IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 1

IFIGENIA que han delineado sus partes.

¡Qué armaduras! ¡Qué lanzas! ¡Qué estandartes!
El mal menor ¡Qué brazos! ¡Qué torsos! ¡Qué pantorrillas!
Me pasan a cien metros y me dan cosquillas.
Me miran de reojo y yo ya estoy desnuda.
Mariano Moro1
Tendría que atenderlos. Sola. Sin ayuda.
¡El resto de las griegas son tan pudorosas!
A mí que me perdonen. No entiendo yo esas cosas.
Personajes:
No quieren que las vean. Espían a escondidas.
La quieren ir de santas y son unas bandidas.
CORO (una mujer)
Todas en el alma llevan la misma roncha.
AGAMENÓN
Ven a los guerreros y les arde la conciencia.
MENELAO
Ellas tienen uno de su preferencia.
CLITEMNESTRA
Yo no. Yo miro a ése y ya me quedo con ése.
IFIGENIA
Eso es ser democrática, ¿no te parece?
AQUILES
Todos tienen lo suyo y yo no discrimino.
¡Mirá ese petisito, qué divino!
¿Será Diomedes?
Agárrame si puedes.
Escena I
Y están los dos Áyax,
SÓLO LA MUJER CORO.
¡vaya, váyax!
Merión, de la raza de Marte,
CORO (irrumpe excitada y entusiasta, oteando el horizonte;
que si te alcanza te par...
puede aparecer entre el público)
¡El auriga Eumelo!
-¡Cuántos, cuántos, cuántos griegos!
¡Como un caramelo
(al público) Algunos tienen cara de gallegos.
me lo llevo a la boca
Son miles de soldados que se van a la guerra.
si me toca!
¡Exhalan un aroma...! Estoy como una perra.
Y está Nireo,
¡Qué fuertes! ¡Qué jóvenes! ¡Qué bonitos!
el más hermoso griego
Firmes bajo las mallas adivino los pinceles delicados
después de Aquiles.
1
¡Son cientos, son miles
Material cedido por el autor. Edición a cargo de Mayra Ortiz Rodríguez para la
cátedra de Lenguajes Artísticos II (FAUD; UNMdP), con permiso del autor. con su escudo y con su lanza
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o con flautas y clarines - Conozco la neurosis de los poderosos

que me invitan a la danza! y sé perdonarla, cuando son hermosos.
(suena una flauta o lira tímida) Si tenés un ratito, yo te atiendo.
No hay palabras que describan lo que siento Asociá libremente y vamos viendo.
cuando un griego mete mano a su instrumento. AGAMENÓN
(la música se torna frenética y la mujer Coro danza con entrega, - De todos los griegos soy el más infeliz.
hasta que la entrada de Agamenón la sorprende y la interrumpe) CORO
- ¡Qué me decís!
Capitán de los ejércitos del Mundo
Escena II Llorando miseria como un vagabundo.
AGAMENÓN Y CORO AGAMENÓN
- Eso quisiera ser, y no un político.
AGAMENÓN (entrando) CORO
- Como envidio de los pobres la alegría. - Pensamiento crítico.
CORO (sonriendo) AGAMENÓN
- No lo dirás por la mía. - Voy del barro al sacrificio como un cochino.
Yo ya perdí la cuenta CORO
de los años que hace que no estoy contenta. - Pará. No me lo cuentes. Yo adivino.
AGAMENÓN Ya te miro las manos y te canto el destino.
- No se notaba en tu baile. AGAMENÓN
CORO - ¡Odio a los adivinos! ¡Son causa de desastre!
- Tampoco se notan las bolas del fraile CORO
y le cuelgan bien gordas bajo la sotana. - Yo no adivino más. Mi papá era sastre.
AGAMENÓN Un poquito que te coso, un poquito que cocino...
- ¿De qué hablas, insana? (Agamenón se lleva las manos a la cara)
CORO No te pongas a llorar porque se pudre todo.
- Visiones que tengo. Aguanto lo que sea menos tipos llorando.
Pispeo el futuro, mas pronto me vengo Relajate. Concentrate y me lo vas contando.
porque como la Grecia mítica no hay nada. Al final, todo se soluciona de algún modo.
AGAMENÓN AGAMENÓN
- No estoy con humores para la pavada. - Tú puedes ayudarme.
CORO CORO
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- Dalo por hecho. AGAMENÓN

AGAMENÓN - Dejame que te cuente.
- No sé dónde apoyarme. CORO
CORO - Pará que de la gola se me vaya este nudo.
- Hacelo en mi pecho. ¡La cierva sagrada! ¡Hay que ser pelotu...!
AGAMENÓN AGAMENÓN
- Dicen que no hay que confiar en gente baja... - No va que va Calcante...
CORO CORO
- Esos tontos prejuicios me los paso por la ra... - A ese viejo chismoso no hay quien lo aguante.
AGAMENÓN AGAMENÓN
- ...mas no tengo en quién más buscar apoyo. - Cualquier cosa que dice se la tragan los griegos...
CORO CORO
- Sonaste. Soy tu apuesta. Largá el rollo. - ¡Cuándo van a progresar estos borregos!
AGAMENÓN AGAMENÓN
- Todos los griegos arden por ir a la guerra... - Dice que la diosa, a cambio de la cierva...
CORO CORO
- Va a estar buenísima. - ¿Tanto lío por una cierva? ¡Ni que fuera Bambi!
AGAMENÓN Racconta. Lo solucionamo entrambi.
- Pero Artemisa no nos quiere dar el viento... AGAMENÓN
CORO - ...Exige un sacrificio aberrante.
- ¡Eso es un cuento! CORO
AGAMENÓN - ¿Una cabra? ¿Un lechón? ¿Un elefante?
- ...Porque yo le maté su cierva sagrada. AGAMENÓN
CORO - Mi hija Ifigenia.
- ¡Pero cómo te mandaste esa caga...! CORO
AGAMENÓN - ¿Ifigenia es la mayor?
- ¡Fue sin querer! Ya debe estar enor...
CORO ¿Te pide que masacres a tu hija?
- ¡Hay que tener cuidado, dejate de joder! A ese viejo cretino hay que cortarle la pi...
Ustedes los reyes hacen calentar a los dioses ¿Cómo va y te pide que rebanes a la nena?
Y ellos se descargan, veloces, AGAMENÓN
sobre el resto de la gente. - Calmate un poco.
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CORO O sea que conservo posibilidades.

