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Muchas veces cometemos errores, nos aferramos a personas que no nos hacen

bien, nos limitamos en el trabajo por temor a exigir lo que nos corresponde hasta
que logramos tomar el valor e ir por más.
Soy Maga de Pochoclo Profiling y hoy analizaremos la personalidad de
Princesa Carolyn de la emblemática serie BoJack Horseman.
Ya que este personaje nos muestra con una gran asertividad, que, ni los mandatos
sociales, ni nuestra historia, prejuicios o temores nos definen y que alcanzar la
felicidad son más momentos que etapas.
La conocemos en el momento en que rompe su relación amorosa con Bojack
porque se da cuenta que no la escucha, no le presta atención y merece más. Si bien
su relación con él tiene sus idas y vueltas es hasta que aprende a tomar distancia
emocional, cuidarse y priorizarse.
Princesa Carolyn proviene de un entorno social de clase trabajadora de Carolina del
Norte. Vivía junto a su madre y sus 11 hermanos, si bien ya de adolescente es la
única que se quedó para ayudarla, mientras todos los demás continuaron con su
vida. Su mamá era ama de llaves, sin embargo, debido a que era alcohólica, para
que no perdiera el trabajo y por ende el techo en el que vivían, Princesa Caroline la
reemplazaba en las tareas laborales, por lo que desde muy joven debió hacerse
cargo de las cosas y sacar de los problemas a los demás, relegándose a sí misma.
De esta forma siempre mantuvo el intento de ocultar las fallas y errores de los
demás, sobrecargándose de obligaciones.
Su madre era pesimista con la vida y no la apoyaba en sus sueños, sino todo lo
contrario, buscaba que Carolyn abandonara sus sueños y se quedara viviendo una
vida triste y mediocre. La madre le inculca que es una mujer sin valor y que siempre
tendrá un número equivocado, minando así la confianza y seguridad de su hija. La
mujer tendrá valor, en tanto este protegida al lado de un hombre.
Tras su primera relación sexual queda embarazada, hecho que la angustia de
sobremanera porque implicaba un proyecto que no deseaba en ese momento y que
iba a impedir que concretara su sueño de irse a la universidad. En este momento
difícil, la madre ve lo bueno, pero haciendo el énfasis en los aspectos errados,
embarazada Carolyn al fin se quedaría con ella y de paso enganchaba al hijo rico de
la familia, asegurando su propio futuro y bienestar, sin pensar en el de su hija. Es
así que Princesa Carolyn quien siempre se preocupaba por los demás, no tenía a
nadie que mirará por ella, por lo que comenzar a escucharse y priorizarse será un
largo aprendizaje para ella. En este momento tan bisagra en su vida, su madre le
entrega una mentira que determinará su identidad y una actitud que la ayudará a
sobrellevar las futuras adversidades. Un collar supuestamente de oro, que sería una
reliquia familiar que se pasa de generación en generación, como símbolo de la
tenacidad y perseverancia de las miembros de la familia que siempre les hacía caer
parada. Sin embargo, muchos años después, se enterará que no era cierto, si bien
se angustia mucho, el collar valía por lo que representaba y no por lo que era
materialmente.
Es así que al quedar embarazada de adolescente le ofrecen una vida en donde ella
deja de ser la protagonista, y así otros tomarían todas las decisiones “protegiéndola”
de todo. Sin embargo, sufre su primer aborto espontáneo (sufrirá 5 a lo largo de la
serie), hecho que es sumamente doloroso, y muy común que ocurra tanto en
madres primerizas como mujeres con hijos. No es para nada culpa de la mujer, son
procesos que lamentablemente ocurren.
Ella inculca a los demás que tienen que ir tras sus sueños, tal como la protagonista
de su película favorita. Sin embargo, al ocuparse de los demás, deja relegado lo
más difícil, ir ella tras sus sueños. Y si bien su preocupación por los demás es
genuina, es también su escudo para mantenerse desconectada de sus propias
necesidades y animarse a ir tras sus deseos.
