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Heterofonía 79, México, octubre-noviembre-diciembre de 1982
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Autor, "Título del artículo", Heterofonía 79, México, octubre-noviembre-diciembre de 1982, pp. #-#
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HOMENAJE A MANUEL M. PONCE


1882-1982

CENTENARIO DE SU NACIMIENTO
Hoy debemos ocuparnos de Manuel M. Ponce, ya que las efemérides
influeyen constantemente en el quehacer periodistico. Además, nuestra
patria es la nación de las conmemoraciones, del "Año de", situación que
permite justüicar el olvido anterior y lograr (por el camino de la satu-
ración y el hastio que provocan las festividades) el abandono posterior.
Según han demostrado, en distintas épocas y con diverso método, Jesús
C. Romero y Cristian Caballero, Manuel Maria Ponce nació el 8 de di-
ciembre de 1882.
Es muy probable que Manuel M. Ponce sea el compositor más va-
lioso de México, aún más preciado para este pais que el genio deslum -
brante de Silvestre Revueltas, ya que su obra es la más homogénea, la
más sólida, la más continua, la más sincera y tal vez la más "artistica"
de las que se han hecho en México, a pesar de sus muchos altibajos
estéticos, que son -por otra parte- un muy natural elemento de un
ciclo temporal continuo que se extendió durante más de cuarenta años
de ininterrumpida creación. Ponce recorrió muchos estratos en su camino
de compositor, desde el decadente romanticismo de salón expresado en su
Concierto para pia no, producto de un arte ya extinto que seguia practi-
cándose en México, muy transformado pero no por la evolución sino por
la corrupCÍón estética, más de medio siglo después de su eliminación en
Europa, de donde habla sido importado mediante los rumores y la imitación
extralógica. De tan endeble posición artistica Pon ce llegó a la elegancia
más refinada en su obra pianistica, bien representada por la Mazurka
XX III , para citar un solo ejemplo.
Tambi én continuó el trabajo pionero de varios pianistas-compo-
sitores mexicanos del siglo XIX y dedicó mucho tiempo y trabajo a la
transcripción de la música vernácula y su elaboración en moldes forma les
europeos. Su evolución no se detuvo donde otros habian parado. Legó
al mundo una importante obra para la guitarra, bien aleccionado por
Andrés Segovia, el guitarrista más importante de la historia y accedió
a la verdadera modernidad por sus propios medios, situación bien com-
probada en su estupendo Concierto para violín y or questa, en el que la
cita de la reconlrafamosa Est rell ita (prueba máxima de su talento como
comunicador) borda complicaciones técnicas e ironias artisticas sin cuenta.
El trabajo de Ponce como investigador, periodista , musicólogo y
folklorista fue de admirable nivel, sobre todo porque se realizó en un
pais sin modelos, en el que su obra era singular y no necesariamente
apreciada por la generalidad. Tal vez no fue debidamente respetada por-
que resultaba prácticamente incomprensible para la mayoria de sus
compatriotas.
Es muy importante que la presencia de Ponce en la música me-
xicana haya alcanzado un centenario. Más importantt) será para la
cu ltura nacional el segundo centenario, si es que dentro de un siglo hay
todavia una civilización que comprenda los conceptos de arte y cu lt ura.
En cuanto a los rapsódicos homenajes que este año le han dedicado las
instituciones que lo tuvieron sepultado los sesenta años anteriores a tan
cacareado centenario, debemos pensar que serán similares a los otros
homenajes que han tributado a otras tantas personalidades artisticas: se
habla mucho, se hace poco y lo que se hace no configura la base de una
difusión permanente, racional y constante, justo como nunca se hizo antes
y como no será realizada después. Se nos enfrenta únicamente a los
esporádicos y espasmódicos atracones de un solo autor, que tampoco
tienen la seriedad de una revisión enciclopédica o la buena voluntad del
que rescata con firmeza, devoción y valor lo que cree digno de atención
sino tan solo nos entregan arrebatos emocionales de inseguridad que po;
otro lacio son una flagrante expresión de ignorancia. '

JORGE VELAZCO
CENIDIM
01 FUSION

HETEROFONIA
79 REVISTA MUSICAL TRIMESTRAL
Organo del Conservatorio Nacional de Música
VOLUMEN XV, SEGUNDA EPOCA
Octubre-Noviembre-Diciembre de 1982 / No. 4
Directora: ESPERANZA PULIDO

Administrador: PABLO FERNANDEZ FLORES

COLABORARON EN ESTE NUMERO:

CRISTIAN CABALLERO
ROBERT STEVENSON
UWE FRISCH
RAYMOND LOPEZ
CARLOS VAZQUEZ
PAOLO MELLO
CARMEN SORDO SODI

Cada autor es responsable de sus opiniones.

PRECIOS DE SUSCRIPCION:
REPUBLICA MEXICANA EXTRANJERO

Número Suelto ............. " $ 110.00 Número Suelto ...... Dlls. U.S. $ 6.00
Un año (cuatro números) ...... $ 400.00 Un Año ... .. ....... Dlls. U.S. $ 22.00
Número Atrasado ............ $ 120.00 Número Atrasado .... Dlls. U.S. $ 7.00

Registrado como correspondencia de Segunda


Clase por la Dirección General de Correos,
con fecha 28 de marzo de 1968, bajo el nú-
mero 1242.

Instituto Nacional de Bellas Artes, Coordinación Gral. de Educación Artística


Conservatorio Nacional de Música.
Presidente Mazarik No. 582
México 5, D. F. - Tel. 520-10-13
Apartado Postal 105-164, México, D. F.

-1-

CENIDIM
DJFUSfON
HET E ROFONIA

Revista mu sica l trime stral


79

s M R 1

] R E VELAZO
Editorial . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
ACfA DE B UTISMO DE M L M. PO CE . ............ ... . 4
RISTrAN AB LLER
La fecba cierta del nacimiento de Manuel M. Poncc 5
RUBEN M. CAMP S
Manuel M. Ponce . ....... . . ... . .. ......... . . . ................. 6
MANUEL M. P CE
8

10

[anuel L Ponce y el piano . . .......... . .................. . .. . . 14


UWE FRI H
lanuel 1. Ponce ........ . . . . . 22

.......... . .................. 24
lanuel M . Ponce \'i lo por un prole r no rteamericano de a cendencia
.................. ....... 30

¡nve ti ci ric de, ranuel M . Ponce .......... . 36


RectificaCIón de alguno organi la me ican ............ . 40

............ . 44
o •• o •••••••••• 4f!
......................................... . . 50
...................................................... . ...... . 52
. .......................................... . ........................ . 54
... . .... . ......... . ...................................... . ............ 57

f., dllfaote I me de junio y j lio de 1982 .. .. 59

-2-
EDITORIAL

En esta época, que tiende, un tanto vacilan- fusión del resto de su obra, ya que adhieren
te,a realizar una mayor afirmación del elemen- una etiqueta formal a un mundo creativo mu-
to mexicano en la música nacional, la vigencia cho más amplio y variado que el estrecho co-
de la obra y figura de Manuel M. Ponce ad- rredor en que se mueven. Sin embargo, al igual
quiere una proporción insospechada en perio- que obras muy concretas de Bach, Mozart,
dos anteriores. En efecto, Ponce logró hallar Beethoven, Schubert, Schumann, Ravel y Chai-
un camino propio, conjungado con diversas fa- kovski, Estrellita es una prueba inmediata y
cetas de las expresiones musicales de la nacio- poderosa del talento comunicador de Pon ce,
nalidad mexicana, que pudo recorrer en evo- misma facultad que le permitió la creación de
lución constante, hasta llegar prácticamente a obras de otro nivel, que si bien carecen de la
otro polo del punto de partida, en una síntesis facilidad multiplicatoria de la canción, ganan
de modernidad y herencia tradicional que no en cambio una profundidad y una intensidad no
tienen paralelo, aunque sí antecedente, en la necesariamente común entre los creadores de
historia de la música mexicana. música. Pon ce fue tal vez un músico demasiado
refinado, cuyas obras no se pueden apreciar de
Es indudable que una de las más interesantes
inmediato y con facilidad en su verdadera di-
aportaciones del presente número de HeterofonÍa
mensión. Por eso sería necesario que la obra
es el esclarecimiento indubitable, publicado gra-
de Ponce fuera tocada no con frecuencia, sino
cias al acucioso trabajo investigador de Cristián
con insistencia, hasta que la reiteración de sus
Caballero, de la fecha de nacimiento de Ponce,
conceptos provocara la familiaridad que causa
cuya determinaci6n presta una perfecta certeza
la supervivencia estética de los compositores.
onomástica a la sección de investigación, dedi-
Si se llegaría a este punto nos está vedado de-
cada íntegramente al tema de Ponce. La publi-
cir, ya que el verdadero valor de una obra no
cación de la nota sobre el Ponce literato, escrita
puede ser juzgado sino por muchas generacio-
nada menos que por Rubén M. Campos, y la
nes a lo largo de la historia y su permanencia
inclusión del artículo sobre la Música Mexicana
dependerá siempre de la calidad de comunica-
del propio Ponce, son también puntos de espe-
ción que pueda establecerse entre un autor y el
cial interés, ya que fueron publicados por única
público.
vez en el año de 1917, y nos entregan una vi-
sión de Ponce que se borró del panorama cul- Pero es un hecho que la música de Ponce
tural mexicano en los años posteriores a la Se- tiene el nivel necesario para merecer esa opor-
gunda Guerra Mundial. tunidad y también es un hecho que las institu-
El resto de los artículos acerca de la obra ciones nacionales se hallan obligadas a proveer
de Ponce, nos revela un cuadro creador que re- de las instancias requeridas para lograr una ver-
sulta prácticamente desconocido para la mayo- dadera divulgación de su, hasta ahora, casi des-
ría de los mexicanos, quienes usualmente no conocida obra creativa.
van más allá de las repercusiones del prestigio De esa convicción nace este número, que tal
musical de Ponce y de la familiaridad con muy vez podrá traer a diversas almas la curiosidad
escasos fragmentos de la obra para piano. Es- básica para desear al menos una leve aproxi-
trellita es uno de esos entes melódicos que tras- mación a la música de uno de los autores más
cienden de tal manera al compositor que se importantes del siglo XX mexicano.
convierten en una verdadefll plaga para la di- JORGE VELAZCO

-3-
o loe E s J S TI E Z A eA T E eA s
Parroquia de Nuestra Señora de la Purificación
Apartado Postal 24 Teléfono 2-03-08
Fresni1lo, Zac. México

El párroco que suscribe, certifica en debida forma de derecho, que en el


archivo a su cargo en el libro diez de Bautismos de esta Cabecera, en la página
sesenta y tres, se encuentra un acta del tenor siguiente: ... ... ... . ..
Al margen: Manuel M. Ponce.- Dbre. 12.- Sr. Cura.- Al Centro: En la
Iglesia Parroquial de la ciudad de Fresnillo, á doce de Diciembre de mil ocho-
cientos ochenta y dos, yo el Presbítero Agustín Escalante y Espinosa, Cura in-
terino de esta Parroquia bauticé solemnemente y puse el Santo Oleo y Sagrado
Crisma á Manuel Ma., nacido en esta ciudad el ocho del presente, á las once
de la noche, hijo legítimo de Felipe Ponce y Maria de Jesús Cuéllar.- Abue-
los paternos Antonio Ponce y Ma. Dolores Ponce.- Maternos Dionicio Cué-
llas y Marciana de Alfara. Padrinos José Aguirre y Ma. Dolores Arce, a quie-
nes advertí su obligación y parentezco espiritual. Y para constancia 10 firmé:
Presbítero: Agustín Escalante y Espinosa. ... ... ... ... ... ... ... ..
A petición del interesado y para los usos legales que al mismo convengan, se
le extiende esta copia fiel de su original, en la ciudad de Fresnillo, Zacatecas,
México, a los veintisiete días del mes de Abril de mil novecientos ochenta y dos.-

¡ El P~rroco. -

T6..~~
-4-
LA FECHA CIERTA DEL NACIMIENTO
DE MANUEL M. PONCE
CR1STlAN CABALLERO

Con motivo de la celebración del centenario ser lo más probable, que los archivos hubieran
del nacimiento de Manuel M. Ponce, se volvió sido perdidos o destruidos durante la Revolu-
a agitar en el medio musical la discusión res- ción, el caso es que no podía obtenerse el do-
pecto de la verdadera fecha de ese nacimiento, cumento oficial en cuestión.
que el maestro Jesús C. Romero fijó, pero sin
dar pruebas de su afirmación, en 1882. Pero la misma Ley señala, y es práctica cons-
tante, que cuando no existen constancias del Re-
Sin embargo, no todos aceptaban esa fecha,
gistro Civil, las actas parroquiales, debidamen-
sobre la que existían datos contradictorios. Por
te certificadas, hacen legalmente prueba plena.
ejemplo, la Historia de la Música de Alba He-
El camino resultaba obvio: investigar en los ar-
rrera y Ogazón, obra ingente, tal vez la prime-
chivos parroquiales de Fresnillo, tanto más que
ra que en México se abocó a la exhaustiva ta-
tal investigación se facilitaba por el hecho de
rea de describir la evolución mundial del arte
que todos estaban conformes en el día del na-
sonoro, publicada por la Universidad en 1931,
cimiento: 8 de diciembre, y que la familia Pon-
viviendo aún Ponce y estando en México, en
ce, católica practicante, indudablemente se ha-
el breve estudio que consagra al iniciador de lo
bría preocupado por no retrasar el Bautismo
que pudiéramos llamar la Primera Escuela Na-
de Manuel María, que por lo tanto debió ocu-
cionalista Mexicana, señala como fecha de su
rrir, muy probablemente, dentro del mismo mes
nacimiento 1884, sin que se sepa que ninguna
de su nacimiento.
rectificación se haya hecho ni por parte de la
autora, ni por Ponce mismo.
y así fue, en efecto. La investigación produ-
De mayor trascendencia resultaban algunos jo el documento fechaciente, cuya copia, certi-
documentos oficiales, de puño y letra del maes- ficada por el párroco mismo, se publica por pri-
tro, en los cuales, al proporcionar sus datos mera vez en estas páginas, poniendo fin a la
per onales, afirma tener 55 años de edad en polémica: Ponce nació el 8 de diciembre de
1942, lo cual retrotraería la fecha de su naci- 1882. Alba Herrera estaba mal informada, y el
miento a 1886 o 1887. mismo Ponce ocultó su edad en los documentos
Ante tales dudas, el camino indicado era re- referidos, lo cual puede explicarse de muchas
currir directamente a las fuentes. Pero se pre- maneras, y aún ser objeto de otra investigación:
sentaba un obstáculo importante: no existen ar- acaso los reglamentos existentes en los cuaren-
chivos del Registro Civil en los cuales localizar tas señalaran algún absurdo límite de edad o
la correspondiente acta de nacimiento. Sea que cosa parecida, acaso se trató de un simple des-
en la provincia, a los dos decenios escasos de cuido, acaso -lo que es poco probable para
establecido oficialmente el Registro Civil, aun quienes conocimos la sencillez de Ponce: fue
no se generalizara su uso; o bien, como parece una simple coquetería ...

