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Cap: “Riesgo y adopcién de tecnologia” Jorge Sabato _ enerie she Le BEAN fy “ dun rele: oY F Casen Mew, I. Introduccién ’ Hace ya un siglo que la pampa ofrece a los argentinos no sélo carne ¥ granos sino también incégnitas y prol el6 considerablemente, en 1a pampa se man durante mas de veinte afios. Recién a mediados recuperarse? {Por qué otras partes? irian, las tlerras agricolas | Un terclo 0 més se usa ‘menos produotiva atin, comtin de Ios argentinos cree normal, de puro cotldlano, hay quienes desde hace un siglo se preguntan por qué se ¥ engordan vacas en tierras agricolas. SI asl, como parece, se gana menos que cultivando granos, quienes hacen ganaderfa no ma. ximlzarfan sus ingresos. En ese caso, los productores pampeanos éson 0 no son empresarios coy ? La cuestin estd Hgada a otro rasgo peculiar de la pampa. A diferenela de las praderas norte. ‘americanas y canadienses, en dades —las similares a las de los “farmers” que dominaron en aquellas otras Fegiones. ¢Los estancleros constituyen una clase social dominante, 23 retrdyrada o al menos precapiti explicn el atraso pre espe. tal easo, jeuil seria esa, ’ con Werania, Su pertenancia. a une naciin gigaates: Ind oviddea quisds isminuyg. el impacto "pala en su conjanto. Qulets en menor grado aarsco ¥ woresdat we recuncoate me xe ano | 215 ‘que se necesitan y Ins inversiones a mediano y largo plazo que ellas Fequieren. ‘Todos estos inconvenientes se agravan porque, cuando . También es incierta y varlable la respuesta. oduetivas, resolver los proble- ductores para aprovechar sus ventajas y acomodarse a sus inconve- 26 | 14 cse sounanine a us ance soutnn Insco Yaseen ve ovovoata at mL seo | 217 produccién distintas (es deci it, con combinaciones diferentes de ma- segundo rasgo que deseamos destacar: para ‘que permitiera variar el peso relative de » de ira (y, dent ccnicas mas prod bandonar Ins ventajas res en las praders duenas 0 recios internacionales le ia generar un af de os productores. El p uusan para evaluar las pos Como por ejemplo Ia de precios —a través de la tasa de izar ta produccién o esti ia gana. siderablemente, hacien. inejarse con razor indleamo: de los productores constituye uno de sen rcurrido en Ia pampa. La \ducta results en principio forma en que los productores han ido varlado 8 afio, 1a asignacién de la tierra a In ganaderia 10s sirvid para desentrafiar una ue van desde ta te a mantener grandes jevas tonicas, Final- pero iorteamericanos, ya. qi (on forzosa, En ‘el Jas ventajas 1atleo que, dentro de © eventualmente para prever respuestas de los \yor precisién que los modelos econométricos le otorga su consis- icos del agro pam: Previamente, sin embargo, es preciso demostrar una sis propuestas sobre lag sero de datos dlaponibes yn demas Procesamiento, Ademds, u : complementar algunas hipétesis bdsicas de Ia i. fe teas dei tnvstignlon nl se hizo mucho més clara y y ion relacién Il. El comportamiento de los productores pampeanos resco x worcnit og aswowolh rot x nein | 219 1, Teorias y realidades: El problenta del riesgo y la ia de combinar actividades para En los ltimos veinte aftos'se formulas rel proceso de cambio t ‘de empresas rurales, como por teenologico de Cochrane (Cochrane, (én induelda por Hayami y Ruttan ( fdelos se afiadieron y complementaron otros cle re Ia economia rural, a través de los se analizaha 61 comportamiento de las empresas y del sector agro ppecuario en su conjunto. Un rasgo significative del caso ‘se aplicaban estos modelos para est varios modelos tedricos de 10 validez “ei de identiticar los rasgos relevantes ‘pampenna--, Ambos temas suscltaron innumerables discus Ro menos desacuerdes. Asi, por ejemplo, se debat ter de los productores pampeanos: mientras alg a diferencia entre “estancleros” (grandes terratenten fos o arrendatarios de parcelas medianas a pequé- 964; de Janvry y Martines, portancia a 1a distincién y ina soln nocién de empresa productores en ‘Martinez, de ¥oz, 1961), investigacién tampoco pudimos escapar a Ia neces teorfa y la realidad, Tal como adelantamos en ‘prineipal conclusién de este doble examen fue fque la question del riesgo era central para explicar. el funcions: miento de las explotaciones ps 1 comportamiento de 10s inamente, ya que results ‘a un tema que era con- jemente ignorado en los dad de revisar los teéricos usuales. ‘ola y magnitud de los riesgos de mercado (varlaclo- 'y de-produccién ‘clones en. los rendimten- ‘de que disponia- ‘por amenguarlos jos productores, rele- jar Jnnovaciones tec ‘mos, que era razonable suponer que Gebia dominar el comportemiento gando a un segundo lugar la cuestién de wlolas en, ién de aquel problema c tuaciones de los valores de procuceidn to de los obtenidos pareiaimente en ‘ca ivo. 1 riesgo de ingresos con: presas rurales un prob recta ‘iones de ingre- ‘@ mediano plazo un saldo neto positivo, la empresa nece- iJo de fondos minimos que no todos los aflos esta asegu rado y exlge, por tar con un respaldo financlero. Desde empresa dependeré da mediano y largo plazo del costo rece con nitidez una segunda funcién central fa en las 01 uesco ¥ mores me acnouosta mt AON | 221 cuADRO 1 valor dep iodo 1950-1919), Fluctuacién de los ingresos agricola y agropt de ta produccion Valor de ta pra ‘agregada agregada total de’ los. productos ‘grlcolas Ne de % det Medel ded esos total casos total acunutado 16 ra 2, La combinacion de actividades y el comportamiento de los productores de los riesgos de ingresos. Lo lar, es ver cOmo afects ta ash if deformaciones e: 108 que sdlo en el 2% de 104 respecto wo anterior), mientras 's sembradas con cada ¢1 n 20 *8 respecto del aio precedente, Atos en el uso de 1a terra contrastaban Nente se esperaba ocurriera con el valor la produceién agricola: caletindolo. de acuerdo con los precios recibidos y los rendimientos logrados en cn ‘ao precedente (es decir, Ia principal informacién que disponian 's Productores en el momento de la slembra), en ol 66 % dle los isos as varlaciones se ubleaban en la franja que iba de una die lon del § ¢& y un aumenta no mayor del 10% respecto del va do el af anterior. in frente a estos dos hechos aparentemente opues- aio los productores cambiaban signifieatt tidad de tierra dedi Se prevela un descenso en el valor esperada del conjunto de la pro {velin agricola, aproximadamente el 50% de los casos correspon, Gla a ahios en que el elelo ganadero atravesaba una fase de aun con Jo cual el mayor valor de la produecion ganadera podia one: nsar la caida det valor in agricola (cuadro M11) leras y la capacidad de pr clos gattadares™ muy intehs Afios de auge genadero WN? de casos total % det casos Ne de Variacién det valor de 1a produccién proyectada respecto a la obtenida CUADRO mr ). Totales para los ocho departamentos entre 1950 y 1978, % det total sembrada* de casos Ne Variacton de la superficie resco ¥ aver Tact rx ca | 223 £ 8 egagenaa 2 uecién agricola total ‘Variacién anual de la superficie sembrada con cada producto y del valor de la produccién agri a i a FT i é i é Orden de magnitud feessses RRS*°2RR Titieeee ASILID2E Siecle Jissessed 2 ial 100 % Totales Solo de Tos tes cultives de mayor valor total de produccion, 224 | 14 case sostneanre aot ua atarerin scope, — errr ie iii a [ auxeco ¥ ponent reettoata 9 and | 225 ast ocurre, los productores establecerian aflo a afio, en primer terminarian las eantidades especificas de cultivo, Asi podrian explicarse las dificultades encontradas para des- eribir y ajustar econométricamente Ia historia de Jas variaciones ob- servadas, Incorporaciéa fos y los avances qu ‘que proponemos es correcta, si el principal problema ue se enfrenta es el riesgo de ingresos y el método para encararlo 240 | 14 case worse 1 fiones en as que se dusarrolla ta actividad ganadera de los productores Neguen a’ ser ma- ran exclusivamente "ey cuando actien en un contexto de idad y su eficiencia social cuenta. Todos estos as- h) Ajuste de tos resui dos obtentdos a la realidad Aparte de Jusiones de nuestras in- esco x aorcibit om Teewovouta ex mL sano | 241 Reoordemos al respecto zonas ha sido tradicionalmente uni a explicar ‘segundo Jugar, los resultados obtenidos también per sable, en prinel zonas aptas part que durante tu: In produectén maicera, " mecanisma do eom- de crecimtento relaciones entre ganadi ‘mentos complementarios para entender otros hechos. Se hacen més claras, por ejemplo, las 11 les explotaciones Estados Unidos y el Canadi— nes que corresponden a empresi fe también para entender mejor Ia relacién que existié au Ichas décadas entre estancleros terratententes y agricul: tores arrendatarios, al mostrar’cémo estos ltimos no podfan fun- tarla, sino como una especle de subcontratista que debe cump! nalmente articulada a otras actividades, como parte dentro de una. regida por una 1dgica global

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