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EUCARISTÍA CONFIRMACIÓN ADULTOS


ENTREGA DE LA ORACIÓN EL CREDO

I.- RITOS INICIALES:


GUÍA: Bienvenidos sean todos ustedes, a la casa de Dios. Es por fe que
estamos aquí para vivir esta Eucaristía. Que la participación en la misma
aumente nuestra confianza en Dios y nos permita cada día dar signos de
nuestra conversión.
Este 8 de noviembre se dio inicio al Mes de María, fiesta ya tradicional y
emblemática de nuestra Iglesia en Chile. Y es a ella, La Virgen María, a quien
hoy dirigimos nuestra mirada y encomendamos a esta comunidad de Ollagüe,
sus familias, sus trabajos y necesidades. Por intercesión de nuestra Madre
Santísima, iniciamos esta celebración, pidiéndole que prepare nuestro
corazón para vivir con recogimiento y devoción este misterio de amor. Nos
ponemos de pie para recibir a nuestro celebrante, el Padre David Vargas,
quien nos preside en la fe, cantando.
ACTO PENITENCIAL
GUÍA: Señor Jesús, nos parece que estás ausente cuando luchamos con el
sufrimiento; pero ahí estás tú dándonos fortaleza. Señor, ten piedad.
GUÍA: Cristo Jesús, con frecuencia nos olvidamos de ti en los afanes de la vida
diaria; pero ahí estás tú con nosotros. Cristo, ten piedad.
GUÍA: Señor Jesús, nos descuidamos de atenderte en nuestros hermanos
enfermos y abandonados; pero tú quieres que te sirvamos en ellos. Señor ten
piedad.
CANTO
II. LITURGIA DE LA PALABRA
GUÍA: En la primera lectura, el libro de la Sabiduría nos exhorta a buscar la
justicia, fidelidad a la voluntad divina, y al cumplimiento fiel de los deberes:
en suma, la rectitud moral. Porque solo en el corazón sencillo que manifieste
su fe, Dios se dejará encontrar. Escuchemos con atención.
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PRIMERA LECTURA
SALMO RESPONSORIAL
GUÍA: Del Evangelio de San Lucas dispongámonos a escuchar hoy varias
recomendaciones breves de Jesús sobre el escándalo, el perdón y la fe.
Preparemos el corazón, nos colocamos de pie y cantamos.
EVANGELIO - HOMILÍA
ENTREGA DE LA ORACIÓN EL CREDO
GUÍA: Siguiendo el “itinerario catequético” para completar la iniciación
cristiana al recibir el sacramento de la Confirmación. Hoy la iglesia entrega
uno de los documentos básicos y fundamentales de la fe: la oración El Credo
o Símbolo de la fe, que es el compendio de las verdades que conducen a la
salvación. Nosotros, somos testigos de este acto solemne por el cual los
catequizando se vinculan más fuertemente a la Iglesia. Pidamos todos al
Señor que la fe de estas personas sea sincera y comprometida. Se acercan las
personas que van a recibir el Símbolo de la fe.
CELEBRANTE: Queridos catequizando, Dios invisible movido por su gran amor
habla a los hombres como amigos y habita con ellos para invitarlos a
comunicarse. La respuesta adecuada a esta invitación de Dios es la fe. Por la
fe el hombre somete completamente su inteligencia y su voluntad a Dios. Con
todo su ser el hombre da su “Sí” al Dios que se revela.
Ahora en su camino catequético hacia la Confirmación, ustedes mismos, libre
y conscientemente, van reflexionando y profundizado en los misterios de Dios
que Jesucristo nos ha revelado.
La Iglesia, Madre y Maestra, quiere hacerles entrega del Credo, Símbolo de la
fe, por el cual recibirán la salvación. Las palabras son pocas, pero contienen
grandes Misterios de salvación. Pero antes, la Iglesia les pide que manifiesten
ante la comunidad cristiana aquí reunida su propósito de profesar y confesar
la fe que han recibido. Por tanto, les pregunto sobre esta intención.
PROMESAS DE LOS ELEGIDOS
CELEBRANTE: ¿Qué piden a la Iglesia de Dios?
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ELEGIDOS: La fe.
CELEBRANTE: ¿Qué les otorga la fe?
ELEGIDOS: La vida eterna.
CELEBRANTE: ¿Prometen guardar y mantener fielmente la fe que la Iglesia les
anuncia para su salvación y vida?
ELEGIDOS: Sí, lo prometo.
CELEBRANTE: ¿Prometen dar testimonio de la fe, con sus palabras y con sus
obras, viviendo conforme a la misma fe que profesan con el corazón y que
celebran en los sacramentos?
ELEGIDOS: Sí, lo prometo.
CELEBRANTE: ¿Prometen esforzarse para progresar y profundizar en las
verdades que dan sentido a vuestra vida y que se contienen en el Símbolo de
la fe que se les entrega?
ELEGIDOS: Sí, lo prometo.
CELEBRANTE: Que la gracia del Espíritu Santo les ayude a vivir siempre según
la promesa que acaban de realizar. Reciban con gozo el símbolo de la fe y que
sus vidas queden iluminadas por su luz de salvación.
ELEGIDOS: Amén.
ORACIÓN SOBRE LOS ELEGIDOS
CELEBRANTE: Oremos por nuestros elegidos, para que Dios nuestro Señor les
ilumine interiormente, se sientan cada vez más miembros activos de la
Iglesia, y así encuentren en la Confirmación el impulso del Espíritu Santo y la
configuración con Cristo, nuestro Señor. Amén.
Seguidamente el celebrante,
con las manos extendidas sobres los elegidos, dice:
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CELEBRANTE: Te suplicamos, Señor, fuente de luz y de verdad, que tu eterna y


