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¿Hay un isopanisar aquí? Sí, es isopanisar. ¿Es Sarah aquí? A ver, Krishna, este libro se llama Isopanisar.

Isopanisar es un género de literatura védica muy antigua y siempre se analiza que la palabra upa
significa cerca y nishad, sentarse, así que sentarse cerca del maestro y escuchar el conocimiento
espiritual. Y hay muchos upanisar, es un género muy antiguo, filosófico, místico de libros de muchos
millares de años. El isopanisar, isha significa señor, el upanisar del señor es único entre toda esta
colección grande de upanisar porque es el único upanisar que aparece directamente dentro del texto de
uno de los cuatro Vedas. La palabra veda significa conocimiento y hay un tipo de literatura que se llama
sanghita, literalmente colección de conocimientos. Y según la tradición védica, y eso es algo
completamente confirmado por el análisis lingüístico moderno, el, ¿cómo se dice en español? La capa
lingüística, los libros más antiguos, los Vedas, los cuatro Vedas, Rig, Sama, Yajur y Atarva. Y este
isopanisar es el único upanisar que es parte, una parte directa del texto de uno de los cuatro Vedas. La
palabra veda significa conocimiento, tenemos varias palabras en español que vienen de esa raíz antiguo,
indoeuropea, veda, como la palabra española visión o ver también es relacionada, esa palabra
lingüísticamente con veda. En alemán, wissen, saber, inglés, wit, que significa inteligencia, wit, de la raíz
wit, veda. Así que es una raíz verbal, es una palabra muy antigua que tiene reflejos lingüísticos en casi
todas las lenguas de Europa. Video también, video es vedo, latín vedere, bueno. Entonces, en este
isopanisar, el upanisar del señor, hay un verso muy interesante porque hoy vamos a hablar de la ciencia,
¿verdad?, y la religión, ¿es verdad? Spiritualidad, sí, espero que ustedes entiendan. Entonces, ¿cuál es la
relación?, la voy a explicar. Primero citando un verso, el mantra, o verso 11 del isopanisar, que dice,
Claro, ¿verdad? La palabra vidya, que es de la misma raíz vid, que significa conocimiento, y también
ciencia, vidya. Y avidya es el opuesto de la palabra, por ejemplo, gyana, en sánscrito, conocimiento,
tenemos el griego, gnosis, y por ejemplo, ignorance, ignorancia o agnóstico, todo está relacionado.
Español es una lengua indo-europea, pero el mundo material es tan, ¿cómo decir?, atrasado se puede
decir. O sea, comparado al mundo espiritual, que en los libros antiguos, a veces este mundo se llama
simplemente la ignorancia, avidya. Entonces, avidya es un tipo de jerga, un tipo de antigua, un término
que indica el mundo material en el cual la condición básica es ignorancia. Porque nosotros somos almas
dentro del cuerpo, pero ¿quién lo sabe?, pocos lo saben, nadie quiere saber. Entonces, este verso aquí
dice vidyancha vidyancha jas, que es el conocimiento tanto del mundo espiritual como del mundo
material, ambos, o mejor dicho que ambos juntos, aquel que conoce ambos juntos, el mundo espiritual,
el mundo material. A vidyaya, a través del conocimiento de este mundo, mriti un tirtoa, uno supera a la
muerte, uno supera a la muerte, y vidyaya amritamashnuta, y a través del conocimiento del mundo
espiritual, uno disfruta de la inmortalidad. Entonces, Brauch traduce este verso como, sigue, solo alguien
que puede aprender juntos el proceso de la neciencia, o sea la ignorancia, y el proceso del conocimiento
trascendental puede trascender la influencia del nacimiento y de la muerte repetidos y disfrutar todas
las bendiciones de la inmortalidad. Ahora, este concepto de vida, este concepto de la relación entre el
conocimiento de este mundo y del mundo espiritual es muy parecido al concepto que existía en el
mundo clásico. España hacía parte del mundo clásico, es por eso que obviamente... Jaguaranga, ¿puedes
pedir que él esté quieto? Es por eso que ustedes hablan español. Es por eso que hablan en la lengua
latina, porque España hacía parte de ese mundo clásico. Y en este mundo clásico había el concepto de
que hay diferentes dimensiones de vida, y hay diferentes ciencias que estudian y descubren diferentes
dimensiones del mundo. Por ejemplo, hay geología para estudiar la tierra, geo. Hay fisiología para
estudiar la estructura del cuerpo humano, y biología, y el griego bios, que significa vida. Entonces, la
ciencia de la vida. Bueno, en el sentido físico. Biología. Entonces, hay también el alma. Existe un alma.
Existe una persona que supera, trasciende y sobrevive el cuerpo. Y por eso hay una ciencia espiritual. Y
todo el mundo, o muchas personas, entendían eso. Y el hecho de que, como yo explicaba en Barcelona
algunos días atrás, el hecho de que vivimos en un mundo bidimensional es obvio. Porque podemos
observar que las cosas más importantes en nuestra vida, de hecho, no son físicas, sino son metafísicas.
