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Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Todos ustedes son

guardianes y responsables de sus súbditos. El gobernante es guardián de sus


súbditos y el hombre es guardián de su familia, la mujer es guardiana de la
casa de su esposo y sus hijos, y todos ustedes son guardianes y responsables
de sus súbditos”.

Prefacio

El amor de un hijo está arraigado en los corazones de todos los padres por
Allah Ta’ala, independientemente de si los padres son musulmanes o no
musulmanes, negros o blancos, orientales u occidentales. No falta la evidencia
para probar este punto. Los millones de dólares gastados anualmente por los
padres en la compra de ropa, zapatos, alimentos y juguetes para niños dan
amplio testimonio de este amor.

En los tribunales de justicia, donde los padres contratan los mejores abogados
y defensores para obtener la custodia de los hijos cuando un matrimonio ha
terminado, o hay una separación, es una demostración de este amor. La
congoja, trauma, depresión y sufrimiento experimentado por los padres que
puede determinarse a partir de artículos periodísticos reportando la
desaparición o pérdida de hijos es una prueba más del arraigado e inherente
amor.

Aquí es donde termina la similitud entre padres musulmanes y no


musulmanes. El amor que los padres musulmanes tienen no está confinado o
limitado a sólo proveer comodidades materiales y físicas, y necesidades de
esta estadía mundana, sino que para modelar la vida del niño a la luz de las
enseñanzas del Sagrado Corán y de nuestro amado Nabi Sayyendana
Muhammad (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) para que el niño pueda disfrutar
de una vida de eterna felicidad y alegría, después de la muerte.

El Islam es una forma de vida completa y no ha dejado ningún aspecto de la


vida sin guía y dirección. De las muchas obligaciones y responsabilidades que
los padres musulmanes tienen es la obligación de inculcar amor por Allah y
Su Rasul (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) en el corazón de sus hijos. Ésta es
una obligación para salvarse a ellos mismos y a sus hijos de la ira de Allah
Ta’ala en este mundo y del castigo en el fuego del infierno en el más allá. Esto
solamente puede lograrse aplicando, practicando y siguiendo las directrices de
la Shariah en la crianza de los niños.

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El autor, Moulana Musa Ahmed Olgar, que Allah Ta’ala ha bendecido con la
preocupación por el bienestar de la Ummah musulmana, la cual se evidencia
de su compromiso en Dawah y Tabligh, ha compilado en este libro a partir de
libros confiables de enseñanzas islámicas una guía desde la A a la Z para los
padres. El libro ofrece a las parejas guía y dirección en todos los aspectos que
van desde el matrimonio, la relación sexual, el embarazo, la concepción, el
nacimiento del niño, la lactancia materna, el cuidado, la educación y la
Tarbiyat adecuada hasta que el niño alcanza la edad para contraer matrimonio.

Pienso que este libro debería ocupar un lugar integral en cada biblioteca de
hogar y debería leerse detenidamente por todos, puesto que en la
implementación de sus contenidos en la vida de una persona hay una solución
a los problemas a los cuales los padres se enfrentan de niños rebeldes y
delincuentes.

Qué Allah Ta’ala conceda al libro y al autor aceptación y conceda a la Ummah


musulmana beneficio de ellos.

Moulana Yunus Patel


Presidente de Jammiatul Ulama de Natal

20 de enero de 1993

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“¡Vosotros que creéis! Guardaos a vosotros mismos y a vuestra gente de un
fuego cuyo combustible serán los hombres y las piedras. Sobre él habrá
ángeles duros y violentos que no desobedecerán a Allah en lo que les ordene,
sino que harán lo que se les ordene”.

(Surah Tahrim)

“¡Hijo mío! Establece la Oración, ordena lo reconocido, prohíbe lo reprobable


y ten paciencia con lo que venga, es cierto que eso es parte de los asuntos que
requieren entereza”.

(Surah Luqman)

“Y cuando Luqman le dijo a su hijo aconsejándole: ¡Hijo mío! No asocies


nada ni nadie con Allah, pues hacerlo es una enorme injusticia”.

(Surah Luqman)

“Y no pongas mala cara a la gente ni andes por la tierra con insolencia, pues
es verdad que Allah no ama al que es presumido y jactancioso”.

(Surah Luqman)

“Y esto fue un legado que Ibrahim dejó a sus hijos. Y lo mismo hizo Yaqub
(cuando dijo): ¡Hijos míos! Allah os ha elegido la práctica de Adoración, no
muráis pues sin ser musulmanes”.

(Surah Baqarah)

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INTRODUCCIÓN

La estructura social islámica en todo el mundo se está deteriorando


rápidamente debido a la adopción y adhesión del estilo de vida occidental y a
la falta de conciencia islámica. Hoy en día los musulmanes están sumidos en
un estado general de negligencia en el cumplimiento de los mandamientos de
Allah Ta’ala y se han vuelto audaces en desobedecer Sus mandamientos
permitiéndose caer en pecados y fallando en cumplir con los derechos de los
demás.

La mayoría de los padres se queja de que la generación más joven


(refiriéndose a sus hijos) es desobediente, maleducada e irrespetuosa. Tras una
cuidadosa consideración, pareciera que la principal causa de esta rebelión está
en el hecho de que los padres no están cumpliendo con impartir conocimiento
islámico y tarbiyat a sus hijos. Por el contrario, los padres están criando a sus
hijos en un ambiente totalmente sin Islam e influenciándolos a actuar de
acuerdo a maneras, estilos de vida y enseñanzas occidentales. Debería
entenderse claramente que es el deber y la responsabilidad de los padres y el
derecho del niño recibir verdadero conocimiento islámico y tarbiyat.

Por lo tanto, ahora resulta imprescindible salvar la sociedad islámica de la


ruina total y luchar por su salvación. El primer paso para salvar la sociedad
musulmana es establecer la familia en la correcta la base Islámica.

Uno de los mayores regalos que Allah Ta’ala ha concedido a Sus siervos es el
regalo de los niños. De hecho incluso somos alentados a pedir niños. Allah
Ta’ala dice en el Corán:

‫َر ِّب َه ْب ِلي ِمن َّلُد نَك ُذ ِّر َّي ًة َط ِّي َب ًة ۖ ِإَّن َك َس ِميُع الُّد َع اِء‬

“¡Rabb mío! Concédeme una buena descendencia procedente de Ti; realmente


Tú eres el que atiende las súplicas”.

Del ayat anterior deducimos que somos alentados a pedir niños piadosos. En
otro ayat Allah Taa’la dice:

(Añadir texto árabe)

“Allah te anuncia la buena noticia (del nacimiento) de Yahya”.

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El regalo y ni’met de los niños sólo se disfrutará si el niño es criado de tal
manera que él sea la frescura de los ojos de los padres desde el nacimiento
hasta la muerte. De aquí vemos que Allah Ta’ala dice con respecto a los niños
que son buenas noticias. De esto aprendemos que los niños son un gran regalo
de Allah Ta’ala.

El regalo y ni’met de los niños sólo se disfrutará cuando desde el momento en


que el niño nace hasta la muerte éste es criado de tal manera que se convierte
en la frescura de los ojos de los padres.

Con esta intención en vista, sentimos absolutamente necesario compilar un


kitaab para nuestros lectores titulado “Educación de los niños”. En este kitaab
se presenta un estudio completo que consta de enseñanzas exhaustivas y
prácticas sobre la correcta educación de los niños. Se han citado ejemplos
prácticos de la vida de Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam), sus
compañeros, y personas piadosas de manera exhaustiva para poder ser una
guía práctica para todos los lectores.

Esperamos que este kitaab ayudará a los padres inmensamente a impartir


conocimiento islámico a sus hijos, de este modo, moldeándolos en padres
buenos, piadosos e islámicamente conscientes del mañana (lnsha-Allah).

Qué Allah Ta’ala acepte este kitaab y lo haga un medio de najaat del fuego de
jahannum para los compiladores, sus familias, parientes y la ummat en
general. (Aamin)

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El amor de Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) por los niños

Puesto que este libro habla de la educación de los niños, es muy apropiado que
abramos este capítulo mencionando cómo nuestro amado Nabi Karim
Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam), quien es el más noble y la cabeza
del buen carácter, trató a los niños.

Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) fue muy amable con los niños y
los quiso mucho. Acariciaría sus cabezas por amor y oraría por ellos. Siempre
que los niños se acercaban a él, él los tomaba en sus brazos y les mostraba
gran amor. A veces sacaba su legua delante del niño y el niño se ponía muy
feliz y reía. Si estaba acostado, hacía que un niño se sentara en las plantas de
sus pies o en su pecho. Si habían varios, los hacía caer en una fila y se sentaba
él mismo estirando sus brazos diciendo “Corran hasta mí, quien me toque
primero, recibirá un premio”. Los niños vendrían corriendo a él. Algunos
caerían en su pecho, otros caerían sobre su vientre. Él los abrazaría y besaría.
(Khasail-e-Nabawi)

Siempre que Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) pasaba cerca de


niños él los saludaría, pondría sus manos sobre sus cabezas y tomaría a los
niños pequeños. Al ver a una madre queriendo a su bebé él se vería
profundamente afectado. Al hablar de las madres diría, “A quien Allah
favorece con niños y éste los ama y también cumple con sus obligaciones
hacia ellos, entonces permanecerá a salvo del fuego de Jahannam”.

Si al regresar de un viaje Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) se


encontraba con niños en el camino él los recogía cariñosamente y los sentaba
delante o detrás de su camello. Los niños también lo querían mucho. Apenas
lo veían, corrían hasta él y él los recogía y besaba individualmente, entonces
les daba dátiles o fruta fresca o algunas otras cosas ricas para comer. Si
Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) escuchaba un bebé llorar en la
congregación que estaba guiando, él acortaba la SALAAT con el fin de aliviar
a la madre de la distracción. (Khasail-Nabawi)

Hazrat Anas (Radhi Allahu Anhu) ha relatado que “Rasulullah (Sal-lal-lahu


‘Aleihi wa Sal-lam) fue muy dulce y amable. Un día él me envió en un
mandado. Dije por Allah, no voy a ir, aunque en mi corazón dije, sin duda iré
a hacer el mandado que Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) me ha
pedido. Entonces salí y me encontré con unos niños en el mercado. De repente
sentí a alguien tirando de mi pelo desde atrás. Cuando me di vuelta a mirar, vi

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a Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) riendo. Él preguntó, “¡Anas!
¿Fuiste donde te envíe?” Dije, “Sí, oh Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-
lam). Ciertamente iré. (Mishkat, Muslimin Hayaatul)

Hazrat Anas (Radhi Allahu Anhu) ha relatado “Serví a Rasulullah (Sal-lal-


lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) por diez años desde la edad de ocho. Nunca encontró
faltas en mí por cualquier cosa que hice. Si cualquier miembro de su familia
me regañaba, él solía decir “Déjenlo ser. Si algo ha sido pre ordenado, debe
pasar”. (Mishkat)

Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) les tenía mucho cariño a los


niños. A lo largo de toda su sagrada vida no se encuentra ni un solo incidente
sobre él golpeando o siendo duro, indiferente o severo con algún niño. Él se
entristeció mucho por los árabes pre-islámicos que solían enterrar a sus hijas
vivas por su falso orgullo. Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) fue tan
afectado por sus tradiciones asesinas que en Aqaba hizo que los árabes
incluyeran en el Juramento de Lealtad que no matarían a sus hijos. Desde ese
día este acto atroz fue erradicado.

El siguiente incidente es acerca de la terrible experiencia de una niña inocente


que fue enterrada viva. La gente de la tribu de Banu Tamin en la Arabia
preislámica era muy propensa a esta práctica inhumana. El jefe de la tribu,
Qais-bin-Asim, después de abrazar el Islam confesó a Rasulullah (Sal-lal-lahu
‘Aleihi wa Sal-lam) en las siguientes palabras:

“¡Oh Mensajero de Allah! Nació una hija mía cuando estaba fuera de casa en
un viaje. Aprovechando mi ausencia, su madre de impulso natural la cuidó
durante unos días. Después de algunos días, temiendo que yo pudiera
enterrarla viva, su madre la envió donde su hermana para que la cuidara.
Cuando regresé de mi viaje me dijeron que mi esposa había dado a luz a un
niño muerto. De este modo, el asunto fue dejado de lado. La niña permaneció
al cuidado de su tía por algunos años. Una vez salí de la casa con intenciones
de estar afuera todo el día y mi esposa pensando que no estaría durante mucho
consideró seguro llamar a su hija y disfrutar de su compañía durante algún
tiempo en mi ausencia.

Cambié de opinión completamente de improviso y regresé a casa mucho antes


de lo esperado. Cuando entré a la casa vi a una niñita muy bonita y ordenada
jugando en la casa. Cuando la miré de pronto sentí un impulso fuerte y
espontáneo de amor por ella dentro de mí. Mi esposa también lo sintió y

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estuvo segura de que la sangre había llamado a la sangre y mi amor y afecto
paternal habían surgido por la niña. Le dije, “Oh mi buena esposa, ¿de quién
es la niña? ¡Qué encantadora es!”

Entonces mi esposa me dijo todo sobre ella. No pude controlarme y la tomé


ansiosamente en mis brazos. Su madre le dijo que yo era su padre y comenzó a
quererme mucho llamándome a instantes, “Oh mi padre, oh mi padre”. En
esos momentos, al abrazarla sentí un placer indescriptible cuando ella puso sus
brazos alrededor de mi cuello. Los días pasaron de esta manera y la niña
siguió siendo alimentada por nosotros libre de cualquier preocupación o
molestia. Sin embargo, a veces, cuando me llamó la atención, los siguientes
pensamientos vinieron a mi mente, tendré que ser un suegro entregándola a
alguien en matrimonio. Tendré que soportar el insulto de que mi hija sea
esposa de alguien. ¿Cómo podré ser capaz de afrontar a la gente? Se arruinará
todo mi honor y orgullo. Estos pensamientos se apoderaron de mi mente y me
torturaron continuamente. Por último estos pensamientos despertaron mi
indignación e hicieron que acabara mi paciencia. Entonces decidí terminar con
este estigma de vergüenza y humillación para mí y mis antepasados. Decidí
enterrar a la niña viva.

Le pedí a mi esposa que arreglara a la niña ya que quería llevarla a una fiesta
conmigo. Mi esposa le dio un baño, la vistió con ropa bonita y la alisto para
acompañarme. La niña también estaba dichosa, pensando que acompañaba a
su padre en una ocasión feliz. La empecé a llevar hacia la selva. La niña iba
conmigo saltando con alegría y placer, tomando mi mano aquí, yendo delante
de mí ahí, balbuceando palabras de inocente alegría y risa. Pero me había
vuelto ciego para ver y disfrutar de estos actos inocentes y estaba impaciente
por deshacerme de ella tan pronto como fuera posible. La pobre niña era
absolutamente ignorante de mi intención siniestra y me siguió alegremente.
Por fin me detuve en un lugar encantador y comencé a cavar la tierra. La
inocente niña se sorprendió al verme cavando y varias veces preguntó, “Padre,
¿por qué estás cavando la tierra?” Pero no presté atención a sus preguntas.
Cómo podría posiblemente saber que yo estaba excavando ese hoyo para
enterrar en él con mis propias manos a mi propia hija alegre y hermosa.
Mientras que cavaba la tierra y el polvo caía en mis pies y ropa, mi hija
limpiaba el polvo de mis pies y ropa diciendo, “Padre estás echando a perder
tu ropa”. Pero yo como un sordo ni me digne a mirarla como si no la hubiese
escuchado. Continué mi trabajo vicioso y cavé un hoyo lo suficientemente
grande como para servir el propósito. Entonces tristemente arrojé a la niña
inocente en el hoyo y rápidamente comencé a llenarlo. La pobre niña me

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miraba asustada y sorprendida. Estaba llorando y gritando frenéticamente
“Padre, mi querido padre, ¿qué es esto? ¿Qué estás haciendo? Yo no he hecho
nada”.

Padre por favor, ¿por qué me estás escondiendo en la tierra?” Sin embargo, yo
seguí haciendo mi trabajo como una persona sorda, ciega y muda sin prestar la
menor atención a sus súplicas y ruegos. ¡Oh Mensajero de Allah! Fui
demasiado cruel y sádico y sin corazón como para tener piedad de ella. Por el
contrario, después de enterrar a mi hija viva suspiré aliviado y regresé
satisfecho y convencido de que había salvado mi honor y orgullo de la
humillación.

Al oír este patético y terrible incidente acerca de esta niña inocente e


indefensa, Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) no pudo controlarse y
las lágrimas empezaron a caer por sus mejillas. Mientras las lágrimas caían de
sus ojos, él dijo: “Esto es crueldad extrema, ¿Cómo puede alguien que no
tiene piedad por los demás ser compadecido por Allah Ta’ala?