- Tengo la paciencia llena. ¡Entonces Ifigenia es carne de cañón!
Perdón que me inmiscuya. Mirá que he conocido las calamidades,
Calcante, ¿querés niñas? Sacrificá la tuya. pero esto, de verdad, es un bajón.
O mejor, matate vos. ¿Por qué con las doncellas? ¿Podemos evitarlo?
¿Porque somos jóvenes? ¿Porque somos bellas? AGAMENÓN
Tanto que nos oprimen y nos atan a su cuerda - Ayúdame a lograrlo.
Nos vamos a rebelar contra estos viejos de mier... Esta carta, punto por punto,
¿Le habrás cerrado el pico, me imagino? cuenta la verdad del asunto.
AGAMENÓN Tiene que llegar a Clitemnestra.
- Fue lo que quise hacer, pero Ulises vino, CORO
escuchó lo que se hablaba y lo desparramó. - ¡Qué maestra!
Hasta el último entre los suyos se enteró. ¡Qué mujer con agallas!
No tuve más remedio que mandar a buscarla. AGAMENÓN
Le escribí a mi mujer... - Cuidado cuando vayas.
CORO CORO
- “Che, mandame a la nena, voy a sacrificarla”. - ¿Cuando vayas adónde?
AGAMENÓN AGAMENÓN
- Pidiendo que la envíe, sí: para su boda. - Van a querer seguirte, van a querer matarte...
CORO CORO
- ¿Boda real? ¡Qué lindo! ¡Tenemos joda! - ¿El coro, dónde se esconde?
¿Y quién es el novio? AGAMENÓN
AGAMENÓN - Tu vida no vale nada, ya lo sé...
- Aquiles. CORO
CORO - Sobre eso hay diversos puntos de vista...
- Uno solo entre miles. AGAMENÓN
Qué pena. Me gustaba para mí. -... pero yo sé que eres lista
AGAMENÓN Y le darás valor
- ¡Es una mentira que yo urdí! para salvar a mi hija
No hay boda, hay sacrificio. de este horror.
CORO CORO
- Casamiento ficticio. - La idea es muy prolija
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pero una muchacha sola ¿Qué dirán, cuando les cuente,

por estas rutas sin pavimentar nuestros pobres soldados?
yendo contra la ola CORO
de los griegos que quieren zarpar... - ¿Van a estar enojados?
AGAMENÓN MENELAO
- Ella es una princesa. Tú no vales nada. - ¡Orden y contraorden!
CORO CORO
- Haces que me sienta minusvalorada. - Un desorden.
Una chica sola por esos caminos... AGAMENÓN
AGAMENÓN (pone en sus manos las tablas) - No sé de qué me hablas.
- En tus manos están nuestros destinos. MENELAO
CORO - ¿Puedo ver esas tablas?
- ¡Cómo pesa este ladrillo! No llego ni a la esquina, AGAMENÓN
aunque quisiera. - ¿Qué tablas?
No arriesguemos la vida de esta pobre mina. CORO
¿Qué tal una paloma mensajera? - ¿Las tablas de la Ley?
¿Un e-mail? ¿Un fax? MENELAO
AGAMENÓN - Las que te dio tu rey.
- ¿Por qué no te vax, CORO
antes de que me ponga más nervioso? - ¿Este ladrillo? Yo se lo daría,
CORO no sabe lo que pesa.
- Tengo un dolor espantoso Pero yo no querría,
acá en la rodilla... en fin, no me interesa
contrariar a Agamenón,
porque es muy calentón.
Escena III MENELAO
MENELAO, AGAMENÓN, CORO. - ¡Dame acá! (la toma del pelo o similar)
CORO
MENELAO (haciéndose notar, estaba agazapado y escuchó parte de - ¡Pará! Bueno, tomá, tomá. (se las da)
la escena anterior) MENELAO (lee)
- ¡Qué maravilla! - Todos los griegos esperando a Ifigenia
Da gusto el comandante que traiciona a su gente. y el señor se las ingenia