Meta en griego significa después o más allá. Entonces, son términos de nuestro amigo Bhakta
Aristóteles, uno de los primeros miembros del movimiento Hare Krishna. Inconscientemente, era
miembro de nuestro movimiento. Así que, Aristóteles, que no era la persona más espiritual en la galaxia,
pero sin embargo, hasta Aristóteles entendía que hay el mundo físico y una ciencia física. Y hay también
un mundo y una ciencia metafísica. El mundo y el conocimiento más allá de la materia. Y por ejemplo,
para demostrar fácilmente que todos nosotros aceptamos esa realidad bidimensional, un ejemplo es
algo en que casi todo el mundo cree y que es la base del sistema político de España, la base del sistema
de justicia cuando funciona, de España y otros países. El sistema español europeo de justicia, de
gobierno, está completamente basado en un concepto totalmente metafísico y no empírico que se llama
la igualdad. La igualdad que empíricamente es absurda. Es absurda. O sea, todos los exámenes ya
concebidos por un cerebro humano muestran que somos diferentes y no iguales. O sea, pruebas,
atléticas, artísticas, matemáticas. ¿Cómo se llama esas competencias de belleza? ¿Cómo se dice en
español? Concursos de belleza. En esta vida nunca gane un concurso de belleza y ya es muy tarde.
Entonces, en este mundo cuando estudiamos los diferentes y cuando examinamos y probamos todas las
dimensiones del mundo material, el hecho es siempre que somos desiguales. Siempre.
Económicamente, atléticamente, todo. Ahora, ¿cómo podemos crear un sistema político, un sistema de
justicia, la estructura, la base de nuestra civilización y todo basado en un concepto que toda la ciencia
dice es absurdo? Porque vivimos en un mundo bidimensional. Vivimos en un mundo con una realidad
objetiva física y una realidad objetiva metafísica. Entonces, para nosotros es un hecho objetivo que
todos somos en un sentido superior iguales. No importa que uno sea mejor atleta o otro mejor músico,
otro mejor matemático, que otro sea más rico. A pesar de todo eso, más allá de las desigualdades, hay la
igualdad metafísica, más allá de la física. Así que si tú crees en la justicia, si tú crees en la igualdad, si tú
crees en ayer, que no se puede comprobar empíricamente, si tú crees en la compasión, o sea, si no
favoreces el Darwinismo social. En los Estados Unidos hay un poco más de empatía con el Darwinismo
social. Pero el concepto es sobrevivencia de los más fuertes. Si uno se hace muy rico y otro se muere de
hambre, está bien, estamos mejorando los genes. Se puede dar ese argumento. Por ejemplo, el
caballero Hitler era un gran fan de Darwin. Se puede dar argumentos que son moralmente monstruosos.
Pero sin embargo, si quieres vivir en un mundo unidimensional solamente empírico, bienvenido. Porque
tienes que entender el tipo de mundo en que vas a vivir. Por ejemplo, en los bosques, es bien sabido que
en los bosques, las grandes florestas, hay un problema que los árboles, las florestas, se están
debilitando, las grandes florestas. ¿Por qué? Porque los gobiernos paran y apagan incendios. Y los
incendios naturales, porque los seres humanos no son los únicos que pueden quemar florestas,
entonces los incendios naturales eliminan a los árboles más débiles y sólo sobreviven los más fuertes.
Así que uno puede argumentar, como Hitler argumentaba, que hay que, como decir, fortalecer la
humanidad eliminando a los indeseables. Ahora, si todo lo que quieres es ciencia, él tiene razón, pero la
realidad es bidimensional. Hay una dimensión moral, pero esa dimensión moral no es empírica. La
ciencia empírica jamás puede descubrir justicia, compasión. La compasión, la empatía no es un objeto
físico que se ve con un microscópico. Microscópico, cómo se dice? Sí, o telescópico. Así que si queréis un
mundo puramente empírico, como se dice, aprieta el cinturón de... Cinturón de cintura. Sí, porque, por
ejemplo, si queremos equilibrio ecológico porque es mejor para la sobrevivencia y no hay otras
consideraciones morales, sería muy pragmático, muy deseable matar un mínimo de 3,000 millones de
seres humanos, mejor cinco, y eso va a mejorar increíblemente la calidad del aire, del agua. ¿Verdad?
Tal vez cinco mil millones. Depende, ¿verdad?, de cuánto espacio verde quieres. Aquí es el punto
filosófico. Cuando nosotros aceptamos que matar así a personas inocentes es objetivamente malo,
porque la ciencia nos diría, según su visión del mundo, que de hecho, si todo lo que tenemos, si todas
nuestras herramientas analíticas son empíricas, tendríamos que decir que de hecho no existe el moral y
moral, y la naturaleza a través de la evolución ciega nos programó genéticamente a pensar que existe el
bueno y el malo, la maldad y la bondad, que no existen. Entonces, cuando una persona mata a un niño,
a una persona inocente, estamos programados genéticamente a imaginar que eso es malo, porque si te
quieres limitar a la ciencia empírica, tú no tienes derecho a decir que es malo masacrar a millones de
personas inocentes. No tienes derecho filosófico a decirlo. Únicamente puedes decir que yo fui
programado a sentir ciertas emociones que me llevan a concluir, obviamente una ilusión, de que existen
cosas metafísicas, no empíricas, como la moralidad y la inmoralidad. Así que obviamente nadie está
preparado a vivir en un mundo puramente empírico, no solamente porque los resultados son
monstruosos, pero también porque sabemos, en la parte más profunda del corazón, sabemos que hay
cosas buenas y malas, y que la justicia es real, el amor es real, sabemos en la parte más profunda de
nuestro ser. Así que sabemos, todos nosotros sabemos que vivimos, si pensamos, que vivimos en un
mundo bidimensional. Así que, obviamente, si queremos comprender, entender el mundo, comprender,
una palabra muy interesante en español, aprender es tomar, y con, todo junto, verdad, comprender.
