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Humberto A. Leblanc
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RESUMEN
Los abonos orgánicos pueden ser una opción viable al uso de fertilizantes químicos para proveer
el N requerido por un cultivo. Sin embargo, la capacidad o potencial de un abono para proveer N
debe ser conocida para evitar deficiencias o excesos de N resultantes de la adición del abono al
suelo. El potencial de mineralización de N de un bokashi de Finca Comercial (FC), un compost
de Finca Orgánica Integrada (FIO) y un bokashi y un lombricompost de Finca Pecuaria Integrada
(FPI) de la EARTH, fue evaluado aplicando cantidades de abono equivalentes a 20 Mg ha-1 a
muestras de suelo con un sistema de manejo convencional y de un suelo de un sistema con
manejo orgánico. Muestras en triplicado de las 10 combinaciones de suelos y abonos fueron
incubadas aeróbicamente y a temperatura ambiente durante 20 semanas. Después de 0, 2, 4, 6, 8,
10, 12, 14, 16 y 20 semanas las cantidades de N mineralizado fueron cuantificadas en todas las
combinaciones de suelos y abonos. Las cantidades de N mineralizado de todos los abonos fueron
bajas. En el caso del bokashi de FC cantidades apreciables de N disponible fueron inmovilizadas
por la adición de este abono. Estos resultados fueron atribuidos a que la mayoría de los abonos
tenían relaciones C:N mayores de 20:1, el nivel óptimo recomendado para una mineralización de
N óptima. Los potenciales de mineralización de N de todos los abonos fueron bajos (28,7 mg kg-
1
NO3--N de suelo hasta 74,5 mg kg-1 NO3--N) y no cubrirían los requerimientos de N de varios
cultivos producidos en el Trópico. En general, los abonos orgánicos producidos en EARTH
podrán servir para mejorar algunas de las condiciones de los suelos, si embargo, no tienen la
capacidad adecuada de suministrar N.
ABSTRACT
Organic fertilizers may be a viable alternative to the use of chemical fertilizers to provide the N
required by a crop. The potential or capacity of any organic fertilizer to provide N must be
known in order to avoid a deficiency or an excess of N resulting from the application of the
organic fertilizer to a soil. The N mineralization potential of four organic fertilizers produced at
EARTH University, a bokashi from Finca Comercial (FC), compost from Finca Integrada
Orgánica (FIO) and a bokashi and a vermicompost from Finca Pecuaria Integrada (FPI), was
1
Contacto: Manuel Cerrato (mcerrato@earth.ac.cr)
ISSN: 1659-2751
184 Cerrato et al. / Tierra Tropical (2007) 3 (2): 183-197
evaluated. The organic fertilizers, in amounts equivalent to 20 Mg ha-1, were added to samples of
a soil from a conventional management system and a soil from an organic management system.
Triplicate samples of all treatments, including one control for each soil, were incubated
aerobically at room temperature throughout 20 weeks. Mineralized NO3--N was determined in
samples after 0, 2, 4, 6, 8, 10, 12, 14, 16 and 20 weeks of incubation. The results show that all
four organic fertilizers mineralized very small amounts of N. The addition of bokashi from FC
immobilized considerable amounts of available N already present in both soils. The C:N ratios of
all organic fertilizers explain the results. Most of organic fertilizers had C:N ratios greater than
the optimum (20:1) required to induce mineralization of N. Nitrogen mineralization potentials of
the four organic fertilizers were also low, ranging from 28.7 mg kg-1 NO3--N of soil to
74.5 mg kg-1 NO3--N of soil. These potential amounts of mineralized N from the organic
fertilizers would not meet the N requirements of various crops. In general, the organic fertilizers
produced at EARTH University do not have an adequate N supplying capacity.
INTRODUCCIÓN
Determinar la relación C:N de un abono orgánico, es de gran ayuda, para saber si podemos
esperar mineralización o inmovilización del N contenido en el abono orgánico, pero conocer esta
relación, no permite cuantificar la cantidad de N que será liberada o inmovilizada. Por eso es
necesario determinar otras características de un abono orgánico como el potencial de
mineralización de N y la tasa de mineralización de N. El potencial de mineralización de N, es la
cantidad máxima de N disponible que podrá ser liberada de un abono, después de su degradación
por los microorganismos del suelo. El potencial de mineralización de N, se establece a partir de
la mineralización acumulada de N, la cual se define como la cantidad de N disponible, liberada
después de un período de tiempo específico (Brady y Weil, 1999). La tasa de mineralización de
N es la cantidad de N que se libera por una unidad de tiempo específica. La tasa de
mineralización es igual a la velocidad o grado de mineralización, y se interpreta como el
porcentaje de N que se mineraliza y que permite conocer cuánto está siendo liberado en forma
disponible en períodos específicos de tiempo (Porta et al., 1994).
