aseguré. —Entre otros.
—Te dije que no te metieras con ellos —dijo Silas,
entrecerrando los ojos. —Me desobedeciste.
 —La primera y única vez —dije intencionadamente. —Pero si
realmente esperabas que te escuchara, solo tienes la culpa tú
mismo. Como dijiste. Tengo un tipo.
—Lo mataste —dijo Silas, pellizcándose el puente de la nariz.
—Tú mataste a Efisio.
—Esperé un tiempo apropiado después de que le negaras el
servicio —dije.
—Obviamente no lo suficiente si Lewis descubrió que fuiste tú
—siseó Silas—. Y nunca me lo dijiste.
—¿Qué, para que pudieras decidir que estaba comprometido
y sacarme? —Desafié.
Él no lo negó.
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—Espera un segundo —dijo Malcolm, levantando la mano. —
¿Me estás diciendo que habrías sacado a tu propio activo
porque él mató a ese pervertido? 01/2023
—No estaba al tanto de lo que había hecho —dijo Silas
sombríamente—. Pero lo habría hecho, sí. No puedo permitirme
tener vigilantes comodines trabajando para mí.
—Increíble —murmuró Malcolm. Sabía mejor que pensar que
era por lástima por mí en lugar de enojo hacia su hermano, por
supuesto. Su odio hacia mí era lo único por lo que realmente no
podía culparlo, después de haber matado a su primer marido y
secuestrado al segundo.
—Él me sacó por otras razones poco después de eso, de
todos modos —dije con amargura. —Solo negocios. ¿No es así,
Silas?
—Te quedaste muerto —dijo Silas, ignorando mi pregunta. —
¿Te estabas escondiendo de mí? ¿O de Lewis?
 —Ambos —respondí encogiéndome de hombros. —Al final,
funcionó. Al menos, lo hizo por un tiempo. Permanecer muerto
requiere una inversión activa de tiempo y recursos, y parece que
no has sido tan cuidadoso en cubrir mis huellas como yo.
Silas me miró con esa mirada fría como la piedra, pero no dijo
nada.
—¿Entonces me estás diciendo que traficantes de personas
tienen a mi hijo? —Exigió Luca, sonando recién aterrorizado.
—Lewis no es como su hermano —dije, aunque no tenía ni
idea de por qué me sentía obligado a tranquilizar a un hombre
que acababa de golpearme. —No es personal para él. Son solo
negocios.
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—Eso realmente no es reconfortante —espetó Luca.
—Tal vez no —dije encogiéndome de hombros. —Pero si ha
hecho esto, no lastimará al niño hasta que obtenga lo que 01/2023
quiere.
—¿Y después de eso? —Luca presionó.
Lo miré por unos momentos, sabiendo que tenía que elegir
mis palabras con cuidado entre los demás. Especialmente
Malcolm.
—Digamos que si me entregas, no lo recuperarás. Así no es
como funciona Lewis. No hay honor entre ladrones y todo eso.
—Mierda —gruñó Malcolm. —Si está haciendo esto para
vengarse de su hermano, y Silas no tuvo nada que ver con su
muerte, yo digo que te entreguemos el trasero, atrapemos al
niño y luego los enviemos a todos hasta el reino venidero. No es
como si alguien te extrañara.
—¿De verdad crees que no cuenta con eso? —Pregunté—.
¿Crees que no ha planeado todas las contingencias? Él sabe que
lo traicionarás, y Lewis no llegó a donde está dejando cabos
sueltos. Eso es exactamente lo que será Timothy una vez que me
entregues a Lewis, y no quede nada protegiéndolo. Soy la única
persona que alguna vez se infiltró en la organización lo
suficientemente profundo como para saber cómo extraerlo de
manera segura. Te guste o no, me necesitas, y si me usas como
un intercambio de rehenes, toda tu influencia e inteligencia
desaparecerán. Así. Y tú —dije, girándome hacia Luca —puedes
despedirte de cualquier esperanza que tengas de volver a ver a
tu hijo.
Luca encontró mi mirada, la suya oscura e ilegible. Había más
entereza detrás de eso de lo que le había dado crédito, pero
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cada hombre tenía sus límites. Y me di cuenta de que estaba a
un pelo de distancia de la suya.
—No tienes que creer en mi palabra —le dije, manteniendo mi 01/2023
atención en él, ya que sabía que Silas ya estaba pensando diez
pasos por delante, y Malcolm simplemente no valía la pena
razonar con él. —Te demostraré que sé exactamente de lo que
estoy hablando. Dentro de las próximas doce horas, Lewis te
contactará nuevamente desde un número de VOIP imposible de
rastrear usando una VPN. La llamada probablemente se enrutará
a través de Barbados, pero posiblemente Bermudas. No te
dejará hablar con tu hijo, pero pregunta de todos modos. Es
parte del juego. Te dirá que quiere hablar conmigo la próxima
vez a cambio de escuchar la voz de tu hijo. Tal vez una imagen.
Te sugiero que aceptes sus términos, suponiendo que las
exigencias de la paternidad soltera no se hayan vuelto
demasiado.
 Los ojos de Luca se entrecerraron peligrosamente. Por un
segundo, pensé que me iba a atacar de nuevo. En cambio, se
volvió hacia Silas.
—¿Confías en él?
—Absolutamente no —respondió Silas sin dudarlo—. Pero no
creo que esté mintiendo en este caso. Así que tendremos que
esperar y ver.

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01/2023
 7

LUCA

La siguiente llamada llegó unas diez horas después de la

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primera, tal como James dijo que sucedería. Silas y Malcolm ya
tenían una configuración en la casa de la familia para rastrear la
llamada tan pronto como llegara. 01/2023
El tiempo pareció detenerse cuando sonó el teléfono. Miré a
Silas, quien asintió para que tomara la llamada.
—Buenas noches, Luca —dijo el hombre al otro lado de la
línea antes de que tuviera la oportunidad de responder. Su voz
era baja y suave, y había algo en ella que me enfermaba. El
hecho de que este hombre fuera el que tenía a mi hijo fue
suficiente para volverme loco.
—Lewis —dije entre dientes.
—Ah, muy bien —dijo. —Veo que tu cuñado ya lo descubrió.
¿Supongo que está allí? Y rastreando la llamada, sin duda. Eso
está perfectamente bien. No tengo mucho tiempo para charlar,
pero me aseguraré de permanecer el tiempo suficiente para que
pueda obtener una conexión. Protocolo y todo eso.
 —Mi hijo —dije, luchando por evitar que mi ira ahogara las
palabras de mi garganta. —¿Dónde está?
—A salvo —dijo Lewis, y escuché la presunción en su voz. —
Seguro y bien distanciado de todos los aspectos desagradables
del negocio familiar, estoy seguro de que Silas ya te ha
informado. Y te doy mi palabra, seguirá así mientras sigas
cumpliendo con estas negociaciones…
—¿Y por qué diablos debería creerte? —Exigí. —Tu palabra no
significa una mierda.
—Bastante justo —concedió. —Pero nos estamos adelantando
a nosotros mismos. Quieres hablar con tu hijo, y quiero que me
asegures de que Demon todavía está vivo, pero puedo
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garantizarte que no has podido convencerlos de que lo saquen
del agujero en el que se encuentra escondido.
Apreté los dientes, dividido entre el alivio y la frustración de 01/2023
que todo esto estaba saliendo de la forma en que James había
dicho que sucedería. Un poco demasiado cerca.
—Estás trabajando con él —lo acusé.
—Ahora eso sería un giro, ¿no? —Lewis reflexionó. —Ay, no
creo que tu prisionero me tenga en la misma alta estima que yo
le tengo a él. Pero en realidad no importa, ¿verdad? Yo tengo
algo que tú quieres, y tú tienes algo que yo quiero. Mientras
ambos somos razonables al respecto, no hay razón por la que
no podamos ser felices.
—¿Cuándo puedo hablar con él? —Exigí.
—Cuando me da la gana —respondió en un tono casual,
como si fuéramos simplemente dos viejos conocidos
discutiendo cuándo quedar para tomar un café. —Solo
asegúrate de estar disponible por la noche.
 Mi estómago se revolvió. ¿Qué clase de juego estaba
jugando?
Silas asintió una vez más, su expresión era ilegible mientras
permanecía concentrado en la llamada, con un auricular sobre
las orejas. Malcolm estaba apoyado contra la otra pared, en
silencio absoluto, pero podía ver las ruedas girando detrás de
sus ojos.
Todos, incluidos él y Valentine, se habían mudado a la
mansión familiar por el momento, como nuestra nueva base de
operaciones. Pero Val estaba tratando a un paciente y Enzo
estaba supervisando la persecución. La policía era inútil en lo
que a Malcolm se refería, y los ejecutores de la familia
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probablemente no lo harían mucho mejor para encontrar a este
tipo si hubiera logrado rastrear a James a pesar de los mejores
esfuerzos de Silas para mantenerlo oculto del mundo. 01/2023
Pero todavía teníamos que intentarlo.
Quería estar ahí fuera yo mismo, pero lógicamente, sabía que
tenía que estar aquí. Yo era el único punto de contacto con el
que Lewis parecía estar dispuesto a tratar en este momento. Eso
no impidió que me volviera loco.
—Bien —dije, sonando muchísimo más tranquilo de lo que
estaba. —Estará aquí cuando llames. Pero primero quiero hablar
con mi hijo.
—Así no es como funciona este juego, Luca —dijo Lewis en un
tono condescendiente. —Tú no puedes poner las reglas. Pero te
diré una cosa. Has sido tan buen jugador hasta ahora que te
enviaré una foto como prueba de que tu angelito está bien.
Asegúrate de mantener tu parte del trato y él seguirá así.
—Espera… —Me interrumpí cuando la línea se cortó.
 Unos momentos después, el teléfono se iluminó con un
mensaje. Había una foto que alguien había tomado desde el
otro lado de la habitación donde Timothy estaba sentado en el
suelo en lo que parecía una sala de estar relativamente normal,
jugando con un tren de juguete que era idéntico al que tenía en
casa. Delante de la cámara, a la derecha, había un periódico con
la fecha del día. Parecía relativamente feliz, considerando todas
las cosas, pero verlo me llenó tanto de alivio como del miedo
más profundo que jamás había conocido.
Mi hijo. Tenían a mi chico. Estaba vivo y a salvo, pero ¿por
cuánto tiempo?
—Esta foto —dije, empujando el teléfono en las manos de
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Silas. —¿Puedes sacar algo de eso?
Silas dudó, mirando el teléfono.
—No hay ventanas, pero puede haber algunas características 01/2023
de identificación. Puedo hacer que un equipo lo mire —dijo con
cuidado. —Pero estoy seguro de que todos los metadatos están
borrados y no vamos a encontrar nada que Lewis no quiera que
encontremos.
Él estaba en lo correcto. Sabía que lo estaba, pero era una
paja y me estaba aferrando desesperadamente.
—Tienes que hacerlo —le dije, mirando deliberadamente a
Malcolm. —Tiene que estar fuera de allí y listo para hablar con
Lewis mañana por la noche.
Malcolm claramente no estaba contento con eso a juzgar por
el ceño fruncido en su rostro, pero gruñó un reconocimiento.
—Haz que le pongan un collar —le dijo a Silas. —Todavía creo
que hay una muy buena posibilidad de que sea él quien
orqueste todo esto.
 —No lo sé —dijo Silas, sonando más seguro de lo que tenía
derecho a estar—. Pero no nos arriesgaremos.
Esa era la única maldita cosa en la que había estado de
acuerdo con él.

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01/2023
 8

JAMES

Los guardias vinieron a buscarme justo a tiempo, y teniendo

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en cuenta el hecho de que Malcolm y Silas habían estado
husmeando últimamente mucho más de lo habitual, se habían
portado bien. Lo que significaba que estaba recibiendo el trato 01/2023
real de no tener mi cara golpeada contra el piso de cemento.
Prácticamente unas vacaciones.
Ninguno de los dos dijo una palabra, así que asumí que me
iba. De lo contrario, habrían estado regodeándose y frotando mi
nariz en mi castigo inminente.
Cuando me llevaron a la clínica en la sala superior, lo supe.
Había estado aquí para recibir tratamiento en muchas
ocasiones cuando los guardias consideraron que mis heridas
eran demasiado peligrosas para dejarlas desatendidas. No por
preocupación por mi bienestar, obviamente, sino por temor a
que su empleador tome represalias por dañar su propiedad más
allá del punto de utilidad.
El médico entró sin decir una palabra, como de costumbre, y
Malcolm no tardó en seguirlo.
 —Qué delicia —dije secamente cuando Malcolm entró en la
habitación como un tigre enojado, sus ojos llenos de asesinato
mientras me miraba. —Supongo que todo sucedió como lo
predije.
—Tu novio llamó, es correcto —respondió. —Supongo que es
tu día de suerte. Pero si crees que estarás mejor delante de mis
narices que aquí, no eres ni la mitad de inteligente de lo que
crees.
—Y aquí estaba yo, deseando pasar un tiempo de calidad
juntos —me burlé.
Malcolm sopló una bocanada de aire por la nariz y se volvió
hacia el médico.
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—Usa la aguja más grande que tengas.
La mujer no dijo una palabra, pero me miró con recelo
mientras preparaba el microchip. No estaba seguro de si era 01/2023
simplemente un rastreador, o si poseía algún tipo de interruptor
de emergencia en caso de que me pasara de la raya, pero, de
cualquier manera, sabía que me iba a picar como una perra.
Malcolm se quedó a un lado, mirando con una sonrisa sádica
en su rostro mientras la aguja perforaba la parte de atrás de mi
cuello. Ciertamente era unos cuantos calibres más grandes de lo
que necesitaba ser. Gemí cuando empujaron el chip, pero su
sonrisa se desvaneció cuando el tenor se volvió más orgásmico
que dolorido.
—Ooh, esa fue buena —jadeé. —¿Qué tal otro? Sólo para
cubrir nuestras bases. Pueden rechazar, ya sabes.
—Ahora el collar —dijo Malcolm entre dientes.
 La médica se acercó a una caja negra plana sobre una bandeja
en el centro de la habitación que claramente había sido
preparada especialmente para la ocasión.
—¿Para mí? —Pregunté, volviéndome hacia Malcolm mientras
ella nos traía el sencillo collar plateado. —No deberías haberlo
hecho. ¿Qué va a pensar Val?
—Es un tipo diferente de collar —se burló, con los brazos
cruzados mientras me observaba. —Uno que bombeará una
dosis fatal de cloruro de potasio en tu yugular si presiono un
solo botón. Y nunca se sabe, James. Podría tener las palmas de
las manos sudorosas con toda esta mierda que está pasando.
—Fingiendo que realmente te preocupas por el pequeño —
70
dije con una sonrisa. —Eso es lindo.
Entrecerró los ojos, pero no dijo nada cuando la doctora se
acercó a mí, apropiadamente vacilante. Me puso el collar, y 01/2023
cuando se trabó en su lugar, sentí que un mecanismo dentro del
metal se movía.
—Ya está todo listo, señor —anunció la doctora, alejándose
de la mesa para poner una buena distancia entre nosotros.
Dama inteligente.
Malcolm asintió para que me levantara de la mesa. Lo seguí,
dispuesto a hacer el papel de cautivo obediente por el
momento. Una vez que salimos de la clínica, me cambió las
esposas por un par de brazaletes de metal que se envolvieron
desde mis muñecas hasta mis antebrazos.
—Solo un poco más de seguridad —dijo. —Pero eres lo
suficientemente inteligente como para saber que no es
necesario, ¿no? Y si intentas algo, será mejor que esperes por
Dios que alguien presione ese botón antes de que yo lo haga. A
mano.
—Anotado —dije con un bostezo.
Siguió caminando, y lo seguí hasta un ascensor más abajo en
el pasillo que conducía a un enorme garaje. Una vez que
llegamos a la camioneta negra desagradablemente anodina que
abrió con un llavero, no me sorprendió en absoluto cuando
Malcolm me empujó a la parte trasera del vehículo y tiró una
bolsa sobre mi cabeza.
Como si no supiera exactamente dónde vivían los hijos de
puta. Y en qué cajones guardaban sus calcetines, para el caso.
Se aseguró de que el camino fuera lo más accidentado
71
posible, porque por supuesto que lo hizo.
La bolsa no se me quitó de la cabeza hasta que me obligaron
a sentarme en una silla de cuero que olía a ambientador con 01/2023
aroma a madera.
—Me encanta lo que has hecho con el lugar —comenté,
mirando alrededor de la sala de estar de los DiFiore. —
Realmente emite vibraciones de imitación de El Padrino.
Luca estaba allí, junto con Silas, Malcolm y Enzo, pero
Valentine brillaba por su ausencia. No tenía dudas de que
Malcolm estaba protegiendo a su mascota de mí. Como si él no
hubiera sido simplemente un medio para un fin.
Lo cual fue divertido, porque me gustaba. Aunque sólo fuera
porque lo encontraba divertido.
—Me alegro de que te guste —dijo Enzo, con los brazos
cruzados mientras me miraba. Ahora ahí estaba el hombre que
más quería convertir en un traje de piel. Lo montaría en mi
maldita pared y haría que Silas lo mirara todo el día si pudiera
soportar una decoración tan vulgar. —Supongo que Malcolm te
contó por qué estás aquí.
—Lo hizo, de hecho —dije, mirando a Luca—. Supongo que
no te dejó hablar con tu hijo.
—No —dijo Luca, su voz tensa y sus ojos inyectados en sangre
como si hubiera estado llorando, no hubiera dormido en una
semana, o ambas cosas. Para su crédito, lo estaba manejando
mejor de lo que lo habría hecho la mayoría de las personas en
su posición. —Pero la próxima vez que llame, estarás aquí. Y vas
a hablar con él.
—Lo haré —acepté. —Pero eres ingenuo si crees que puedes
enviarme de regreso a la prisión después de eso. Esto es solo el
72
comienzo y necesitas mi ayuda.
—Eres una garantía —dijo Silas. —Nada más y nada menos.
Me burlé. 01/2023
—Por favor, Silas. Sé que puedes darte el lujo de ser perezoso
ahora que estás rodeado de personas cuya idea de actividad
intelectual es la noche de póquer, pero piensa dos veces en lo
que estás diciendo. Soy el único que sabe cómo funcionan los
Capello, y soy tu mejor, tu única, oportunidad de recuperar al
chico.
La mirada de Silas se oscureció, pero me di cuenta de que no
le estaba diciendo nada que él no supiera ya.
—Te quedarás aquí por el momento y cooperarás —dijo
finalmente—. Y creo que sabes muy bien cuáles serán las
consecuencias si no lo haces.
—No te pongas tan sensual, amor. Se pondrá celoso —dije,
señalando con la cabeza a Enzo.
Silas puso los ojos en blanco antes de volverse hacia Luca.
 —Lewis llamará a tu teléfono, así que creo que sería mejor si
James se quedara en tu habitación.
—¿Es realmente una buena idea? —Preguntó Enzo con
cautela.
Su inquietud era bastante comprensible. Luca era el que
detestaba involucrarse en el negocio familiar en cualquier
capacidad, y ahora Silas quería que tuviera una habitación con
un asesino.
—No podemos darnos el lujo de perder el tiempo una vez
que llame, amor —razonó Silas. —Tengo el teléfono
monitoreado, pero Luca necesita ser el que conteste, y querrá
hablar con James.
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—Está bien —dijo Luca con impaciencia. Cuando Enzo parecía
a punto de seguir discutiendo, agregó: —Dije que está bien.
—Niño valiente —ronroneé, ganándome una mirada de Silas y 01/2023
Enzo por igual.
—Ni una palabra más de ti —espetó Silas—. Si sabes lo que es
bueno para ti, estarás agradecido por cada segundo que no te
estés pudriendo en ese sótano y actuarás como si tuvieras algún
sentido de autopreservación.
—Tendré mi mejor comportamiento —le aseguré, sonriendo a
Luca. —De hecho, estoy deseando que llegue.
 9

LUCA

Descubrir que el jodido Demon iba a compartir mi habitación

74
en la casa principal era normal en un día que ya era lo más
horrible posible.
Y no creí que iba a tener un “buen comportamiento”. Ni por 01/2023
un solo segundo, no es que pensara que su idea de buen
comportamiento era algo en lo que tener grandes esperanzas
para empezar.
—Ahí es donde duermes —le dije, señalando la jaula de hierro
al otro lado de la habitación. Había sido idea de Malcolm, y
aunque estaba lejos de ser una solución ideal, era mejor que
tener un maldito asesino en serie con rienda suelta en mi
habitación mientras intentaba dormir. Solo logré unos minutos
aquí y allá, y necesitaba mantenerme alerta, porque lo último
que quería hacer era perder la próxima llamada telefónica que
hiciera ese psicópata.
—Kinky —se burló, escabulléndose por el borde de la cama
para sentarse en la esquina. —¿No confías en mí?
—No —respondí. —Yo no.
 —Lástima. Podríamos divertirnos mucho.
Abrí la puerta de la jaula y me hice a un lado deliberadamente.
—Entra.
Suspiró, levantándose para caminar hacia allí
—Tú realmente eres el aburrido.
Levanté el control remoto que Malcolm me había dado.
—Hay un botón aquí que iluminará tu trasero. Así que
piénsalo dos veces antes de tener alguna idea.
—¿Un shock? ¿Eso es todo? —Hizo un chasquido con la
lengua. —Malcolm tiene el que administrará una inyección letal.
No debe confiar contigo y los juguetes de los adultos.
Entrecerré los ojos. Estaba tratando de llegar a mí, y era más
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fácil hacerlo de lo que quería admitir, pero mis nervios ya
estaban desgastados, así que iba a darme un poco de holgura
en ese departamento. 01/2023
—Jaula. Ahora.
Puso los ojos en blanco, pero se arrodilló y entró, lo que
ciertamente parecía difícil con sus brazos atados con esos
brazaletes de metal gigantes. No estaba realmente seguro de lo
que podría hacer, incluso si salía de la jaula, pero su reputación
no me dejaba dispuesto a bajar la guardia. Algo me dijo que
terminaría siendo un error del que no viviría para arrepentirme.
Unas horas después de la noche, supe que James gemía
mientras dormía y soñaba con Silas. Tampoco sonaban como
sueños particularmente placenteros.
Por supuesto, no tenía forma de saber si eso era solo otro
acto o no, y era seguro asumir que todo estaba con él.
 Mi teléfono sonó en medio de la noche. Me di cuenta de que
debía haberme quedado dormido cuando salí de una pesadilla y
lo encontré en mi regazo.
Cuando vi que era el número de Carol, mi corazón se hundió y
se llenó de alivio.
—Carol —murmuré, frotándome la cara. Era bien pasada la
una de la mañana, así que me sorprendió que estuviera
llamando.
Al menos hasta que escuché cuán arrastrada era su voz.
—¿Lo han encontrado? —Ella preguntó.
Sentí que se me apretaba el estómago de inmediato.
—No —dije, ya que técnicamente era la verdad. —No lo han
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hecho, pero la policía está buscando. Nosotros también.
No importa cuán horribles hayan sido las cosas entre Carol y
yo, y sin importar si ella quería serlo o no, ella seguía siendo la 01/2023
madre de mi hijo y todavía me sentía como una mierda por
mentirle. Me sentía como una mierda por todo, pero no podía
decirle mucho sin arriesgarme a más complicaciones que
pudieran poner en peligro la operación.
Silas y Malcolm ya habían dejado claro que cuantos menos
detalles supiera, mejor, y contarle sobre la nota de rescate
desenredaría el hilo de los secretos que guardaban mis cuñados,
lo que también pondría una recompensa por su cabeza. Y no
sería solo de Lewis de quien tendría que preocuparme por
protegerla. Serían Silas y Malcolm también.
—No tiene sentido —dijo, con la voz tensa por el llanto. —
¿Cómo podría alguien simplemente llevárselo? Hay reglas. Se
suponía que él estaba a salvo. Se suponía que tú debías
mantenerlo a salvo, Luca.
 Sus palabras y el dolor en su voz se sintieron como un
puñetazo en el estómago.
—Lo sé —dije, mi voz llena de emoción que no podía
permitirme sentir en este momento. En el momento en que lo
hiciera, todo se iba a desmoronar.
Mi compostura. Yo. Todo.
—Lo siento, Carol. No sé qué más decir.
—Deberías —ella hirvió, su voz volviéndose venenosa en un
instante. —Esto es tu culpa. Dejaste que esto sucediera. Para
castigarme.
—¿Qué diablos se supone que significa eso? —Pregunté, mi
voz más fuerte de lo que pretendía. Lo último que quería era
77
tener una audiencia para esta conversación. Especialmente
James, pero la privacidad no era un lujo que pudiera permitirme
en este momento. —¿Crees que perdí a nuestro hijo porque 01/2023
estoy enojado contigo por irte?
—No lo sé —dijo ella, su voz se quebró mientras sonaba
menos segura. —Tal vez. Por irme, y por no ser la esposa y
madre que querías que fuera.
Se me hizo un nudo en la garganta y respiré hondo.
—Estás borracha, Carol. Intenta dormir un poco.
—¡Para! —Ella siseó. —Esa es la mierda que siempre dices.
Dios, suenas como un disco rayado. Siempre soy yo, ¿no es así?
Siempre salgo tarde, bebo demasiado, no le presto suficiente
atención a Timothy. Nada es lo suficientemente bueno para el
perfecto Luca DiFiore. Como si fueras un jodido santo.
—Nunca dije que era un santo —murmuré.
—No necesitabas decirlo. Está en tus ojos. Está en la forma en
que tú y todos los demás siempre han actuado, incluso mis
padres —espetó ella. —'Oh, él es un buen tipo. Ustedes son la
pareja perfecta'. Es jodidamente agotador tener que ser perfecta
todo el tiempo. Tener a todo el mundo pensando que eres feliz
cuando eres miserable. Intenté tanto amarte. Realmente lo hice,
pero no lo hago. ¿Y sabes qué? Nunca lo hice, pero todos los
demás te querían tanto que me convencí de que yo también lo
hacía.
Otro puñetazo en el estómago. Incluso si no era nada que no
sospechara ya. Nada que no hubiera oído susurrado en esa voz
suave y apacible en el fondo de mi mente todas esas noches
que yacía despierto junto a una mujer que actuaba como si
tocarme fuera una tarea para la segunda mitad de nuestro
78
matrimonio.
—Lo siento —dije una vez que confié en mí mismo para
hablar. —Lamento que estar casada conmigo haya sido tan 01/2023
difícil. Pensé que estaba siendo un buen esposo.
—Lo fuiste —dijo ella, su voz cruda por la emoción. Dolor.
Dolor que yo había causado, aparentemente, solo por existir. —
Pero no fue suficiente. Simplemente... no lo fue, y no podía
hacerlo más. Pensé que finalmente me había escapado, y que
podía ser libre, y luego esto...
Ella se apagó, pero su implicación era lo suficientemente clara.
—Lamento que la desaparición de nuestro hijo sea tan
inconveniente para ti —dije entre dientes. —Pero lo traeré de
vuelta. Lo traeré a casa y, mientras tanto, te sugiero que pienses
mucho sobre si realmente quieres ser parte de su vida. ¿Porque
la mierda de entrar y salir? Se merece algo mejor que eso. Se
merece algo mejor que cualquiera de nosotros.
—Vete al diablo, Luca.
 —Ve a dormir, Carol —murmuré, colgando.
Enterré mi cara en mis manos, tomando una respiración
profunda para calmarme. Cuando levanté la vista, James me
miraba en silencio desde el otro lado de la habitación, sin
ninguna expresión en su rostro.
—Eso fue duro —comentó.
—Lamento interrumpir tu sueño —le dije, alcanzando mi
mesita de noche por una botella de whisky escocés que no me
había permitido tocar en meses. Hasta el último par de días, al
menos. Me serví un vaso de chupito y me lo bebí, ya que esa era
la única manera de poder dormir más. No iba a tomar ninguna
pastilla y arriesgarme a no despertarme si el teléfono sonaba de
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nuevo.
—La señora suena como un verdadero placer —dijo. —Puedo
ver por qué las cosas funcionaron tan bien. 01/2023
—No lo hagas —dije en un tono de advertencia—. Ni una
palabra sobre ella. Ni de ti.
—Qué caballeroso —se burló. —Sin embargo, estoy
empezando a ver lo que quiere decir. La rutina del caballero
blanco envejecería después de un tiempo.
Me giré para mirar hacia la puerta, planeando ignorarlo por el
resto de la noche.
—Sabes —dijo después de que había pasado el tiempo
suficiente. Supuse que había renunciado a joderme y se había
vuelto a dormir—. Puedes cumplir la promesa que le hiciste. Si
haces lo que te digo, recuperarás a tu hijo.
—Tú no eres el que toma las decisiones aquí —dije
intencionadamente. —Pero incluso si lo fueras, ¿por qué diablos
debería creer que querrías ayudarme a hacer algo? ¿Por qué
debería creer que te preocupas por algo más que por ti mismo?
—No deberías —respondió. —Pero también detesto los cabos
sueltos, y Lewis Capello es sin duda uno de ellos. Eso, y no
dañaría la opinión que Silas tiene de mí.
Resoplé. Dada su obsesión con Silas, eso se verificó.
Aunque tenía razón. Si hubiera pretendido ayudar por razones
desinteresadas, no le habría creído en absoluto, pero eso tenía
un poco más de sentido. Y si había algo en lo que había
aprendido a confiar acerca de un psicópata, era que haría
cualquier cosa para promover su propio interés.
El amor no era la excepción.
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01/2023
 10

JAMES

Apenas había estado en la mansión por un día, y ya había

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logrado convencer a Silas de que lo mejor para él era darme una
computadora portátil para trabajar. Estaba fuertemente
monitoreado, por supuesto, pero eso no importaba. 01/2023
La estaba usando para el propósito declarado, al menos en
este punto. Estuve fuera por tanto tiempo que todos los
sistemas que tenía para vigilar a Lewis, y a los otros que me
perseguirían implacablemente, se erosionaron. Si teníamos la
oportunidad de rastrearlo, necesitaba información, incluso si eso
significaba que Silas ahora tenía acceso a al menos algunas de
mis redes anteriores.
Si jugara bien mis cartas, estaríamos trabajando juntos y no
uno contra el otro de todos modos. La forma en que debería
haber sido desde el principio. La forma en que estaba destinado
a ser.
Simplemente no lo veía todavía.
Traté de forzar su mano, y fue un fracaso espectacular. Estaba
loco, pero no tanto. No iba a seguir intentando las mismas
tácticas fallidas una y otra vez hasta que inevitablemente me
matara. Era hora de un nuevo enfoque.
Mientras estaba sentado en la mesa de la cocina, pendiente
de todo lo relacionado con Capello durante el último año y
medio, había dos guardias armados apostados en cada entrada.
Uno de ellos era Johnny DiFiore, el primo de Enzo y una espina
constante en mi costado, mientras que el otro era claramente
uno de los matones de Silas. Reconocería el aspecto de recién
salido de Quántico en cualquier lugar.
Al menos no trataron de hacer una pequeña charla. No
después de las últimas veces que había derribado los intentos
de Johnny de meterse debajo de mi piel. Silas y Malcolm
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podrían haber encontrado divertidos a los mafiosos de bajo
nivel, pero nunca había sido un fanático del entretenimiento
barato. 01/2023
Sin embargo, me sorprendió gratamente cuando el hermano
menor de DiFiore entró bailando a la habitación a la mitad del
día.
—Valentine —dije en el tono más agradable que pude reunir.
—¿Te soltaste la correa?
Él frunció el ceño.
—Chuck rompió algo y vine a ver cómo estaba.
—Me sorprende que el ogro te deje salir de la casa —
comenté—. Claramente, fue negligente de su parte. Y mucho
menos aquí.
—Es mi casa —dijo intencionadamente, cruzándose de brazos.
—Así es. —Señalé la silla vacía a mi lado. Se sentó en el otro
extremo de la mesa.
Precioso.
 —Pensé que estabas en una jaula —dijo, mirando la
computadora portátil.
—Sólo en la noche. Tu hermano es así de pervertido —dije
secamente.
Hizo una mueca. Me di cuenta de que había algo en su mente.
Era tan transparente como una medusa, y el hecho de que
estuviera aquí, probablemente sin el conocimiento de Malcolm,
era prueba de que estaba lo suficientemente molesto por lo que
fuera como para superar sus miedos completamente racionales.
—Este tipo —murmuró—. ¿De verdad crees que no le hará
daño a Timothy?
—Por supuesto que lo haría —respondí—. Pero no lo ha
83
hecho. Aún no.
—¿Qué te hace estar seguro?
—Como dije, Lewis es metódico. La mayoría de los hombres 01/2023
de su calaña lo son —respondí—. Todo esto se desarrollará de
cierta manera, y mientras tu esposo no se interponga en mi
camino o en el de Silas, todo saldrá bien al final.
—Espero que lo digas en serio —dijo, sosteniendo mi mirada.
Me incliné, cerrando la computadora portátil.
—No has venido aquí solo por Chuck, ¿verdad?
Valentine tragó audiblemente, apartando la mirada por un
segundo. Estaba más nervioso a mi alrededor de lo habitual,
pero no tanto como probablemente debería haber estado. La
ingenuidad siempre había sido su punto débil.
Eso y un pobre gancho de derecha, pero ¿quién tuvo el
corazón para decírselo?
 —Te conocí durante mucho tiempo como Chris —comenzó
sombríamente. —Y todavía estoy tratando de aceptar todo lo
que pasó. Todo lo que hiciste.
—Bastante comprensible —reflexioné. Era un DiFiore, y
además frágil. A la mayoría de la gente le costaría mucho
superar el hecho de ser secuestrado y traicionado por alguien
en quien pensaban que podían confiar, y mucho menos
Valentine, que probablemente lloraba cada vez que pisaba una
puta hormiga.
—¿Cuánto de eso era real? —Preguntó, con una mirada
preocupada en su rostro. Realmente era como un cachorro
grande. Me di cuenta por el temblor en su voz que había estado
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reuniendo valor para hacer esa pregunta durante mucho
tiempo, y ahora, finalmente tenía su oportunidad.
Hice una pausa para considerar mi respuesta. Por alguna 01/2023
razón, en realidad quería decirle la verdad, aunque dudaba que
fuera a creerlo.
—Todo menos el nombre.
Frunció el ceño.
—¿En serio?
—Puedes creerlo o no —dije encogiéndome de hombros. —
Pero es la verdad. Me gustabas. Nada de eso fue personal.
—Me secuestraste —dijo deliberadamente—. E ibas a matar a
mi hermano. Yo diría que eso es bastante malditamente
personal.
—No para mí —dije—. Y tampoco para él.
Valentine frunció el ceño.
—¿Malcolm? Por supuesto que es personal para él. Mataste a
su maldito marido.
 —Estás muy por encima de tu cabeza, chico —le dije con una
risa baja. —Si no crees nada más de lo que te he dicho, créelo.
¿Crees que puedes cambiarlo? ¿Crees que amarte lo hará un
mejor hombre? Todo lo que va a hacer es darle una razón para
atrincherarse aún más en la forma en que siempre ha sido. La
forma en que elige ser. Y ahora, tiene algo que proteger. Tiene
una excusa.
Valentine negó con la cabeza.
—No vine aquí para recibir una conferencia sobre mi relación.
—No, me imagino que Silas, Luca y Enzo te han dado
suficiente de eso —dije secamente. —Y eres demasiado tonto
para escuchar, así que ciertamente no seré yo quien te haga
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cambiar de opinión. Pero no digas que no lo intenté.
Él frunció el ceño.
—Tal vez soy tonto e ingenuo, pero voy a pedir algo de todos 01/2023
modos.
—Pide —dije.
—Ayúdanos —suplicó, dándome toda la fuerza de los ojos de
cachorro una vez más. Dios, tal vez Malcolm realmente se estaba
ablandando. El niño era implacablemente patético—. Sé que nos
odias, y tienes todo el derecho a odiar a Silas después de lo que
te hizo. No digo que fueras inocente. Él tampoco. Demonios,
ninguno de nosotros lo es —murmuró—. Pero Timothy lo es. Es
un niño y tiene miedo, y sé que sabes cómo es eso. Puedes
fingir que solo perseguiste a hombres como Efisio porque era
conveniente, pero ambos sabemos que la verdad es más
profunda que eso.
—Lo estás haciendo de nuevo, Valentine —dije entonando
una canción.
 Él me dio una mirada confusa una vez más.
—¿Haciendo qué?
—Viendo lo que quieres ver —respondí. —Romantizar a un
monstruo.
Él suspiró.
—Suenas como Malcolm. Piensa que ver siempre lo peor de
las personas significa que es realista con respecto a ellos.
—A riesgo de estar de acuerdo con él, por lo general lo hace
—le dije.
—Quizás. Pero no siempre —insistió. —He estado en este
mundo el tiempo suficiente para saber que incluso las personas
en las que confías, las personas que crees que nunca te harían
86
daño, son capaces de hacer cosas terribles. Quiero decir, mira a
mi papá. Mírate —dijo con tristeza—. Pero lo contrario también
tiene que ser cierto. A veces, las personas que han hecho cosas 01/2023
terribles también son capaces de hacer el bien. Capaz de
sorprenderte. No sé si eres uno de ellos, y tal vez todo lo que
alguna vez me dijiste realmente era una mentira, pero elijo creer
que no lo fue. Elijo creer que eres más que un monstruo y que
eres capaz de hacer más cosas que las terribles que has hecho. Y
te estoy pidiendo que lo traigas a casa. Por favor.
Me encontré mirándolo fijamente por unos momentos,
dividido entre la respuesta desdeñosa en la punta de mi lengua
y la cosa dentro de mí que su sincera estupidez había
despertado.
Antes de que tuviera la oportunidad de decidirme, Malcolm
entró en la habitación con paso majestuoso, como un toro
mirando por debajo de una capa roja.
 —¿Qué diablos haces hablando con él? —Gruñó, poniéndose
inmediatamente entre su cachorro y yo.
—Mal, detente —suplicó Valentine. —Solo estábamos
hablando.
—¿Y qué diablos es esto? —Exigió Malcolm, ignorando sus
protestas mientras miraba la computadora portátil frente a mí.
—¿Estás de jodidas vacaciones ahora o algo así?
—Silas lo autorizó —dije, solo para ver el destello de ira en sus
ojos.
—Por supuesto que lo hizo —murmuró Malcolm.
—Quieres recuperar al niño, ¿verdad? —Pregunté—. No
puedo ayudarte a encontrarlo si no me pongo al día con los
87
acontecimientos actuales. Todo ese tiempo en cautiverio casi ha
paralizado mi red de información.
—¿Casi? —Malcolm repitió con desdén, agarrando la parte 01/2023
delantera de mi camisa y tirando de mí para ponerme de pie.
Ups.
Luca entró en la cocina, frunciendo el ceño mientras
contemplaba la escena que tenía delante.
—Oye —gritó, acercándose para ponerse entre nosotros. —
Cuidado. Lo necesito vivo.
—Mi héroe —dije rotundamente.
Luca me lanzó una mirada silenciadora por encima del
hombro.
—Vuelve a la habitación. Ahora. Necesitamos hablar.
—Tan dominante —me burlé, recogiendo la computadora
portátil antes de pasar junto a él, disfrutando completamente de
la ira en los ojos de Malcolm mientras me seguían por la
habitación. Me detuve en la puerta para darle a Valentine una
sonrisa.
—Terminaremos esta conversación en otro momento. Visita
de nuevo. Siempre me han encantado nuestras pequeñas
charlas.
Valentine no respondió, pero me di cuenta por la expresión de
su rostro que no iba a renunciar a su súplica en el corto plazo.
Era lo suficientemente tonto como para pensar que en realidad
podría funcionar.
El problema era que yo mismo no estaba seguro.