Como ustedes ven, yo tengo un problema, así, lingüístico. Entonces, si queremos comprender, si
queremos entender completamente la realidad, es obvio que necesitamos dos ciencias. Ah, esos son
cuatro. Necesitamos dos ciencias. Necesitamos dos ciencias, la ciencia física y la ciencia metafísica. Eso
es obvio. Cualquier tonto puede entenderlo. Pero hay muchas personas con títulos académicos
avanzados que no pueden, porque no han llegado al punto de tontería. Entonces, si estudiamos la
historia del mundo, si estudiamos la historia del mundo, y si preguntamos, visto que, obviamente, hay
necesidad de dos ciencias, física y metafísica, ¿qué es la relación, qué podemos observar a través de la
historia de la relación entre las dos ciencias? Y lo que vemos es que hay muchos periodos de paz y de
armonía en que las dos ciencias trabajan juntos, como parceros, como amigos, y investigan sus
respectivos dominios, digamos, existenciales. Y hay otros periodos en que una o otra ciencia se pone
imperialista, como se dice, agrede. Sí, agrede, y se puede decir que hay guerras epistemológicas, hay
guerras de conocimiento, hay, a veces, guerras así físicas, como, por ejemplo, cuando en la revolución
bolsivista, los bolsivistas mataron a millares de sacerdotes, y también en las inquisiciones, que los
sacerdotes, que también tienen ese talento, a veces mataron a millares de personas que querían
libertad de conciencia. Así que, resumiendo en pocas palabras, podemos observar un periodo bastante
largo del mundo clásico en que España participaba, greco-romano y también español, en que las varias
ciencias cohabitaban, y después, con la caída de la civilización romana y la entrada de la obscurantismo.
Por ejemplo, para dar un ejemplo de qué pasó, el mundo clásico intelectualmente era muy sofisticado,
muy sofisticado en muchos sentidos, filosóficamente mucho más sofisticado que nuestro mundo hoy en
día. El mundo moderno, por ser tan agitado y acelerado, está, como se dice, intelectualmente
hidroplanando, como un barco, verdad, en el mar, que cuando el barco va muy rápido, hidroplana,
entonces el mundo moderno intelectualmente está hidroplanando la realidad. Pero en ese entonces, en
ese mundo clásico, sí, coexistían. Y después, con la caída de esa civilización tan sofisticada, se entró en
un periodo tan oscuro, tan oscuro, que las cosas empezaron a mejorar con la victoria de, cómo se dice
en español, Carlos Magno, en inglés usan Charlemagne, y Carl de Groza, obviamente, en alemán.
Entonces, Carlos Magno, que más o menos empezó a reunir, a reestructurar políticamente Europa,
porque era caos. Y él se dio cuenta del estado triste, de la educación. En varios siglos, una civilización
extremamente intelectual, que se escribían libros así clásicos, constantemente, filosofía avanzada, y
Carlos Magno se dio cuenta que casi nadie sabía leer. Casi nadie sabía leer. Entonces, él buscaba a
alguien que podía empezar el proceso de alfabetizar el mundo. Y tuvo que importar alguno, porque los
sacerdotes, obviamente, eran como dueños de la erudición. Entonces empezaron, y él pidió a las
abadías, que empezaron a dar lecciones al pueblo, a los pueblos que rodeaban las abadías. Y las escuelas
de las abadías más exitosas se volvieron las primeras grandes universidades de Europa, como la abadía
de París, la Universidad de París, y en otras ciudades, en Bologna. Y después, algunos profesores
catedráticos querían más libertad intelectual, entonces fueron a Inglaterra, que era el fin de la línea,
Inglaterra, y uno fundó una escuela religiosa en un punto donde se atravesaba el río, entonces los
bueyes atravesaban el río, y por eso se llamaba Oxford, porque Oxford es buey y Ford es donde se
atraviesa el río. Y otro fue a Cambridge, entonces las primeras grandes universidades hacían parte de
este proyecto de Carl Magno de revivir el alfabetismo. Entonces no se puede hablar de ciencia en ese
entonces. Pero después Europa se repuso, se puede decir, y la ciencia con el renacimiento, la ciencia
florecía, hasta que hubo una, como se dice, un problemito que se llamaba la reforma. Porque el primer
gran reformista, nuestro querido amigo Luther, Luther con, ah, Luther, problema con serios problemas.
Objetivamente, uno de los grandes psicólogos del siglo XX estudió Luther, y casi él, después de
estudiarlo, necesitaba un psicólogo. Pero entre las afirmaciones de Luther, hay muchas cosas que no
quiero hablar ahora, pero Luther es, que Dios lo bendiga. Pero de lo de las, como se dice, de los lemas o
slogans de Luther era, por ejemplo, sola fede. Ustedes entienden, es latín, pero se entiende en español.