MATERIALES Y MÉTODOS
El estudio fue realizado en las instalaciones del Laboratorio de Suelos y Aguas de la Universidad
EARTH. El experimento fue establecido usando un diseño completamente al azar (DCA) con 10
tratamientos (un testigo, cuatro abonos y dos suelos) cada uno con tres repeticiones. Los abonos
usados fueron un compost de la Finca Integrada Orgánica (FIO), un bokashi de la Finca
Comercial (FC), un bokashi y un lombricompost de la Finca Pecuaria Integrada (FPI). Las
propiedades químicas de los abonos orgánicos se presentan en el Cuadro 1.
en húmedo. La textura del “suelo convencional” es franco arcillosa y tiene una densidad aparente
de 0,85 g cm-3, mientras que el “suelo orgánico” tiene una textura franco arcillo limosa y una
densidad aparente de 0,80 g cm-3. Las propiedades químicas de los dos suelos se presentan en el
Cuadro 2.
Para la preparación de cada repetición de cada tratamiento, 300 g de suelo en base seca fueron
mezclados uniformemente con una cantidad de abono equivalente a 20 Mg ha-1 en base seca. Los
abonos fueron agregados al suelo sin haber sido secados o molidos, de esta manera se simuló una
aplicación de abono a un suelo en condiciones de campo. Todas las muestras fueron llevadas a
un contenido de humedad de 60 %. Cada una de las mezclas fue colocada en una bolsa de
polietileno de 15 cm de ancho por 20 cm de largo, la cual tenía agujeros en diferentes partes de la
misma para permitir la circulación del aire. Las bolsas con suelo y abono fueron incubadas a
temperatura ambiente durante 20 semanas. El contenido de humedad de cada muestra fue
controlado semanalmente.
N t = N o (1 − e − k ⋅t ) (1)
dN t
=1 − e ( − k ⋅t ) (2)
dN o
dN t
= N o ⋅ t ⋅ . e ( − k ⋅t ) (3)
dk
Cerrato et al. / Tierra Tropical (2007) 3 (2): 183-197 187
Estas derivadas se utilizan para encontrar los valores de N o y k . Las soluciones se obtienen por
el método de los mínimos cuadrados no lineales, usando la transformación lineal de Gauss con el
método “Marquardt”. Para ajustar el modelo a los datos, al estimador N o se le asignó un rango
de aproximaciones de cero a cincuenta con incrementos de 0,5; mientras que al estimador k se le
asignaron aproximaciones entre 0,01 y 0,09, en incrementos de 0,01. El análisis estadístico se
hizo con el PROC NLIN de SAS v. 8.02 (SAS Institute, 1999).
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Cuadro 3. Contenido de materia orgánica, C, N y relación C:N de los suelos usados en este
estudio.
Suelo † Materia Orgánica C N Relación C:N
------------------------ % ---------------------
Convencional 6,74 3,91 0,41 9,54
Orgánico 9,79 5,68 0,66 8,61
† A 10 cm de profundidad.
50
Suelo convencional Suelo orgánico
40
30
20
10
50
Suelo convencional + Compost FIO Suelo orgánico + Compost FIO
40
Mineralización de N acumulada (mg NO3--N kg-1 suelo)
30
20
10
50
Suelo convencional + Bokashi FPI Suelo orgánico + Bokashi FPI
40
30
20
10
50
Suelo convencional + Bokashi FC Suelo orgánico + Bokashi FC
40
30
20
10
50
Suelo convencional + Lombricompost FPI Suelo orgánico + Lombricompost FPI
40
30
20
10
0
0 2 4 6 8 10 12 14 16 20 0 2 4 6 8 10 12 14 16 20
Figura 1. Mineralización de N acumulada de los suelos sin abonos y con abonos a través de
20 semanas de incubación.
negativos de la mineralización neta de N que se observan desde la semana 0 hasta la semana 10.
La aplicación de los otros abonos no condujo a una inmovilización del N disponible presente en
el suelo, sin embargo, la aplicación de compost y de bokashi de FPI mostraron valores de cero en
la mineralización neta de N en las primeras semanas del estudio.
Una variable que influye muy marcadamente en la degradación de un abono y, por consiguiente,
en la mineralización de N es la relación C:N de los abonos. De los abonos evaluados únicamente
el compost y el lombricompost tenían relaciones C:N menores o iguales que 20:1. Las relaciones
C:N, iguales o mayores que 25:1, de los dos bokashis son conducentes a una inmovilización de N
disponible, ya que los microorganismos usarán cualquier N inorgánico disponible en el suelo
para degradar esos abonos, inmovilizando temporalmente el N inorgánico dentro de sus
organismos (Stevenson, 1986; Epstein, 1997; Foth and Ellis, 1997). Las cantidades bajas de N
mineralizado observadas en las primeras 10 semanas de incubación en los casos del compost y
del bokashi de FPI resultan del hecho de que estos abonos tienen relaciones C:N en el rango de
20:1 a 25:1 en donde puede ocurrir tanto mineralización como inmovilización simultáneamente.