-5-
MANUEL M. PONCE
RUBEN M. CAMPOS
Una personalidad nueva reclama un lugar (Revista Cultura, 1917)
en nuestras letras, después de haberlo conquis-
tado en nuestro arte musical: la de Manuel M. formas melodiosas y armoniosas que vibran en
Ponce. Convicto de que el artista moderno está su arte reproductor de la polifonía de la natu-
obligado a expresar sus pensamientos no sola- raleza. Escogido el espíritu que oye y recoge
mente en forma clara, sino en forma armoniosa, y reproduce esas vibraciones, habrá reunido a
rítmica, imaginativa, ha tomado por modelo al la ponderación de su exquisito gusto estético la
gran lírico y romántico Wagner, y mientras lle- poesía que no sabe oír sino quien tiene el don
ga la madurez en que compondrá poemas para de ensueño.
musicar sus propias obras, compone prosas ju- y así como su música es vagarosa, melodio-
gosas, apiñadas como racimos, como espigas, sa, armoniosa, mecida en un vaivén de ensueño,
como mazorcas que si hoy son hilos de perlas su producción literaria es fija y neta, expresa-
mañana serán simientes fructificadoras. dora de su pensamiento firme y amplio, de sus
Educado en la cultura latina de Italia y en ideas fuertemente arraigadas a las grietas del
la cultura sajona de Alemania, ofrece una fu- cráter que es su inspiración musical. Sus apre-
sión laudable a su temperamento hispanoame- CIaCIOnes de los problemas que analiza tienen
ricano, con su producción clara y sobria en las la fuerza de la convicción, la persuasión de la
letras, como exquisita y sobria en música. Las verdad.
ideas expresivas de la belleza, que en sus pro- Para hablar de la inspiración y del valer de
sas hallan una exposición clara, especular y un músico, ' la fraseología crítica ha inventado
sencilla, en su música son de una aparente com- clisés que no dan absolutamente idea de la be-
plicación por la novedad constante que presen- lleza auditiva de una composición musical. Así,
ta su factura modulativa; pero analizadas por hablar de abundancia de ideas o de verba en
la lectura y la ejecución, sorprenden por la fa- elogio de una personalidad, de su inventiva,
cilidad y la sencillez con que están escritas. de su originalidad, de su facilidad melódica, de
No superpone, no recarga, no amontona, pa- su riqueza armónica, no sugiere ninguna idea
ra decirlo gráficamente, las sonoridades en su lineal acerca de la belleza auditiva que exige
música para producir la emoción de belleza que ser oída, como la belleza plástica exige ser vis-
él siente; sino que amplía el desenvolvimiento ta, para ser juzgada; y el mismo clisé sirve para
armónico, invirtiendo los acordes hasta encon- delinear a un clásico, o a un romántico, o a
trar el que necesita, y así con unas cuántas no- un modernista, es decir, dar una síntesis nega-
tas presenta un efecto sorprendente de nove- tiva en frases que pueden delinear a varios sin
dad, vistiendo al pensamiento de trajes nuevos referirse a ningún artista; porque si de una obra
y suntuosos, como a una princesa oriental que literiaria puede dar idea un fragmento de una
se vistiese en París. Porque a pesar de la fu- obra extensa, o de una composición arquitec-
sión de las dos culturas que integran su per- tónica puéde dar idea una fotografía, de una
sonalidad, la musicalidad de Ponce tiende a las composición musical no puede dar idea sino
modernistas formas revolucionarias del arte la composición misma, escrita en notas, para
contemporáneo de Francia, y solamente su fun- que pueda ser ejecutada y oída.
damental educación clásica lo ha detenido en
Por eso es que, tratándose de la obra mu-
el punto en que es más bella y más seductora sical del compositor Ponce, hemos optado por
la sima: en el borde.
reproducir algunas páginas musicales que pue-
La seducción de las sirenas atrae a Odysseus den sintetizar su manera de componer, que pre-
que, flaquean te, se hace atar al mástil de su bi- sentan su pensamiento real, comprensible para
rreme griega, y del canto de las sirenas toma las quienes sepan leer mentalmente el idioma de

-6-
las notas, y fácil de ser oído para quienes en- la frescura de la naturalidad juvenil para que la
tiendan ese idioma sin leerlo ellos mismos. El obra de arte emocione. A punto de ser arreba-
análisis o la audición de esas páginas podrá, tado por el maelstrom del subjetivismo moder-
acaso, justificar nuestra apreciación de la pro- no que no tiene freno ni ley, más que la con-
ducción musical de Ponce, y de la altísima es- fianza plena en sí mismo, Ponce vio la juven-
tima en que tenemos al joven maestro. * tud siempre florida de su pensamiento y sintió
la necesidad juvenil de ser comprendido, de ser
La personalidad de Ponce presenta un as-
amado, de no consumirse en la altivez egoísta
pecto muy interesante si se le estudia como con-
de desdeñar a las almas melodiosas de ensue-
ductor de los folkloredas (sic) de su país, como
ño, sedientas de aguas vivas al alcance de los
revelador de las bellezas arcanas que encierra la
labios; y entonces desdeñó la complejidad del
música popular de los campos y de los barrios.
arte moderno llevado al colmo en abstrusis-
Es un aspecto en el que, por el amor con que
mas de armonización inaudita, y volvió a abrir
Ponce ha estilizado los cantos nacionales, se
el cauce a la fuente inextinguible. Acaso oyó
descubre la filiación romántica del compositor,
una voz fraternal, un eco de su pensamiento,
la tendencia a embellecer y restaurar las for-
que le decía: "Y, sobre todo, no dejes de ser
mas melodiosos nuestras de principios del siglo
romántico, porque habrás dejado de ser joven".
pasado, que fue cuando se popularizó y fi-
jó la canción en su estructura característica, Y puesto que no ha concluido aún de decir
conservada aquélla desde entonces con amor todo lo que su juventud ha atesorado en senti-
y juzagada bella hoy que el snobismo artísti- mentalidad y en amor, tiene muchas cosas que
co, imitador y deificador de europeísmos, se contarnos de lo que le cuentan a su espíritu los
esconde ruborizado ante el criterio amplio de geniecillos de las florestas, las notas errantes
la cultura moderna, que descubre un tesoro de infortunio de la raza vencida, el adiós del
propio en nuestro folklore, si bien hasta que pasado que va impregnado de la poesía pura,
lo ha visto al través del temperamento de un de la música melodiosamente armoniosa, armo-
artista. niosamente meliodosa, de que está empapada
el alma de nuestro músico.
Y, lo más plausible en el compositor Ponee,
es que ha comprendido la necesidad de poseer
Rubén M. Campos.
• Por obvias razones no reproducimos esos ejem-
plos musicales (R). México, D. F. 1917

Ponee en su primera juventud.

-7-
ESTUDIO SOBRE LA MUSICA MEXICANA
(Después de la presentación que hizo R. M. MANUEL M. PONCE
Campos del compositor y musicólogo Manuel poemas líricos. Era el nacimiento de la poesía
M. Ponce en el artículo anterior, Pon ce escribió y la liberación de la música que, con la apari-
para la misma revista Culttlra varios artículos. ción de nuevos instrumentos, se constitutía en
Este es uno de ellos. La Redacción). arte independiente y profundamente subjetivo.
Sin embargo, ¡cuántos siglos transcurrieron
LA MUSICA POPULAR BAILABLE para que apareciera la monótona diafonía y el
Dice Herbert Spencer en sus maravillosos imperfecto discantus! La ley de la evolución se
Primeros Principios, que el ritmo del discurso, cumplía en la eternidad, y de la cuna de la
el ritmo del sonido y el ritmo del movimiento armonía que fue el discantus, ascendemos a los
eran, en un principio, parte del mismo todo, esplendores del Renacimiento.
y sólo el progreso -que se abre paso a través Alessandro Striggio, Okeghem, Orazio Vecchi
de los tiempos- pudo separarlos. y más tarde Monteverdi y el príncipe de la poli-
Las leyes de la evolución encontradas por fonía. Pierluigi da Palestrina, sentaron las ba-
el célebre filósofo inglés, han sido aplicadas a ses de nuestra música contrapuntística. Se había
la música por Chilesotti en la siguiente fórmula: pasado ya de la sencillez confusa a la com-
La evolución del arte musical conduce de una plejidad luminosa; la música era verdadera, mú-
sencillez confusa a una complejidad cIara; de sica sabia y perfeccionada, y la aparición de
un orden disperso, uniforme e indeterminado, dos inmensos genios que se llamaron Bach y
a un orden concentrado, multiforme y decisivo, Haendel, fue el coronamiento de esta época
resultando cada integración parcial de la ma- de oro para el arte.
teria centro de transformaciones siempre cre- También en nuestras selvas americanas exis-
cientes. tían en un principio las tres artes en estado
Todos los pueblos de la tierra han celebrado embrionario: las palabras, el movimiento y el
Con danzas sagradas o guerreras sus ceremo- sonido eran partes inseparables del mismo to-
nias importantes y así, recordamos que el himno do. La evolución seguramente se habría verifi-
compuesto por Moisés sobre la derrota de los cado en la lentitud de los siglos; pero la férrea
egipcios, fue bailado y cantado; los israelitas mano del conquistador hispano, nos trajo el
bailaron y cantaron en las fiestas del becerro te oro de la civilización y el inapreciable don
de oro; David bailó delante del arca; los grie- de la música, ennoblecida ya por los viejos
gos y los romanos danzaban y cantaban en to- maestros flamencos del siglo XV.
das sus fiestas. De las danzas sagradas y gue- Llegó la música europea, y en medio de las
rreras, surgieron las puramente guerreras y de luchas entre la civilización y la barbarie, se in-
éstas, las danzas populares. Tal es, según Spen- filtró en el alma mexicana, modificándose y
cer, el origen de los cantos y bailes del pueblo. adaptándose al medio poco propicio que ofre.-
La música, ligada estrechamente a sus her- cía un país reacio a las más altas manifesta-
manas la poesía y la danza, sufrió, al par que ciones de la cultura.
éstas, una lentísima transformación. Cada ins- Yo creo que nuestros actuales cantos y bai-
trumento que se inventaba, era un paso hacia la le populares, datan de una época relativamente
emancipación de la música. Fue en Grecia don- reciente, tal vez desde la segunda mitad del
de comenzó la separación de estas artes. Ya siglo XVIII. Tengo algunos datos para creerlo
los movimientos, las palabras y los sonidos no así y entre ellos, encuentro uno muy impor-
se empleaban simultáneamente, como en los tante: tal es el bando impreso en un pliego de
primitivo tiempo ; la poesía se dividió en dos papel del sello 40. para los años 1802 y 1803,
géneros: el épico y el lirico, prevalenciendo el prohibiendo "el pernicioso y deshonesto baile
uso de recitar los poemas épicos y cantar los nombrado jarabe gatuno, que el mes de octubre

-8-
último llegó a su noticia con mucho sentimiento es triste y apasionado, como apasionado y tris-
de su corazón, que en esta capital y otros luga- te es el mestizo que la compuso.
res del reino, se iba introduciendo este bayle Es profundamente triste la llanura desolada
que por sus deshonestos movimientos, acciones al morir la tarde; y al morir con ella la es-
y canto, causaba rubor y desagrado aún a las peranza de mejoramiento y la fe en la humana
personas de menos delicada conciencia". Firma justicia, el alma del campesino desventurado y
el bando D. Félix Gerenguer de Marquina, Vi- polvoriento, que regresa de su labor cuando
rrey de Nueva España, etc. Dado en México se enciende sobre la lejanía azul de las monta-
a 15 de diciembre de 1802. ñas la primera estrella, siente toda la melanco-
Creo que no andaremos muy alejados de la lía de la vida, el peso de una existencia inútil,
verdad si damos por cierto y afirmamos que las y como único refugio de su infelicidad, esconde
canciones y otros bailes semejantes al jarabe su pensamiento en el dulce recuerdo de su rús-
gatuno condenado por el virrey, aparecieron en tico amor. Y entonces canta sus dolientes can-
la segunda mitad del siglo XVIII. Ahora bien, la ciones; y entonces nace de su corazón dolorido
música dominadora (sic) en esa época era la ita- la queja que más tarde se convertirá en triste
liana, que extendió su influencia irresistible has- canción.
ta los mismos compositores germanos que, co- Por eso las canciones mexicanas hablan cons-
mo Haydn, Mozart y el mismo Beethoven, no tantemente de amor y de tristeza; no tienen la
se libraron de ella. Parece simbólico el hecho fogosidad de los cantares españoles llenos de
de que Haydn, austriaco, sirvió de limpiabotas notas sobreabundantes y de fermatas; ni la gra-
al viejo Porpora, napolitano, durante su ter- vedad religiosa del lied alemán; ni la solemni-
cer viaje a Viena. dad dolorosa de la dumka checa; ni la heroica
Esta influencia decisiva de la música italiana declamación del lassan húngaro; ni la espiri-
sobre las otras escuelas, tuvo su efecto indu- tualidad del couplet francés; ni la risueña ele-
dablemente en el ambiente musical de España, gancia del vals vienés. No es comparable a nin-
reflejándose más tarde en nuestra canción po- gún canto europeo; pero encierran un poco de
pular de melodía amplia y simétrica muy dife- pena, un poco de amor, un poco del alma hu-
rente de los cantos españoles que, como las milde del pueblo que la ha creado.
malagueñas, rondeñas, granadinas, etc., tienen Podríamos dividir en tres categorías las com-
una forma melódica inconfundible. En cambio, posiciones populares mexicanas:
nuestros cantos bailables descienden directa- música bailable,
mente de las danzas españolas, como veremos música religiosa,
más adelante.
canciones.
¿Cuáles son los elementos armónicos o meló-
dicos constitutivos de la música mexicana? Los La música bialable puede decirse que la com-
elementos armónicos son pobres y sencillísimos, ponen exclusivamente los jarabes, pues las dan-
empleaándose, casi siempre, solamente los acor- zas habaneras, schottisch, valses, mazurkas, two
des fundamentales sobre la tónica, la domi- steps, etc., no son música vernácula, sino imi-
nante y la subdominante. Raramente se en- taciones más o menos felices de bailes europeos,
cuentran modulaciones a tonalidades vecinas. norteamericanos y cubanos. El baile nacional,
Los acompañamientos de los bailables son es sin duda alguna, el jarabe.
monótonos y sin el menor interés armónico; Musicalmente, el jarabe es una frase meló-
la melodía, en cambio, es frecuentemente su- dica armonizada con gran sencillez; el compás
gestiva y de un sabor local remarcable. Pero es frecuentemente de 6/8 Y algunas veces de
en todos los bailes se nota falta de desarrollo 3/4 o 2/4. El aire es siempre vivo.
melódico: repetición constante de pequeños te- Nuestro jarabe es de origen español, tal vez
mas de dos o cuatro compases, pobreza en los desciende de zapateado o de las seguidillas man-
ritmos y una vaguedad intraducible al prolon- chegas que tuvieron su origen en el siglo XVI.
gar el primitivo acompañamiento indefinidamen- Manuel M. Ponce
te después de cada copla.
El carácter general de la música mexicana México, D. F., 1917