La recompensa para los padres cuyos hijos fallecieron

Hazrat Abu Musa Ashari (Radhi Allahu Anhu) narra que Rasulullah (Sal-lal-
lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Cuando muere el hijo de una persona, Allah
Todopoderoso pregunta a los Malaaikah, ‘¿Han tomado al hijo de mi siervo?’
Dicen ‘Sí’. Allah Ta’ala dice: ¿Han tomado los frutos de su corazón?’ Dicen
‘Sí’. Allah Ta’ala pregunta: ¿Qué dijo mi siervo?’ Los Malaaikah dicen: ‘Le
alabó y dijo Inna Lillahe wa Inna Ilaihi Rajiun (somos de Allah y a Él
regresaremos.) Al escuchar esto Allah Ta’ala ordena a los Malaaikah,
‘construyan una casa en el Jannat para mi siervo y llámenla ‘el castillo del
paraíso’”. (Jami Tirmizi)

En otro Hadith se menciona que Hazrat Anas (Radhi Allahu Anhu) narra que
Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Cualquier musulmán, si
dos de sus hijos mueren y no han alcanzado la madurez, Allah Ta’ala lo
entrará en el Jannat debido a la misericordia en ellos”.

Hazrat Abu Said Khudri (Radhi Allahu Anhu) dijo: “Una señora vino a
Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) y le dijo, oh Rasulullah (Sal-lal-
lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) los hombres se fueron con tu Hadith (lo que significa
que los hombres se benefician de sus conversaciones) así que fije usted mismo

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para nosotras un día que podamos venir a usted para que nos pueda enseñar lo
que Allah Ta’ala le ha enseñado. Dijo: reúnanse en tal y tal día, por lo tanto se
reunieron. Entonces Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) vino a ellas y
les enseñó lo que Allah Ta’ala le enseñó. Después de eso Rasulullah (Sal-lal-
lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Para una mujer cuyos tres hijos mueren, hay
una barrera entre ella y Jahannam.

Según otro Hadith de Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) narrado por


Hazrat Ummi-e-Habibah: Estaba sentada con Hazrat Aysha (Radhi Allahu
Anha) cuando Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) llegó allí y dijo:
“Si tres hijos de una pareja mueren sin llegar a la edad de la adultez, ellos
permanecerán en la puerta del Jannat en el Día del Qiyaamah. Cuando se les
diga que entren, contestarán, no podemos entrar al Jannat a menos que
nuestros padres nos acompañen. Entonces Allah Ta’ala les dirá. Vayan ustedes
y sus padres al Jannat”. (Tabrani)

Un incidente bien conocido:

Hadhrat Maalik bin Dinaar (Rahmat-Allahi ‘Aleih) fue un santo famoso. Sin
embargo, en el comienzo él no era una persona piadosa, así que alguien una
vez le preguntó cuál era su historia. Él dijo, “cuando era joven yo era policía.
Sin embargo, me gustaba mucho el vino y bebía en exceso. Me nació una hija
encantadora. Yo era muy apegado a ella y ella era muy apegada a mí.
Cuando esta niña empezó a caminar y a hablar, la quise aún más y ella estaba
todo el tiempo conmigo. Sin embargo, la niña tenía una costumbre extraña.
Cada vez que ella veía una copa de vino en mis manos, me la quitaba y la
derramaba en mi ropa. Debido al gran amor que le tenía, no la regañaba. Sin
embargo, mi hija murió cuando tenía dos años y yo quede muy afectado.

En la noche del quince de Sha’baan, otra vez estaba borracho y me fui a


dormir sin realizar el salaat Isha. Tuve un sueño horrible, en el que vi que era
el Día de la Resurrección, con hombres saliendo de las tumbas, y yo era uno
de aquellos que era llevado al Lugar de Concentración (Maidaan-i-Hashr). Oí
el ruido de algo que me seguía y cuando miré hacia atrás, vi una enorme
serpiente persiguiéndome. Ya estaba cerca de mí. Fue una visión horrible.
¡La serpiente tenía ojos azules como de gato, su boca estaba bien abierta y se
dirigía furiosamente y a toda velocidad hacia mí!

Mientras corría aterrado para salvar mi vida, la horrible serpiente venía detrás
de mí acercándose cada vez más. Vi a un anciano, vestido con ropas muy

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lindas y exquisitos perfumes. Lo saludé diciendo, ‘As Salaamu Alaykum’ y el
respondió mi saludo. Luego, le dije, “Por amor a Allah Ta’ala, ayúdame en
mi miseria”. Él me respondió, “Yo soy demasiado débil como para ayudarte
contra un enemigo tan fuerte. Debes seguir corriendo; tal vez encuentres
ayuda para salvarte de ella”.

Mientras corría, vi un monte frente a mí y lo subí, sin embargo, al llegar a la


cima, vi el ardiente fuego de Jahannam con sus más horribles vistas. Yo
estaba tan aterrado por la serpiente que corrí hacia Jahannam. En eso, oí una
voz diciendo en voz alta, ‘devuélvete, pues tú no eres de la gente de
Jahannam’. Me di la vuelta y comencé a correr en la dirección opuesta. La
serpiente también se dio la vuelta y continúo persiguiéndome. Una vez más,
vi al anciano con túnica blanca y le dije, ‘Anciano, ¿Puedes salvarme de esta
serpiente? Ya te pedí antes, pero no me ayudaste’. El hombre comenzó a
llorar y le dijo, ‘Soy demasiado débil para ayudarte contra tan poderosa
serpiente, sin embargo, puedo decirte que cerca de aquí hay una colina donde
guardan los ‘depósitos sagrados’ de los musulmanes. Si subes esa colina, tal
vez encuentres algo tuyo, guardado en depósito, que podría salvarte de la
serpiente’. Me apresuré hacia la colina, que era redonda, y tenía un gran
número de ventanas cerradas y con cortinas. Las ventanas tenían persianas de
oro tachonadas con valiosos rubíes, y las joyas más preciosas. De cada
persiana colgaba una cortina hecha de la seda más maravillosa.

Cuando iba a subir la colina, los ángeles llamaron en voz alta, ‘¡Abran las
ventanas, levanten las cortinas, y salgan! Aquí hay un hombre desafortunado
y desdichado. Tal vez uno de ustedes es su depósito, y puede ayudarlo en su
miseria’. En seguida, se abrieron las ventanas, se levantaron las cortinas, y
salieron una serie de niños inocentes con caras brillantes como la luna llena.
En ese momento, yo ya había perdido toda esperanza porque la serpiente
estaba muy cerca de mí.

Mientras oía esto, salieron más niños de las ventanas en grandes multitudes y
entre ellos vi a mi propia hija que había fallecido hace un tiempo. Cuando ella
me vio, comenzó a llorar y dijo, ‘¡Por Allah Ta’ala! Él es mi querido padre.’
Luego, saltó sobre una cuna mecedora, que parecía estar hecha de luz (Nur)
celestial y voló hasta mí. Un momento después, ella estaba de pie a mi lado y
yo la tomé en mis brazos. Ella puso su mano izquierda sobre mí hombro y
con su mano derecha hizo un gesto para que la serpiente se fuera. La serpiente
se fue inmediatamente. Luego, ella me dio un asiento y se sentó en mi regazo

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y comenzó a acariciar mi barba con su mano derecha diciendo, ‘Mi querido
padre,

‫َأَلْم َي ْأِن ِلَّلِذيَن آَم ُنوا َأن َت ْخ َش َع ُقُلوُبُهْم ِلِذ ْك ِر ِهَّللا َو َم ا َنَز َل ِمَن اْلَح ِّق‬

‘¡Acaso no les ha llegado a los que creen (que cometen pecados) el momento
de que sus corazones se sometan al recuerdo de Allah y a lo que ha
descendido de la Verdad!’ (Surah al-Hadid:16)

Con lágrimas en mis ojos, le pregunté, ‘Hija mía, ¿Todos ustedes saben el
significado del Corán?’ Ella me respondió, ‘Nosotros entendemos el Noble
Corán incluso mejor que tú’. Yo le dije, ‘Mi querida hija, ¿Qué era esta
serpiente?’ Ella me dijo, ‘La serpiente eran tus propias malas acciones que
habías hecho tan fuertes que estaban a punto de empujarte a Jahannam’. Le
pregunté, ‘¿Y quién era ese anciano con las ropas blancas?’ Ella me
respondió, ‘Él era tus buenas acciones que habías hecho tan débiles con tus
pocas buenas acciones que él no podía ayudarte en contra de la serpiente
(aunque él sí te mostró cómo escapar)’ Le pregunté, ¿Qué están haciendo
todos ustedes en esta colina?’ Ella me respondió, ‘Somos los hijos de los
musulmanes que murieron siendo niños. Nosotros viviremos aquí hasta el
Día del Qiyaamah, esperando reunirnos contigo cuando finalmente vengas a
nosotros e intercederemos por ti con nuestro Allah Ta’ala’.