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01/2023
 11

LUCA

—¿De qué querías hablar? —Preguntó James en un tono que

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dejaba claro que sabía muy bien por qué quería hablar con él
exactamente.
Tan pronto como estuvimos solos dentro de la habitación, 01/2023
cerré la puerta y me giré para mirarlo.
—Él todavía no ha llamado —murmuré—. Dijiste que iba a
llamar anoche.
—Dije que podría —corrigió en un tono exasperantemente
casual. —Sé paciente.
Lo agarré por la parte delantera de la camisa y lo empujé
contra la pared hasta que estuvimos cara a cara, mi brazo
sujetando su cuerpo.
—¿Paciente? —Herví. —Él tiene a mi hijo, ¿y me estás
diciendo que sea paciente? Tú y este bastardo podrían estar
trabajando juntos, por lo que sé, riéndose de nosotros todo el
tiempo.
 —Podría —estuvo de acuerdo con calma—. Pero no importa,
¿verdad? No puedes hacerme nada de ninguna manera, porque
nunca volverás a ver a tu hijo si lo haces.
La ira se apoderó de mí y me di cuenta de que había
levantado mi otro puño hacia atrás, listo para atacar.
—Adelante —se burló. Había un brillo en sus ojos, como si lo
estuviera anticipando. Como si realmente estuviera disfrutando
esto. —Pégame.
Nunca había querido hacer nada más en mi jodida vida, pero
no así. Retrocedí, aunque mi resolución solo duró hasta que ya
no estaba inmovilizado. Hasta que pude justificarlo. No estaba
golpeando a un objetivo indefenso.
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Di un golpe y James lo esquivó con bastante facilidad. Me
agarró del brazo la siguiente vez y me empujó hacia atrás con
tanta fuerza que tropecé. Luego dio un paso adelante y golpeó 01/2023
su puño en mi estómago lo suficientemente fuerte como para
dejarme sin aliento. Caí de rodillas, gimiendo cuando el dolor
irradió por todo mi cuerpo.
—Te metiste en esa —dijo en un tono aburrido.
Me levanté y lo empujé tan fuerte como pude contra la pared
otra vez, pero él corrió hacia adelante y me derribó, usando mi
propio impulso en mi contra.
Ambos chocamos contra la mesa auxiliar, la madera se astilló
cuando aterricé encima de él y envolví mis manos alrededor de
su cuello.
Sus ojos brillaban con algo parecido a la alegría mientras
arañaba mis muñecas lo suficientemente fuerte como para
hacerme sangrar. Era jodidamente fuerte. Mucho más fuerte de
lo que parecía, a pesar de que no estaba tan huesudo como
había estado después de ser liberado de la prisión. Todavía era
capaz de hacer hazañas de las que alguien mucho más ligero
que yo no debería haber sido capaz, y cuando rodó para estar
encima de mí, me di cuenta de que había bajado la guardia.
Agarré el control remoto, mi dedo se cernía sobre el botón de
descarga. James se congeló, mirándome con su cabello rozando
la parte superior de mis hombros. Estaba a punto de apretar el
botón cuando hizo lo único que podría haberme detenido.
Él me besó.
Todo lo que pude hacer por unos momentos fue quedarme
allí en estado de shock, con los ojos muy abiertos y sin
pestañear mientras él aplastaba sus labios contra los míos.
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Y en lugar de empujarlo, o presionar el botón, o cualquier otra
cosa que hubiera tenido infinitamente más sentido, le devolví el
beso. 01/2023
No tenía ni idea de qué mierda estaba haciendo, pero la
agresión que nuestra pelea había avivado hasta convertirse en
una llama rugiente había encontrado otra salida, y la reclamé
tan feroz y violentamente como había estado dispuesto a luchar
contra él.
No es que James me diera muchas oportunidades de pensar o
responder racionalmente. Tan pronto como comencé a
responder de la misma manera, su lengua chasqueó contra mis
labios, buscando entrada. La mía se separó instintivamente y su
lengua barrió, sedosa y resbaladiza mientras viajaba sobre la
mía.
El beso me tomó con la guardia baja y el control remoto se
me escapó de las manos, y sentí una oleada de pánico cuando
lo tomó. Simplemente lo empujó por el suelo, como si una
presión equivocada no pudiera inmovilizarlo.
Había pasado tanto tiempo desde que había tocado a alguien
así, y me sorprendió lo mucho que lo anhelaba. Aunque fuera de
otro chico.
¿Qué diablos estaba mal conmigo?
Algo me dijo que la respuesta a esa pregunta no cabría en un
libro de mil páginas, pero estaba demasiado reprimido con la
energía caótica que ardía debajo de mi piel y exigía la liberación
como para preocuparme en este momento.
James estaba sentado a horcajadas sobre mis caderas y
rompió el beso para inclinarse hacia atrás, frotando su trasero
92
contra mi polla. El traidor se puso rígido, pero al menos podía
decirme a mí mismo que era solo la sensación física y el hecho
de que no había follado con nadie en la mayor parte del año. 01/2023
Gemí involuntariamente, mis caderas se arquearon hacia él
cuando comenzó a rasgar mi camisa, sus uñas se arrastraron a lo
largo de mi carne desnuda lo suficientemente fuerte como para
hacerme sangrar.
—¿Qué estás…?
—Shh—. Presionó un dedo en mis labios. Como si hubiera
alguna duda de que era un completo maldito espeluznante.
Entonces, ¿en qué me convertía si estaba excitado en este
momento?
Agarré su muñeca y aparté su mano, tratando de recuperar
algo de control. Incluso si él era el que llevaba un collar.
—¿Estás loco o algo así?
 —¿Eso no fue muy obvio? —Desafió, apartando mis manos y
quitándose la camisa por la cabeza. —Realmente no has estado
prestando atención.
Rodé los ojos, tratando de no estudiar su torso desnudo. Era
una segunda naturaleza mirar a alguien desnudándose,
especialmente cuando ese alguien se acercaba agresivamente a
mí, pero nunca había mirado a otro chico de esa manera.
Seguro como el infierno que no a él.
Entonces, ¿por qué estaba yo...?
—No pienses tanto —me regañó, bajándose de mí lo
suficiente como para quitarse los vaqueros—. Lo arruinarás
todo.
93
—Dices que esto es algo que quería en primer lugar —
murmuré. —Soy heterosexual. Y en caso de que no te hayas
dado cuenta, te odio. 01/2023
—Eso lo hace aún más divertido —respondió. —¿Qué sentido
tiene el sexo sin un poco de odio? Es como un cóctel sin alcohol.
—Jugo —dije rotundamente. —Simplemente llaman a eso
jugo.
Puso los ojos en blanco y comenzó a desabrocharme el
cinturón.
—No puedes matarme. Y como creo haber probado, ni
siquiera puedes pelear conmigo sin tener que recurrir a medios
que son contraproducentes para ti. Pero puedes joderme los
sesos, y realmente, ¿no es eso lo mejor que puedes hacer?
A su manera increíblemente jodida, tenía razón. Y tal vez eso
era prueba de que realmente estaba perdiendo la cabeza, si el
lunático homicida comenzaba a tener sentido para mí.
 —A la mierda —murmuré por lo bajo, apartando sus manos
para terminar el trabajo de liberar mi propia polla. Lo empujé y
ajusté nuestras posiciones para que yo fuera el que estaba
encima de él. —Si estamos haciendo esto, estoy en la cima.
—No tengo quejas, guapo —ronroneó James, recostándose y
abriendo las piernas lo suficiente para permitirme entre ellas. —
¿Tienes lubricante, o lo estamos haciendo de una manera
divertida?
Le di una mirada cautelosa, buscando en la mesita de noche
un condón.
—En algún lugar entremedio. Sin ofender, pero no te estoy
follando en carne viva.
94
—Ninguna ofensa —dijo, mirando con aburrimiento mientras
abría el condón y lo deslizaba sobre mi pene. —Magnum XL.
Supongo que estuviste acumulando calor todo este tiempo. 01/2023
—¿Alguna vez te callas? —Murmuré, cuestionando mi
decisión de follarlo cara a cara ya que se sentía demasiado
íntimo.
Y fue un poco más difícil pretender que no estaba follando a
un tipo de esa manera, a pesar de que mi polla en el mástil
completo claramente no estaba teniendo ningún problema con
eso.
—¿Lo preferirías así? —Preguntó a sabiendas, rodando sobre
su estómago con su trasero desnudo para mí y sus rodillas
separadas, su rígida polla se balanceaba entre ellas.
Me congelé, incapaz de quitarle los ojos de encima. Nunca
había experimentado tantas emociones conflictivas en mi jodida
vida. Mi polla palpitaba dolorosamente mientras miraba su culo
redondo y apretado y los muslos musculosos que estaban
separados tan tentadoramente. Su fuerte espalda se arqueó
cuando llegué detrás de él, colocándome entre sus mejillas y
enterré mi polla en él con un movimiento rápido.
Realmente no sentía que la dulzura fuera algo que mereciera
o fuera a tolerar, y para su crédito, lo tomó. Sus dedos se
clavaron en la alfombra y su columna vertebral se arqueó de
nuevo mientras su cuerpo se apretaba alrededor de mi polla,
apretándola con fuerza desde la base hasta la punta.
—Joder —gruñí. Estaba apretado. No estaba seguro de lo que
esperaba, pero... maldición, eso medio que dolía.
—¿Qué pasa? —Se burló, su voz ligeramente tensa y ronca
por el dolor, supuse. —¿No me digas que la animadora nunca te
95
dejó follarla por el culo?
—No la metas en esto —dije entre dientes, agarrando un
puñado de su cabello para prepararme. Solo porque estaba 01/2023
divorciado y no había estado casado en ningún sentido genuino
de la palabra durante un buen tiempo, no significaba que fuera
fácil superar los obstáculos mentales. No solo de estar con otro
chico, sino de estar con cualquiera que no sea mi esposa.
Algo me dijo que, si James tenía alguna idea de lo que estaba
pasando por mi cabeza, nunca escucharía el final. Y ciertamente
tenía forraje más que suficiente para atormentarme como
estaba.
Se le escapó un gemido de placer que era mucho más
atractivo de lo que tenía derecho a ser. Se trataba de encontrar
una salida para mi ira y quemar algo de tensión. Nada más y
nada menos, y, sin embargo, mientras me dirigía hacia él, y él
parecía absorber cada gramo de agresión y dolor como si lo
necesitara para sobrevivir, no pude evitar sentirme atraído.
 Esto fue un error. Indudablemente. Y estaba seguro de que
este era solo otro juego que él había calculado perfectamente y
me había atraído desde el principio, pero saber eso no
cambiaba el hecho de que quería jugar.
—Eres grande —dijo, su voz ronca por el deseo. —Siempre
son los callados, ¿no?
Gruñí, empujando más profundo dentro de él.
—Realmente no necesitamos hablar para esto.
—Pero las bromas son mi turno —se burló. —Y eres lindo
cuando estás enojado.
Me estrellé contra él en un ángulo diferente, y cuando
escuché su grito estrangulado de placer y sorpresa, supe que
96
había logrado golpear su próstata. Esa era una forma de hacerlo
callar, si nada más.
Encontré mi mano presionada contra su estómago para 01/2023
mantenerlo donde quería, mis dedos rozando las líneas
esculpidas de sus abdominales. Mientras empujaba en él desde
atrás, podía sentir sus músculos flexionarse bajo mi toque, y
tuve la tentación de explorar más.
Su trasero era firme y apretado, y su cuerpo era delgado y
musculoso, pero no demasiado. Mi mano se deslizó hacia abajo
de forma natural, aunque no había ninguna razón para que esto
fuera algo más que un polvo rápido, y mis dedos recorrieron el
mechón de pelo corto y sorprendentemente suave en la base de
su pene. Ni siquiera había pensado en tocar a otro hombre así, y
él ni siquiera me lo había pedido, pero agarré su polla de todos
modos, acariciándola mientras empujaba más fuerte.
Me dije que era solo para sentirme menos culpable por el
hecho de que lo estaba follando tan agresivamente, aunque
claramente él tampoco tenía ningún problema con eso. Sin
embargo, cuando gimió, no pude justificar la forma en que mi
pene latía en respuesta a ese sonido. No había nada utilitario en
esa reacción.
Fue puramente instintivo, y me odié por ello.
Rastrillarme sobre las brasas por disfrutar esto no iba a
cambiar el hecho de que lo estaba haciendo, así que, por el
momento, elegí dejar de lado mi culpa y concentrarme en la
tarea que tenía entre manos.
Mis bolas golpeaban contra su trasero con cada embestida y,
de vez en cuando, se apretaba contra mí, empujándome hasta el
punto en que no estaba seguro de cuánto más podría
97
contenerme. Yo era el que estaba dentro de él, pero él tenía el
control y quería que yo lo supiera.
—¿Te gusta eso? —Ronroneó, su voz baja y ronca. 01/2023
—Sí —dije entre dientes, penetrando en él más rápido.
Se rio suavemente, y envió escalofríos por mi espalda.
—Sabes, para ser un hombre heterosexual, no eres tan malo.
Definitivamente, mucha materia prima con la que trabajar.
—¿Podrías simplemente callarte? —Murmuré, encontrándome
envuelto sobre él en un intento de acercarlo aún más, como si
no estuviera envainado hasta las bolas en su apretado culo. Mis
labios rozaron la parte posterior de su cuello, mi aliento agitó su
cabello, y no pude resistir la extraña necesidad de dejar que mis
dientes rasparan su piel.
Para mi sorpresa, eso provocó una reacción en cadena. Su
polla se retorció en mi agarre, latiendo con vida y excitación
mientras lo provocaba. El repentino estallido de lujuria fue
inesperado, pero bienvenido, y solo alimentó el fuego de mi
propio deseo.
Empecé a acariciarlo con más fuerza y mordí la carne que mis
dientes solo habían rozado, y se corrió con un grito ahogado.
—Joder —maldijo, arqueando la espalda y empujándose
contra mí. —Joder, Luca. Me estás matando.
Me reí y me incliné para besar un lado de su cuello. Era mucho
más íntimo de lo que había planeado, pero se sentía bien. Y mal.
Y caliente.
Mi propia liberación era inminente y me sorprendió lo mucho
que la deseaba. El hecho de que no solo pudiera excitar a otro
chico sino correrme dentro de él era un testimonio de lo mucho
98
que necesitaba esto.
Pero joder, lo hice. Y cuando me corrí dentro de él, su cuerpo
aun apretándose contra el mío mientras cabalgaba sobre los 01/2023
efectos de su orgasmo, ni siquiera podía decirme a mí mismo
que iba a ser la última vez.
No si se sentía tan jodidamente bien.
 12

JAMES

Me desperté con dolor en lugares que había olvidado que

99
existían, pero sintiéndome completamente renovado. Gemí en
una dichosa agonía mientras rodaba hacia una cama vacía.
Luca se había ido, por supuesto. 01/2023
Me levanté de la cama y bostecé, cojeando mi camino hacia la
ducha. El agua caliente era a la vez placentera y agonizante en
mis músculos maltratados y carne desgarrada.
Tenía marcas de sus uñas por todo el cuerpo, y mientras
limpiaba los últimos rastros de sangre de mis piernas y mejillas,
también sentí el escozor del agua dentro de mí, trayendo
recuerdos de la noche anterior.
Tenía que admitir que había más en Luca de lo que pensaba.
Era brutal en la cama, que siempre había sido mi definición de
un buen amante. Lo que le faltaba en habilidad por no haber
estado nunca antes con un hombre definitivamente podría
compensarse en la práctica.
 Ahora que tenía razones para creer que estaba abierto a más
experiencias fuera de su zona de confort, tal vez este no fuera
un mandato tan aburrido, después de todo.
Una vez que me hube limpiado lo suficiente, me vestí y bajé
las escaleras. Cuando vi que Enzo estaba solo en la cocina, sentí
que había encontrado oro.
Realmente era mi día de suerte.
—Oh. Tú —dijo, levantando la vista de la cantidad impía de
huevos y tocino que estaba friendo en la misma sartén, como
una especie de ñu con pulgares. Entrecerró los ojos. —Te ves
crudo. ¿Y estás cojeando? Val dijo que Luca impidió que
Malcolm te golpeara.
100
—Lo hizo —dije, acercándome a la cafetera para servirme una
taza de jugo de granos quemados que sabía cómo el trasero de
una nuez. Sin embargo, era cafeína, y para una familia que había 01/2023
hecho su fortuna con el comercio ilícito, había una notable
escasez de cocaína en la casa de los DiFiore.
—¿Hambriento? —Ofreció Enzo.
Entrecerré los ojos.
—Preferiría morir. Gracias.
—Estás bien bebiendo mi café —dijo intencionadamente,
apagando la estufa.
—¿Llamas a esto café?
—Más para mí, entonces —dijo encogiéndose de hombros.
Silas entró en la habitación mientras Enzo todavía estaba
sacando los platos y apenas me miró antes de caminar hacia el
otro hombre.
—Buenos días, amor.
 Observé mientras tomaba a Enzo en sus brazos y lo besaba sin
aliento. La repugnancia se mezcló con un profundo dolor que
me oprimía el estómago cuando lo vi abrazar a otro hombre de
la forma en que una vez me había abrazado a mí, pero, aunque
sabía que el beso era, al menos en parte, para marcar su
territorio, había más pasión detrás de él de la que alguna vez me
había mostrado.
Apreté los dientes, tratando de contener mi rabia. Cuando los
ojos de Silas se encontraron con los míos, llenos de desafío, lo
oculté y me di la vuelta.
—¿Por qué diablos fue eso? —Preguntó Enzo sin aliento, con
las manos apoyadas en el pecho de Silas como si no confiara en
101
sí mismo para ponerse de pie.
—¿Necesito una razón para besar a mi esposo? —Silas replicó.
Había visto suficiente. Di media vuelta y salí de la habitación, 01/2023
porque si no lo hacía, me iba a romper. Apenas había recorrido
el pasillo cuando perdí lo que me quedaba de fuerza de
voluntad y atravesé con el puño la pared justo debajo de las
fotos familiares, enviando una de ellas al suelo.
Mi adrenalina todavía estaba bombeando, mi puño incrustado
en el yeso, cuando me di cuenta de que mi collar no se había
disparado en respuesta al estallido y mi cabeza todavía estaba
conectada a mis hombros.
Es bueno saber que, si me estaban observando desde las
cámaras seguro que estaban escondidas por todas partes,
perder los estribos no era un error fatal.
 13

LUCA

Había estado fuera la mayor parte del día porque realmente

102
no quería estar cerca de James después de… lo que fuera que
había sido la noche anterior. Pero tampoco quería estar lejos, y
me fui a casa unas horas antes de la puesta del sol por si Lewis 01/2023
decidía llamar antes.
Al final, mi evasión resultó ser en vano porque mientras James
estaba sentado en el escritorio de mi habitación trabajando
cuando regresé, ni siquiera había levantado la vista de su
computadora portátil en las últimas dos horas.
Había estado extrañamente melancólico desde que regresé, y
aunque iba en contra de mi buen juicio preguntar por qué, no
pude evitar preguntarme si era por lo que había sucedido
anoche.
A pesar de que él había estado más que entusiasmado
mientras sucedía, yo había sido más duro que nunca con nadie.
Claro, parecía desear eso, y absorbió el dolor como una maldita
esponja, pero ¿y si hubiera ido demasiado lejos y lo lastimara de
una manera que no le gustaba durante el caos?
 El pensamiento fue suficiente para hacerme sentir mal, incluso
si un rebobinado mental de la noche anterior no me dio
ninguna respuesta. No, a menos que hubiera malinterpretado
seriamente las cosas.
—¿Estás bien? —Pregunté, sabiendo muy bien que
probablemente tendría muchas razones para arrepentirme.
—¿Por qué no lo estaría? —Preguntó sin levantar la vista,
desplazándose por lo que parecía una hoja de cálculo en su
computadora portátil.
Sí, definitivamente algo andaba mal. Y por lo que sabía, esta
era otra parte de su manipulación, pero era un riesgo que
estaba dispuesto a correr porque la alternativa era peor.
103
—Algo anda mal —respondí, sabiendo que tenía que elegir
mis palabras con cuidado. —Mira, si esto es por lo que pasó
anoche… Si hice algo mal… 01/2023
Finalmente levantó la vista, frunciendo el ceño confundido.
—¿Qué?
El tono agudo de su voz me hizo dudar de mi suposición
inicial de qué se trataba.
—Oh. Solo pensé que tal vez estabas teniendo dudas al
respecto —respondí. —¿O tal vez fui demasiado rudo?
Su expresión se quedó en blanco, y aunque el cambio en su
mirada fue sutil, me dejó sintiéndome como un idiota
infrahumano. Como una rata despreciada por un dios.
—Follamos —dijo rotundamente. —No es tan profundo.
—Bien —dije, pasando una mano por mi cabello. —Está bien,
así que, si no soy yo, ¿qué es? Está bastante claro que algo te
afectó.
 La irritación brilló en sus ojos, pero volvió a su pantalla. Sin
embargo, me di cuenta por la forma en que estaba moviendo la
mandíbula que estaba lejos de concentrarse en lo que demonios
estaba haciendo.
—Nada está mal. Silas solo está encontrando formas nuevas y
creativas de castigarme.
—Oh —dije, no más cerca de entender lo que estaba mal que
antes. Pero si involucraba a Silas, probablemente era lo mejor.
—¿Quieres hablar de ello?
—No —dijo en un tono cortante. —No quiero hablar de ello. Y
ciertamente no contigo.
—Jesús —murmuré. —Bien. Era solo una oferta.
104
—Preocúpate de ti mismo —añadió en un tono de puro
desprecio. Otro lado más de James. Podría jurar que el tipo tenía
más de una personalidad, y ninguna de ellas era agradable. 01/2023
No, a menos que cuentes el espeluznante simplista y
superficialmente encantador con el que me encontré la primera
vez en la prisión, pero tomaría al malhumorado y despectivo
James por encima de eso cualquier día. Al menos no sentí que
me iba a cortar la cara ni nada.
—Estoy bien, gracias —dije, sacando mi computadora portátil
mientras me sentaba contra la cabecera y decidí que también
podría trabajar un poco más, ya que claramente no íbamos a
ningún lado con esta conversación.
—¿Lo estás? —Desafió, su tono sospechosamente agradable.
—Porque esto es correcto cuando me imagino que la culpa se
está instalando.
No muerdas, me reprendió la voz de la razón dentro de mi
cabeza.
 Por supuesto, no escuché.
—¿Culpa? ¿Culpa por qué?
—¿Culpa por dejar que tu hijo sea robado justo debajo de tus
narices? —Él ofreció. —¿Culpa por dejar que tu propio
matrimonio se derrumbara y se quemara? ¿Culpa por sentirte
aliviado en el fondo porque en realidad no quieres ser padre?
Mi respuesta inicial fue arremeter, especialmente después de
la última, pero extrañamente, tener un botón en mi bolsillo que
iba directo a su cuello hizo que fuera más fácil controlar mi
temperamento en lo que a él se refería. Y sabía que él estaba
tratando de meterse debajo de mi piel, así que eso sería darle lo
que quería de todos modos.
105
—Tienes razón. Me siento culpable —dije. —Mi matrimonio
era una mierda, y tuve que aceptar el hecho de que tenía un
papel importante que jugar en eso. Y sí, por supuesto que me 01/2023
siento culpable por el hecho de que no pude proteger a mi hijo.
¿Pero no querer ser padre? Eso es una mierda. El hecho de que
haya días difíciles no significa que no ame a mi hijo.
—Lo que sea que necesites decirte a ti mismo —resopló.
Eso fue todo. Dejé mi computadora portátil a un lado y me
puse de pie, caminando hacia el escritorio.
—¿Cuál diablos es tu problema? —Exigí.
—No tengo ningún problema —dijo, mirándome con
aburrimiento mientras se apoyaba en el respaldo de su silla. —
Simplemente no veo el punto de mentirte a ti mismo. Pero eso
parece ser un hábito con tu familia. Por ejemplo, Enzo piensa
que un bloque de hielo en forma humana es capaz de amar, y
Valentine piensa que puede domar a una bestia sin alma que
tarde o temprano se lo comerá vivo. Luego estás tú —se burló
—Papi querido, que ni siquiera puede admitir que hay una parte
de él que está aliviada de que sus responsabilidades se hayan
ido.
—No sabes una mierda —dije, resistiendo el impulso de
derribarlo allí mismo. Hombre o no, golpear a alguien con quien
me había follado era cruzar una línea invisible, y ya había
bailado claqué sobre suficientes en lo que a James se refería. —
Para que conste, no confío en ninguno de esos hijos de puta
más allá de lo que podría tirarlos, y creo que mis dos hermanos
han perdido la maldita cabeza, pero he estado cerca de Silas el
tiempo suficiente para saber que él ama a mi hermano. Al
menos tanto como él es capaz de amar a cualquiera.
106
Ciertamente más de lo que te amó nunca.
Sabía que había tocado un nervio tan pronto como las
palabras salieron de mi boca, pero no fue la ira en sus ojos lo 01/2023
que me tomó con la guardia baja.
Fue el dolor.
Algo que ni siquiera había pensado que él fuera capaz de
sentir, y ciertamente no en respuesta a algo que me parecía tan
descaradamente obvio.
Este hombre era literalmente un cerebro criminal. Un genio.
¿Podría realmente ser tan despistado como para creer que en
realidad todavía tenía una oportunidad de ganarse el corazón
de Silas? ¿Un corazón que estaba bastante seguro de que solo
había llegado a existir porque mi hermano era quien lo
sostenía?
Fue en ese momento que me di cuenta de que James no era
el monstruo frío y calculador en el que Silas había tratado de
moldearlo. Ni siquiera era un psicópata sádico alimentado por la
ira como Malcolm. Era humano con todos los adornos
irracionales que venían con eso, cada uno marcó hasta el puto
once. Y él era aún más peligroso por ello.
El dolor duró solo una fracción de segundo antes de que la ira
lo consumiera, pero esta vez, cuando se abalanzó sobre mí,
estaba listo para él.
Lo atrapé por las muñecas antes de que pudiera derribarme,
estrangularme o lo que sea que hubiera planeado, y esta vez,
estaba preparado para la cantidad de fuerza que se necesitaría
para detenerlo.
Era mucho más fácil de manejar cuando no lo subestimaba
físicamente. Y su ira parecía haberlo vuelto más descuidado
107
también.
—¿Eres jodidamente suicida? —Pregunté, mirándolo con
incredulidad. 01/2023
La rabia que ardía en sus ojos respondió a mi propia pregunta.
Bien podría haberlo sido también, y no me habría sorprendido.
Pero más que nada, estaba completa y totalmente fuera de
control. No poseía simplemente emociones, estaba poseído por
ellas.
Esa realización debería haber sido la bandera roja más grande
del planeta, y lo fue. Pero también me hizo aún más intrigado.
Sí. Loco definitivamente corría en la familia.
—Cálmate —gruñí, empujando hacia adelante para atraparlo
fuera de balance ya que estaba malditamente cerca de ganar
ventaja, y realmente no quería tener que presionar el botón no
del todo nuclear. No solo lo volvería inútil si Lewis volvía a
llamar en los próximos minutos, sino que me haría sentir como
una mierda.
 —Vete a la mierda —escupió, arremetiendo de nuevo con lo
que parecía ser toda su fuerza.
Empujé hacia atrás, sujetándolo contra la pared por ambas
muñecas. Solo entonces me di cuenta de que había estado
tratando activamente de no lastimarlo, pero si no manejaba esta
situación rápidamente, iba a escalar hasta el punto de peligro
para ambos.
James se congeló y me miró fijamente, sus ojos se abrieron un
poco como si no hubiera esperado eso.
—Cálmate —repetí, sosteniendo su mirada. Encontré esos
ojos igualmente intensos cuando nos conocimos, pero ya no
parecían fríos. Más bien estaban llenos de un fuego tan intenso
108
que era difícil saber si me estaba quemando, pero era difícil
apartar la mirada de ellos por una miríada de razones. —Sólo
respira. 01/2023
Apretó los dientes, gruñéndome como un animal acorralado,
pero dejó de empujarme como si toda la lucha en él hubiera
desaparecido. Luego se abalanzó de nuevo, solo que esta vez,
en lugar de puños, me atacó con un beso que fue igual de
violento.
Bueno, ese fue un método de desescalada.
Mantuve sus muñecas inmovilizadas y empujé mi rodilla entre
sus muslos, forzando mi lengua en su boca. Sus labios se
abrieron más, pero algo afilado perforó mi lengua, como si
tuviera colmillos.
—Ay, mierda —siseé, rompiendo el beso y llevándome una
mano a la boca. Cuando aparté la mano, las yemas de mis dedos
estaban manchadas de rojo.
—Coño —se burló James.
 Sentí una oleada de irritación y lujuria, dos cosas que una vez
pensé que eran mutuamente excluyentes, lo agarré por la
camisa y lo arrojé sobre la cama.
—Si vamos a hacer esto, lo haremos en la cama —murmuré,
quitándome la camisa mientras me metía entre sus piernas. —
Todavía tengo las rodillas quemadas por la alfombra de la
última vez.
James se incorporó para desabrocharme el cinturón y me bajó
los pantalones junto con mis bóxers.
—¿Me vas a follar cara a cara o necesitas que use una peluca?
—Preguntó burlón.
Extendí la mano para agarrar un puñado de su cabello y tiré
109
de su cabeza hacia atrás.
—No sé. Ya es bastante largo.
Cerró la distancia entre nosotros y presionó sus labios contra 01/2023
los míos una vez más, tomando mi polla en su mano. Ya estaba
vergonzosamente duro cuando frotó el pulgar sobre la punta,
extendiendo las gotas de semen sobre él.
—¿Te sientes aventurero? —Preguntó con una voz ronca y
seductora, sus ojos brillando divertidos mientras se inclinaba y
movía la punta de su lengua contra la coronilla de mi pene.
Mi polla latía en respuesta al toque ligero y provocativo, pero
una mirada a mi sangre manchando la comisura de sus labios
carnosos fue suficiente para devolverme a mis sentidos.
—No tan aventurero —dije, empujándolo sobre su espalda. Lo
desnudé con tanta ansiedad como él lo había hecho conmigo,
tratando de no pensar en el hecho de que quería ver el cuerpo
desnudo de otro hombre.
 Definitivamente tratando de no pensar en el hecho de que me
excitó.
¿Incluso contaba como atracción por los hombres si era un
fenómeno completamente específico de una persona?
Realmente esperaba que la respuesta fuera no, porque había
tenido suficientes auto-revelaciones durante el último año para
toda la vida, pero en este momento, no podía preocuparme
tanto. En cambio, abrí sus piernas y metí la mano en el cajón,
demasiado desesperado para molestarme con un condón, pero
no lo suficientemente sádico como para querer tomarlo sin
nada. Agarré la botella de lubricante y pasé una gruesa capa por
mi eje palpitante.
110
James puso los ojos en blanco.
—¿No somos preciosos?
—Cállate —gruñí, bajando mi cuerpo sobre el suyo para 01/2023
capturar sus labios, aunque solo fuera para mantenerlo en
silencio. No es que encontrara su lengua afilada completamente
desagradable, si estaba siendo honesto conmigo mismo.
Me devolvió el beso con bastante entusiasmo, levantando las
rodillas para permitirme un mejor acceso. Probablemente
debería haberlo preparado al menos con mis dedos, pero
claramente quería esto tanto como yo, y tuve la sensación de
que no estaba acostumbrado a tomarse las cosas con calma.
Simplemente no estaba seguro de si eso era una cuestión de
preferencia, o del tipo de hombres con los que estaba
acostumbrado a follar.
Sus dedos se clavaron en mis hombros cuando me posicioné
en su agujero, y sus uñas se clavaron en mi carne, extrayendo
sangre una vez más cuando lo atravesé.
 —Joder —siseé.
—No seas tan perra —me regañó contra mis labios,
arqueando las caderas para tomar mi polla más profundamente
como si fuera un consuelo.
O tal vez solo para callarme.
—Sabes, realmente no puedo decir si sientes dolor o lo
infliges —le dije, ajustándome una vez más a la sensación de
estar dentro de él, incluso si era apenas más allá de la coronilla.
—Ambos —admitió con indiferencia, cambiando su posición
un poco debajo de mí. —Principalmente lo primero, pero para ti,
haría una excepción.
—Me halaga —dije secamente, empujando hasta que estuve a
111
mitad de camino dentro de él. Ahora que estábamos cara a cara,
tenía una vista perfecta de él haciendo una mueca de dolor y
aunque me avergonzaba admitirlo, eso definitivamente era un 01/2023
punto a favor de esta posición sobre la otra. No es que me
importara echarle un vistazo a su trasero perfecto. La vista era
ideal de cualquier manera.
—Menos hablar, más joder —jadeó, agarrándome por los
hombros para acercarme más mientras sus caderas se hundían
en mí una vez más, tomando mi polla en el resto del camino.
Un gemido estrangulado se me escapó cuando me enfundé
en él y comencé a mecer mis propias caderas mientras la
fricción se volvía más placentera que incómoda.
Esto era... joder, era bueno.
Era duro, crudo y apasionado, y había libertad en el hecho de
que no había nada frágil en el hombre debajo de mí.
No físicamente, en todo caso.
 Aunque podía decir que dolía, el dolor parecía excitarlo aún
más, y la vista del placer en su rostro me excitaba más de lo que
tenía derecho.
Luego estaba la profunda y palpitante satisfacción de estar
enterrado dentro de él, empujando dentro y fuera de su
estrecho pasaje hasta que apenas podía seguir la pista de mis
pensamientos.
Me encontré alcanzando su polla una vez más, sincronizando
mis embestidas con sus empujes mientras me metía en él. Sabía
cada vez que golpeaba su próstata por la forma en que sus ojos
se oscurecían y su cuerpo se tensaba alrededor del mío.
No solo se sentía bien follarlo, se sentía bien complacerlo.
112
Tener alguna medida de control, incluso si solo lo hacía gemir
de felicidad.
Tan duro como fue, había algo en este momento que se sentía 01/2023
diferente. Como si fuera más vulnerable de alguna manera. No
estaba seguro de por qué eso me importaba, pero lo hizo.
Tal vez era solo un recordatorio de que el hombre debajo de
mí era humano, a pesar de todo el alambre de púas enredado
que se había envuelto alrededor de sí mismo para ocultarlo.
Los dedos de James se deslizaron en mi cabello, su mirada se
oscureció mientras me atraía para otro beso. Gemí cuando sus
dientes rasparon mi labio inferior y mordió gradualmente lo
suficiente como para que me arrullara una falsa sensación de
seguridad. Cuando sentí un dolor agudo y probé sangre, era
demasiado tarde para hacer algo, especialmente porque ya
estaba a punto de correrme.
Y eso, de todas las cosas, me empujó al límite.
 —Mmh —murmuró James contra mis labios, sus brazos se
envolvieron con fuerza alrededor de mi cuello para atraerme y
poder chupar la carne que acababa de romper.
Finalmente rompí el beso mientras lo llenaba con mi corrida,
solo para ver su lengua parpadear contra mi labio inferior,
pintado de rojo. Las gotas se aferraron a sus labios cuando se
abrieron en un jadeo orgásmico, y arqueó la espalda,
corriéndose aún más fuerte que la primera vez.
—Estás jodidamente loco —gruñí, todavía tambaleándome
por la combinación de placer y dolor.
Sus ojos se abrieron, iluminados con felicidad y malevolencia.
Una combinación que no tenía derecho a ser tan seductora
113
como lo era.
—Aunque te viniste.
Apreté los dientes, saliendo de él sin mucho cuidado. A fin de 01/2023
cuentas, no me sentí tan mal por eso.
La parte más molesta era que tenía razón.
 14

JAMES

Dormí como un muerto esa noche. Al menos, siempre había

114
asumido que esa era la única vez que sentiría algo parecido a la
paz que sentí en ese momento, envuelto en los fuertes brazos
de un hombre que mi cerebro inconsciente estaba usando como 01/2023
sustituto de otro.
El hombre cuyos ojos fríos e insensibles me devolvían la
mirada en cada sueño y cada pesadilla. Realmente no había una
diferencia entre ellos para mí, y nunca la había habido. No
cuando él estaba presente.
Me encontré de nuevo en esa habitación. Tan fría y
minimalista. Una representación perfecta del hombre que la
poseía, al igual que el resto del ático.
Silas nunca se quedó en un lugar por mucho tiempo. Algunas
semanas a la vez, a veces meses como máximo. Alternaba casas
seguras como los niños ricos alternaban los autos de sus padres,
y por todo el lujo que lo rodeaba, cada superficie era utilitaria y
desnuda. Totalmente desprovisto de carácter o sentimiento
personal. Justo como a él le gustaba.
 Supe, incluso cuando abrí los ojos y olí su costosa colonia
parisina, que era un sueño. Una mentira. Siempre lo fue, y es
posible que no sepa de qué manera esto iba a funcionar, un
sueño o una pesadilla, pero de todos modos estaba en el viaje.
Cuando levanté la vista, él estaba allí, luciendo como un dios
en reposo. Él me miró fijamente, sus frígidos ojos plateados me
recorrieron con tanta apreciación. Incluso en un sueño, no
podían ser amables.
Pero eso no sería real. No sería él, y yo siempre había amado a
Silas exactamente por lo que era. Cada borde dentado y púas
afiladas que me cortaron tan profundamente y sin
remordimiento. No importaba, porque llenaba los huecos que
115
me dejaba con su presencia, por fugaz y condicional que fuera.
—Hablas en sueños.
Fue un comentario improvisado, y no era la primera vez que lo 01/2023
hacía. Siempre estaba observando y evaluando casualmente.
Agregando todos los datos a su repertorio para usarlos contra el
tema de su estudio en un momento posterior, y yo no era la
excepción, pero no me importaba. No me importaba que yo
fuera un conjunto de puntos de datos para él, mientras me
observara. Mientras me viera como algo.
El sonido del timbre me despertó demasiado pronto, pero
cuando me encontré envuelto en los brazos de alguien, sentí
una oleada de esperanza de que tal vez esta vez fuera real.
Entonces abrí los ojos y me di cuenta de que no era él. Era
Luca. Nunca lo había despreciado más que en ese momento, y
por algo tan ridículo. Por el delito de no ser él.
Tampoco era como si Luca me quisiera. Yo era una distracción
para él. Anoche, fui un caso de caridad. Lo supe desde el
momento en que vi esa mirada de lástima en sus ojos, y supe
que cuando lo ataqué, follarme había sido su forma de
mantenerme a raya. Su forma de mantenerme bajo control para
no tener que presionar ese botón y activar mi collar.
Y, sin embargo, yo había ido con él. Con ganas, de hecho.
Me odié por eso mucho más de lo que podría odiarlo a él.
Luca no se despertaba lo suficientemente rápido, así que
agarré el teléfono de la mesita de noche y se lo puse en las
manos. Tal vez era un síntoma de lo que sea que estaba mal
conmigo que podía despertarme y estar completamente
consciente y funcional en el mismo instante, pero tenía sus
ventajas.
116
—Es Lewis —dije, sin siquiera tener que mirar el identificador
de llamadas para saber eso.
Eso lo tranquilizó. 01/2023
—¿Hola? —Luca respondió de inmediato, su voz más firme de
lo que habría sido la mayoría de los hombres en su situación.
Ya podía escuchar pasos arriba. El sistema de seguimiento de
Silas funcionaba y, sin duda, la llamada ya estaba intervenida,
por el bien que nos haría. Pero si Lewis llamaba tan temprano,
era una buena señal.
Era progreso.
—El Señor Capello hablará contigo ahora —dijo la mujer al
otro lado de la línea. No reconocí su voz. Sin duda, ella era una
de sus subordinadas, y probablemente ni siquiera en el mismo
edificio. Demonios, dudaba que estuviera en el mismo
continente.
Luca me miró con los ojos muy abiertos por el pánico, pero
asentí para tranquilizarlo. Agarré la camisa más cercana del
suelo, que resultó ser la suya, y me la puse por la cabeza, justo
cuando la puerta del dormitorio se abría de golpe. Al menos
Luca todavía estaba en calzoncillos.
Silas fue el primero en entrar, seguido de Enzo, con Malcolm
no muy lejos detrás de ellos. Estaba acostumbrado a los sutiles
matices de sorpresa en los rostros de Silas y Malcolm, pero con
Enzo, no podía ocultarlo. Sólo la mandíbula en el suelo, los ojos
muy abiertos como platos.
Me llevé un dedo a los labios para silenciarlo y me volví hacia
Luca, que parecía estar entre el pánico y la ira ciega.
—Recuerda lo que te dije —dije. —Mantén la calma.
Me miró por un momento, asintiendo. Un segundo después,
117
escuché una voz vagamente familiar en la otra línea.
Silas fue a instalarse con sus auriculares sobre el escritorio.
Podía sentir a Malcolm mirándome como un halcón, hasta que 01/2023
Valentine entró arrastrando los pies en la habitación detrás de
él.
Valentine se congeló, mirándome a mí, luego a Enzo, y abrió
la boca, pero Malcolm la tapó con una mano, tirando al otro
hombre contra su pecho.
—Hola, Luca —dijo la voz al otro lado de la línea. Estaba
amortiguado, pero sabía que Silas podía escucharlo claramente.
—Lamento llamar tan tarde, pero ya sabes cómo son las zonas
horarias.
—Mi hijo —dijo Luca, sonando más tranquilo de lo que
esperaba. —Antes de que esto vaya a otro lado, necesito hablar
con él.
—A su debido tiempo —dijo Lewis. —¿Hiciste lo que te pedí?
—Él está aquí —dijo Luca entre dientes.
 —Ponlo.
Luca miró a Silas, quien asintió antes de pasarme el teléfono.
—Lewis —dije, manteniendo mi voz sin tono. —Ha sido un
largo tiempo.
La risa baja en el otro extremo de la línea hizo que mi piel se
erizara. Qué satisfactorio sería despegar su carne del músculo,
pulgada a pulgada agonizante.
—De hecho, lo ha sido. No te preocupes. Puedes esperar para
agradecerme en persona tu libertad recientemente adquirida.
—Apenas puedo esperar —dije rotundamente. Quería una
reacción, y aunque por lo general me hubiera gustado dársela,
correr ese tipo de riesgo era una mala idea por muchas razones.
118
Lo único más peligroso que un hombre motivado por la
venganza era uno motivado por el amor, y tuve que caminar por
una delgada línea entre Luca y Lewis en los extremos opuestos 01/2023
del espectro.
—Me alegro de que te acuerdes de mí —dijo, con la voz llena
de desprecio.
—¿Cómo podría olvidarlo? —Pregunté—. Has sido el
fantasma que me pisa los talones durante años. Por curiosidad,
¿cómo supiste que estaba vivo?
—No lo hice —respondió. —Nunca dejé de mirar por si acaso,
pero no sabía. No con certeza. No hasta que dejaste de pagar a
tus contactos. A partir de ahí, solo era cuestión de esperar a que
la pequeña mosca adecuada pisara mi telaraña.
—Ya veo —dije, mirando a Silas. Su expresión permaneció en
blanco, pero me di cuenta de que había entendido el punto. Se
tenía que agradecer a sí mismo. Por todo esto. —Bueno, me
halaga que sigas tan interesado después de todo este tiempo.
Lo creas o no, mi tarjeta de baile no ha estado llena
últimamente.
—No te preocupes —se burló Lewis. —Papá te dará toda la
atención que puedas desear lo suficientemente pronto.
Luca asintió hacia mí, y me di cuenta de que estaba a punto
de hacer algo estúpido, así que empujé hacia adelante.
—Perdón por acortar las bromas, pero voy a necesitar que
pongas al chico —dije. —Esto puede sorprenderte, pero estos
hombres no parecen confiar mucho en ti.
—Imagínate eso —se burló Lewis. —Lástima que no eres el
que está a cargo.
Me di cuenta de que Luca estaba a punto de decir algo, pero
119
colgué antes de que tuviera la oportunidad. Pasó de
preocupado a furioso en una fracción de segundo, arremetiendo
para quitarme el teléfono de la mano. 01/2023
—¿Qué hiciste? —Gritó, mirando el teléfono con horror, sus
ojos salvajes con ira y miedo mientras me miraba de nuevo.
—Hijo de puta —gruñó Malcolm, al otro lado de la habitación
antes de que pudiera procesarlo. Me tomó por el cuello,
sujetándome contra el colchón, y su agarre fue lo
suficientemente fuerte como para desmayarme de inmediato.
—¡Mal! —Valentine gritó en pánico.
—Quítale las manos de encima —gruñó Luca, aunque parecía
que quería hacer lo mismo. Empujó a Malcolm y se interpuso
entre nosotros.
—Es tu hijo en la línea —gritó Malcolm. —¿Estás realmente
tan jodidamente cachondo que defenderás a ese pedazo de
mierda?
 —¡Él no puede arreglar esto si está inconsciente, maldito
imbécil! —Luca gritó.
—¿Se callarían los dos? —Silas siseó, sus ojos fijos en mí
mientras ambos hombres se congelaban. —¿Te importaría
decirme qué diablos fue eso?
—Parte del juego —respondí, sentándome para frotarme la
garganta. Mi voz era ronca, pero aparte de estar un poco
mareado, no había ningún daño.
—¿Juego? —Luca escupió, sus ojos oscureciéndose—. Esto no
es un juego. Este es mi hijo del que estamos hablando.
Malcolm le dio una mirada de “te lo dije”.
Agarré el teléfono una fracción de segundo antes de que
120
sonara y todos se quedaron en silencio cuando me lo acerqué a
la oreja. Justo a tiempo.
—¿Hola? —Respondí. 01/2023
—¿Papá? —La voz del niño pequeño al otro lado de la línea se
quebró, seguida de un sollozo.
Le tendí el teléfono a Luca mientras me miraba en estado de
shock.
—Es para ti.
 15