-9-
Un homenaje a Manuel M. Ponce en su
Centenario
Como Julián Carrillo (Ahualulco, San Luis ROBERT STEVENSON
Potosí, 28 de enero de 1875 - 9 de septiembre
de 1965), Ponce alcanzó su madurez durante
la época de Porfirio Díaz. Entre sus primeras a unos 480 kilómetros de la capital de México,
y sus últimas obras había tan poca semejanza la cual, pese a las futuras andanzas internacio-
como entre El Pájaro de Fuego y Orteo de nales de Ponce, siempre fue considerada por
Stravinski (Paris, 25 de junio de 1910 - Nueva él como su "casa". A la edad de seis años
York, 28 de abril de 1948). Quizá la evolu- estudió piano con su hermana Josefina y a los
ción artística de Ponce fue más orgánica que la diez con Cipriano Avila. A los nueve compuso
de su renombrado contemporáneo Carrillo: al su primera pieza: La Marcha del Sarampi6n
contrario de éste, Ponce nunca trató de rever- (1891) escrita durante un ataque de esa en-
tir los procedimientos convencionales de la no- fermedad infantil. A los diez años entró a can-
tación. tar en el coro de infantes de la iglesia de San
Desde su fallecimiento, en 1948, Ponce ha Diego de Aguascalientes, donde su hermano
ido adentrándose paulatinamente en el corazón -el tercero de aqueBa familia- era sacerdote.
del público mexicano, al extremo de que su A los trece años (1895) se convirtió en ayu-
"estrellita" ha aumentado tan considerablemen- dante de organista y a los quince en organista
te de volumen, que quizá brille actualmente principal de la propia iglesia. Durante 1900-
como el astro mayor de la música mexicana 1901, su hermano Antonio le brindó ayuda
anterior a Chávez. Fue muy acertado el haber pecuniaria para que pudiera estudiar en el
nombrado Sala Manuel M. Ponce a la desti- Conservatorio Nacional de México con Vicente
nada a la música de cámara en el Palacio de Mañas. Poco después regresó a Aguascalientes
BeBas Artes de la ciudad de México. Por otra y a los veinte años de edad comenzó a enseñar
parte, las obras de Ponce continúan recibiendo solfeo en la academia de música local y a es-
publicación póstuma. En 1950 la revista Nues- cribir críticas para El Observador. El evento
tra Música publicó en su segundo trimestre casi más importante de 1903 fue un concierto en
cuarenta páginas escritas por el Dr. Jesús C. el mes de diciembre en Aguascalientes; tocó
Romero -eminente musicógrafo- referentes a varias de sus Bagatelas originales ante un gru-
un registro documentario de la vida pública y po de visitantes notables de la capital.
privada del maestro. Cada documento le fue A los veintidos inició sus más largos vaga-
remitido a la viuda de Ponce, señora Clema M. bundeos. En 1904 tocó en Guadalajara, San
de Pon ce, para asegurar su autenticidad. Ins- Luis Potosí y San Luis Missouri. Después se
peccionando los datos recogidos por el Dr. Ro- embarcó en noviembre en Nueva York, rumbo
mero, podemos asomarnos al mundo interior a Europa. Detúvose en Bolonia, Italia, donde
de la vida de Ponce. Con el siguiente resumen, buscó a Marco Enrico Bossi para que le diera
tratamos de condensar el artículo de cuarenta cIases, pero Bossi lo rehusó diciéndole: "Su
páginas del Dr. Romero. estilo está pasado de moda. Su música hubiera
Como el padre de Ponce, Felipe de Jesús sido actual en 1830, pero no en 1905. Tiene
Ponce, había sido partidario de Maximiliano, usted talento, pero no ha sido enseñado acer-
cuando nació su décimo segundo hijo, que se- tadamente. "Ponce estudió entonces con Luigi
ría famoso, el 8 de diciembre de 1882 en Fres- Torchi, en el Liceo de Bolonia. Después de un
niBo, Zacateca s, él se hallaba en exilio tempo- año en Italia, se dirigió a Berlín, para estudiar
ral; sin embargo, al año siguiente la familia en el Conservatorio Stern y en 1906, el 18 de
pudo regresar a Aguascalientes, ciudad situada junio, tocó la Partita en Re mayor de Bach

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en la Beethoven Saal de Berlín. A fines de ciaron la inminente destrucción del VIeJO
1906 se alistó para regresar a México, pero sus orden. .. En medio del humo y la sangre
amigos germanos que se regodeaban con las de los combates nacieron las incitantes can-
canciones foIklóricas alemanas, insistieron en ciones revolucionarias que pronto recorrerían
que se aprestara a sacar a la luz los tesoros lo largo y lo ancho del país. Adelita, Valen-
foIklóricos de la música mexicana, y en que no tina y La Cucaracha, fueron típicas cancio-
se dedicara exclusivamente a los "clásicos eu- nes revolucionarias que habrían de popula-
ropeos". rizarse a través de la república. Por fin el
Al regresar a Aguascalientes estableció un nacionalismo se opoderó de la música. Se
estudio privado, pero en julio de 1908 fue lla- revivieron viejas canciones, casi olvidadas,
mado de la ciudad de México para enseñar pro- pero que reflejaban con veracidad el espíritu
visionalmente en el Conservatorio Nacional. de la nación. Las nuevas canciones nacio-
Durante 1909 realizó una gira con el Cuarteto nalistas fueron difundidas con profusión a
Saloma, alternando sus solos de piano con los través de toda la república; la idea de que
cuartetos del grupo, o cooperando en obras co- la república debía tener un arte musical que
mo el Quinteto de Dvorák. En enero de 1910 reflejara fielmente su propio espíritu ganó
abrió un estudio de piano en la ciudad de Mé- ímpetu por todas partes.
xico. Entre sus primeros alumnos se hallaba Ponce salió para Cuba en marzo de 1915,
Carlos Chávez, quien tenía once años y per- y permaneció ahí hasta junio de 1917, con la
maneció cuatro como alumno de Ponce. Ense- sola interrupción de un viaje a Nueva York,
ñando obras de Debussy, Ponce fue pionero para ofrecer un recital de sus propias obras en
en México: el primer programa dedicado en su el Aeolian Hall el 27 de marzo de 1916. Como
totalidad a este compositor fue ejecutado por sucede generalmente en Nueva York cuando
sus alumnos el 24 de junio de 1912. Chávez alguna persona previamente desconocida se
lo inició con el Claro de Luna. atreve a ejecutar un programa de sus propias
La primera obra importante de Ponce fue obras, casi ningún eco produjo el recital de
su Concierto para piano, estrenado por él mis- Ponce. Por una u otra razón, Ponce, en sus
mo el 7 de julio de 1912, en el programa inicial últimos años, deploraba sus relaciones con los
de la temporada de la Orquesta Beethoven, en Estados Unidos. Su programa del Aeolian Hall
el Teatro Arbeu, con Julián Carrillo en el po- tuvo lugar en marzo. En junio de 1916 ofreció
dio. Dos días después, en un programa dedi- sus servicios al cónsul de México en La Habana
cado totalmente a obras de Pon ce, en el propio como voluntario, en un tiempo de movilización
teatro y con el mismo director, el Concierto parcial (a causa del incidente de Columbus,
volvió a ser ejecutado por su autor. Durante 1912 Nuevo México) . Fue rechazado para el ser-
y 1913, el compositor se dedicó a componer vicio militar, porque se pensaba que sus funcio-
sus inimitables canciones mexicanas: Marchita nes artísticas eran potencialmente más valio-
el Alma apareció en 1913 yel grupo al que per- sas. A fines de 1916 visitó a su familia en
tenecía Estrellita en febrero de 1914. Durante Aguascalientes y en julio de 1917 se estableció
estos años revolucionarios, Ponce se dedicó no definitivamente en la ciudad de México, donde
sólamente a arreglar canciones foIklóricas, sino estableció su propio estudio (Academia Bee-
también a trabajar en pro del desarrollo de la thoven) . En septiembre de 1917 contrajo ma-
música folkIórica. En un ensayo contenido en trimonio con Clema Maurel en la iglesia de
Nuevos Escritos Musicales, México, Editorial Nuestra Señora de Lourdes. En diciembre diri-
Estilo, 1948, p. 25, escribió: gió la Orquesta Sinfónica Nacional. El año si-
guiente compuso la Balada Mexicana para pia-
En 1910, nuestros salones sólamente acep- no y orquesta. En 1919 editó doce números
taban música extranjera, tal como romanzas de la R evista Musical de México (al principio
italianizan tes y arias operísticas transcritas en sociedad con Rubén M. Campos).
para piano. Sus ejecutantes rechazaron com- En 1925 Ponce fue nombrado "Profesor de
pletamente la canción mexicana, hasta que Perfeccionamiento Pianístico" en el Conserva-
los cánones revolucionarios del norte anun- torio Nacional, pero poco después de este nom-

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bramiento, emprendió un segundo viaje a Euro- vez en el podio. En 1943 Ponce abandonó nue-
pa. Estaba sumamente interesado en los últi- vamente el Conservatorio, para ocupar una cá-
mos avances de la composición en el Viejo tedra de folklore en la rival Escuela de Música
Mundo y se estableció en París, donde tuvo re- de la Universidad de México. En 1947 (4 de
gulares encuentros con Paul Dukas. Mark Pin- julio) ofreció un festival Ponce en Bellas Artes,
cherle (A la Memoria de Manuel M. Ponce, en el que Andrés Segovia tocó el Concierto del
Nuestra Música, No. 18, 1950) escribió con Sur. El 24 de abril de 1948, Ponce falleció a
mucho encanto de las impresiones que Ponce la edad de 65 años de un ataque de uremia.
dejó en la capital francesa entre sus numerosos Entre sus más importantes obras orquesta-
amigos, a lo largo de los siete años que per- les, se hallan Chapultepec (1929); Suite en es-
maneció ahí antes de regresar a México. Du- tilo antiguo (1935); Poema elegíaco (1935)
rante esta prolongada estancia en Europa, el Ferial (divertimento, 1940) y Cantos y Danzas
estilo de Ponee se volvió inconmensurablemen- Para instrumentos solos con orquesta escribió
te más eontrapuntístico y sus ritmos más ten- los previamente mencionados conciertos para
sos. Cuando regresó a México en 1932, llegó piano, violín y guitarra. Su música, publicada
como una celebridad europea reconocida. In- por siete editoriales, incluye más de 150 obras
mediatamente se le nombró director interino individuales. Sus editores fueron F. Buongio-
del Conservatorio Nacional. El manojo de vanni (Bolonia); Giralt y Anselmo López (La
obras orquestales que llevaba consigo, al re- Habana); Wagner y Levien, Enrique Munguía
gresar de su residencia europea temporal, y atto y Arzos (México); Schott (Maguncia);
aumentó su reputación musical en su patria Senart (París) y Peer Southem Music (Nueva
El 20 de noviembre de 1934 Stokowski dirigió York).
el tríptico sinfónico Chapultepec en el Carnegie Ponce poseyó una habilidad única para diri-
Hall de Nueva York, después de haberlo estre- girse directamente a las masas, tanto como para
nado cuatro días antes en Filadelfia. En 1939 hablar -si así 10 deseara . --en un idioma su-
Chávez repuso el Concierto para piano de til con las más avanzadas mentes musicales,
1912. En 1941 visitó la América del Sur por Acusado por Bossi, en 1905, de componer en
primera vez y fue gratamente agasajado en Mon- un estilo de 1830, en 1930 Ponce logró situar-
tevideo y Santiago de Chile. En Montevideo se en la vanguardia. Supo cambiar con los tiem-
estrenó su nuevo obra Concierto del Sur para pos. Su conversión a formas avanzadas del
guitarra y orquesta con Andrés Segovia como pensamiento fue, por otra parte, sinceramente
solista. sentida; contrariamente a aquellos, cuyo mo-
Al cabo de otra de las muchas interrupcio- dernismo era sólo una falaz apariencia, habló
nes que marcaron la asociación de Ponce con con tanto impulso en su último estilo como en
el Conservatorio Nacional, reanudó ahí la en- sus anteriores. La integridad de su cambio de
señanza en 1942. El 20 de agosto de 1943, su estilo puede ser valorada con los siguientes ejem-
magistral Concierto para violín y orquesta fue plos: el primero es el de 1912; el segundo el
estrenado por Henryk Szeryng, con Carlos Chá- de 1943.

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Deberá comprenderse que la textura orques- da de las Instantáneas Mexicanas), colocó una
tal del Concierto para Violín contiene líneas muy melodía pentatónica de origen yaqui sobre un
disonantes, mientras que la del Concierto para bajo suplementario, con un resultado auditivo
Piano está conmpuesta de voluptuosos acordes tan diferente del de sus canciones mexicanas,
rajmaninovianos. que quien no esté al tanto de la formidable
Ponce demostró no solamente una extraordi- evolución del compositor podría dudar que el
naria habilidad para enriquecer su vocabula- autor de Estrellita hubiera modificado así su
rio musical, sino también para cambiar la esen- postura. Ponce testimonió que las melodías pre-
cia de sus temas. En su Música Yaqui (segun- sentadas fueron música yaqui original:

Pero esta manera de manejar materiales in- imaginativa que muy pocos transcriptores de
dígenas en esta "instantánea" especial de la música indígena han dominado en el manejo
vida yaqui, así como en la Danza de los anti- de música folklórica no occidental.
guos mexicanos (estrenada por Revueltas el 13
de octubre de 1933) mostró una perspicacia Traducción de
Esperanza Pulido

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Manuel M. Ponce y el Piano
CARLOS V AZQUEZ

El piano, instrumento al que más amo posición y la enseñanza lo alejan paulatinamen-


MANUEL M. PONCE te del estudio del piano. En 1939 retorna a él
para tocar nuevamente su Concierto bajo la
Si Ponce tuvo en la guitarra un sinodal in- batuta de Carlos Chávez.
creíble ante el mundo, en el piano se le reve- En su juventud, Pon ce luce indefectiblemen-
laba en su gran corazón. Una vez, hablando de te como compositor y pianista. Gusta de aca-
los instrumentos musicales me dijo el maestro: riciar el teclado; odia el golpe rudo contra las
"Sí, he tratado a la exquisita guitarra como a teclas. "Hay que tratar al piano como a un
una amante, dulce amante, pero el piano es al amigo", deCÍa. En sus recitales incluye siem-
que más quiero. He de volver a él". pre las Canciones Mexicanas, originales o arre-
El piano fue el primer instrumento para el glos. En sus ediciones se lee: "Para canto y
que Manuel M. Pon ce escribió música: la Dan- piano o piano solo". Y las sintió para el piano
za del Sarampión, en cuyo género llegaría a al- tan legítimamente que en Cuiden su Vida se
canzar un grado de perfección jamás antes lo- desborda en concertístico lirismo. Todos sabe-
grado en nuestro país. "Y ni siquiera fuera de mos que la trascendencia de estas canciones es
él" ---diría el director de orquesta cubano Al- inmensa, pues con ellas inicia la estética de
berto Fajardo-, quien agregó, después de es- nuestro nacionalismo musical. Su tratamiento
cuchar las Cuatro Danzas Mexicanas: "Esto es armónicamente es rico, mas no sofisticado; an-
lo que queríamos hacer con su hermana danza tes bien, encanta por su sencillez.
en Cuba". Completando nuestro argumento, la La Gavota en Re bemol, compuesta en 1901,
última obra concebida por Ponce en su vida ganó fácilmente la internacionalidad en las gi-
fue para piano y orquesta: un Concierto que ras de Antonia Mercé, famosísima bailarina a
no se plasmó en el papel pautado, pero que quien llamaban "la Argentina". Esto sucedía
llevaba incólume en su mente. durante la segunda estancia de Ponce en Euro-
Al derredor de 200 obras -contando las 18 pa. La Estrellita, sin embargo, se expandió por
que existen en Aguascalientes, según me fue el mundo antes, a pesar de haber sido escrita
revelado- dan fe de la pasión que Ponce sen- en 1912 y publicada en 1914. Por cierto que
tía por el piano. Formas pequeñas y grandes, con solamente Estrellita Manuel M. Ponce de-
ritmos de gran variedad que acusan una sólida bió haberse convertido en millonario, pero De
preparación técnica y facilidad para expresar es- la Peña Gil, su editor, no la registró debida-
tados de ánimo del compositor. mente y surgieron de inmediato muchas edicio-
En julio de 1912 estrena su Concierto Ro- nes piratas. Estrellita aparece en un cielo negro
mántico, actuando él mismo como solista y Ju- sin comunicaciones ni promociones, pero es por
lián Carrillo en la dirección orquestal. En esa eso que centellea brillantemente al través de la
época Ponce interpreta a Mozart, Beethoven, inspiración mexicana que cautivó a profanos y
Brahms, Chopin y, al decir de Salvador Ordó- a grandes artistas. Para 1920, cuando ya se
ñez Ochoa, todos los preludios y fugas del Clave cantaba en todos los idiomas, Ponce hizo una
bien Temperado de Bach. No obstante, la com- Metamorfosis de su propia canción para piano
solo. Después sigue difundiéndose por el mun- exposición hay una bien planeada sugerencia
do en arreglo de Heiffetz y es preferida tam- de desarrollo y, haciendo gala de recursos, una
bién de Henryk Szeryng. Ultimamente tuve no- pequeña cadenza, a la manera de un concerto
ticia (no confirmada), de que Horowitz la tocó con orquesta. Dos minutos dura su ejecución.
de "encare" en Londres. ¿Cómo es posible hallar en esta síntesis tal equi-
Las susodichas Gavota y Estrellita pertene- librio entre técnica y poesía? Parece un mila-
cen al extenso grupo de obras en que Ponce, gro. En ninguno de los románticos europeos se
sin recurrir al folklore, luce un venero melódico encuentra una reunión de valores de magnitud
inagotable. Entre las obras sólo pianísticas es- semejante, en dimensiones microscópicas.
tán: Primer Amor, Leyenda, Dos Nocturnos, De sus Cuatro Scherzinos uno podríamos lla-
Dos lntermezzi, Vals Galante, Gavotte et Mu- marlo Staccato para diferenciarlo de los demás.
sette, Once Miniaturas, Album de Amor (siete Viene luego el Mexicano, el Maya, y el dedica-
piezas), Trozos Románticos (14), Tres Minue- do a Debussy (primera obra compuesta en Mé-
tos, Cuatro Danzas Mexicanas, etc. xico bajo la influencia del impresionista fran-
Aun sin utilizar el folklore, con su marcada cés y expresamente en su homenaje.
influencia chopiniana Ponce se muestra dueño De los preludios que anteceden a una fuga
de sus recursos formales y de la frescura reno- hablaré más adelante. El Preludio Trágico for-
vada de su inspiración, en sus mazurcas a tres ma parte de los estudios de concierto; el Prelu-
partes con ritomello. Así también presenta tres dio Mexicano sobre el Cielito Lindo lo escribió
características: melódicas por excelencia, ágil y cuando se pensaba que esta canción era de au-
rítmica y altamente poética. Con esta pequeña tor anónimo; hay un Pequeño Preludio en sus
forma musical escribió dos grupos de mazur- trozos románticos y otros como el Preludio Cu-
kas: las llamadas sencillamente mazurkas a se- bano, el Preludio Galante (también Estudió);
cas y las Mazurkas de Salón. Entre las prime- un Allegro Moderato de ritmo cubano, cuyo tí-
ras hay una editada con el número 27, pero fal- tulo parece ser Preludio Nocturno, de dualidad
tan muchas entre los manuscritos y ediciones. semejante a la del Preludio Fugado; el Andan-
Juntando ambas series, apenas tenemos 23. La tino Malinconico, carente de título, no es otra
Revolución hizo estragos en los archivos del cosa que un preludio. Las Once Miniaturas son,
compositor. Compuso así mismo otra mazurka según mi criterio, pequeños preludios; el Pre-
que podríamos denominar "moderna" o "a la ludio Scherzoso (de las Cuatro Piezas, o Suite
española", ya que no "póstuma", puesto que Bitonal) , de un impresionismo más avanzado;
fue publicada en el suplemento de una revista el Preludio Romántico (scrabiniano, de la pri-
de la Universidad Autónoma de México, en vi- mera época de Scriabin y los cuatro Preludios
da del autor. Ponce la escribió para la "dama- Encadenados, de expresión de la segunda épo-
guitarra", pero el compositor recogió su aroma ca del mismo compositor (expresiones metafísi-
para seducir al "joven pianoforte". Así se en- cas); y el último, un homenaje a los antiguos
contraron ambos instrumentos enlazados en una mexicanos.
misma partitura. Y hablando de tan sorpresivas En los estudios, Ponce combina a veces li-
afinidades, los guitarristas Mario Beltrán del bremente dos formas, y como estas combina-
Río y Jesús Benítez descubrieron, por caminos ciones le fascinaban, el Preludio Trágico es así
diversos, una obra de fácil transcripción para mismo el Estudio l. Relataré ahora las condi-
la guitarra. Manuel López Ramos saltó asom- ciones en que fue compuesto. Vivía entonces
brado cuando vio la partitura del Scherzino Me- en el primer piso de la calle de Rosales No. 12,
xicano para piano. "¡Esto es para guitarra!" de la ciudad de México, donde tenía su Aca-
--dijo-, y sin agregarle ni siquiera una nota demia de Piano (a media cuadra estaba el ca-
se dispuso a tocarlo en su instrumento. ballito de Carlos IV, lugar de donde se despren-
El primer lntermezzo se lo dedicó a su ami- día la calle de Bucareli). En el piso bajo ha-
go y editor Adolfo Peña Gil. Es una obra ver- bitaba una señora con sus hijas, señoritas de
daderamente admirable. Construida en forma apacibles modales, bella figura y luenga cabe-
de sonata, lleva en ambos extremos sendas in- llera. De la manera más inesperada murió la
troducción y coda. Entre la exposición y la. re- madre. Un sacudimiento psíquico tremendo in-