Entonces, me desperté del sueño con el susto (de la serpiente) aún fuerte en mi
corazón. Tan pronto como me levante, me volví a Allah en arrepentimiento y
le puse fin a mis malas costumbres.

EMBARAZO

Transcurrido algún tiempo, la pareja desea que Allah Ta’ala los bendiga con
un hijo y así a través de la consumación conyugal Allah Ta’ala concede su
deseo. La primera etapa que sigue es la del embarazo. Una persona no debería
avergonzarse de estar embarazada o tomarlo como una gran carga, ya que hay
muchas hermosas virtudes y recompensas por estar embarazada.

Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “La mujer que muere en su


virginidad o durante el embarazo o al nacer o más tarde (en nifaas) alcanzará
el rango de un mártir”.

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Se menciona en otro Hadith que Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam)
dijo: “(¡Oh mujeres!) Acaso no les complace que cuando conciben de sus
maridos mientras ellos están complacidos con ustedes, recibirán tal
recompensa igual a la de una persona en el camino de Allah y a la de una que
pasa la noche en ibaadat. Cuando sus dolores de parto comienzan los
habitantes de la tierra y el cielo no están conscientes de las reservas de
consuelo que se preparan para ella. Cuando ella da a luz y da de mamar a su
hijo entonces se le otorgará una recompensa por cada trago de leche, y si
tuviera que permanecer despierta durante la noche por el bien de su hijo,
recibirá la recompensa de liberar setenta esclavos en el camino de Allah. ¡Oh
Salaamat! ¿Sabes quiénes son estas mujeres? Son piadosas, rectas, delicadas
de naturaleza y encima obedientes a sus maridos y no ingratas”.

Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Una mujer desde su


embarazo hasta el momento del destete de su hijo es como alguien
protegiendo las fronteras del estado islámico. Si fallece durante este período
ella alcanza la recompensa del martirio”.

En otro Hadith se menciona que “La mujer que muere de los dolores de parto
es considerada como un mártir (shahidah)”.

Por lo tanto, una mujer debería soportar con mucho gusto estas dificultades
con paciencia y con calma puesto que ella será altamente recompensada.

Hazrat Mail bin Yasar (Radhi Allahu Anhu) narra que Rasulullah (Sal-lal-lahu
‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Cásense con esas mujeres que son cariñosas y
producen niños (en abundancia) porque (en el Día del Qiyamah) competiré
con otras Ummats y estaré orgulloso de sus números”.

En otro Hadith Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo; “Incluso el


feto abortado llevará a su madre hacia el Jannat si ejerció la paciencia con la
esperanza de adquirir recompensas”.

Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Cuando la mujer mama en


cada trago de leche el niño recibe la recompensa como si hubiera dado vida a
un ser y cuando ella desteta a su hijo los ángeles la felicitan en su regreso
diciendo: ¡Felicidades! Todos tus pecados pasados han sido perdonados, ahora
comienza todo de nuevo”.

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(Por pecados se refiere a los pecados menores, esto también es una gran
recompensa.)

DÍAS DE EMBARAZO

Durante este tiempo se debe adoptar mucho cuidado y precauciones. Durante


esta etapa, cualquier debilidad física afecta el crecimiento del niño. En los
primeros días de embarazo, se debe evitar el estreñimiento por temor a un
aborto espontáneo. El estreñimiento es una dolencia bastante común durante el
embarazo. Se deben evitar los laxantes estimulantes en el embarazo y durante
la lactancia. Del mismo modo se debe evitar la diarrea ya que ésta podría
debilitarla y resultar en un aborto espontáneo.

Durante este período se experimentan náuseas, vómitos y turbación. Esto


induce un deseo de comidas agrias y saladas. Algunas mujeres tienen un
antojo repentino de tierra negra y jabón, etc. Debe tenerse precaución de que
se consuman tales cosas no que son perjudiciales para la salud. También se
deben evitar alimentos extremadamente amargos y picantes. Durante el
embarazo deben comerse alimentos simples que ayuden en la digestión.

Si durante los días de embarazo ocurre cualquier enfermedad, entonces


debería recibir tratamiento inmediato y el médico debe ser informado de su
embarazo. Uno no debe sentirse avergonzado de estar embarazada. Las
mujeres que tienen su primer embarazo están avergonzadas de contarles a sus
suegros y parientes y como resultado sufren.

La embarazada debe recordar que dar a luz a un niño normal no conduce a


tanta debilidad como en el caso de un aborto espontáneo. Por lo tanto si uno
tiene un aborto espontáneo, deben tomarse precauciones completas o de lo
contrario esta debilidad le afectará por el resto de su vida.

Durante los primeros días de embarazo, no se deben tomar o levantar cosas


muy pesadas. Asimismo debe evitarse saltar desde un lugar alto, brincar,
correr o cualquier forma de tensión (dolor) física ya que esto puede causar
sangrado excesivo o incluso un aborto espontáneo.

La educación islámica del niño comienza cuando el niño aún está en el vientre
de la madre. Esto es a través de los pensamientos que ella tiene en esos días,
por los sentimientos que ella tiene, por el tipo de libros que ella lee, por el tipo
de compañía que tiene y por el tipo de cosas que oye.

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Durante el embarazo no deben mirarse imágenes aterradoras de niños
deformes o animales. Uno debería mirar niños hermosos, flores y debería oler
fragancias bienolientes.

También durante el embarazo debe evitarse leer libros malos, tener malos
pensamientos, malas intenciones, practicar malos hábitos y hacer obras
pecaminosas o de lo contrario existe un temor de que estos males puedan
afectar al nonato después. Todo esto tiene un efecto sobre el nonato porque el
sistema nervioso de la madre afecta a todos los sistemas del bebé. Aunque el
bebé tiene sus propios sistemas independientes, recuerda que es el vientre de
la madre que lleva al bebé y que el bebé está siendo afectado por todo lo que
ella piensa, siente, lee y escucha. Es mejor y recomendable que la madre
mantenga buena compañía, lea buenos libros (el Corán Sharif debería leerse
en abundancia) y que esté en lugares donde escuche las palabras de Allah y
sobre nuestro Din. Es importante tener buenos sentimientos, buenos
pensamientos y no guardar rencores, tener miedo de algo o estar
excesivamente preocupada por algo. Siempre debería permanecer tranquila y
feliz y no preocuparse demasiado y dejarse rebasar de dolor. Los
pensamientos que uno genera afectarán el tipo de disposición que tendrá el
niño. Si estás triste y miserable el niño se verá igualmente afectado. Por lo
tanto, recuerda que el entorno antes de que el niño nazca es tan importante
como el entorno en que nace.

¿QUÉ LEER DURANTE EL EMBARAZO?

Durante los días de embarazo, deberían leerse duas para la protección contra
calamidades en abundancia. También la realización de namaaz regularmente
es una protección contra las calamidades. Las siguientes duas y surahs
deberían leerse en abundancia durante el embarazo:

(Añadir texto árabe)

1. Busco refugio en las palabras perfectas de Allah del mal de que Él ha


creado.

(Añadir texto árabe)

2. Allah nos basta y Él es el mejor Guardián

15
3. Aayatul Kursi, Surah Yasin, Surah Maryam, Surah Yusuf y Surah
Mohammed.

También se menciona que Hazrat Fatima (Radhi Allahu Anha) reporta que
cuando era tiempo para dar a luz a su hijo, “Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi
wa Sal-lam) envió a Ummi Salma (Radhi Allahu Anha) y a Hazrat Zainab
(Radhi Allahu Anha) a mí con la instrucción de que me leyeran Aayatul Kursi,
Surah Al-Falaq y An-Naas y el siguiente verso para un parto fácil:

Si una mujer tiene dificultades durante el parto, debería escribirse lo siguiente


en un papel, envuelto en un pedazo de tela blanca y atada alrededor de su
muslo izquierdo. Insha-Allah facilitará el nacimiento.

También Aayatul - Kursi y los dos Ayats de Surah Al-A’raf (7: 5 - 45) deben
ser recitados cerca de la mujer con dolores de parto. Surah Al-Falaq y An-
Naas también deben ser leídos y posteriormente se debe soplar sobre ella.

DUA POR QUEDAR EMBARAZADA Y DUA DURANTE EL


EMBARAZO

(Añadir texto árabe)

A ella y a su descendencia los refugio en Ti del Shaytán lapidado.

