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VALLE MÁGICO
OPENING.
El estadio totalmente a oscuras. Acompañadas por una
espectacular música con sonidos sinfónicos a full, desde el
costado norte, aparece la serpiente Doroy, que recorrerá gran parte de
la grama del estadio, detrás de ella, el Silborcito mayor acompañado
por tres Silborcitos menores, Los escoltan seis hombres noche. El
Silborcito habla durante su recorrido
SILBORCITO (Silba un lamento)
Gente de todos los pueblos, venidos de los cuatro vientos y soles,
escuchadme con atención… (Silba)… Soy un engendro del maligno,
más no habita maldad en mí, vivo penando en estas tierras, vagando
por los montes sin cesar… (Silba)… Silborcito a mí me llaman, porque
me gusta silbar… (silba)… me guía esta serpiente, Doroy la llaman,
dicen que es mito, pero aquí está, llevándome a conocer a una niña
convertida en pescado, la Sirena del Guatapurí. (silba)
El Silborcito y sus acompañantes desaparecen.
BLACK LIGHT
SOLBORCITO (Silba)
Un juglar vivo al valle mágico conquistó, Alfredo lo llaman, lo apellidan
Gutiérrez… (Silba)… rebelde de nacimiento rebelde de nacimiento,
alegre de corazón… (Silba)… con su acordeón la puya revolucionó y a
los pájaros del monte les canto… (Silba)
Silborcito y sus acompañantes desaparecen
Explosiones pirotécnicas y flamas grandes en el pie del escenario dan
paso a:
LA FIESTA DE LOS PAJAROS
Sobre un paisaje abstracto en las pantallas, semejante a unas
dunas gigantes, en distintas gamas de ocre y amarillos, entran
unos hombres arena-león danzando a ras de piso con movimientos
felinos, la música evoca al África antigua con coros ancestrales,
mezclado con sonidos modernos, (0:10) los hombres arena se
levantan portando escudos de guerra, con los cuales hacen un juego
coreográfico complementado con acrobacias (0:30) la escenografía
visual cambia a un paisaje también desértico en tonos azules
claros combinados con blanco, el paisaje es un bosque de
árboles secos, el cual, tendrá movimiento en cielo y tierra Entran
diez mujeres turpial, que, respaldadas por la frase cantada “ayer
escuché a un turpial” (Bis) danzan aun sin desplegar sus alas, un
sonido fuerte y un movimiento en el contenido visual, en el cual
cientos de pájaros amarillos pequeños vuelan, hace que las
mujeres turpial extiendan sus espectaculares alas, en una maravillosa
danza acompañadas por los hombres arenas que han sacado sus
escudos cuatro pájaros amarillos grandes permanecerán,
acompañando la danza de las mujeres turpial, la música alcanza
un clímax, los hombres arena y las mujeres turpial hacen un
espectacular cierre. Salen los hombres arena, se quedan las mujeres
turpial (1:20) la música se torna lenta, y se escucha un sonido de
guacharacas casi imperceptible, se escucha el coro “También el
cucarachero” en lamento, el paisaje en el arte visual cambia, es el
mismo desierto, pero ahora en gama de azules oscuros hasta
negro, con un cielo estrellado y destellos en el paisaje.
Lentamente entran los pájaros cucaracheros, representados por cuatro
mujeres cucarachero con alas transparentes y cuatro hombres
cucaracheros evocando de forma y el color de este pájaro, para este
momento. (0:10) la música se acelera, prima la guacharaca, los
cucaracheros y sus compañeros bailan alegremente. Las figuras y las
danzas de las mujeres cucaracheros se tornan sublime al bajar la luz
de staff y encenderse las luces de sus vestidos, en una armoniosa
coreografía fantástica, que es resaltada por la imagen visual en la
que un juego de luminancias acompaña el baile. Termina con un
cierre magistral, (1:50) la música vuelve a tornarse lenta. Se
escucha un coro en lamento “un pájaro carpintero” (Bis) entran
los tambores a full, El arte visual del bosque seco adquiere
tonalidades verdes muy claros, pero los árboles secos se ven
negros con textura y en llamas. Salen los hombres cucaracheros,
entran cuatro pájaros carpinteros en zancos acompañados por
bailarines y bailarinas de puya luciendo unos tocados de pájaros
carpintero con su clásico copete. Los bailarines y bailarinas de la puya
danzan con frenesí, la música contagia a turpiales y cucaracheros, los
hombres bailarines de la puya se acompañan de bastones adornados
con penachos multicolores, con los que elaboran bellas figuras
coreográficas, que se mezclarán con los escudos de los hombres
arena que regresan al escenario, al igual que los acompañantes de los
cucaracheros, música a full para un cierre colosal.