para cambiar de plan y parecer.
CORO
- ¡Qué le vamos a hacer!
Tampoco va a estar un padre contento
si la hija se la cuecen al spiedo.
Callada me quedo.
MENELAO
- Agamenón, intento
ser calmo y razonable.
Mas no puedo,
permite que te hable:
voy a recordarte algunas cosas.
No todo son rosas
en la escala del poder.
El que quiere ganar
algo tiene que perder.
Fueron más que dudosas
tus maniobras electorales.
Trataste a los esclavos como a iguales.
Sonreíste a tus peores enemigos
¡niégalo si puedes!
Coqueteaste a las mujeres
para que convencieran a sus maridos.
¡Estrechaste tantas manos!
Las que otrora hubieras escupido
y le abriste tu casa a los gusanos.
¿Todo para qué?
Para juntar los votos de uno en uno.
Para ser general de toda Grecia
y que tu gloria no la empañe ninguno
al regresar triunfal
después de tamaña peripecia.
IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 6
Calumiaste a los otros candidatos,
repartiste oro, tela y patos...
CORO
- Cuac.
MENELAO
- ...entre toda la plebe
para que el ejército te lleve
como un dios esplendente a su cabeza.
Me quedo de una pieza
al ver que mi hermano mayor
que arriesga sin pudor
a miles de guerreros
malpierde su valor
por una niña
que de nada nos sirve en esta riña
más que para calmar a una diosa
altiva y rencorosa
que ¿por qué está enojada?
Por la cierva sagrada
que tú le mataste.
CORO
- ¡La cierva sagrada!
¡Hay que ser pelotu...!
AGAMENÓN
- ¿Terminaste?
Como hermano mayor
tengo cierta paciencia
pero se me va colmando.
¿Cuántos años te estuve malcriando?
¿Cuál es tu virtud? ¿Cuál es tu ciencia?
¡Ninguna! ¡Ah, sí! Me olvidaba.
Te casaste con la bella Helena

pero ¡qué pena!
Ella no se contentaba
con tus dotes de amante
y el primer caminante
troyano que pasó
te la robó.
Entonces recordaste
el estúpido juramento
que todos te hicimos
cuando te casaste.
Hay que ser jumento...
CORO
- ¿Que todos le hicimos?
Yo no juré nada.
¿Qué quiere decir jumento?
MENELAO
- Burro.
AGAMENÓN
-... Hay que ser jumento...
CORO
- ¡Burro!
AGAMENÓN
- ...Para no darse cuenta
de cuál es el curro
en este asunto.
Esa puta sedienta
que te puso los cuernos
a nadie le interesa.
CORO
- ¡Vamos al punto!
AGAMENÓN
- A lo que va esta empresa
IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 7
es al saqueo de Troya.
Queríamos mujeres, queríamos esclavos,
queríamos el oro...
CORO
- ¡Qué tramoya!
Joroban con el mito de recobrar a Helena...
¡lo que quieren es robar a mano llena!
AGAMENÓN
- ...Y tu mujer no es un tesoro,
lo saben los más pavos.
Tan sólo es una excusa
para poder decir a esa gentuza:
¿Ustedes nos quitaron algo?
¡Ahora venimos nosotros a quedarnos con todo!
¡Ay, cuánto valgo!
Exclamará tu linda prostituta.
De ningún modo.
Emprendimos esta ruta
Por el puro interés...
CORO
- ¿Entendés?
AGAMENÓN
- Y tu mujer no vale ni un suspiro.
CORO
- Ahora respiro.
Yo antes pensaba
que se iban a buscar a la atorranta esa
Y, la verdad, me había puesto celosa...
AGAMENÓN
- ¿Por qué iba a pagar Ifigenia
Tus broncas de cornudo?
MENELAO
 IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 8

- Hay que ser pelotu... Recuerda: los trataste hasta de maricones...

CORO CORO
- ¡Más respeto, que es tu hermano! - Si hay cada uno, más de cuatro,
MENELAO se meten en la carpa a cualquier hora
- Finge como un villano. con la excusa de que no hay viento,
No se trata de Helena mirá vos,
porque sea Helena. de dos en dos...
Se trata de que los bárbaros MENELAO
no toquen a nuestras mujeres. -... Y como un agonista en el teatro,
¿Acordarte no quieres Agamenón que reta, Agamenón que implora...
de que cuando el viento no soplaba No cejaste en tu intento
y la soldadesca se impacientaba hasta que resurgió la pasión guerrera.
todos querían volver al hogar Y ¿por qué era?
y no los quisiste dejar? ¿Por el honor de Grecia? ¿Por mi mujer?
Cantaban... ¡Dejate de joder!
CORO (canta) Era por tu gloria personal.
- Si no hay viento, si no hay viento, Te pareció muy mal
si no hay viento, si no hay viento, luego de haber soñado
nos volvemos a casita conquistar el mundo
y que nos unten con ungüento. volver sin haber peleado,
MENELAO frustrado, iracundo.
- Hasta esta infeliz tiene más memoria que tú. ¿Y qué pareces ahora?
CORO Una mujer cobarde
- ¿Por qué “infeliz”? Tampoco el abu... que llora
MENELAO (mientras amaga acogotar al Coro) porque la hija arde
- Pero tú, con desparpajo de demagogo... en el altar de la diosa.
CORO ¡La muerte más honrosa!
- ¡Me ahogo! ¿Acaso los príncipes más valerosos
MENELAO (la suelta) no van todos dispuestos a morir,
- Les gritaste “Gente necia, y sus padres, orgullosos,
¿tan poco os importa del honor de Grecia? los aplauden, gozosos,
¡Desnaturalizados! ¡Bribones!...”. diciendo: “¡No se vayan a rendir!”?
 IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 9