·--,15·-
vadió a las jóvenes. Su impotencia aumentaba soy compositora. No me lo creyó y esto me
el enardecimiento. Se lanzaban sobre el cadáver, causó indignación. Insistí. Entonces él me orde-
se abrazaban con él, le gritaban desesperada- nó imperativamente que tendría que mostrarle
mente, se mesaban los cabellos y emitían lamen- mañana mismo una pieza de mi composición en
tos desgarradores. Su desolación se trocaba en ese brevísimo plazo. Yo, naturalmente, convine.
rebeldía cada vez más colérica. En el paro- Pero ahora, si no le doy gusto, tendré que ate-
xismo de su indignación inculpaban al destino, nerme a las consecuencias. Y yo lo quiero ...
a Dios. Ante este cuadro humano Ponce no maestro". Ponce la citó para el día siguiente y
pudo contenerse. Presa de angustia buscó des- cuando ella volvió le tendió en su mano un ma-
ahogo en la música, espejo y bálsamo de pa- nuscrito intitulado Serenata Frívola. La elegante
siones. El Preludio Trágico que escribió enton- señora sacó de su bolso un centenario -iinau-
ces descorre un "film" emocional intenso. Su dito en esa época!- y se lo entregó al maes-
descripción va más allá de la amargura y la tro. Mas, antes de retirarse, le suplicó con voz
imprecación llega a los límites del reto y re- entrecortada: "¿Podría suplicarle, con mucha
criminación a la muerte. pena, que nadie sepa quién es el autor verda-
Hay Estudios perdidos y otros irreconocibles, dero de esta obra por un lapso de cinco años?
acaso porque hayan cambiado de nombre. Del ¿Me lo concederá, maestro?". Pasaron algunos
Estudio II no tengo noticias. Hacia la Cima es lustros. .. Un día, siendo yo niño, aprendía
el III; Morire Habemus el IV (¿es quizá la aquella pieza. Me gustaba mucho, pero mi ma-
pieza inserta con el número 6 en el Album de nuscrito no mencionaba al autor. Por supuesto,
Amor: Tú eres mi amargura' y mi dolor?) La quise averiguar quién era. Vivíamos en Guada-
Hilandera es el V. Pensando en que han desa- lajara. Mi padre, que tenía muchos amigos y era
parecido las viejas ruecas, Ponce solía cambiar- bien conocido, allí, anduvo investigando durante
le a éste el nombre por el de La Abuelita en la varias semanas. En todas partes donde había
rueca. Este Etudio no lo tenía escrito el maes- un piano -iY vaya si los había!-, se tocaba
tro, pero, por lo menos, dejó una grabación, la pieza en cuestión; todo mundo tenía, como
aunque deficiente. Alma en Primavera es el yo, una copia a mano, pero sin el nombre de su
Estudio VI; Juventud el VII, Preludio Galante autor. Corrieron algunos años y nos trasladamos
el VIII. A cambio de los faltantes, hay un Es- a la ciudad de México. En 1936 conocí al maes-
tudio sin número dedicado a Moscheles y, en tro Ponce. En 1939 yo 10 acompañaba infali-
iguales condiciones, otro más: Metamorf6sis de blemente a la DAP -Departamento de Arte y
Estrellita. Numerado como el XII, La Vida Son- Publicidad- una estación radiodifusora situada
ríe nació como Preludio Galante ¡"in tempo di en los altos de la Secretaría de Educación PÚ-
vals!". blica. Casi siempre íban también mis condiscípu-
Abundan las piezas de diverso carácter: las los Gilberto Gamboa, Francisco Monzón y Juan
evocaciones La Alhambra, Venecia, Versalles, Huss Frausto, el primero de los cuales es un des-
Broadway, con algún sentido histórico. Otras tacado director de coros y pianista y tiene dos
piezas pequeñas, no por modestas son menos hijos brillantes que V~!l para pianistas; el se-
cautivan tes. Referiré la anécdota referente a una gundo ha realizado numerosas y exitosas confe-
de éstas. Se vivían tiempos de la Revolución. Una rencias-conciertos, recordando a Manuel M. Pon-
señora joven, guapa y bien alhajada visitó a ce con la colaboración de sus dos talentosos
Ponce para decirle: "Mestro: vengo a confe- hijos y el último es un caso singular, pues vino
sarle un pecado grave, segura de que obtendré a la capital con el expreso fin de estudiar mú-
su generosidad e indulgencia". "Pero yo no soy sica de Ponce y es el único que posee un título
sacerdote", repuso el músico. "No importa, creo expedido por éste. Increíblemente, ha ganado
que usted es la persona que me podrá salvar 50 concursos consecutivos como director de ban-
de culpa. Tengo un amigo queridísimo, el ge- das en los Estados Unidos y acaba de fundar
neral X. Yo toco el piano y él se complace es- una editora con el propósito especial de publi-
cuchándome. De verdad, no 10 hago tan mal, car música de su maestro amado. Volviendo a
aunque muy bien tampoco. No sé ni cómo fue, los programas que por la radio ofrecía el emi-
pero ayer me encontré de pronto diciéndole que nente músico nacionalista, allí presentó toda

-16-
su obra pianística, y con su esposa CIerna, toda recitales. Estrena su Primera Sonata, cuyos mo-
su obra vocal. En una de esas ocasiones, ante vimientos generau uua razón psicológica: el Al-
mi sorpresa, interpretó la Serenata Frívola y legro Appassionato iufiere una vida tumultuo-
relató su anécdota. sa el Adagio, reposo de amor y el Vivace, es-
Apenas iniciado el segundo decenio de este plendor de alegría. También interpreta, entre
siglo, La Academia de Piano Manuel M. Ponce otras cosas, el Preludio Galante, Mazurkas VIII
se hizo famosa por su intensa actividad. En y XXII. En Memoria de un Artista, Gavota, En
notas periodísticas de la época aparecen hasta una Desolación, La Hilandera, Juventud, Pre-
ocho recitales en 1911. El 25 de agosto de 1912 ludio Trágico, Morire Habemus. En 1914 cul-
se verificó, por primera vez en México, un con- tiva música de cámara (Shumann, Grieg).
cierto totalmente integrado con obras del com- En 1915 parte a Cuba, donde permanecerá
positor revolucionario de aquella época: Clau- hasta 1917. Lo acompañan el violinista Valdés
dia Aquiles Debussy. Actualmente llaman la Fraga y el ilustre poeta Luis G. Urbina, único
atención nombres que por aquel entonces pa- exiliado por el gobierno de México. Son reci-
saban por alto, a no ser por tratarse de alum- bidos hospitalariamente por el compositor Eduar-
nos dueños de facultades musicales innatas: fu- do Sánchez de Fuentes y poco después la pren-
turos maestros que en una o en otra forma ha- sa isleña habla constantemente y con euforia
bían de contribuir al desarrollo musical de Mé- de los "tres peregrinos del arte", quienes se
xico. En la primera serie participaron Salvador adueñaron del mejor nivel artístico, intelectual y
Ordóñez Ochoa y Antonio Gómezauda eu el Ho- social de La Habana. Ponce imparte lecciones, da
menaje a Debussy. Gómezanda intervino otra conciertos y sigue escribiendo música. Continúa,
vez con un Preludio y Carlos Chávez con el pues, su labor mexicanista, pero ahora acoge
Claro de Luna. la temática cubana y les da un ejemplo a los
El 7 de julio de 1912, el maestro presenta en cubanos de cómo hacer uso de su rico folklore.
el Teatro Arbeu un programa formado exclu- En este nuevo renglón nacen joyas como la
sivamente con obras suyas. Fue un aconteci- Rapsodia Cubana, la Suite Cubana y Elegía de
miento valioso para uuestro nacionalismo mu- la Ausencia. ¡Con razón Cuba mantiene para
sical. Se inició el acto con Cuadros Nocturnos Ponce una llama de ferviente admiración!
para orquesta de arcos (que posteriormente se El 27 de marzo de 1916 viaja Ponce a Nue-
transformaría en Estampas Nocturnas, con par- va York y presenta en el Aeolian Hall un pro-
tes adicionales; La Noche en Tiempos del Rey grama de su propia música: Preludio y Fuga
Sol, Berceuse, Dormi, piccolo amore; el Trío sobre un tema de Haendel, Sonata 1, Preludio
para violín, violoncello y piano en cuatro movi- Trágico, Preludio Galante, Morire Habemus,
mientos, con el autor al piano, el violinista Val- Romanza de Amor, La Vida Sonríe, Plenilunio,
dés Fraga y el violoncellista Rubén Montiel; un La Hilandera, Mazurca XXIII, Rapsodia Cu-
grupo de piezas tocadas por Ponce: Preludio y bana 1, Canciones Mexicanas 1, XVII, XIV,
Fuga sobre un tema de Bach, Leyenda, Mazur- Balada Mexicana, Barcarola Mexicana y 11 Rap-
ñas VI, VII, XV y XX, Segundo Nocturno, Hacia sodia Mexicana.
la Cima, Cuatro Canciones Mexicanas, Tema Desgraciadamente este recital se verificó al
Mexicano Variado, Primera Rapsodia Mexicana. mismo tiempo que Francisco Villa invadía Co-
y terminaría con su Concierto para Piano y Or- lumbus, con todos los excesos salvajes de una
questa, con el autor como solista y el maestro venganza política. Hubo quien dijera que mien-
Carrillo al podio, frente a la Orquesta Beetho- tras Columbus era ocupada por Villa, Pon ce
ven. pretendía invadir Nueva York. En otra crítica
Esta presentación constituyó un rotundo éxi- escribieron que "ni como pianista, ni como com-
to y los periódicos se volcaron en entusiasmo. positor requiere Ponce consideración alguna";
Alba Herrera y Ogazón, Luis G. Urbina y otros pero hubo quienes le concedieran méritos como
lo colmaron materialmente de alabanzas como pianista: "tiene un excelente sentido del ritmo
músico, pianista y héroe de nuestro naciona- y su sentimiento y su musicalidad son eviden-
lismo. tes"; "toca el piano en forma interesante y sin-
En mayo y junio de 19 p rro~i~e ofreciendo cera. Es muy hábil en el manejo del claroscuro

