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Tema 7 Sociologia Criminal
Tema 7 Sociologia Criminal
EL TERRORISMO
18.1. ORÍGENES Y DEFINICIÓN 828
18.2. CAUSAS 833
18.2.1. ¿Por qué mataban los etarras? 833
18.2.2. ¿Por qué se inmolan matando los terroristas islámicos? 836
18.3. ¿QUIÉNES SON LOS TERRORISTAS? 838
18.4. RESPUESTAS AL TERRORISMO 843
18.4.1. ¿Son los terroristas racionales en su actividad criminal? 845
18.4.2. Una tipología de terroristas 850
18.4.3. Un mayor control sobre la inmigración y las prácticas
religiosas 852
18.5. ESTUDIOS EMPÍRICOS DE LAS MEDIDAS CONTRA EL
TERRORISMO 854
18.6. CONCLUSIONES 856
PRINCIPIOS CRIMINOLÓGICOS Y POLÍTICA CRIMINAL 857
CUESTIONES DE ESTUDIO 858
UN ATAQUE CON GAS TÓXICO A LA HORA PUNTA EN 16 ESTACIONES DEL METRO SIEMBRA EL
PÁNICO EN TOKIO (El País, 21-3-95)
“Un misterioso atentado con sarín, un gas nervioso letal descubierto por los
alemanes en la II guerra mundial sembró ayer el pánico en el metro de Tokio durante
la hora punta matinal y se cobró seis vidas. Seiscientas personas más permanecen
hospitalizadas y unas 3.200 han recibido tratamiento médico (…). La policía, sin
emplear explícitamente la palabra ‘terrorismo’, afirmó que se trata de una ‘acción
premeditada para causar el mayor número posible de muertos’.
[Días después se conoce que los responsables son los miembros de una secta que
se denomina “La Verdad Suprema”, cuyo líder es Shoko Asahara, quien resulta
capturado. Antes de ser apresados cometerán otros crímenes]”.
18.2. CAUSAS
Es posible que la pérdida de influencia de la religión, la
familia, y de otras instituciones culturales y sociales, junto
con los cambios desestabilizadores provocados por las
corrientes post-industriales (y sus efectos en el mercado
de trabajo y en la creación de bolsas de pobreza que se
comparan con gran disgusto con las clases pudientes)
hayan llevado a algunos hombres y mujeres a la
alienación y a la violencia. Al mismo tiempo,
determinados segmentos de la población de algunos
países se muestran reacios a identificarse con la mayoría,
y se refugian en sus identidades étnicas o religiosas. Estos
descontentos en la vida política y social son explotados
por los grupos terroristas para lograr sus propios fines. Sin
embargo, como discutiremos luego, el terrorista islámico
está lejos en muchos casos de ser un marginado.
Adolf Tobeña, un profesor e investigador de las bases
biológicas de la agresividad humana, ha elaborado un
importante trabajo en el que intenta buscar los elementos
comunes de todo terrorismo, adoptando una perspectiva
multifactorial, que incluye desde las bases biológicas del
comportamiento del terrorista, hasta los fenómenos del
contexto político y cultural en el que toma cuerpo el
desarrollo del terrorismo (Tobeña, 2005).
Tobeña explica en su libro las bases biológicas de la
agresión terrorista, así como los fundamentos
antropológicos de la agresión de un grupo hacia otro,
cuando éste es considerado distinto y enemigo. Sobre ello
no hablaremos aquí, ya que excedería el propósito de este
capítulo. Sin embargo sí que procede considerar los
cuatro requisitos que establece el autor como elementos
necesarios para entender por qué hay personas que se
convierten en terroristas. Así, éstos se caracterizan por ser
(1) jóvenes varones que se ofrecen para el crimen, (2) que
buscan obtener determinados beneficios a corto y a la
largo plazo, (3) con el objetivo de derribar el poder del
territorio y sustituirlo por el que representan, y (4) que se
instalan en un contexto ideologizado totalizante.
Julia llevaba unos 15 años casada con Mudhar. Antes hubo otros 6 de noviazgo. En
ese tiempo no tuvo conocimiento de la supuesta actividad de su esposo, acusado de
ser propagandista de Al Qaida y recluta de terroristas. A sus ojos era solo un buen
árabe sin radicalidad. Un hombre digno de confianza.
18.6. CONCLUSIONES
El terrorismo es un tipo de delito que, a pesar de existir
desde el mismo origen de la sociedad ilustrada del siglo
XVIII (revolución francesa), ha adquirido en estos inicios
del siglo XXI una entidad globalizada y difusa, en forma
de Islamismo Radical, que supone una grave amenaza
para muchos países, en particular los occidentales, objeto
de las iras de los seguidores de Al-Qaeda. La brutalidad
de atentados como los perpetrados en Nueva York,
Madrid o Londres es una declaración de principios
diáfana.