Si todos van dispuestos a inmolarse, CORO

¿Por qué Ifigenia tendría que salvarse? - Topacio.
A esa hija, ¿tanto la querés? MENELAO
¡Tenés otras tres! - Es el precio que pagamos
AGAMENÓN por el saqueo de Troya.
- ¡Pero ésta es la primera Nosotros ya no mandamos.
y es la que quiero más! Manda la gente que se solivianta.
Yo no crié a mis hijos para la hoguera. Ya todo el pueblo canta...
¿Vos no lo lamentás? CORO
¡También es tu sobrina! - “Sacrificio, sacrificio,
¿Tu corazón se inclina Sacrificio, sacrificio,
a que pague ella, inocente, O quemamos a la nena
los pecados de la puta de tu mujer? O haremos un estropicio”.
Ifigenia es decente, MENELAO
y es hermosa, - ¿Qué pasaría cuando Ifigenia no viniera
y es pura si, como pensaste,
como un botón de rosa enviaras la tablita?
que ansía ver la luz. La chusma traicionera
¡No me pidas que la arroje a la basura! (se quiebra) hambrienta de desastre,
MENELAO que siempre se desquita
- Me da repelús de la peor manera,
de verte así, hermano... correría a tu palacio
CORO más pronto que despacio
- Los ricos también lloran. por quemar a tu esposa y a tu prole...
MENELAO CORO
- Es mi sobrina, ¿cómo no la voy a querer? - ¡Un desbole!
CORO MENELAO
- El amor tiene cara de mujer. - ...Descargando toda la furia de esta contienda
MENELAO sobre tu hacienda,
- Rebelarte es en vano, degollando hasta al último de tus sirvientes...
los griegos no perdonan. CORO
Para mí también es una joya... - ¡Siempre tan educados y obedientes!

MENELAO
-... empezando por la ninfa mensajera.
CORO
- ¡Zeus no lo quiera!
MENELAO
- Entiendo lo que sufres y te compadezco.
¿Qué piensas?
AGAMENÓN
- Que me lo merezco.
Así piensan los dioses, y así obran.
Al que más ambiciona, más caro se lo cobran.
¡Ifigenia! ¡Ifigenia!
¿Cómo voy a mirarte yo a la cara
cuando llegues a Áulide y me digas...
Escena IV
IFIGENIA, AGAMENÓN, CORO
Ifigenia (entrando; sale Menelao)- ¡Papá!
¡Papá! ¡Papá!
Te veo
y no lo creo.
¡Qué alegría me da!
Me decían que la guerra durará diez años...
Que otros diez tardarías en volver...
¡Hacían los vaticinios más extraños
y yo no los quería creer!
¿Veinte años sin ver a mi papito?
Lo digo y lo repito
no hay cariño que me cuadre
como éste que yo siento por mi padre.
IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 10
Las criadas dicen que el mío es un complejo
y que si no lo dejo
nunca voy a estar preparada para el matrimonio.
¡Que se vayan al demonio!
¿Quién es Aquiles
comparado con el bello Agamenón?
Todos son viles
ante tu valentía.
¿Quién es más querendón?
¿Quién tiene más sabiduría?
Suerte grande la mía,
habiendo tanto señor bobalicón,
me ha tocado un padre como éste
que no tiene rival ni parangón.
AGAMENÓN
- Te ha tocado la peste.
IFIGENIA
- No digas eso. ¡Estás malhumorado!
¿No te alegras de verme?
¿Te sientes inerme
ante la envidia de los otros reyes?
¿No aceptan que son bueyes
comparados con tu inteligencia?
¿Qué no tienen ni tu fuerza ni tu ciencia?
¿Te fatigan con sus reclamos?
¡Que nada te importe!
Juntos estamos.
Deja que te reconforte.
Cuando no estás en casa
No hago otra cosa que pensar en ti.
El tiempo pasa...
CORO-
 IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 11

Nos vamos poniendo viejos... - ¿Tanto te aflige mi casamiento?

IFIGENIA Yo lo consiento
- ...Pero no para mí. sólo porque tú lo has querido...
Espero cada tarde que me traigas una rosa... ¿Por qué será que no hay viento?
CORO CORO
- Rosa de lejos. - ¡La cierva sagrada!
IFIGENIA Hay que ser pelotu...
-... O cualquier otra cosa. IFIGENIA
¿Qué más me da - ... Y si quiero un marido
si viene de papá? es porque pronto voy a darte nietos
Sigo siendo la niña que es feliz en tus brazos, valientes y discretos,
esos brazos tan fuertes... dignos retoños de la estirpe de su abuelo.
AGAMENÓN AGAMENÓN
- Que podrían deshacerte en cien pedazos. - Los dioses me están tomando el pelo.
IFIGENIA No proyectes tanto, Ifigenia.
- Podrían, pero no. Lo que el hombre sueña
Nunca lastimarías a tu favorita. rara vez el Olimpo lo concede.
Está mal que yo lo diga, Perdona que no me quede.
ya sé que somos tres... Tengo mil asuntos de los que ocuparme.
No hace falta deshojar la margarita. IFIGENIA
Mis hermanas, Zeus las bendiga, - ¿Ya vas a abandonarme?
aceptan resignadas lo que me querés. (Agamenón sale)
Yo pensé que al tener el varoncito No pude ni decirle que he venido con mi madre.
mermaría tu cariño algún poquito.
Pero no.
Orestes nació Escena V
Y la preferida sigo siendo yo. CLITEMNESTRA, IFIGENIA, CORO
AGAMENÓN
- No sabés el disgusto que vas a llevarte. CLITEMNESTRA (entrando)
CORO - ¿Cómo te fue con tu padre?
- Eso. Dejá de mandarte la parte. IFIGENIA
IFIGENIA - Más o menos.
 IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 12

Lo vi muy preocupado. - ¿Por dónde empiezo?