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y posee un gran dominio de la parte técnica". en un aplauso pródigo y sincero.
Como apunté arriba, la situación política en- En los archivos musicales del maestro en-
tre México y los Estados Unidos era difícil. contré un Preludio y Fuga de tema original pa-
Tanto así, que se temía en México una inva- ra la mano izquierda sola, ambos en el mismo
sión de los ejércitos del norte. tono, pero el preludio estaba inconcluso. Quizo
El 22 de junio escribió entonces nuestro mú- el azar que fuese yo quien asumiera la deli-
sico al Cónsul de México en Cuba, Lic. Anto- cada tarea de agregarle los 16 últimos compa-
nio Hernández Ferrer, para ofrecerle sus ser- ses. Naturalmente había el peligro de que apa-
vicios como soldado defensor de su país. Una reciera parchado, pero, por fortuna, no fue asÍ.
semana después le contestó el Cónsul rehu- Ni pianistas, ni guitarristas han protestado y,
sando su oferta, porque para México era mu- como lo indiqué antes, ya ha sido transcrita la
cho más importante su desempeño como "uno obra.
de los más constantes luchadores de la forma- Desde tiempo atrás conocía yo una fuga so-
ción del alma nacional". bre un tema de Bach, extraído de una de las
Un medio infalible para contribuir a la edu- partes no temáticas de la Fuga No. 9, en Mi
cación musical de un pueblo es poner atención mayor, a tres voces, del primer volumen del
en los niños. Nuestro ilustre folldorista escri- Clave bien T emperado, La Fuga de Ponce ha-
bió 20 Piezas Fáciles dedicadas "a los pequeños bía ya sido editada en México por Otto y Arzos.
pianistas mexicanos". A excepción de Primavera Posteriormente la transcribió el maestro para
todas son melodías tradicionales indígenas y mes- orquesta de cuerdas, finalizando con ella su
tizas, hasta cerrar con el himno patrio. Lo que Suite en Estilo Antiguo. Mas la Fuga para pia-
más admira en estas piececitas es su difícil fa- no carecía de preludio. ¡Cómo añoré su con-
cilidad: giros pentafónicos y canciones a dos cierto histórico del Arbeu en 1912! Allí había
voces, mientras que otras llevan la prenda de él estrenado mundialmente la obra completa,
una armonía de máxima simplicidad. con sus dos partes, exactamente como la con-
Ponce fue un devoto de las grandes formas. cibió, mas cuando llegué al mundo, el Preludio
Por lo tanto practicó abundantemente la Fuga estaba ya perdido. ¿Qué hacer ahora? Hallé en
y la Sonata. Obviamente, también para los ni- el archivo otro preludio, sin fuga, en distinta
ños escribió Cuatro Pequeñas Fugas a dos vo- tonalidad. Advertí que en ambas piezas existía
ces, y para estudiantes avanzados, o pianistas una afinidad de elementos rítmicos y que desde
ya formados, un Preludio y Fuga sobre el tema el punto de vista de la parte temática aparecía
de la Fuga en Mi Menor de Haendel. en el preludio una cuarta ascendente de la fuga,
En 1906 acudía el estudiante mexicano al como intervalo invertido y minimizado hasta
Stern'schen Konservatorium de Berlín, en don- una segunda menor. Realmente este preludio
de una tarde el maestro de piano Martin Krause podría servir como antecedente de la fuga en
-que a su vez había sido discípulo de Liszt- cuestión. Aunque hay que convenir, en el más
exaltaba ante sus alumnos la figura inmensa estricto derecho del compositor, que un prelu-
de Jorge Fed¡!rico Haendel. Señalaba la ele- dio y fuga pueden ambos tener elementos to-
gancia aristocrática de sus temas y extendía su talmente distintos, sin otra identidad que la to-
disertación por los vastos dominios del contra- nalidad, según cánones del clasicismo que en
punto y de la fuga. El joven Manuel salió de Juan Sebastián Bach se pueden y deben apre-
la clase vivamente impresionado y apenas llegó ciar. Bajo esa norma hizo Ponce el Preludio y
a su cuarto se puso a escribir febrilmente. Al Fuga para la mano izquierda, aunque no está
día siguiente se presentó nuevamente con su plenamente aclarado que su Preludio inconclu-
maestro. Le mostró e hizo escuchar la obra que so hubiese sido pensado para el piano. En la
había compuesto la noche anterior. Sus con- obra sobre un tema de Haendel, en cambio, el
discípulos guardaban silencio, con actitud de Preludio es una sugerencia de la Fuga y los en-
sorpresa y curiosidad. A medida que el joven vié a la Southern Music Publishing Co., Inc.
músico tocaba, se íba apoderando de todos un de Nueva York para su publicación. Apenas
hálito de aprobación y admiración. Cuando ter- transcurridos unos cuantos días recibí en casa
minó, Herr Krause y sus alumnos irrumpieron la visita det PI? Mi~el Aguayo y su esposa,

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de Aguascalientes. Me traían de regalo una fo- y me la dedicaría. Desafortunadamente sus múl-
tostática de un menuscrito del maestro Ponce. tiples compromisos la dejaron apenas iniciada
"¿Le sirve? Es una pieza que aparentemente en 3 páginas del primer movimiento. (¡Y no
no termina" -me dijeron-o Yo di un salto de me puedo quejar, pues más tarde me dedicó
júbilo. Efectivamente, su última nota era la do- Dos Cadencias para el Cuarto Concierto de
minante y naturalmente, hacía esperar toda una Beethovenf). Su segunda y tercera partes las
parte. ¡Se trataba del preludio original que yo grabó en una radiodifusora una mañana domi-
buscaba, el mismo que había ejecutado el maes- nical de 1939, después que había interpretado
tro en el desaparecido Teatro Arbeu! ¡Allí es- su Concierto Romántico con la Orquesta Sin-
taba, nítido y luminoso, el tema de Juan Se- fónica de México. Sin embargo, se me asoma
bastián Bach! Agradecí el obsequio y lo festejé la sospecha de que el segundo movimento lo
desbordantemente. Pero entonces surgió otro haya improvisado, en cuyo caso, se le ocurrió
problema: tenía dos preludios para una misma anteponer una pieza corta al movimiento final
fuga: uno ya en prensa, el adjudicado por mí que originalmente ideó como Capricho -este sí
y que no por ello sería lícito publicar. Habría escrito- dedicado a Matín Krause.
que reflexionar de nuevo. Pasaron algunos días La Sonata No. 2 consta de dos movimientos:
de indecisión para que llegaran por fin la luz Allegro y Scherzo (con trío). El tema princi-
y el valor. "Si -me dije- al maestro Ponce pal de la primera parte -Sombrero Ancho-
le gustaría que yo hiciera esta broma -¡él hizo hace un discurso verdaderamente magistral. El
tantas más grandes e históricas! Sería pecado segundo tema, probablemente original, es pre-
venial, si acaso lo fuese y, además, existen con- sentado con una bella disposición contrapun-
sideraciones técnicas para llevar a cabo la idea". tística, como una reina que se presenta a la
Inmediatamente me puse en contacto con la fiesta dos veces con toda propiedad, mas no
Southern y arreglé que extendiera la edición a se desenvuelve en el concierto social. En la
tres partes que se llamarían Introducción, Pre- parte final el Pica, pica, pica, perica se desarro-
ludio y Fuga sobre un tema de Bach. La obra lla en forma esplendorosa. Solamente las juve-
ganaba en importancia, sin añadir ni quitar una niles Rapsodias Mexicanas logran tan festivo
sola nota de Ponce. Desgraciadamente la Edi- ambiente con sus temas del Jarabe Tapado y
tora no entró en el juego y la publicación apa- Las Mañanitas, desenvolviéndose en variaciones
reció anunciando Dos Preludios y Fuga, lo cual y principios de fuga . Testimonio de amor a
se apega más a la verdad, pero carece del Guadalajara -su madre era de Jalisco-. La
"glamour" de una osadía blanca -secreto a vo- temática del jarabe conlleva un homenaje tan
ces- que, como ahora, podría explicar la ana- indirecto como subconsciente, quizás, a la au-
logía intrínseca, la correlación en algo inven- tora de sus días. Pon ce tarareaba Las Mañani-
tada de tres piezas y el paso lícito y decisivo, tas "qué bella melodía", decía; mucho tiempo
en fin, de la penumbra a la luz. después descubrí un manuscrito con su primera
La forma Sonata, aplicada a dúos tríos, cuar- frase musical y variaciones de simple realiza-
tetos, conciertos y las propias sonatas pi anís- ción, bordados, apoyatura s y reducción de la
ticas, fue, por razones obvias, aprovechada por armonía al movimiento de una sola parte. El
Ponce con mucha frecuencia. Como hemos vis- hombre no resistía ante sí mismo su sed de su-
to, la empleaba en ocasiones hasta como "hob- peración. .. ni su satisfacción de mitigarla en
by".· No obstante, para piano solamente hizo la belleza.
dos: la primera, estrenada en 1913 y presen- Después de esta digresión, sigamos con la
tada después en La Habana y Nueva York. Sonata No. 2. Su ambiente armónico hace re-
La escuchamos solamente sus discípulos y ami- memorar a Chopin y a Grieg, pasando por
gos más cercanos. Según parece, el único que Debussy. A mayor expansión técnica más vas-
la tocó, aparte del autor, fue Antonio Gómezan- to campo de expresión. El carácter de las obras
da. Pero el manuscrito se "desmaterializó". Re- no se refleja únicamente en los "tempi", tam-
cuerdo la Sonata con su romanticismo chuman- bién en los principios de armonía de las "es-
niano que tanto me cautivaba. La quise estudiar cuelas" o épocas. Estos crean una atmósfera
y el maestro me prometip que la reescribiría * Pasatiempo, diversión favorita. (La R.).

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aDlmlca definida. Y en esta Sonata lo prevale- esta sustituida por una sección libre. Sí, Ponce
ciente es el humorismo, la gracia y la alegría no quería ahí una forma de sonata pura ni
en lluvia de rosas, confetti y serpentinas ... agregarle otros movimientos. La quiso sola y
Su Sonatina escrita en París en 1932, consta bien construida. Pudo haberla clasificado co-
de tres movimientos: Semplice, in tempo d'Al- mo Rapsodia pero, aunque no le falta brillan-
legretto - Andante alla maniera d'un Notturno- tez, la sintió más melódica, más lírica que elec-
Allegro. La dedicó a Julien Krein, un mucha- trizante y la llamó Balada. El Concierto, de es-
cho semi excéntrico, desgarbado, residente en tructura cíclica, es en cambio más virtuosístico,
París y a quien tanto Ponce como Segovia cali- con algunos toques de apacibilidad. Un deter-
ficaban de genio. Krein regresó a Rusia en don- minado intervalo lo amplía, a la rítmica le cam-
de muchos años más tarde se supo que allí bia acento, el A llegro lo transforma en Andan-
vivía gozando de cabal salud. Lo que no se te Amoroso y obtiene el segundo tema. Así pre-
sabía ni se sabrá nunca es qué mecanismos ideo- sentados, estos dos temas son el mismo. Se ini-
lógicos o sociales le impideron realizarse ple- cia un desarrollo que ha de interrumpir con una
namente. Jamás apareció su nombre en el foro sección de 28 compases del Allegretto en cinco
internacional. Enigma sin fin. A no ser que se cuartos, portando toda la sensualidad de una
acepte lo que una amiga de los Pon ce, Odette danza del trópico. Por supuesto que aquí tam-
Smith, francesa residente en la Cote d'Azur, bién se encuentra el motivo esencial del tema,
aseguró: "Se volvió loco". Otro misterio. Infor- esta vez invertido y disfrazado, y que pese a su
tunio inexplicable. Responsable, el destino. Pon- ritmo costeño, su sencillez orquestal y nivel
ce fijó el nombre de este genio en esta Sona- sonoro general , hacen tranquilizante esta sec-
tina, cuando aún se veían en la Ciudad Luz. ción que enlaza la reexposición. Cuando llega
En manuscrito aparte el autor anota a lá- la cadenza, Ponce prefiere llevar al cabo el de-
piz Sonatina neoromantique y abajo, 111. Se sir- sarrollo que antes apenas si había sugerido,
ve de técnica o procedimientos a la rusa y es- por lo tanto es tensa y ofrece amplias oportu-
cribe su obra más osada para piano, pero su nidades de lucimiento al solista. Las escalas
acotación "neoromantique" es revelante: aún cromáticas en octava a dos manos fueron modi-
en sus obras más radicales y avanzadas Ponce ficadas por el autor, presentado dos nuevas ver-
se sintió "romántico". La última parte de esta siones, según hizo el pasaje sobre el teclado
Sonatina es una danza indígena que ya había con la Orquesta Sinfónica de México y, de
utilizado en el último de sus Preludios Enca- acuerdo con lo que aconsejó a su queridísimo
denados y que después insertaría en Canto y amigo Armando Montiel Olvera, actualmente
Danza de su tríptico Chapultepec para orques- Director del Conservatorio Nacional de Música.
ta. El, quien había probado tener una inven- En esta cadenza hay constantes cambios de
tiva excepcional de ideas musicales -y que no compás y carácter anímico. Al terminar, la or-
la perdió, pues continuaba produciendo espon- questa ataca el Finale en un Allegro. El tim-
tánea y proIíficamente-, se veía cercado por bal da la entrada al piano y éste hace una nue-
un solo tema ancestral. Este lo encastillaba por va variante del tema que, en cada nota, o en
su magnificencia de fiesta bélica. C'Jmo inves- cada acorde, se desplaza a saltos de octava co-
tigador no quería o no acertaba a encontrar mo si se hiciera en dos tesituras diferentes a frac-
otro motivo musical con esos atributos. Estaba ción de segundo. Los movimientos estructurales
cautivo. del Concerto son: Allegro Appasionato - An-
De sus obras importantes para piano, falta dante Amoroso (en que el tema adquiere perfiles
comentar la Balada Mexicana y el Concierto de canción mexicana) - Allegretto - Alle-
R omántico para piano y orquesta. Ambas com- gro come prima (o sea la reexposición) -
puestas en "forma de sonata". La primera fue Cadenza - Finale - (Allegro). La forma cí-
ampliada también a la orquesta, prevaleciendo clica del Concierto sigue el ejemplo de Liszt
el piano como solista. La Balada fue consen- en su Sonata en si menor y de César Franck
tida de su autor, hecha sobre los temas anóni- en su Sonata para piano y violín. El Concierto
mos de El Durazno y Acuérdate de mi, sola- No. 2 de Liszt ostenta un desfile de tempi (sin
plente la part~ que correspondería al desarrollo detrimento de la, i~~~ ';1p'itemátic~) (,le manera

