El mecanismo económico en la transición al socialismo.

Sumario:

- El Mecanismo Económico en la transición al socialismo: esencia y

funciones.
- La estructura del mecanismo económico.

Bibliografía:

- Colectivo de Autores, Lecciones de Economía Política de la construcción

del socialismo (carreras no económicas), cap. 10.

Contenido:

 El mecanismo económico en la transición al socialismo: esencia y

funciones.

Hasta este momento, se han analizado diferentes cuestiones de la transición

estrechamente vinculadas al mecanismo económico, sin detenernos en el
estudio de esta categoría en sí misma, por lo que nos corresponde, a partir de
ahora, abordar los aspectos más importantes relacionados con este concepto.

El tratamiento científico y docente de esta categoría en los marcos de la teoría

económica socialista es relativamente joven, surgiendo de manera intensiva su
estudio alrededor de los años ´70. Sin embargo, en la literatura especializada,
su atención se concentra preferentemente en el análisis del mecanismo
económico en la sociedad socialista ya construida, mientras que nuestro
objetivo es examinarlo en el periodo de construcción del socialismo, sin perder
de vista que debido al carácter rector del tipo socioeconómico socialista en esta
etapa del desarrollo, muchos de los postulados teórico – metodológicos para el
análisis del mecanismo económico de la sociedad socialista son válidos para el
examen de esta problemática en el proceso de construcción de la nueva
sociedad.

Para tener una clara comprensión del contenido del mecanismo económico es
necesario distinguir en el análisis del sistema de relaciones de producción dos
grupos fundamentales: aquel que comprende las relaciones esenciales o
relaciones socioeconómicas y aquel que corresponde a las relaciones en un
plano más concreto, denominadas frecuentemente relaciones económicas –
organizativas.

En el primer grupo, se tiene en cuenta ante todo las relaciones de propiedad,

en este caso la propiedad social sobre los medios de producción en tanto son
las que determinan el modo de apropiación, el objetivo de la producción, su
forma de desarrollo y la estructura clasista de la sociedad. En el segundo grupo
se encuentran, como ya apuntamos, las relaciones económico – organizativas,
relaciones de un segundo nivel que expresan en ese plano la esencia de las
relaciones de producción. Es decir, constituyen la capa más superficial del
subsistema de relaciones de producción socialistas y tienen la característica de
ser categorías económicas objetivas y, al mismo tiempo, instrumentos de
acción consciente del hombre para ejercer su influencia sobre la actividad
económica. Como puede observarse, éstas no constituyen un bloque
homogéneo y en ellas se incluyen, entre muchas otras, la planificación, la
gestión empresarial, las relaciones de mercado, financieras, las relaciones
monetario – mercantiles, etc. Así, mientras las primeras no se incluyen dentro
del mecanismo económico, las segundas sí forman parte de él.

Asimismo, en el mecanismo económico se incluyen aquellos elementos de la

superestructura que contribuyen a la organización y funcionamiento de la vida
económica, como pueden ser las relaciones jurídicas, políticas, ideológicas,
sociopsicológicas, etc., que estén directamente vinculadas con el
funcionamiento de la economía, lo cual constituye una expresión del
reconocimiento del papel cualitativamente nuevo del factor subjetivo en el
desarrollo económico y social en el proceso de construcción socialista.

Por último, el mecanismo económico integra también las relaciones económico

– organizativas y las relaciones superestructurales que sirven a éstas
correspondientes a los demás tipos de economía que coexisten en la
transición, es decir, con los subsistemas de relaciones socioeconómicas que
coexisten junto a las propiamente socialistas durante el periodo de tránsito.

De esta manera, podemos señalar que la categoría mecanismo económico

en la construcción del socialismo expresa el sistema de relaciones sociales de
producción y superestructurales que aparecen como formas, métodos, por
medio de los cuales se lleva a cabo la organización, regulación y
funcionamiento planificado del proceso de reproducción, con el objetivo de
asegurar el afianzamiento de las relaciones de producción socialistas.

La esencia y el papel del mecanismo económico en el proceso de construcción

socialista se expresa de un modo más concreto a través de sus funciones las
cuales analizaremos a continuación.

Funciones del mecanismo económico

1. Asegurar la necesaria correspondencia de las relaciones de producción

con el carácter y el nivel de desarrollo de las fuerzas productivas, lo cual
no se logra de forma automática; para lograrlo se precisa del constante
perfeccionamiento de aquellas formas y métodos de gestión económica
que deber servir de estímulo al incesante desarrollo de las fuerzas
productivas, tanto a nivel social como en las distintas esferas, ramas y
tipos de producción.