CLITEMNESTRA CLTEMNESTRA
- Con que ésas tenemos. - Los detalles son miles...
El viejo está amargado ¡Mas cuéntanos de Aquiles!
porque le quitan a la nena. Es un oprobio
¡Qué pena! ¡Qué pena! no conocer al novio.
Vas a ver cómo se le pasa CORO
en cuanto se entere de que vine yo. - Es hijo de la diosa Tetis, y de Peleo.
Ya no va a estar amargado. Lo educó el centauro Quirón.
¡Va a estar furioso! IFIGENIA
Si será tarado - ¡Qué bajón!
este machista asqueroso. Ser educado por un caballo.
¡Prohibirme que viniera! CLITEMNESTRA
¡Se casa la primera! - Me desmayo.
¡Quedarme en Argos yo, papando moscas! Ese caballo es más sabio
CORO que cualquier humano macho,
- Anticipo toscas. Y no es para sorprenderse,
CLITEMNESTRA si lo pensamos un cacho.
- A vos te conozco. CORO
CORO - La madre de Aquiles no quiso
- Desde que nací, que luchara en la guerra
serví en su casa. y entonces, la muy perra,
CLITEMNESTRA ¿saben lo que hizo?
- Suerte que lo decís Lo camufló de doncella
si no me enrosco ¡Era la más bella!
tratando de recordar Y lo tuvo escondido,
dónde vi yo antes esa cara pero al menor descuido
y no estoy como para se apareció el Ulises...
perder el tiempo en eso. CLITEMNESTRA
Vos me vas a ayudar - ¡Qué me dices!
a preparar la boda. CORO
CORO - ...con armas y con bijouterie
 IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 13

y mientras todas las otras se peleaban, CORO

dame acá, salí, salí, - ¡Porque me lo imagino!
por esas joyas que las obnubilaban, ¿O es que a eso tampoco tengo derecho?
Aquiles fue derecho al armamento. IFIGENIA
En ese momento, - No te lo tomes a pecho.
Ulises le palpó la pisto... Es que dabas tanto detalle.
CLITEMNESTRA CORO
- ¡Qué momento! - No querrías que me calle.
CORO Digo sólo lo que cuentan por ahí.
- Y ahí se supo Algo me preocupa y no puedo callarlo.
que era una niña de grupo No es por difamarlo.
porque parece que tiene una tarari... ¿Por qué nunca lo vi?
IFIGENIA Está siempre en la carpa con su amigo Patroclo.
- ¡Basta de historias! Yo quiero saber... Me parece que a esos dos les gusta el choclo.
Si es buen mozo. CLITEMNESTRA
CORO - No lo creo. Dejate de macanas.
- ¡Es hermoso! No nos vengas con verduras americanas.
Es alto, es rubio, es fuerte,
capaz de levantarte y sostenerte
con el dedo meñique, Escena VI
la espalda como un dique, AQUILES, IFIGENIA, CLITEMNESTRA, CORO
elegante como un ave,
la piel extra suave... AQUILES (entrando)
IFIGENIA - ¡Agamenón! ¡Agamenón!
- ¿Cómo lo sabes? IFIGENIA (escondiéndose, al Coro)
¿Lo tocaste? - ¡Qué papelón,
CORO un hombre aquí!
- Me mataste. No dejes que me vea. Cubremé.
¿Cómo lo voy a tocar, si nunca lo vi? CORO
IFIGENIA - Así lo haré.
- Me perdí. Lo importante es que me vean a mí.
Entonces, ¿por qué lo describes? AQUILES
 IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 14

- ¡Mujeres! Se supone no las haya... - Y tú te has prometido a mi Ifigenia.

Agamenón, si serás canalla... AQUILES
Derrochar tu energía en prostitutas. - Está loca, delira, sueña.
CLITEMNESTRA Esa fantasía, ¿de dónde la sacó?
- Tus palabras no son astutas. CLITEMNESTRA
Ya verás que muy pronto te arrepientes. - Mi marido nos escribió.
Dime cómo te llamas y que lo sientes. AQUILES
AQUILES - ¿Y su marido me casa sin consultarme?
- ¿Que Aquiles se arrepienta? Zeus no lo quiera. CLITEMNESTRA
¿Quién es usted, si no es una ramera? - ¿En qué costas absurdas hemos atracado?
CLITEMNESTRA ¿No estás enterado?
- ¡Aquiles! Tu suegra soy. Tengo que calmarme.
AQUILES Mi cerebro piensa, mas no encuentra
- Soltero estoy. posible explicación a esta vergüenza.
CLITEMNESTRA CORO
- Por poco tiempo. Pronta es tu boda. - Mirá que la nena es linda.
AQUILES AQUILES
- No me joda. - Me importa una guinda.
No son tiempos de amor, sino de guerra. Yo estoy para lanzas, no para besos.
Me conformo con Patroclo y con mi perra Voy a degollar a todos los troyanos esos,
por ahora. y después, si sobrevivo, buscaré
CLITEMNESTRA a la mujer con quien me casaré.
- ¡Qué arisco se muestra! No lo va a decidir Agamenón.
Si supieras tú quién soy... (al Coro) Y tú, ¿qué miras?
AQUILES CORO
- ¿Quién es? - Miraba tu talón.
CLITEMNESTRA ¿Así que sos el hijo de la diosa Tetis?
- Soy Clitemnestra, Yo no soy diosa, pero tengo un lindo par.
mujer de Agamenón... CLITEMNESTRA
CORO - No hay noviazgo. No hay banquete. No hay confetis.
- Ese señor malhumorado, mandón... Este enredo me lo tienen que explicar.
CLITEMNESTRA Tú, ¿sabes algo?
 IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 15

CORO - ¿Algún animal en especial?