BLACK LIGHT
SILBORCITO (Silva):
Por mis silbidos me apodan Silborcito, hijo de siete demonios con una
buena mujer, eso soy… (Silba)… Una princesa indígena, sometida a la
servidumbre, su deslumbrante belleza enloquecía a los hombres, ella
provocó una rebeldía de un pueblo… (Silba)… yo no creo que una
virgen santa salve a unos malos, pero eso rumora… (Silba)…
La Doroy envuelve a Silborcito y su corte, luego se apagan sus luces.
LEYENDA VALLENATA
El escenario y las pantallas completamente a oscuras con una
hermosa melodía de música contemporánea, inspirada en
nuestros sonidos ancestrales de la sierra Nevada, un toque de luz
se posa suavemente y aumentará progresivamente sobre una
pirámide conformada por 10 nativas y 10 nativos. Los nativos portan
sus lanzas de guerra, las nativas cada una con dos hojas grandes en
forma de corazón de color verde fluorescente. Los nativos realizan
unos juegos coreográficos suaves, La música se torna más
dinámica. Se encienden las pantallas y aparece un paisaje
selvático onírico, el paisaje tiene movimiento y cambiará su
tonalidad y colorimetría. acorde con la coreografía y por
supuesto; la música. Justo en ese momento, la pirámide se dispersa
por todo el escenario, en una danza alegre en homenaje al jaguar. Se
forman Hermosas figuras con las lanzas y las gigantescas hojas, un
jaguar de dos metros acompaña la danza en la que se refleja el estado
de los nativos antes de la llegada de los españoles. (1:00)
Un sonido estridente acompañado por un cambio en el paisaje
virtual, el cual se torna en un desierto hostil, en el que priman los
gris azules, más explosiones pirotécnicas y llamas asustan a los
nativos. La música a sonidos europeos marciales. Entran los
españoles danzando imponentes mientras los nativos expresan
sorpresa. (1:00) Se mezclan las dos músicas, y los dos grupos
dancísticos se entrelazan en una danza de sometimiento donde los
nativos son vencidos por los españoles y salen del escenario. (0.30) El
entorno visual cambia a un poblado urbano de época, pero en
nuestro concepto “avataresco”, siempre en movimiento. Entra
música de baile europeo, con un fondo siniestro. Los españoles
danzan alegremente demostrando su poder, se trata de una danza en
la que hacen bellas coreografías con grandes abanicos de las damas
españolas y los escudos de los soldados, mientras la india Francisca,
en primer término, es violada por su patrón. Al final de este acto, los
españoles se retiran dejando a Francisca tendida en el suelo. Vuelve
el paisaje selvático del principio. Francisca es recogida por cuatro
nativos que la llevan al jefe de la tribu. Entran los otros nativos y hacen
un ritual de venganza y salen. (0:30) Volvemos al paisaje urbano de
Época, pero esta vez con iluminación nocturna, Entran los
españoles en una coreografía de festejo, al final de la cual, cada uno
regresa cargando pequeñas casas coloniales, con las cuales
conforman el poblado, luego, se duermen al lado de estas,
acompañados por una música de cuna, inspirada en la melodía
del tema Viejo Valledupar, la música cambia con la entrada de los
indígenas que incendian las casas con unas antorchas y salen
sigilosamente, el incendio de las casas se acompaña por los
lanzallamas y por supuesto; por el arte visual (0:30) los nativos
salen, el paisaje regresa a urbano de época a iluminación día. La
música se torna agresiva los españoles hacen una danza de duelo,
luego de la cual, salen las mujeres y los hombres hacen un ritual de
guerra, salen del escenario (0:30) En las pantallas regresamos a un
paisaje rural hermoso, inspirado en la Sierra nevada y la música
cambia a sonidos ancestrales, con efecto de agua. Para dar paso a
la entrada de los indígenas que le dan forma a la laguna Sicarare, a la
cual los españoles entran y luego de una coreografía toman agua de la