2. La realización socioeconómica de la propiedad social sobre los medios

de producción; su constante perfeccionamiento tiene que permitir la
plasmación en la práctica económica de las ventajas que se encierran
potencialmente en la propiedad socialista, para lo cual debe estar
 orientado a la solución de las contradicciones inherentes a la propiedad
y en específico a la creación de condiciones que coadyuven a la
formación de un verdadero sentimiento de copropietarios en cada
trabajador que tenga su manifestación en la conducta socioeconómica
de cada uno. Asimismo, el mecanismo económico contribuye a la
realización de la propiedad socialista en la medida en que constituye un
instrumento para la solución de las contradicciones existentes entre el
tipo socioeconómico socialista y los restantes tipos socioeconómicas
que coexisten con él en este periodo.

3. Constituye un importante instrumento para la realización práctica de la

política económica del Partido y el Estado.

Y por política económica entendemos aquella que comprende las tareas que
deben ser cumplidas y que resultan a partir del conocimiento científico de las
leyes objetivas, del sistema de intereses, del conjunto de condiciones internas y
externas bajo las cuales se desarrolla un determinado país y del sistema de
objetivos propios. La política económica responde a una estrategia de
desarrollo determinada y su realización práctica precisa de un conjunto de
medidas de orden económico, organizativo, ideológico, etc., orgánicamente
entrelazadas. La realización de la política económica a través del mecanismo
económico en las condiciones de la construcción del socialismo debe estar
orientada al afianzamiento de las relaciones socialistas por medio de la
estrecha interrelación de estas con el resto de los tipos socioeconómicos que
existen en la sociedad.

Como puede notarse, las funciones del mecanismo económico se han

explicado de forma separada con fines docentes, instructivos, pero no es difícil
percatarse de la unidad que existe entre ellas. Así, la correspondencia entre las
fuerzas productivas y las relaciones de producción (función 1) tiene que
lograrse a través de la realización de la propiedad socialista (función 2), del
perfeccionamiento constante de las relaciones de producción, en las cuales
están inmersos los hombres y cuyas direcciones principales deben ser parte de
la política económica (función 3), científicamente fundamentada.

 La estructura del mecanismo económico.

El mecanismo económico constituye un sistema orgánico, compuesto por

determinados bloques o subsistemas muy interrelacionados e
interdependientes, los cuales a su vez contienen otros elementos
estrechamente vinculados entre sí, que no serán objeto de nuestro análisis. Los
componentes estructurales fundamentales del mecanismo económico que es lo
que en este instante nos ocupa son:

Subsistema de planificación. Constituye el eslabón central, determinante del

mecanismo económico, y en ella se manifiesta el carácter directamente social
de la producción socialista y las exigencias de la ley económica fundamental y
de la regulación social planificada. Asimismo, la planificación se expresa en
diferentes formas y métodos más concretos, los cuales están determinados en
cada caso por los diferentes grados de socialización alcanzados que permiten
regular el desarrollo del sector socialista e influir sobre el desenvolvimiento de
los otros tipos de economía que existen durante la transición.

Subsistema de dirección. En su sentido amplio, se entiende la dirección como

la influencia consciente de los sujetos sobre la economía, vista como objeto de
dirección. Analizada en su sentido estrecho, la dirección es parte componente
de las relaciones económico – organizativas, un subsistema del mecanismo
económico directamente vinculado con el carácter y el grado de desarrollo de la
socialización socialista de la producción, de la cooperación del trabajo y exige
para su realización la organización de determinados niveles de dirección y la
distribución racional de deberes y responsabilidades entre ellas. La
organización de la dirección abarca toda la estructura heterogénea que existe
en la construcción del socialismo.

Finalmente, es importante precisar dos conceptos esenciales a los cuales

haremos referencia en las próximas conferencias.

Hasta este momento, hemos estado estudiando múltiples cuestiones

relacionadas con el socialismo visto como sistema económico, el cual
podríamos identificarlo con el modo de producción, es decir, entendido como
régimen económico que abarca desde las relaciones de propiedad hasta el
mecanismo económico; concepto englobado que abarca todo el sistema de
relaciones sociales de producción.

Sin embargo, dicho sistema económico puede instrumentarse de una manera

específica y particular en cada una de las distintas experiencias, adoptando un
modelo determinado, por lo que pudiéramos definir este último como el diseño
del sistema, la maqueta, la configuración que se le da al sistema; es decir, es el
esquema lógico – estructural de un sistema que contiene sus rasgos
estructurales básicos.

Y es precisamente los diferentes modelos que han existido el objeto de estudio

de las próximas y últimas conferencias. A saber, el modelo eurosoviético, el
modelo asiático, en particular el caso chino y el modelo cubano.