(Añadir texto árabe)

Entonces Zakariyya suplicó a su Señor y dijo: ¡Señor mío! Concédeme una


buena descendencia procedente de Ti; realmente Tú eres el que atiende las
súplicas.

(Añadir texto árabe)

Y Zakariyya cuando llamó a su Señor: ¡Señor mío! No me dejes solo. Y tú


eres el mejor de los herederos.

(Añadir texto árabe)

Y los que dicen: ¡Señor nuestro! Concédenos en nuestras esposas


descendencia y frescura de ojos.

16
(Añadir texto árabe)

Y haznos un modelo para los que tienen temor (de Allah).

(Añadir texto árabe)

¡Señor mío! Concédeme una descendencia de justos.

ALGUNOS NOMBRES HERMOSOS DE ALLAH PARA SER LEIDOS


ANTES, DURANTE Y DESPUÉS DEL EMBARAZO.

(Añadir texto árabe)


El Uno Sin Igual

Quien desee niños buenos y piadosos debería inscribir este ism en papel, o tela
y mantenerlo con él en todo momento.

(Añadir texto árabe)


El Primero

Quien desee niños varones debería decir este ism 40 veces al día durante 40
días. Su necesidad pronto se cumplirá. (Insha-Allah)

(Añadir texto árabe)


El Originador

Quien quiera que al poner su mano sobre el vientre de su esposa embarazada,


repite este ism 99 veces en el momento del sehri, no tendrá un aborto
espontáneo ni dará a luz prematuramente. (Insha-Allah)

(Añadir texto árabe)


El Bueno

Quien lee este ism 7 veces y sopla a su hijo poco después de nacer, Allah
concederá al niño la protección de calamidades hasta la pubertad. (Insha-
Allah)

(Añadir texto árabe)


Aquel que da la Vida

17
Si una mujer estéril ayuna por 7 días y cada día, después de hacer el Iftaar con
agua, lee este ism 21 veces, Allah le otorgará hijos varones. (Insha-Allah)

(Añadir texto árabe)


Formador de Formas

Si una mujer estéril ayuna y cada día, después de hacer el Iftaar con agua, lee
este ism 21 veces Allah le otorgará hijos varones. (Insha-Allah)

(Añadir texto árabe)


Aquel que Confiere Beneficios

Si este ism se dice antes de tener relaciones sexuales, Allah les concederá
niños buenos y piadosos. (Insha-Allah)

AYUNO DURANTE EL EMBARAZO

Si la mujer embarazada está segura o casi segura que si ayuna el feto será
dañado o ella misma será dañada, entonces puede no hacer los ayunos.

Si una mujer se entera después de haber tenido la intención del ayuno que está
embarazada y está casi segura que el ayuno será perjudicial para ella, entonces
puede romper el ayuno y hacerlo otro día sin expiación.

¿QUÉ COMER DURANTE EL EMBARAZO?

Durante los días de embarazo, alimentos buenos y puros son esenciales para la
salud del niño. Sin embargo, un exceso de frutas y alimentos saludables y
mucho descanso hace que el peso del niño aumente lo cual dificulta el parto.
Por lo tanto, no deberían consumirse alimentos saludables en exceso, ni
debería hacerse mucho reposo. Debería hacerse un poco de trabajo.

Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Si una mujer come melón
dulce, ella dará a luz un niño hermoso y lindo”.

Es interesante notar que un niño inteligente nace cuando una mujer


embarazada come frijoles. También aumenta la leche de la madre.

Durante los días de embarazo al comer dulces de coco y azúcar, disminuyes la


cantidad de vómitos. Hay facilidad en el momento del nacimiento del niño.

18
Además en el cuerpo del niño no habrá ningún sarpullido y éste será bello y
puro (piel) y nacerá sano. (Insha-Allah)

Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) ha enfatizado la importancia de


los dátiles y su eficacia en el crecimiento del feto. Él (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa
Sal-lam) recomendó que se les den a las mujeres. Sayyidah Maryam (Aleihas
Salaam) comió dátiles durante su embarazo y parto. Experimentos han
mostrado que los dátiles contienen estimulantes que fortalecen los músculos
del útero en los últimos meses del embarazo. Por un lado esto ayuda a la
dilatación del útero en el momento del parto y por otro reduce el sangrado
después de éste. Los dátiles enriquecen la leche materna con todos los
elementos necesarios para hacer que el niño crezca sano y resistente a
enfermedades.

Se reporta que Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) ha dicho que el


pomelo es una cura para todas las enfermedades. También aumenta la leche en
el pecho de la madre.

PARTO

El parto es ciertamente una ocasión muy feliz en un hogar musulmán. Allah


Ta’ala ha ordenado a las mujeres traer al mundo un Amaanat sagrado
(confianza), por tanto, se someten a muchas dificultades en el curso del
embarazo y la entrega de este Amaanat sagrado, su hijo. De este modo el
Santo Corán dice:

“Su madre lo llevó en el vientre con fatiga, y con fatiga lo parió”

Su recompensa por los servicios de dar a luz esta confianza es enorme. Es


mencionado en un Hadith que Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam)
dijo: “La mujer que muere en su virginidad o durante su embarazo o al nacer o
más tarde (durante el nifaas) alcanzará el rango de un mártir”.

A la luz del Hadith anterior y muchos otros Ahaadith mencionados, se puede


deducir con tranquilad la tremenda recompensa que una mujer recibe por el
parto.

19
Sin embargo, debe entenderse que para adquirir este gran sawaab del parto, es
absolutamente necesario que una mujer se abstenga de pecado en esta ocasión
bendita.

En nuestra sociedad moderna de inmodestia y bajos morales, la mayoría de las


mujeres desagradan a Allah Ta’ala al violar descaradamente las reglas del
Hijab islámico (purdah) con motivo del parto. El respetable sistema histórico e
islámico del parto en casa ha sido abandonado en gran parte. La mayoría de
las mujeres en los países occidentales optan por dar a luz a sus hijos en
hospitales donde son atendidas por médicos varones. Están obligadas a
someterse a muchas pruebas y revisiones médicas no islámicas,
desvergonzadas y haram. Están obligadas a exponerse sin pudor a médicos
varones. En el funesto proceso invocan la ira de Allah Ta’ala.

El adoctrinamiento occidental ha cegado la inteligencia de muchos


musulmanes. Se cree que es necesario que la mujer de a luz en hospitales y
que sea supervisada por médicos varones. Pero esto es un mito de Shaytaan
circulando por los establecimientos médicos de los Kuffar. Incontables
millones de mujeres en los países del “tercer mundo” y muchos musulmanes
conscientes del Din en los países occidentales así como mujeres no
musulmanas han dado a luz con éxito en casa y han sido atendidas por
atendidos por parteras.

Dar a luz en hospitales y ser atendida por médicos varones atenta


violentamente contra el código islámico del recato y el Hijaab y es de entre las
fechorías más desvergonzadas e inmorales. Las mujeres musulmanas deben
rebelarse contra esta vil práctica. Sus hijos son despojados de bendiciones
(Barkat) por su sumisión a las prácticas inmorales y haraam de los
establecimientos médicos de los Kuffaar.

No está permitido para las mujeres musulmanas adoptar este sistema de parto
vulgar de desnudes cuyas supuestas virtudes son prorrogadas y ensalzadas por
las ciencias médicas occidentales. Aunque siempre hay excepciones en
circunstancias graves que deberán ser confirmadas por el médico musulmán
piadoso consciente del Din. Las mujeres musulmanas deberían comprender
bien que es haram dar a luz en hospitales bajo las presentes condiciones haram
e impúdicas que requieren la exposición total de la mujer y la asistencia de
médicos varones.

20
Las virtudes y méritos del parto son obtenibles en casa bajo condiciones
islámicas, respetables y modestas. En casa habrá una mayor bendición (barkat)
en el parto, en la descendencia y en el hogar en general. Una mujer que
regresa del hospital vuelve después de haber sido sometida a un sistema de
parto desvergonzado, impúdico y haram. Ella no regresa a casa con honor
islámico ni es bendecida con el aura de nur.

Otra práctica funesta e impúdica que ha levantado su fea cabeza incluso entre
los musulmanes es la costumbre occidental del marido viendo a su esposa dar
a luz. El establecimiento médico occidental, siendo un precursor de
inmodestia y haram, aboga por las virtudes de esta práctica no islámica. Pero
el Islam no acepta tal desvergüenza. No es permisible para los maridos
musulmanes el degradarse a someterse a las prácticas inmorales y lascivas de
occidente.