LUCA

Cuando tomé el teléfono de las manos de James, sentí un

121
torbellino de emociones y tuve que compartimentarlas y
reprimirlas todas o me iba a desmoronar. Timothy necesitaba
que fuera fuerte y calmado, y estaba seguro de que estaba lo 01/2023
suficientemente asustado.
—Hola, amigo —dije, aclarándome la garganta porque mi voz
todavía sonaba áspera.
—¡Papá! —Gritó. —¿Dónde estás?
Mi estómago se apretó como si alguien tuviera un tornillo de
banco en mis entrañas, listo para sacarlas de mí.
—Estoy en casa, pero voy ir por ti muy pronto. Lo prometo. —
Sabía que no debía preguntarle dónde estaba por una miríada
de razones, entre ellas el hecho de que Lewis simplemente lo
movería de todos modos y posiblemente tomaría represalias
contra él. —¿Estás bien? ¿Están siendo amables contigo?
—Sí. —Él olfateó. —Hay juguetes y el tío Lewis es agradable,
pero te extraño.
 Tío Lewis. Apreté los dientes, luchando por ver a través de la
rabia ciega. Al menos parecía estar manteniendo su palabra, por
el momento, y cuanto menos miedo tuviera Timothy de él, más
posibilidades tendría de comportarse y no hacer nada para
enojar a su captor antes de que pudiera llegar a él.
—Yo también te extraño, niño. Mucho.
—¿Cuándo puedo volver a casa? —Preguntó.
—Pronto —me atraganté. —Pronto, lo prometo.
—Aquí. ¿Puedo tener eso? —Escuché a Lewis preguntar en el
fondo, su voz engañosamente agradable.
—Bueno. Te amo, papá —dijo Timothy.
—Yo también te amo, amigo.
122
Me estaba deshaciendo.
—Gracias —dijo Lewis en un tono de suficiencia—. ¿Por qué
no vas a buscar a la niñera? Estoy seguro de que ya tiene algo 01/2023
de comida lista.
Escuché el golpeteo de pequeños pasos, y la habitación
quedó en silencio.
—¿Qué te dije? —Preguntó Lewis—. Está perfectamente bien.
Y seguirá así, mientras tú hagas lo que yo quiero. No hay razón
para que esto tenga que ser algo más que unas agradables
pequeñas vacaciones para él. Ahora, ¿por qué no le devuelves el
teléfono a James?
Mientras hablaba, necesité toda mi fuerza de voluntad para no
hacer amenazas que no podía cobrar por teléfono. Pero en el
momento en que pusiera mis manos en este hijo de puta en
persona...
A regañadientes pasé el teléfono a la mano de James que
esperaba. Estaba completamente tranquilo, como si todo esto
fuera un asunto perfectamente normal para él. Y considerando
que él no era el que tenía el cuello actualmente en juego, era
fácil ver por qué.
Lo que era más difícil de entender era lo que había estado
pensando cuando bajé la guardia con él en primer lugar.
Ahora que mis hermanos estaban en la habitación, muy
conscientes de mi paso en falso, incluso si no sabían que estaba
lejos de ser un trato de una sola vez, estaba aún más
confundido. Pero todo eso quedó en segundo plano ante el
dolor y el terror. El golpe de tripa agridulce de escuchar la
vocecita de Timothy.
Durante tanto tiempo, había tenido miedo de estar jodiendo
123
todo este asunto de la paternidad, y lo estaba. Mi situación
actual era prueba suficiente de ello. Pero un temor que ahora
sabía que podía disipar era que lo amaba. Que, en el fondo, no 01/2023
era mejor que Carol. Tal vez incluso peor.
Todas las noches sin dormir, todo el aislamiento, toda la
soledad vacía y dolorosa se sentía como si estuviera ahogando
todo lo que se suponía que debía sentir. Todos los sentimientos
cálidos y esponjosos que sentí por primera vez cuando lo
sostuve en mis brazos y mi mundo se redujo al pedacito de una
sola persona. Esos sentimientos no se habían ido, aunque a
veces era difícil verlos a través de la niebla de la depresión, pero
ahora...
Ahora, se sentía como si una parte de mí, la única parte de mí
que valía la pena tener, hubiera sido vaciada. Sabía que era
amor por la forma que había dejado atrás, y la idea de no volver
a verlo nunca más me dejó más que vacío. Ni siquiera era algo
en lo que pudiera comprender o pensar demasiado si quería
mantener la cordura.
—Hola de nuevo, Lewis —dijo James en un tono tranquilo que
era a la vez exasperante y reconfortante. Reconfortante porque
necesitaba a alguien racional y desapegado para resolver esto,
porque seguro que yo no era ninguna de esas cosas.
Exasperante porque tenía el lujo de ser indiferente, y yo sabía
que no debía pensar que había alguna parte de él a la que
realmente le importaba un carajo.
Tal vez no era el tipo de monstruo que era Lewis, pero aun así
era un monstruo. El hecho de que fuera fácil de olvidar lo hacía
aún más peligroso.
124
—Entonces —continuó James. —¿A dónde vamos desde aquí?
—No seas tan impaciente —se burló Lewis. —Todo en buen
tiempo. Solo espera más instrucciones. 01/2023
Me di cuenta de que había colgado cuando James miró el
teléfono y me lo devolvió en silencio.
—¿Eso es todo? —Malcolm gruñó. —No sacaste nada de él.
—Él habló con su hijo, ¿no? —James desafió. —Sabemos que
el niño está vivo y en buenas condiciones.
—Por ahora —respondió Malcolm.
—Es bueno que no esté apurado —dijo James.
—¿Cómo te das cuenta de eso? —Exigió Enzo.
—Porque significa que cree que todavía tiene el control —
respondió James.
—Noticias de última hora —espeté. —Él tiene a mi hijo. Él
tiene el control.
—No, no lo tiene —dijo James con firmeza, mirándome
directamente a los ojos. —Y si empiezas a pensar de esa
manera, puedes despedirte de tu oportunidad de volver a verlo
alguna vez. Esto nos da tiempo para planificar.
—Es hora de que planifiques una manera de cubrir tu trasero,
tal vez —dijo Malcolm bruscamente—. Todavía digo que lo
entreguemos.
—Por supuesto. Si quieres que el niño muera —dijo James
encogiéndose de hombros.
—No hay razón para creer eso —dijo Malcolm. —Y todas las
razones para creer que estás mintiendo para salvar tu propio
pellejo, como siempre lo has hecho.
—¿Y de cuántas negociaciones exitosas de rehenes has sido
parte? —Preguntó James. —¿Construiste tu carrera cediendo a
125
las demandas de todos los otros criminales, o es solo este,
porque él me quiere muerto?
Malcolm entrecerró los ojos y me di cuenta de que estaba a 01/2023
punto de estallar cuando Silas levantó una mano para detener a
su hermano.
—Ya es suficiente —dijo Silas. —Discutir no nos va a llevar a
ninguna parte, y por esta noche, necesitamos considerar esto
como una victoria. Si hay algún beneficio para Lewis, es que es
relativamente estable y cree que tiene el control. Hacer
cualquier cosa para forzar su mano en este momento sería un
error.
Malcolm claramente quería discutir, pero tan tentado como yo
estaba de estar de acuerdo con él emocionalmente, Silas tenía
razón. Teníamos que ser racionales.
—Hasta ahora, todo lo que James ha dicho ha dado resultado
—dije a regañadientes. —No vamos a correr ningún riesgo que
pueda hacer enojar a Lewis mientras tenga a mi hijo.
 —Perdóname si no confío en la opinión objetiva de un
hombre que está acurrucado en la cama con el maldito Demon
—replicó Malcolm.
—¿De verdad quieres ir allí? —Pregunté entre dientes.
—Está bien, suficiente —dijo Silas, empujando a su hermano
fuera de la habitación. —Nadie irá a ninguna parte esta noche.
Esquinas separadas.
—Esto es una sobrecarga de testosterona —murmuró Val por
lo bajo, tomando el brazo de su marido. Malcolm parecía que
estaba a punto de atacar a Silas, pero un toque de Valentine fue
todo lo que necesitó para calmar la tensión de él. No se iba a
arriesgar a lastimar a su amado peleando en un espacio tan
126
reducido.
—Lo que sea —murmuró Malcolm enojado, alejándose.
Valentine lanzó una mirada de disculpa por encima de su 01/2023
hombro antes de seguirlo. Por alguna razón, había elegido una
vida de pelear con un hombre de las cavernas temperamental,
pero si eso era lo que lo hacía feliz, ¿quién era yo para juzgar?
Agarré una camisa y también salí de la habitación, porque
necesitaba un poco de aire fresco. Cuando Silas y Enzo me
siguieron, cerrando la puerta detrás de ellos, me di cuenta de
que no tenía idea de qué decir. Había miles de pensamientos
diferentes corriendo por mi cabeza y esa llamada telefónica me
había dejado en gran medida incapaz de analizar ninguno de
ellos.
—Dicho sea de paso, tiene razón —dijo Silas.
—Sí —dijo Enzo. —¿Te importaría decirme qué diablos fue
eso?
 —No realmente —dije, cruzándome de brazos. Lo último que
quería en este momento era explicarles. Especialmente cuando
yo tampoco había descubierto una manera de explicármelo.
Silas suspiró.
—Solo ten cuidado, Luca. James no es alguien con quien
jugar.
—Soy consciente de eso —dije. —Fue un lapso momentáneo
de juicio.
—¿Un lapso de juicio? —Enzo se burló—. Estamos hablando
del puto Gran Cañón. ¿Desde cuándo eres bisexual?
—No lo soy —le espeté, pellizcando el puente de mi nariz
para evitar una migraña inminente—. Dios, no estoy de humor
127
para tener esta conversación en medio de la noche.
—¿Crees que es una conversación que quiero tener? —
Preguntó Enzo. —Estoy preocupado por ti, hombre. Es 01/2023
comprensible que tu cabeza no esté bien con todo esto, y James
es un maestro manipulador para decirlo a la ligera.
—No estoy siendo manipulado —dije rígidamente. —Estaba
enojado, y he estado encerrado en este maldito lugar con
ustedes cuatro durante la última semana. Solo necesitaba
desahogarme un poco, ¿de acuerdo? Nada más y nada menos.
Y, francamente, no es asunto tuyo.
Enzo me miró por unos momentos.
Finalmente suspiró, apartando la mirada.
—Sí lo que sea.
—Descansemos un poco —dijo Silas, poniendo una mano en
el hombro de su esposo antes de mirarme. —Probablemente
sea una buena idea para todos nosotros.
 Observé mientras caminaban por el pasillo y me desplomé
contra la pared para respirar hondo antes de volver a la
habitación. Me di cuenta de que no compraron mi excusa, y
probablemente fue una lástima evitar que insistieran, pero
mientras funcionara, no me importaba.
Si estaba siendo honesto conmigo mismo, tampoco estaba
seguro de haber comprado la excusa.
Ni siquiera estaba seguro de tener la fuerza de voluntad para
resistir si sucedía de nuevo.

128

01/2023
 16

JAMES

Me encontré despierto en medio de la noche, y no por

129
primera vez últimamente. Había sido la mayor parte de una
semana, y aunque Lewis no había vuelto a llamar, había estado
usando el tiempo para preparar mi próximo movimiento para 01/2023
cuando lo hiciera.
Durante el día, tenía a Silas respirándome en el cuello, lo que
hubiera sido mucho más atractivo si no fuera porque su mafioso
mascota siempre estaba conmigo.
Eso, y entorpeció mi estilo de investigación. Había sido mejor
jefe cuando me dio rienda suelta para hacer lo que quisiera.
Hasta que no lo hizo.
Entonces, estaba despierto y revisando imágenes de un
unicornio, también conocido como uno de los sicarios que solía
trabajar para los Capello. Había sido acusado de cargos de
posesión hacía un par de años, y las imágenes archivadas eran
lo más cerca que iba a estar de alguien que hubiera conocido a
Lewis en persona.
 Hasta ahora, las imágenes del interrogatorio obtenidas
ilegalmente no habían sido particularmente esclarecedoras, y la
información que había podido obtener de las imágenes
probablemente estaba desactualizada, pero era mejor que nada.
Y me encontré pensando que era una lástima que yo no fuera el
que manejaba el interrogatorio porque la policía de Boston
claramente no tenía ni idea de cómo obtener respuestas de un
cabrón como él.
¿Qué más había de nuevo?
Escuché movimiento al otro lado de la habitación y miré hacia
arriba para encontrar a Luca observándome desde la cama, con
ojos llorosos.
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—¿Sigues despierto? —Preguntó, bostezando.
—Tu cuñado hace que hacer cualquier cosa durante el día sea
imposible con su constante ronda —dije, volviendo a mi 01/2023
pantalla.
Luca se sentó en el borde de la cama y pude sentir que
todavía me miraba.
—¿Supongo que no tienes ningún avance para compartir?
—Solo una confirmación más de lo que ya sé —dije. —Hasta
donde puedo decir, Lewis todavía está operando un satélite del
negocio familiar en una isla en algún lugar del Caribe, con su
sede personal todavía en algún lugar del noreste.
—¿Una isla? —Repitió, frunciendo el ceño.
—Es común para operaciones ilícitas de todas las variedades
—respondí. —Es remoto y es fácil huir tanto en helicóptero
como en transporte acuático. Encuentra el lugar correcto y no
tienes que preocuparte de terminar en la jurisdicción del país
equivocado. Cualquier autoridad local que se dé cuenta es fácil
de pagar.
—Supongo —murmuró. —¿Crees que ahí es donde tienen a
Timothy?
—No —respondí. —Por un lado, puedo decir por el burlete
usado en las ventanas de la fotografía que envió que fue
tomada en tierra firme.
—¿Tú qué?
—Ya he hablado de esto con Silas —dije con impaciencia. —
De todos modos, Lewis no se arriesgaría a exponerlo llevándolo
a su base de operaciones. Probablemente lo tenga en una casa
segura en algún lugar. Solo Dios sabe dónde, pero está
131
separado de todo eso, estoy bastante seguro —le dije.
—Supongo que es un alivio —dijo Luca, pasándose una mano
por el pelo. —Algo así. 01/2023
—Si quieres que empiece a mentir y a endulzar las cosas para
hacerte sentir mejor, puedo hacerlo —le ofrecí.
—No —dijo Luca rápidamente. —No, no hagas eso. Yo...
prefiero saber la verdad.
—Bastante justo —dije. Me di cuenta de que quería decir algo
más, y me distraía. —¿Qué es?
—Nada —dijo Luca. —Solo... Si no te conociera mejor,
pensaría que realmente te preocupas por derribar a este tipo.
—Sí —dije. —Como dije, no me gustan los cabos sueltos.
—¿Es eso realmente? —Presionó, su voz mezclada con
irritación. —¿Solo es cuestión de saldar cuentas viejas, o algo
más que eso?
Suspiré.
—¿Importa?
 —Por supuesto que importa —dijo, frunciendo el ceño.
Cerré la computadora portátil y me giré para mirarlo.
—Hablas como tu hermano.
—¿Cuál?
—Al que yo no llamo el tonto —respondí. Valentine era más
ingenuo que nada, pero no era estúpido. De acuerdo, Enzo de
alguna manera se las había arreglado para hacer lo que yo no
había logrado en años al lado de Silas, entonces, ¿quién de
nosotros era realmente el tonto?
Lucas puso los ojos en blanco.
—Sabes, seguir suspirando por Silas después de todos estos
años no está haciendo ningún favor a tu reputación en la calle.
132
—No sabía que me preocupaban esas cosas —respondí. —Y
no estoy suspirando.
—¿No? —Preguntó. —Podría haberme engañado, la forma en 01/2023
que lo miras.
Sentí un destello de irritación.
—¿Estás tratando de irritarme porque crees que va a conducir
a más sexo de odio? Porque si estás tan desesperado, puedo
chupártela antes de volver al trabajo. Evítanos a los dos el
problema.
La irritación en su mirada sugería que podría haber algo de
verdad en esa acusación. Divertido.
—¿Por qué te pones a la defensiva cada vez que alguien te
acusa de ser remotamente humano?
—No estoy a la defensiva, solo creo que es una pérdida de
tiempo —dije encogiéndome de hombros. —Así que quiero
derribar a la familia Capello. Mientras recuperes a tu hijo, no veo
por qué mi razón te importa.
 —Porque la vida de mi hijo está en tus manos —dijo
lentamente—. Por supuesto que quiero saber con qué estoy
lidiando. Luego está el hecho de que Silas no te sacó de prisión
para derribar a los Capello. Te sacó para recuperar a Timothy.
—Y voy a hacer eso —le aseguré.
Luca se puso de pie, caminando hacia la mesa. Se inclinó
sobre mí, y estaba bastante seguro de que estaba tratando de
parecer intimidante. Encantador. No efectivo, pero encantador.
—Mira, no te voy a culpar por querer eliminarlo —dijo. —Tal
vez te arrepientas de algunas de las cosas que has hecho, o tal
vez solo quieras hacer algo para hacer que el mundo sea un
poco mejor para inclinar la balanza.
133
—Ya he mejorado el mundo —le dije, parpadeando. —¿Por
qué crees que me convertí en un asesino en serie en primer
lugar? 01/2023
Me miró sin comprender. Finalmente negó con la cabeza.
—Mira, después de que esto termine y Timothy esté en casa,
te ayudaré a sacar al hijo de puta yo mismo, pero ¿mientras
tanto? Si haces algo para poner en peligro esta operación, te
mataré.
El acero en sus ojos golpeó de manera diferente esta vez. Y si
yo fuera otra persona, probablemente hubiera sido intimidante.
—Respeto eso —le dije.
—Siempre y cuando nos entendamos —dijo, suspirando
mientras caminaba de regreso a la cama. Hizo una pausa a
mitad de camino. —Para tu información, puedes venir a la cama
cuando estés listo para dormir. No se limita a cuando estemos...
ya sabes.
 Mis labios tiraron en las esquinas. No pude evitar traicionar mi
diversión. Solo un DiFiore podría pasar de amenazar la vida de
un hombre a estar nervioso en el lapso de un minuto.
Estaba empezando a ver el atractivo de ellos.
Ligeramente.

134

01/2023
 17

LUCA

Silas y James habían estado trabajando en la cocina la mayor

135
parte del día, y cada vez que me registraba, parecía que estaban
hablando de trabajo. Al menos, no entendía lo suficiente como
para darle sentido de cualquier manera, lo que me tenía 01/2023
nervioso.
El último “avance” fue que pensaron que habían descubierto
una forma de enviar comunicación bidireccional a través de una
línea telefónica que ya sabíamos que no nos daría la verdadera
ubicación de Lewis.
Por lo que pude ver, lo único que posiblemente lograría sería
enojarlo. No importa lo que dijera James, Lewis era el que
tomaba las decisiones. Él fue quien decidió cuando llamó, él era
quien tenía a mi hijo, él era quien sabía dónde estábamos
mientras nosotros no teníamos ni puta idea de dónde estaba él.
Era un jodido juego de alto riesgo de “¿Dónde está Waldo?”
con la vida de mi hijo en manos de dos hombres en los que no
confiaba, incluso si desconfiaba mucho más de uno que del
otro.
 Al menos, yo quería hacerlo.
Tenía todas las razones para no confiar en James, pero no
podía negar que todavía había una parte de mí que se
preguntaba, generalmente en los momentos de tranquilidad
cuando estaba despierto y él no se daba cuenta de que lo
estaba escuchando hablar en voz alta, su sueño sobre el hombre
del que claramente todavía estaba perdidamente enamorado, ya
sea que realmente estuviera demasiado lejos o no.
No estaba seguro de por qué importaba. No era como si
estuviera en condiciones de salvar a nadie. Seguro como el
infierno que él no.
Y había pasado los últimos años reprendiendo a otros
136
miembros de mi familia por ser lo suficientemente ingenuos o
egoístas como para pensar que tenían lo necesario para cambiar
a un psicópata completo. 01/2023
En resumen, yo era un hipócrita.
Un hipócrita que ni siquiera era gay o bisexual, por lo que
debería haber sido un punto discutible. No había nada
remotamente lógico en mi atracción por James y, sin embargo,
después de follarlo no una sino dos veces, sin mencionar que lo
pensé y soñé más veces de las que quería contar, tendría que
ser ingenuo para pensar que no era así en absoluto.
¿Era posible tener una excepción como esa? Nunca me habían
atraído los hombres antes o después de él y, sin embargo, no
era solo la chispa de la química de la ira y el odio lo que había
hecho que follarlo fuera tan memorable.
Demonios, no había sentido algo así en.… bueno, nunca, si era
honesto conmigo mismo.
 La mayoría de los días no lo hice. Tuve suficiente en mi plato
sin abrir esa lata de gusanos.
Me dije a mí mismo que no importaba. Fuera lo que fuera, iba
a terminar tan pronto como James regresara a prisión. Y no
había absolutamente ninguna manera de evitar ese resultado. Él
lo sabía tan bien como yo.
Demonios, no era como si estuviera ayudando por su propia
voluntad, sin importar cuán dedicado pareciera. Y yo no era lo
suficientemente egoísta como para creer que mis amenazas
serían suficientes para disuadirlo de hacer lo suyo y sacar a
Lewis si tuviera la oportunidad.
Solo tenía que confiar en él para llegar al punto de
137
intercambio. Entonces, podríamos averiguar el resto.
Volví a “simplemente pasar” por la cocina por lo que
probablemente fue la décima vez esa tarde, como si algo fuera a 01/2023
cambiar. Silas ya lo había configurado para que todos recibieran
una alerta cuando mi teléfono sonara y no fuera un conjunto
específico de números preseleccionados, así que sabía que no
me había perdido nada. A pesar del hecho de que Silas y James
estaban teniendo una conversación muy animada que tenía los
ojos vidriosos, sobre algo demasiado técnico, dudé que hubiera
algún gran avance allí tampoco.
—Un poco jodido, ¿no?
Me volteé para encontrar a Malcolm parado ahí mirándome
en el pasillo, mi corazón acelerado.
—Mierda, hombre. ¿Cómo alguien tan grande se mueve como
un maldito gato? —Murmuré.
Pareció tomárselo como un cumplido.
 —Solo es una cuestión de curiosidad aquí, pero mira allí y
dime lo que ves —dijo, poniendo una mano en mi hombro
mientras me giraba para mirar a los demás en la cocina.
Fruncí el ceño.
—No sé a qué te refieres.
—¿No? —Preguntó. —Porque es bastante claro para mí. No
veo a un prisionero, ¿verdad? Veo a dos psicópatas nerviándose
por la mierda tecnológica, pero no veo a un hombre que lleve
un collar en ningún sentido significativo.
Suspiré.
—Esto de nuevo...
—Mira, me importa una mierda a quién le metes la polla —
138
dijo Malcolm, levantando las manos. —No es asunto mío y,
francamente, no quiero saberlo. Pero conozco a James lo
suficiente como para saber que tiene una forma de distorsionar 01/2023
la realidad que lo rodea. Distorsiona a las personas, y Silas no es
una excepción.
—¿Crees que está manipulando a Silas? —Pregunté.
—Creo que cualquiera que piense que no puede ser
manipulado por James es un buen objetivo para él —respondió.
—Creo que, si fuera tú, no querría que la vida de mi hijo
dependiera de un loco, o del tipo que creó el problema.
Volví a mirar a James, tragando el creciente nudo en mi
garganta.
—Dices eso como si tuviéramos otras opciones.
—Creo en hacer mis propias opciones —dijo Malcolm. —Y si
quieres empezar a tomar las cosas en tus propias manos, en
lugar de esperar a que ese monstruo llame y el otro monstruo
responda, resolverlo todo entre ellos cuando todavía hay una
muy buena posibilidad de que hayan estado trabajando juntos
todo este tiempo, puedes hacérmelo saber.
Entrecerré los ojos.
—¿Estás diciendo que tienes una pista sobre dónde tiene
Lewis a Timothy?
—No, pero tengo carnada —dijo, asintiendo a James en la
cocina. —Y si quieres recuperar a tu hijo más temprano que
tarde, sugiero que lo usemos.
—Eso es un riesgo —le dije con firmeza. —Incluso si tienes
razón.
—Tengo razón —respondió. —¿Y dejar a Timothy en manos
de Lewis no es un riesgo para ti?
139
Hice una mueca. Empezaba a entender por qué llamaban a
Malcolm el Diablo. Ciertamente sabía cómo aprovecharse de
mis propias dudas. 01/2023
—Piénsalo —dijo, dándome un apretón en el hombro. —
Sabes dónde encontrarme.
—Sí —murmuré. —Lo pensaré.
 18

JAMES

Estaba en la sala de estar para un cambio de escenario muy

140
necesario, ya que Valentine aparentemente estaba en el campo
reuniendo a uno de los soldados DiFiore después de una pelea,
y Malcolm seguramente lo seguiría. 01/2023
No quería correr el riesgo de tropezarme con él solo, así que
la mayor parte del tiempo me quedé en el dormitorio de Luca o
en la cocina, que estaba lo suficientemente cerca de la oficina
de Silas para que pudiera escuchar si Malcolm intentaba
atacarme. Si vendría, por supuesto, era otro asunto.
Me di cuenta del hecho de que no estaba solo y sentí una
punzada de aprensión, preguntándome si Malcolm había
decidido terminarlo un día antes. Cuando me di la vuelta y
encontré a Luca observándome en su lugar, me sentí aliviado.
Al menos hasta que vi la mirada en su rostro.
Lo estaba enmascarando, pero me di cuenta de que estaba
incómodo, lo que significaba una de dos cosas: había estado
hablando con Malcolm o se estaba metiendo en su propia
cabeza otra vez.
 Por lo que había deducido de la naturaleza del hermano
DiFiore del medio, él era el tipo de hombre que rumiaba en
circunstancias normales, y mucho más en estas.
No me habría sorprendido que se estuviera desanimando,
pero ninguna de las garantías que podía ofrecerle mitigaba su
respuesta emocional.
Tenía que encontrar un equilibrio entre no molestarlo
diciéndole algo que Silas y los demás podían confirmar que era
una mentira, y la parte de mí que, por alguna razón, no quería
mentirle en absoluto.
Una extraña revelación, si alguna vez hubo una.
—¿Algún progreso? —Preguntó.
141
—No desde que descubrimos cómo llamar a Lewis —admití.
—Silas todavía está resolviendo los detalles de cómo podemos
usar eso para nuestro beneficio. 01/2023
—¿Crees que va a organizar la entrega la próxima vez?
—Posiblemente —respondí. —O podría pedirte que hagas
otra cosa. Solo para ver cuánto estás dispuesto a cooperar. Para
ponerte a prueba.
—Genial —murmuró.
—No importará si llegamos a él primero —dije. —Él sabe que
es vulnerable en el punto de entrega y quiere asegurarse de
tener el control tanto como sea posible antes de que eso
suceda.
—Parece que tiene bastante control para mí —dijo Luca.
Ya no me cabía ninguna duda de que había estado hablando
con Malcolm.
—No tienes que creer en mi palabra —le dije—. Puedes
preguntarle a Silas.
 —He hablado con Silas —dijo, su tono ilegible, pero la mirada
en sus ojos decía suficiente. —No importa cuánto hablemos, no
vamos a estar de acuerdo en las cosas. No en esto.
Hice una pausa para considerar sus palabras.
—Sé que no tienes ninguna razón para creerme —comencé.
—Y estaría mintiendo si dijera que no quiero evitar una entrega
por mis propios motivos egoístas. Estoy bastante seguro de que
incluso un DiFiore puede darse cuenta de eso.
Luca resopló, aparentemente sorprendido por mi respuesta.
—Gracias por el voto de confianza.
—Por lo que vale, es la mejor manera de manejar esto, incluso
si parece contrario a la intuición —continué. —Tú, más que
142
nadie, deberías saber que los tratos salen mal todo el tiempo.
Cuando hay un rehén en juego, más aún. Sé que quieres
recuperar a tu hijo, pero también sé que no vas a hacer nada 01/2023
que lo ponga en peligro o correr más riesgo. Él está a salvo en
este momento, y haré todo lo que pueda para asegurarme de
que tengas la oportunidad de hablar con él nuevamente.
Luca frunció el ceño como si no esperara que dijera eso. Por
otra parte, había pasado suficiente tiempo con Silas y Malcolm,
quienes me veían como una especie de villano de cómic.
Realmente no podía decir que estaban equivocados. No
completamente.
—Sí —murmuró. —Te lo agradecería.
Ahora había algo más en su tono que me asustó. Algo mucho
peor que la ira.
Culpa.
Eso no estuvo bien.
 —No vine aquí para discutir la logística, de todos modos —
dijo. —¿Por qué no vamos a dar un paseo? Estoy seguro de que
te vendría bien un poco de aire fresco, estando encerrado aquí
durante semanas.
—¿Un paseo? —Pregunté dudoso. Toqué el collar alrededor
de mi cuello. —Esto no viene con correa.
—Claro que sí —dijo, sosteniendo el control remoto. —Y no
se basa en tu proximidad a la casa. Eso sería demasiado
arriesgado si tuviéramos que sacarte de repente.
—Supongo que es un buen punto —reflexioné. —Por
curiosidad, ¿por qué te importa si tengo claustrofobia?
—Por un lado, dependo de ti para rastrear a este imbécil —
143
dijo encogiéndose de hombros. —Y, por otra parte, sigues
siendo un ser humano. No parece correcto mantenerte aquí
cuando has estado cooperando con todo lo que te hemos 01/2023
pedido hasta ahora.
—Qué humano —dije. Y así, supe que estaba lleno de mierda.
Se trataba de otra cosa, y tenía las huellas sangrientas de
Malcolm por todas partes.
Me levanté del sofá de todos modos y lo seguí hasta la puerta.
Luca me ofreció un abrigo extra colgado en el perchero, que no
tenía precio.
—Supongo que es una buena oportunidad para conocernos
—reflexioné. —Por lo general, hago que un chico al menos me
compre un trago antes de llegar a la base.
La cara de Luca en realidad se puso un poco roja, y no dijo
nada por un momento, claramente nervioso.
—Sí, lo que sea —murmuró, caminando afuera.
No pude evitar sonreír mientras lo seguía.
 —¿A dónde?
—Hay un lago no muy lejos de aquí —dijo, señalando el
camino delante de nosotros.
—Pintoresco —dije, siguiéndolo.
Estuvo en silencio durante la mayor parte de la caminata,
aunque me di cuenta por la mano en su bolsillo, sin duda
envuelta alrededor del control remoto en caso de que intentara
escapar, o sacar lo mejor de él, estaba cauteloso.
No tan cauteloso como yo, pero fuera lo que fuera lo que
había planeado, no era como si hubiera algo que pudiera hacer
al respecto. Toda mi vida había tratado el mundo que me
rodeaba como un tablero de ajedrez, orquestándolo todo
144
cuidadosamente para asegurarme de que yo era quien tenía el
control.
Siempre en control. 01/2023
Ahora, eso simplemente no era una opción, y había algo en
esa realización que era extrañamente reconfortante. Pacífico, en
todo caso. Y me encontré pensando, si mi destino tenía que
estar en manos de otra persona, era mejor que estuviera en
manos de Luca que cualquiera de las otras opciones.
 19

LUCA

Mientras caminaba hacia los muelles, era muy consciente de

145
que James parecía ser capaz de sentir que algo andaba mal. No
le iba a hacer ningún bien, pero no había dicho nada. Sin
embargo, él lo sabía. 01/2023
Era demasiado inteligente para no hacerlo. Y definitivamente
no era una mente maestra manipuladora como Silas o Malcolm.
Pero no importaba.
Malcolm me había encomendado mi tarea, que consistía en
sacar a James de la casa mientras Enzo y Silas no estaban, y él se
encargaría del resto. Se suponía que debía llevarlo a los muelles,
preferiblemente de buena gana, pero a medida que nos
acercábamos lo suficiente al agua para que ya no hubiera
espacio para dudar a dónde lo estaba llevando, no importaba.
Probablemente Malcolm ya estaba esperando en el refugio
más adelante, cuyo borde podía ver a medida que nos
acercábamos.
Si por algún milagro James no sabía lo que estaba pasando
ahora, pronto lo sabría, así que saqué el arma de la funda oculta
atada a mi pecho ya que estábamos en un área remota donde
nadie estaba cerca para ver.
James levantó la vista y no pareció ni remotamente
sorprendido.
—Supongo que estamos aquí —dijo, mirando a nuestro
alrededor mientras el agua del lago lamía los muelles. —Espero
que no te haya dejado plantado.
—¿Cómo supiste? —Pregunté con un suspiro.
Me miró por un momento, inclinando la cabeza.
—Era obvio. Fuiste amable —dijo, lo que fue un golpe
inesperado en el estómago. —Solo hay unas pocas razones por
las que las personas como tú son amables con personas como
146
yo. Es piedad equivocada, estupidez o traición.
Apreté la mandíbula, manteniendo el arma apuntada hacia él.
—No es personal, James, pero es como dijiste. Te estás 01/2023
cuidando a ti mismo.
—Y estás cuidando a tu hijo —dijo. —Lo entiendo. Vas a hacer
que lo maten, pero lo entiendo.
La ira se apoderó de mí en respuesta a sus palabras, porque
incluso ahora, sabía que solo estaba tratando de meterse en mi
cabeza. Tratando de hacerme dudar del plan. Malcolm me lo
había advertido, pero no necesitaba hacerlo, considerando que
era bastante obvio.
Antes de que pudiera decir algo, escuché el auto detenerse
detrás de nosotros. No necesitaba poder ver a través de las
ventanas fuertemente polarizadas para saber que era Malcolm.
—Justo a tiempo —murmuró James, sonando más molesto
que enojado. No estaba seguro de qué hacer con eso, pero no
importaba.
 Mi decisión fue tomada. Ahora tenía que vivir con eso.
Malcolm salió del auto y caminó hacia nosotros, mirando
directamente a James.
—Supongo que no te acobardaste, Luca —comentó Malcolm.
—Considérame impresionado.
—Deberías avergonzarte de ti mismo —dijo James. —Está
desesperado, pero tú lo sabes mejor. Sabes que esto va a hacer
que maten al niño.
Malcolm entrecerró los ojos. Antes de que pudiera decir o
hacer algo, golpeó a James en el estómago lo suficientemente
fuerte como para que se doblara en dos.
—¡Oye! —Grité, extendiendo la mano para agarrar el brazo de
147
Malcolm, a pesar de que no parecía planear hacer nada más. —
Eso no es de lo que hablamos.
—¿Qué, entonces entregarlo está bien, pero maltratarlo 01/2023
cuando habla mal no lo está? —Desafió Malcolm.
Apreté los dientes, furioso, pero tenía razón.
—Terminemos con esto de una vez —dije, cometiendo el
error de mirar a James para ver si estaba bien. Me estaba
mirando directamente, lo que de alguna manera me hizo sentir
aún más como una mierda.
—Por favor, solo coopera —le supliqué, acompañándolo hacia
el auto donde Malcolm tenía un par de esposas nuevas
esperándolo.
James me miró cuando Malcolm colocó las esposas en sus
muñecas.
—No es demasiado tarde para llamar a Silas y detener esto.
 Malcolm lo empujó por el hombro y lo obligó a subir al auto,
pero no estaba siendo tan brusco como de costumbre. No es
que eso fuera decir mucho.
Joder, ¿qué me pasaba? ¿Estaba realmente desgarrado por
esto?
Mi hijo era mi primera prioridad. Debería haber sido mi única
prioridad, pero había una parte de mí, por irracional que fuera,
que se sentía responsable por James. Una parte de mí que se
sentía protectora con él, que era la broma más grande de todas,
porque Demon, de todas las jodidas personas no necesitaba mi
protección.
Entonces, ¿por qué sentí que lo estaba traicionando? ¿Por qué
148
sus palabras se me quedaron grabadas en la cabeza durante
todo el viaje hasta el lugar al que Malcolm nos estaba llevando?
Mi papel en el plan había terminado, más o menos, y una 01/2023
parte de mí no podía evitar preguntarse si James tenía razón.
Malcolm me había empujado a actuar, en lugar de esperar a
James y Silas, pero ¿realmente estaba actuando por mi cuenta si
solo estaba siguiendo su plan en lugar del de ellos?
Tuve mucho tiempo para contemplarlo mientras Malcolm nos
conducía a las afueras de la ciudad. Reconocí el camino
mayormente oculto. Y, sin embargo, no estaba más cerca de
llegar a una respuesta sobre si había tomado la decisión
correcta o no. Algo me dijo que no iba a conseguir una hasta
que Timothy estuviera de vuelta en mis brazos.
James no dijo nada en todo el tiempo, lo que pareció
inquietar tanto a Malcolm como a mí. Probablemente porque
era lo único por lo que no podía regañarlo.
 —Está bien, ¿ahora qué? —Pregunté mientras salíamos del
auto y vi a Johnny y Chuck esperándonos en los muelles.
—Ahora, hacemos una llamada telefónica —dijo Malcolm,
arrastrando a James fuera del auto. —Vamos —dijo
bruscamente, empujándolo por el camino hacia el edificio
principal fuera de los muelles.
Había más hombres armados una vez que logramos entrar. Un
pequeño ejército de ellos, en realidad, así que sabía que
Malcolm esperaba que Lewis apareciera. O al menos que enviara
un apoderado.
—Tienes que estar bromeando —murmuró James, mirando a
los hombres que estaban reunidos en los muelles. —¿De verdad
149
crees que va a estar de acuerdo con esto?
—Cállate —espetó Malcolm. —Sé que tú y Silas tienen una
manera de contactarlo, así que hazlo—. Desató las esposas de 01/2023
las muñecas de James. Puso el teléfono en las manos de James,
y pude ver por la mirada de reconocimiento en el rostro del otro
hombre que era con quien habían estado trabajando.
—¿Cómo obtuviste esto de Silas? —Exigió James.
Esa pregunta pareció irritar a Malcolm, y me di cuenta de que
estaba a punto de arremeter cuando me miró y lo pensó mejor.
—Haz la llamada, James.
James apretó la mandíbula, mirándome como si me suplicara
que hiciera algo. Lo más desconcertante fue que tuve la
sensación de que no era en su propio nombre.
¿Estaba cometiendo un error? No había una maldita respuesta
correcta, ninguna guía para esta mierda. Tenía que aceptar la
palabra de un monstruo u otro, pero no importaba lo que me
dijera mi corazón, no podía arriesgarme a no escuchar a mi
cabeza.
Y mi cabeza dijo que me fuera con el Diablo que conocía. No
el Demonio que tenía un control antinatural sobre mí, lo que
probablemente era una prueba más de que Malcolm tenía
razón, de todos modos.
—Bien —dijo James, mirando a Malcolm. —Pero la sangre del
niño está en tus manos.
El hecho de que se dirigiera a Malcolm en lugar de a mí era a
la vez frustrante y preocupante.
—Haz. La. Llamada —dijo Malcolm entre dientes.
James miró la pantalla y abrió algún tipo de programa,
150
escribiendo un código. Oí sonar el teléfono y vi aparecer el
reflejo de James en la pantalla. Una videollamada.
Las probabilidades de que Lewis realmente respondiera 01/2023
parecían escasas o nulas cuando Malcolm arrebató el teléfono
de las manos de James y esperó.
Para mi asombro, un hombre que supuse que era Lewis
apareció en la pantalla. No era exactamente lo que esperaba. Era
pulcro, aunque al estilo mafioso. Tenía cabello claro y ojos azul
claro, y no aparentaba más de cuarenta años.
No era el repugnante espeluznante que esperaba, pero
debería haberlo sabido mejor que eso. Por lo general, los peores
monstruos eran hermosos. Era mucho más fácil para ellos
esconderse a simple vista de esa manera.
—Ahora esto es una sorpresa —dijo la voz familiar de Lewis a
través de los altavoces. —¿A qué debo el placer?
—Déjate de gilipolleces, fenómeno —dijo Malcolm, siempre
diplomático. —Terminamos de jugar tu juego y perder el
tiempo. Ahora, puedes jugar el mío. Tengo algo que quieres
aquí—. Extendió la mano para tomar el hombro de James y lo
arrastró hacia su lado para que fuera visible en la pantalla del
teléfono.
Johnny se acercó para poner sus manos sobre los hombros de
James y me tensé instintivamente cuando vi a Malcolm lanzar un
fuerte gancho de derecha a la mandíbula de James, dejándolo
helado por un momento. Esta vez, no había nada que pudiera
hacer sin arriesgarme a que Lewis pensara que había una
debilidad que podía explotar entre nosotros.
Lo hecho, hecho estaba, y ahora tenía que vivir con las
consecuencias.
151
Hijo de puta.
James se tambaleó para ponerse de pie, apenas capaz de
mantenerse en pie. Sangre oscura goteaba de sus labios. 01/2023
—Algo me dice que quieres a este hijo de puta vivo —dijo
Malcolm. —Y estoy más que feliz de dártelo, tal como lo
pediste. Pero no jodas más. Ven a buscarlo dentro de la próxima
hora, y no finjas que tú y tus hijos de puta no han estado
arrastrándose todo el tiempo sobre Boston estas últimas
noches, porque ambos sabemos que eso es una tontería, o
puede que no te quede nada para coleccionar. La elección es
tuya.
—Y aquí pensé que estaba tratando con hombres
competentes —dijo Lewis, su voz goteaba condescendencia y
molestia más que ira genuina.
—Una hora, Capello —reiteró Malcolm. —Algo me dice que
sabes exactamente dónde encontrarnos, pero lo puse fácil.
Revisa el teléfono y haz lo que tengas que hacer para llegar
aquí. O no lo hagas. Es más divertido para mí de esa manera.
Tan pronto como colgó, me lancé, empujando a Malcolm en
el pecho tan fuerte como pude. De hecho, se tambaleó hacia
atrás, lo cual fue una sorpresa.
—¿Estás jodidamente loco? —Escupí. —¡Ese no era el plan!
—Mi juego, mis reglas —dijo Malcolm, empujándome hacia
atrás. —De nada, por cierto. Puedes esperar para agradecerme
hasta que él llegue.
Antes de que pudiera responder, el sonido de una risa nos
interrumpió. Miré para encontrar a James, que se había
derrumbado contra la barandilla a lo largo de la parte superior
152
de la pared, desplomado con los hombros temblando en lo que
parecía ser una risa genuina.
—Maldito tonto —dijo, sacudiendo la cabeza. 01/2023
Malcolm lo golpeó tan fuerte que me di cuenta de que lo
había dejado sin aire, y Malcolm iba a darle otro golpe cuando
lo agarré por el hombro, arrastrándolo hacia atrás.
—Dije que es suficiente —gruñí, muy consciente de que los
demás nos estaban mirando.
Chuck y Johnny especialmente. No sabían qué hacer ahora
que dos de sus líderes estaban peleando. Como el segundo
mayor de la familia y descendiente directo de nuestro anterior
Don, mi autoridad prevalecía sobre la del marido de Valentine,
al menos en teoría.
Sin embargo, sabía mejor que pensar que siempre funcionaría
así en la práctica, incluso si los hubiera conocido de toda la vida,
y Malcolm todavía era técnicamente un extraño.
 Antes de que pudiéramos saber en qué dirección soplaría el
viento, escuché el sonido de un motor en la distancia. ¿Un
barco?
No, un maldito helicóptero.
—Mierda —murmuró Chuck, sacando su arma de la funda en
su cadera. —Estaban cerca.
—Esa es la idea, imbécil —dijo Malcolm, claramente no
abierto a ninguna crítica del plan.
¿Qué más había de nuevo?
Había un bote atravesando el agua más adelante a una
velocidad vertiginosa, así que preparé mi propia arma y estiré el
brazo para ayudar a James a ponerse de pie.
153
—Llévalo al refugio —ordenó Malcolm, a pesar de que ya
estaba en camino.
Una vez que estuvimos dentro del edificio al lado de los 01/2023
muelles, empujé a James detrás de la pared en la línea media de
estanterías que al menos nos proporcionarían algo de cobertura
antes de encontrar un hueco en las tablas de madera que
tapaban una ventana por la que podía mirar.
Podía ver el agua en sí, pero todavía no había disparos, lo cual
era una buena señal. Probablemente.
—Llama a Silas —dijo James, mirándome.
Ya se le había formado un moretón en la mandíbula, donde
Malcolm lo había golpeado. La vista hizo que mi estómago se
revolviera por varias razones, pero tuve que dejar todo eso de
lado por el momento. Si no mantenía la cabeza, ninguno de
nosotros saldría vivo de esto.
—Cállate —murmuré por lo bajo, incluso mientras me
preguntaba si tenía razón.
 Me esforcé por ver mejor a la figura de pie en el extremo del
bote. Al principio, pensé que podría ser Lewis, pero me di
cuenta de que solo era alguien que se parecía vagamente a él.
Entonces lo vi levantar su rifle y los disparos comenzaron desde
todos los lados.
—Mierda —murmuré, agarrando a James para obligarlo a
bajar la cabeza. Una vez que estuvo cubierto, disparé a través de
los listones de la ventana y me agaché de nuevo. Me tapé los
oídos cuando el áspero sonido de latigazos de las palas del
helicóptero se acercaba y la choza temblaba a nuestro
alrededor.
—Sí, excelente trabajo —dijo James. —Este es realmente un
154
plan ingenioso.
—¿Te callarías? —Gruñí, disparando a otro de los hombres de
Lewis. Disparé, pero no había manera de saber si era fatal antes 01/2023
de que me obligaran a ponerme a cubierto de nuevo.
—Si quieres vivir, quítame las esposas y dame el arma. Eres un
tirador terrible —dijo James intencionadamente.
Lo miré por encima del hombro.
—No te voy a dar la puta pistola —le dije entre dientes, pero
le quité rápidamente de las esposas.
Disparé de nuevo, y la última vez que eché un vistazo por la
ventana, pude ver que al menos Johnny y Malcolm todavía
estaban vivos.
Malcolm tenía razón en una cosa: Lewis no había tenido
tiempo de reunir un ejército. Lo habíamos pillado con la guardia
baja y estaba lo bastante desesperado como para venir e
intentar atrapar el anzuelo.
 Simplemente no lo suficientemente desesperado como para
aparecer él mismo.
Estaba apuntando a otro de los hombres que se había bajado
del bote cuando sentí un ligero movimiento a mi lado y me di la
vuelta para encontrar que James había sacado la otra pistola de
la funda debajo de mi chaqueta mientras yo estaba distraído. La
levantó y apuntó, y me congelé, llena de una miríada de
emociones encontradas.
Miedo. Enojo. Arrepentimiento.
Y, lo más absurdo de todo, la traición.
James movió el arma para disparar justo por encima de mi
cabeza, y me di la vuelta a tiempo para ver a un hombre que ni
155
siquiera me había dado cuenta de que había entrado
sigilosamente en el edificio golpeando el suelo.
James bajó el arma ligeramente, sus ojos adquiriendo una 01/2023
frialdad familiar. Mientras estaba allí, mirando como un maldito
idiota, ni siquiera me atreví a hacer nada.
—De nada —murmuró antes de pasar junto a mí y salir por la
puerta por donde había venido el otro hombre.
—¡Oye! —Grité, corriendo tras él. —¡Espera!
Antes de que pudiera seguirlo, hubo un impacto de algo que
golpeó el exterior de la choza, y lo siguiente que supe fue que
estaba volando por la habitación, con destellos de luces rojas y
amarillas cegándome.
Mi cabeza golpeó el suelo y me desmayé.
Cuando volví en mí, algo que realmente no esperaba que
sucediera en absoluto, mis oídos zumbaban y todavía había
destellos de luz en mis ojos. Me las arreglé para levantarme
sobre mis manos y rodillas, luego sobre mis pies,
tambaleándome a través de los escombros del edificio.
Había un brazo sin cuerpo sobre una caja vacía y otro cuerpo
al otro lado de la habitación, y no tenía idea de a quién
pertenecía.
Tropecé afuera. El humo me ahogaba los pulmones y no podía
dejar de toser. Todavía tenía mi arma, de alguna manera,
aunque no recordaba haberla vuelto a agarrar.
Afuera, el aire realmente no era mucho mejor. Apenas podía
ver a través del humo, pero escuché la voz de Chuck en alguna
parte y vislumbré a Johnny, inconsciente en el borde de los
muelles. Antes de que pudiera acercarme a él, escuché el clic de
156
un arma y me giré para encontrar a un hombre que no reconocí
mirándome fijamente, apuntándome a la frente.
—¿Dónde está? —Él demandó. —Demon. 01/2023
Levanté mis manos de mala gana, mi dedo en el costado del
arma en lugar del gatillo. Sabía que la respuesta a esa pregunta
era lo único que me mantenía con vida en este momento, ya
que todavía estaba luchando por pensar.
—Dime dónde está tu jefe y yo te diré dónde está —le
contesté.
Los labios del hombre se curvaron en una sonrisa.
—No estás realmente en ninguna posición para estar
negociando en este momento, ¿verdad? —Desafió.
Tenía razón, por supuesto.
Antes de que pudiera responder, escuché el sonido de un
motor en la distancia y llantas rompiendo la tierra. Cuando un
elegante auto deportivo negro se estrelló contra el hombre
frente a mí, matándolo en el impacto, mi cuerpo se congeló en
estado de shock.
Cuando el auto se detuvo y la puerta del lado del pasajero se
abrió, saqué mi arma, listo para defenderme hasta que vi quién
estaba en el asiento del conductor.
—¿James?