Solamente fe, fe, sola fede. ¿Qué quería decir eso? Sola fede, sola escritura. Eso significaba que tenemos
que rechazar al renacimiento. ¿Por qué rechazar al renacimiento? Porque era justamente un
renacimiento de cultura pagana. De cultura pagana. Entonces, la reforma empezó porque la iglesia era
corrupta y todo eso, pero eso era el gatillo. Solamente el gatillo. Después tomó su propio, como dice,
vapor. Y realmente, después de poco tiempo, no se traba, no se trataba de corrupción de la iglesia del
Vaticano. Se trataba de realmente otro abordaje a la vida. Quiero decir, rechazar al renacimiento, que
claro que era la cultura pagana del sud de Europa, no del norte de Europa. Entonces, ese rechazo,
entonces Luther rechazó a la ciencia, rechazó a la filosofía, rechazó por ejemplo a Tomás Aquino, porque
Tomás Aquino había como se dice, bautizado Aristóteles. Entonces, ese rechazo, entonces la primera
gran división, ruptura entre la religión y la ciencia fue la iglesia, la religión que provocó esa ruptura. Y es
como un caso típico que por ejemplo hay una pareja y un día uno o otra dice que no, ya no te amo, ya
quiero, ya voy con no sé quién. Pero después de un tiempo, la persona abandonada descubre a alguien
mucho mejor, que es inútil. Y la persona que rechazó vuelve, ah por favor, fue un error, perdón, no, muy
tarde. Y yo he visto casos así. Entonces eso es exactamente lo que pasó con la ciencia y la religión. Que
Luther dijo, ya no te amo. No, pero por favor, no te amo. Entonces, pero con tiempo, es la ciencia, es la
ciencia que como se dice, prevaleció y la religión entró en declino. Y ahora la ciencia trata de, o las
religiones tratan de mostrar que sí, que entienden, están de acuerdo con la ciencia. Para que sean
permitidos a entrar en las grandes universidades. Así como antes los científicos tenían que mostrar que
no, realmente soy cristiano, soy católico para poder entrar a las universidades. Entonces toda una
historia, buenas noticias ahora. No solamente que voy a terminar luego y ustedes podrán comer. Pero
hay otra buena noticia. Que ahora hay un movimiento, hay una tendencia histórica de reconciliar. De
entender que el conocimiento, como decir, hay una realidad, no hay dos realidades. Hay diferentes
facetas, diferentes dimensiones de una realidad. Y por eso las diferentes ciencias, tanto por ejemplo la
biología o la teología, las diferentes ciencias tienen que trabajar como hermanos o por lo menos primos.
Y hay esa tendencia, cada vez más conferencias académicas tratando de ver cómo se puede, cómo las
dos ciencias pueden trabajar en paz y coexistir. Pero por eso el concepto de que la religión no es
científica es primero que es filosofía terrible. Para sacar un PhD en ciencia no se requiere un curso en
filosofía. Y muchas veces los científicos son filósofos terribles. El hecho es que la ciencia empírica, siendo
una ciencia empírica, no puede ni hablar de la ciencia espiritual porque está en otra dimensión que ellos
ni pueden tocar. Así que eso es la cosa. Y ahora tenemos esta gran oportunidad que Praupat trajo este
conocimiento y tenemos que ser científicos espirituales. No se trata de superstición, no se trata de
mitología a pesar de la tendencia humana de siempre mitolizar las cosas. Pero una ciencia espiritual. Eso
es porque yo estoy aquí hablando con ustedes porque cuando yo era hasta más joven que ahora, si lo
pueden creer. Yo era estudiante en la primera universidad pública de los Estados Unidos en Berkeley,
California. Y yo descubrí, Praupat vino al campus. Praupat vino al campus y asistí a la conferencia y mi
vida cambió completamente. Porque yo había, como expliqué tal vez en Barcelona, yo había hecho un
voto serio, una promesa seria a mí mismo. Que yo iba a dedicar mi vida a encontrar conocimiento de la
verdad absoluta, de Dios lo que sea. Y ese voto que cumplí, esa promesa que me hice, la hice en España.
Porque en el año 68, yo como estudiante joven, mi hermano mayor había ido a Europa en 67. Y yo,
entonces él volvió a California. Éramos muy, el mundo era muy inocente, él volvió con millones de
panfletos y fotos y cosas de Europa. Y yo me volví loco. Y yo voy, entonces el próximo verano yo fui a
Europa y vine a España, fui a Madrid. En 68 era un poco diferente. Un mes y entonces con Sriman
Franco. Y después fui al sur, a Málaga, como esas ciudades lindas del sur, de Granada y Ronda con el
barranco. Ronda con el barranco. Recuerdo bien el barranco, que no había ni una cerca. Sí, nada. Quedé
casi mareado. Recuerdo Ronda. Pero cuando volvía del sur de Málaga, que era obvio, las ciudades eran
mucho más pequeñas en España. Casi 50 años atrás. Volví en el tren. Yo recuerdo cuando abordé el tren
en Málaga. Y muchos, como se dice, campesinos abordaban con sus cabras y gallinas en el tren, que eso
fue algo nuevo para mí. Pero finalmente llegamos y en el tren, yendo a Madrid, yo tomé una resolución
formal. Yo iba a buscar a Dios y volví a Berkeley y para Europa vino. Entonces, tenemos esta gran
oportunidad de estudiar y practicar una verdadera ciencia espiritual. Una verdadera ciencia espiritual.