LAS LEYES DE LA SHARI’A DESPUÉS DEL NACIMIENTO,


ENTIERRO DE LA PLACENTA RECIÉN, EL CORDÓN UMBILICAL
Y EL CABELLO DEL BEBÉ

El cordón umbilical y la placenta deberían ser enterrados con el cuidado que


se merece. Estas partes del cuerpo humano no deberían arrojarse de manera
negligente en el drenaje o el basurero, y tampoco deberían ser incineradas.

En relación con el bebé, es mustahab (deseable) quitarle el cabello en el


séptimo día después del nacimiento. Si uno desea, puede colocarse azafrán
disuelto en un poco de agua en la cabeza del bebé. Es recomendado dar en
caridad a los pobres el equivalente del pelo quitado en oro o plata, de lo
contrario bastará su valor equivalente en dinero. El cabello debe ser enterrado
con debido cuidado y respeto.

NIFAAS (sangrado después del parto)

El sangrado de la vagina después del parto es llamado Nifaas. Su período


máximo es de cuarenta días y si el sangrado continúa por más de cuarenta
días, entonces los días adicionales se consideran como Istihaaza (sangrado
debido a enfermedad) y no nifaaas. No existe un período mínimo para el
nifaas. Puede durar ya sea un día o sólo un rato mientras que a veces una
mujer puede incluso no sangrar una sola gota después del nacimiento de un
niño. No obstante es obligatorio (wajib) bajo cualquier circunstancia tomar un
baño después del parto. Ella debe bañarse tan pronto como el sangrado se

21
detiene y si no sangró después del parto, entonces debe bañarse tan pronto
como el tiempo de la siguiente Salaat comienza. Si, durante este tiempo, hay
temor de que pueda enfermar por bañarse o simplemente no tiene no la fuerza
para hacerlo, entonces debe hacer tayammum con la intención de tomar un
baño y realizar la Salaat. Sin embargo, aún debe tomar un baño cuando esté
sana y no exista temor de caer enferma.

TENGA EN CUENTA QUE LA IMPRESIÓN GENERAL es que el


“NIFAAS” ES DE CUARENTA DÍAS”. ESTE ES EN REALIDAD EL
PERÍODO MÁXIMO. DEBIDO A ESTA FALSA IMPRESIÓN LA
SALAAT, ETC., LAMENTABLEMENTE SE DESCUIDA.

La Salaat es indultada durante el nifaas y ninguna Salaat qazaa es necesaria


después de eso.

No se debe observar saum (ayuno) durante el nifaas. Después deben


observarse los Saum (ayunos) Qazaa puesto que estos ayunos no son
perdonados. El saum se rompe cuando nace un niño y comienza el nifaas. El
Saum Qazaa es necesario más adelante. La mujer puede comer alimentos y
tomar medicinas si es necesario; de lo contrario debe permanecer y aparecer
como una persona que ayuna.

Si la vida de una mujer embarazada o del niño está en peligro, entonces puede
romper su ayuno.

No está permitido leer el Corán Sharif durante el período de nifaas. Todo zikr
y wazifas están permitidos durante el nifaas. De hecho, wazifas protegerá de la
maldad de shaytaan quien se vuelve más activo cuando se está en estado de
impureza. Uno no debe abstenerse del zikr bajo ninguna circunstancia. EL
NIÑO QUE ESTÁ POR NACER SE BENEFICIARÁ MUCHO
ESPIRITUALMENTE A TRAVÉS DEL ZIKR DE LA MADRE. Si no puede
hacer zikr, entonces debe realizar la intención de que tan pronto como obtenga
la fuerza y el coraje lo hará. Ella será recompensada por esta intención
también.

Durante el nifaas es permisible para una mujer vivir, sentarse, comer, beber,
etc. con su esposo. Sin embargo, es haraam tener relaciones sexuales durante
el nifaas. No obstante, es permisible dormir, acariciar, y querer al marido pero
debe mantener su cuerpo cubierto desde su ombligo hasta su rodilla, y siempre
que no haya ninguna posibilidad de relaciones sexuales las cuales son haraam

22
(prohibidas) durante el nifaas y son consideras un pecado mayor (kabira). Si,
Allah impida, tienen lugar las relaciones sexuales durante el nifaas, entonces
es necesario hacer taubah y istigfaar (arrepentimiento) y es mejor que se dé
sadaqa (caridad).

NIFAAS y ABORTO ESPONTÁNEO

¿Qué hacer en caso de un aborto espontáneo?

En caso de un aborto espontáneo, si ya se ha formado cualquier parte del feto,


como manos, piernas o dedos etc., entonces se aplicarán las mismas leyes que
se aplican a mortinatos. Bajo ninguna circunstancia es permitido incinerarlo.
Debe ser envuelto en un paño y enterrado.

Note bien: Al final del cuarto mes de embarazo, normalmente alguna parte
del feto ha tomado forma. En los hospitales un feto se incinera a pesar de que
el aborto espontáneo ocurre a los siete meses. Esto no debe ser. No está
permitido.

También tenga en cuenta que el saco amniótico, placenta, etc., se dan a


petición, en los casos de nacimiento en clínicas de maternidad, clínicas y casas
privadas. En casos donde el nacimiento se da en hospitales debe hacerse una
petición para que se devuelvan estas partes.

Si alguna forma del niño (dedos, pelo, etc.) ya se ha formado, entonces el


sangrado que sigue el aborto espontáneo es considerado como nifaas y las
leyes relativas a nifaas ahora serán aplicables sobre ella. Un baño es
obligatorio cuando el sangrado se detiene y hasta entonces se prohíbe la
Salaat, el Saum, el tillaawat del Corán y las relaciones sexuales.

* PARA UNA EXPLICACIÓN DETALLADA SOBRE EL NIFAAS, ETC.


CONSULTE “AL-HADIYATO LINNISA”.

ENTIERRO DE UN MORTINATO

A un mortinato debe dársele un nombre, un baño, ser envuelto en un paño y


enterrado. Sin embargo, no se realiza salaat janazah.

23
Nota: El sangrado que sigue después de dar a luz a un mortinato es
considerado Nifaas. Por lo tanto todas las leyes relacionadas con Nifaas ahora
se vuelven aplicables a ella.

ENTIERRO DE UN RECIÉN NACIDO

Un bebé que nace vivo y luego muere debe dársele un baño, ser envuelto,
dársele un nombre y ser enterrado después de realizar la salaat Janaza.

Nota: Todas las leyes relacionadas con Nifaas se vuelven aplicables a la


madre.

NACIMIENTO POR CESÁREAS

Si un bebé nace por cesáreas entonces sólo la sangre que fluye de la vagina se
considerará como Nifaas. La sangre que fluye de la zona donde se realiza la
cirugía no es Nifaas. Si no fluye sangre de la vagina entonces debe
inmediatamente tomar un baño y empezar a realizar la Salaat. Si ella es
incapaz de tomar un baño por razones válidas según la Shariat, entonces debe
hacer Tayammum.

EL IDDAT DE UNA DIVORCIADA O VIUDA EMBARAZADA

El Iddat se refiere al período de espera de una esposa divorciada o viuda.

Si una mujer embarazada es divorciada, entonces tendrá que observar Iddat


hasta que nazca el bebé. Del mismo modo, el iddat de una viuda embarazada
será hasta que dé a luz. En el caso de mellizos, donde el segundo bebé es dado
a luz unos meses después del primero, entonces en tal caso el iddat de esa
mujer terminará sólo después de que ha nacido el segundo bebé.

Las virtudes de las hijas

Muy a menudo los padres expresan extrema alegría y felicidad con el


nacimiento de un niño y se sienten tristes y desanimados con el nacimiento de
una niña. Deberíamos siempre recordar que los niños son un ni’mat de Allah
Ta’ala. Sin importar si el bebé es un niño o una niña, los padres deberían
mostrar su agradecimiento y hacer shukar a Allah Ta’ala por haberlos

24
bendecido con un hijo que aumentará la ummat de nuestro querido Rasulullah
(Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam).

En un Hadith se menciona que Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam)


dijo, “Cuando nace una niña, Allah Ta’ala envía a sus ángeles a esa casa. Ellos
vienen a los habitantes de esa casa y piden que la paz sea sobre ellos. Los
ángeles entonces cubren a la niña recién nacida bajo la sombra de sus alas y
acariciando su cabeza con sus manos dicen, ‘esta es una persona débil y frágil.
Quien quiera que asuma la responsabilidad de su mantención tendrá la
bendición de Allah Ta’ala mientras que siga vivo’”. (Al-Mojam al-Saghir li
Tabrani).