- Como sé relinchar cuando cabalgo (relincha). CORO
CLITEMNESTRA - Ifigenia. Si no recuerdo mal.
- ¿Y no me lo pensabas contar? CLITEMNESTRA
CORO - Ifigenia... ¿tiene que estar presente?
- Si te cuento, no te va a gustar. CORO
Parece que sin querer, Agamenón le mató a Artemisa - Ifigenia será quien no lo cuente.
la cierva sagrada... CLITEMNESTRA
AQUILES - Mi corazón no quiere que colija...
- ¡Hay que ser pelotu...! ¿Ese cerdo inmundo va a entregar...?
CORO IFIGENIA (irrumpiendo)
- ¡No es cosa de risa! - ¿... a su hija?
La diosa se calentó, y le birló el viento. No lo creo. Debe ser mentira.
Desde entonces, todo intento Mi papá es todo amor cuando me mira.
de la flota por zarpar, ha sido en vano. CLITEMNESTRA
AQUILES - Y hoy, cuando lo viste, ¿te miraba?
- Ése cuento ya lo sé, IFIGENIA
vamos al grano. - Con dolor o malhumor hoy me esquivaba.
CORO CLITEMNESTRA
- Por el principio empecé. - ¿Y Zeus no lo fulmina con un rayo?
Cuidá bien tu talón, no seas engreído Ese perro, ese cerdo, ese caballo
que vas a pagar caros tus descuidos. del amor de padre no guarda memoria
Si vos y tu amigo no vivieran escondidos y te va a sacrificar para su gloria.
haciendo no sé qué Aquiles, tú eres el más fuerte,
sabrías también el resto. el más admirado de nuestros guerreros,
CLITEMNESTRA el primero entre los primeros.
- Acabemos con esto. Como madre ya empecé a quererte.
¿Qué tengo que saber? Usaron tu nombre para matarla.
CORO ¿No vas a salvarla?
- Para que Artemisa desactive el maleficio Si no lo haces, su sangre virgen te manchará
Calcante nos exige un sacrificio. y por siempre Grecia recordará
AQUILES que la novia de Aquiles fue traída
 IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 16

con sucios engaños a perder la vida. Ifigenia, niña, no me llores,

(al coro) Y tú... tú eres del pueblo, no querrá la gente bálsamo seré de tus dolores.
que los reyes hagan esto a una inocente. No fue azar venir aquí,
Iré casa por casa con el alma desnuda era el destino.
a juntar a las madres en mi ayuda. Así lo comprendí
Iré a todas las casas y a todos los altares cuando te vi.
de los dioses de los cielos y los mares... Ante tu pena y tu candor me inclino
AQUILES pero ante nadie más (amaga irse).
- Clitemnestra: no tienes que humillarte. IFIGENIA
Aquiles Semideo está de tu parte. - ¿Adónde vas?
El destino de tu hija me conmueve Tu suerte está echada
y el honor me pide que al altar la lleve si asumes la defensa de la condenada.
no para Calcante, no para Artemisa... AQUILES
CORO - Soy Aquiles, no un cordero (amaga irse).
- ¡Para que te cocine y te planche la camisa! IFIGENIA
AQUILES - ¡No te alejes! Piensa primero.
- Sí. La pido por esposa. No podrás solo contra el mundo entero.
Es joven. Es pura y es hermosa. AQUILES
Si para novia mía la llamó - Tengo conmigo a los mirmidones.
hago de cuenta que me lo prometió. CORO
CLITEMNESTRA - Esos tienen una pinta de marico...
- ¿Y si los matones vienen a buscarla? IFIGENIA
AQUILES - Para el resto, los tuyos son muy pocos.
- Mi brazo poderoso sabrá rescatarla. CLITEMNESTRA
CORO - ¡Ulises los pondría como locos!
- Ahora que lo dices, AQUILES
¿qué pasó con tus bíceps? - Es verdad. Puede haber mala revuelta
No se enoje ni me dé con el rebenque. pero mi voluntad está resuelta.
Para tanta fama lo vemos algo enclenque. IFIGENIA
AQUILES - No quiero que te lastimen.
- Más vale maña que fuerza. AQUILES
Y a firme voluntad, no hay quien la tuerza. - Ni yo creo que puedan o que se animen.