Por eso, cuando pierde a su bebe y queda liberada de los mandatos de los demás,
queda libre para seguir su propia voz, con su determinación y valentía es que se
lanza al mundo, y lo hace sola, incluso sobreponiéndose a la culpa manipuladora de
su madre. Así debió aprender duramente que si quería salir adelante debía valerse
por sí misma. Ella tiene su propia forma de darse aliento cuando las cosas van muy
mal: se imagina que su biznieta Ruthie cuenta como lo supera. Ruthie será también
el nombre que le pondrá a su hija adoptiva, pero nos estamos adelantando. (NO SE
SI ES IMPORTANTE O DONDE PONERLO: Actualmente su madre murió hace
varios años).
Vemos sus inicios como agente, siendo representante de actores de Hollywoo.
Comienza desde abajo, esmerándose por hacer bien su trabajo, resaltando su
compromiso y esmero por hacer un gran labor. Princesa Carolyn aprende como
usualmente aprendemos muchos de nosotros, a los tropiezos, y al chocarnos con
paredes.
En el ambiente laboral tiene a su archienemiga Vanesa Gekko, una mujer
avasallante a la que no puede ubicar y poner en su lugar. La odia en realidad
porque proyecta en ella todo lo que desearía ser: una mujer exitosa laboralmente,
en un matrimonio sólido, con muchos hijos. Sin embargo, ya sabemos que todo lo
que brilla no es oro, y nadie tiene una vida perfecta, sin embargo, Princesa añora
ese sueño, creyendo que así lo tendrá todo y será al fin feliz.
La vemos siendo una gran negociadora, y excelente intermediaria. Es muy buena en
su trabajo, resaltando su carácter proactivo y su actitud resolutora, buscando
siempre arreglar las cosas. Es ambiciosa, creativa, y con un gran corazón. Siempre
se encuentra resolviendo problemas de los demás de manera ingeniosa, pensando
por fuera de la caja. Trabaja tejiendo relaciones y comunicaciones. Siendo a veces
un poco sínica “soy agente, creo todo lo que digo”. Sin embargo, el esmerarse tanto
por su trabajo la expone a ser solitaria, debido a que muchas veces pierde el
balance entre su vida laboral y personal, lo que le termina generando un gran
sentimiento de vacío e infelicidad.
Por muchos años trabajo para otros hasta que se animó a estar por ella misma. Y
esto ocurre cuando comprende que es infravalorada y que quedándose en donde
está nunca crecerá y alcanzará su objetivo. Es así que toma el gran salto de
independizarse. Le costó porque buscaba el reconocimiento externo, que no logra,
hasta que se da cuenta que las cosas las debe hacer por y para ella. Es sumamente
motivador ver como con todos sus temores y miedos y sin muchas seguridades se
lanza por su cuenta. Así puso su propia agencia, “tu aprobación no me importa” (sic)
y no sólo es agente, sino que va por más, por sus propios proyectos, al ser
magement en hollywoo, busca tanto proyectos para sus clientes como los produce.
Es importante destacar que cuando toma esta decisión ella ya tiene 40 años,
rompiendo así con los mandatos de que a esa edad no se debe emprender nada
nuevo, que ya se tiene todo solucionado en lo laboral y que una mujer a esa edad
ya esta casada con hijos. En realidad, no hay edad para tomar las riendas de tu
vida. Por lo que la vemos asumiendo un nuevo desafío y deberá descubrir el porque
hace lo que hace, más allá de que siempre se haya repetido que lo hace porque es
buena en ello.