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similar a los presentados por Ponce en su Con- maestros con reconocImIento legal en México,
cierto Romántico. -muy pocos- pero que deberían por lo tanto,
Manuel M. Ponce y el Piano, es un asunto ser los encargados de someter a la prueba a
de largos y profundos estudios, aportaciones aquéllos. Figuras de la talla de Juan D. Ter-
nuevas, investigaciones, análisis, revaloracio- cero, José Rolón, Rafael J. Tello. Candelario
nes. Un conocimiento y un detalle encaminan a Huízar, tenían que ser sometidos a examen. Con
otro detalle y otro conocimiento. Falta mucho todo y sus méritos los más desvalidos eran Pon-
por indagar, comprobar, deducir, pero hay al- ce y Estrada. Sabido es que el más alto honor
go que quiero dejar bien asentado: La obra jerárquico en la formación de la Escuela Or-
pianística de Ponce no es inferior a la de la ganística de nuestro país corresponde a los maes-
guitarra. La idea musical surge en toda su pu- tros Jesús Estrada y Miguel Bernal Jiménez.
reza. A veces trae cualidades ambivalentes al Así, pues, era muy cómico que Estrada -en
instrumento, o de expresión. Otras se le acon- plenitud de su carrera- se presentara como
diciona. Pianista consumado, Ponce era, por en- pretendiente a un diploma oficial para ejercer
de, más auténtico en el piano. En éste cumplía su su profesión. y sustentó examen para que le
libre albedrío sin presiones o caprichos ajenos otorgaran su título como Maestro de Música.
que pueden ser excelentes pero menos persona- Organista y Pianista. El caso de Ponce no era
les y espontáneos. Empero, desde otro punto diferente. Sus sinodales, con una evidente chis-
de vista, en el piano le faltó lo que en la gui- pa de humorismo, no podían ocultar su incer-
tarra le sobraba. Andrés Segovia, el artista ine- tidumbre. La situación irónica no borraba la
fable, elevó su reconocimiento universal al lra- condición de formalidad. El examinado invitó
vés de su creatividad guitarrística. ¿Dónde es- al jurado a darle un tema sobre el piano y, sin
tuvo el gran pianista que respondiera por él? otro preámbulo, improvisó una Sonata. Des-
El piano tenía muchos compositores, no así la pués una Fuga. La reunión se convirtió en fies-
guitarra. En esta época de terrible competencia tao Prendió el entusiasmo, signo absoluto de
y loca publicidad, el genio de Ponce se escapó entrega y comunión en el fuego inextinguible
por ese resquicio. Pero su desplazamiento fue cuando es verdadero: el de la lealtad artística.
del piano a la guitarra, no al revés. Sus bal- Personajes como Manuel M. Ponce no de-
buceos, búsquedas, experimentos y logros fueron bían haber muerto jamás.
hechos frente al piano, en el que viven las pul- El DI. Robert Stevenson musicólogo nortea-
saciones de su evolución. El es responsable de mericano de prestigio internacional, en memora-
sus frutos del género vocal, sinfónico, de cá- ble carta que me dirigiera el 25 de junio de
mara. y además ¿cómo podríamos negar la pu- este año, expresó:
reza de su Intermezo No. 1, el encanto de su " ... / lave every note of Ponce's music
Alhambra y la elevación contraputística de sus known to me. His poetic soul lound inef-
Preludios Encadenados? El pianista y musicó- fable expressión. How the musical world will
logo de los Angeles, Mr. Crown, me aseguró grow in appreciation of his genius you will
que en el Album de Compositores Latinoame- live to see. The noble task 01 divulging his
ricanos con nombres prestigiosos y editado por inspirations to the wider world rests not
Schirrner, lo mejor de la colección eran los dos only on your shoulders but on the conscience
Estudios modernos de Pon ce. Usted, amable 01 all who truly appreciate the beauty 01 his
lector, revise el álbum, después déjelo y oiga el works".
Idilio Mexicano para dos pianos. Como dijimos al principio la última ex-
En 1940 surgió la amenaza de un decreto presión de su fantasía tejida en su Segundo
presidencial mediante el cual ningún maestro Concierto para Piano y Orquesta no tuvo opor-
de música podría ejercer la enseñanza a menos tunidad de materializarse -él nos decía que lo
que hubiese obtenido su título debidamente re- tenía íntegro en su mente y no lo dudamos,
gistrado por la Secretaría de Educación Pública. según atestiguadas experiencias de su asimi-
Manuel M. Ponce y Jesús Estrada eran los lación y concreción-, más su númen creador
únicos poseedores de diplomas europeos, así y su música expandieron suavemente en su es-
que ellos debían empezar a examinar a los píritu el alma universal, y lo envolvieron como
maestros sin título. Mas, por otra parte, había una aura luminosa, en amorosa mortaja.
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EL CONCIERTO PARA VIOLIN y ORQUESTA DE MANUEL M. PONCE
UWEFRlSCH
Este Concierto, estrenado el 20 de agosto
'I' ~
de 1943 por el volinista Henryk Szerying con la
Orquesta Sinfónica de México bajo la dirección taciones extraeuropeas, es decir, arábigas, mo-
de Carlos Chávez, es una de las obras más riscas y, por último, incluso africanas de ese
representativas de la etapa de madurez creadora vocablo), por lo que en este punto no hay una
de Ponce -nacido el 8 de diciembre ,de 1882 contradicción esencial; además, el proceso co-
y fallecido el 24 de abril de 1948- y, sin que menzado por Ponce representaba el necesario
en ningún momento pierda su carácter mexi- paso inicial hacia la tecnificación y estilización
cano, ese regusto lírico y acre al mismo tiem- del folklore, condición previa indispensable pa-
po, tan peculiar de la expresión nacional ---"-sa- ra qu~ éste resulte un elemento fértil en la cons-
bor que necesariamente tenía que dejar su im- trucción de una música de concierto que sea,
pronta en la totalidad de la obra de un artista al mismo tiempo, nacional y estéticamente dig-
que, con el poeta Ramón López Velarde y el na. Es casi increíble que a la fecha, tanto tiem-
pintor Saturnino Herrán, integra la trilogía de po después del deceso de Ponce, aún no se haya
fundadores del nacionalismo artístico mexica- justipreciado su importancia crucial en la evo-
no- se halla a gran distancia del folklorismo, lución de la música de concierto del país.
tal vez un poco candoroso, de su primera pro- Pero aún hay más: Ponce no se detuvo en
ducción. esa fase inicial ni se inmovilizó en una técnica
No hay que echar al olvido que fue preci- musical que, correspondiendo a la época en
samente Ponce quien por primera vez recolec- que se formó profesionalmente, esto es, a los fi-
tó y clasificó de manera sistemática el producto nales del siglo XIX, tenía que ser característi-
musical de la inspiración popular, analizando y camente romántica. Ponce estudió siempre, y si
catalogando una alta proporción de los tipos bien resultaría dificil calificarlo como lo que
y formas del folklore mestizo que constituyen hoy llamaríamos "un músico de vanguardia",
el tronco central, el pilar fundamental de la se mantuvo en todo momento a la altura de su
música del país. Y al hacerlo no sólo fue el tiempo, asimilando y utilizando los recursos ex-
primero que señaló -en un artículo que data presivos de sus contemporáneos europeos y ame-
de 1919- la estrecha relación que hay entre ricanos.
estas formas de expresión popular y el tipo del Esta actitud inteligente y abierta es la que
paisaje en que se ambientan, sino que también explica esa obra maestra representada por su
les impuso patrones de valoración estética para Concierto para violín y orquesta: siendo de
separar el grano de la paja. Así, Manuel M. pura cepa romántica, no recurre -sin embar-
Ponce fue el primero que verdaderamente to- go-- a un lenguaje musical obsoleto; su lirismo
mó conciencia de la expresión musical del "al- emparenta con el idioma tan típicamente con-
ma" (o de las "almas") de la nación. temporáneo de románticos del presente como
Hubo quienes le reprocharon que falseara la Walton y Barber, e incluso con el de Alban
música popular en sus transcripciones pianísti- Berg en el caso específico del segundo movi-
cas, "europeizándola" al cambiarla de medio miento (aunque sólo por lo que hace al sen-
sonoro y al armonizarla. Pero estos críticos no tido expresivo del mismo, y no por lo que se
tienen razón. En efecto, el fenómeno histórico refiere al procedimiento constructivo empleado
de la Conquista ha determinado que toda la mú- para lograrlo).
sica folklórica de México -aún la de las co- Además, tiene una característica muy propia
munidades indígenas más remotas y menos asi- del espíritu latino -o mejor aún, del espíritu
miladas- contenga una alta proporción de ele- de esa Francia a la que fue a estudiar y en
mentos de origen europeo o,más específicamen- la que tantos amigos dej6-, pues siempre es
te, hispánico (con todas las adicionales conno- nítido, diáfano y claro, sin que haya ningún

-22-
formal, ni aún en los momentos de mayor efu- poco significativa fue, sin embargo, la obra que
slon expresiva. Y esto no sólo es representativo lanzó el nombre de Ponce a la fama, oscure-
del técnico inteligente que piensa con claridad, ciendo y ocultando así el significado profundo
sino que revela el absoluto dominio del com- y el verdadero alcance de su obra más seria.
positor sobre sus materiales, amén de su gran (Por la frecuencia de semejantes situaciones
autodisciplina. Rilke acostumbraba decir, no sin razón, que
Para caracterizar por completo a esta obra "La fama es siempre un malentendido"). Sin
habría que añadir, por último, que en ella el embargo, la melodía de referencia aparece aquí
sentido nacional ha sido decantado hasta que- tratada de tal modo que, conservando su sabor
dar en lo puramente esencial -como en las romántico, no recae en lo almibarado ni en lo
obras maduras de Béla Bartók- ya que si bien obvio, sino que, por el contrario, resulta siem-
siempre nos recuerda mediante algún giro me- pre de un alto interés musical. Esto no consti-
elemento que llegue a enturbiar su equilibrio tuye otra cosa que una reiteración del hecho
lódico, algún ritmo o determinados timbres or- bien sabido de que lo que importa en una obra
questales que su nacionalidad es la mexicana, musical no es tanto su material temático como
no cae en referencias ingenuas y evidentemente tal sino lo que el compositor sea capaz de ha-
follclóricas, y vale musicalmente por algo más cer con él mediante la aplicación sabia e ima-
que eso que algún crítico malévolo podría ca- ginativa de su técnica.
lificar (torcidamente) de "exotismo", ya que El tercer movimiento -Vivo giocoso- tiene
sostiene por derecho propio en virtud de su todo el sabor de un fin de fiesta popular, con
gran fuerza expresiva. su aire de danza, su ritmo vivo y entusiasta, sus
El primer movimiento de esta obra es un sonoridades reminiscentes de los conjuntos pue-
Allegro ma non troppo de gran penetración lí- blerinos y su discreta brillantez. Se trata de
rica en el que aparece, casi al final, una difícil un movimiento que posee un sentido similar al
cadenza para el instrumento solista que, pese que tienen los finales de algunas de las obras
al virtuosismo que exige, nunca cae en la mera más importantes de Bartók, en los que si no
acrobacia sin sentido musical, y que culmina estalla la alegría, sí surge al menos el bárbaro
con el pequeño pero agradable pendant de una entusiasmo contenido en muchas de las formas
coda nostálgica aunque, simultáneamente, chis- folklóricas más representativas. Sin que lo que
peante y vivaz. se escucha deje de ser "música pura" en el
El segundo movimiento es un Andante ex- sentido más cabal del término, se siente que
pressivo cuyo tema central está dado por la el espíritu nacional está presente en la sala
canción "Estrellita", del mismo Ponce. Esta can- de conciertos. No se perdería nada con aten-
ción sentimental, empalagosa y musicalmente derlo y dejarse seducir por su encanto.
o' '.. ~--~'i,.~ Ckill~l~ J>¡~
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MANUEL M. PONCK MUSICO POLIFACETICO
PAOLO MELLO

No siempre tenemos oportunidad de encon- los cantos de cada reglOn del país. En tal es-
tramos ante un músico que demuestre el mis- crito podemos darnos cuenta de la minuciosa
mo interés en desempeñar diferentes activida- recopilación, selección y clasificación realizada
des dentro de su arte, además de la que puede por Pon ce, a través de las siguientes frases:
ser considerada como su especialidad. Menos
aún, que logre conferirle a cada una de ellas ... La necesidad de salvar del olvido nues-
una importancia determinada, de manera que tros cantos populares se sentía con tal fuer-
estos distintos intereses queden colocados en za, era tan apremiante, que no vacilamos en
un mismo plano y se fusionen, formándose en- emprender la ardua empresa.
tonces un solo cuerpo, con muchas ramas que
brotan de él y un tronco sólido bajo el nom- Pero no todas las canciones eran dignas
bre de "Música". de estilizarse; . .. era pues indispensable la
Este es el caso de Manuel M. Ponce, es de- selección; necesitábamos una paciente labor
cir, el haber realizado cliversas actividades mu- para suavizar asperezas, para descubrir las
sicales y logrado además destacar en cada una más bells melodías ocultas en el montón de
de ellas. Compositor, intérprete, pedagogo, di- cantos acumulados por la musa popular; era
rector de orquesta y musicólogo; como tal fue preciso clasificar las canciones señalando los
un profundo conocedor de la historia de la ritmos, los campases, las modalidades de ca-
da rcnglón .2
música, realizó amplias investigaciones en el
folklore musical mexicano, fue conferencista,
En fin, reuniendo todo lo que el Maestro nos
crítico musical y autor de innumerables artícu-
los. expone en dicha publicación y sus trabajos lle-
vados a cabo anteriormente, viene a represen-
Si bien es cierto que ya antes de su primer tar la primera realización "metódica" de nacio-
viaje a Europa (1905-1906) Ponce había es- nalismo musical, motivo por el cual se consi-
crito arreglos de algunas canciones populares, dera a Ponce su iniciador. Con esto no quiero
no fue sino en los años posteriores a su regre- decir que haya sido el único hasta entonces en
so cuando decide estudiar a fondo el folklore haber hecho labor nacionalista; sabemos que
musical de su país. En efecto, en 1913 sustenta anteriormente varios compositores ya habían es-
la primera conferencia sobre La Música y la crito obras sobre "aires nacionales"; sin em-
Canción Mexicana que, según la crónica del pe- bargo, repito, fue el primero que a través de
riódico, causó gran sensación en el numeroso sus composiciones por un lado e investigaciones
público de intelectuales que llenaba la sala.' Con por el otro, realizó un trabajo disciplinado y
esto, quedaba de manifiesto públicamente el in- sistemático.
terés tan grande que Ponce sentía hacia tales
investigaciones, las cuales fueron intensificán- Por tal razón, el musicólogo Pablo Castella-
dose cada vez más en los años sucesivos, hasta nos nos dice al respecto:
culminar en el artículo por él publicado en 1919 ... A Ponce le corresponden los títulos de
en la Revista Musical de México, en donde men- INICIADOR DE LA INVESTIGACION
ciona las diferentes características que presentan FOLKLORICA y FUNDADOR DEL NA-

1 Jesús C. Romero: Efemérides de Manuel M. 2 Revista Musical de México, 15 de septiembre


Ponce en "Nuestra Música" 1950, No. 2. de 1919.

-24-
CIONALISMO CONSCIENTE en el campo de los huapangos y genuina melodía local), de
de la música mexicana." la Danza Mexicana Romántica (publicada jun-
to a una Danza Cubana), la Gavota, Malgré
Dentro de su obra musical podemos obser- Tout (aun cuando estas fueron escritas mucho
var, tanto arreglos de canciones populares, co- antes, ya que datan de principios de siglo), etc.
mo la introducción de tales melodías en com- o bien, en grandes estructuras como el Trío
posiciones de gran estructura, formando así los Romántico y el Concierto para piano y orques-
temas básicos. También, la creación de motivos ta (estrenados los dos en 1912 con el propio
propios de él con el auténtico sabor del ele- autor al piano).
mento folklórico, ya sea rítmica o melódicamen-
En el Concierto, la inspirada melodía del se-
te. Si analizamos esto último lo vemos en pe-
queñas obras, como es el caso del Scherzino gundo movimiento,
Mexicano (con combinaciones rítmicas al estilo

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así como el tema siguiente, anterior a la reex-


posición,

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3 Pablo Castellanos: Manuel M. Ponce, ensayo


(de próxima publicación, UNAM).
-25-
son evidentes ejemplos de lo que hemos venidú
mencionando. Por otro lado, la parte central
del último movimiento refleja el ambiente de
la danza mexicana.

- - "1
Otra composición que podemos citar con ta- lebre Balada Mexicana. Con forma de primer
les características y que también pertenece a la movimiento de sonata, presenta como temas de
misma época de las dos obras anteriores, es la exposición dos melodías populares: El duraz-
el Tema Mexicano Variado para piano, del cual no y Acuérdte de mi. Antes de dar comienzo
emana toda la atmósfera de la canción román- al puente que sirve de unión entre ello. y el
tica mexicana. 20. temas, aparece un pasaje en el que utiliza
La obra de mayor importancia para piano la escala hexatonal,4 sistema musical que ya ha-
sólo de este periodo es sin duda alguna su cé- bía sido usado en obras anteriores, como el

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Scherzino dedicado a Debussy y el final del 70. mera generación de discípulos que serían los
Estudio de Concierto, "Juventud". A este pro- grandes maestros del México de mañana. Los
pósito cabe recordar que fue Ponce el que dio nombres de Carlos Chávez, Antonio Gómezan-
a conocer en México la obra pianística de De- da y Salvador Ordóñez, aparecían en los pro-
bussy, presentando en 1912 un recital con sus gramas' de los recitales que presentaba su Aca-
alumnos en el que se tocaron por primera vez demia de piano.
en el país exclusivamente composiciones del
maestro francés. Los años de 1915 a 1917 los transcurre Ponce
en La Habana, Es de fácil suposición que du-
y es precisamente durante este periodo (1910
a 1914) que destacó también en modo par-
4 Archivo Manuel M. Ponce; cortesía Mtro. Car-
ticular su labor pedagógica, formando esa pri- los Vázquez.