Todos los elementos de la ciencia están presentes. Una teoría, se puede decir, filosofía, un método de
comprobarla, de experimentar personalmente y directamente a través de la conciencia. Como Krishna
dice en Bhagavad Gita, se entiende a través de la percepción directa. No se trata de fe, que ojalá que
cuando yo me muera. No. En esta vida hay un término en sánscrito, Jeevan Mukta, que significa liberado
mientras uno vive en este mundo. Jeevan Mukta. En esta vida uno puede comprobar, uno puede
experimentar la realidad de Krishna, de Dios, de tu propia alma. Bueno, ahora gracias por su atención y
cualquier pregunta. Sí, señor. Se dice que el hecho científico tiene que cumplir tres requisitos. La
observación, la emisión de una hipótesis. ¿La observación y el segundo? Hipótesis, emitir una hipótesis,
una teoría y luego comprobarla. Entonces hablando con la gente, cuando hablamos de la ciencia
espiritual, por ejemplo, de la percepción del alma, o la percepción de un sentimiento bondadoso, o la
percepción de la compasión, es algo que yo me observo, emite una teoría de que existe algo que llamo
compasión, que me hace sentir por otra persona el bien, para hacerle el bien. Y otra persona igual,
también lo siente. Entonces, ¿por qué no consideran que es científico? Si existe la observación de uno
mismo, la emisión de esa teoría y la comprobación. Pero no lo podemos demostrar, digamos,
objetivamente hablando, ¿no? Sí, podemos. Porque, por ejemplo, cuando Einstein descubrió su cosa de
relatividad, es muy interesante cuando, muchos años atrás, cuando yo estudiaba en la Universidad de
California, en Los Ángeles, porque estudié tanto en Los Ángeles y Berkeley, y astronomía. Y yo recuerdo
que en nuestro libro de texto se reprodujo un parágrafo del New York Times, el periódico New York
Times, cuando salió las noticias de Einstein, de lo que había descubierto. Es muy interesante porque el
periodista del New York Times estaba en Inglaterra entrevistando al director del Instituto Real de
Astronomía. En Inglaterra todo es real. ¿En España también? Sí. La Real Academia y todo eso. No, no, no
puedes hacerlo ahora. Gracias. Entonces, y el periodista dijo al director del Instituto Real de Astronomía,
por favor explícame en términos que mis lectores, que no son científicos, pueden entender. Es muy
interesante que el director dijo, eso no es posible. ¿Cuántas personas, por ejemplo, en España, todo el
mundo, todas las personas que más o menos saben leer, todas las personas aceptan que Einstein era
muy inteligente y que descubrió algo importante, no? Ahora, ¿cuántos españoles han confirmado
directamente la teoría de Einstein? Haciendo toda la parte de matemática, verificando cada ecuación,
¿cuántas? ¿Qué porcentaje? Inclusive, el número de personas en España, el número de personas en
España que han tenido directamente una experiencia innegable de Dios es un porcentaje mucho más
elevado que el porcentaje que ha confirmado directamente las teorías de Einstein. Y no importa cuál
tradición, cuál religión, simplemente una experiencia innegable de un ser supremo y divino. Entonces, es
irónico, es irónico que en ese sentido la existencia de Dios es un hecho mucho más científico, si
queremos dar preferencia al pueblo. Pero el punto aquí es que en cualquier ciencia se comprueba a una
persona cualificada a valorar la prueba. Por ejemplo, esa partícula Bose que salió, ¿verdad? De esa
maquinaza que tienen para las partículas, ¿verdad? Entonces, son los otros científicos que confirmaron
que es verdad, no el pueblo, no es que se votó, que todos los ciudadanos de la Unión Europea votaron
que sí, esa partícula realmente existe. Entonces, es pura hipocresía de los así llamados científicos que
exigen el derecho a confirmar o negar una teoría científica, pero exigen que Dios sea disponible a todos
sin ninguna cualificación espiritual. Eso es hipocresía metodológica. Y el hecho es que si uno se dedica
seriamente y sinceramente, uno descubre, uno experimenta directamente la existencia de Dios, es fácil.
Pero el método es diferente. En este sentido, muchas veces decimos que la experiencia de Dios no es
mecánico y no podemos imponer un sistema estereotípico para obtener el resultado de la experiencia
de Dios. Lo decimos mucho eso, se lo dice. Suena familiar, sí. Y entonces, habiendo dicho eso, ¿cómo
reconciliamos este? Porque uno descubre un aspecto de la realidad a través de un proceso apropiado.
Por ejemplo, si un hombre que conoce a una mujer muy linda y el hombre queda así, así, ah, quiero
conocerla, si puedo convencerla a salir conmigo. Ahora, él tiene que convencerla, no hay un proceso
mecánico de convencerla. Ella está en la posición superior en este caso, porque vamos a decir que ella lo
ve a él y, ah. O sea, no es terrible, pero no estoy muriéndome tampoco. Entonces, en este caso, si uno
está apegado, y ya volvo, uno está apegado y el otro calmo, entonces la persona de esa pegada tiene la
ventaja. Entonces, cuando una persona tiene ventaja, tú tienes que complacer, tienes que persuadir. Un
proceso mecánico funciona cuando estás investigando la dimensión determinística de la realidad.
Determanística significa que, por ejemplo, esa guirnalda, si la dejo caer, cae. La guirnalda no tiene libre
arbitrio, no, no quiero caer. Porque es un objeto físico, no tiene conciencia, no tiene libre arbitrio.
Albedrío, ah, albedrío es italiano y portugués. Libre albedrío. Gracias. Oxidado. Entonces, la guirnalda no
tiene libre arbitrio. Porque es obligada a seguir ciegamente las leyes naturales. Entonces, en una
situación en que las cosas no tienen libre albedrío, son obligadas, forzadas, a obedecer leyes, uno
puede, como se dice, someter esos objetos a, como se dice, experimentos. Experiencias, como se dice,
experimentos controlados. Porque, obviamente, no puede ser, no puede ser, no puede ser.
Experimentos controlados. Porque, obviamente, no puedes controlar algo superior. Una persona que
todavía no se ha comprometido contigo, a esa persona no la puedes controlar. Entonces, la esencia de la
ciencia empírica es el experimento controlado. Es por eso, a priori, a priori. Por definición, la ciencia
empírica, una ciencia que necesita controlar, no puede estudiar ni descubrir las cosas que no son
controlables. O sea, las cosas superiores. Porque superioridad significa justamente que no lo puedes
controlar. Por eso, tratar de estudiar a Dios a través de un experimento controlado es simplemente
ignorancia. Es locura. Hay filósofos que hablaban de eso. O sea, santo Tomás de Aquino. O sea, todo el
derecho natural habla de eso. O sea, dan como razones. Ahora no me acuerdo, pero lo vi en la
universidad. Y también Aristóteles, creo. O sea, que dan, o sea, como que razones de cómo se puede
comprobar la existencia de Dios. Bueno, Aristóteles argumenta que hay un, ¿cómo se dice en español?