Por más que se amotinen o que metan bambolla,
por mucho que se embalen,
tan sólo por mi brazo ha de rendirse Troya,
todos lo saben,
y si quieren triunfar, será suicida
que se atrevan contra un pelo de mi prometida.
IFIGENIA
- Si enfrentas a los griegos, será el desmadre.
Tal vez, si yo hablo con mi padre,
General de todos, él encuentra la manera...
AQUILES
- Zeus así lo quiera.
Que supliques a él será sensato.
Pero si no te escucha, yo lo mato. (se va)
Escena VII
IFIGENIA, CLITEMNESTRA, CORO
CORO
- Con qué decisión amenazó.
CLITEMNESTRA
- Si no lo mata él, lo mato yo.
CORO
- Con Aquiles de tu parte, la cosa está arreglada.
IFIGENIA
- ¿De verdad lo crees?
CORO
- Ni un poquito. Estás cocinada.
Más vale que supliques a que berrees.
Ya verás cómo derrama gruesas gotas.
CLITEMNESTRA
IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 17
- Si no llora por vos,
Llorará cuando le corte las pelo...
IFIGENIA
- Mamá, no te pongas violenta.
CLITEMNESTRA
- Mi corazón lo intenta
pero toda mi sangre está que trina
por el dolor, el miedo, la rabia, la inquina
contra tu entregador.
Escena VIII
AGAMENÓN, CLITEMNESTRA, IFIGENIA, CORO
(aparece Agamenón)
CLITEMNESTRA
- ¡Vaya! Aquí lo tenemos al señor.
AGAMENÓN
- ¿Qué hace esta mujer aquí?
CLITEMNESTRA
- Soy tu mujer, aunque nunca lo pedí.
La vida, que nos da tragos amargos.
AGAMENÓN
- ¿No mandé que te quedaras en Argos?
CLITEMNESTRA
- ¿Qué madre se ausenta en las nupcias de su hija?
AGAMENÓN
- La que obedece al marido, como corresponde.
Él decide quién, cuándo, cómo y dónde.
CLITEMESTRA
- Sabio rey, permítame que lo corrija.
Abandonan a sus hijos los que no los quieren.

¿Ifigenia se casa? Su madre está con ella.
Y si negros designios interfieren
con la bella boda que se nos anunciara,
si un mal cambio de plan se avecinara,
no dudes que en mi amor habrá querella
y guerra y venganza y fin del mundo.
No dudes, capitán, por un segundo
de que voy a luchar como leona.
AGAMENÓN
- Tu cerebro no razona.
Éste es un campamento de guerreros
y no es buen lugar para las damas.
CLITEMNESTRA
- A Ifigenia sí la reclamas.
AGAMENÓN
- Es distinto.
CLITEMNESTRA
- En Áulide, en Atenas y en Corinto
Es lo mismo.
Si no tengo que estar, ella tampoco.
AGAMENÓN
- No me pongas loco.
Detesto tu carácter cuando se endemonia.
Déjame a mí a cargo de la ceremonia.
Te dejé a cargo de mi palacio,
de mi reino y de mis hijos.
CLITEMNESTRA
- Para que esperen, educados y prolijos
que los mandes a matar uno por uno.
¡Basta de fingir, batracio!
¡Tan bonita que será esa ceremonia!
Mirame a los ojos y decime
IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 18
que no vas a matar a nuestra nena.
Mirame a los ojos y decime
que no vas a matar a nuestra nena.
¡ Mirame a los ojos y decime
Que no vas a matar a nuestra nena!
Tu silencio te condena.
¿Querías gloria? Grande será tu hazaña.
Que lo pague la más débil no me extraña.
Cuando mates a tu Ifigenia bien podrás ufanarte.
Partirás hacia Troya liberado y gozoso.
Volverás a mi casa en busca de reposo.
¿Cómo se supone que tengo que esperarte?
¿Con el lecho limpio? ¿Con suaves caricias?
¿Celebrando de la guerra las noticias?
¿Implorando por ti en algún altar?
¿A qué dios en particular?
Pon ahora en mis ojos tus dos ojos fijos
Y dime:
¿a qué dios le rezan los que matan a sus hijos?
Vamos, no seas tímido. Dime:
¿a qué dios le rezan los que matan a sus hijos?
No te olvides nunca que te lo avisé:
si tocan a Ifigenia, yo te mataré.
Por la vida de Ifigenia, ¡yo te mataré!
IFIGENIA (avanzando)
- Madre, no amenaces.
Tú no harás tal cosa. No hará falta.
Tengo a mi padre en la más alta
estima. Padre: quiero que me abraces.
Siempre tienes para mí tu pecho abierto.
Sé oír tu corazón. Él me dirá
que nada de esto es cierto.
 IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 19

Tu amor inmenso me protegerá. Tendrás que resignarte al mal menor. (se va)
Yo no quiero morir.
Mi vida no ha empezado todavía.
Soy yo la que riega las flores de la casa. Escena IX
La que enseña a mi hermano sus primeras palabras. CLITEMNESTRA, IFIGENIA, CORO
Hasta hoy, todo en mis sueños era el ancho futuro.
Hoy he mirado a un hombre por primera vez. CLITEMNESTRA
Dijo que me defendería de todo y contra todos. - ¿Tendrás que resignarte al mal menor?
¿Es que un desconocido me ama más que mi padre? CORO
No. Mi padre es el omnipotente rey de todos los griegos - Ifigenia: tu papito se marchó.
Y yo sé que me quiere más que a nada en el mundo. CLITEMNESTRA
Yo no quiero morir. - Cuando vuelva de Troya, yo lo mato.
No pedí ser preferida, no pedí ser princesa... CORO (siempre a Ifigenia)
Pero no quiero morir. - Hay que charlar, cantar, bailar un rato...
¿El que me dio la vida me la quita? CLITEMNESTRA
Padre, si me has entregado, no me des la espalda. - Maldita sea la madre que lo parió.
Dame tus ojos y tus caricias. Dame tus brazos. CORO
La fuerza para enfrentar a los verdugos - El xeite de la súplica no resultó.
¿dónde podré encontrarla, sino en tus brazos? ¿El amor? ¿La vida? Todo son quimeras.
¿Cómo voy a subir al monte sanguinario? CLITEMNESTRA
No quiero andar gritando para tu vergüenza. - Voy a cortarle las bolas con unas tijeras.
No querré llorar, y no podré evitarlo. CORO
Yo no soy fuerte, padre. Estoy temblando. - La vida aburre. Lo mejor viene después.
Padre mío, padrecito mío: CLITEMNESTRA
Yo no quiero morir. - Voy a prenderle fuego en la barba y en los pies.
AGAMENÓN CORO
- Ifigenia: no hay gesto, no hay locura, no hay hazaña - Acá somos muy griegos. Los chinos, con Confucio...
que yo no acometiera si pudiera salvarte. CLITEMNESTRA
Una sola cosa tenemos por segura. - Voy a arrancarle neto con los dientes el prepucio.
Todos en la tierra estamos condenados. CORO
A ti te ha tocado antes de tiempo. - Pero también aquí vendrá el modelo estoico.
No querrás que maten también a tus hermanos. CLITEMNESTRA
 IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 20