Hazrat Anas (Radhi Allahu Anhu) narra que Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi
wa Sal-lam) dijo: “Quien mantiene a dos muchachas hasta que alcanzan la
madurez, él y yo vendremos el Día del Qiyaamah así, y juntó sus dos dedos.
(Muslim)

Es mencionado en un Hadith reportado de Hazrat Aisha (Radhi Allahu Anha)


que “una mujer vino a mí junto con sus dos hijas. Me pidió limosna, pero no
encontró nada conmigo excepto un dátil, por lo tanto, se lo di. Lo aceptó y
luego lo dividió entre sus dos hija. La madre no comió ningún pedazo del
dátil. Entonces se levantó y se fue con sus dos hijas. Mientras tanto Rasulullah
(Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) me visitó y le narré esta historia. Acto
seguido, Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Aquel que está
involucrado en la responsabilidad de criar hijas y les concede un trato
benévolo, será protegido contra el fuego de Jahannam”. (Acordado)

En otro Hadith se menciona bajo la autoridad de Hazrat Aisha (Radhi Allahu


Anha) que “una pobre mujer vino a mí junto con sus hijas. Le di tres dátiles.
Ella le dio a cada una de las hijas un dátil y tomó uno para ella, estaba a punto
de comer el dátil cuando una de las hijas expresó el deseo de comerlo e
inmediatamente dividió el dátil entre las hijas. Este amable tratamiento me
impresionó y se lo relaté a Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam).
Entonces él dijo: Ciertamente, Allah ha asegurado el Jannat para ella, debido a
esta acción, o la ha rescatado del fuego de Jahannam. (Muslim)

GHUSL

25
El niño recién nacido, después del nacimiento, debería ser purificado (paak)
mediante un ghusl adecuado. Después de eso debería leérsele bismillah y
vestírsele con ropa limpia.

AZAAN E IQAAMAAT

El primer sonido en llegar a los niños debería ser “Allahu Akbar”, el mensaje
de la grandeza y unicidad de Allah Ta’ala y la profecía de Rasulullah (Sal-lal-
lahu ‘Aleihi wa Sal-lam), así llamando al recién nacido al éxito eterno, la
devoción y la oración. Hacia la qibla, el AZAAN debería llamarse en el oído
derecho y el Iqaamat en el oído izquierdo. Se debiese pedir a un Aalim o
anciano piadoso de la familia recitar el primer AZAAN e Iqaamat a los oídos
del bebé recién nacido. Si tal persona no está inmediatamente disponible,
entonces cualquier hombre musulmán puede realizar este deber masnun
(sunnat). Si no hay ningún hombre o muchacho para llamar el AZAAN,
entonces una mujer también puede llamar el AZAAN. Al llamar el AZAAN el
niño está protegido contra enfermedades.

Es mencionado en un Hadith que Hazrat Hassan bin Ali (Radhi Allahu Anhu)
narra que Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Para quienquiera
que nazca un bebé, entonces llama el AZAAN en su oído derecho y el Iqaamat
en su oído izquierdo. Éste no será afectado por la enfermedad”.

Cuando Hazrat Husain (Radhi Allahu Anhu) nació, Rasulullah (Sal-lal-lahu


‘Aleihi wa Sal-lam) recitó el AZAAN e Iqaamat en sus oídos.

Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Un niño en cuyos oídos se


recitan estas dos oraciones estará a salvo de la enfermedad de la epilepsia”.

Llamar el AZAAN es Sunnat-e-Muakkida. Después de llamar el AZAAN e


Iqaamat el niño debería ser entregado a la madre para ser amamantado.

DUAS PARA EL BEBÉ

Después del AZAAN, es mustahab leer la siguiente dua: (para los niños leer
Oeiezuhu y Wa-zurriyatuhu)

(Añadir texto árabe)

26
“Oh Allah busco en Ti protección para ella y su descendencia del Shaytaan el
maldito”.

‫ُقْل ُه َو ُهَّللا َأَح ٌد ُهَّللا الَّص َم ُد َلْم َي ِلْد َو َلْم ُيوَلْد َو َلْم َي ُك ن َّلُه ُكُفًو ا َأَح ٌد‬

“Di: Él es Allah, Uno. Allah, el Señor Absoluto. No ha engendrado ni ha sido


engendrado. Y no hay nadie que se Le parezca”.

(Añadir texto árabe)

“Oh Allah hazlo piadoso y temeroso de Ti y hazlo crecer en el Islam hasta su


crecimiento completo”.

(Añadir texto árabe)

“Oh Allah enséñale el Kitaab (Corán) y la sabiduría y dale perspicacia en la


fe.

DUA DURANTE EL PARTO

Inshiqaq o el resquebrajamiento:

‫َٰم‬
‫ِبْس ِم ِهَّللا الَّر ْح ِن الَّر ِحيِم‬
En el nombre de Allah, el Misericordioso, el Compasivo

‫ِإَذ ا الَّس َم اُء انَشَّقْت‬

¡Cuando el cielo se resquebraje

‫َو َأِذ َنْت ِلَر ِّب َه ا َو ُح َّقْت‬


y oiga a su Señor y tenga que obedecer!

‫َو ِإَذ ا اَأْلْر ُض ُم َّد ْت‬

¡Y cuando la tierra se dilate

‫َو َأْل َقْت َم ا ِفيَه ا َو َتَخ َّلْت‬

y expulse lo que hay en sus seno vaciándose,

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‫َو َأِذ َنْت ِلَر ِّب َه ا َو ُح َّقْت‬

y oiga a su Señor y tenga que obedecer!

Zilzal o “el temblor”

‫ِإَذ ا ُز ْلِز َلِت اَأْلْر ُض ِز ْلَز اَلَه ا‬

Cuando la tierra sea sacudida por su propio temblor.

‫َو َأْخ َر َج ِت اَأْلْر ُض َأْث َقاَلَه ا‬

Y cuando la tierra expulse lo que pesa en su seno.

‫َو َق اَل اِإْلنَس اُن َم ا َلَه ا‬

Y diga el hombre: ¿Qué tiene?

TAHNIK Y NOMBRAMIENTO DEL NIÑO

TAHNIK es masticar un dátil y colocar su carne en el paladar de la boca del


bebé. Después del AZAAN e Iqamaat se debería dar un dátil a una persona
piadosa para masticar y mezclar su saliva con el fruto. Después de eso debería
poner un poco del dátil en su dedo de shahaadat y colocarlo en el paladar de la
boca del bebé. El niño entonces lo chupará, y de esta manera la saliva de una
persona piadosa se mezclará con la saliva del niño, lo que Insha-Allah se
convertirá en un medio de barkat y beneficio para el niño.

Si tal persona no está disponible, entonces cualquier musulmán varón puede


realizar este acto. Si no hay dátiles disponibles, se puede poner un poco de
miel en la boca del niño con el dedo. Hazrat Asma (Radhi Allahu Anha) narra:
“Cuando nació Hazrat Abdullah bin Zubair, lo puse en el regazo de Rasulullah
(Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam). Él pidió un dátil, lo masticó y aplicó la
saliva en la boca de Hazrat Abdullah bin Zubair, y oró por el bienestar del
niño”.

Según Hazrat Aisha (Radhi Allahu Anha), Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa


Sal-lam) realizó TAHNIK en los niños traídos a él y rezó por ellos.

28
NOMBRANDO AL NIÑO

Es el deber de los padres y el derecho del niño recién nacido que se le dé un


nombre islámico adecuado, decente y apropiado. Dentro de siete días debería
darse un nombre al niño puesto que el nombre afecta su comportamiento,
carácter y hábitos. También Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam)
aconsejó poner nombres buenos. La elección del nombre bueno debe
realizarse con el barkat del nombre.

En un Hadith de Abu Dawud se menciona: “Ciertamente en el Día del


Qiyaamah serán llamados por sus nombres y los de sus padres, así que dense
nombres buenos”.

Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo “De sus nombres, a Allah le


gusta más Abdullah y Abdur Rahman y que los niños sean nombrados con los
nombres de los ambiyaa”.

Al escoger los nombres para los niños, los siguientes puntos deberían tenerse
en cuenta:

Debería contener uno de los nombres de Allah Ta’ala y ser precedido por una
palabra que denote sumisión a Él. Por ejemplo: Abdullah, Abdul Rahman,
Abdul Ghaffar, etc.

Se debería seleccionar a partir de los nombres de Ambiyaa como Yaqub,


Yusuf Idris, Ahmed, Musa, Salih, Mohammed, etc. Debería ser adoptado de
los nombres de personas piadosas como Umar, Faruq, Ali, Uthman, Khalid,
Khadhija, Maryam, Sumayya, etc.