Un motor inmóvil. Un motor inmóvil. Sí. ¿Motor? Inmóvil. Sí, sí, inmóvil. The unmoved mover. El que
mueve a todo, pero a quien nadie puede mover. Y lógicamente trata de, no sé si se puede decir
comprobar, pero sugerir, tal vez. O sea, creo que no es una prueba en el sentido estricto de la palabra.
Pero eso sí se puede hacer. O sea, se puede aplicar la lógica a un ser superior. Pero mostrando que la
existencia de un ser superior es consistente con todo lo que podemos observar. Y además, que explica
mucho. Lo explicaría mucho, que ahora no podemos explicar. O sea, eso es valioso, no es exactamente
una prueba en el sentido físico. De nada. Entonces, pero eso es el punto. Cuando quieres, como se dice,
obtener acceso, digamos, acceso a alguien superior, tienes que complacer a esa persona superior. Es por
eso que los muchachos enamorados compran dulces y flores y todo eso. Tratando de persuadir,
tratando de complacer, de atraer. Así que tratar de complacer, tratar de persuadir al superior es
científico. Mientras que se controla al inferior. Porque un ser humano, digamos, en un sentido es
superior a una piedra. Entonces, un ser humano puede someter a la piedra a un experimento
controlado. Pero no a otra persona. Así que resulta que la devoción, Pacta y Yoga, resulta que tratar de
entender a Dios a través de la devoción es científico. ¿Los resultados son últimamente en las manos de
Dios? Sí, pero Dios no es... idiota. Mismo Einstein dijo que no creo que Dios está aquí como un idiota
jugando con nosotros. Como el filósofo inglés del siglo XIX, John Stuart Mill, dijo que no puedo creer o
adorar a un Dios que es moralmente inferior a los seres humanos. Entonces, por ejemplo, una madre, un
padre, tiene un hijo o padre por amor. Porque quieren amar. Porque una madre, una mujer, por
ejemplo, tiene dentro de sí amor maternal. Necesita un objeto por ese amor. O el padre, amor paternal.
Entonces, aman a su hijo. La idea de concebir y procrear un hijo y después esconderse. Que mi querido
hijo, en esta vida nunca me verás. Eso es patológico. Eso es una enfermedad mental. Entonces, atribuir a
Dios cualidades patológicas así no es buena teología. Obviamente, si nosotros no queremos saber de
Dios, no se nos revela porque vamos a ofender. Es inapropiado. Por ejemplo, a veces, mismos padres
que tanto aman al hijo, si el hijo crece y malice a los padres, y hace violentos, sí, los padres tienen que
separarse. Siquiera de un hijo amado. Entonces, es completamente razonable que Dios se nos revela en
la medida en que somos sinceros. Es la naturaleza de la relación. Por ejemplo, una persona, aquí en los
Estados Unidos hay personas, gracias a Dios, no todas. Sucede. Entonces, hay personas, a veces, por
ejemplo, tú te sientas al lado de una persona en un avión y una sonrisa tuya y se pone a decirte toda la
historia de su vida. En España sucede, ¿no? Sí. Suena libre saber que no es solamente más un problema
americano. Y debe ser en España también. Tenía que ser que en la televisión personas, por ejemplo, una
pareja completamente que están casi matándose y van, ¿verdad?, a la televisión y se pelean
públicamente, ¿verdad? Hay personas así, pero creo que hay personas con un poco más de dignidad. Es
natural que uno se revele a otra persona cuando hay confianza. Si una persona te muestra, te
comprueba que es de confianza, que está comprometida, que realmente nunca te va a abusar o a
explotar, sí, tú puedes abrir el corazón a esa persona que se ha mostrado fiel y que merece tu confianza.
Buenas noches, señora. Buenas noches, señora. Buenas noches, señora. Otra pregunta, sí, del gran
público. Me gustaría saber de qué habló Prabhupada esa vez que fue a su universidad la primera vez
que... Empecé a cantar Hare Krishna y Prabhupada tenía una potencia enorme. Y la próxima vez que lo vi
fue para mi iniciación, primera iniciación. Para una persona que está entre esos dos mundos, el científico
académico, y tratando de llevar la vida espiritual, ¿qué recomendaciones usted puede dar para tratar de
llevar eso de manera equilibrada? Porque a veces es un poco difícil lidiar con... Los poderes de la ciencia
de explicar todo. La verdadera ciencia es una bendición. Es algo glorioso porque revela los misterios de
la creación de Dios. Es por eso que los grandes científicos como Newton o Copernicus, todos ellos,
sabían que glorificaban a Dios revelando la lógica de su creación, la maravilla de su ingeniería. El
problema no es así como entre las religiones. No hay problemas entre personas realmente fieles,
religiosas, de diferentes tradiciones. Todos los problemas existen entre los fanáticos. Cada tradición
tiene sus locos de la guerra. Cada tradición tiene sus fanáticos. Los fanáticos se pelean, se matan, se
insultan. Pero las personas realmente espirituales de cada tradición no se pelean. Asimismo, los
verdaderos científicos, no así los payasos que exageran y invaden el espacio de otra ciencia. Los
verdaderos científicos, por ejemplo, la mitad de todos los científicos de las ciencias exactas creen en
Dios. Y la mayoría de los mejores científicos de la historia eran religiosos. Así que no hay conflicto. El
conflicto es entre los fanáticos de ambos lados. Porque en cada área de la vida, la ciencia, la religión, el
arte, eso, el otro, la política, hay personas más o menos cuerdas y hay fanáticos. Siempre son los
fanáticos que se pelean. Entre los científicos, los fanáticos insultan a la espiritualidad. Los científicos más
cultos, más inteligentes, entienden, no. Que tenemos límites y ellos están en otra dimensión, en otra
ciencia. Bueno. Sí. ¿Dónde estás? Sí, se ve. O no se ve. Sí, dime. Él quiere dar el amor puro a todo el
mundo y por otro lado, él respeta el deseo... Oh, ¿cómo estás, Ana? Y por otro lado, él respeta el deseo
de las personas que no creen afectar su existencia, les quita el conocimiento y les da el olvido. Entonces,
se ve como una contradicción. Por un lado, quiere dar, por otro lado, no lo quiere imponer. Nosotros
queremos demostrar la existencia de Dios, pero están los científicos que demuestran que no se puede
demostrar. A lo mejor es su forma... No, ellos no pueden demostrar. Sí, sí. Por ejemplo, en América... Ah,
gracias por venir, Ana. En, por ejemplo, en América, hay un juego popular que se llama Baseball. Saben
que existe... Ahora, en Baseball, es completamente imposible hacer un gol. Porque no hay un gol en
Baseball. Sí, sí. ¿Y en fútbol, cómo se dice aquí? En fútbol no se puede hacer un home run. Es imposible
porque no es parte del juego. Ellos son tan... Algunos, hay tantos científicos que son buenos. Pero
algunos que son arrogantes y fanáticos, si yo no puedo someter a Dios a un experimento controlado, si
no lo puedo amarrar en mi laboratorio, no existe. Eso no es ciencia, eso es un problema psicológico.