laguna y caen agonizantes, Entra música de suspenso los nativos se
disponen a rematarlos, pero se asustan al ver en el cielo Imagen en
arte visual, la figura de la virgen del rosario en medio de un sonido
estridente. Los españoles se recuperan y los llevan para ser
ejecutados. (1:00) volvemos al paisaje de época urbanos. Entra
música marcial. Los españoles se disponen a ejecutar a los nativos y
cuando están a punto de disparar, un gran ángel cubre a los
indígenas. Acto seguido, la música cambia a festiva, entra paisaje
neutro espectacular con efectos grandes, Las dos razas se unen en
una sola coreografía, para un espectacular cierre en el que los nativos
vuelven a la pirámide inicial con los españoles a su alrededor. (1:00)
BLACK LIGHT
EL ALMIRANTE PADILLA
Se escucha el sonido de un viento fuerte, en las pantallas aparece
un paisaje semidesértico, de colores invertidos, su fondo es
verde muerto y los mogotes son de color ocre, Se escucha una
hermosa música contemporánea, inspirada en sonidos Wayuu, en
el que prima el arco de boca, para dar entrada al escenario a diez
hombres indígenas Wayuu armados con arcos luminosos y flechas,
visten guayucos con atuendos fantásticos. los indígenas hacen una
hermosa coreografía en actitud de caza, al final de la cual lanzan al
tiempo sus flechas al aire, las cuales llevan unas cintas de colores
llamativos. (0:30) En ese momento suena la música de la Yonna,
que se mezcla con sonidos contemporáneos. El entorno virtual
nos muestra un suigéneris puerto desértico. Entran diez hermosas
indígenas Wayuu luciendo unas mantas fantásticas, danzan
mezclando pasos de la Yonna tradicional que luego se transforman en
hermosas figuras, complementadas con diez banderas grandes que
traen otros diez hombres Wayuu, vestidos con Sheimparas fantásticas
(1:00), se escucha cantada la frase “Allá en la Guajira Arriba,
donde nace el contrabando. Y al son de tambores. La imagen
virtual se transforma en un poblado enterrado en la arena con
cielo azul precioso que toma mucha vida. Entra Tite Socarras en
compañía de seis prostitutas vestidas tipo CAN-CAN, comandando a
los diez wayuu que entraron al principio más diez cargueros
vaquianos, hacen un juego coreográfico, jugando con los bultos de
contrabando (0:30) la imagen virtual nos muestra un mar en
tormenta en la escala de rojos, hay rayos y centellas. la música se
mezcla con sonido de mar y un sonido estridente Sirve de entrada
a un velero, el velero es conformado por diez cadetes que sostienen
velas de distintas formas con las que harán un juego coreográfico, hay
inquietud en los nativos, entran diez cadetes más, estos se enfrentan
con los vaquianos y los indígenas, todo es adornado por las hermosas
wayuu que danzan a su alrededor. Al final los cadetes son derrotados
por los vaquianos e indígenas. Salen todos a excepción de Tite y las
prostitutas (2:00) Suena una música tipo CAN-CAN El escenario se
oscurece. En las pantallas vemos una noche muy oscura. Pero
con cielo estrellado, Las prostitutas le bailan a Tite Borracho, Se
escucha una música tenebrosa. entran seis monjes negros del mal
de tamaño normal y cuatro más grandes, las prostitutas salen
asustadas. Los monjes hacen un ritual alrededor de Tite que se asusta
y trata de escapar ellos no lo dejan, Tite cae desmayado, los monjes
salen (1:00) Suena música alegre El escenario vuelve a iluminarse
volvemos al paisaje del puerto desértico. Entran nuevamente todos los
de la escena anterior, se arma un festejo, de repente entra el barco
almirante padilla, representado por 10 cadetes subidos el mástil del
velero, los otros diez cadetes reducen y capturan a tite y su gente.
Justo en ese momento, todos se congelan para dar entrada al
almirante padilla que hace un juego coreográfico, al que luego de unos
segundos todos se unen para un gran cierre (2:00)
BLACK LIGHT