157

01/2023
 20

LUCA

—Entra —ordenó James, empujando la puerta para abrirla

158
desde el otro lado del auto. La sangre empapaba el frente de su
camisa en su lado derecho, y había más en su rostro, aunque era
difícil decir de quién era. 01/2023
Por qué no estaba agregando la mía a la paleta era un
misterio, mi cerebro conmocionado estaba demasiado confuso
para reconstruirlo. Por qué me estaba salvando era otro.
Salté al asiento del pasajero y cerré la puerta detrás de mí
cuando la ventana trasera explotó en otro repiqueteo de
disparos.
—Mierda —siseé, agachándome para cubrirme la cabeza.
James salió de los muelles como si no fuera gran cosa. Otro
viernes más para él. Por otra parte, era un asesino en serie y el
antiguo aprendiz de Silas, por lo que probablemente lo fuera.
—Deja de ser tan cobarde —murmuró. —Estás actuando
como si fuera la primera vez que te disparan.
—No es la primera —espeté. —Simplemente no es algo
habitual.
 —¿Tienes tu arma?
Revisé debajo de mi chaqueta solo para asegurarme de que
todavía estaba allí.
—Sí, ¿por qué?
—A nuestra izquierda —respondió, dando un giro brusco que
me arrojó contra la puerta. —Apunta a los neumáticos y, por el
amor de Dios, ponte el maldito cinturón de seguridad.
—Correcto —murmuré, dándome la vuelta. Disparé a través
del parabrisas trasero roto unas cuantas veces antes de golpear
la llanta delantera derecha, y el auto salió dando vueltas,
golpeando el costado del edificio más cercano.
Volví a mi asiento y me abroché el cinturón.
159
—Mira eso —dijo James secamente. —Casi pensarías que eres
un hombre de la mafia.
Lo fulminé con la mirada, pero teniendo en cuenta que 01/2023
acababa de salvarme la vida, no podía estar demasiado enojado.
Lo que planteó una pregunta pertinente.
—¿Por qué diablos hiciste eso? —Pregunté. —Podrías haberte
escapado.
—Se me ha pasado por la cabeza —dijo, manteniendo los ojos
en la carretera. Sonaba vagamente molesto, pero no estaba
seguro si era consigo mismo o conmigo. —Tal vez solo quería
salvarte para mí.
Viniendo de él, esas palabras deberían haber sido
escalofriantes. Desafortunadamente, no lo fueron.
—Bueno, cualquiera que sea tu razón... gracias.
—No me des las gracias todavía —dijo, mirando por el espejo
retrovisor. —Tendremos suerte si salimos vivos de esto, y
gracias a tu cuñado, las negociaciones se reiniciaron a cero.
 —Sí, lo sé —dije con amargura. Yo también tenía mucho de
qué culparme. —Debería haber sabido que Lewis no estaría allí.
—Deberías haberlo hecho —estuvo de acuerdo James. —Creo
recordar que te lo dije. Y, sin embargo, elegiste creerle a
Malcolm.
—Lo sé —dije entre dientes. —Lo siento, ¿de acuerdo? La
cagué. Lo entiendo, y sé que no tengo derecho a pedirte esto, ni
siquiera tengo ninguna influencia en este momento, pero por
favor... ayúdame a recuperar a Timothy. Haré lo que sea
necesario, solo por favor, no te rindas.
—¿Quieres dejar de rogar? —Murmuró, haciendo una mueca.
—Si hay algo que no soporto, es la desesperación.
160
—¿Lo harás, entonces? —Pregunté esperanzado.
Entrecerró los ojos, mirándome por un segundo antes de
volver a concentrarse en la carretera. 01/2023
—Si te ayudo, no es por ti —dijo. —Es porque sucede que se
alinea con mi asunto pendiente con la familia Capello, y porque
hay un niño inocente involucrado que no merece morir solo
porque su padre y su tío son unos malditos idiotas.
—Bastante justo —dije.
—Y hay condiciones —agregó.
Suspiré. Por supuesto que había.
—¿Qué deseas?
—Harás lo que te diga —dijo con firmeza. —Sin excepciones.
Sin dudas. Sin preguntas.
Me sorprendió que eso fuera todo lo que quería.
—Está bien. Puedo estar de acuerdo con eso.
No dijo nada durante unos minutos, y cuando finalmente
habló, su voz era baja.
 —No podemos involucrar a los demás. Como has visto por ti
mismo, no se puede confiar en el juicio de Malcolm, y Silas
claramente no puede controlarlo.
—Sí —dije. —No hay argumento allí.
—Estamos solos —añadió James deliberadamente. —Así es
como tiene que ser. Si no te gusta, me detendré ahora mismo y
puedes caminar a casa o a donde diablos quieras, pero si tienes
alguna idea mientras estamos afuera o Incluso piensas en
traicionarme de nuevo, te mataré. Y cuando salve a tu hijo, le
diré que su padre era un maldito idiota. ¿Tenemos un
entendimiento?
Lo miré por un momento antes de suspirar.
161
—Sí —respondí finalmente. —Lo hacemos.
Eso pareció satisfacerlo, al menos. Se estremeció de repente,
así que miré para ver si había algo más en el camino con 01/2023
nosotros, pero no lo había.
—¿Estás bien? —Pregunté con cautela.
—Estoy bien —dijo entre dientes.
—No te ves bien —le dije, mirando su costado. —¿Cuántas
veces te dispararon?
—Una vez —respondió. —Tal vez dos veces.
—¿Tal vez? —Repetí consternado. —¿No sabes cuántas veces
te dispararon?
—¿Quién hace un seguimiento de ese tipo de cosas? —
Preguntó. —Es tedioso. De cualquier manera, estaré bien.
—¿Estarás? —Pregunté dudoso. A mí también me alcanzaron,
pero la bala solo me había rozado el brazo, y aparte de unas
pocas costillas que se sentían rotas, no hubo mucho daño
duradero por lo que pude ver. —Porque ahora mismo, parece
que estás a punto de desangrarte al costado del camino.
—Si me detengo ahora, nos encontrarán —dijo.
No estaba seguro de si se refería a los hombres de Lewis o a
los de Malcolm, pero, de todos modos, tenía razón.
—Al menos déjame conducir.
Me di cuenta de que quería discutir, pero finalmente se
detuvo para cambiar de lado. Su modo de andar era irregular
cuando pasó junto a mí por el camino de tierra y entró por el
otro lado, pero supuse que, si todavía era capaz de pararse
sobre dos pies, eso era probablemente una buena señal.
En el momento en que volvimos a la carretera, James se
162
desplomó contra su asiento. Se quitó el cinturón y la camisa, los
arrugó para empujarlos contra la peor de sus heridas, luego se
envolvió el cinturón alrededor de la parte superior de la cintura 01/2023
tan fuerte como pudo antes de asegurarlo en su lugar.
No era lo ideal, pero supongo que era lo suficientemente
bueno por el momento.
—¿A dónde voy? —Pregunté.
—Simplemente ingresa a la autopista y toma la segunda
salida que veas —respondió. —Estamos haciendo una parada
rápida.
—¿Una parada? —Pregunté.
Antes de que pudiera decir algo más, me lanzó una mirada
venenosa.
—¿Qué dije sobre las preguntas?
—Correcto —murmuré. —Casi lo olvido.
Conduje más rápido, porque sin importar lo que dijera,
definitivamente no estaba bien. No había mucho que un cuerpo
pudiera soportar en su condición, y me encontré preocupado
por algo más que por mi propio bien.
Finalmente, apareció la salida, para mi infinito alivio.
—¿Dónde ahora? —Pregunté.
—Hay un almacén a media milla de aquí —respondió. —Te
diré cuándo tomar el giro.
Tan tentado como estaba de preguntar por qué diablos
íbamos a un almacén, no lo hice. Efectivamente, terminamos en
algún distrito industrial. Giré hacia el pequeño camino de tierra
cuando me señaló el edificio correcto.
—Estaciona junto al agua —ordenó.
Ni siquiera había notado el lago más allá del edificio,
163
separándolo de los otros almacenes en el distrito, pero obedecí.
James alcanzó la consola central y puso el auto en punto
muerto después de que estacioné. Salió y dio la vuelta detrás de 01/2023
él, y rápidamente lo seguí una vez que me di cuenta de lo que
estaba haciendo.
—Oye, no puedes empujar eso —espeté.
Dio un paso atrás, haciéndome un gesto para que lo hiciera.
—Adelante entonces, musculoso.
Suspiré. Deshacerse del auto probablemente no era una mala
idea, pero incluso si tuviera una caja negra para rastrearnos,
teníamos problemas más urgentes.
—Hay un rastreador dentro de ti —señalé.
—Por eso estamos aquí. Ahora date prisa y deshazte del auto.
No se molestó en dar más detalles, así que mantuve la boca
cerrada y empujé el auto hacia el lago. Se hundió mientras lo
seguía al interior del edificio, y me encontré preguntándome si
me estaba metiendo en una trampa. No es que necesitara poner
una. Podría haber dejado mi culo por muerto sin mover un dedo
si lo que realmente quería era deshacerse de mí, y ni siquiera lo
habría culpado.
El almacén estaba prácticamente vacío, pero había sábanas
blancas que cubrían lo que supuse que era maquinaria
abandonada. El lugar parecía haber sido una fábrica textil o algo
así en algún momento, y no faltaban los molinos antiguos en la
región, la mayoría de ellos ubicados junto al agua para la
escorrentía. Esta área no era lo suficientemente elegante como
para que la mayoría de ellos se convirtieran en lofts caros.
Las paredes estaban hechas de metal grueso y pesado, y
aunque me había deshecho de mi teléfono hace mucho tiempo,
164
tenía serias dudas de que hubiera tenido señal de todos modos.
—Es una zona muerta —dijo James, como si leyera mis
pensamientos. 01/2023
—¿Eso evitará que rastreen el chip? —Pregunté.
—No para siempre, pero sin duda ayudará —respondió,
caminando hacia un conjunto de escaleras de metal endebles
que conducían al desván superior. Lo seguí, observándolo
mientras se acercaba para investigar una de las tablas del piso
donde faltaba un trozo. Metió la mano en la tabla astillada y le
dio un fuerte tirón, haciendo una mueca cuando toda la tabla se
levantó.
Observé mientras sacaba una bolsa de lona negra y empezaba
a recoger las cosas de dentro, junto con algo que se parecía
mucho al equipo de campo de Val.
—¿Esta es tu casa segura? —Pregunté dudoso.
—Una de ellas —dijo. —Y solo será útil por otros quince, tal
vez veinte minutos como máximo, así que ven aquí y sé útil.
 —La medicina de campo realmente no está en mi repertorio
—admití, aunque probablemente debería haberlo estado
después de toda la mierda que había pasado en los últimos dos
años.
—Solo haz lo que te digo y estará bien. Probablemente —dijo,
sacando un bisturí del juego enrollado en el kit. Me lo entregó y
se sentó en el suelo con las piernas cruzadas, apartándose el
pelo de la nuca. —Tienes que quitarme el implante.
Miré el bisturí, luego a él.
—¿No deberíamos estar más preocupados por las balas?
—Malcolm probablemente esté tratando de rastrearnos
mientras hablamos —dijo deliberadamente. —Asumiendo que
165
Silas no está tratando de matarlo por joder con el plan. Cuento
con eso para comprarnos un par de minutos más, en realidad.
¿Y qué dije sobre las preguntas? 01/2023
—Cierto —murmuré, sentándome a su lado. Puse mi mano
izquierda en su hombro y vacilé. —¿Dónde está? ¿Cómo lo saco
sin quitar el collar?
—Con cuidado —respondió James. Extendió la mano detrás
de su espalda y palpó a lo largo de la parte superior de sus
hombros, sus dedos dando vueltas alrededor de un punto justo
debajo del cuello. —¿Sientes eso?
Toqué el lugar donde estaba su mano, pasando mis dedos por
su piel hasta que pude sentir el objeto elevado debajo de su
carne.
—Sí, lo siento.
—Bien. Corta alrededor de media pulgada de profundidad
justo debajo y saldrá —me dijo.
 —Va a doler —dije, a riesgo de decir lo completamente obvio.
—¿Quieres algo para morder, o…?
—Solo hazlo o lo haré yo mismo —ordenó.
Apreté la mandíbula, tratando de superar la repulsión que
claramente él no compartía. Corté su carne, un poco superficial
al principio, y antes de que pudiera morderme, profundicé más,
abriendo una herida de aproximadamente media pulgada de
profundidad y tres cuartos de pulgada de ancho. La sangre
goteaba de la herida, corriendo por su espalda en riachuelos.
—Eso es suficiente —dijo. —Ahora aplica presión a cada lado
del corte.
—Supongo que has hecho esto antes —murmuré, haciendo lo
166
que dijo.
—Muchas veces. A Silas le gusta tener copias de seguridad —
dijo. 01/2023
Hice una mueca cuando una astilla salió de la herida, del
tamaño de dos granos de arroz. Dejé caer el chip ensangrentado
al suelo y usé mi manga para aplicar presión a la herida.
James ni siquiera emitió un sonido, incluso si su respiración se
entrecortaba ligeramente. Ya estaba concentrado en la herida
de su costado, y mi estómago se revolvió cuando lo vi cavar en
el agujero abierto en su carne con un par de fórceps.
—¿Puedo simplemente…?
Antes de que pudiera terminar ese pensamiento, algo que
sonaba como metal chocó contra el suelo y él respiró
audiblemente aliviado.
—Lo tengo de una pieza.
—Suerte, supongo —dije, encogiéndome mientras estudiaba
la bala ensangrentada en el suelo. Observé mientras se cosía a sí
mismo durante los siguientes minutos antes de desechar los
implementos usados y volver a colocar el resto en el set. Volvió
a colocarlo en la bolsa y cerró la cremallera.
Tomé la bolsa de él antes de que pudiera ponerla sobre su
hombro.
—Sé que eres como un cyborg insensible o lo que sea, pero al
menos trata de tomártelo con calma —supliqué.
Puso los ojos en blanco y comenzó a bajar las escaleras. Lo
seguí hasta uno de los grandes objetos cubiertos al otro lado de
la habitación y él asintió.
—Ya que estás de humor caballeresco, sácala.
Agarré el borde de la lona de tela y la arranqué, revelando la
167
brillante motocicleta gris y negra debajo.
—Realmente mantienes este lugar abastecido, ¿no? —
Pregunté. 01/2023
—Hay ropa detrás de esa máquina —dijo, asintiendo hacia
adelante.
Efectivamente, había otra bolsa de lona llena de ellos. Estaban
lo suficientemente cerca de mi talla, así que me puse un par de
jeans limpios y una camisa negra que no estaba cubierta de
sangre antes de entregarle una muda de ropa limpia a James,
junto con mi camisa vieja para que pudiera limpiarse un poco.
—¿Sabes conducir una de estas? —Preguntó, sacando algo
del compartimiento en la parte trasera de la motocicleta. Me
arrojó un juego de llaves.
—Por supuesto que sé conducir una motocicleta —dije,
subiendo y arrancando el motor. —Sin embargo, esto va a ser
duro para ti.
 —Probablemente —estuvo de acuerdo, subiéndose a la
motocicleta detrás de mí. —Trata de no chocar contra ningún
bache.
—Esto es Nueva Inglaterra. Todo el estado es un bache
gigante puntuado por breves parches de cemento.
Él gruñó en reconocimiento y esperé hasta que envolvió sus
brazos alrededor de mí por detrás para comenzar. Salí del lote
detrás del almacén, tratando de evitar cualquier hoyo
importante en el camino de tierra, lo cual era más fácil decirlo
que hacerlo.
—Súbete a la Interestatal —me dijo. —Conduce hasta que no
puedas más. O hasta que me desmaye. Luego encontraremos un
168
lugar para pasar la noche y reagruparnos.
—Eso es realmente tranquilizador —dije secamente.
El hecho de que acababa de ver a un hombre tratar su propia 01/2023
herida de bala en un maldito almacén y no insistía en ir al
hospital, y eso no era ni siquiera una posibilidad remota, era
solo una prueba de lo que es el giro brusco que mi vida había
tomado últimamente.
James estuvo en silencio durante horas mientras conducía, y
de vez en cuando, tenía que llamarlo por su nombre para traerlo
de vuelta a mí. Cuando sentí que su agarre se debilitaba
alrededor de mi cintura, supe que era el momento.
Encontré un motel en un pueblo pequeño e intrascendente en
el que había elegido parar. Para mi alivio, el empleado detrás de
la recepción estaba tan concentrado en la pornografía en la
pantalla de su computadora que apenas me dio una segunda
mirada antes de tomar mi dinero y entregarme la llave de la
habitación.
 James había accedido a esperar fuera, ya que cuantas menos
personas nos vieran la cara, mejor. Salí a su encuentro y lo llevé
a nuestra habitación en el segundo piso, en la que él había
insistido. Cuando vi lo inestable que estaba sobre sus pies, pasé
su brazo por encima de mi hombro para ayudarlo.
El hecho de que no se quejara de eso probablemente no era
una buena señal de cómo le estaba yendo.
—¿Estás bien? —Pregunté, aunque probablemente era una
pregunta bastante tonta.
El hecho de que no me lo dijera, definitivamente no era una
buena señal.
—Estoy bien —dijo, con la voz tensa.
169
Abrí la puerta de la habitación del motel, tratando de no
pensar en lo enfermo que me sentía.
Había tantas cosas que ni siquiera había tenido tiempo de 01/2023
procesar ya que todo se había ido abajo. Estaba el miedo por mi
hijo que nunca se fue o incluso se desvaneció, ni por un
instante. Y ahora, había miedo por este hombre que apenas
conocía a mi lado. Todo lo que realmente sabía de él era que
era un autor intelectual criminal que tenía un recuento de
cadáveres demente.
Un cerebro criminal que me había salvado la vida. Uno en el
que tenía que confiar si alguna vez quería volver a ver a mi hijo
con vida.
Ayudé a James a meterse en la cama e inmediatamente se
derrumbó de lado.
—Te traeré algo de beber —dije, mirando alrededor hasta que
encontré una cafetera de mierda en la cómoda con unos
cuantos vasos de plástico al lado. Agarré uno y fui al baño a
verter un poco de agua. Sinceramente, me sorprendió que no
saliera marrón, considerando el estado general de este lugar.
No es que un almacén abandonado fuera un ambiente mucho
más estéril.
—Toma —dije, acercando el vaso a los labios de James, ya
que no parecía capaz de beber solo. Para mi sorpresa, me dejó
ayudarlo a beber y vació el vaso. —¿Cómo está tu herida? —
Pregunté, mirando los puntos frescos en su costado mientras
levantaba su camisa. Eso iba a dejar una gran cicatriz.
—Estaré bien —dijo con desdén. —No golpeó ningún órgano.
—¿Hay algo que pueda conseguirte? —Pregunté. Odiaba
sentirme inútil, y eso era algo que había tenido que tragar
170
mucho últimamente.
—Hay pastillas en esa bolsa —dijo, señalando la bolsa de lona.
—Claro —dije, acercándome para abrir la cremallera de la 01/2023
bolsa y hurgar en su botiquín médico. —Oh. Hay una pequeña
farmacia aquí. ¿Cuáles necesitas?
—Amoxicilina y oxicodona —respondió—. Dos de cada uno.
Busqué entre las botellas hasta que encontré las correctas,
sacudí las pastillas y me acerqué a ofrecérselas junto con un
vaso de agua fresca.
—Perdiste mucha sangre —le dije mientras se las tragaba—.
Sé que no confías en los demás, pero tal vez Valentine...
—No —dijo entre dientes. —Te lo dije, estoy bien. Solo
necesito descansar.
—Está bien —dije, levantando mis manos—. Yo vigilaré la
puerta.
No dijo nada mientras se recostaba de lado, cerrando los ojos.
 Me levanté para apagar las luces y moví la cortina para mirar
por la ventana, aunque no podía ver nada en la tranquila calle
de abajo.
Cuando me volví, James estaba inconsciente. Si no fuera por el
constante subir y bajar de su pecho, en el que me encontré
fijado intensamente durante las próximas horas, no habría sido
capaz de decir que estaba vivo.
Me hundí en la silla junto a la cama y puse mi arma en la mesa
a mi lado. Me incliné hacia adelante, enterrando mi cara en mis
manos y pasando mis dedos por mi cabello.
Qué maldito día.
171

01/2023
 21

JAMES

Abrí los ojos y me sorprendió gratamente descubrir que

172
todavía estaba vivo. Estaba igualmente sorprendido de que Luca
todavía estuviera despierto, a pesar de verse bastante exhausto
por derecho propio. 01/2023
—¿Qué hora es? —Pregunté, frotándome los ojos. Por
supuesto, este lugar ni siquiera tenía un reloj de noche.
Parecía que mi antiguo captor tenía el mismo gusto en los
moteles que en las parejas de por vida. Barato, basura y
totalmente temporal.
—Un poco después de las tres de la mañana —respondió. —
¿Cómo te sientes?
—Como la mierda —respondí, sentándome. La habitación
giró, pero se detuvo, así que ahí estaba.
—Te ves como una mierda, así que eso se comprueba.
Resoplé, levantándome de la cama. Luca saltó de su silla,
agarrándome por los hombros para estabilizarme, lo cual estuvo
bien, considerando el hecho de que mis piernas comenzaron a
fallar en el segundo en que mis pies tocaron el suelo.
 —Despacio —murmuró, ayudándome a volver al borde de la
cama. —No irás a ningún lado por un tiempo.
—No podemos quedarnos aquí —le dije.
—Seguro que no puedes volver a subirte a esa moto —le dije.
—Al menos déjame salir y encontrar algo más confiable.
—¿Más confiable? —Pregunté rotundamente. —¿Qué vas a
hacer, alquilar un coche con tu tarjeta de crédito?
—Por supuesto que no —murmuró, frotándose la nuca.
Rodé los ojos.
—¿Alguna vez has robado algo en tu vida?
—Sí, he robado mierda—. Parecía gravemente ofendido.
—¿En serio? —Desafié. —Déjame adivinar, el buen vecino
173
tenía un letrero que decía que tomes un dulce en Halloween, ¿y
tú tomaste tres?
—No soy Valentine —se burló. —Mi amigo Geo y yo robamos 01/2023
el auto de su padre cuando teníamos quince años. Y yo robé la
novia de Johnny una vez, si eso cuenta.
Negué con la cabeza.
—Ustedes realmente son los Walton de la mafia.
—Dice el hombre que mira ese programa.
—Bien. Hoy es tu día de suerte —le dije. —Hoy es el día en
que te enseño a robar un auto. Uno que no sea del mejor amigo
de tu papá.
Se encogió de hombros.
—Si te animas, iré a ver.
Lo miré inexpresivamente durante el tiempo suficiente para
que murmurara:
—Bien. No importa. Vámonos.
 Una vez que estuvimos afuera, miré alrededor del lote, no
entusiasmado con las opciones.
—Estaré bien en la moto por una distancia corta. Asumo que
vas a tener otro ataque de conciencia culpable si le robamos un
auto a alguien que lo necesita.
Lucas vaciló.
—Creo que preferiría que esto fuera más una cosa de Robin
Hood.
—Buen Dios —dije en voz baja, caminando hacia la
motocicleta y subiendo, sentándome para hacer espacio para el
santo.
Unos diez minutos después, estábamos en un
174
estacionamiento en la parte trasera de un complejo de
apartamentos. Estaba lleno de un número decente de autos que
no parecía que fueran a averiarse después de unas pocas horas 01/2023
en la carretera.
Saqué un rollo de cuero negro de mi chaqueta y saqué el slim
jim escondido dentro de una de las bolsas para tal ocasión.
Deslicé la delgada barra de metal entre la puerta y el marco, y se
abrió con bastante facilidad, pero cuando comencé a entrar,
Luca me bloqueó.
—Lo tengo —dijo, deslizándose en el asiento del conductor.
Abrió la consola y comenzó a cablear el auto con una facilidad
inesperada.
—Considérame impresionado —dije, subiendo al asiento del
lado del pasajero.
—Entonces, ¿a dónde? —Preguntó Lucas.
—Mi casa segura —respondí. —Necesitamos reagruparnos y
encontrar una manera de volver a ponernos en contacto con
Lewis lo más rápido posible. Mientras nos escondemos de tus
hermanos y sus psicópatas favoritos, obviamente.
—¿Cómo se supone que vamos a hacer eso? —Preguntó. —
Algo me dice que no tienes el número de Lewis en marcación
rápida.
—No, pero puedo transferir su número e interceptar sus
llamadas una vez que tenga mi equipo —le dije.
—¿Y estás seguro de que Silas no sabe nada sobre la casa de
seguridad?
—Si lo hubiera hecho, me habría matado hace mucho tiempo.
—Bien. —Luca se quedó en silencio durante unos minutos, lo
cual estuvo bien para mí. No estaba realmente de humor para
175
charlar.
Estaba tratando de no tomar la traición como algo personal,
considerando el hecho de que yo era un extraño y la vida de su 01/2023
hijo estaba en juego. Eso no significaba que no estaba enojado.
—¿Puedo hacerte una pregunta personal?
—Seguro. ¿Por qué no? —Me encogí de hombros. —No es
que este sea un viaje por carretera desde el infierno o algo así.
—¿Qué ves en él? —Preguntó—. Silas, quiero decir.
Lo miré, levantando una ceja. Esa fue una aclaración
innecesaria, si alguna vez hubo una.
—¿Realmente necesitas preguntarme eso cuando tu hermano
está casado con él?
—Oye, tampoco entiendo eso —dijo, levantando los dedos
del volante. —Pero Enzo es un tipo simple. Tú no lo eres.
Supongo que simplemente no veo qué tiene de atractivo un
sociópata megalómano que trata a todos menos a un puñado
parcial de personas que le importan como peones en un juego
de ajedrez.
—Pájaros de una pluma, supongo.
—Eso es una mierda —dijo, para mi sorpresa. —Sí, lo admito,
tú y Silas parecen lo suficientemente similares en la superficie,
pero no lo eres. No eres como él, o Malcolm. Mis hermanos
pueden haber sacado algún otro lado de ellos, pero ambos
son... vacíos. Fríos.
—Tú mismo lo dijiste —dije en un tono plano. —Soy un
asesino en serie.
—Sí, pero mataste pervertidos y monstruos —respondió Luca.
—Y algo me dice que no te despertaste un día y decidiste que
176
ibas a comenzar una nueva carrera atacando a la gente sin
razón.
—No me idealices, Luca —le dije, mirando por la ventana. — 01/2023
No soy un justiciero incomprendido.
—Tal vez no —admitió. —Pero tampoco eres el asesino
despiadado y a sangre fría que quieres que todos piensen que
eres. Al menos, eso no es todo lo que eres.
Me quedé en silencio, porque no estaba seguro de que me
gustara la dirección en la que se dirigía esta conversación. O
cómo responder a ella.
—¿Qué quieres, Luca?
—¿Qué quieres decir? —Preguntó.
—¿Qué estás tratando de sacar de esto? —Aclaré. —¿Es la
disonancia cognitiva? ¿Has estado jodiendo a tus hermanos por
enamorarse de los psicópatas durante tanto tiempo que no
puedes manejar el hecho de que podrías ser un hipócrita?
Porque si es eso, puedo asegurarte ahora mismo que tú en
realidad no te preocupas por mí. Ni siquiera estás interesado en
mí.
Me miró, frunciendo el ceño.
—¿Y qué te hace estar tan seguro de eso?
Tampoco esperaba que esa fuera su respuesta.
—Porque es verdad —respondí. —No eres gay. Ni siquiera
eres bisexual. Solo eres emocionalmente vulnerable y soy
excelente para manipular a la gente.
—¿Manipular? —Repitió. —¿Entonces eso es lo que era? ¿Solo
me estabas manipulando para que te follara? ¿Por qué te
molestarías en hacer eso?
Me encogí de hombros.
177
—Tal vez estaba aburrido. Y tal vez parecía algo que podría
funcionar a mi favor, eventualmente. Habría habido una
oportunidad de escapar, tarde o temprano. 01/2023
Luca apretó la mandíbula y comenzó a conducir un poco más
rápido, aunque estaba seguro de que no se dio cuenta.
—Eso también es una mierda.
—Lo que sea que necesites decirte a ti mismo.
—Lo mismo para ti —respondió. —Porque creo que eres tú
quien está luchando con un poco de 'disonancia cognitiva'.
—¿Y cómo te das cuenta de eso? —Pregunté con un suspiro
aburrido.
—Porque cometiste un error —respondió. —Creo que
cometiste un desliz y te permitiste ser demasiado vulnerable.
Creo que te permitiste ser humano, aunque sea por un
momento, con alguien que te traicionó, y eres tú quien no
puede manejar eso.
 Solté una risa seca que sonó más amarga de lo que quería
admitir.
—¿Es eso lo que pasó? —Me burlé. —Vaya, piensas muy bien
de ti mismo.
—¿Me equivoco? —Desafió.
—Lo haces, de hecho —le dije. —Pero en realidad no importa.
—Supongo que me equivoco acerca de por qué amas a Silas
también —dijo. —Porque estaba empezando a tener una teoría
sobre eso.
—Estás empezando a aburrirme.
—Creo que lo amas porque es la primera persona que te hizo
sentir necesario —continuó, ignorándome. —La primera
178
persona que te hizo sentir que importabas, aunque solo fuera
porque quería usarte.
—Cállate —siseé, mi voz saliendo más venenosa de lo que 01/2023
pretendía. —No sabes de lo que estás hablando.
—¿No? —Desafió. —Porque estoy bastante seguro de que es
por eso que estás tan enojado. Y tal vez tengas razón. Tal vez
eres bueno manipulando a la gente. Pero conozco a Silas desde
hace suficiente tiempo para saber que es mejor en eso. Y yo NO
estoy diciendo nada de esto para joderte, porque sé lo que es
eso. Sé lo que es pensar que significaste algo para alguien, solo
para descubrir que solo te estaban usando. Así que confía en mí.
Lo entiendo.
—No entiendes nada —respondí. —¿Crees que sabes cómo
me siento porque tu novia de la infancia te dejó? ¿Porque tu
papá era malo? No tienes idea de quién soy o por lo que he
pasado, y seguro que no sabes qué siento.
 Luca se quedó en silencio por unos momentos, sus nudillos se
pusieron blancos en el volante.
—Tal vez no —dijo finalmente, su voz más tranquila. —Pero sé
lo que es sentir que nadie te comprende. Sé lo que es estar solo,
y solo intento decir... no tienes que estarlo. No si no quieres.
Me reí.
—Luca DiFiore me va a salvar de mí mismo. Qué pintoresco.
—Yo nunca dije eso —dijo. —Y no estoy... diciendo que soy
gay o bi o lo que sea. O que estaría listo para una relación,
incluso si lo fuera. Pero no importa lo que pienses, me preocupo
por ti. Y lamento lo que pasó. Lamento haberte entregado a
Malcolm. Fue un error en un montón de niveles.
179
—¿Sigues con eso? —Pregunté. —Dios, debe ser agotador
aferrarse a la mierda todo el tiempo. Sentirse culpable.
—Mira, me estoy disculpando, ¿de acuerdo? —Preguntó. — 01/2023
Puedes tomarlo o dejarlo.
—Lo que sea. —Suspiré. —Es agua debajo del puente. La
gente hace cosas estúpidas por amor.
Lo sabía mejor que nadie.
—Sí —dijo en voz baja. —Supongo que lo hacen.
No hablamos durante el resto del viaje, lo cual fue ideal para
mí. No necesitaba más de la psiquiatría del asiento del
conductor de Luca.
Sin embargo, el hecho de que sus palabras siguieran
arrastrándose bajo mi piel todo este tiempo me dio motivos
para preguntarme si tenía razón. Al menos sobre algo de eso.
 22