Ella se cuenta la mentira de que cree que si no trabajara sería ama de casa con
hijos, por lo que necesita a un hombre. Sin embargo, ella lo que quiere es triunfar en
su trabajo, el cual ama y por sobre todo es muy buena, a la vez que también desea
tener un hijo. El priorizar siempre las necesidades de los demás, con los años, la
hace sentir que perdió el tiempo esperando que algo pasara. Sin embargo, le resulta
difícil necesitar a alguien, porque de esta forma se siente vulnerable y dependiente
de otro, que muchas veces le ha fallado.
Es así que decide adoptar un hijo por su cuenta, porque es algo que realmente
desea, ya no va a esperar a cumplir con lo que supuestamente hay que hacer:
primero encontrar pareja, y luego tener un hijo. Si bien permite que su trabajo se
inmiscuya todo el tiempo en su vida, algo que deberá aprender a priorizar de
acuerdo al momento. Vemos el dilema que se enfrentan muchas mujeres, como
hacerlo TODO, lo que resulta muy frustrante, pues no es fácil, no se puede todo.
Tardó en ponerle un nombre al proyecto sin título de Princesa Carolyn, es decir a su
bebe, por la presión de que todo debía ser perfecto y bien hecho. Entenderá gracias
a Vanesa que a veces dar lo que podemos es todo lo mejor que se puede hacer.
Intentando resolver la dicotomía entre el éxito y la maternidad.
Sus relaciones amorosas están plagadas de aprendizajes que ella sabe capitalizar.
Con cada error se acerca más hacía sí misma. Con BoJack la intuición le decía que
probablemente le iba a romper el corazón, pero la idílica fantasía de que cambiaría y
que en algún momento querrían lo mismo pudo más. Y no está mal, necesitaba
experimentar este dolor por que, tras muchas desilusiones aprende que él la busca
sólo para ser consolado. Viendo al fin lo egoísta que es y que nunca hizo algo por
ella. Sin embargo, muchas veces se refugió en él debido a su gran sentimiento de
soledad. Aunque a veces estar con algunas personas, nos hacen sentir aún más
solos.
Con el niño de traje es muy gráfico y entretenido ver como muchas veces
proyectamos en el otro lo que queremos, llenamos sus inconsistencias con atributos
que fantaseamos y así termina saliendo con alguien que no es lo que ella cree,
engañándose nuevamente.
Con el ratón Ralf , se ve ya desde el hecho de que ella es un gato y el un ratón, que
estar con él implica para ella negar parte de su identidad , amoldándola a la de él.
Ella estaba embarazada y tuvo un aborto espontáneo. Él le dice que con ella todo es
fácil y por eso la ama, pero es porque ella no comparte la carga. Le miente por el
dolor de afrontarlo. Mantuvo su departamento, aunque se había ido a vivir con Ralf y
ahí, en su espacio único que siente como suyo fue a refugiarse. Porque con Ralf no
era ella misma, era sólo la idealización de esa Princesa Carolyn que todo lo puede y
que nunca necesita nada.
Afronta las adversidades sola, no quiere apoyarse en nadie repitiéndose el mantra
de que Cada vez que nos caemos nos levantamos más fuertes. Su gran capacidad
de resiliencia la hace caer siempre en cuatro patas. Así intenta siempre tener una
actitud positiva.
Ella es incondicional, dando la imagen de que lo puede arreglar todo, cuidando
compulsivamente de otras personas porque no sabe cómo cuidarse a sí misma,
hasta que se anima a tomar las riendas de su vida, pero también hasta que al fin
aparece alguien en su vida que está dispuesto a cuidarla, reconociendo todo su
valor. Y al fin llegamos a la tierna y hermosa relación con Judah. Al fin alguien que
la veía y escuchaba. Él siempre supo lo que ella necesitaba aun cuando ella no lo
sabía. Y sabe lo que es mejor para ella y la acompaña. Con Judah logra confiar y
compartir las cargas. Así como también confía en Todd para que sea el niñero de su
hija.
La única forma de salir y seguir adelante es conectándose con sus propios sueños y
compartiéndolos con los demás.

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