Porque una persona que dice que nada existe, si no lo puedo controlar. Eso, obviamente, es una
enfermedad grave, psicológica. Eso no es ciencia, eso es psicopatología. Sobre el otro punto. Sobre el
otro punto, ¿ustedes conocen esta película de Jim Carrey, Bruce Almighty? Sí. ¿Bruce Todopoderoso? Sí,
sí. ¿Quién lo conoce? El hizo una cosa demasiado chistosa sobre los Hare Krishnas. Después, si alguien
está interesante, muestro en YouTube. Demasiado chistoso. Pero, en Bruce Almighty, la idea de las
religiones siempre se presta muy bien a la comedia. Entonces, Dios, del punto de vista, por ejemplo, si
tienes un hijo, tienes que respetar su libre arbitro. Porque sin libertad, sin libre arbitro, no hay ni la
posibilidad de amor. No se puede obligar a una persona a amarnos. Entonces, dándonos libertad, Dios
crea o sostiene las condiciones necesarias por la existencia del amor. Y sí, no es contradictorio. Porque
si, por ejemplo, tú quieres que alguien te ame, pero si la persona no te ama, no lo puedes matar. Hay
personas que sí. Si no me matas, nunca estarás con otro. Así. Ese tipo de locura, ¿verdad? Hay personas
que no aceptan que otra persona no la ame. Dios no es así. A pesar de algunas versiones de Dios. De
hecho, Dios es cuerdo. Y no es que, imagínate, si no me amas, te quemo eternamente en un lago de
fuego. Obviamente, una persona quiere decir desesperadamente el tratamiento clínico. Porque se
puede aplicar esa misma psicología a un ser humano y se ve que eso es locura. De castigar a una persona
porque no te ama. Eso es absurdo. Entonces, Krishna es muy liberal. Por ejemplo, en Bhagavad Gita,
para mostrar que Krishna es liberal. En Bhagavad Gita, Krishna dice que en este mundo, el amor no es
real. En Bhagavad Gita, Krishna dice que en este mundo tú puedes ser sabio, feliz y con una vida superior
en la próxima vida. Y todo eso sin Krishna. Todo eso sin Krishna. Krishna no es un Dios, como se dice,
celoso. Hay descripciones de Dios que él necesitaría varios programas de doce pasos. Varios programas
de doce pasos, ¿verdad? Varios. Pero Krishna dice que, por ejemplo, hace mil años más o menos. O más,
hace casi dos mil años. En la India, el budismo nació en la India. Entonces, los budistas creían en karma y
reencarnación. Y creían mucho. Estaban casi obsesionados con conseguir buena karma, a pesar de que
no existen. Y también muy preocupados con sus antepasados, que tampoco existen. Pero la idea es que
los budistas criticaron al hinduismo, si se puede usar esta palabra, poco anacrónica. Pero criticaron
diciendo que, en el budismo, el sistema de karma es objetivo. Que la reacción que recibe corresponde
perfectamente a la calidad o a la cualidad de lo que hiciste. O sea, si recibes castigo, ese castigo
corresponde perfectamente al sufrimiento que causaste en el mundo. Todo es matemático, justo,
objetivo, equilibrado. Mientras que, en la religión védico o hindú, hay dioses que son caprichosos, que
castiguen porque les gusta. Y eso se ve claramente, por ejemplo, en los libros de Homero. Pero, en
Elíada y Odysseo, que los dioses son peor que adolescentes. Si es posible. Si son, como Zeus dice a su
esposa Hera, No voy a aplastar a ese tipo ahí abajo en la guerra. Pero, ¿por qué? No sé, no me gusta. Y
voy a proteger a ese otro. Pero, ¿por qué? No sé, es simpático. Es por eso que Platón, en su república, la
famosa república de Platón, Platón dice que esa es locura. Que Homero, Platón era muy radical. Platón
era muy radical porque Platón era, ¿cómo se llama? El sistema de educación griega que era el modelo
para todo el mundo civilizado en esa región. Se llamaba la paideia. La paideia, como se dice, la paideia,
el currículo griego era el modelo en Roma, en todas partes, como el mejor sistema de educación. En la
paideia, la base era Homero. Porque Homero, los libros de Homero eran como la base. Ellos no tenían ni
una biblia ni una vagoquita. Pero entonces Homero era más o menos la fuente de información teológica,
se puede decir. Y Platón dice que Homero es un desastre para nuestra civilización. Porque se ve en esos
libros dioses caprichosos y injustos y malhumorados y ridículos. Y por eso que Platón y otros filósofos
hubo un tipo de revolución intelectual en Grecia en ese entonces. Contra ese politeísmo a favor de un
dios monoteísta, justo, objetivo y todo eso. Entonces, Krishna, en Bhagavad Gita, cuando Krishna
describe el sistema de karma que, por ejemplo, las diferentes cualidades, bondad, pasión, oscuridad,
que decimos ignorancia y todo eso, es completamente objetivo. Krishna dice, si tú eres una buena
persona y no quieres saber nada de mí, te recompenso. Porque la bondad trae bondad. Krishna no es
celoso, él tiene autoestima ilimitada. Y no tiene problemas. Entonces el sistema contra la crítica injusta
de los budistas es completamente objetivo. Eso sí, otro diálogo de Sócrates, que se llamaba el, ay,
oxidado, dios mío, Júthofró, Júthofró. Júthofró o algo así. Pero Sócrates, a Júthofró, una persona
insoportable que se creía muy moral y era medio, era completamente tonto, pero se creía muy moral.