-26-
rante este periodo enfoque su interés primordial- templar la muda magnificencia de los cie-
mente hacia el folklore musical de aquel país, los ... G
dando así como resultado la concepción de in-
Las publicaciones de esta revista no sólo com-
teresantes y bellas obras, entre ellas la Suite
prendían artículos realizados por autores loca-
Cubana, que contiene Serenata Marina, Pleni-
les, sino también traducciones de escritos forá-
lunio y Paz de Ocaso; Rapsodia Cubana, Elegía
neos por firmas como: Camille Bellaigue, Al-
de la Ausencia, Sonata para cello y piano, etc.,
fred Cortot, Oscar Wilde, etc., lo que daba a
la mayor parte de las mismas con la inserción todo el conjunto un aspecto variado y atractivo.
de ritmos sincopados tan característicos del lu-
gar. En el año de 1922 escribe la que sería su
primera versión del poema sinfónico Chapulte-
A su regreso de Cuba es designado director pec, dividido en tres partes bajo los títulos de
de la Orquesta Sinfónica de México, cargo que Hora Matinal, Paseo Diurno y Plenilunio Fan-
desempeñó durante dos años y en el cual rea- tástico; pero no será estrenado sino hasta 1929.
lizó diversos estrenos. Asimismo contrató a so-
listas de renombre, dentro de los cuales figuró Durante este periodo Poce forma a otra ge-
nada menos que Rosita Renard. Es interesante neración de discípulos, contándose entre ellos
mencionar que precisamente en 1918 se tocó Esperanza Cruz, Joaquín Amparán y Jesús
por primera vez su versión para piano y orques- Estrada.
ta de la Balada Mexicana, escrita por cierto du- Un acontecimiento que dejó una huella pro-
rante esa temporada. funda en la vida del Maestro, fue la decisión
Posteriormente dirige la Revista Musical de tomada en 1925 de dirigirse a París en donde
México, publicación mensual en la que Ponce permaneció durante casi ocho años.
aporta también numerosos e interesantes artícu- Tomó clases de composición con Paul Du-
los y figura en ciertas ocasiones como crítico. kas y se relacionó con los músticos más desta-
En esta última fase, podemos observar su ex- cados que vivían o llegaban a esa ciudad, lo-
traordiario positivismo en juzgar a los artistas, grando de esta manera penetrar más profunda-
buscando siempre el lado constructivo y mos- mente en el ambiente musical europeo.
trando abiertamente su desacuerdo para aquellos Una transición inmediata que este viaje pro-
censores que sólo se interesaban en ir a la "ca- dujo en Ponce fue su estilo de composición.
cería" de fallas, como nos lo manifiesta en una Eminentemente romántico antes, con caracterís-
reseña dedicada al pianista Arthur Rubinstein: ticas, en cambio, modernistas ahora. Esto lo
... A medida que el gran pianista ha ve- podemos notar desde sus primeras composicio-
nido desarrollando su vasto repertorio en nes escritas en Francia, como en el caso de los
subsecuentes recitales, la admiración y el en- Preludios Encadenados (1927) para piano.
tusiasmo del público (numerosísimo en los Uno de los artistas con el que estableció ma-
efectuados últimamente) ha crecido hasta yor contacto, ya sea personalmente, como a tra-
tocar los límites de la locura. vés de un extenso epistolario, fue el guitarrista
No ha faltado quien, con el cristal de au- Andrés Segovia, con quien le unían vínculos
mento de una crítica minuciosa, haya mal- profesionales y profundos lazos de amistad. Gra-
gastado su tiempo en buscar deficiencias en cias a esta relación nacieron numerosas com-
la labor pianística de Rubinstein. Encontrar posiciones para guitarra por encargo del maes-
defectos es más fácil que descubrir cualida- tro español, llenando así los huecos existentes
des ... ; Y los que atisban las más ligeras hasta entonces dentro del repertorio de este ins-
notas falsas, haciendo caso omiso de la sen- trumento. Sirvan de ejemplo sus 24 Preludios,
sación de dicha que inunda el alma al escu- Veinte Variaciones y Fuga sobre las "Folías de
char, por medio de un verdadero artista, las España", 4 Sonatas, la extraordinaria Sonata
altas creaciones musicales, acusan un espíri- para guitarra y clavecín, Tema variado y Final,
tu enfermo, incapaz de sentir las hondas
emociones; son como los pobres buscadores
de basuras que no levantan los ojos para con- 5 Revista MlI.8ical de México, 15 de julio de 19111.

-27-
etc. Muchas de sus obras para guitarra a partir hay influencia de la canClOn mexicana en el
de esta época fueron editadas por el propio Se- 20. movimiento y sabor indígena en el 30. En
govia. fin, no vamos a analizar una por una sus obras;
De ahora en adelante, en general, todas las baste con reproducir lo que el maestro Pablo
composiciones de Pon ce, como decíamos an- Castellanos mencionaba en sus conferencias:
teriormente, tomarán una ruta diferente. Algu- Después de sus primeros estudios en Euro-
nas, que podríamos considerar de un sutil im- pa, Ponce armonizó más de 200 canciones
presionismo, como el 3er. Preludio Encadenado, mexicanas, pero el número de sus composi-
o el lntermezzo No. 2; otras, definitivamente ciones originales de estilo romántico-naciona-
modernistas, como la interesante Suite Bitonal lista (cerca de 50) fue inferior al de sus
(Quatre Piéces pour piano), o su compleja So- obras de estilo romántico-universal (alrede-
natina (1932). dor de 140). Al regresar del segundo viaje,
En el caso de otros instrumentos tenemos prácticamente toda su producción final fue
la Sonata Breve para violín y piano, con su 3er. de estilo moderno-nacionalista, exceptuando
movimiento de carácter decididamente español, algunas obras como el Concierto para guita-
el Trío para violín, viola y cello y el audaz rra y orquesta, o la Sonata para violín y
cuarteto Miniaturas, en donde cada instrumen- viola, contribuciones trascendentales de la li-
to toca en una tonalidad diferente. teratura moderna en su género respectivo. 7
En 1929 escribe una Suite Sinf6nica basada Es indudable que dentro del nuevo estilo de
en la obra teatral Merlin de Albéniz, ya que composición adquirido en los años de París,
por encargo de la familia del músico español se perfila siempre, sin embargo, la inconfundi-
y recomendación personal de Paul Dukas, le ble personalidad del gran maestro. A este res-
Festivales Sinfónicos Ibero-Americanos llevados pecto el musicólogo Robert Stevenson nos di-
dieron la partitura orquestal de dicha obra pa- ce:
ra revisarla y reconstruir algunas partes. G ... La conversión de Ponce fue sincera y
Ese mismo año se toca, bajo la dirección del se expresó con la misma naturalidad en su
propio Ponce, el Tríptico Chapultepec en los segunda manera que en la primera. 8
Festivales Sinfónicos Ibero-Americanos, llevados Definitivamente, en los años sucesivos, Pon-
a cabo en Barcelona (dos meses antes se ha- ce logrará su producción musical más importan-
bía estrenado en México por la Orquesta Sin- te.
fónica Nacional). Justamente de 1934 en adelante estrena sus
Durante su estancia en París funda y dirige bellos Poemas para canto y piano: Cinco Poe-
a lo largo de un año la Gaceta Musical, en la mas Chinos, con letra de Toussaint, los de Ler-
cual colaboran personalidades como Manuel de montov, Mariano Brull, Tagore (ahora en ver-
Falla, Paul Dukas, Joaquín Turina, etc. sión orquestal), Francisco Icaza y hasta 1939
A mediados de 1932 Ponce obtiene la Licen- los últimos escritos sobre textos de Enrique Gon-
ciatura en Composición y poco después decide zález Martínez.
regresar a México. En ese mismo '34 termina la segunda ver-
Más adelante comenzó a recibir críticas en sión de su poema Sinfónico Chapultepec, que
las que se atacaba su obra, diciendo que se ha- estrena la Orquesta Sinfónica de México bajo
bía "afrancesado" y por lo tanto había deja- la dirección de Carlos Chávez, así como la Sui-
do de ser compositor "nacionalista". te en Estilo Antiguo que será tocada por pri-
Qué poco conocían su música los que le juz- mera vez con la misma orquesta en 1935, año
gaban de tal manera. En realidad él nunca aban- en que se estrena también el Poema Elegíaco,
donó la inspiración de su país, aún en las com- escrito en memoria del poeta Luis G. Urbina,
posiciones de estilo más moderno escritas en fallecido poco antes. Recordamos que cuando
Francia. Así, en su 40. Preludio Encadenado in- Ponce viajó a Cuba en 1915, salió con Urbina,
troduce un ritmo de danza indígena; en la pri- que en aquel entonces estaba exiliado y juntos
mera de las 4 Piezas Bitonales oímos la letanía
de las posadas navideñas y hasta en su Sonatina, 8 Robert Stevenson: Music in Mexico (Crowell,
New York).
6 JesúsC. Romero: obra citada. 7 Pablo Castellanos: obra citada.

-28-
ofrecieron veladas literario-musicales allí en La por éste tal vez poco antes de los años '30. La
Habana. Entre los dos maestros había por lo inauguración se llevó a cabo en Montevideo, di-
tanto una gran amistad de años, tal vez ante- rigiendo Ponce y teniendo como solista a Se-
rior todavía a ese viaje. gavia.
En 1933 es nombrado director interino del Es interesante recordar que durante este via-
Conservatorio Nacional de Música y en 1934 jt en América del Sur realizado por los dos
funda la primera cátedra de folklore en la Es- maestros, Poce sustentó dos conferencias bajo
cuela Universitaria de Música, logrando así, a el título de El folklore mexicano; la primera en
través de los conceptos por él expuestos, la crea- Uruguay (en donde cantó también la Chacha
ción de las primeras sociedades folklóricas. Cin- Aguilar) y la otra en Buenos Aires."
co años más tarde, en 1939, se hacía cargo de Una de las grandes creaciones del maestro
la dirección de la Academia de Estudios Fol- es sin duda alguna su Concierto para violín y
klóricos del Conservatorio N aciana!. Poco antes orquesta, estrenado en 1943 por Henryk Sze-
había impartido dos conferencias sobre dicho ryng, quien lo considera como la mejor obra
tema: Dignificación de la Música Mexicana y de Pon ce. En el segundo movimiento aparece
Música Indígena." el tema de su canción Estrellita, dentro de una
Durante todo este periodo una tercera ge- atmósfera totalmente modernista, envuelta en
neración de discípulos recibe sus valiosos con- ricas armonías, ya sea cuando la orquesta acom-
ejos, destacando los nombres de Armando Mon- paña al violín como cuando ella misma expone
tiel y Carlos Vázquez. dicha melodía. El todo resulta de una belleza
En 1936 nuevamente funda y dirige una re- muy singular: Y es por supuesto esta versión
vista: Cultura Musical, patrocinada por el Con- la que hace suponer que su Metamorfosis de
servatorio. Entre sus colaboradores se encuen- Concierto de Estrellita, para piano solo, haya
tran altas personalidades del mundo musical de sido compuesta durante este periodo, es decir
México, así como de otros países de Latino- alrededor de 1943, precisamente por el tipo de
américa y Europa. escritura que presenta.
Entre las últimas obras de Ponce figura su La última obra sinfónica de nuestro Compo-
divertimento sinfónico Ferial, estrenado en 1940, sitor es Instantáneas Mexicanas, seis pequeñas
acerca del cual el propio compositor nos dice: piezas, ya concebidas con anterioridad y aho-
Al escribir Ferial no me he propuesto otra ra reunidas y orquestadas con el objeto de for-
cosa que conservar en mi música las impre- mar una suite. Fue estrenada en 1947 en el
siones de una tarde de feria de un puebleci- Festival Ponce que ofreció la Orquesta Sinfóni-
to cercano a Teotihuacan" .10 ca de México bajo la dirección de Carlos Chá-
Las Cuatro Danzas Mexicanas para piano, vez. Gracias a esta obra, se le otorga el "Pre-
estrenadas en 1941, fueron escritas en la tra- mio Nacional de Artes y Ciencias" de que le
dicional forma bipartita; sin embargo vemos en hizo entrega el Presidente de la República, Lic.
ellas un desarrollo técnico tal dentro de su es- Miguel Alemán, en febrero de 1948. Fue el pri-
critura (poli tonalidad, modos gregorianos, acor- mer músico en recibir dicha distinción y su
des de cuarta, etc.), que nos hace pensar en la último homenaje en vida.
perfección estilística. Asimismo la Sonata para Ponce siempre demostró una personalidad
violín y viola, estrenada el mismo año, es se- muy marcada dentro de sus composiciones, ya
gún juicio de Sandor Roth, la máxima creación sea en el primer estilo desarrollado, como en el
de Pon ce. Y siempre en 1941, llegamos al es- segundo. Al decir esto, me estoy refiriendo a la
treno de su elaborado Concierto del Sur para manera de poderle reconocer, puesto que sus
guitarra y orquesta; más de once años de tra- obras llevan un sello muy especia!. Por otro la-
bajo, ya que según parece, a través de su co- do, indepedientemente de su manera de escri-
rrespondencia con Segovia, le fue encomendado bir, demostró en todo momento no ignorar lo
que estaba pasando en el mundo musical que
lo rodeaba. Estaba perfectamente consciente
9 Jesús C. Romero: obra citada.
10 Notas del compositor al programa del 9 de
agosto de 1940. 11 Jesús C. Romero: obra citada.

-29-
de lo que ocurría con los otros compositores,
así como de la trayectoria que seguía la música
contemporánea de aquel entonces. Esto nos lo
demuestra en sus conferencias Igor Stravinski
y la música moderna en 1924; La Estética de
César Franck en 1938 y Arnold Sclwenberg y
su obra en 1939.
Asimismo, un cierto número de sus escritos
fueron recolectados después de su muerte y pu-
blicados bajo el título de Nuevos Escritos Mu-
sicales.
Miembro Fundador del Seminario de Cultu-
ra Mexicana de la S.E.P. en 1942; director de
la Escuela Universitaria de Música en 1945;
recibió numerosos homenajes y diplomas de So-
ciedades artísticas mexicanas y extranjeras; en
fin, no terminaríamos de ennumerarlas una por
una. Lo más importante es que en su música
se reflejan las costumbres y tradiciones de una
sociedad, el sentir de todo un pueblo, medio si-
glo de historia de México.

MANUEL M. PONCE VISTO POR UN PROFESOR NORTEAMERICANO


DE ASCENDENCIA MEXICANA
RAYMOND LOPEZ

Si es verdad que todo artista creador aspira mejor aceptación en los Estados Unidos que la
a la inmortalidad, las cosas marcharon a pedir obtenida por él mismo en su recital del Aeolian
de boca para Estrellita, puesto que el deficiente Hall de Nueva York en 1916, cuando tocó so-
registro de esta canción puede haber acelerado lamente obras suyas. ¿Quiere esto decir que los
su popularidad. públicos se han vuelto más receptivos a la mú-
Ponce no pudo haber adivinado el movimien- sica nueva o desconocida? ¿D hay quizá un m~
to juvenil de los últimos años de la década de jor conocimiento de los buenos ejecutantes y
los sesenta en los Estados Unidos que parece ha- compositores mexicanos, gracias a la TV y a
ber afectado el "renacimiento" del interés por los discos y cintas grabados? Pero, por desgra-
todo tipo de guitarras y una literatura musical cia, en este país Manuel M. Ponce sigue siendo
apropiada para cualquier nivel de talentos. Rara el autor de Estrellita, ora en su versión vocal
Vf2 se ve un programa guitarrístico sin el nom- original, ora en los arreglos corales o instru-
bre de Ponce. mentales. También se le conoce como autor
A juzgar por los catálogos de grabaciones ac- de música guitarrística (cuando es el caso).
cesibles a toda clase de públicos, uno puede sa- Antes de incurrir en más lamentaciones, r~
car la conclusión de que en 1982 Ponce ganó cordemos lo que su f'reludj() ~n Po Sostenido