LUCA

Manejamos por lo que pareció una eternidad antes de que

180
finalmente llegáramos a la casa segura de James en las
montañas. Parecía estar mejor, al menos. Era tan robusto
físicamente como lo era mentalmente, a pesar de no parecer la 01/2023
persona más robusta.
—Entonces —dije, mientras cargaba su bolsa de lona en la
cabaña pequeña pero cómoda. —Ya que no me vendaste los
ojos en el camino aquí, ¿eso significa que confías en mí? ¿O que
planeas matarme?
—Ninguno —respondió, dirigiéndose directamente a la
chimenea al otro lado de la habitación. Hacía bastante frío, así
que supuse que iba a tirar un leño o algo así, pero en lugar de
eso, movió una especie de pestillo detrás de la repisa de la
chimenea y todo se abrió, revelando un pasadizo secreto detrás
de la chimenea.
Por supuesto.
—Significa que la casa segura será inútil después de esto —
continuó.
 Oh. No esperaba eso.
—Santa mierda —murmuré. —¿Es esta tu guarida subterránea
o algo así?
—Una de ellas —dijo sin una pizca de ironía, desapareciendo
en la oscuridad.
—Oye, espera —llamé, dejando caer la bolsa de lona para
seguirlo.
Accionó otro interruptor en la pared. Las luces LED que se
extendían por la parte superior del techo de piedra se
encendieron una tras otra, iluminando un largo pasillo que
parecía no tener fin.
—Maldita sea —murmuré, mirando alrededor de las
181
instalaciones subterráneas. Había computadoras por todas
partes y un montón de monitores colocados a lo largo de una
pared. Había un pequeño laboratorio instalado en una esquina 01/2023
del espacio, y aunque parecía que no se había utilizado en
mucho tiempo, ni siquiera quería saber para qué era. —Esto se
parece a la cueva del hombre de Silas.
—La que tú conoces —se burló.
Bien, ahora iba a estar paranoico cuando volviera a casa. No
es que eso fuera algo nuevo.
—Esta es toda la configuración —le dije. —¿Tienes todo lo
que necesitas aquí?
—Sí —dijo, sentándose frente a una de las computadoras y
encendiéndola. Todas las pantallas cobraron vida de inmediato.
Todo el lugar parecía estar funcionando con un generador
separado que debe haberse activado cuando bajamos las
escaleras. Lo último. Pero eso realmente no fue una sorpresa,
considerando quién era James.
 Me quedé atrás, sintiéndome como un patán inútil mientras él
se ponía a trabajar.
—Correcto —dije, pasándome una mano por el pelo. —
Supongo que simplemente... subiré y veré si puedo encontrar
algo para que comamos.
—Mhm —dijo James distraídamente, todavía obsesionado con
la pantalla.
Tenía la sensación de que nadie me extrañaría mientras
hurgaba alrededor del edificio para obtener una disposición del
terreno. La cocina parecía sorprendentemente bien equipada, a
pesar de que todo era enlatado o estable. Era el paraíso de los
preparadores, incluido el búnker nuclear glorificado en el
182
sótano.
Cuando volví abajo un par de horas más tarde, no queriendo
distraer a James de hacer lo suyo, pero también incapaz de 01/2023
mantener a raya mi curiosidad nerviosa por mucho tiempo,
estaba justo donde lo había dejado.
—¿Algún progreso? —Pregunté.
—Un montón —respondió, sacando un teléfono que parecía
de los 90. Este lugar lo tenía todo. Probablemente una mierda
de la que ni siquiera quería saber. —Exporté tu número a todos
mis dispositivos. Ahora, solo tenemos que esperar a que él se
comunique con nosotros.
—Sí —dije. —Supongo que eso es todo lo que hay que hacer.
—Él no le hará daño a tu hijo —dijo James después de unos
momentos. —Lo que hizo Malcolm fue imprudente, y eso nos
hizo retroceder, pero Lewis no se dará por vencido tan
fácilmente. Él sabe que Timothy es su única moneda de cambio,
y lo único que evita que Silas destruya las montañas que está
tratando de despedazar en piezas en este momento. Él sabe que
Silas está evitando causar una avalancha que no importará en
absoluto si Lewis mata a su hijo.
Tragué saliva. El consuelo definitivamente no estaba en la
timonera de este tipo, pero sus palabras fueron tranquilizadoras
de una manera extraña, más aún por su franqueza. No estaba
tratando de calmar los sentimientos de un padre nervioso,
simplemente estaba diciendo la verdad, y eso me dio algo que
necesitaba desesperadamente.
Me dio esperanza.
Y en ausencia de poder hacer cualquier otra cosa, la otra cosa
que necesitaba urgentemente era una distracción.
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—Vamos —dije, asintiendo con la cabeza en dirección a las
escaleras. —Ya era hora de que comieras algo. Perdiste mucha
sangre y necesitas reponerla. 01/2023
—¿Eres mi médico ahora?
—¿Por qué no? —Pregunté. —Entre los dos, tenemos el
mismo número de títulos médicos.
—Touché —dijo secamente, siguiéndome escaleras arriba. A
mitad de camino, de repente hizo una mueca y se dobló,
agarrándose el costado.
—¿James? —Grité, alcanzándolo.
—Estoy bien —dijo entre dientes. —Solo mis puntos.
—Puedo llevarte —le ofrecí. Me lanzó una mirada fulminante,
así que agregué: —O simplemente podría ayudarte a subir las
escaleras.
A regañadientes, pasó un brazo por encima de mi hombro y
cambió más de su peso sobre mí mientras subíamos las
escaleras.
 —Listo. Agradable y despacio —le dije.
—No lo hagas —advirtió.
—¿No haga qué?
—No seas molestamente amable conmigo solo porque te
sientes como una mierda.
—¿Qué te hace pensar que me siento como una mierda? —
Pregunté.
Me dio una mirada.
—Por favor. Eres el segundo hijo de una familia católica
italiana que recientemente se folló a otro chico. Eres un
conjunto de dudas, vergüenza y problemas paternales en una
gabardina.
184
Gruñí.
—Sea como fuere, estoy tratando de ayudar.
—No necesito tu ayuda. Y ciertamente no necesito tu lástima. 01/2023
—Nunca dije que te compadeciera.
—No era necesario. Está en el letrero de neón que se desplaza
a través de tus ojos.
Suspiré, ayudándolo a sentarse en una silla en la mesa de la
cocina antes de sentarme frente a él.
—La mayoría de las latas estaban caducadas, así que hay
espaguetis y habas para la cena. Intentaré encontrar otras cosas
por la mañana.
—No te molestes. Haré que alguien haga las compras
mientras estemos aquí —dijo, dando un mordisco a la pasta.
Hizo una pausa, lo miró fijamente por un segundo, luego siguió
comiendo, lo que tomé como prueba de que era tan mal
cocinero como siempre había temido.
 —¿No es eso un riesgo? —Pregunté. Cuando siguió
mirándome, dije: —Sin preguntas… cierto. Perdón.
Continuamos comiendo en silencio, y recogí los platos una vez
que ambos terminamos.
—Puedes tomar la habitación arriba —dijo James cuando
terminé de limpiar. Se estiró como un gato mientras se
levantaba de la mesa. —Tengo una alarma configurada para que
suene en toda la cabaña si suena el teléfono, por lo que no hay
necesidad de preocuparse por perder la llamada.
—Oh —dije, ya que eso se dirigía a mi reacción instintiva a su
plan de separarse por la noche. Pero no cambió mi opinión. En
todo caso, estaba tan reacio a la idea como lo había estado
185
antes. —Simplemente no estoy seguro de que sea una buena
idea separarnos, ¿sabes? No contigo estando tan jodido. ¿Qué
pasa si pasa algo y vas cuesta abajo durante la noche? 01/2023
—¿Qué vas a hacer al respecto si lo hago? —Preguntó.
—Quiero decir, podría llamar a una ambulancia —dije.
Se burló.
—¿De verdad crees que es una buena idea? Estoy seguro de
que Malcolm tiene todas las placas del país buscándome en este
momento.
—Es una idea mejor que dejarte desangrarte —le dije. —E
incluso si no puedo hacer nada, todavía no me gusta la idea de
dejarte solo, ¿de acuerdo?
Esperaba que discutiera, y teniendo en cuenta que me miraba
fijamente, estaba seguro de que lo haría. En cambio, se encogió
de hombros y caminó por el pasillo.
—Bien. Haz lo que quieras.
Bueno, eso era mejor que nada.
 Mientras lo seguía al interior de la habitación, me sorprendió
gratamente su ambiente cálido y acogedor. Los edredones
hechos a mano que cubrían la cama, colocados dentro de un
marco de madera rústico, añadían un toque acogedor al
espacio. El candelabro hecho de astas que arrojaban un suave
resplandor desde el techo era un toque único. Debe haber sido
por eso que había sombras espinosas en todas las paredes.
—Bonita decoración —dije, entrando en la habitación. A
juzgar por el hielo en sus ojos cuando miró por encima del
hombro, pensó que lo estaba jodiendo. —No estaba siendo
sarcástico.
—Entonces estoy aún más insultado —dijo, extendiendo la
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mano para quitarse la camisa.
—Aquí, déjame ayudarte con eso —le dije, ayudándolo a
pasar el resto del camino por encima de su cabeza para que no 01/2023
tuviera que levantar los brazos.
Para mi alivio, no luchó conmigo. Por supuesto, eso podría
haber sido porque estaba demasiado cansado para pelear, pero,
aun así.
—Parece que duele —dije, mirando la herida de su costado.
—Está bien —murmuró, rozando sus dedos sobre el área
magullada debajo de los puntos—. Se curará. Pero debería
limpiarme más a fondo.
—Sí —dije, acercándome para abrir la puerta de lo que supuse
que era el baño. Encendí la luz y me di cuenta de que era más
grande de lo que esperaba. Había una bañera con patas en el
extremo más alejado de la habitación, así que fui a llenarla.
Por el rabillo del ojo, pude ver a James desvistiéndose el resto
del camino y resistí el impulso de mirar por alguna razón.
 —Vamos —dije, ofreciéndole una mano—. Te ayudaré a
entrar.
Los ojos de James se entrecerraron y pasó junto a mí,
entrando en la bañera. Por mucho que intentara evitarlo, mis
ojos se mantuvieron a la deriva para recorrer su cuerpo.
—¿Vas a quedarte allí mirándome? ¿O vas a entrar? —
Preguntó en su habitual tono seco.
Parpadeé. No lo había planeado, pero la invitación era más
tentadora de lo que quería admitir. Y me sentiría menos
espeluznante de lo que me sentía allí de pie, mirándolo.
Caminé hacia la bañera y James se movió hacia el centro,
dándome espacio para subir detrás de él. La bañera era bastante
187
grande, pero no tanto como para que dos hombres adultos
pudieran sentarse en ella uno al lado del otro sin tocarse. Me
quité la ropa y me hundí contra la parte posterior de la bañera 01/2023
antes de estirar la mano, tirando suavemente de él contra mí.
Para mi sorpresa, se hundió contra mi pecho, apoyando la
nuca en mi hombro.
—¿Estás bien? —Pregunté en voz baja.
—¿Por qué no lo estaría?
James siempre había tenido una manera de dejarme sin
palabras en la menor cantidad de palabras posible. Suspiré,
envolviendo un brazo alrededor de su cintura, con cuidado de
evitar su herida.
—Sin razón.
—Es cómodo —murmuró después de unos diez minutos de
no decir nada. Estaba recostado contra mí mientras yo me
encontraba contando los latidos de su corazón. Estaba mucho
más involucrado en la continuación de ese ritmo de lo que me
había dado cuenta hasta ese momento.
—¿Eh? —Pregunté.
—El agua. —Él suspiró. —Pasé horas en la piscina donde solía
vivir con Silas. Simplemente flotando, mirando a través de la
claraboya. Me encontró una vez y pensó que me había ahogado.
Soplé una bocanada de aire a través de mis fosas nasales.
—¿Qué hizo él?
No respondió de inmediato. Silas siempre fue un tema
delicado para él, incluso cuando vivíamos en la misma casa.
—Creo que sus palabras exactas fueron: 'Por el amor de Dios,
no en la piscina'.
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Me tomó un momento procesar la insensibilidad de eso.
—Sí. Suena como Silas.
—Parecía tan molesto —dijo James con una risa nostálgica. 01/2023
Pero también aliviado—. Eso es todo lo que siempre fui para él,
de verdad. En algún lugar entre un activo y un pasivo. Siempre
era solo cuestión de tiempo antes de que la balanza se inclinara
y no valiera la pena el gasto.
Puse mis brazos alrededor de él con más fuerza, y su corazón
latía más rápido a medida que su cuerpo se ponía más rígido.
Me incliné, mi nariz presionada en el lugar justo debajo de su
oreja, mientras respiraba.
—Por lo que vale, te mereces algo mejor que alguien que
pensó que te habías suicidado en su piscina y estaba levemente
incomodado.
—¿Yo? —Preguntó. —Porque creo que hay muchas personas
que no estarían de acuerdo contigo. Malcolm y su prometido
muerto incluidos.
 Me enfurecí al recordar el pasado no tan moralmente gris de
James. Él tenía razón, por supuesto. Sabía que había lastimado a
más personas que solo a los monstruos con los que había
comenzado. En el curso de la caza de los monstruos, él mismo
se había convertido en uno. Lógicamente, lo sabía, y tal vez
realmente fue la disonancia cognitiva lo que me hizo querer
creer que había una rima o una razón para su locura. Que había
algún propósito superior en sus oscuras acciones.
—¿Por qué lo hiciste? —Pregunté. —Todas las demás
personas… tiene sentido. Demonios, yo habría hecho lo mismo
si estuviera en tu lugar, pero Adam... era inocente.
—¿Lo era? —Preguntó aburrido.
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Lo miré.
—¿Qué quieres decir?
—Nada —dijo, poniéndose de pie para salir del agua y 01/2023
agarrando una bata que colgaba junto a la bañera antes de salir
de ella.
—Oye —dije, saliendo detrás de él. Lo seguí hasta el
dormitorio, dejando un rastro de agua cuando me detuve al
borde de la cama, donde él estaba retirando las sábanas para
entrar. —Detente.
—¿Detener qué? —Preguntó, tomando una de las almohadas
para ajustarla.
—Deja de desviar —gruñí, tomando su muñeca en mi mano.
—Deja de cerrarte cada vez que trato de hablar contigo.
—Estoy aburrido —dijo deliberadamente, mirándome hacia
abajo. —Deberías estar feliz. Por lo general, cuando la gente me
aburre, simplemente los mato.
Apreté los dientes, compitiendo por la paciencia.
 —Estás lleno de mierda, ¿lo sabías? Quieres que crea esto...
esta persona que has creado que es Silas 2.0, pero no lo creo.
—Te dije que dejaras de romantizarme, Luca —dijo con un
tono amargo en su tono.
—Hay una diferencia entre romantizar a alguien y tratar de
entenderlo —respondí. —Y no creo ni por un segundo que un
tipo que arriesgaría su propia vida para rescatar al hijo de un
extraño sea capaz de matar a un tipo inocente a sangre fría sin
una razón.
—Tenía una razón —dijo encogiéndose de hombros. —Quería
castigar a Silas, y antes de que apareciera tu hermano, la única
forma de hacerlo era a través de Malcolm. Para abrir una brecha
190
entre ellos tomando lo único que a Malcolm realmente le
importaba además de él mismo.
—Mierda —gruñí. —Tal vez eso fue parte de eso, pero eso no 01/2023
es todo. No coincide con tu modus operandi.
—¿Mi modus? —Preguntó rotundamente. —¿Y qué es eso?
—Justicia —respondí. —Nunca haces nada que no creas justo.
Y no digo que sea justo. No estoy diciendo que creas correcto.
Todo lo que digo es que, en algún lugar dentro de tu cerebro
increíblemente jodido, eres al menos moralmente consistente.
Entrecerró los ojos y me di cuenta de que había tocado un
nervio. Se apartó de mí.
—No quiero hablar de esto.
—Bueno, mierda dura, porque vamos a hablar de eso —le
dije, dando un paso adelante para que no tuviera más remedio
que volver a caer en la cama. Me subí a él, poniendo mis manos
sobre el colchón a cada lado de él para mantenerlo inmovilizado
sin ejercer ninguna presión física sobre él que pudiera agravar
su herida.
Una mirada peligrosa apareció en los ojos de James, pero
pude sentir que era miedo más que cualquier otra cosa. Él era
vulnerable en este momento, y lo sabía, y por mucho que yo
quisiera respuestas, no las quería a costa de hacerlo sentir
inseguro.
Extendí la mano, deslizando una mano en su cabello, y él se
congeló, mirándome con los ojos muy abiertos.
—Solo háblame, James —supliqué. —Por favor. Solo por esta
vez, sé honesto, incluso si es solo contigo mismo.
Continuó mirándome por unos momentos que se sentían
191
como si hubieran durado mucho más de lo que podrían haber
durado en realidad. Cuando finalmente habló, su voz estaba
desprovista de toda emoción excepto una: confusión. 01/2023
—¿Por qué eso importa?
Hice una pausa para considerarlo, porque esa era una buena
pregunta. ¿Por qué importaba por qué había hecho lo que había
hecho?
—Porque yo… —Luché por encontrar las palabras. —Porque
solo necesito saber. Necesito saber la verdad, tu verdad, incluso
si no es lo que quiero oír.
James frunció el ceño. Me di cuenta de que no esperaba esa
respuesta, y no parecía muy seguro de cómo responder. Cuando
finalmente lo hizo, su voz era tensa.
—Mató a alguien —dijo finalmente.
Parpadeé.
—¿Adam mató a alguien?
 —Tenía sólo diecisiete años —murmuró—. Había estado
bebiendo en una fiesta y golpeó a una chica de camino a casa.
Él no se detuvo y ella sufrió durante horas antes de sucumbir a
sus heridas. La policía lo localizó más tarde, pero su padre era
un abogado importante. Lo suficientemente importante y rico
para asegurarse de que Adam fuera juzgado como un menor. El
caso fue desestimado por algunas pruebas convenientemente
'faltantes'. Su registro fue sellado. Dudo que incluso Malcolm lo
sepa.
Lo miré por unos momentos, procesando.
—¿Así que por eso lo mataste?
—No —dijo James bruscamente. —Así es como me justifiqué
192
a mí mismo. Lo maté porque quería lastimar a Silas. Quería una
excusa.
—¿Y si no hubieras encontrado una? —Desafié. —¿Lo habrías 01/2023
hecho, entonces?
James no respondió por unos momentos. Continuó
mirándome fijamente, sus ojos taladrando agujeros en el centro
de mi frente porque se negaban a encontrarse con los míos.
—No lo sé —dijo finalmente entre dientes. —¿Por qué
importa?
—Porque lo hace, James —respondí. —Importa porque
significa que eres diferente. ¿Crees que Silas alguna vez necesitó
una razón? ¿Crees que Malcolm alguna vez necesita una excusa
para la mierda que hace? No eres como ellos, no importa
cuánto quieras creer que lo eres.
—¿Por qué te importa una mierda? —Gritó. —¿Por qué te
importa si soy como ellos o no?
 —¡Porque no quiero creer que me estoy enamorando de un
monstruo! —Rompí.
Las palabras salieron de mi boca antes de que pudiera
detenerme. Me congelé y lo miré fijamente, y él me devolvió la
mirada. Durante mucho tiempo, ninguno de los dos dijo una
palabra.
No estaba seguro de que hubiera algo que decir.

193

01/2023
 23

JAMES

Todo lo que pude hacer por unos momentos fue mirar a Luca
194
con incredulidad.
—Oh, pobre tonto —dije finalmente. —En realidad crees que…
Me interrumpí cuando Luca aplastó sus labios contra los míos. 01/2023
Alejarlo habría sido lo más inteligente. La cosa amable. Pero
yo nunca lo fui tampoco.
Me encontré devolviéndole el beso, mi lengua enredándose
con la suya, mi cuerpo envuelto en su calor. Me besó
agresivamente antes de morderme el cuello de repente como si
quisiera devorarme por completo. Su toque envió escalofríos
por mi espalda, y pude sentir un hambre insaciable creciendo
dentro de mí, un impulso que amenazaba con consumirnos a
ambos si lo permitíamos.
Las manos de Luca recorrieron cada pulgada de mi cuerpo,
explorando, acariciando y acercándome aún más. Me aferré a él
con fuerza, sintiendo como si estuviera siendo arrastrado hacia
un abismo de puro placer.
Era tan diferente en la cama. Tan demandante, tan agresivo.
 Y me gustaba. Me gustaba que el aburrido y seguro Luca
DiFiore tuviera un lado salvaje, tal vez incluso un lado oscuro, y
me gustaba aún más que yo fuera quien lo sacara de él.
Luca debe haber sentido mis pensamientos porque de
repente se apartó y me miró a los ojos. Su mirada era cálida y
primaria, algo salvaje acechando en las profundidades de sus
ojos que no había visto antes.
Se inclinó de nuevo, mordiendo con fuerza mi labio inferior
esta vez. Jadeé ante el repentino placer-dolor, sintiendo mis
rodillas debilitarse mientras él lamía el lugar para calmarlo.
Mi corazón latió más rápido cuando Luca se alejó por un
momento y abrió un cajón cercano. Me sonrió maliciosamente
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mientras sacaba un tubo de lubricante de él.
—Ah —dijo, su voz baja y mezclada con diversión. —
Preparados, ¿verdad? 01/2023
—No necesitas ser tan presumido. No es como si planeara
invitarte aquí —le recordé.
Él rio.
—No, supongo que no lo hiciste —dijo.
Se acercó y besó mi cuello, murmurando en mi piel.
—No me pongas celoso.
Me estremecí ante la sugerencia, sintiendo una oleada de
calor entre mis piernas. Luca debe haber sentido esto también,
porque sus manos recorrieron mi cuerpo con más urgencia
ahora. Sus dedos provocaban y tentaban mientras bajaban más
y más hasta que casi no pude soportarlo más.
El autocontrol no era algo que me hubiera faltado nunca, pero
cuando se trataba de él, me encontré sucumbiendo a todos sus
deseos.
 Continuó besándome, haciendo que mi cuerpo doliera por
más antes de que finalmente se detuviera y se alejara. Estaba a
punto de quejarme hasta que sentí sus dedos extendiendo el
lubricante alrededor de mi culo. Lo aplicó generosamente,
provocándome con los dedos como si supiera lo que quería
incluso antes que yo.
Sentí mi respiración atrapada en mi garganta cuando sus
dedos entraron en mí, explorándome y estirándome a medida
que se adentraban más. Su toque se sintió eléctrico contra mi
piel, enviando ondas de placer a través de todo mi cuerpo que
me dejaron temblando de anticipación.
—Siendo amables esta noche, ¿verdad? —Me burlé.
196
—Realmente no me has dado la oportunidad antes —me
dijo—. Pero puede que te guste.
En sus manos, estaba seguro de que lo haría. Pero no estaba 01/2023
listo para admitir eso más de lo que estaba listo para procesar
su pequeña declaración equivocada de amor.
Joder, podría manejarlo.
¿Amar? Eso era algo completamente diferente.
Ni siquiera estaba seguro de saber lo que era ser amado, y
mucho menos por alguien como Luca. Alguien bueno. Era un
pensamiento extraño.
Continuó preparándome, sus manos nunca dejaron mi cuerpo
mientras se movía detrás de mí. Sus dedos juguetearon y
tentaron, empujando más profundamente dentro de mí hasta
que pude sentir el placer, que era casi demasiado para soportar.
Se movió lentamente al principio, acariciando y explorando con
sus dedos hasta que yo estaba gimiendo y rogando por más.
 Su toque fue suave pero seguro mientras movía sus dedos
dentro y fuera de mí cada vez más rápido hasta que estuve al
borde de la liberación. Su otra mano presionó firmemente
contra mi cadera, estabilizándome mientras me balanceaba
contra él, enviando ola tras ola de placer a través de mi cuerpo.
Podía sentir que me tensaba con anticipación, una sensación
de hormigueo que irradiaba desde lo más profundo de mí que
prometía algo más por venir. Luca también debe haberlo
sentido, porque de repente sacó los dedos y jadeé en respuesta.
Se movió entre mis piernas, separándolas mientras se
preparaba para follarme. Sus ojos brillaban con deseo y
satisfacción al verme esparcido ante él.
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Habíamos follado antes, pero había algo en esta vez que era
diferente. Se sentía íntimo, y eso era lo único que parecía capaz
de sacudir mi confianza. 01/2023
Luca se inclinó más cerca, sus labios sobre los míos mientras
susurraba con voz grave:
—Eres mi primero y yo seré el tuyo.
Solté una risa seca contra sus labios mientras él se apretaba
contra mí, aplicando la presión suficiente para hacer que me
doliera el agujero sin llegar a penetrarme.
—Me temo que llegas un par de décadas tarde para eso,
mascota.
—Eres el primer hombre con el que he estado —continuó,
mirándome. —Y voy a ser la primera persona que te haga el
amor. Follar no cuenta.
Sus palabras me tomaron por sorpresa. Procedió a introducir
suavemente su polla dentro de mí, pulgada a pulgada, hasta
que me llené completamente de él. Se movió lentamente al
principio, meciéndose contra mí mientras creaba un ritmo que
me dejó jadeando y gimiendo de placer.
Sentí que mi cuerpo respondía a su toque, la tensión entre
nosotros se volvía más intensa con cada empuje y caricia. Sus
manos sujetaron mis caderas con firmeza mientras empujaba
más profundamente dentro de mí, y pude sentir que mi
orgasmo comenzaba a acumularse, retomando desde donde lo
había dejado.
Presionó sus labios contra los míos para tragarse un gemido,
su lengua exploró mi boca mientras continuaba cogiéndome
con pasión, pero con delicadeza, y me sentí tan vulnerable. Cada
golpe de sus caderas enviaba una ola de placer que irradiaba a
198
través de mi cuerpo mientras me aferraba a él, perdido en las
sensaciones que me provocaba.
Enterré mi cara en su cuello, porque no podía soportar que 01/2023
me viera la cara. No cuando me estaba costando tanto contener
lo que estaba sintiendo, y lo que estaba sintiendo era...
Confusión. Era vertiginoso, enloquecedor, pero también lo
consumía todo. Él estaba en lo correcto. Esto no era solo follar,
era algo más. Algo completamente diferente.
Algo que me asustó muchísimo, pero no quería que se
detuviera. No todavía.
Cuando se interpuso entre nosotros y comenzó a acariciar mi
polla, estaba seguro de que me rompería en un instante, pero
siguió adelante. Sus manos eran suaves pero firmes y su toque
era exquisito, como si estuviera adorando mi cuerpo con cada
caricia.
 Siguió follándome hasta que finalmente no pude soportarlo
más y mi orgasmo me inundó como un maremoto, dejándome
temblando y vibrando a su paso.
Luca siguió acariciando mientras los chorros de semen se
deslizaban entre sus dedos, su toque exquisito y, tortuosamente
suave. Como si no estuviera simplemente tocando a un amante,
sino tocando un instrumento, y cada caricia extraía de mí nuevas
notas de placer.
Me capturó con otro beso y finalmente soltó mi polla cuando
la sensación se volvió demasiado. Comenzó a empujar más
fuerte, más rápido, y disfruté de las placenteras réplicas del
orgasmo, su pene presionaba contra mi próstata cada vez que
199
entraba en mí. Era tortura y pura felicidad.
Podía sentir a Luca estremecerse dentro de mí mientras me
seguía por el borde. La sensación de que él se corriera me llenó 01/2023
de satisfacción y plenitud, como si algo dentro de mí hubiera
vuelto a su lugar después de haber estado roto durante tanto
tiempo.
Cuando terminó, nos quedamos allí, abrazados, ambos sin
aliento y exhaustos por lo que acababa de suceder.
La cabeza me daba vueltas, pero eso no era nada comparado
con la tempestad que había desatado dentro de mí.
—¿Qué diablos fue eso? —Finalmente pregunté cuándo
confié en mí mismo para hablar, mirándolo fijamente.
El bastardo tenía una sonrisa de suficiencia en sus labios,
sabiendo muy bien que acababa de sacudir mi mundo.
—Hacer el amor —dijo, tomando mi mano y besando mis
dedos. La ternura de ese gesto solo añadía sal a la herida. —
¿Qué pensaste?
 Aparté la mirada, más nervioso por sus palabras, y por todo lo
que acababa de ocurrir entre nosotros, de lo que quería admitir.
—Todo esto sería mucho más simple si pudiera matarte —
murmuré.
—Puedes —dijo, besándome una vez más antes de salir de mí.
Hice una ligera mueca, a pesar de que él también fue amable en
eso. Rodó sobre su costado, atrayéndome contra su pecho. —
Nada te detiene.
—No me tientes —murmuré, hundiéndome en su costado.
—Eres sorprendentemente tierno para un asesino en serie —
comentó.
—Jódete.
200
—¿Aún no estás satisfecho? —Se burló. —Dame un minuto y
vamos de nuevo.
—Eres absurdo —dije, sacudiendo la cabeza y sonriendo a 01/2023
pesar de mí mismo.
Era la verdad. Era absurdo, y tenía la sospecha de que me
estaba empezando a gustar.
Entonces, ¿en qué diablos me convertía eso?
 24

LUCA

Me desperté en una cama vacía y puse los ojos en blanco. El

201
lugar a mi lado se había enfriado durante mucho tiempo, por lo
que no había forma de saber cuánto tiempo James había estado
despierto. 01/2023
Demonios, ni siquiera parecía necesitar dormir más de unas
pocas horas por noche.
Me levanté de la cama y me vestí, bajando las escaleras.
Probablemente debería haber tenido miedo de que me hubiera
dejado abandonado, e incluso después de lo que pasó entre
nosotros anoche, sabía que sería una respuesta lógica. Aunque
no lo estaba. Y no me sorprendió cuando lo encontré abajo,
trabajando en su computadora con una enorme taza de café
solo que estaba casi vacía.
—¿Cuánto tiempo has estado despierto? —Pregunté con un
bostezo.
—Cuatro horas, más o menos —respondió.
Parpadeé, mirando el reloj en la pantalla.
—Apenas son las seis de la mañana. ¿Ni siquiera duermes?
 —No mucho —dijo, alcanzando la taza.
—Aquí —le dije, tomándola. —Lo menos que puedo hacer es
mantenerte alimentado, supongo.
—Gracias —dijo, pareciendo sorprendido.
—No sé si deberías estar agradeciéndome, considerando que
bebes suficiente de esta mierda para impulsar a un pequeño
país.
—Una ciudad-estado en el mejor de los casos —respondió,
volviendo a la pantalla.
Suspiré, regresando unos minutos más tarde con una taza
nueva que puse frente a él.
—Allí —dije. —¿Qué estás haciendo? ¿Algo en lo que pueda
202
ayudar?
—No, a menos que te hayas convertido en un criptólogo en el
plano astral —respondió. 01/2023
Resoplé.
—Me temo que no. Pero ese contacto de Malcolm parece
saber lo que hace. Si estás tratando de piratear los sistemas de
Lewis o lo que sea, él podría ser capaz de ayudarte.
James finalmente miró hacia arriba, levantando una ceja.
—¿'Hackear sus sistemas'? ¿En serio?
—Está bien, entonces, ¿qué estás haciendo?
Sus ojos se entrecerraron.
—Técnicamente, estoy tratando de 'hackear sus sistemas',
pero lo haces sonar como un cliché.
Me burlé.
—Perdón.
—En cualquier caso, no se puede confiar en los contactos de
Malcolm —dijo James.
 —Lo sé, pero estaba hablando de secuestrarlo —admití.
Volvió a mirarme.
—¿Secuestro? ¿Te he ganado al lado oscuro tan fácilmente?
Sonreí.
—Bueno, eres bueno en la cama.
—Hay más de donde vino eso, niño bonito —dijo secamente,
sus ojos brillaban con picardía mientras tomaba un sorbo de
café. —Tampoco eres malo para follar. O para hacer café. Sin
embargo, eres un cocinero de mierda.
—Bueno, dos de tres no está mal —le dije, inclinándome para
besarlo. De alguna manera se sintió como un gesto aún más
íntimo que todo lo que habíamos hecho la noche anterior, pero
203
eso no me desanimó. Fue todo lo contrario. —Algo te está
molestando.
Los ojos de James se abrieron ligeramente, como si la 01/2023
observación lo sorprendiera.
—¿Qué te hace decir eso?
—No lo sé —admití. —Solo un sentimiento.
Él tampoco parecía saber qué hacer con eso. Finalmente
apartó la mirada, mirando los números que aparecían en la
pantalla.
—Pensé que Lewis ya habría intentado ponerse en contacto
con nosotros.
Me tomé un momento para procesar eso. Por supuesto, cada
momento que pasó sin contacto fue un momento que pasé
torturándome con qué ‘pasaría si’, pero escucharlo decir eso lo
trajo a casa en un nivel completamente diferente.
—¿No crees que lo va a hacer? —Pregunté.
 —Creo que no estoy dispuesto a arriesgarme a que no lo
haga —respondió James. —Necesitamos pasar a la ofensiva. Al
menos en lo que respecta a hacer contacto.
—Está bien, entonces, ¿cómo hacemos eso? —Pregunté.
Poner mi confianza en otra persona ya era bastante difícil, y
mucho menos cuando se trataba de mi hijo, pero en este
momento, James era la única persona en la que confiaba.
Seguro como el infierno que no podía confiar en Malcolm, o
incluso en Silas.
Ciertamente no confiaba en ellos cuando estaban con James, y
también me había vuelto protector con él, si era honesto
conmigo mismo.
204
—Hay alguien con quien he estado pensando en
comunicarme —respondió. —Un antiguo contacto que creo que
podría resultar útil como intermediario. 01/2023
Cualquiera que estuviera en términos lo suficientemente
civilizados con un hombre como Lewis para actuar como
intermediario estaba automáticamente en mi lista negra, pero
estábamos desesperados.
—¿Sabes cómo contactarlos?
—Ya lo hice —respondió. —Voy a tomar un vuelo para
reunirme con él más tarde hoy.
—¿Tú? —Pregunté, frunciendo el ceño. —¿Por qué hablas
como si estuvieras haciendo esto solo?
—Porque lo estoy —dijo James sin dudarlo. —Este tipo no es
exactamente digno de confianza. Es una jugada desesperada.
—Razón de más por la que no deberías ir solo —le dije con
firmeza.
 Me lanzó una mirada con la que me estaba familiarizando
demasiado.
—Por más conmovedora que sea tu preocupación, he estado
haciendo estas cosas yo mismo durante mucho tiempo.
—Sí, y quise decir lo que dije anoche. No tienes que hacerlo
—dije, inclinando su barbilla hacia mí. —Es mi hijo. Voy contigo,
James. Fin de la historia.
Sus ojos se entrecerraron mientras me miraba.
—Hay seis formas diferentes en las que podría dejarte
inconsciente en este momento. Fácilmente.
—Estoy seguro de que las hay —le dije. —Pero no vas a
hacerlo.
205
—¿Y qué te hace estar tan seguro de eso? —Preguntó.
—Por un lado, me estás diciendo en lugar de hacerlo —
respondí. 01/2023
Gruñó con irritación.
—Por otro —continué. —Sabes que tengo razón. Necesitas
refuerzos. En este momento, soy la única opción que tienes.
—Qué desafortunado giro de los acontecimientos —dijo con
un suspiro de cansancio.
—Iré a preparar todo —le dije, volviendo arriba antes de que
pudiera cambiar de opinión.
 25

JAMES

Dudaba mucho que el hombre sentado a mi lado en el jet

206
privado tuviera idea de cuánto esfuerzo me había costado
organizar el transporte de último minuto cuando la mayoría de
mis conexiones habituales ni siquiera estaban disponibles para 01/2023
mí, gracias a estar huyendo de Silas y Malcolm. Dudaba que
fuera a ser de mucha ayuda si las cosas con Thomas iban mal,
pero tenía razón en una cosa. No tenía otras opciones.
Al menos era un regalo para los ojos durante el viaje.
Me di cuenta de que era un manojo de nervios durante el
vuelo de dos horas, ya que no dijo mucho y la ansiedad era casi
lo único capaz de hacer callar a un DiFiore, como había
aprendido. Una polla en la boca probablemente también
funcionaría, pero no estaba seguro de lo aventurero que se
sentía Luca.
Cuando finalmente aterrizamos, aún quedaba otra hora de
viaje hasta la cabaña de montaña de Thomas. No tenía ninguna
duda de que lo había elegido a propósito, porque no había
ninguna oración de obtener una señal allí con cualquiera de las
redes regulares. Cualquier esfuerzo coordinado para cazarlo por
su larga lista de crímenes sería mucho más difícil, y un hombre
como Thomas siempre estaba pensando en su propio pellejo,
ante todo.
—Déjame hablar a mí —le dije a Luca mientras aparcaba el
coche que había alquilado con una identificación falsa y una
tarjeta de crédito fraudulenta al lado de la carretera que
conducía a la ladera de la montaña en una maraña de giros y
curvas verdaderamente nauseabunda. —Estás ahí como
refuerzo, nada más.
—Sí, sí —murmuró Luca, revisando el arma debajo de su
chaqueta como si hubiera desaparecido en los últimos minutos.
207
—Ya lo hemos establecido.
—Eso nunca antes había impedido que un DiFiore interfiriera
—le dije. 01/2023
—Yo no soy mis hermanos —dijo intencionadamente—. Y no
voy a hacer nada que pueda poner en riesgo el plan. Estás a
cargo.
Asentí, remotamente satisfecho con su tranquilidad. Veríamos
si duraba en el calor del momento.
—Tenemos una caminata por delante —le advertí,
poniéndome los guantes mientras salía del auto. —Thomas fue
específico sobre el estacionamiento al pie de la montaña.
—Este tipo es paranoico, ¿no? —Preguntó, caminando
penosamente a través de la nieve detrás de mí.
—No tienes idea —dije rotundamente. —Pero vale la pena ser
paranoico cuando la gente está tratando de matarte. Ahora
cállate. Estoy seguro de que tiene el área intervenida.
Luca gruñó en reconocimiento.
 Caminamos juntos en silencio hasta que apareció a la vista la
enorme casa construida en la ladera de la montaña. Era
absolutamente gigantesca, con una enorme fachada de piedra
que sobresalía de la montaña cubierta de nieve que la
encerraba. Sólo podía distinguir unas pocas ventanas oscuras,
sus cristales reflejaban el sol poniente. Thomas realmente había
hecho algo extraordinario aquí. El porche envolvente estaba
rodeado de altos árboles de hoja perenne y varios ventisqueros
grandes, y pude ver a Thomas apoyado en la barandilla,
mirándonos a través de un par de binoculares.
Paranoico, de hecho.
Desapareció adentro mientras nos acercábamos. Parecía
208
perfectamente a gusto cuando salió de la mansión para
saludarnos unos momentos después, con una sonrisa en su
rostro. Parecía ser un hombre desprevenido de unos cuarenta y 01/2023
tantos años con cabello canoso y ojos engañosamente amables.
Y era lo suficientemente jovial en la superficie para igualar su
desafortunada apariencia.
—Hola, James —dijo Thomas en un tono agradable,
asintiendo hacia mí mientras estaba de pie. Por muy sutiles que
fueran, identifiqué de inmediato a los tres francotiradores
estacionados en varios puntos alrededor del chalet, y estaba
seguro de que había al menos media docena de otros guardias
esperando en caso de que uno de nosotros hiciera un
movimiento en falso.
También estaba muy consciente de exactamente dónde
estaba Luca a mi lado, aproximadamente dos pies y medio a mi
izquierda. Ya tenía un plan para cubrirlo si Thomas o sus
hombres se volvían contra nosotros, pero nuestras posibilidades
de alejarnos de esto eran menos del uno por ciento si algo
sucedía, así que vigilar a Luca era un uso mucho más eficiente
de mi energía.
—Thomas —dije, asintiendo hacia él. —Lo has hecho bien por
ti mismo.
Miró alrededor de la propiedad, sonriendo levemente.
—Estoy mayormente jubilado en estos días. Lo último que
supe, tú también lo estabas. Retirado de la vida, en cualquier
caso.
Soplé una bocanada de aire a través de mis fosas nasales.
—¿Qué puedo decir? Los rumores de mi muerte han sido muy
exagerados.
209
—Ciertamente —comentó. —Imagina mi sorpresa cuando un
fantasma del pasado aparece preguntando por Lewis Capello, el
único hombre que podría hacerme desaparecer sin dejar rastro. 01/2023
Y quiere que yo facilite un intercambio, nada menos.
—No es un intercambio —respondí. —Solo necesito que
establezcas la conexión. Perdimos el contacto.
—Parece que un trato salió mal —comentó.
—Tal vez —estuve de acuerdo. —Pero te puedo asegurar que
él quiere saber de mí.
—Considerando que mataste a su hermano, estoy seguro de
que eso es cierto —respondió Thomas. —Pero está la cuestión
de si quiero participar en la realización de esa reunión.
—Di tu precio —le dije, con la esperanza de que mantener la
cabeza fría alentaría a Luca a hacer lo mismo. —Sabes que soy
bueno para eso.
Hasta el momento, Luca estaba cumpliendo con mis
instrucciones de que no debía intervenir en las negociaciones de
ninguna manera, representación o forma, pero él era un DiFiore,
y yo sabía que no debía pensar que había alguna garantía de
que sus emociones no tomarían lo mejor de él.
Sobre todo, teniendo en cuenta que lo habían hecho antes.
Muchas veces. Esa era la mitad de la razón por la que era tan
divertido.
—Como puedes ver, ya no se trata de dinero para mí —dijo
Thomas, mirando a su alrededor deliberadamente una vez más.
—Solo tomo proyectos apasionantes en estos días, y me temo
que la línea de negocios en la que están los Capello
simplemente no es suficiente. Lo que me da curiosidad sobre
qué negocios tienes con ellos. Me parece recordar que estabas
210
bastante reacio al comercio de carne la última vez que nos
vimos.
—Lo estoy —dije, tratando de mantener mi voz neutral. — 01/2023
Pero es una situación única.
—Siempre lo es —dijo Thomas con una amplia sonrisa.
Me tenía sobre un barril, y lo sabía. También me di cuenta por
la forma en que seguía mirando a Luca que sabía que el otro
hombre también era un punto débil potencial.
Ya sea que Thomas planeara traicionarme o no, era el tipo de
cosas que notabas naturalmente en esta línea de trabajo.
Siempre estabas buscando la debilidad para explotar. La puerta
rota que podría abrirse a la fuerza en un apuro.
—Lewis tiene a su hijo —dije finalmente, ignorando la mirada
de consternación de Luca. Le había dicho que mantuviera la
boca cerrada, pero sabía qué decir y cuándo, y qué no decir.
Thomas era quien tenía todas las cartas en este momento, y no
tenía sentido negarlo por el bien del ego. La debilidad también
podría explotarse como una fortaleza en las manos adecuadas.
—Y Lewis me quiere a mí a cambio.
La curiosidad que iluminó los ojos del corredor me dijo de
inmediato que mi estrategia estaba funcionando.
—Ya veo. Qué interesante giro de los acontecimientos —dijo,
su mirada se desplazó hacia Luca con un interés cada vez mayor.
—¿Y puedo preguntarle qué espera ganar con esta transacción?
—O mato a Lewis y traigo al niño de vuelta de esa manera, o
Lewis me atrapa y él se queda con el niño de todos modos —
dije, asintiendo en dirección a Luca. —Te pagan de cualquier
manera. Será tu trabajo más fácil hasta ahora. Tal vez incluso
puedas ampliar el porche.
211
Thomas soltó una carcajada.
—Hasta que las cosas se tuerzan, fallas en tu pequeña misión
de rescate, Lewis te mata y luego se vuelve contra mí. 01/2023
—Todo lo que estás haciendo es establecer la conexión —le
dije. —Y no olvides que he regresado de entre los muertos
antes. Entre los Capello y yo, es uno a cero. Supongo que solo
necesitas averiguar si esas son probabilidades lo
suficientemente buenas para apostar.
Los labios de Thomas se curvaron en una sonrisa.
—Bien jugado.
Luca parecía querer regañarme por actuar amenazante, pero
mantuvo la boca cerrada. Buen chico.
—Haré el punto de contacto —dijo Thomas después de un
momento de contemplación. —Pero eso es todo. Te daré un
teléfono y le daré a Lewis el número de ese teléfono. Me
enviarás el dinero al final del día. Fin de la historia.
—Eso es todo lo que pido —le dije.
 —Entonces tenemos un trato —comentó Thomas. Hizo un
gesto con la cabeza a uno de sus hombres, y mi mano se movió
instintivamente hacia mi arma cuando el guardia se movió, pero
él simplemente entró. Diez minutos después, regresó con una
pequeña bolsa negra y caminó hacia nosotros para
entregármela.
Abrí la bolsa y saqué el celular plegable de la vieja escuela. Lo
abrí, comprobando si había alguna señal de que había sido
manipulado.
—Es imposible de rastrear, por supuesto —dijo Thomas. —
Pero puedes bajar a la base de la montaña donde puede
obtener una señal y esperar hasta que él se comunique contigo.
212
Espero que no pase mucho tiempo una vez que haga la llamada.
—Gracias —dije, deslizando el teléfono en mi bolsillo. —
Estaremos fuera de tu cabello después de eso. 01/2023
—Muy agradecido —respondió Thomas con una sonrisa con
la boca cerrada.
Me volví y le hice señas a Luca para que me siguiera de
regreso montaña abajo hasta donde estaba esperando el auto.
Podía sentir que estábamos siendo observados desde el bosque,
y una mirada sobre mi hombro reveló el hombro camuflado de
al menos un francotirador. Sabía que también había muchos
más de donde él venía.
—Eso salió bien —dijo Luca, mirándome. —Pienso.
—Ya veremos cuando suene el teléfono —dije, metiéndome
en el auto para esperar con él.
Incluso una vez que tuvimos la calefacción encendida durante
un minuto, todavía podía ver mi aliento en el aire.
—¿Crees que es seguro aquí? —Preguntó.
 —Absolutamente no —respondí. —Existe la posibilidad de
que Thomas acaba de enviar nuestra ubicación directamente a
Lewis.
—¿En serio?
—Siempre hay una posibilidad —le dije. —Pero no es
probable. Conozco a Thomas desde hace años, y dejando de
lado sus tonterías acerca de estar jubilado, tiene una reputación
que mantener. No puedes ser un intermediario si no se puede
confiar en que serás justo con ambas partes.
—Incluso si un lado es un monstruo enfermo de mierda —dijo
con desdén.
—Dije justo, no dije moral —le dije, manteniendo un ojo en la
213
línea de árboles.
—Me parece bien. —Él suspiró.
El teléfono vibró en mi mano en ese momento y la pantalla se 01/2023
iluminó. Miré el número restringido.
—Parece que Thomas pasó —comenté. Me llevé el teléfono a
la oreja y contesté—. Hola.
—James —dijo Lewis en un tono engañosamente cálido. —Es
tan bueno finalmente escuchar tu voz de nuevo. Y pensé que te
habías escapado de mí.
—Tienes mi número —le dije. —Y todavía no has llamado.
¿Qué debe pensar una chica?
Dio una risa baja.
—Tu número fue comprometido.
—Sabes mejor que eso. Tengo mis métodos.
—Mis disculpas por subestimarte —dijo, su voz goteando de
desdén. —No volveré a cometer el mismo error. Pero prefiero
no correr el riesgo de comunicarme en una línea comprometida
de todos modos. Ahora, ¿por qué no me das un número limpio
y puedes deshacerte de ese teléfono desechable? ¿Dónde estás?
Sé que no te gusta quedarte en un lugar por mucho tiempo.
—Ya que lo preguntas —dije—. Conseguí el número de una
línea que sabía con certeza que él no podía rastrear.
—Maravilloso —respondió. —Prefiero hacer negocios
directamente. Sin intermediarios. Dicho esto, ¿por qué no me
pones con DiFiore, ya que sé que no estás llamando por tu
propia voluntad?
—En realidad, te equivocas —le dije. —Soy yo quien toma las
decisiones ahora, pero el trato sigue vigente. Yo a cambio del
niño. Solo necesitas nombrar la hora y el lugar.
214
Luca me miró confundido, pero una mirada fue suficiente para
silenciarlo. Por ahora.
—Interesante —murmuró Lewis. —¿Por qué no me dices qué 01/2023
tiene este niño que te tiene dispuesto a tirarte a la pira? ¿O
simplemente estás ansioso por verme?
—Hemos tenido una cuenta pendiente durante años, Lewis —
respondí. —Tú eres el que eligió usar a un niño como escudo
para esconderse, pero él no necesita tenerlo en cuenta. ¿Me
quieres? Entonces hagámoslo cara a cara, de hombre a hombre.
Porque en lo que a mí respecta, tú y tu hermano son un
conjunto, y no me gusta tener una colección parcial de trofeos.
Todavía tengo el hueso de su dedo índice, sabes. Lo guardo en
un pequeño frasco. También tengo en mente el lugar perfecto
para el tuyo, aunque podría conformarme con un trofeo un
poco más abajo.
Lewis soltó una risa baja y peligrosa.
—Grandes palabras. Espero que estés listo para entregar.
 Un segundo después, el teléfono vibró y miré hacia abajo para
encontrar que me había enviado un mensaje de texto con dos
conjuntos de coordenadas.
—La primera ubicación es donde estará el pequeño Timothy,
siempre y cuando aparezcas en la segunda ubicación —dijo
Lewis.
—Encantador —dije. —¿Qué debería vestir?
—No importa —dijo Lewis. —No lo usarás por mucho tiempo.
Solo ven cuando puedas. Te estaré esperando.
Colgó y me quedé mirando el teléfono desechable por un
momento antes de tirarlo a la nieve.
—Conduce —le dije a Luca.
215
—¿No vamos a hablar de eso? —Exigió Lucas. —¿Qué diablos
quieres decir con que te estás negociando por…
—Dije conduce —espeté. 01/2023
Entrecerró los ojos y me di cuenta de que quería discutir. Por
unos segundos, pareció que iba a hacerlo, pero luego maldijo
por lo bajo y salió a la estrecha carretera de montaña.
—No hemos terminado de hablar de esto.
Sabía que no. Pero mi mente estaba decidida de todos
modos.
 26

