DEVOCIONAL

VIVAMOS PARA
EL ETERNO

PORQUE TODO MORTAL ES COMO LA HIERVA, Y TODA SU GLORIA COMO LA

FLOR DEL CAMPO, LA HIERVA SE SECA Y LA FLOR SE CAE , PERO LA PALABRA
DEL SEÑOR PERMANECE PARA SIEMPRE.
Esa es la palabra que hoy es predicada
(1 Pedro 1:24-25).

24.Pues toda carne es como hierba y todo su esplendor como flor de hierba;
se seca la hierba y cae la flor;

25.pero la Palabra del Señor permanece eternamente. Y esta es la Palabra: la

Buena Nueva anunciada a vosotros.
BIBLIA JERUSALEN.

Nuestra vida es como la hierba o como una flor que un día están y al
siguiente desaparecen. Pasajera, así es nuestra existencia.

El apóstol Pedro dice que así, es también la gloria del ser humano.

En otras palabras, todo es temporal: las cosas en las que ponemos nuestra
confianza o en las que encontramos mayor deleite; las cosas en las que
depositamos nuestra esperanza y en las que nos gloriamos y jactamos, Hoy
están y mañana no.

Lo que el apóstol Pedro nos quiere mostrar con esta manera de hablar o lo
que quiere que comprendamos y que reflexionemos, también en ello, es que
estimar lo terrenal como si fuese algo permanente es poco sabio. Si, se que
tenemos un dicho que dice; (valora lo que tienes porque nunca sabes hasta
cuando lo tendrás o cuando se ira) pero a pesar de eso, mis hermanas, lo que
el apóstol Pedro nos dice es que resulta insensato e inútil vivir obsesionado
por las cosas de este mundo.

La existencia humana va mucho más allá de los años en esta tierra. Debemos
vivir conscientes de que la vida en esta tierra es un peregrinaje inevitable, no
podemos detener nuestra vida, ni la vida de quienes amamos con las manos,
no es posible. Sin embargo, a los que creemos en Cristo Jesús tenemos
buenas noticias y esperanza.
Pero el mensaje del apóstol Pedro no es solo de aterrizaje, él también nos da
animo con sus palabras, él nos invita a vivir para lo eterno.

El apóstol nos recuerda que nuestra vida es breve como la flor y la neblina;
frágil y transitoria. Por eso debemos vivir para Cristo, en quien está lo que
nunca perece, ni se marchita.
Esa es la vida más sabia y la que no tiene desperdicio, puesto a todo se le
haya el mismo sentido, todo lo que se hace por Jesús y por amor , nada es en
vano, todo tiene un orden, y ese orden es seguir a Cristo, seguir su ejemplo. Y
vamos a fallar? Si, vamos a resbalar? Si, vamos a desfallecer? Si, mos vamos a
desanimar, también.

y Él lo sabe, pero también quiere que sepamos que al final del día El esta ahí
esperándonos, para un nuevo día, para nuevos cambios, para nuevas
decisiones, lo cual no significa que vamos a postergar siempre el llamado del
señor, justo por lo que nos dice pedro al inicio , nuestra vida es efímera,

justo por nuestros propios dichos, (no dejemos para mañana lo que podemos
hacer hoy) (o nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde, y esta vida no solo
se pierden a personas y cosas, también se pierden oportunidades, momentos,
vivencias),

miren hermanas Él señor no presiona a nadie, ni su palabra lo hace, yo

tampoco puedo hacerlo, nadie puede hacerlo, es una decision de cada
persona si atiende o no el llamado del señor,

para cada persona hay un tiempo, un tiempo para conocer al señor, un

tiempo en que nuestro sentidos se abren, un tiempo de desbloqueo mental,
un tiempo de entendimiento, dispuesto así por la voluntad de Dios,

pero...lo que tenemos que pensar y a lo que tenemos que estar atentos es si
ya mi tiempo llego y yo sencillamente he decido ignorarlo?. no lo sé, como
saberlo?, creo que si buscamos en el fondo de nuestro corazón, si nos damos
un momento para pensarlo, vamos a encontrar la respuestas.

Las respuestas de esos interrogantes esta en cada una de nosotras mis

hermanas.

Sabemos cuando el señor nos esta llamando, claro que lo sabemos, otra cosa
es que nos hagamos la desentendidas. Pero que lo sabemos, si lo sabemos.

Mis hermanas, No centremos nuestra vida en los bienes terrenales que un día
perecerán. Y no me mal interpreten, esta bien trabajar para tener tus cosas,
una casa bonita, muebles bonitos, cosas bonitas, carro y un poco mas, eso no
es el problema, el problema es la idolatría, pensar que eso es lo mas
importante, en deleitarnos en eso, en gloriarnos en eso, en dejar de querer
para adorar, ¿y adoramos cosas?, si, lo hacemos, cuando eso es lo único que
nos hace darle sentido a nuestra vida.

Yo recuerdo una vez que mi mama choya compró una biblia costocisima y
pensé; yo no me gastaría un poco de plata por una biblia.
Y pienso ahora, ¿como pude decir eso? Es la palabra de Dios, no necesitamos
tener una biblia costosa para decir que valoramos la palabra de Dios, eso es
cierto.

Pero pregunto, ¿necesitamos ropa, zapatos costosos? No, la compramos

según lo que queremos y lo que eso signifique para nosotras, el plus que
creemos que eso nos da.

Entonces, entiendo, mi mamá compro esa biblia no por su precio, la compro

por su valor, lo que significaba para ella.

Hoy, al igual que mi mamá también compraría una biblia costosa, sin duda si.
Pero bueno, si las vas a compra es para leerla, saborearla, disfrutarla, créanme
alimenta al espíritu, la palabra de Dios.

Mis hermanas, No descansemos en las cosas pasajeras de este mundo ni las

estimemos como si fueran permanentes. Disfrutemos la, pero no las
idolatremos, no lo hagamos lo mas importante, total esas cosas no se van a
quedar para siempre con nosotras o nosotras no nos las quedaremos para
siempre.

Enfoquemos nuestra existencia en lo celestial. En lo que si es eterno, en Jesus,

Pongamos nuestra confianza y esperanza en la salvación que la Palabra de

Dios nos ofrece.

Descansemos en el amor y en el perdón que la Biblia nos anuncia.

Valoremos la adopción de hijos que tenemos por medio de Cristo y que las
Escritura nos proclama y busquemos como lo más importante la comunión
con Dios, la gracia y la vida eterna en Cristo Jesús.

Somos como la flor que se marchita pronto y como la neblina que desaparece
rápido. Frágil y transitoria es nuestra vida.
Todos es Temporal y endeble. No idolatremos cosas, personas, al final va
resultar decepcionante, porque no esta en las cosas y en las persona la
verdad,

el amor que todo lo puede, no esta en las cosas y en las personas ese deleite
que nos llena de vida, cuando nos deleitamos en cosas y personas, resultamos
vacias.

El pan de vida y el agua de vida, mis hermanas se llama Jesucristo, Vivamos

para lo eterno y para el Eterno que es Dios Padre en unidad con su hijo
nuestro señor y el Espíritu santo.

Reflexionemos hoy...

Que tan atenta estoy a los momentos con Dios?

Que tanto disfruto leer su palabra?
Cuanta importancia le doy a él?
En comparación de otras personas y cosas.

Cuanto Él me importa, cuanto le amo, cuanto le busco en la intimidad y no

solo cuando lo necesito para que me ayude, que sea por que le necesito, solo
por eso, necesito de Él, de su presencia, solo eso.