Al mantener los nombres de los Nabis y Walis, hay un montón de barkat, pero
debería tenerse cuidado cuando se toman estos nombres. Esa persona no
debería ser insultada, etc., o de lo contrario sería falta de respeto a aquellas
personas piadosas.

Hazrat Abu Rafi (Radhi Allahu Anhu) narra que Rasulullah (Sal-lal-lahu
‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “Cuando nombras a alguien Muhammad, no lo
golpees ni lo prives”.

29
Del mismo modo Hazrat Umar (Radhi Allahu Anhu) relata que Rasulullah
(Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) una vez amonestó diciendo, “Nombran a sus
hijos Muhammad y luego además los reprenden”.

Los nombres deberían reflejar el verdadero espíritu islámico y pensamiento de


los padres. Por ejemplo, teniendo en cuenta la situación de deterioro actual de
los musulmanes, el niño debería ser dado nombres como Tariq, Salahuddin,
etc., con la esperanza de que este niño sea como la persona cuyo nombre se le
da”.

Estos son los puntos que deberían adoptarse al dar nombres a los niños.

Ciertos nombres deberían evitarse al dar nombres a los niños. No debería ser
contra el espíritu y los principios del Islam como Abdur-Rasul, Abdul Nabi
(que significa siervo del Nabi).

No debería reflejara malos hábitos tales como orgullo, soberbia u odio, etc.

No debería reflejar ideas e inclinaciones no islámicas.

No debería llevar ningún significado indebido y malo como Aasia (el


pecador), Hariqa (el quemador), Harb (guerra), etc.

No debería ser degradante y vergonzoso.

Tales nombres que tienen significados malos no son preferidos. Ejemplo: si


alguien va a casa de una persona cuyo nombre es “Barkat” y lo llama, y si la
respuesta es “Barkat” no está aquí, entonces este es un mal significado para la
casa. Asimismo tales nombres donde hay orgullo y grandeza, no están
permitidos, por ejemplo, Barrah.

La importancia de la selección de nombres correctos se muestra en varios


Ahadiths que siguen:

Abi Wahab al Jasha’i (Radhi Allahu Anhu) narra que Rasulullah (Sal-lal-lahu
‘Aleihi wa Sal-lam) dijo, “Mantengan los nombres de los Aambiyaa
(Aleihimus Salam) y los nombres que a Allah más le gustan son Abdullah y
Abdur-Rahman y los más veraces son Harith (sembrador y sustentador) y
Amman (atento o resuelto) y los más desagradables son Harb (guerra) y
Murrah (amargo)”.

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Se ha reportado que Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo:
“Quienquiera es nombrado después de mí con la esperanza de ser bendecido,
será bendecido y estará en paz hasta el Día del Qiyaamah”.

Además se ha reportado que Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo:


“A quienquiera que nace un niño y es llamado Mohammed por amor a mí y
con la intención de la barkat de mi nombre, entonces él y su hijo entrarán al
Jannat”. (Kanzul Ummuh)

Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo: “A quienquiera que nace un


niño, debería dársele un nombre bueno, una educación sólida y cuando
alcance la edad para casarse debería ser casado”.

Abdullah ibn Shukair (Radhi Allahu Anhu) dice que cuando Rasulullah (Sal-
lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) le preguntaba a alguien por su nombre y si éste
era un buen nombre se volvía evidente en su rostro, y si no era un nombre
apropiado se disgustaba. Y cuando entraba en una aldea o un pueblo
preguntaba por su nombre, si era bueno le complacía, y si no era apropiado, se
veía en su rostro.

Se ha reportado de Ya’ish al Ghaffaari (Radhi Allahu Anhu) que Rasulullah


(Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) llamó a una camella y le preguntó: “¿Quién
la ordeñará?” Un hombre dijo: “Yo”. Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-
lam) le preguntó: “¿Cuál es tu nombre?” Él contestó: “Murrah” (cuyo
significado es amargo). Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) le dijo:
“¡Siéntate!” Otra persona se levantó y fue preguntado por Rasulullah (Sal-lal-
lahu ‘Aleihi wa Sal-lam): “¿Cuál es tu nombre?” Él también contestó
“Murrah”. Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) le dijo: “¡Siéntate!”
Después se levantó otro hombre y Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam)
le preguntó: “¿Cuál es tu nombre?” Él respondió: “Jamrah” (cuyo significado
es fuego). Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) le dijo “¡Siéntate!”
Finalmente Ya’ish (el narrador del Hadith) se levantó y Rasulullah (Sal-lal-
lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) le preguntó: “¿Cuál es tu nombre?” Él respondió:
“Ya’ish” (cuyo significado es larga vida). Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa
Sal-lam) le dijo: “¡Ordéñala!"

Hay que cambiar los nombres indeseables y los deletreos incorrectos que
pueden distorsionar el significado de un buen nombre. Hazrat Aisha (Radhi
Allahu Anha) dice que Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) solía

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cambiar los nombres malos por nombres buenos. Una de las hijas de Hazrat
Umar (Radhi Allahu Anhu) fue nombrada Asiyah. Su nombre significaba
desobediente. Su nombre fue cambiado a Jamila por Rasulullah (Sal-lal-lahu
‘Aleihi wa Sal-lam). Zainab binti Salama (Radhi Allahu Anha) dice, “Yo fui
nombrada Birra (que significa piadosa) y Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa
Sal-lam) dijo: ‘No afirmes piedad, puesto que Allah sabe quiénes entre ustedes
son piadosos. Llámate Zainab”.

Los nombres que afectan la vida de una persona y sus descendientes se


muestran en el siguiente Hadith: Hazrat Said ibn Musayyib (Radhi Allahu
Anhu) relata de su padre que su abuelo fue donde Rasulullah (Sal-lal-lahu
‘Aleihi wa Sal-lam) y se le preguntó: “¿Cuál es tu nombre?” Él contestó; Hazn
(cuyo significado es pena). Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) dijo:
“Tú eres Sahl” (cuyo significado es contento). Él respondió: “No cambiaré el
nombre que me dio mi padre”. Ibn Musayyib dice: “A partir de entonces la
pena siempre estuvo con nosotros”.

Rasulullah (Sal-lal-lahu ‘Aleihi wa Sal-lam) prohibió que las personas


mantuvieran nombres que contengan algún elemento de shirk, como al juntar
Abd a otros nombres distintos a los de Allah. Él también prohibió nombres
pomposos y auto-glorificadores.

Es costumbre dejar el nombre del niño a la hermana del padre (Foyma), o que
se selecciona un nombre torpe de un Jantry (almanaque). Esto no tiene cabida
en nuestra enseñanza y a menudo conduce a resultados insensatos que el niño
debe llevar para siempre.

Esfuerzos por anglicanizar u occidentalizar nombres islámicos son malos y


baratos y revelan una actitud no islámica. Todos los musulmanes deberían
estar orgullosos de sus nombres y fe.

Si hay un temor de que algunos nombres no serán pronunciados


correctamente, o sólo la mitad del nombre se llamará, entonces es mejor evitar
esos nombres. Por ejemplo, el nombre de una persona es Mohammed Shuaib,
y la gente lo llama ya sea Mohammed o Shuaib, pero nunca lo llaman
Mohammed Shuaib, entonces esto es incorrecto. Por lo tanto deberíamos
evitar tales nombres.

Los niños no deberían ser llamados por nombres distorsionados u


occidentalizados como: Mahmad para Mohammed, Aggie para Ahmed, Solly

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o Sully para Sulayman, Sam para Abdussamad, Fatti, Fatu, Fathi o Tima para
Fatima, Tija o Katy para Khadija, Jubie o Beida para Zubeida, Julie para
Zuleika. También Amadu para Ahmed, Fay para Fatima, etc. También hoy en
día los nombres son acortados, mediante el uso del alfabeto inglés, lo cuales
son totalmente incorrectos, por ejemplo M.D. para Mohammed Daud, S.A.
para Said Ahmed, I.B para Ibrahim, etc.

También es común en nuestra sociedad que las personas mantengan nombres


que puede que suenen agradables para ellos, pero en realidad no significan
nada en absoluto. Tales nombres no deben tenerse. Los padres deberían
asegurarse que al elegir un nombre para su hijo, lo hagan con la intención de
que el niño sea bendecido con la barkat de ese nombre. Un nombre que sólo
suena bonito pero que no tiene ningún significado es por lo tanto desprovisto
de cualquier barkat. Un ejemplo de tales nombres es, Rukhsaanah.

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