- Ya tiene buen motivo para andar paranoico. CLITEMNESTRA

IFIGENIA
- Madre, basta. Si ya estoy condenada
tus palabras no me ayudan para nada.
CORO
- Si pudieras contar con los derechos civiles...
Escena X
AQUILES, IFIGENIA, CLITEMNESTRA, CORO.
AQUILES (entrando)
- Ifigenia: sólo cuentas con Aquiles.
No me siguió ni uno de los mirmidones...
CORO
- Esos son una manga de marico...
AQUILES
- Todos los hombres saben de la cierva sagrada...
CLITEMNESTRA Y CORO
- La cierva sagrada,
Hay que ser pelotu...
AQUILES
- Quise pensar un plan. No se me ocurre nada.
Me resultan todas tontas las ideas que enhebro.
CORO
- No tiene lomo, no tiene bíceps, no tiene cerebro...
Al final, la fama es puro cuento.
AQUILES
- Yo solo con mi cuerpo los enfrento.
Si vienen a por ti, estaré delante.
Mataré a los verdugos y a Calcante.
A Menelao, a Ulises, a Agamenón...
- Ése dejámelo a mí.
AQUILES
- Mataré hasta al último mirmidón...
No dejaré a ninguno si es por ti.
CORO
- A Patroclo no lo mencionás.
AQUILES
- ¿Por qué no te callás?
Patroclo es el único que me apoya.
CORO
- ¡Dios mío! Con qué hombres conquistaremos Troya...
AQUILES (al Coro)
- Te voy a partir el alma.
IFIGENIA
- Aquiles, no le pegues. Yo estoy calma.
Vivir por no morir no me interesa.
Enfrento mi destino. Soy princesa.
También yo soy valiente. También griega.
Para los bárbaros llega
la hora de la derrota.
Seré un soldado más. Como una nota
en la melodía de tu victoria.
Seguiré respirando en tu memoria.
Pensaré en ti hasta el último segundo
y pediré por ti en el otro mundo.
La vida es sólo un sueño que se sueña.
AQUILES
- En mi sueño quedas tú, pobre Ifigenia.
Cuando toque pelear...
IFIGENIA
- ¿En quién vas a pensar?
 IFIGENIA El mal menor - Mariano Moro 21

AQUILES en la medida que la luz se va extinguiendo, hasta que, en la

- En Ifigenia. oscuridad total y el silencio, Ifigenia grita.
IFIGENIA Música. Vuelve la luz y la actriz Coro inicia la danza. La siguen los
- ¿Por quién vas a luchar? actores que interpretaron a los personajes. Ifigenia por último.
AQUILES La danza contrarresta el dolor y deviene saludo.
- Por Ifigenia.
IFIGENIA
- ¿Y a quién vas a extrañar? Off (melodrama)
AQUILES
- A mi Ifigenia. CORO
IFIGENIA - Clitemnestra, ¡buenas noticias! Andan diciendo que la diosa...
- Ahora vete de aquí. Quiero estar sola. CLITEMNESTRA
Sola sabré mejor lo que es quererte. - Qué bonita historia. ¿Es posible creer algo así? Tú, ¿qué crees?
Morir ya no es morir. Será perderte. CORO
Hacia la muerte voy, como la ola - Creo que los hombres nos engañamos unos a otros,
con el sonido de la caracola pero más nos engañamos a nosotros mismos;
busca la arena donde está su muerte que sembramos cuatro flores cuando arrasamos diez bosques,
y no quiere llorar. Ésa es su suerte. que envenenamos el agua, pervertimos el cielo
Huyan todos de mí. Quiero estar sola. y algunas veces matamos a nuestros hijos.
Un camino empinado es lo que queda. VOZ
Un agudo terror y un desconsuelo. - Aquí termina la historia de Ifigenia, una historia que nos viene del
El sabor dulce de lo que es fugaz, principio de los tiempos, y que hoy hemos dado en llamar:
la ausencia de una piel como de seda, “El mal menor”.
nostalgias de caricias en mi pelo
mi canción infantil... y nada más.

Todos menos Ifigenia (que tararea su canción, dándose ánimos), Fin

como un coro, repiten “Ifigenia... Ifigenia... Ifigenia..." Empiezan
como quienes la quieren, la consuelan y lamentan su pérdida y
pasan gradualmente, subiendo el volumen y acelerando el ritmo, a
ser los verdugos que la vienen a buscar (pueden sumar tambores),