La inmovilización de N, que ocurrió cuando el bokashi de FC fue aplicado al suelo, fue inducida
por la alta relación C:N de ese abono (Cuadro 4), lo cual llevó a los microorganismos del suelo a
utilizar el N disponible proveniente de cualquier otra fuente, en este caso del suelo.
30
Suelo convencional + Compost FIO Suelo orgánico + Compost FIO
20
10
-10
30
Suelo convencional + Bokashi FPI Suelo orgánico + Bokashi FPI
20
Mineralización neta (mg NO3- Kg suelo)
10
-1
-10
30
Suelo convencional + Bokashi FC Suelo orgánico + Bokashi FC
20
10
-10
30
Suelo convencional + Lombricompost FPI Suelo orgánico + Lombricompost FPI
20
10
-10
0 2 4 6 8 10 12 14 16 20 0 2 4 6 8 10 12 14 16 20
Las tasas de mineralización de N fueron un poco más altas para los suelos con compost de FIO,
bokashi de FPI y lombricompost de FPI y fueron menores para los suelos con bokashi de FC
(Figura 3). Estos resultados, al igual que los resultados presentados en las Figuras 1 y 2,
confirman la conclusión de que los abonos contribuyeron muy poco a la mineralización de N. En
la mayoría de los casos, las tasas semanales de mineralización de N disminuyeron a través del
tiempo de incubación. Este efecto ocurre debido a que las cantidades de N mineralizado son
menores a medida que la materia orgánica se degrada. En términos prácticos, esto significa que
cantidades de N mineralizado cada vez menores deben ser esperadas a medida que avanza el
tiempo después de la aplicación de los abonos.
10
Suelo convencional Suelo orgánico
8
10
Suelo convencional + Compost FIO Suelo orgánico + Compost FIO
Tasa de mineralización de N (mg NO3--N kg-1 suelo semana-1)
10
Suelo convencional + Bokashi FPI Suelo orgánico + Bokashi FPI
8
10
Suelo convencional + Bokashi FC Suelo orgánico + Bokashi FC
8
10
Suelo convencional + Lombricompost FPI Suelo orgánico + Lombricompsot FPI
8
0
2 4 6 8 10 12 14 16 20 2 4 6 8 10 12 14 16 20
Figura 3. Tasa de mineralización de N de los suelos sin abono y suelos con abonos a través de
20 semanas de incubación.
Cerrato et al. / Tierra Tropical (2007) 3 (2): 183-197 193
10
Suelo convencional + Compost FIO Suelo orgánico + Compost FIO
8
4
-1
-2
-4
-1
10
Suelo convencional + Bokashi FPI Suelo orgánico + Bokashi FPI
8
-2
-4
10
Suelo convencional + Bokashi FC Suelo orgánico + Bokashi FC
8
-2
-4
10
Suelo convencional + Lombricompost FPI Suelo orgánico +Lombricompost FPI
8
-2
-4
2 4 6 8 10 12 14 16 20 2 4 6 8 10 12 14 16 20
50
Suelo convencional Suelo orgánico
40
Nt = 28,74 (1 - e-0,05 t) Nt = 46,75 (1 - e-0,07 t)
R2 = 0,82 R2 = 0,88
30
20
10
50
Suelo convencional + Compost FIO Suelo orgánico + Compost FIO
Nt = 74,48 (1 - e-0,03 t) Nt = 51,56 (1 - e-0,11 t)
40
R2 = 0,88 R2 = 0,91
Potencial de mineralización de N (mg NO3--N kg-1 suelo)
30
20
10
50
Suelo convencional + Bokashi FPI Suelo orgánico + Bokashi FPI
40 Nt = 37,12 (1 - e-0,06 t) N = 53,11 (1 - e-0,10 t)
t
R2 = 0,86 R2 = 0,92
30
20
10
50
Suelo convencional + Bokashi FC Suelo orgánico + Bokashi FC
40 Nt = 170,00 (1 - e-0,02 t)
R2 = 0,94
30
20
10
50
Suelo convencional + Lombricompost FPI Suelo orgánico + Lombricompost FPI
40 N = 29,39 (1 - e-0,12 t)
t
Nt = 47,01 (1 - e-0,13 t)
R2 = 0,71 R2 = 0,78
30
20
10
0
0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20 0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20
Figura 5. Potencial de mineralización de N de los suelos sin abono y con abono a través de
20 semanas de incubación.
Cerrato et al. / Tierra Tropical (2007) 3 (2): 183-197 195
Las diferencias entre los potenciales de mineralización de N de los abonos y los potenciales de
mineralización de N de los suelos son pequeñas (Cuadro 5). Esta observación indica que el
potencial de mineralización de N de los abonos es bajo. Esta conclusión es congruente con los
resultados de las cantidades netas de N mineralizado y de las tazas de mineralización de N muy
bajas que se observaron (Figura 2 y 4). El Cuadro 5 también presenta los potenciales de
mineralización de N expresados en kg de N ha-1.
CONCLUSIONES
LITERATURA CITADA
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