Entonces Sócrates le hace una pregunta genial, que va directamente al punto aquí de Krishna. Y además
de tu pregunta, Ana, sí, que estamos todavía en esa pregunta, que Sócrates le pregunta a Júthofró si
ciertas acciones son buenas, moralmente buenas, porque los dioses las aman, las adoran esas acciones,
o si los dioses las adoran a esas acciones porque son buenas. O sea, si hay una moralidad objetiva que
los dioses recomienden o exigen o promueven ciertas acciones porque son buenas. No es que son
buenas porque un dios las adora. Entonces Krishna es así, se puede ver las reglas o el comportamiento
recomendado en Baloguita, es objetivamente bueno. No importa si hay un dios y no hay un dios, ese
comportamiento recomendado es moralmente bueno, en términos de sus consecuencias. Y es por eso
que Krishna respecta nuestro libre arbitrio, no solo como táctica, pero realmente nos respecta. Una cosa
irónica es que Krishna, Dios, nos respecta muchas veces, muchas veces, mucho más que lo respectamos
a él. Y así él, si queremos olvidarlo, como Ana dijo, si queremos olvidarlo está bien. Y Krishna permite
que experimentemos directamente la naturaleza del mundo y la naturaleza de la ingratitud. Y cuando
queremos, él nos invita. ¿Entiendes? ¿Sí? Sí, sí entiendo. ¿Pero? ¿No? Entonces, no es una lucha entre
dios y sus diferentes manifestaciones, de una parte que es más imparcial, si quieres me revelo, si no
quieres no me revelo, y otra encarnación de Sushitanya Mahaprabhu que quería dar a todo el mundo?
No, pero eso es un contradictorio. Por ejemplo, un padre o madre que respecta las decisiones de su hijo
adulto, eso no contradice el hecho que los padres aman al hijo. Respectar la libertad, respetar el libre
arbitrio. Por ejemplo, yo recuerdo que en los años sesenta, cuando estuve en Berkeley en la calle
peleando por, no recuerdo qué, pero lo importante es que peleaba. Yo recuerdo que en Berkeley, que
era como el epicentro de algo, de la política de los jóvenes, y había un periódico de la ciudad, solo para
los izquierdistas y hippies y todo eso, que se llamaba Berkeley Barb, y como muchos periódicos se
mantienen económicamente con los clasificados, los anuncios, eso es, como se dice en inglés, el pan y
mantequilla. Entonces era un poco patético, era un poco patético porque los clasificados, casi todos
clasificados eran padres que habían perdido sus hijos, y tantos hijos iban a Berkeley. Berkeley era como
Mecca. Entonces tantos anuncios, como Juancito, todo es perdonado, por favor vuelve, y una cosa
terrible, que los padres así desesperadamente buscando a sus hijos y hijas. Yo recuerdo eso, pero el
punto es que respetar, no hay una contradicción, no es que si amas a una persona y haces todo para el
bienestar de la persona, quieres ayudar a la persona, pero al mismo tiempo respectas el libre arbítrio de
la persona. Inclusive las cosas no son, no solamente no contradictorias, tantos negativos, o las cosas no
son contradictorias, al contrario. Una cosa exige la otra, porque si tu amas a una persona, como puedes
no respetar el libre arbítrio, es cuando queremos dominar, controlar a otra persona, que no hay amor,
eso no es amor, eso no es amor. Cuando amas a una persona, no importa cuanto quieres que la persona
venga a ti, respetas al derecho de la persona a escoger, sin respeto no hay amor. Cómo puedes amar a
una persona y no respetarla? Y cómo puedes respetar a una persona sin respetar su libre arbítrio?
Porque la persona sin su libertad no es una persona. Amar a una persona porque no existe una persona
sin libertad, la esencia de ser una persona es de ser libre. Así que te amo, pero no con tu libertad, no
respeto tu derecho de escoger, pero te amo, no, no. No estás amando a una persona, estás amando a
un esclavo a quien le quitas el poder de escoger. Así que las cosas son, uno exige al otro, ¿entiendes? Sin
perro, ¿verdad? Bueno, gracias, poco de filosofía, filosofía es increíble para abrir el apetito, ¿verdad? Ya,
gracias a todos, Hare Krishna. Gracias.

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