justísima piedad descienda sobre estos siervos tuyos, purifícales y
santifícalos; dales la verdadera ciencia, firme esperanza y la santa doctrina.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
Todos: Amén.
CELEBRANTE: Recibe el Símbolo de la fe. Que sea para ti sello espiritual,
alimento para la meditación de tu corazón, guardián de tu vida y tesoro de tu
alma. Cree lo que profesan tus labios, y vive de acuerdo con la fe que la
Iglesia te entrega.
ELEGIDO: Amén.
(El rito debe concluir profesando la fe con toda la comunidad reunida).
PROFESION DE FE
ORACIÓN DE LOS FIELES
GUÍA: A cada intención respondemos: “Concédenos un corazón puro, Señor”
1. Por la Iglesia, para que se haga portadora de la sabiduría que viene del
Evangelio para los hombres de nuestro tiempo, ayudándoles a leer en
su corazón la infinita necesidad de Dios, Oremos.

2. Por nuestro obispo Tomás Carrasco, el padre David Vargas y todos los
sacerdotes para que, a imagen de Cristo, único sacerdote, sean
hombres de misericordia y se inclinen hacia la debilidad y el pecado del
hombre, para llevar con dulzura el perdón de Dios. Oremos.

3. Por las hermanitas de la Congregación Marta y María, ellas que


abandonaron todo por estar a Tú lado y al lado de los más necesitados,
ayúdales a ser fuertes y a seguir llevando el mensaje de amor a todos.
Oremos

4. Por los que administran la justicia y los gobernantes, para que amen la
justicia, busquen la verdad, trabajen con rectitud y se dejen mover por
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la urgencia de promover el bien de las personas y de la comunidad.


Oremos.

5. Por todos nosotros, para que cada suceso de nuestra vida nos vaya
sirviendo para descubrir a Dios en nuestra historia y aumentar nuestra
fe. Oremos.

III. LITURGIA EUCARÍSTICA


OFERTORIO
GUÍA: Regalar flores es una manera que tenemos las personas para decirle a
alguien que la queremos mucho. A nuestra Madre del cielo, le gusta que le
llevemos flores. Hoy venimos contentos a darle gracias de corazón, por todo
lo que con su cuidado maternal nos ayuda.
GUÍA: Pongamos ahora, sobre la mesa del altar, la ofrenda de nuestras
propias vidas, deseando que nuestro testimonio sea un verdadero ejemplo de
amor y servicio.
COMUNIÓN
GUÍA: Cristo, que mira el interior de nuestros corazones, quiere que le
recibamos con humildad.
Las personas que van a comulgar pueden acercarse, los demás pueden
sentarse. Cantamos.
MONICIÓN DE DESPEDIDA
GUÍA: Nuestra celebración ha terminado. Nos vamos con el compromiso de
profesar nuestra fe con obras. Nos despedimos cantando.
CANTO FINAL

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