JAMES

—Es simple —dije, cargando una bolsa de lona negra con

216
suficientes armas para armar una pequeña milicia. Me alegré de
haber guardado tantos juguetes en esta casa segura—. Lo
hemos repasado media docena de veces. 01/2023
—Sí, y todavía me falta la parte en la que tú y Timothy salen
de esto conmigo. Juntos —respondió Luca.
—Eso es porque no la hay—dije encogiéndome de hombros.
—Yo soy el que va a la isla.
—No estás solo, no lo estás —insistió Luca. Fue un poco lindo
que pensara que tenía algo que decir en todo esto. La
ingenuidad era una de sus cualidades más entrañables con
diferencia. —Mira, sé que no confías en Malcolm, y yo tampoco,
pero él no tiene que estar involucrado en nada de esto.
Podemos hacer que Silas ayude y tenemos un punto de entrega.
Él puede enviar un ejército.
—¿No crees que eso es exactamente lo que Lewis está
esperando? —Pregunté. —Ya va a ser precavido después de la
última vez. Cualquier desviación del plan y tu hijo está en riesgo.
 —Lo sé —dijo entre dientes. —¿No crees que lo sé?
—No creo que estés actuando racionalmente en este
momento —le dije. —Así que no te estoy dando otra opción.
—Eso es una mierda —gruñó.
—No, en realidad es bastante sencillo —dije. —Vas al sitio de
entrega con Silas y los demás. Eso, él estará esperando. Y no
será una amenaza, considerando que estará en la isla. Conmigo.
—Y estarás solo —argumentó. —Como siempre.
—Es en lo que soy bueno.
—Esto es un suicidio —dijo Luca con amargura. —Tú lo sabes.
—No estoy planeando morir —le dije.
—No, estás planeando matarlo, cueste lo que cueste, incluso
217
si morir es parte de eso.
No tenía sentido negarlo. Él lo sabía, y yo lo sabía.
Simplemente no quería admitirlo por alguna razón. 01/2023
—No puedes hacer esto, James —dijo con firmeza. —No voy a
dejar que hagas esto.
—No estás siendo razonable.
—No —espetó. —Tal vez no lo sea, pero ¿a quién le importa
una mierda lo razonable? No todo tiene que ser lógico, James.
Lo que siento por ti seguro que no lo es, pero eso no significa
que no sea real. No significa que no valga la pena luchar por
ello.
Lo miré por un momento, parpadeando.
—¿Sigues con tu mierda de amarme?
—No es una mierda —dijo, cerrando la distancia entre
nosotros para sujetarme contra la pared. —Es la verdad, incluso
si soy el único de nosotros que no es demasiado cobarde para
admitirlo.
 —Has estado pasando demasiado tiempo con Malcolm —le
dije.
Sopló una bocanada de aire a través de sus fosas nasales.
—Si hay algo por lo que puedo admirar a ese idiota, es el
hecho de que haría cualquier cosa para proteger lo que es suyo.
No importa lo que pienses de mí, voy a hacer lo mismo.
—Tuyo —murmuré, levantando la mano distraídamente para
tocar su rostro en contra de mi buen juicio. —¿Es eso lo que
crees que soy?
—Eso es lo que quiero que seas —dijo sin dudarlo,
sosteniendo mi mirada. —Voy a hacer lo que sea necesario para
proteger a mi hijo, pero no voy a sacrificarte. ¿Yo, por otro lado?
218
Los protegeré a ambos, incluso si me cuesta la vida.
—Sí —dije en voz baja, mirándolo. —Me temo que lo harías.
Me miró por un momento confundido. 01/2023
—No.
—¿No qué? —Pregunté.
—No me mires así —dijo. —Como si estuvieras planeando
algo. Como si estuvieras planeando huir por tu cuenta. Siempre
por tu propia cuenta.
—Así ha sido siempre —le recordé.
—No tiene por qué ser así —insistió. —No tienes que estar
solo, y no quieres estarlo. Sé que no quieres porque podrías
haber estado ese día en los muelles. Podrías haberme dejado
allí, y nadie, ni siquiera Silas, te habría culpado, pero no lo
hiciste. Arriesgaste el cuello por mí, alguien que te había jodido,
y ahora estás tratando de hacerlo de nuevo. Porque tienes más
miedo de dejar entrar a alguien, de dejar que alguien te ayude,
que de morirte y a la mierda.
 La parte más molesta era que no estaba equivocado. No sobre
eso, al menos. Pero estaba equivocado acerca de que tenía
miedo de dejar entrar a alguien. Ya lo había hecho sin siquiera
darme cuenta, y las consecuencias fueron tan terribles como
siempre había pensado que serían. Consecuencias que estaba a
punto de elegir voluntariamente, no obstante.
—No voy a dejarte ir, James —me dijo, sus ojos fieros y firmes.
Y sabía que lo decía en serio. Debería haberme marchado en
ese mismo momento. Debería haberlo noqueado, lo que sería
mucho más fácil cuando tenía la guardia baja, pero podría
haberlo hecho en ese momento de todos modos. Ya había
preparado una cápsula cuando vinimos aquí por primera vez en
219
caso de que necesitara sacarlo del camino. No lo mataría. Era
solo un sedante, pero era lo suficientemente fuerte como para
mantenerlo a raya durante el tiempo suficiente para darme 01/2023
tiempo de escapar.
Al principio, esperaba que tendría que usarlo porque él
intentaría traicionarme de nuevo, pero ahora iba a tener un uso
muy diferente. Simplemente no me atreví a hacerlo.
No todavía.
Irónicamente, fue una de las cosas más egoístas que había
hecho, pero quería pasar un poco más de tiempo con él. Solo
otro momento.
Me incliné y presioné mis labios contra los suyos, y él no dudó
en acercarme más cuando el beso rápidamente se volvió
apasionado. Sus brazos se deslizaron alrededor de mi cintura,
atrayéndome a su abrazo mientras nuestras bocas se movían
juntas en un ritmo frenético.
 Se apartó lentamente y me miró fijamente con esos ojos
oscuros suyos. Su mirada me abrasó, transmitiendo mucho más
de lo que las palabras podrían tener.
Luca me tomó de la mano y me llevó al dormitorio sin decir
una palabra más. En el momento en que llegamos a la cama, me
empujó hacia abajo y me besó de nuevo. En ese solo beso, ese
solo momento, todo convergió: la pasión brutal que había
caracterizado nuestras primeras interacciones y la ternura que se
había desarrollado recientemente entre nosotros.
Era una mezcla perfecta, y se sentía como volver a casa.
Me desvistió lentamente, explorando cada pulgada de mí con
sus ojos y manos. Su toque fue suave, pero poderoso, y me
220
llenó de un anhelo que no sabía que podía sentir.
El cuerpo de Luca se apretó contra el mío mientras nuestros
movimientos se volvían más urgentes e intensos. Bajó su cuerpo 01/2023
desnudo encima del mío, teniendo cuidado de evitar mis
puntos, y se presionó contra mí. Sus dedos se entrelazaron con
los míos mientras fijaba mis manos en el colchón.
Su boca encontró la mía de nuevo, luego mi cuello mientras
bajaba por mi cuerpo. Dejé escapar un gemido profundo
mientras su lengua me tentaba y acariciaba en todos los lugares
correctos. Su aliento era caliente contra mi piel, enviando
escalofríos por mi columna.
Hábilmente alcanzó una botella de lubricante sin romper el
beso y deslizó dos dedos resbaladizos dentro de mí. Gemí de
felicidad cuando encontró mi lugar y comenzó a bombear sus
dedos hacia adentro y hacia afuera, acumulando un delicioso
ritmo que me hizo temblar de placer y mis caderas se
balancearon al mismo tiempo.
 Lentamente retiró su mano y besó su camino de regreso a mi
torso, finalmente colocándose entre mis piernas. Lentamente
guió su polla hacia mi entrada, luego se empujó, pulgada a
gloriosa pulgada.
Jadeé cuando me llenó por completo y comenzó a moverse
dentro de mí. Sus embestidas eran profundas pero suaves, ya
que ambos encontramos un ritmo que se sentía perfecto para
nosotros. Nuestros cuerpos se movían juntos en armonía,
enviando oleadas de placer a través de mí cada vez que se
hundía hasta el fondo dentro de mí.
Luca se movió un poco para poder agacharse y tomar mis
bolas con una mano mientras la otra jugaba con la piel sensible
221
de mi coronilla. Sus dedos eran eléctricos contra mí, provocando
mil chispas diminutas que iluminaban cada terminación nerviosa
a su paso. 01/2023
Mi orgasmo estaba creciendo rápidamente ahora, y antes de
que me diera cuenta, estaba gritando el nombre de Luca
mientras me corría. Se estremeció y apretó con más fuerza mis
bolas mientras me seguía por el borde, derramándose dentro de
mí en un torrente de placer.
Nos derrumbamos sobre la cama, nuestra respiración era lenta
y pesada mientras yacíamos allí juntos en plena satisfacción.
Luca se inclinó para acariciar mi mejilla y me miró a los ojos con
una pasión tan suave que casi me abrumó. Nunca nadie me
había mirado así antes.
—¿Vas a dejar que lo diga esta vez? —Preguntó, su voz
todavía ronca por el esfuerzo.
Suspiré, apartando la mirada de él.
—Si debes.
 Vi el fantasma de una sonrisa en sus labios cuando se inclinó,
su aliento rozó la barba incipiente en mi garganta mientras
rozaba sus labios contra mi cuello.
—Te amo —susurró, haciéndome estremecer de nuevo.
Esas palabras me llenaron de tantas emociones conflictivas, la
incredulidad principal entre ellas. Pero a pesar de lo escéptico
que era sobre la mayoría de las cosas, me encontré queriendo
creer su declaración, tan temeraria como era.
No sabía qué decir, así que deslicé mis dedos en su cabello y
le di un suave beso en la frente. Él sonrió y me besó a cambio,
sosteniéndome fuerte contra él. Nos quedamos así por un
tiempo, ninguno de los dos hablaba mientras el peso de esas
222
pequeñas palabras se asentaba a nuestro alrededor.
—Voy a tomar una ducha —murmuró en mi cabello. —¿Te
importaría unirte a mí? 01/2023
—Creo que me quedaré aquí —respondí, besando su mejilla
mientras se levantaba para irse.
Me acosté solo en la cama, escuchando el agua correr en la
habitación de al lado mientras me bañaba en mil sentimientos
diferentes que pensé que se habían perdido para siempre. El
amor era una emoción tan ambigua. No importaba con qué
frecuencia se discutiera o se escribiera sobre él, seguía siendo
muy difícil de definir.
Pero fuera lo que fuera esto entre nosotros, la pasión que
compartíamos y la ternura que habíamos desarrollado, se sentía
real y verdadero. Aunque no me atrevía a decirlo en voz alta,
sabía que en el fondo de mi corazón también guardaba esas
mismas palabritas para Luca.
 Pero las acciones siempre habían significado más que las
palabras para mí, de todos modos, y si no podía hacer esto, no
lo merecía. No merecía nada de esto.
Metí la mano en el bolsillo de mi ropa caída y metí la pequeña
cápsula debajo de mi lengua cuando escuché que la ducha se
cerraba, y me preparé para hacer lo que sabía que tenía que
hacer. Sentí una extraña sensación de calma cuando Luca salió y
se reunió conmigo en la cama, estrechándome en sus brazos.
Lo besé una vez más, profundizando el beso y clavando mis
uñas en su carne tan violentamente que no pareció darse cuenta
cuando empujé la cápsula sobre la parte posterior de su lengua
y sentí que tragaba instintivamente.
223
Se quedó inmóvil por un momento, y vi la confusión en sus
ojos mientras trataba de comprender lo que acababa de
suceder. 01/2023
Observé cómo la confusión en sus ojos se convertía en
comprensión, luego en traición, luego en pánico, todo en una
sucesión tan rápida que bien podría haber sido una sola
emoción.
—No —dijo entre dientes, empujándome lejos de él mientras
se levantaba para empujar sus dedos por su garganta.
—No trates de luchar contra eso. Es de acción rápida una vez
que entra en contacto con el ácido del estómago —dije,
ofreciéndole el vaso de agua sobre la mesa—. No te hará daño,
pero evitará que me sigas.
Tomó el vaso, aparentemente por instinto, antes de tirarlo a
un lado e intentar ponerse de pie. No pudo mantenerse en pie y
cayó de espaldas sobre el borde de la cama.
—No hagas esto, James. Por favor —suplicó.
 —Lo siento —dije en voz baja. El hecho de que no se estuviera
volviendo loco pensando que lo acababa de envenenar de
alguna manera me hizo sentir aún más culpable.
De hecho, estaba empezando a confiar en mí. Razón de más
que tenía para traicionarlo. Por su propio bien.
Podía contar con los dedos de una mano la cantidad de veces
que le había dicho a alguien que lo sentía y lo decía en serio,
pero lo hice. Lo dije en serio tanto que era un dolor,
retorciéndose y royendo profundamente dentro de mí.
—Cuando todo esto termine, si todavía estoy cerca y todavía
me quieres, entonces podemos intentarlo. Puedes decir tus
bonitas palabras y yo te las diré a cambio, pero hasta entonces,
224
todo es solo poesía. Y estoy seguro de que le has leído
suficientes cuentos de hadas a Timothy antes de dormir para
saber que las cosas nunca terminan felizmente entre el príncipe 01/2023
azul y el monstruo.
—James —Luca rechinó, alcanzándome. Dejé que agarrara mi
muñeca, porque quería tocarlo por última vez. Un toque que no
estaba teñido de mentira, incluso si estaba envenenado con las
secuelas de la traición.
Sostuve su mano hasta que la luz se desvaneció de sus ojos y
la fuerza abandonó su cuerpo. Se derrumbó en mi regazo en un
sueño pacífico que duraría más que suficiente para que yo le
dejara las coordenadas y escapara. El tiempo suficiente para que
yo llegara demasiado lejos para que él hiciera algo más que
aceptar el único papel adecuado que tenía en esto, que era estar
allí para rescatar a su hijo, un niño inocente que nunca debería
haber tenido parte en nada de esto, y probablemente nunca iba
a ser consciente de la mía.
 Era lo mejor. Tendría suficiente trauma por toda esta terrible
experiencia, pero con Luca y el resto de la familia allí para
amarlo y apoyarlo, se recuperaría. Con el tiempo, sabiendo lo
plástico que era el cerebro a su edad, lo olvidaría por completo.
No necesitaba un monstruo más en su armario.

225

01/2023
 27

LUCA

Me desperté con una migraña palpitante, apenas podía sentir

226
mis extremidades. Me tomó mucho tiempo recuperarme lo
suficiente como para recordar cómo había regresado a la
cabaña y por qué James no estaba allí. Tan pronto como lo hice, 01/2023
entré en pánico y salté de la cama, la cabeza me daba tantas
vueltas que tropecé por la habitación.
Mierda.
Un teléfono que no reconocí estaba visiblemente accesible en
la mesita de noche, pero sabía que tratar de contactar a James
era una causa perdida. Él ya había premeditado esto, y su mente
no cambiaría sin importar lo que dijera o hiciera.
Saber lo que estaba tratando de hacer, el hecho de que estaba
tratando de protegerme, lo hizo sentir menos como una
traición, pero fue aún más exasperante.
Iba a dejar que lo mataran. El pensamiento era más aterrador
de lo que podía imaginar. Sin embargo, sabía lo que tenía que
hacer.
Tenía que llamar a Silas.
 Joder, esto era malo.
Cada timbre del teléfono resonaba en mis oídos, pura tortura,
pero nunca me sentí más aliviado que cuando él contestó.
—James —dijo, su voz tensa por la sospecha y la ira. Por
supuesto que pensó que me tenían como rehén o algo así. ¿Por
qué no lo haría?
—Soy yo —dije. —Necesito tu ayuda.
—¿Luca? —Su tono se relajó inmediatamente. —¿Dónde
estás? ¿Estás bien?
—Estoy bien —murmuré, buscando en mi bolsillo la hoja de
papel que James había dejado. —Estoy en una de las casas
seguras de James, pero no importa. Te estoy enviando un
227
mensaje de texto con un conjunto de coordenadas y necesitas
tener un equipo listo. Lewis va a dejar a Timothy allí.
—¿Cómo sabes esto? —Exigió Silas. Podía escuchar a los 01/2023
demás en el fondo, y estaba bastante seguro de que uno de
ellos era Enzo. —¿Dónde está James en este momento?
Se me hizo un nudo en el estómago mientras elaboraba la
respuesta.
—Se ha ido —dije, mi voz cada vez más ronca. —Y yo voy tras
él.
Silas se quedó en silencio por unos momentos.
—¿Tú qué?
—Si te envío otro conjunto de coordenadas, ¿puedes llevarme
allí? —Pregunté. Aunque James me había dado las coordenadas
de Timothy, había memorizado ambos conjuntos por si acaso.
Parecía que esa era la decisión correcta, considerando todas las
cosas.
 —¿Qué? Luca, no tienes ningún sentido —dijo Silas. —Solo
dime dónde estás…
—Respóndeme, o lo resolveré yo mismo.
Hizo una pausa tan larga que no estaba seguro de lo que iba
a decir.
—Sí —dijo finalmente. —Pero tienes que pensar en lo que
estás diciendo. Estamos hablando de James.
—Lo sé —espeté. —Por eso voy—. Colgué antes de enviarle
las otras coordenadas.
Fue cuestión de un par de horas antes de que escuchara que
los helicópteros venían a recogerme, y pasé el tiempo
recorriendo la casa, reuniendo armas y otras cosas que pensé
228
que podría usar en mi misión.
No estaba seguro de lo que iba a hacer cuando apareciera
Malcolm. Probablemente matarlo, por eso me sentí aliviado 01/2023
cuando solo estaban Silas y un equipo de sus agentes.
Inmediatamente los envió a buscar en la casa de seguridad,
luego vino a mi encuentro.
—Ahí estás —murmuró. —A juzgar por cómo estabas al
teléfono, tenía miedo de que no estuvieras aquí cuando
llegáramos.
—Si hubiera tenido una forma más rápida de llegar a la isla,
no habría estado —admití.
Los ojos de Silas se entrecerraron, así que supe que no se
había dado por vencido en disuadirme de mi plan. Simplemente
había decidido esperar para discutir en persona.
—No voy a fingir que sé lo que ha estado pasando, y entiendo
que estés molesto por lo que pasó en los muelles. Lo que hizo
Malcolm estuvo fuera de lugar, y créeme, me estoy ocupando
de eso, pero tú no puedes simplemente tomar esto en tus
propias manos.
—No lo hago. James ya lo ha hecho —dije
intencionadamente. —Y esa es la única razón por la que mi hijo
todavía está vivo en este momento. No por ti, y por supuesto a
pesar de Malcolm. Por James. Y no lo dejaré en manos de ese
psicópata, así que o me ayudas, o te sales de mi puto camino.
Silas me miró fijamente durante unos segundos con
incredulidad y, para ser justos, era difícil imaginar que mucha
gente le hablara así. Incluso yo habría dudado en cualquier otra
ocasión, pero estaba demasiado concentrado en la misión en
este momento como para importarme una mierda lo que me
229
hiciera.
—Dios, Enzo tenía razón —finalmente murmuró, mirando
hacia otro lado. No estaba seguro de qué hacer con la 01/2023
insinuación de que habían estado hablando de mí a mis
espaldas, pero esa era la menor de mis preocupaciones en este
momento.
—¿Me vas a ayudar o no?
—Haré lo que pueda —dijo Silas. —Pero las coordenadas que
me enviaste... Esa isla está fuera del radar en más de un sentido.
No podré contactarte cuando estés allí, y por la información que
logré reunir, solo hay una forma de entrar y una salida. Puedo
enviar un equipo, pero Lewis tendrá toda la isla monitoreada y
protegida, y si eso falla, tiene una gran cantidad de rehenes
humanos que puede usar como escudo. No puedo arriesgarme
a enviar un ejército completo en allí, que es exactamente lo que
se necesitaría para garantizar una extracción limpia sin bajas
masivas. Tu hijo está lejos de ser el único inocente que se ha
llevado.
Mi estómago se revolvió ante la idea, pero era una razón más
por la que quería poner mis manos alrededor de la garganta de
Lewis en la primera oportunidad que tuviera.
—Conozco los riesgos —murmuré—. Encontraré a James y lo
sacaré.
—¿Y estás seguro de que sabes lo que estás haciendo? —
Preguntó Silas, mirándome fijamente. —¿Estás seguro de que
vale la pena?
La pregunta me molestó, aunque lógicamente entendí por
qué me la hizo. Él y yo teníamos perspectivas muy diferentes
230
sobre James, y siempre las tendríamos. Pero entre los dos,
estaba dispuesto a apostar que yo era el único que realmente
veía a James por lo que era. 01/2023
—Absolutamente —dije.
Silas suspiró profundamente.
—Voy contigo, entonces. Tendrá que ser un equipo pequeño.
Más de cinco y el riesgo de exposición es demasiado grande. Si
el 'negocio' de la familia Capello es como me imagino, hay
muchas personas poderosas que harían lo que fuera necesario
para asegurarse de que lo que sucede en la isla permanezca allí,
y creo que es bastante obvio que no podemos confiar en los
funcionarios.
—Sí —dije con amargura. —Lo deduje de la compañía que
tiene el monstruo.
—Podríamos usar a Malcolm —dijo Silas en un tono que
dejaba claro que sabía exactamente cuál iba a ser mi reacción a
esa sugerencia.
 —Malcolm puede irse a la mierda —gruñí.
Silas puso los ojos en blanco.
—Él no es a quien quieres que maneje las negociaciones, pero
cuando se trata de acabar con el radar, no hay nadie mejor para
tener a tu lado.
—Excepto que tiene una vendetta contra el hombre que
estamos tratando de rescatar —respondí.
—Por una buena razón —dijo Silas, levantando una ceja.
Apreté los dientes. Realmente no iba a entrar en detalles
sobre Adam en este momento, y sabía que eso no cambiaría la
opinión de Silas de todos modos. Pero cuanto más tiempo
pasábamos discutiendo, más tiempo pasaba James a solas con
231
Lewis.
—Bien —dije entre dientes. —Pero mantenlo a raya, o lo haré
yo. 01/2023
—Mírate —dijo Silas en un tono de suficiencia. —Para un tipo
que siempre ha tenido un pie fuera del negocio familiar, en
realidad estás empezando a sonar como alguien que pertenece
a este mundo.
—Vamos a movernos —dije, pasando junto a él hacia el
helicóptero—. Ya hemos perdido suficiente tiempo.
Cada segundo que pasaba, sentía que me faltaba otra parte
de mí, y si había una maldita cosa que había aprendido en toda
esta mierda, era que el amor es más doloroso en ausencia.
 28