En el análisis de las causas aparecen factores sociales,
culturales, religiosos, económicos y psicológicos. Tal y
como se comentó anteriormente, resulta muy perturbador
que muchos de los terroristas (en particular entre los
yihadistas) sean personas cultas, con una buena
integración social en sus países de acogida. Aunque como
es lógico los dirigentes intenten seleccionar a los
“mejores” entre todos los que aspiran a ser bombas
humanas, lo anterior no deja de ser una dificultad añadida
en términos de prevención, porque la integración de los
inmigrantes puede resultar una vía menos eficaz de lo
esperable para evitar los atentados. Junto a nuevos
análisis que permiten valorar la vulnerabilidad de lugares
estratégicos de un país para mejorar su protección frente
al terrorismo (cfr. Apostolakis y Lemon, 2005), sugerimos
el desarrollo de estrategias de prevención que, aun
pareciendo de perfil bajo, constituyen quizás formas más
eficaces de evitar los atentados. Esas estrategias se basan
en políticas de inteligencia y de práctica policial, y deben
ir acompañadas por medidas administrativas y penales
decididas. Sin embargo, considerar la lucha contra el
terrorismo como una “guerra” puede ser una política
global ineficaz, dado que no se dan los criterios
convencionales que la definen (un enemigo específico
declarado, unas fronteras delimitadas, el respeto a unos
mínimos principios que se ajusten a la noción de “guerra
justa” de Waltzer, 1977), y, peor aún, puede provocar la
expansión de las células terroristas al sentirse ultrajada la
población que recibe las bombas. Como escribe Joseph
Margolis: “América está haciendo realidad los sueños
más salvajes de Al Qaeda, a una velocidad que nunca esta
podría haber imaginado” (Margolis, 2004, p. 405). Han
pasado años desede que se realizó esta afirmación. Es
cierto que Al Qaeda no ha vuelto a hacer en Europa un
gran atentado desde Londres en 2005, y desde luego en
Estados Unidos desde el 11/S, pero es evidente a día de
hoy que el terrorismo islámico no va a ser derrotado
mediante una guerra, sino mediante buenos servicios de
inteligencia y políticas eficaces de prevención.
PRINCIPIOS CRIMINOLÓGICOS Y POLÍTICA CRIMINAL
1. En buena medida, el terrorismo se alimenta de una indoctrinación que genera en
los jóvenes sentimientos de odio y distorsiones cognitivas; ello posibilitó
asesinatos como el de Tomás y Valiente (prestigioso jurista) y el de Miguel Ángel
Blanco (concejal del partido popular). Como en la delincuencia común, la
educación orientada a que los menores desarrollen su competencia social y la
conducta de ayuda a los demás parece ser algo ineludible. En qué medida el
contexto político permita eso, es otra cuestión.
2. En los terroristas no existe una mayor presencia de enfermedades mentales que en
otros delincuentes. En los casos en los que la legitimidad otorgada por el pueblo es
mínima, la necesidad de conservar una auto-imagen positiva, junto al
mantenimiento de un estilo de vida peculiar, explican su persistencia en el crimen.
Es difícil ver cómo un estado democrático puede acabar con un problema así;
perdido un fin político, los motivos de conservación del grupo terrorista adquieren
la mayor prioridad.
3. La situación se complica por la existencia de variadas personalidades en los grupos
terroristas. La distribución del poder entre ellas puede dar orientaciones distintas a
sus acciones y a su relación con los poderes públicos.
4. Entre las medidas posibles que pueden poner en práctica los gobiernos para
combatir el terrorismo, la asistencia a las víctimas, la profundización de los
valores democráticos, la coordinación de la justicia internacional y cortar las
fuentes de financiación, parecen ser opciones necesarias, tal y como señala
Naciones Unidas.
CUESTIONES DE ESTUDIO
1. ¿Qué es un grupo terrorista?
2. ¿Por qué ha pasado a ser el terrorismo un problema tan relevante en la
Criminología actual?
3. ¿Cómo se podría describir a un terrorista?
4. ¿En qué consiste el argumento del “gato de Alicia”?
5. ¿Qué tipologías pueden establecerse con respecto a los terroristas?
6. ¿Cuáles son los cuatro elementos que utiliza el profesor Tobeña para describir el
origen de la violencia terrorista tanto de ETA como de Al Qaeda?
7. ¿Qué medidas de prevención pueden realizar los estados democráticos frente al
terrorismo?