JAMES

El aire de la isla era denso y opresivo esa noche, y con cada

232
aliento húmedo que tomaba en mis pulmones, sentía como si
creciera moho dentro de mí. La naturaleza salvaje que me
rodeaba era objetivamente espléndida, pero el hombre que la 01/2023
había dominado había manchado su belleza, volviéndola fría y
siniestra.
Había un barco de pesca esperando para recogerme en tierra
firme, y había ido de buena gana una vez que me mostraron
imágenes que demostraban que los hombres de Silas habían
recogido a Timothy. El viejo marinero canoso no había dicho ni
una palabra mientras navegábamos a través de aguas oscuras, e
imaginé que sabía lo suficiente como para hacer la menor
cantidad de preguntas posible en su línea de trabajo.
Miré mi reloj. Se estaba haciendo tarde y había estado
esperando durante más de una hora. Mi paciencia empezaba a
agotarse, pero sabía que esto también formaba parte del juego
de Lewis.
 Ni siquiera fue el que apareció primero. Los cuatro hombres
que salieron de la jungla, vestidos con ropa militar negra y con
rifles de asalto, me rodearon sin decir una palabra. En poco
tiempo, Lewis decidió mostrar su rostro. El parecido con su
hermano muerto era asombroso.
Si todo iba según lo planeado, pronto tendrían algo más en
común.
—Ahí estás —dijo Lewis en un tono desconcertantemente
cálido, con los brazos extendidos mientras se acercaba a mí.
Permanecí siempre consciente de los dos cañones que me
apuntaban a la espalda. —Bienvenido a la isla. El negocio
familiar.
233
—Sí, es bastante grande la configuración que tienes aquí —le
dije con aburrimiento, mirando a su alrededor. —Supongo que,
si no puedes dominar el tráfico de armas, el comercio de carne 01/2023
tiene sus ventajas.
El labio de Lewis se curvó en una sonrisa peligrosa.
—Todavía tan ardiente como siempre. Eso es bueno. Será aún
más satisfactorio romperte.
—Y aquí pensé que me trajiste aquí para matarme —comenté.
—Ahora, ¿dónde está la diversión en eso? —Preguntó. —Por
supuesto, ese era mi plan al principio. Pero hemos pasado por
muchas cosas juntos, incluso si esta es la primera vez que nos
conocemos oficialmente. Matarte se siente tan... decepcionante.
¿No crees?
—Sí —murmuré. —No querría eso.
Él solo sonrió y asintió con la cabeza a los hombres detrás de
mí.
 —Adelante. Llévalo a la casa de subastas. Asegúrate de que
esté adecuadamente preparado para esta noche. Tenemos una
noche muy especial por delante.
—No puedo esperar —dije rotundamente.
Había un brillo peligroso en los ojos de Lewis. Era todo lo que
esperaba y más.
Los guardias me ataron los brazos a la espalda y me llevaron a
un vehículo todo terreno que esperaba al borde de la jungla. Me
empujaron hacia la parte trasera y, cuando el vehículo arrancó,
me quedé mirando la costa y no pude evitar dejar que mi mente
se alejara mucho más allá.
Timothy estaba a salvo. A estas alturas, presumiblemente
234
estaba con Luca, y si aún no estaba en casa, pronto lo estaría.
Eso era todo lo que importaba.
Se me ocurrió que acababa de cambiar mi vida por un chico 01/2023
que nunca había conocido, y nunca lo haría. El pensamiento me
hizo sentir una extraña punzada en el centro de mi pecho.
Nunca me había preocupado por nadie más que Silas, y ahora,
me encontré preocupándome por un perfecto extraño,
simplemente por quién era él para otro hombre que bien podría
haber sido un extraño para mí. Luca no me conocía, no
realmente. El hecho de que pensara que me amaba era prueba
suficiente de ello.
¿Pero qué sentía yo por él? Todavía no estaba seguro. Había
pasado tantos años en pura obsesión por Silas que acababa de
asumir que era amor, pero lo que había llegado a sentir por
Luca en tan poco tiempo... La intensidad de eso hizo palidecer lo
que sentía por Silas en comparación, pero era lo
suficientemente similar en muchos aspectos que tuve que
preguntarme. Y, sin embargo, ¿cómo podría ser amor si no me
dejara con una sensación de vacío y dolor?
Decidí que no importaba. Nunca lo haría.
Si era amor o no, si era capaz de amar que no estuviera teñido
de maldad, era un punto discutible. En cualquier caso, me
preocupaba lo suficiente por Luca como para saber que su
mundo era infinitamente mejor sin mí en él.
Mejor. Más seguro. Más cuerdo.
Ni siquiera quería que su hijo se involucrara en el
relativamente dócil negocio de la familia DiFiore, y si de alguna
manera escapaba de Lewis por algún milagro, o exactamente lo
contrario, los demonios de mi pasado abundaban. Y eso sin
235
mencionar el hecho de que yo era el peor entre ellos.
El auto se detuvo detrás de lo que parecía un viejo teatro
ubicado en el centro de la jungla, solo que tenía que ser 01/2023
relativamente nuevo. Estas personas no eran más que
ostentosas.
Dios, los odiaba. Sabía que no dejaría esta isla con vida, pero
iba a arrastrar conmigo al infierno a tantos de estos hijos de
puta como pudiera. También podría darle algún significado a mi
vida, incluso si solo fuera en sus momentos finales.
Y matar a Lewis, al menos, sin duda contó cómo darle un
propósito a mi vida. Era como si todo hubiera convergido en
este punto. Como si fuera el destino desde el principio.
Esto era lo que me merecía. Era el lugar al que me había
dirigido desde que tenía memoria.
Para mi sorpresa, una vez que llegamos a la casa de subastas,
no me arrastraron a una cámara de tortura, sino que me
encerraron en una habitación grande y bien equipada. El hecho
de que hubiera una cama hizo que mi estómago se revolviera
con pensamientos de lo que Lewis planeaba hacerme antes de
obtener su venganza final, cualquiera que fuera la forma que
tomara.
Por lo que pude deducir de mi investigación sobre él y su vida,
ni siquiera estaba interesado en los hombres, pero ese tipo de
cosas apenas importaban. Era un juego de poder, nada más y
nada menos.
Me dejaron en el borde de la cama en la habitación durante
unas horas, más o menos, antes de que enviaran a dos nuevos
guardias. Uno parecía un adolescente, y no podía tener más de
dieciocho años. Podía decir por el aire nervioso que lo rodeaba
236
que sabía quién y qué era yo, o al menos lo suficiente como
para estar apropiadamente cauteloso.
Probablemente había venido a esta isla en circunstancias muy 01/2023
diferentes, y no me habría sorprendido que simplemente
hubiera dejado de ser útil para sus captores en un aspecto, por
lo que lo habían designado para un papel diferente. El hecho de
que el prisionero se convirtiera en alcaide estaba lejos de ser un
giro poco común de los acontecimientos en este mundo.
—Entonces, ¿hacia dónde me dirijo? —Pregunté,
enfocándome en el joven guardia, ya que el otro aparentemente
estaba hecho de piedra.
El chico rubio se vio inmediatamente nervioso ahora que le
había hablado. Miró al otro guardia, quien se encogió de
hombros y no dijo nada.
—No importa —dijo el chico, tirando una pila de ropa en la
cama a mi lado. —Solo ponte esto. Nos ocuparemos de tu collar
una vez que un técnico descubra una manera de quitártelo sin
matarte.
—No puedo hacer eso muy bien con las manos atadas a la
espalda, ahora, ¿verdad? —Desafié.
Dudó, tragando audiblemente mientras me miraba. El otro
guardia puso los ojos en blanco y sacó sus llaves, acercándose
con gran bravuconería. Fue innecesariamente brusco cuando
desabrochó las ataduras detrás de mi espalda, y aunque
probablemente podría haber alcanzado su arma, sabía que
incluso si los mataba a ambos, había un pequeño ejército
esperándome afuera de esa puerta. Nunca llegaría vivo a Lewis,
y mucho menos lograría salir de la isla, y aunque había hecho las
237
paces con la muerte, no estaba listo para caer sin luchar.
Me cambié y me puse el traje de tres piezas que me quedaba
perfecto, preguntándome a qué estaba jugando Lewis. Supuse 01/2023
que pronto lo descubriría, y estaba claro que mis guardias no
estaban interesados en hablar.
Se quedaron a cada lado de mí, guiándome hacia la escalera
en el pasillo trasero. Me encargué de trazar un mapa de mi
entorno para estar preparado en caso de que se presentara la
oportunidad de escapar.
El lugar era más grande de lo que parecía desde el exterior, y
en una inspección más profunda me di cuenta de que mi
primera corazonada había sido correcta. Este era
definitivamente una especie de teatro reutilizado.
Me llevaron arriba a un palco privado con vista al anfiteatro
vacío de abajo. El teatro en sí era circular, y rodeaba un gran
escenario actualmente cubierto con dos enormes cortinas rojas.
Cuando pensé en para qué podría usarse, mi estómago se
revolvió con tanta repugnancia y rabia que tuve que tratar de no
pensar en eso para mantener la calma.
La charla de radio proveniente de las comunicaciones en las
caderas de ambos guardias se disparó repentinamente, y el
mayor murmuró algo sobre un control perimetral antes de
volverse hacia el chico.
—Vigílalo. Vuelvo enseguida.
—¿Adónde vas? —Protestó el chico, legítimamente alarmado.
—Los invitados están llegando —dijo el otro guardia con
impaciencia. —El jefe quiere que explore el área primero. Tienes
un arma, así que úsala, y si eres demasiado cobarde para hacer
eso, Miller te tiene cubierto—. Levantó la mano y miró a través
238
del teatro.
Al instante siguiente, apareció un punto rojo en el centro de
mi pecho. Seguí la trayectoria de la luz a otra caja, y aunque no 01/2023
podía ver a nadie en las sombras, sabía que Miller
probablemente estaba lejos de ser el único con sus ojos, y su
vista, puestos en mí.
El chico pareció calmarse, no es que tuviera muchas opciones
cuando su pareja ya se estaba yendo.
—Debe ser duro —dije después de un momento. Podía sentir
la tensión saliendo del chico.
Me miró de reojo, con ambas manos en su arma.
—¿Qué cosa? —Preguntó con cautela.
—Estoy seguro de que viniste aquí atado y amordazado en la
parte trasera de un camión —le respondí. —Probablemente
pensaste que te ibas a escapar cuando saliste del hoyo. Y luego
te dan un trabajo de mierda como este.
 Me di cuenta por la mirada en sus ojos que había evaluado su
posición correctamente. Se endurecieron un momento después.
—No sabes una mierda. Cállate.
—Sabes que él nunca te dejará ir, ¿no? —Pregunté. —No sé lo
que te dijeron, pero después de todas las cosas que has visto y
toda la mierda que te han hecho, nunca serás libre. Vas a pasar
el resto de tu vida poniendo la tuya en peligro por un hombre
que te ve como alguien que vale menos que la mierda en las
suelas de sus zapatos, siempre diciéndote a ti mismo que
eventualmente llegará un momento en que todo terminará, un
momento en el que podrás ser libre, pero en el segundo que
des ese primer paso hacia la luz, terminarás con una bala entre
239
los ojos.
Los ojos del chico se entrecerraron, pero pude ver que el
miedo superaba su ira. 01/2023
—No me iré —dijo entre dientes. —No importa.
—¿No lo harás, o no puedes? —Desafié.
Apretó la mandíbula y miró hacia abajo, al teatro vacío.
—Mi hermana está aquí —dijo en voz baja—. Lewis dice que
no la venderá fuera de la isla si hago lo que él dice. Cinco años y
los dos estamos fuera.
—Ah —dije en un tono de complicidad. —Y tú le crees.
La indignación brilló en sus ojos. Estaba siendo un imbécil
condescendiente, y eso fue a propósito. El orgullo era una
debilidad tan efectiva para aprovecharse como cualquier otra
cosa. Especialmente cuando se enorgullecía de la capacidad de
alguien para proteger a sus seres queridos.
—Solo cállate —dijo entre dientes. —O te obligaré.
 Me encogí de hombros con apatía, sabiendo cuándo era el
momento de retroceder. El chico era débil, pero la mala
disciplina del gatillo y una mano temblorosa eran tan peligrosos
como un asesino astuto cualquier día. A veces incluso más.
Sin embargo, había estado buscando una debilidad para
explotar, y podría haberla encontrado.
No dije nada cuando los sonidos de actividad comenzaron a
llenar la casa de subastas de abajo. Había gente llenando los
asientos, todos ellos con máscaras con apariencia de animales
como una especie de mascarada retorcida.
Los hedonistas eran un jodido cliché. La mayoría eran
hombres, pero también había algunas mujeres en la mezcla. No
240
tenía dudas de que detrás de esas máscaras se escondían
bastantes rostros que reconocería, y no todos ellos del
inframundo. 01/2023
El guardia había estado observando a la multitud de abajo,
mirando en mi dirección de vez en cuando, pero cuando se
congeló y su expresión cambió, ni siquiera necesité mirar por
encima del hombro para saber que su jefe había llegado.
Me giré para encontrar que Lewis estaba allí, efectivamente,
caminando hacia mí.
—Lamento haberte hecho esperar —dijo Lewis, hundiéndose
en el asiento a mi lado. Saludó al guardia. —Ve a esperar afuera.
—Sí, señor —dijo el chico, tomando su rifle y saliendo del
palco privado. Cerró la puerta detrás de él y no escuché el cierre.
—Es una casa bastante llena —comenté. —¿Es una ocasión
especial?
—Por supuesto —dijo Lewis. —No pensaste que perdería tu
tiempo, ¿verdad?
 Resoplé.
—No, claro que no.
—Es la subasta semestral —dijo. —Parece que llegas justo a
tiempo. Imagínate eso.
—Oh, sí —dije, mirando hacia otro lado. —Mi sincronización
es impecable. Entonces, ¿eso significa que estoy en el bloque de
subastas?
—¿Tú? —Preguntó en un tono incrédulo. —Por supuesto que
no. Tú —dijo, su mirada me recorrió deliberadamente—no
tienes precio. No hay una suma por la que estaría de acuerdo en
separarme de ti, no ahora que finalmente eres mío.
—Qué encantador —dije. —Y aquí pensé que era unas
241
décadas demasiado viejo para ti.
Él se rio entre dientes, su brazo envolvió el asiento detrás de
mí. 01/2023
—Mi hermano y yo nunca compartimos los mismos gustos.
No en lo que a eso se refiere.
—Entonces no participas, solo facilitas —dije. —Perdóname
por ver una distinción sin una diferencia.
—Estás perdonado —dijo sin perder el ritmo. —Pero no te
preocupes. Sé cómo eres. Y debo admitir que pasé mucho
tiempo tratando de decidir qué hacer contigo. Poco después de
la muerte de mi hermano, torturarte y luego matarte parecía lo
mejor, suficientemente satisfactorio.
—¿Qué cambió? —Pregunté.
Me miró como si fuera obvio.
—Hay pocas cosas en este mundo que están fuera de mi
alcance, James. Incluso menos que alguna vez hayan planteado
un desafío, pero tú... Me evadiste tan hábilmente y durante
tanto tiempo que fue difícil no quedar impresionado. Tú me lo
quitaste, y dejando de lado mis agravios personales con mi
hermano, eso no es algo que pueda pasar por alto. Pero me
diste algo a cambio. ¿Y sabes qué es eso?
—No puedo imaginarlo —dije aburrida.
Lewis sonrió mientras se inclinaba, lo suficientemente cerca
como para que pudiera sentir su aliento en mi piel.
—Obsesión. Y estoy seguro de que no necesito decirte esto,
pero para hombres como nosotros, eso es lo mejor para amar,
¿no es así?
Aparté la mirada, tratando de ocultar mi irritación. Dios, era un
bárbaro. Y como que sonaba como Silas. ¿Estaba realmente tan
242
enamorado que no lo había notado antes?
—Me siento halagado, de verdad —le dije. —¿Te gustaría un
autógrafo? Porque no necesitabas tomarte todas estas 01/2023
molestias.
Él resopló.
—Desafiante. Por suerte para ti, lo encuentro encantador —
dijo, acariciando el cabello hacia atrás de mi cuello. Mi piel se
erizó con su toque, pero estaba seguro de que tenía mucho más
que eso planeado. —Voy a disfrutar desglosarte, poco a poco.
Tenemos mucho que esperar.
—No puedo esperar —dije rotundamente. —Entonces, ¿por
qué me trajiste aquí?
—Para disfrutar del espectáculo, por supuesto —dijo, pasando
su brazo alrededor de mí para acercarme a su costado. Me
esforcé, pero él apretó su agarre, envolvió una mano alrededor
de mi cuello y apretó justo en el lugar correcto, lo
suficientemente fuerte como para comprimir mi yugular hasta
que comencé a marearme.
—No seas así —regañó. —La diversión está por comenzar.
Miré hacia abajo cuando vi que el primer cautivo era
arrastrado al escenario. La joven estaba temblando, ya sea por
miedo o por el hecho de que vestía un vestido corto rojo sin
mangas en una habitación sorprendentemente fría para estar en
un lugar tropical. Probablemente ambos.
El subastador comenzó a pujar por ella como si fuera un
objeto, y las ofertas llegaron de inmediato con el hombre en la
primera fila ofreciendo veinte mil.
—¿Lo ves? —Preguntó Lewis, señalando al hombre que había
243
comenzado la subasta. —Ese es Mickey Romero. Lo has visto en
las noticias de la noche, ¿supongo? —Pareciendo tomar mi
silencio como una respuesta, continuó: —Y ese hombre con la 01/2023
máscara de conejo y el traje gris de allí, ese es el nuevo jefe de
operaciones de la familia Masdon de Nueva York. Reemplazó a
su predecesor hace unos dos o tres años, meses después de que
lo mataras.
Había estado tratando de mantener mi expresión neutral, pero
estaba claro por el regocijo en sus ojos que había fallado.
—Oh, lo siento —dijo en un tono lleno de condescendencia.
—¿De verdad pensaste que podrías lograr algo allí? Eso es
precioso. Pero mira, para eso te quería aquí esta noche, James. A
pesar de tu brillantez, sobresales mintiéndote a ti mismo.
Pensando que puedes jugar al vigilante... pensando que en
realidad lograría cualquier cosa. Después de todas las personas
que mataste, incluido mi hermano, ¿qué has logrado en
realidad?
 —Matar a tu hermano fue el fin, no solo el medio —respondí.
Él se rio.
—Tal vez sí, pero ¿todos los demás? —Desafió. —Puedes
mentirte a ti mismo, pero no puedes mentirme a mí, James.
Estás tan desesperado por darle sentido a todo. Por darle
sentido a tu vida. Pero no puedes. Toma a ese maestro tuyo, por
ejemplo. ¿Como cuántos años pasaste a su lado?
—Suficientes —dije entre dientes.
—¿Y qué tienes que mostrar a cambio? —Se burló. —Trató de
matarte al final, ¿no?
—Por mucho que aprecie un buen paseo por el camino de la
memoria, ¿tiene sentido tu pequeño discurso? —Pregunté.
244
Lewis se burló.
—Eso es todo, amor. No hay uno. No tiene sentido nada de
esto aparte de lo que obtenemos de él. En cuanto a lo que yo 01/2023
obtengo de esto, bueno... hay dinero y poder más allá de lo más
salvaje de los sueños de cualquiera. Y ahora estás tú. Diría que
es un arreglo bastante bueno. Tú, por otro lado... —Él hizo un
tsk compasivo. —No eres tan afortunado.
La puja continuó mientras trataba de mantener mi expresión
neutral. Lewis parecía a punto de decir algo más cuando las
luces parpadearon en lo alto y la joven que acababa de ser
conducida al escenario levantó la vista con nerviosismo.
Unos segundos más tarde, las luces se apagaron por completo
y los susurros ansiosos comenzaron a extenderse entre la
multitud mientras la gente intentaba averiguar si esto era parte
del espectáculo.
A juzgar por lo que pude ver del rostro de Lewis en las
sombras, no lo era.
 Interesante.
—Volveré —murmuró, levantándose de su asiento. Se detuvo
en la puerta y lo escuché ordenarle al joven guardia que se
asegurara de que no me fuera a ninguna parte.
Ya había aislado el eslabón débil, y ahora, al parecer, el
destino me había dado la oportunidad que había estado
esperando.
—No pasará mucho tiempo ahora —le dije al niño mientras
volvía a entrar en la caja.
Me di cuenta por la forma en que apretaba su arma con más
fuerza y sus ojos seguían yendo y viniendo entre mí y la puerta
que había logrado despertar su interés.
245
—¿De qué estás hablando?
—Este lugar tiene generadores de respaldo, estoy seguro —le
dije, sabiendo que tenía que elaborar mi mentira con cuidado. 01/2023
Por lo que yo sabía, que las luces se apagaran fue solo un
accidente, y no podía contar con que Silas o los demás hubieran
venido por mí. Pero aun así lo usaría a mi favor. —¿De verdad
crees que es un accidente que las luces se apaguen, cuando
todas estas personas importantes están reunidas en el mismo
lugar?
Sus ojos se entrecerraron con sospecha.
—¿Fuiste tú? —Preguntó dudoso.
—Digamos que tengo amigos en todas partes —dije
intencionadamente. Me di cuenta por la mirada en sus ojos que
creía lo que estaba diciendo al menos lo suficiente como para
no estar seguro, y una vez que se abrió la puerta de la duda, el
resto fue bastante fácil. —Dentro de una hora, las cenizas de
este lugar estarán llenas de desviados. Viniste aquí como una
víctima y, tal como yo lo veo, puedes irte como un héroe o
como uno de ellos. Si eliges lo último, tus opciones son salir de
aquí esposado o en una bolsa para cadáveres. La elección es
tuya.
Sus ojos se abrieron, y pude ver el miedo en ellos, luchando
con la duda. Un poco de esperanza también, que
probablemente era algo que el pobre chico no había tenido en
mucho tiempo. Tanto tiempo que había renunciado a esperar a
que alguien viniera a salvarlo a él y a su hermana, y había
decidido que iba a tener que hacer el trabajo de salvarlos a
ambos de la única manera que sabía: siendo obediente.
No quería lastimarlo, pero lo haría si fuera necesario. Solo
246
podía esperar que esa no fuera la única opción.
Miró hacia el vestíbulo y pude escuchar los sonidos cada vez
más nerviosos de los otros guardias hablando entre ellos. 01/2023
—Ya deberían haber podido encender los generadores de
respaldo —murmuró.
Tenía razón, pero todavía no me hacía ilusiones.
Las suyas, en cambio… mi vida dependía de ellas.
Había aprendido hace mucho tiempo que la manipulación, a
pesar de toda la mierda de la que hablaba la gente, también
podía usarse para el bien dadas las circunstancias adecuadas. A
veces, especialmente cuando estabas indefenso, era la única
defensa que tenías.
—Nos estamos quedando sin tiempo. Tienes que tomar una
decisión —le dije con calma. —¿Cómo te llamas?
Dudó, pero me miró a los ojos.
—Ben.
 Sabía que lo tenía. No estaba seguro de si él lo sabía todavía,
pero yo sí.
Debajo de las armas y el traje, no era más que un niño
soldado, asustado y en busca de orientación. Todavía tenía la
esperanza de que alguien viniera y lo salvara, incluso si lo
supiera mejor.
Ojalá fuera un día de suerte para los dos.
—¿Cómo te ayudo? —Preguntó con cautela.
Bingo.
—Lo primero es lo primero, ¿está tu hermana en algún lugar
seguro? —Pregunté.
Él asintió.
247
—Hay otra casa en la isla. Ella está allí. Sin embargo, está a un
kilómetro de aquí.
—Bien —dije. —Todos están luchando en este momento, por 01/2023
lo que probablemente habrán llevado a todos los que están
ofreciendo a subasta a algún lugar donde puedan ser
contenidos.
—La sala de espera —dijo Ben con un asentimiento. —Mi
amigo la está cuidando.
—¿Un amigo? —Repetí. —¿Es digno de confianza?
—Le confío mi vida —respondió.
—¿Crees que, entre los dos, podrías sacar a los demás de aquí
y llevarlos a la casa donde está tu hermana en los próximos
veinte minutos? —Pregunté.
Él dudó.
—Yo... creo que sí, sí.
 —Bien —dije. —Porque este lugar no va a estar en pie en
treinta. ¿Tienes algo que pueda usar para mantenerme en
contacto contigo?
Dudó de nuevo antes de alcanzar la radio a su lado.
—Usa esto. Me quedo con la de Kyle.
La escondí en mi bolsillo.
—Ahora muévete. Supongo que en realidad te enseñaron a
usar el arma —dije, asintiendo.
—Sí —dijo, levantando la barbilla con orgullo. —Por supuesto.
—Si alguien intenta detenerte o cuestionarte, úsala —le dije.
—No te detengas a pensar en ello.
Él asintió, siguiéndome hasta la puerta.
248
—Está bien. ¿Qué pasa después de eso?
—Enviaré a alguien por ti y los demás —le aseguré. —Ahora,
¿puedes sacarme de aquí? 01/2023
El niño no tenía ninguna razón real para creerme, aparte de
algo que bien podría haber sido una coincidencia, pero por la
mirada en sus ojos me di cuenta de que quería hacerlo. Y
siempre fue bastante fácil convencer a alguien de algo que ya
quería creer. Para bien o para mal.
Miró hacia la puerta y vaciló de nuevo.
—Sí —dijo finalmente, quitándose las esposas del cinturón—.
Será más fácil si te pones esto.
Esperó hasta que me giré para poner mis manos detrás de mi
espalda y le permití esposarlas.
Así como así, el equilibrio de poder entre nosotros había
cambiado, incluso si yo era una vez más el que estaba sujeto.
—Vamos —dijo Ben, empujándome hacia la puerta mientras
mantenía el arma en mi espalda. Hice lo mejor que pude para
parecer un prisionero mientras caminaba hacia adelante y dos
de los otros guardias en el pasillo se detuvieron para mirarnos,
con el ceño fruncido.
—¿A dónde lo llevas? —Uno exigió.
—El jefe quiere trasladarlo a un lugar más seguro hasta que
vuelva la electricidad —respondió Ben. Para su crédito, estaba
tranquilo y sereno. —¿Alguna palabra sobre la situación de la
luz?
El otro guardia se relajó un poco, sacudiendo la cabeza.
—Debe haber sido un interruptor automático. Sin embargo,
estas perras ricas están enojadas. Será mejor que la ayuda se
mantenga sirviendo bebidas.
249
Ben soltó una carcajada burlona y me dio un codazo en la
espalda con el cañón del arma hasta que comencé a avanzar de
nuevo. 01/2023
Tan pronto como estuvimos fuera del alcance del oído de los
demás en la base de una escalera cubierta, susurró:
—Lo siento.
Este niño. De todos modos, nunca habría durado mucho aquí.
Eso era lo único que me impedía sentirme más culpable por
poner su cuello en peligro en este momento.
—Lo hiciste bien —le dije mientras me desabrochaba las
esposas. —Supongo que no tienes un arma extra.
Hizo una pausa, luego metió la mano en su pistolera y me
ofreció su pistola.
—Estás seguro de esto, ¿verdad? —Preguntó, aferrándose a
ella por un momento cuando me estiré para tomarla.
Lo miré a los ojos, sosteniendo su mirada fijamente.
 —Haz lo que digo y tú y tu hermana lograrán salir de este
lugar. Juntos. Te lo prometo.
Ben respiró hondo y soltó el arma.
—Espero que tengas razón, señor.
Eso hizo dos de nosotros.
—Cuídate y ten cuidado —le dije, observándolo mientras se
iba.
Subí las escaleras y salí al pasillo vacío, encontrando una
habitación donde podía reagruparme y esperar a que Ben me
dijera por radio que su parte de la misión había sido un éxito.
Había mucho en juego en un niño ingenuo, pero si había algo
que yo tenía trabajando a mi favor, era que Lewis había creado
250
su propio pequeño mundo, y pensó que tenía el control total de
él.
Estábamos a punto de descubrir qué tan cierto era eso. 01/2023
La radio crepitó y escuché la voz de Ben.
—Este es Ben. ¿Me copias? —Preguntó.
—Copio —respondí.
—Evacuamos a todos a la camioneta —dijo, con la voz
temblorosa por la emoción. —Nadie intentó siquiera
detenernos. Sin embargo, escuché disparos más abajo en la isla,
cerca de la costa. Creo que tus amigos están aquí.
Mi propio corazón comenzó a latir un poco más rápido. Así
que habían venido por mí, después de todo. Imagina eso.
—Justo a tiempo —dije, tratando de sonar indiferente—. Saca
a los demás de aquí y espera más instrucciones.
—Entendido —dijo.
Ahora la misión de rescate había terminado y podía comenzar
la verdadera diversión.
 29

LUCA

Mientras volábamos sobre las oscuras y picadas aguas del

251
Atlántico, no pude evitar sentir una mezcla de emociones.
Llegar a la isla fue más fácil decirlo que hacerlo. Todo tenía
que ser en el momento perfecto, pero todavía estaba en lo más 01/2023
alto por traer a Timothy a casa con éxito. Silas había hecho
arreglos para conseguirnos un helicóptero, pero eso requería
sacar al piloto original, y esa noche aprendí que volar era una de
las muchas habilidades en el repertorio de Silas.
Malcolm apenas había dicho una palabra en todo el vuelo, así
que asumí que Silas le había advertido. Eso no le impedía
mirarme con el ceño fruncido como si yo fuera el que lo había
jodido todo, pero realmente me importaba una mierda lo que
pensara en este momento. Podría hablar conmigo más tarde.
La isla apareció a la vista y pude ver la enorme mansión que
servía como guarida del hombre que se había llevado a mi hijo.
Estaba rodeada por un exuberante follaje verde y una valla alta,
pero íbamos a entrar por la entrada de la azotea como
“empleados” ahora que habíamos cortado las luces.
 Silas se veía casi normal con su cabello largo y blanco
escondido debajo de una gorra de piloto, y Malcolm, bueno... se
mezclaba con los otros guardias que podía ver merodeando por
el exterior bastante bien.
Fruncí el ceño, entrecerrando los ojos en la distancia.
—¿Eso es humo?
Silas siguió mi mirada, su expresión cambió a una de sorpresa
cuando vio los zarcillos grises ondeando desde los lados de la
mansión. Eran pequeños a primera vista, pero cuanto más nos
acercábamos, mejor podía verlos.
—Mierda, el lugar se está quemando —comentó Malcolm
mientras Silas bajaba el helicóptero hacia la azotea.
252
Mi corazón comenzó a martillar en mi pecho. Esto tenía el
nombre de James escrito por todas partes.
—Despacio —dijo Silas. —Ni siquiera hemos aterrizado 01/2023
todavía.
Fue entonces cuando me di cuenta de que estaba agarrando
el manillar por encima de la puerta del helicóptero como si
planeara saltar, sin paracaídas.
—Correcto —murmuré. —¿Supongo que este lugar no tiene
un departamento de bomberos?
—Me encargaré de los guardias de allí abajo —dijo Malcolm
mientras se preparaba para saltar del helicóptero abierto ahora
que había aterrizado. —Ustedes están yendo por las nubes.
—Ese es el plan —dijo Silas.
Malcolm solo puso los ojos en blanco y se fue por lo que
supuse que era la escalera de incendios, pero conociéndolo, no
me habría sorprendido si planeaba descender en rapel solo por
el placer de hacerlo.
 Salí y corrí hacia la puerta de metal en la azotea, sin
sorprenderme cuando se negó a moverse cuando tiré de la
manija. Después de dos patadas sólidas, la puerta se derrumbó,
pero se enganchó contra algo adentro y escuché el ruido de las
cadenas.
Mierda, quienquiera que haya hecho esto realmente no quería
que nadie entrara. O saliera.
—Tengo algo en el helicóptero —dijo Silas, aparentemente
ajeno a los disparos que sonaban debajo de nosotros. O
simplemente no le importaba una mierda.
Me congelé, preguntándome cómo le estaría yendo a
Malcolm.
253
—¿Deberíamos…?
—Él está bien —dijo Silas en un tono indiferente, ya cavando
en la parte trasera del helicóptero. Regresó con un par de 01/2023
enormes cortadores de pernos y empujó la puerta para abrirla
nuevamente antes de cortar las cadenas del interior. Para ser tan
delgado como era, era sorprendentemente fuerte.
Todavía no salía humo del último piso, pero aún podía olerlo
en el aire cuando entramos al pasillo. Era lo suficientemente
grueso como para hacerme ahogar.
—Toma —dijo Silas, ofreciéndome uno de los pañuelos que
había sacado de su bolsillo.
—Realmente eres MacGyver, ¿no? —Pregunté secamente.
—Ex Boy Scout —dijo. —Nunca duele estar preparado.
Parpadeé hacia él.
—Nunca puedo decir si estás bromeando.
 Él solo resopló y caminó más por el pasillo, deteniéndose a
mitad de camino. Se puso solemne de repente, como si
estuviera escuchando algo.
—¿Escuchas eso? —Preguntó.
Estaba a punto de decir que no cuando me concentré y capté
el inconfundible sonido de gritos debajo. Era una apuesta
segura que los otros ocupantes del edificio ya habían notado el
fuego.
—¿Crees que este es James, o…? —Pregunté, manteniendo mi
arma en la mano y mis ojos bien abiertos. Por lo que pude ver,
no había nadie más en este piso, pero sabía que eso no
significaba que tuviéramos paz garantizada por mucho tiempo.
254
—Tiene la marca de James —respondió Silas. —Siempre ha
tenido un don para lo dramático.
—Sí —dije con un suspiro, tratando de no mostrar lo 01/2023
jodidamente asustado que estaba. No de cualquier otra persona
con la que nos encontremos, sino de la posibilidad de que
James ya estaba...
No, no iba a dejarme ir allí. No pude. El pensamiento en sí fue
suficiente para volverme loco.
Me di cuenta claramente de que Silas me observaba mientras
nos deslizábamos por el pasillo, revisando cada habitación. La
mayoría de ellos estaban vacíos, pero el hecho de que este lugar
estaba configurado como una especie de jodido hotel para los
ricos y famosos no se me escapó.
Cuando pusiera mis manos en Lewis, tenía más que unos
pocos huesos para conseguir de él.
Sin embargo, sacar a James de aquí era una prioridad, sin
importar lo que tuviera que decir al respecto. Y nunca más lo
dejaría fuera de mi puta vista. Había comenzado como
prisionero de Silas, pero ahora era mío.
—Vamos —le dije mientras Silas vacilaba cerca de la escalera.
—Hay que mantenerse en movimiento.
Dudó un poco demasiado para mi gusto, así que mi
impaciencia se apoderó de mí y me dirigí a la escalera yo
mismo. Tuve que derribar la puerta ya que también estaba
cerrada con llave, pero al menos no estaba encadenada.
Tenía que mantener mis pensamientos bajo estricto control. Si
los dejaba vagar demasiado lejos, iba a perder la cabeza. La
perspectiva de perder a James era más aterradora de lo que
podía manejar, por lo que mi cerebro simplemente estaba
255
cerrando la idea, negándose a permitir que se afianzara.
—Espera —dije una vez que llegamos al final de la escalera y
pude escuchar la dirección donde los gritos eran más fuertes. — 01/2023
Ahí debe ser donde todos están siendo retenidos.
—Es un teatro —murmuró Silas, mirando a su alrededor. —
Reconozco la arquitectura. Ese es probablemente el salón
principal de abajo, pero debería haber asientos en el nivel
superior. Podría darnos una mejor vista.
Asentí, siguiéndolo por el pasillo. Claro que el maldito Silas
conoce el camino en algún lugar en el que nunca haya estado
antes. Y claro que era un maldito teatro.
—Allí —dijo Silas, asintiendo hacia adelante. Antes de que
pudiera llegar a la puerta, escuché a alguien gritar por el pasillo
y me congelé.
Un guardia dobló la esquina corriendo, pero antes de que
pudiera detenernos, disparé instintivamente. Golpeó el suelo y
Silas me miró, levantando una ceja.
 —No está mal, DiFiore.
—Lo que sea —murmuré, molesto de que él y Malcolm
siempre actuaran como si yo fuera nuevo en esta mierda.
El hecho de que no fuera un asesino a sueldo no significaba
que iba a mearme a la primera señal de violencia.
Seguro como el infierno que no cuando el hombre que amaba
estaba en la línea.
—Aquí —dije, señalando con la cabeza hacia la puerta de lo
que supuse que era uno de los palcos.
Silas asintió y me indicó que me callara mientras entraba y
reapareció un segundo después para anunciar que todo estaba
despejado. Seguí su ejemplo y me quedé cerca de la pared,
256
parcialmente oculto por las cortinas que envolvían la caja.
Tan pronto como entré en el asiento privado, los gritos se
extendieron desde abajo y pude ver a la multitud atrapada en el 01/2023
teatro, pisoteándose unos a otros en un intento desesperado
por escapar. Si bien mi respuesta inicial fue querer ayudar, el
hecho de que todos y cada uno de ellos fueran adultos que
usaban algún tipo de máscara de animal espeluznante lo calmó
muy rápido.
Examiné a la multitud en busca de alguna señal de James, o
de alguien que pareciera inocente, o como si estuviera aquí en
contra de su voluntad, pero, aunque había mucha gente en
pánico mientras se arañaban unos a otros para escapar, no
parecía haber nada que se ajuste a ese criterio.
Y tampoco vi ninguna señal de James, lo cual fue a la vez un
alivio y un motivo de preocupación.
¿Dónde diablos estaba?
Y, de hecho, ¿dónde estaba Lewis?
 Fuera lo que fuera lo que había pasado, era claramente obra
de James. Tenía que ser. No había forma de que Lewis desatara
este tipo de caos en su propia propiedad, y con una casa
repleta, nada menos. Lo que significaba que James de alguna
manera se había liberado de su captor.
No me sorprendió en absoluto. No era más que fuerte, y
demasiado inteligente para el bien de nadie. Nunca había
pensado que fuera posible tenerle miedo a alguien y admirarlo
tanto al mismo tiempo.
En este momento, sin embargo, solo tenía miedo por él.
Estaba a punto de rendirme cuando vi algo al otro lado del
teatro. Algo en las sombras.
257
Me congelé mientras miraba la caja a nuestro lado y me di
cuenta de que era James quien estaba parado allí, mirándome
como si estuviera tan sorprendido como yo. 01/2023
—¿James? —Murmuré, congelándome cuando vi la sombra
detrás de él.
—¿Luca?
—¡No! —Grité, aterrorizado de que fuera demasiado tarde.
 30

JAMES

—¿Luca? —Me atraganté con incredulidad, al ver al hombre al

258
otro lado del teatro.
No. Se suponía que no debía estar aquí. ¿Cómo él siquiera…?
Antes de que pudiera terminar ese pensamiento, lo vi 01/2023
gritándome algo. Entonces sentí el arma en mi sien y el cuerpo
en mi espalda.
Mi columna se puso rígida cuando me di cuenta de que había
bajado la guardia. Que era exactamente lo que había temido
que pasara desde el principio con Luca.
Bueno, tal vez no al principio. Al hijo de puta le había tomado
más tiempo abrirse camino a través de mis defensas, y en ese
sentido, lo había subestimado profundamente. Era mucho más
nefasto de lo que le había dado crédito, y supe por la forma en
que mi corazón se hundió y saltó al verlo aquí en este lugar, el
último maldito lugar en el que se suponía que estaría, el idiota
trataba de luchar por una causa perdida.
 Todavía era bastante ridículo que Luca pensara que me
amaba, pero a pesar de lo autodestructivo que era, me encontré
preguntándome... ¿lo amaba a cambio?
No pensé que estaría aquí de otra manera, e incluso ahora
que casi con seguridad estaba a punto de morir, no habría
cambiado nada.
Excepto que tal vez lo habría contenido, o al menos le habría
dado algo para noquearlo por más tiempo para que estuviera
con su hijo en este momento en lugar de tratar de rescatarme.
Malditos Waltons de la mafia.
Sentí el otro brazo de Lewis mientras me envolvía por detrás,
acercándome tanto a él que iba a necesitar una de esas duchas
259
que le daban a la gente que había estado expuesta a peligros
nucleares, con cepillo de alambre y todo.
—Ahí estás —dijo Lewis, su voz ronca por el humo. A pesar de 01/2023
lo altos que eran los techos del teatro, era solo cuestión de
tiempo antes de que nos afectara a los dos. —No pensaste que
te dejaría escapar tan fácilmente, ¿verdad?
—No sé, pareces perfectamente satisfecho con la idea de que
alguien como tú pueda salirse con la suya todo este tiempo —
dije, bastante seguro de que aún no había visto a Luca. Luca
había desaparecido de la vista, y si sabía lo que era bueno para
él, se iba a quedar fuera.
Por supuesto, sabía que no lo haría. Era un DiFiore. Era
absolutamente ilusorio pensar que era capaz de
autoconservarse hasta cierto punto, pero un hombre podía
soñar.
Era extraño cómo había pasado tantos años resentido con
Silas por abandonarme porque lo amaba. Y ahora, porque
amaba a Luca, no quería nada más que él hiciera lo mismo.
Quería que se diera la vuelta y dejara este lugar, para estar con
su hijo, incluso si eso significaba que nunca lo volvería a ver.
Esto era amor, ¿no? Parecía una dolorosa ironía que lo
averiguaría justo antes de morir.
No, en realidad, eso sonaba bien.
—¿De verdad pensaste que esto iba a funcionar? —Lewis
preguntó con amargura. —¿De verdad pensaste que podrías
darle la vuelta y ser el héroe por una vez?
—No —dije aburrido. —Siempre me he sentido perfectamente
cómodo interpretando al villano, y soy bueno en eso. No veo
mucho sentido en cambiar ahora. ¿Pero arrastrarte al infierno
260
conmigo? Ahora eso suena encantador.
Me soltó solo para golpearme la cabeza con el costado de la
pistola, lo suficientemente fuerte como para enviarme 01/2023
despatarrado contra la barandilla. Me zumbaban los oídos y la
cabeza me daba vueltas, pero logré sujetarme a la barandilla y,
antes de que pudiera apuntar con mi propia arma, Lewis disparó
y me la quitó de las manos.
Siseé cuando la bala rozó la carne de mi pulgar y lo agarré
instintivamente.
Lewis caminó hacia mí, con la boca cubierta por el dorso de la
mano mientras tosía.
—Sabes, iba a disfrutarte por un tiempo más, pero está
bastante claro que no eres lo que pensé que eras.
—Me halagas —bromeé, viendo como Luca aparecía en la
puerta detrás de él, llevándose un dedo a los labios.
Como si fuera a dejar escapar su nombre justo enfrente de
Lewis: ¡Luca! ¡Ahí estás! ¡Te tomaste tu dulce maldito tiempo!
 Mi adorable idiota.
Luca presionó el cañón de su arma en la parte posterior de la
cabeza del otro hombre y Lewis se congeló.
—Baja el arma —le advirtió Luca.
Los ojos de Lewis ardían con despecho mientras me miraba.
Por unos momentos, me di cuenta de que estaba tratando de
decidir si valía la pena morir siempre y cuando me sacara en el
proceso, y si hubiera sido cualquier otra persona, habría sido
capaz de respetar eso.
Finalmente, bajó el arma y, en cuanto lo hizo, aproveché la
oportunidad para devolverle el favor y le disparé un tiro en el
antebrazo derecho y otro en la rótula izquierda.
261
Con un gemido de dolor, Lewis se derrumbó, agarrándose las
heridas mientras la sangre brotaba libremente de ellas, y miré
hacia arriba cuando Luca entró corriendo en la habitación. 01/2023
—No lo mates —dije mientras Luca arrebataba el arma del
otro hombre y apuntaba. —Lo quiero vivo.
—Mira eso —murmuró Luca, empujando el arma en su cintura
y envolviendo su grueso brazo alrededor de la garganta de
Lewis para ahogarlo—. Estamos de acuerdo en algo.
—No deberías estar aquí —le dije, viendo cómo la lucha de
Lewis cesaba y la luz de la conciencia abandonaba rápidamente
sus ojos.
—Eso somos dos —dijo intencionadamente, levantándose una
vez que el hombre estuvo en el suelo y Silas entró en la
habitación. La mitad inferior de su cara estaba cubierta como la
de Luca, pero ambos todavía estaban tosiendo por el humo.
Yo también, para el caso.
Silas se congeló, mirando entre nosotros, luego hacia Lewis.
 —¿Está él…?
—Todavía no —dijo Luca—. Llévatelo tú. Yo tengo a James.
Antes de que pudiera protestar, Luca tenía mi brazo sobre su
hombro y me estaba sacando del palco.
—Estoy bien —murmuré.
—¿Podrías dejar de ser tan terco por cinco segundos para que
podamos salir de este lugar? —Luca gruñó, arrancándose el
pañuelo de la cara para presionarlo sobre la mía—. Ponte esto.
Es cierto que estaba un poco mareado, así que lo tomé.
—¿Cómo llegaste aquí? —Pregunté a través de la tela,
resistiendo el impulso de respirar su aroma. Lo había extrañado
más de lo que quería admitir.
262
—Esa es una larga historia —dijo Luca entre toses. —Pero
estoy más interesado en largarme de aquí antes de que el lugar
se incendie. 01/2023
—Realmente no había planeado salir —admití, sintiendo la
mirada mordaz que me estaba dando. Estaba seguro de que el
humo cada vez más espeso era la única razón por la que no
estaba recibiendo un sermón en este momento, pero estaba tan
aliviado de verlo que me importaba una mierda.
Aliviado. Enfurecido. Estaba acostumbrado a emociones
contradictorias en lo que a Luca se refería.
Nunca iba a poder volver a afirmar que era un hombre
racional, pero estaba sorprendentemente de acuerdo con eso.
Tan pronto como estuvimos afuera en la azotea, Luca se volvió
hacia mí y tomó mi rostro entre sus manos. No estaba
acostumbrado a ver preocupación en los ojos de alguien
cuando me miraban. Ciertamente no alguien como él y, sin
embargo, no había lugar para dudar de que fuera genuino.
 —¿Estás bien? —Demandó. Pasó el pulgar por lo que estaba
seguro que era un moretón que se estaba formando sobre mi
ojo donde Lewis me había golpeado con su arma, y me dolió
como una perra. Sin embargo, todavía se sentía tan bien ser
tocado por Luca.
—Estoy bien —dije, y por una vez, lo dije en serio. Todo
jodidamente dolía, y mis pulmones se sentían como si acabara
de pasar unas horas en Chernobyl, pero Luca estaba aquí, vivo y
conmigo. Eso era más de lo que tenía derecho a pedir. Era más
de lo que jamás me había permitido desear. —¿Qué pasa con
Timothy?
Luca frunció el ceño, mirándome por unos momentos con una
263
expresión ilegible.
—Timothy está bien. Estaba en el sitio señalado, justo donde
esperábamos. 01/2023
—Lo sé —dije, apoyándome contra el costado del
helicóptero—. Pero deberías estar con él, no aquí.
—Lo tendré en cuenta —dijo Luca secamente.
Silas ya estaba en la azotea, arrastrando a Lewis fuera del
teatro, pero solo porque estaba preocupado no significaba que
iba a estar distraído para siempre.
—No pretendo cuestionar tu misión de rescate, pero ¿tenías
que traerlo? —Pregunté.
—Espera hasta que descubras que Malcolm también está aquí
—dijo Luca.
Hice una mueca.
—Maravilloso.
—No voy a dejar que nadie te toque, James —dijo Lucas,
sosteniendo mi mirada. —Eso debería ser obvio a estas alturas,
pero en caso de que no lo sea, déjame dejarlo muy claro. Eres
mío y no irás a ningún lado. Nadie te alejará de mí otra vez. Ni
siquiera tú mismo.
Lo miré en silencio por unos momentos, reprimiendo el
impulso de discutir incluso cuando realmente no quería hacerlo.
—¿Tuyo? —Repetí. —¿Es ese un acuerdo al que llegaste con
Silas, o solo lo estás improvisando?
—Casi improvisando en este punto —admitió. —¿Cómo me va
hasta ahora?
Su mano viajó hasta descansar contra mi mejilla, acariciando
suavemente la carne magullada.
Se me hizo un nudo en la garganta por alguna razón.
264
Probablemente solo el humo.
—Decentemente —le dije. —Todo esto del jefe mafioso
dominante te queda bien. 01/2023
—¿Oh, sí? —Había un brillo travieso en sus ojos cuando dio
un paso más cerca, inclinándose para presionar sus labios contra
los míos. —Tal vez puedas ayudarme a practicar —murmuró en
el beso.
Mis labios se separaron instintivamente y me encontré
enredado en un beso más íntimo y apasionado que cualquiera
de los que habíamos compartido hasta ahora.
Esta vez, fue el alivio más que el odio lo que avivó las llamas,
pero no me quejaba. Todo era más intenso cuando se trataba
de Luca. No importaba cuán positiva o negativa fuera la
emoción. Me hizo sentir cosas que con nadie más había sentido.
Incluso las cosas que alguna vez pensé que entendía, como el
amor y la obsesión, parecían tan pálidas en comparación con lo
que él despertaba dentro de mí.
 —Viniste por mí —dije en voz baja.
Luca frunció el ceño, como si no entendiera.
—Por supuesto que lo hice —murmuró. —Quise decir lo que
dije, James. Te amo.
Fruncí el ceño. Esas palabras tenían menos sentido ahora que
nunca.
—Pensé que era una especie de síndrome de Estocolmo
inverso que desaparecería cuando recuperaras a tu hijo.
Luca me dio una mirada fulminante que era de alguna manera
afectuosa.
—Sí, bueno, supongo que estás equivocado —dijo
rotundamente. —Imagina eso.
265
—Supongo que es agradable equivocarse a veces —admití. —
Primera vez para todo.
Los labios de Luca se curvaron en un extremo. 01/2023
—Eventualmente te acostumbras. Realmente no tienes otra
opción.
—Entonces, ¿eso me convierte en tu prisionero ahora? —
Pregunté.
Luca hizo una pausa para considerarlo.
—Sí, supongo que sí —Respondió. —¿Tienes algún problema
con eso?
Deslicé mis brazos alrededor de su cuello y pasé mis dedos
por su cabello. Me encontré queriendo seguir tocándolo, solo
para recordarme que era real. Para recordarme a mí mismo que
él estaba realmente aquí, ambos lo estábamos.
—No —dije con un suspiro. —No puedo decir que sí.
Luca me besó de nuevo, y me encontré derritiéndome contra
él, no queriendo que esto terminara pronto.
 Por supuesto, Silas se aclaró la garganta, un recordatorio no
deseado del hecho de que, de hecho, todavía estaba aquí.
—Vamos a tener que discutir esto —dijo, mirando de mí a
Luca.
Luca sostuvo su mirada sin pedir disculpas.
—Podemos discutirlo todo lo que quieras —dijo
encogiéndose de hombros. —Pero así es como va a ser.
Silas estaba tenso como si estuviera a punto de discutir, pero
solo suspiró.
—Pospondremos el asunto hasta que regresemos. Esta va a
ser la limpieza del siglo.
—Hay una casa al otro lado de la isla —dije, encontrándome
266
con la mirada de Silas. —Dos de los guardias más jóvenes
desertaron de Lewis y evacuaron a sus cautivos. Asegúrate de
que no sufran daños—. Apreté la mandíbula para pronunciar la 01/2023
palabra rezagada detrás de las demás. —Por favor.
Silas me miró por un momento, su expresión ilegible, antes de
asentir. Volvió a mirar el teatro.
—No tengo prisa por llamar al departamento de bomberos —
dijo rotundamente. —Creo que esto puede resolverse solo.
—No ha terminado —dije entre dientes, mirando a Luca. —
Hay otros. Esta isla es solo una parte de las operaciones de
Lewis.
—Una gran parte de eso ya acabó —respondió Luca. —
Gracias a ti. Ahora, vamos. Vámonos a casa.
Casa.
Por alguna razón, esa palabra me afectó más de lo que
probablemente debería. Me llenó de una extraña sensación de
paz. Pertenecer
 Eso era nuevo.
Luca estaba lleno de sorpresas, y cuando estaba con él, yo
también.
—Sí —le dije, tomando su mano. —Vamos a casa.

267

01/2023
 31

LUCA

Las siguientes doce horas fueron jodidamente borrosas. No es

268
que haya estado viviendo en un horario normal desde hace un
tiempo. Cuando se trataba de involucrarse en la mierda de Silas
y Malcolm, siempre había que considerar el factor de una 01/2023
distorsión del tiempo.
Y luego estaba James.
James, también conocido como Chris, el hombre que había
engañado a mi hermano y al resto de nuestra familia durante
años, también conocido como Demon, el infame asesino en
serie que había traído caos a mi vida.
James, el hombre que se había entregado para protegerme a
mí y a los míos sin otra razón que la misma razón por la que
hizo todo lo demás: porque quería hacerlo.
Y aparentemente, lo que él quería era a mí.
Y lo que yo quería era a él.
Esa era la única cosa que teníamos en común. Era el único
factor primordial de todas las innumerables razones por las que
esto entre nosotros no tenía sentido, era increíblemente
autodestructivo por ambas partes y realmente no debería haber
sido capaz de suceder en un mundo lógico.
Y, sin embargo, mientras lo miraba a través de la sala de estar,
tratando de ser paciente sobre el hecho de que Silas lo estaba
monopolizando con el fin de informarlo sobre todo lo que
acababa de suceder, y así impulsar mi objetivo de informarlo de
una manera completamente diferente, mucho más lejos, no me
importaba.
Ya no quería vivir en mi mundo cuerdo y racional. El mundo al
que me había aferrado con tanta fuerza mientras mi familia
parecía estar tratando de sacarme de él, pateando y gritando.
Y ahora, en cambio, quería vivir en su mundo, a pesar de que
269
era un vacío caótico y arremolinado de violencia y caos. No fue
porque en realidad deseara alguna de esas cosas, sino porque lo
deseaba a él, y ese era el mundo en el que vivía. 01/2023
Porque lo necesitaba.
Y yo estaba dispuesto no sólo a ir al infierno y volver, sino
también a montar allí una bonita casita con una valla blanca y
todo, siempre y cuando eso significara mantenerlo.
Por mucho que quisiera estar a solas con él en este momento,
y decirle todas esas cosas y más, todas las cosas que no estaba
seguro de tener la oportunidad de decir, en lugar de que me
persiguieran como fantasmas el resto de mi vida, mantuve la
boca cerrada.
Íbamos a librar una batalla cuesta arriba cuando se trataba de
convencer a Silas, y mucho menos a Malcolm, de que James
debía estar a mi lado y no en una prisión subterránea, incluso
después de todo lo que había sucedido.
 La parte lógica de mi cerebro entendía de dónde venían, pero
no había nada lógico en mis sentimientos por James, y había
renunciado a tratar de forzarlos a ajustarse a cualquier cosa que
se pareciera a la razón hace mucho tiempo.
La cordura estaba sobrevalorada, de todos modos.
Cuando James finalmente terminó de contar todos los detalles
de su expedición, quedé aún más impresionado y asqueado por
la idea de lo que casi le había sucedido.
Lo que había puesto en juego por mí y por mi hijo.
—Esto es mucho para asimilar —dijo Enzo, frotándose los
ojos. Estaba dormido cuando entramos, y sabía que solo se
había ido a la cama para dormir un par de horas una vez que
270
salimos de la isla a salvo.
Cómo él y Val manejaron toda la mierda que Silas y Malcolm
hicieron sin desarrollar un problema con la bebida estaba más 01/2023
allá de mí. Ya estaba trabajando en mis planes de contingencia
si esto se torcía y trataban de quitarme a James.
El plan A era convencerlos, pero el plan B era escapar con
James y Timothy, lo que traería una serie de problemas por sí
solo. Una serie de problemas que eran completamente
preferibles a la idea de vivir sin él, de no protegerlo, lo quisiera o
no.
—De hecho, lo es —dijo Silas, sentado junto a su marido.
Siempre estaba observando a Enzo de manera protectora, cada
segundo de cada día, y aunque mi hermano era perfectamente
formidable por derecho propio, era algo que entendía ahora
mejor que nunca.
No importaba lo fuerte que fuera James. No importaba lo
capaz que fuera, o la cantidad de mierda que ya había
sobrevivido. No quería que tuviera que hacerlo solo. No quería
que tuviera que valerse por sí mismo, y mientras yo siguiera
respirando, no iba a hacerlo. Nunca más.
—Me alegro de que estén todos bien. Y que hayan sacado a
todos los cautivos —dijo Valentine, que había permanecido en
silencio mientras James hablaba. Incluso yo no sabía qué decir,
dividido entre el temor retroactivo por todo lo que le había
pasado a James y el alivio de que todavía estuviera con
nosotros. Aún conmigo.
—¿Qué va a pasar con ellos ahora? —Preguntó Enzo, mirando
a su esposo.
—Los canales apropiados han sido notificados —respondió
271
Silas. —Están a salvo ahora, y una vez que todos hayan sido
examinados y reciban el cuidado y la atención que necesitan, los
que son lo suficientemente jóvenes serán trasladados a hogares 01/2023
de acogida calificados, donde, con suerte, podrán comenzar a
sanar de todos los horrores que han tenido que soportar.
Mi estómago se revolvía si pensaba en ello, y como padre, era
demasiado horrible hacer eso sin perder la cabeza. Nada iba a
hacer que lo que esos niños habían pasado a manos de la
familia Capello estuviera bien, pero ahora eran libres, y eso era
un comienzo.
Gracias a James.
—Tiene que haber algo que podamos hacer —dijo Enzo. —De
alguna manera podemos ayudar.
—Haremos lo que podamos, amor —dijo Silas, poniendo una
mano en su hombro. —En este momento, están a salvo con
buenas personas. Pero todavía tenemos algunas cosas que
resolver.
 Pude sentir la atención de los demás volver a James, e
inmediatamente me puse a la defensiva.
Entendí por qué desconfiaban de él. Lo hice. Había arriesgado
su propio cuello por mí y por mi hijo, y había salvado a todos
esos niños, pero seguía siendo Demon. Todavía era
impredecible, brillante y capaz de cosas que la mayoría de la
gente ni siquiera podía imaginar.
Pero también era mío, y esa era la variable con la que no
estaba seguro de que estuvieran contando.
Elegí mis batallas en esta familia, era una cuestión de
mantener mi propia cordura más que nada, pero esta era una
batalla que nunca iba a perder, y si me presionaban, lo
272
descubrirían de la manera más difícil.
—¿Soy el único al que le queda algo de maldito sentido
común? —Malcolm preguntó en su forma brusca habitual. — 01/2023
¿Necesito señalar lo obvio, que no importa lo que haya hecho,
sigue siendo un asesino en serie? Todavía es un maldito
Demonio, y lo tenemos sentado en nuestro sofá con una
maldita manta de Sherpa como si fuera un alma perdida y
herida que estaba en el lugar equivocado en el momento
equivocado.
—¿Preferirías que fuera de lana? —Enzo bromeó antes de que
tuviera la oportunidad de decir algo. Probablemente fue solo
para aliviar un poco la tensión y evitar que se convirtiera en una
pelea entre Malcolm y yo, lo cual era casi inevitable, pero lo
aprecié de todos modos.
Malcolm se limitó a mirarlo, lo que a su vez hizo enfurecer a
Silas.
 —Solo digo que es una mierda —gruñó Malcolm. —Y es hora
de que hablemos sobre qué hacer antes de que esto se salga de
control.
—Ya se salió de control —dije entre dientes. —Hicimos las
cosas a tu manera, y casi nos matan a todos, incluido mi hijo.
Tienes mucha suerte de que no quiera tu cabeza, incluso si es
solo por el bien de Val.
Malcolm resopló.
—Te ofrecí una oportunidad y la tomaste.
—Sí, lo hice —estuve de acuerdo. —Y fue un error. No es uno
que voy a volver a cometer, así que, si quieres volver a ponerlo
en una celda, tendrás que ponerme a mí también.
273
—Luca —dijo James, mirándome con nerviosismo. —Aprecio
lo que estás tratando de hacer, pero…
—No —espeté. —No, estoy harto de la doble moral en esta 01/2023
familia. Estoy harto de estos dos hijos de puta retorcidos que
fingen que tú eres el problema y ellos no lo son. Y estoy harto
de que Malcolm actúe como si fueras el único diablo, cuando
ese es literalmente su maldito apodo, y cree que Adam era un
santo porque no sabe la verdad.
Malcolm se levantó de su asiento inmediatamente, dándome
una mirada asesina que conocía bien. Antes, me habría hecho
retroceder, pero cuando se trataba de James, cuando se trataba
de proteger a quien amaba, no tenía miedo. No había nada que
pudiera perder que importara más que mi familia. Y ahora, él era
parte de eso.
Una parte de mí.
—Será mejor que cuides tu boca y dejes de decir mierda
sobre cosas de las que no sabes nada —gruñó Malcolm cuando
Valentine lo agarró del brazo para detenerlo. Incluso Silas
parecía estar listo para intervenir cuando no retrocedí.
—Lo sé. Más que tú —le dije con firmeza. —No digo que
Adam se mereciera lo que pasó, y no digo que lo que hizo
James estuvo ni remotamente bien, pero él nunca mató a una
persona inocente, y eso es mucho más de lo que puedo decir de
Adam.
—Hijo de…
Valentine empujó contra el pecho de Malcolm antes de que
pudiera lanzarse, y Malcolm se congeló, pero aunque sabía que
no estaba dispuesto a arriesgarse a lastimar a su esposo, aún
podía ver el veneno en sus ojos. La furia.
274
—Ten cuidado, Luca —dijo Silas en tono de advertencia. —
Ten cuidado con lo que dices. Sé que estás emocional en este
momento. Todos lo estamos, pero... 01/2023
Me burlé. ¿Silas, emocional? Sí, eso fue una risa. Tal vez en lo
que a Enzo se refería. Pero yo no iba a dar marcha atrás.
—Es la verdad —dije, mirando a James, quien tenía una
expresión neutral a pesar de que podía ver que él también
estaba listo para intervenir.
Listo para salir en mi defensa, incluso si eso significaba que los
demás se volverían contra él. Malcolm le dispararía entre los
ojos a la menor provocación. Cualquier cosa para darle una
excusa para hacer lo que siempre había querido hacer.
Simplemente no iba a dejar que eso sucediera.
—¿Qué estás diciendo? —Preguntó Enzo con cautela. Silas
también estaba escuchando, y por el momento, también
Malcolm, aunque solo fuera porque estaba tratando en vano de
calmarse como un maldito toro en una tienda de porcelana.
 —Exactamente lo que dije —respondí encogiéndome de
hombros. —Adam mató a alguien. No fue premeditado, pero
todavía hay una familia de una chica muerta que nunca podrá
verla graduarse de la escuela secundaria o la universidad, o
casarse o tener hijos, o cualquier otra cosa por su culpa, todo
porque él quería divertirse un poco en una fiesta y conducir
borracho hasta su casa, y porque su padre rico era lo
suficientemente importante como para asegurarse de que no
enfrentara las consecuencias. Esa chica nunca obtuvo justicia. Al
menos no en ningún cargo oficial.
—Estás mintiendo —gruñó Malcolm, esquivando el agarre de
Valentine. Sin embargo, pude ver la duda en sus ojos. Lo
275
quisiera admitir o no, sabía que su marido no era inocente. Era
el tipo de verdad que era más fácil pasar por alto para no hablar
mal de los muertos, pero como yo con mi primer matrimonio, 01/2023
tenía que haber una parte de él que sabía que no todo era tan
perfecto como parecía.
Una parte de él que sabía que estaba haciendo de la persona
que amaba un santo, porque me di cuenta de que, aunque esta
revelación lo sorprendió, no estaba seguro. Tenía miedo de que
fuera verdad, y más que nada, por eso estaba tan furioso.
—No estoy mintiendo. Pero no necesitas creer en mi palabra.
Los registros fueron sellados, pero estoy seguro de que tanto tú
como Silas han desenterrado esqueletos enterrados más
profundo que eso —dije intencionadamente. —Simplemente no
querías. No cuando se trataba de él.
Por unos momentos, Malcolm no dijo nada, y estaba seguro
de que iba a estallar en cualquier momento. Sin embargo, la
mano de Valentine en su hombro pareció calmarlo un poco más,
y pude ver la duda asentándose.
Malcolm finalmente se volvió hacia Silas.
—¿Es eso cierto? —Él demandó.
Silas vaciló.
—No.… no sé. Había algo en su archivo que fue sellado
cuando lo investigué años atrás, así que es posible.
Simplemente no vi una razón para seguir investigando.
Pude ver el temor en los ojos de Malcolm cuando la realidad y
sus propios recuerdos comenzaron a divergir. Y en cierto modo,
podía simpatizar con él. Si alguien más estuviera en medio de
esto, probablemente no estaríamos en bandos opuestos, pero,
276
así como él sentía el deber de proteger a los que amaba y había
jurado proteger, yo tenía que hacer lo mismo.
—Incluso si es verdad, no te dio derecho a hacer lo que hiciste 01/2023
—dijo en un tono peligrosamente tranquilo, dirigiendo su
furiosa mirada hacia James.
—No —dijo James para mi sorpresa. —No lo hizo. Hay
muchas cosas que hice que no tenía derecho a hacer, y esto
puede no significar nada para ti, pero lamento lo que le hice a
Adam. Él encajaba en mi código, pero eso es todo, solo porque
infringió mis reglas. Porque quería lastimar a Silas, y la mejor
manera, la única manera, de hacerlo era a través de ti. Y por eso,
lo siento. Sé que no significa nada, y no espero que me creas...
pero lo siento.
La ira fresca brilló en los ojos de Malcolm, y me preparé para
pelear, moviéndome ya para interponerme entre ellos.
 Silas, que había estado escuchando en silencio hasta entonces,
parecía igualmente cauteloso. Él también estaba a punto de
intervenir.
Malcolm siguió mirando a James, al menos tanto como pudo
cuando yo estaba actuando como un escudo humano frente a
él. Finalmente relajó un poco su postura, pero su mandíbula aún
estaba apretada.
—No acepto tu puta disculpa. Y si fuera por mí, estarías
muerto —dijo, su voz inquietantemente tranquila y grave, que
sabía que era una señal de advertencia aún más grande que su
ira y sus arrebatos.
La mirada de Malcolm finalmente viajó hacia mí.
277
—Pero si quieres pasar el resto de tu vida haciendo de
guardián de este jodido psicópata, que así sea. Solo no vengas a
llorar cuando te corte mientras duermes. 01/2023
Dicho esto, se puso de pie y salió de la habitación.
Valentine se congeló por un momento, mirándonos a mí y a
James.
—Sólo necesita tiempo —dijo con cuidado.
—Sí. —Suspiré. —Alrededor de un milenio debería hacerlo.
Valentine me dirigió una mirada de disculpa antes de ir tras su
esposo. Solo él era capaz de calmar a Malcolm y, aparte de mis
sentimientos personales, no podía decir que lo culpara.
—Supongo que eso pone la pelota en mi campo —dijo Silas
con un profundo suspiro.
No importaba lo que pensara, no iba a dejar que me quitara a
James, pero por el momento, decidí dejar que prevaleciera la
cabeza fría y mantuve la boca cerrada para ver de qué lado iba a
caer. Solo porque estaba en modo de lucha o huida, los únicos
dos instintos que parecía conocer en este punto, eso no
significaba que tenía que volverme estúpido.
Aunque estaba empezando a comprender los impulsos
cavernícolas de Malcolm mejor que nunca.
—No se puede permitir que James deambule libremente —
comenzó Silas en ese tono condescendiente que suplicaba una
patada en el trasero. Incluso si casi con certeza iba a morir en el
proceso. —Dicho eso, si estás dispuesto a asumir la
responsabilidad por él, no veo por qué el arreglo actual no
puede continuar a modo de prueba. Si se prueba a si mismo
siendo perfectamente confiable, entonces podemos hablar
sobre quitarle el collar. Hasta entonces, le daremos uno menos
278
letal.
—¿Probarse a sí mismo? Arriesgó su vida para rescatar a mi
hijo —protesté. —Podría haberme dado por muerto en los 01/2023
muelles y tener su libertad si eso es lo que quería, pero no lo
hizo. Volvió por mí, y ha tenido mil oportunidades más de
traicionarme desde entonces, pero no lo ha hecho.
—Es posible que sea así, pero ha tratado de matar al
cincuenta por ciento de las personas en esta casa —dijo Silas
secamente.
Apreté los dientes. Tenía razón, quisiera admitirlo o no. Sabía
que no estaba siendo lógico, pero la necesidad de defender a
James era fuerte por decir lo menos.
—Eso es justo —dijo James. —Y si sirve de algo, me disculpo
por la mayoría de esos intentos de asesinato. Sin embargo, no
por el tuyo. Te lo merecías.
Silas lo miró fijamente.
—Se toma nota de tu disculpa parcial.
 —Si te hace sentir mejor, ya no estoy obsesionado contigo —
continuó James. —Resultó que eras un novio de mierda, un
profesor aún peor, y cuando se trata de ser un amante... —Hizo
una mueca. —En lo que a mí respecta, podemos atribuirlo todo
a un error de muestreo, porque francamente, tenía incluso
menos vida social que la que tenía en tu prisión subterránea, y
realmente no tenía todo eso con lo que comparar.
Silas entrecerró los ojos.
—No voy a dignificar eso con una respuesta.
—Diferentes golpes para diferentes personas —dijo Enzo,
poniendo una mano en el hombro de su esposo. Había un brillo
en sus ojos. —No tengo quejas.
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—Puntos por superación personal, supongo —dijo James
encogiéndose de hombros desdeñosamente, ganándose otra
mirada de Silas. —Mi punto es que estoy bien con el collar. No 01/2023
me importa probarme frente a ninguno de ustedes, pero son la
familia de Luca y él los prefiere vivos, así que es lo que es.
—Conmovedor —dijo Enzo rotundamente. —En realidad, creo
que encajarás perfectamente aquí.
—Hay una condición más —dijo Silas. —Creo que sería mejor
si ustedes dos y Timothy se quedaran aquí por un período de un
año. Entonces podemos revisar esto. Solo para poder vigilarlos a
todos y asegurarme de que no haya ninguna... —Hizo una pausa
para elegir cuidadosamente sus palabras —recaída.
—¿Quieres que vivamos aquí? ¿En la misma maldita casa? —
Pregunté con incredulidad.
—Será como en los viejos tiempos —dijo Enzo, sonando
demasiado involucrado. Y lo peor era que sabía que Valentine
iba a estar aún más mareado con la idea.
 —Qué acogedor —dijo James rotundamente. —¿Supongo
que la prisión subterránea sigue siendo una opción?
Suspiré.
—Un año —dije con firmeza. —Eso es todo.
—Y luego volvemos a visitar —respondió Silas. —Piensa en
ello como darle a Timothy más tiempo de calidad con su familia.
—Te refieres a más tiempo para que ustedes lo adoctrinen en
la mierda de los negocios familiares —argumenté.
—Siempre has tenido un pie adentro y un pie afuera —dijo
Enzo. —Pero ahora, ustedes están juntos. Y antes de que me
miren así, no es una broma. Solo estoy declarando hechos. Vas a
tener que aceptar el hecho de que vivir una vida normal nunca
280
fue una posibilidad para cualquiera de nosotros, Luca. Eres un
DiFiore, igual que el resto de nosotros. Y también lo es Timothy.
A mi modo de ver, puedes abrazar eso, y todos podemos 01/2023
comenzar a actuar como una familia por una vez y ser más
fuertes por eso, o podemos ser vulnerables, viviendo nuestras
vidas separadas y tratando de luchar contra eso.
—El modelo de gel para el cabello tiene un punto decente —
reflexionó James. —Cuando estaba tratando de matarlos a
todos, fue fácil explotar la separación. Por el amor de Dios, ni
siquiera notaron que yo era el jefe de su cuñado —dijo,
volviéndose hacia Silas. —Hablando de olvidar cruzar tus T y
puntear tus I.
—Oh, va a ser muy divertido tenerte en la casa —dijo Silas en
un tono irónico.
James solo le dio una sonrisa inocente. Claramente fue directo
al trasero de Silas, pero lo encontré encantador.
Sí, Malcolm tenía razón en una cosa. Estaba en lo profundo.
 Escuché que algo se movía por las escaleras y miré hacia
arriba, tensándome porque esperaba que Malcolm tuviera
dudas sobre su decisión de formar una tregua a regañadientes.
Me alivió ver a Timothy parado en lo alto de las escaleras,
frotándose los ojos.
—¿Papá? —Bostezó.
—Oye, chico —dije, acercándome para levantarlo en mis
brazos. Besé su frente antes de llevarlo de vuelta al sofá
conmigo.
James se tensó como si acabara de caminar con una ojiva
nuclear cargada.
—¿Quién es ese? —Preguntó Timothy, mirando por encima de
281
mi hombro a James con una mirada curiosa.
—Este es James, amigo —respondí, decidiendo ir con el
enfoque más simple y directo. No estaba seguro exactamente 01/2023
con qué se sentiría cómodo James en lo que respecta a su papel
en la vida de Timothy, pero él y Timothy eran las dos personas
más importantes en mi vida ahora, y teníamos tiempo para
resolverlo. —Él es quien me ayudó a encontrarte.
Los ojos de Timothy se abrieron un poco. Todavía había
mucho sobre todo lo que había sucedido que él no entendía, y
por eso, estaba agradecido. La psiquiatra al que había pedido
que viniera a hablar con él mientras rescatábamos a James me
lo había confirmado. Por lo que ella podía decir, él no parecía
estar traumatizado por lo que había sucedido, solo confundido,
y al menos Lewis había cumplido su palabra al respecto. Explicar
todo a mis suegros era otro asunto, pero Malcolm había
demostrado ser útil en el manejo de la policía, por lo que era
una cosa menos de la que tenía que preocuparme.
 Sabía que a medida que Timothy creciera, habría preguntas
que no serían tan fáciles de esconder debajo de la alfombra.
Cosas que iba a entender para las que simplemente no tenía la
capacidad ahora, incluyendo quién y qué era James para mí.
Cosas que íbamos a tener que tomar un día a la vez.
—¿Eres un buen chico? —Preguntó Timothy, repentinamente
completamente despierto mientras miraba a James con gran
interés.
James soltó una risa nerviosa. Nunca lo había visto así antes.
Era más cauteloso con un niño que con un hombre con una
pistola en la cabeza, y era algo adorable.
—Yo no iría tan lejos —dijo con cuidado. —Pero tengo mis
282
momentos. Es un placer conocerte, Timothy. Tu papá habla de ti
todo el tiempo, y puedo ver por qué está tan orgulloso. Eres un
chico muy valiente. 01/2023
Timothy sonrió de oreja a oreja.
—El tío Val me deja ver películas de miedo y no tengo miedo
en absoluto.
—Lo hace, ¿verdad? —Pregunté secamente. —Vamos a tener
que tener una charla sobre eso.
—En su defensa, la idea de Val de una película de miedo es
subjetiva —dijo Enzo con un resoplido.
James se rio.
—Eso es impresionante. Yo mismo disfruto de las películas de
miedo de vez en cuando.
No hay sorpresa allí.
—Vamos, enano —dije, levantando a Timothy en mis brazos
de nuevo. —Ya pasó tu hora de acostarte y todos hemos tenido
un largo día, así que creo que todos deberían dormir un poco.
 —Está bien —dijo Timmy, bostezando de nuevo mientras
apoyaba su cabeza en mi hombro. —¿Pueden tú y James leerme
un cuento antes de dormir?
Miré a James, que estaba congelado como un ciervo ante los
faros, esperando que respondiera.
—Si él quiere —le dije.
Timothy miró expectante a James, quien asintió.
—Está bien —dijo James con rigidez. —Eso suena bien.
—Dulces sueños, chorlito —dijo Enzo, caminando con Silas
por el pasillo. —Nos vemos en la mañana—. Me dio una mirada
de complicidad.
Rodé los ojos. Sabía que nunca iba a escuchar el final de mis
283
hermanos. No solo estaba con otro hombre después de toda
una vida de ser heterosexual, estaba con un asesino en serie.
Discutiblemente, el peor del grupo de psicópatas que nuestra 01/2023
familia parecía atraer como moscas a la miel.
Y, sin embargo, había mucho más en él que eso. Más de lo
que los demás podían ver. Solo yo había llegado a ver su lado
vulnerable en su totalidad y, de alguna manera, eso lo hacía aún
más precioso para mí.
Yo, Luca DiFiore, estaba enamorado de un monstruo.
Eso era irrefutable. Y sabía mejor que pensar que había
domesticado a la bestia salvaje. En todo caso, yo mismo me
había convertido en una, y aunque James siempre había sido un
justiciero que representaba sus propias vendettas, yo era algo
muchísimo peor.
Me había convertido en un monstruo no por ningún sentido
de juicio moral o porque tenía un hacha para moler. Me había
convertido en un monstruo por amor, y si había algo que Silas y
Malcolm me habían enseñado era que esos monstruos eran los
más peligrosos de todos.
Mientras me dirigía por el pasillo para arropar a Timothy,
James me siguió. Se apoyó contra la pared junto a la cama,
mirando a su alrededor a todos los juguetes y libros que se
alineaban en los estantes de la habitación. De pie junto al mural
que mostraba dinosaurios montando trenes que se extendían de
un extremo a otro de la habitación, James definitivamente
parecía estar fuera de su elemento, lo que lo puso en mi lugar
por una vez.
—Está bien, ¿qué tal este? —Pregunté, recogiendo el libro
ilustrado de La Bella y la Bestia que estaba en la mesita de
284
noche. Abrí la página donde lo había dejado por última vez.
Parecía que había pasado tanto tiempo ahora, y por un
tiempo, pensé que podría terminar siendo la última historia que 01/2023
le contaría a mi hijo. No importa cuán exhausto estuviera, de
ahora en adelante, nunca daría por sentado estos momentos.
Sonreí mientras miraba sus párpados caer con la cadencia de mi
voz hasta que se durmió profundamente con solo unos pocos
párrafos para terminar.
Dejé con cuidado el libro sobre la mesa y salí de la habitación
con James siguiéndome de cerca. Cerré la puerta suavemente.
Ambos esperamos hasta que estuvimos en mi habitación al
otro lado del pasillo antes de hablar. Tan pronto como cerré la
puerta y me giré hacia él, James me sonrió.
—Esa no es la forma en que recuerdo el final de esa historia.
Levanté una ceja.
—¿No? ¿Qué versión leíste?
 —El de las hermanas feas y celosas que mantuvo a la niña
encerrada con la bestia con la esperanza de que se la comiera
viva. Prueba contra el concepto de reuniones familiares —
remarcó.
Parpadeé.
—Sí, puedo ver por qué esa parte no llegó a la versión para
niños.
—Está abierto a la interpretación, supongo —reflexionó
James.
Lo empujé contra la pared, sonriendo.
—No pareces del tipo de los cuentos de hadas.
—Me molesta eso —dijo James en un tono seco. —Te haré
285
saber que puedo ser caprichoso cuando quiero serlo.
—¿Es eso así? —Pregunté, riendo mientras pasaba mis manos
por su torso delgado. Por mucho que quisiera saltar sobre sus 01/2023
huesos, la miríada de cortes y moretones en todo su cuerpo me
mantuvo a raya. Por ahora. —¿Cuál es tu favorito?
Hizo una pausa, considerándolo cuidadosamente.
—La Sirenita.
—¿La Sirenita? —Repetí, sorprendido. —¿En serio?
—Ella se convierte en espuma de mar al final —respondió. —
Una salida dramática, si alguna vez hubo una. Todo porque ella
no se mantuvo segura y no escuchó a su padre. Tú más que
nadie deberías apreciar esa moraleja.
—Los acontecimientos recientes me han llevado a la
conclusión de que ir a lo seguro puede estar sobrevalorado —
admití. —Y vas a estar a prueba de seleccionar cuentos para
dormir por un tiempo, para tu información.
Sopló una bocanada de aire a través de sus fosas nasales.
 —¿Realmente me quieres cerca de tu hijo? —Preguntó, cada
vez más serio. —Sabes quién soy. De lo que soy capaz.
—Sí, lo hago —le dije. —Pero es por eso. No voy a obligarte a
hacer nada para lo que no estés preparado, James. No creo que
sea justo para ti o para Timothy. Pero lo que dije antes era en
serio. Te amo, y estoy dispuesto a hacer lo que sea necesario
para que esto funcione.
—¿Todavía no has cambiado de opinión sobre eso? —
Preguntó, frunciendo el ceño con duda.
—No —dije, sosteniendo su mirada.
Se llevó el labio inferior a la boca, mordiéndolo.
—Yo también quise decir lo que dije. Si encontramos el
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camino de regreso el uno al otro...
Hice una pausa para recordar de qué estaba hablando.
—¿También estás diciendo que me amas? 01/2023
Él asintió, y había algo en la mirada de sus ojos que hizo que
me doliera el corazón. Algo crudo y vulnerable. Como si tuviera
miedo de dejarse lastimar. Y después de todo lo que había
pasado, podía entender por qué.
No esperaba que lo dijera en absoluto, pero sabía que lo hizo.
Sus acciones dejaron poco espacio para dudarlo. Estaba bien
para mí si él nunca decía las palabras. No necesitaba hacerlo.
—Te amo, Luca —dijo en voz baja, y eso significaba mucho
más. —Pero eso siempre ha sido más una maldición que
cualquier otra cosa.
—No soy Silas, James —dije, presionando mi mano contra su
mejilla, deleitándome con la sensación de su cálida piel contra la
mía. Era un recordatorio bienvenido de que todavía estaba aquí.
Aún conmigo. Y yo no iba a dejarlo ir.
 Nunca.
Buscó mis ojos.
—No —dijo en voz baja. —No lo eres. ¿Pero estás seguro de
que sabes en lo que te estás metiendo? Tengo más enemigos
además de Lewis. Y en caso de que no te hayas dado cuenta,
estoy loco. Soy un desastre.
—Oh, no hay duda —estuve de acuerdo, acariciando su
cabello lejos de su rostro. —Pero tú eres mi tipo de loco. Y en
caso de que no te hayas dado cuenta, yo también soy un
desastre. Pero la cosa es que a mi loco le gusta tu locura, y Enzo
tiene razón en una cosa: la normalidad nunca fue una opción
para cualquiera de nosotros. Pero juntos, como familia,
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podemos ser algo aún mejor. Y tú eres parte de la familia ahora,
James, te guste o no.
Sus labios se arquearon como si estuviera tratando de no 01/2023
sonreír.
—¿Es eso así? —Preguntó. —¿Puedo optar por no participar?
—Nop. Ninguno en absoluto. Puedes pensar en ti mismo
como un cautivo si es necesario —le dije, presionando mis
labios contra los suyos.
—¿Y si quiero pensar en mí mismo como algo más? —
Preguntó, sus dedos deslizándose en mi cabello mientras me
acercaba para otro beso. —¿Cómo podría llamar a eso?
Me detuve a pensar en ello y descubrí que las reservas que
probablemente debería haber tenido sobre ponerle un título
oficial a mi relación con otro hombre eran más un grano de
arena que una montaña. Y ya se estaban desmoronando.
—Novio es probablemente un buen lugar para empezar —
respondí. —Mientras estés bien con eso.
 —Estoy bien —dijo James sin aliento, sus labios separándose
para permitir la entrada de mi lengua. —Bueno... ya sabes a lo
que me refiero.
Me reí, profundizando el beso mientras lo empujaba contra la
pared.
—Eres bueno para mí, y tal vez yo sea un poco malo para ti.
Eso es todo lo que realmente importa.
—Me gusta cómo suena eso —dijo James, sus manos
deslizándose debajo de mi camisa. Gimió cuando mi lengua se
hundió profundamente en su boca una vez más, pero cuando
mis dedos rozaron los vendajes de su mano derecha, el sentido
común volvió a mí.
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—Estás herido —le dije con un suspiro irregular contra sus
labios.
Me dio una mirada. 01/2023
—Solo porque me enamoré de ti no me convierte en una
especie de cobarde ahora. ¿O te desanima un poco de sangre?
Le di una mirada, arrastrándolo hacia la cama.
—Está bien, tipo duro, tú lo pediste —le dije, subiendo encima
de él.
La luz de diversión y picardía en sus ojos solo estimuló mi
lujuria, pero aun así traté de tener cuidado mientras lo
desnudaba lentamente, luchando contra el impulso de
desgarrarlo como un regalo de Navidad.
Joder, era caliente. Cada pulgada de su piel que descubría y
tocaba me dejaba anhelando más, y los sonidos de los gemidos
que mi toque era capaz de provocar en él eran música para mis
oídos.
 Le saqué los pantalones, liberando su pene, y mientras él
separaba sus piernas preparándose para que yo lo tomara, me
encontré intrigado por otra parte de él que quería explorar.
Chupar a un chico era lo más gay posible, pero no dudé de mi
parte cuando tomé su polla en mi mano y sellé mis labios
alrededor de la corona reluciente.
—Luca —James jadeó sorprendido, sus caderas se arquearon
un poco fuera de la cama.
Los sujeté con mi otra mano y lo tomé más profundamente
hasta que la mitad de su eje descansaba sobre mi lengua.
Sabía bien. Mejor que bien.
Chupé más fuerte y él gimió, lo que me hizo desearlo aún
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más. Quería todo de él. No importaba si nunca había deseado a
otro hombre de la forma en que lo deseaba a él. Nunca había
querido a nadie más de esta manera, y la novedad lo hizo aún 01/2023
más emocionante.
—Oh, joder, Luca —respiró cuando dejé que su polla se
deslizara fuera de mi boca lo suficiente como para pasar mi
lengua por la parte inferior, manteniendo la base firmemente en
mi agarre.
Me di cuenta de que se estaba acercando, así que detuve lo
que estaba haciendo y me metí los dedos en la boca para
humedecerlos. Deslicé ambos dedos entre sus mejillas y
comencé a acariciar su apretado agujero en pequeños círculos.
Un escalofrío recorrió su columna, y me di cuenta de que
estaba tratando de no retorcerse demasiado cuando lo volví a
meter en mi boca y continué chupándolo mientras lo
toqueteaba, llevándolo a su lugar.
 Su apretado agujero apretándose a mi alrededor me puso aún
más duro, y fue todo lo que pude hacer para no masturbarme.
Era tan jodidamente caliente. Todo, desde la forma en que se
movía y se retorcía hasta la forma en que jadeaba mi nombre,
era como un hechizo perfectamente diseñado para mantenerme
embelesado. Para mantenerme con ganas de más.
—Luca, estoy cerca. Si no te detienes, voy a…
Esa fue toda la confirmación que necesitaba para chuparlo
aún más fuerte. Dio otro grito ahogado, sus caderas se
levantaron de la cama mientras hundía sus dedos en las mantas
a cada lado de ellos.
—¡Luca! —Gritó, sus caderas corcoveando salvajemente.
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No pude resistir el impulso de tragar mientras se corría. Para
saborearlo.
Era incluso mejor de lo que había imaginado. 01/2023
Me encontré lamiendo su pene para limpiarlo de evidencia
mientras colapsaba en la cama, respirando entrecortadamente.
Abrí más sus mejillas, humedeciéndolo aún más con lo que
quedaba de su corrida en mi lengua y mi propia saliva.
Verlo correrse así para mí fue jodidamente bueno.
Me detuve para abrirle las piernas, separándolas aún más. Mi
polla ya latía con necesidad cuando la apoyé contra su entrada.
Su agujero todavía estaba ligeramente abierto por mis dedos, y
estaba goteando suficiente líquido preseminal para prepararlo el
resto del camino. Alcanzar la botella de lubricante en algún
lugar de la mesita de noche parecía un viaje insuperable cuando
necesitaba estar dentro de él ahora mismo. La forma en que se
retorcía y me arañaba para acercarme más confirmaba que él
sentía lo mismo.
 —Sí —jadeó, sus uñas clavándose en mis hombros lo
suficientemente fuerte como para hacerme sangrar. Joder,
incluso eso se sentía bien. Envió una oleada de calor a mi polla,
y ya sentí que iba a explotar cuando me metí dentro de él.
Necesité toda mi fuerza de voluntad para ser gentil. —Fóllame.
Ahora.
Sus palabras, y la desesperación detrás de ellas, me
desconcertaron. Este hombre no solo era capaz de despertar un
lado de mí que ni siquiera sabía que existía, sino que era más
que capaz de tomarlo.
Lo besé más fuerte, haciéndolo probar su propia corrida, y
nuestras lenguas se enredaron desordenadamente mientras lo
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follaba. Mis manos palpaban cada pulgada de su cuerpo que
podían reclamar a la vez, pero aun así no era suficiente.
Y nunca lo sería. 01/2023
Lo deseaba demasiado, con demasiada agresividad, con
demasiada violencia, para que esa hambre se saciara por
completo. Pero había cierta satisfacción en querer a alguien, en
querer a la persona correcta y la equivocada.
Y a veces, esa persona era ambas cosas al mismo tiempo.
—Te amo, James —susurré contra sus labios mientras lo
follaba más fuerte, mis embestidas se aceleraban. —Te amo
tanto, me da miedo.
—Probablemente debería —respiró. —No es una gran señal
para tu cordura. O tu moralidad. O tu sentido de
autoconservación.
—Probablemente no —estuve de acuerdo, pasando mi mano
por su cabello húmedo y tirando de su cabeza hacia atrás para
revelar su garganta, pasando mi lengua a lo largo de ella. —Pero
te amo de todos modos.
—Tal vez tú eres el hermano tonto —dijo con ironía, pero
había lujuria mezclada con amor inconfundible en sus ojos.
Sonreí contra sus labios y sujeté su mano buena contra la
cama, explorando su cuerpo con la otra mientras me obligaba a
reducir la velocidad, saboreando las sensaciones de estar
enterrado dentro de él, su cuerpo presionado contra el mío, a
salvo en mis brazos. Mío.
—Puedo vivir con eso, siempre y cuando sea yo quien te
tenga —respondí.
—Eres tan cursi —murmuró James.
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—Te gusta —lo acusé.
Su única defensa fue un gemido estrangulado cuando me
dirigí directamente a su próstata otra vez, sintiéndome a punto 01/2023
de correrme. Y a juzgar por lo rígida que estaba su polla cuando
se frotaba entre nuestros cuerpos con cada embestida, también
estaba cerca de nuevo.
Lo penetré por última vez y me agaché para tomar su polla en
mi mano, dándole un golpe suave para asegurarme de que
llegáramos al clímax, juntos.
—Luca —gimió James en otro beso, y reduje mis embestidas
mientras mis últimos chorros de semen pulsaban dentro de él.
—Joder —jadeó, mirándome mientras ambos recuperamos el
aliento. —¿Qué fue eso?
—Así es como podemos pasar todas las noches por el resto
de nuestras vidas, si estás de acuerdo —le dije, mirándolo.
 —Todas las noches, ¿eh? —Preguntó con un brillo travieso
pero esperanzado en sus ojos. —¿Crees que tienes tanta
resistencia?
—Tú mismo lo dijiste, no soy malo para alguien que nunca ha
estado con otro chico —bromeé. —Pero estoy dispuesto a
practicar, y algo me dice que serías un excelente maestro.
Gimió felizmente, retorciéndose contra mí mientras lo besaba
de nuevo.
—Bueno, era lo suficientemente decente como médico y
asesino en serie. ¿Qué es un cambio de carrera más?
Sonreí contra sus labios.
—Sí, eres un experto en todos los oficios.
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—Jack —reflexionó. —Eso tiene cierto tono.
—Oh, no —dije, saliendo con cuidado de él antes de tomarlo
en mis brazos. —Demon se retira, no cambia de marca. 01/2023
—¿Es eso así? —Preguntó, con una chispa de desafío en su
mirada.
Le di una mirada.
—Hiciste lo que te propusiste hacer, James —murmuré. —Y el
mundo es un lugar mejor como resultado de ello. Pero casi te
pierdo en el proceso. Ese no es un riesgo que esté dispuesto a
correr nunca más.
El desafío en sus ojos se desvaneció lentamente y se apartó de
mí con un suspiro.
—Ahí están. Los ojos de cachorro de DiFiore.
Sonreí.
—¿Está funcionando?
 —Sabes que está funcionando —murmuró. —Pero te
equivocas. No terminé lo que me propuse hacer. Todavía hay un
cabo suelto.
Escuché atentamente, juntando sus palabras.
—Lewis.
—Él tiene información —dijo James, cada vez más sombrío. —
Información que podríamos usar para acabar con otros como él.
Escuché lo que estaba diciendo, y por mucho que fuera en
contra de mis instintos mantenerlo aquí y mantenerlo a salvo, lo
que significaba mantenerlo fuera de problemas, tenía razón.
Todas esas personas estaban libres y seguras gracias a James,
pero todavía había otras por ahí. Monstruos que se
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aprovechaban de los inocentes, y las únicas personas que tenían
la oportunidad de llevarlos ante la justicia eran monstruos de un
tipo diferente. 01/2023
Tenía a mi hijo y al hombre que amaba, pero había tantos
otros por ahí que no fueron tan afortunados.
—Te prometí que te ayudaría a derribarlo cuando todo esto
estuviera dicho y hecho —dije con un suspiro.
—Lo hiciste —dijo James. —Y no me debes nada. Hiciste lo
que prometiste, y hay una parte de mí que no amaría nada más
que vivir tu vida feliz, normal y tranquila contigo. No como
Demon, sino como James, quien diablos sea. Vale la pena
averiguarlo. Pero...
—Pero no te gustan los cabos sueltos —dije en voz baja.
La mirada en sus ojos fue mi respuesta.
—He hecho muchas cosas de las que me arrepiento, Luca —
dijo finalmente. —Pero puedo vivir con eso. Sería más difícil vivir
sabiendo que tenía la oportunidad de hacer algo, algo que
realmente importaría, y renunciar a ello—. Apartó la mirada. —
Pero lo haría. Por ti. Por Timothy. Si eso es lo que necesitas, si
eso es lo que se necesita para estar contigo, entonces me
retiraré. Demon muere, y James encuentra una manera de vivir
con eso.
Lo miré por un momento, sorprendido por sus palabras.
Sorprendido por lo que estaba dispuesto a dar por mí.
Y había una parte de mí que quería aceptarlo. No era lo
correcto, pero era lo seguro, y nunca en un millón de años había
imaginado que James sería el ángel en mi hombro, incluso si
también era el demonio en mi cama, pero aquí estábamos.
—Una última vez —le dije, mirándolo. —Piensa en ello como
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una gira de despedida —agregué cuando vi la confusión en sus
ojos—. Obtenemos lo que podemos de Lewis, y sacamos todos
los nombres en su pequeño libro negro, pero la palabra 01/2023
operativa aquí es nosotros. Tú, yo y Silas. No te vas por tu
cuenta. No eres el pistolero contratado en esto. Tú eres el autor
intelectual. Esas son mis condiciones.
Los ojos de James se abrieron un poco mientras hablaba, algo
parecido a la diversión brillando en ellos.
—Condiciones —repitió. —Ahora estás empezando a sonar
como el villano.
—¿Cómo lo estoy haciendo? —Bromeé.
—Tu pronunciación no es mala, pero podríamos trabajar en tu
presentación —dijo, acercándome para otro beso. —Estaré de
acuerdo con tus condiciones, pero tengo una propia.
—¿Oh, sí? —Pregunté, levantando una ceja. —¿Y qué es eso?
—Juegas al malo con más frecuencia —dijo, inclinándose para
pasar la lengua por el lóbulo de mi oreja. —Me enciende.
 Me reí, capturando sus labios una vez más.
—Supongo que es cierto lo que dicen, entonces. Tal vez los
malos se divierten más.
—Oh, definitivamente lo hacen —ronroneó. —Ven aquí, y te
mostraré.

FIN

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01 FANTASMA
02 DIABLO
03 DEMON
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 SOBRE EL AUTOR

¡Hola! Soy L.C. Davis, autora de The Mountain Shifters Series,

Queer Magick y la próxima serie Great Plains Shifters. Escribo
MPREG y M/M fantasía.
Me encanta escuchar a los lectores, así que no dudes en
comunicarte con nosotros en Goodreads o por correo
electrónico a autor@lcdavisbooks.com.
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