-30-....
Menor hizo por Rajmaninov en los Estados ra mejorar el conocimiento de Ponce y algunos
Unidos. Mis propias experiencias tuvieron que esfuerzos laudables de parte de algunos artis-
ver con dicho Preludio y también con Estrellita tas visitantes mexicanos tendientes a mejorar la
por aquellos tiempos y ambas obras eran asi- imagen de Ponce en los Estados Unidos.
mismo predilectas de mis padres mexicanos.
¿QUE ATRACTIVOS TIENE
Rajmaninov resentía que su popularidad estu-
LA MUSICA DE PONCE?
viera basada en dicha obra y a esta distancia
puede uno proguntarse si Ponce reaccionaría Un antiguo estudiante graduado en la guita-
negativamente ante la "fo1k1orización" de Es- rra clásica, respondió recientemente a la pre-
trellita. gunta en cuestión: "Ponce le ofrece algo a todo
Hoy día Ponce ha tomado su lugar entre el mundo", desde lo más sencillo hasta lo más
los inmortales de la música de México: reposa complejo". Revisando su música se puede con-
en la Rotonda de los Hombres ilustres del Pan- firmar esta aserción.
teón de Dolores y su lugar en la historia de la Ante todo, hay en esa mUSlca una apariencia
música se halla firmemente establecido. confiable de los elementos tradicionales de me-
Este solitario músico-maestro-observador, ha- lodía, armonía, ritmo, pero en forma fresca,
bitante de un rincón sudoccidental de un vasto imaginativa y atrayente. Aun en las obras neo-
país, no osa hablar a nombre de todo mundo, clásicas más complejas, en las que Ponce se co-
pero hay ciertos datos que pudieran ayudar a loca en los límites de la tonalidad tradicional,
formar un punto de vista racional y defensible existe un reposo y regreso a los centros tona-
de la posición de Ponce al norte de México. les tradicionales, o a melodías accesibles, o a pa-
Según lo estima el autor, la más inmediata trones rítmicos. Las texturas musicales tienden
y lamentable realidad está fincada en el escaso a lo complejo.
conocimiento que de la música de Ponce -fuera Hay, asimismo, referencias a lo nacional, a
de Estrellita y una que otra obra para la gui- una esencia mexicana a través de temas folkló-
tarra- existe entre músicos aficionados y pro- ricos, melodías que a algunos les sugiere algu-
fesionales y maestros; y que sea mucho menos na canción de esas que les ayudan a compren-
conocida aún por el público "consumidor". Pe- der la música y su "intemacionalización".
ro comienzan a aparecer ciertos signos favora- Por fin, para los mexicano-americanos de los
bles. Estados Unidos, el hecho de que Ponce sea
En el resto de este escrito el autor propor- considerado como un compositor distinguido de
ciona algunas optimistas informaciones de la México, un intelectual en contacto con el alma
imagen de Ponce en los Estados Unidos, ba- y el pulso de la tierra nativa, uno que guió la
sadas en 18 años de viajes y relaciones en Mé- búsqueda de las raíces nacionales y es con toda
xico y los Estados Unidos y ocho de enseñanza justicia llamado el padre del nacionalismo mu-
de la "Música en México" en el East Los An- sical mexicano, asegura para ellos su lugar en-
geles College, situado en el corazón de la más tre los ilustres.
numerosa comunidad mexicana fuera de Mé- Cualquier aumento de interés o de conoci-
xico. miento de la música de Ponce en los Estados
En mi condición de organista, pianista y maes- Unidos, puede obedecer a las razones siguien-
tro me siento sensitivamente atraído por la mú- tes:
sica de México y he considerado como una obli- l.-El renacimiento, o renovado interés por
gación personal conservarme en contacto -en la guitarra entre los estudiantes de secundaria
los Estados Unidos- con la música culta de y bachillerato de los Estados Unidos, desde la
aquel país, por medio de la revisión de catá- década de los sesenta, como un instrumento que
logos de grabaciones, audiciones críticas de con- les proporciona una experiencia musical com-
ciertos de TV y radio, conciertos públicos y pleta y personal en términos de melodía, armo-
cuanto material impreso ofrecen las librerías al nía, expresión, facilidad portátil y mínimo cos-
público en general. Se presentan aquí algunas to de adquisición.
razones posibles como causantes del lento cre- 2.-Junto a lo antedicho está la necesidad
cimiento del interé~ del público; sugestiones pa- de contar con una música apropiada. Esto no

...-.31-
significa que toda esa juventud conozca o eje- sicas de compositores latinoamericanos. The
cute música de Ponce, lo cual sería muy difícil Classical Guitar in Latín America (OAS Re-
de asegurarse. cord LOI2)) incluye la transcripción de Andrés
3.-Ha aumentado el número de grabacio- Segovia de la Sonatina Meridional para la gui-
nes de obras de Ponce hechas en México. Aun- tarra, con el guitarrista brasileño Everton Gloa-
que éstas no aparezcan en catálogos nacionales den. El disco OAS-004 de la pianista uruguaya
pueden ser fácilmente adquiridas por vIajeros Raquel Boldonini, incluye dos Estudios. Richard
norteamericanos, para uso personal, o para la Freed escribió las notas. El siguiente párrafo
enseñanza, como en el caso del autor. es digno de consideración.
4.-Ayudan las ejecuciones de obras de Pon- Pese a que Pon ce ocupa un sitio de im-
ce por guitarristas tales como Andrés Segovia, portancia en la música mexicana y produce
John Williams, Carlos Ontiveros, por mencio- muchas obras mayores de gran originalidad
nar sólo unos cuantvs. y sustancia, su música ha sido tratada con
5.-Programas por concertistas mexicanos del indebido descuido. Su sino lo obligó a ser
calibre de Carlos Vázquez, eminente pianista conocido únicamente por Estrellita. Pero qui-
y ciertamente el principal exponente de la mú- so su propia suerte que fuese casi olvidado
sica de Ponce para piano. Fue el suyo un re- aun como autor de la propia canción, cuya
ciente e importante recital de obras represen- sencilla elocuencia hizo que muchos la to-
tativas de Ponce, desde las más sencillas hasta maran por una canción folklórica. Actual-
aquellas que demandan el vigor técnico de un mente Estrellita es bastante representativa de
Liszt; más las entrevistas radiadas y televisadas los talentos de Ponce como melodista, lo cual
que se le hicieron mientras ptlrticipaba como ar- está demostrado en sus obras mayores y en
tista invitado en un simposio sobre música me- menor escala en sus dos Estudios grabados
xicana de ayer, hoy y mañana, en la Universi- aquí. ..
dad de California, Los Angeles, del 28 al 31
10.-En general, se ha despertado una con-
de mayo pasado. Todo esto puede hacer mucho
cencia por conocer mejor a la América Latina.
para proyectar el mensaje del "otro Ponce".
Existe un interés renovado en la lengua espa-
6.-Aunque en forma limitada, se ofrecen
ñola y las cosas mexicanas, especialmente entre
ejemplos en algunas obras guitarrísticas del mis-
méxico-norteamericanos que se están despertan-
mo compositor que probablemente son las úni-
do más abiertamente a las dimensiones tan vas-
cas grabaciones en los archivos locales.
tas de su herencia cultural.
7.-Una orquesta sinfónica comunitaria eje-
cutó recientemel1et el famoso Concierto del Sur, 11 .- También han colaborado los importan-
tocado por un maestro local, como excelente tes recitales de la soprano mexicana María Lui-
guitarrista. No recuerdo de ninguna otra eje- sa Rangel quien, acompañada por el autor can-
cución en años recientes. tó algunas de las más finas canciones artísticas
8.-EI homenaje que se le hizo a Ponce por de Ponce, ante comprensivos auditorios de uni-
su centenario en México (1982) y la produc- versitarios y bachilleres, muchos de los cuales
ción de discos Angel Ge México, desgraciada- escuchaban estas obras, sin duda por primera
mente sólo adquiribles ahí, le ayudan al artista vez. La respuesta permitió esperar que ha lle-
visitante para proyectar una más amplia vista gado el tiempo de aumentar aquí la dieta mu-
de la música de Ponce para voz, piano y gui- sical.
tarra. En otras marcas están grabadas algunas 12.-Una lista de grabaciones de música de
de las obras orquestales. Es de esperarse que Ponce en el importante Schumann Record and
éstas sean usadas con provecho en los Estados Tape Guide (353 Boylston Street, Boston, Mass.
Unidos por los maestros. 02116) ofrece constantemente sólo grabaciones
9.-Las grabaciones de la Organización de los de guitarra. En abril de 1982, la lista de dis-
Estados Americanos, Ediciones Musicales, Was- cos catalogados de Ponce -principal fuente
hington, D . C., están ahora a la venta. Este va- de marchantes de grabaciones en los Estados
lioso proyecto ayuda a llenar un hueco para Unidos- presenta unos 45000 LPs, stereQ de
lln !l1 ayor número de grabaciones de obras c1á- las siguientes grabaciones:
1) Concierto del Sur para guitarra y or- mayoría de autores se refieren a él como líder
questa (1941). Segovia o John Wil- de la música mexicana nacionalista.
liams.
Entre publicaciones recientes, la más digna
2) Música para Guitarra (el guitarrista John de crédito en lengua inglesa es, en opinión del
Williams incluye las Variaciones). autor, el artículo que Robert Stevenson le de-
dica a Ponce en las pp. 74-75 del volumen XV
3) Preludios para guitarra (Parkening).
del New Grove's Dictionary, VI edición (1980).
4) Sonatina Meridional para guitarra (trans- El Dr. Stevenson es muy respetada autoridad
crita por Segovia). (Guitarrista Gloeden en la música latinoamericana y profesor en la
de la OAS Inter-American Recording Universidad de California en Los Angeles.
mencionado arriba). Igualmente valiosa y más profusamente ilustra-
da con análisis es la parte que le dedica el pro-
5) Sonata Mexicana; Sonata Clásica (Sego-
pio Stevenson al compositor en Music in Mexi-
via).
co (Crowell , 1951, pp. 231-237), cuya edición
6) Sonata Romántica (Segovia). está agotada.
7) Tema, Variaciones y Fughetta sobre un La VI edición del Biographical Dictionary de
tema de Cabezón (Benítez). Baker (1978); Music 01 Latin America de Ni-
colas Slonimsky (1947) y Music in Latin Ame-
8) Variaciones sobre "Folías de España", y
rica An Introduction by Gerard Béhague (1979)
Fuga para guitarra. Y Tres Canciones
se ocupan, aunque brevemente, de Pon ce.
Populares Mexicanas (John Williams.
Music. Recording como arriba). Las series Compositores de América de la
OEA son fuentes valiosas. El Vol. I de la edi-
9) Variaciones y Fuga sobre "Folías de Es-
ción de 1955, pp. 60-70 contiene una breve in-
paña" (Fisk).
formación bilingüe de la vida y obra de Ponce,
acompañada de una excelente fotografía, más
nueve páginas de un catálogo cronológico de
LIBROS INFORMATIVOS SOBRE PONCE 283 obras de Ponce, procedentes de 13 edito-
res, más los manuscritos. Están catalogadas así:
EN BILla TECA S PARA EL PUBLICO
órgano (1), canto y piano (98), canto y or-
EN GENERAL questa (9), guitarra (23) , guitarra y orquesta
(Concierto del Sur), música de cámara (29),
De acuerdo con Carlos Chávez y Silvestre piano (98), dos pianos (1), violín y orquesta
Revueltas, Manuel M. Ponce es el compositor (el Concierto), violín y piano (5), coro (12),
mexicano más frecuentemente citado en textos órgano (2), ópera (1) obras varias, (sonata
sobre historia de la música, como el padre del para piano y guitarra) (1).
nacionalismo en la música mexicana. Una re-
Para los lectores de lengua española hay en
ciente investigación en libros regulares de las
nuestras bibliotecas públicas la Enciclopedia de
librerías públicas y de bachilleratos, revela bá-
México, que en su tomo X, pp. 784-785 pre-
sicamente la misma información referentemente
senta una página entera dedicada a Pon ce, con
a tiempos tempranos, educación, estudios ex-
una pequeña foto del compositor en el piano.
tranjeros y composiciones. Estos artículos se
Merece citarse: "La música de Ponce elevó la
extienden de una pulgada de dimensión a una
guitarra a la categoría de instrumento de con-
página entera, con sendas fotografías de Pon ce.
cierto".
La obra más frecuentemente mencionada es
Estrellita. Cuando se menciona alguna otra es ¿COMO PUEDE CONSEGUIRSE LA
Concierto del Sur, sin omitir a Segovia. Cuan- MUSICA IMPRESA DE PONCE?
do hay más espacio aparecen Ferial y Chapul-
tepec; pocos mencionan las canciones "clási- En los Estados Unidos, salvo en colecciones
cas", piezas para piano, música de cámara. La para préstamos de las más importantes uni-

,=",33=-
versidades y bibliotecas públicas, la mUSlca im- Las estaciones radiofónicas de música clási-
presa de Ponce no está en venta en los princi- ca parecen rechazar los discos de música culta
pales repertorios de música del área de Los grabados en México. Y como las compañías me-
Angeles. Es posible conseguir Estrellita en in- xicanas y los artistas no les envían discos de
numerables arreglos, ora en español, ora en in- cortesía, las estaciones locales se sujetan al ca-
glés, ora en ambos, en muchas tonalidades y tálogo doméstico de Schwann que los surte de
en versiones simplificadas. Con suerte, el Con- grabaciones de ejecutantes artistas por razones
cierto del Sur y algunos solos para guitarra pue- comerciales.
den aparecer por ahí. Aparte de esto debe uno Entre los organizadores de programas de gru-
dirigirse al catálogo de la Southem Music Pu- pos profesionales, parece existir una carencia
blishing Co., 1740 Broadway, New York, N.Y. lamentable de conocimiento del valor y jerar-
10019 para adquirir música impresa de sus lis- quía de la producción de Ponce, y, naturalmen-
tas. Es posible conseguir viejos catálogos libres te, de la música mexicana en general. Como
de gastos. se dijo antes, esto puede ser un reflejo de la
Por tanto, los músicos serios y aún los afi- falta de contactos y grabaciones y la carencia
cionados interesados en la "otra música" de Pon- de instrucción en las escuelas musicales prepa-
ce tienen pocas oportunidades en los Estados ratorias. Obviamente, el maestro no puede en-
Unidos. señar lo que desconoce y por tal motivo, es po-
sible que nunca se entere del asunto. Solamen-
Debemos mencionar las partituras compren- te la iniciativa individual es capaz de ampliar el
didas en el catálogo de la biblioteca del Centro horizonte musical del estudiante en campos del
Latinoamericano de Música de la Universidad vasto tesoro musical existente al sur de nues-
de Indiana, Bloomington, así como las parti- tro territorio.
turas de orquesta en la Colección Fleisher de
la Biblioteca Pública de Filadelfia. No es imposible el acceso a multitud de par-
tituras que pueden ser ejecutadas. Sólo se re-
quieren algunos esfuerzos. Ya hemos mencio-
ALGUNAS CA USAS DEL LENTO nado varias fuentes de acceso.
CONOCIMIENTO DE LA MUSICA
En suma, si la música de Ponce debe ser
DE PONCE mejor conocida, las grabaciones hechas y ven-
didas en México deberían eventualmente entrar
A falta de una apropiada requisitoria na- al mercado de los Estados Unidos. Pueden pre-
cional, uno debe atenerse a sus observacionts sentarse factores legales formidables, pero las
personales con objeto de hallar las causas de- estaciones radiofónicas de música clásica po-
terminantes del lento conocimiento de las obras drían ser provistas con discos de cortesía. Las
mayores de Ponce en los Estados Unidos. ciudades importantes y algunos bachilleratos y
universidades tienen FM en sus estaciones de
Ante todo, debo insistir en que la estatura
radio para ofrecer música clásica casi en ex-
y lugar ocupados por la música de Ponce en
clusiva.
México, con todo derecho, está literalmente
avalada en los Estados Unidos, pero en la prác- En una reciente serie radiofónica titulada
tica, las oportunidades para un contacto públi- "Música del Mundo Hispánico", se tuvo aparen-
co con el genio del compositor son limitadas. temente que recurrir a discos procedentes de
Contribuye a tan negligente postura la po- España, o del catálogo Schwann; o quizá a
bre opinión que de la música de México tiene colecciones privadas. De México se escuchó una
el público, tanto entre los músicos como entre mínima parte de música.
los amateurs de los Estados Unidos. Los clá- Si se estableciera un mayor contacto y cono-
sicos europeos y la música folklórica y popular cimiento del hombre y su música, la demanda
de México inundan la escena (aparte del "pop" de partituras y ejecuciones pudiera aumentar.
doméstico) . Tal como están las cosas, ,el auditor común, '0

-34-
el amante de la música, dependen grandemente director o solista halle llamativa y adecuada
de 10 que tienen a mano. para un despliegue de madurez técnica y mu-
sical del compositor.

EL FUTURO
PARA TERMINAR
Para expander el arte de la música mexicana
en los Estados Unidos, incluyendo la del inmor- Uno debe alabar los esfuerzos de los "empre-
tal Ponce, deberíamos: sarios" mexicanos independientes, tales como
l.-Alentar giras, aunque sean limitadas, de Carmen Sordo Sodi y sus Representaciones Ar-
músicos mexicanos especializados en música tísticas de México, D. F., por haber introduci-
culta. Conferencias-conciertos de música mexi- do últimamente al pianista virtuoso y especia-
cana son valiosos. lista en Ponce, Carlos Vázquez, a los públicos
de Los Angeles: una primera experencia valio-
2.-Alguien, en alguna parte, debe abrirle sa e impresionante para muchos.
el mercado a las grabaciones de música mexi-
cana en los Estados Unidos. (¡Este puede ser Las conferencias-conciertos de María Luisa
un ingenuo deseo!). Rangel, soprano de la ciudad de México, y las
contribuciones de la Heterofonía de Esperanza
Pulido (ahora órgano del Conservatorio Nacio-
nal de Música) han hecho mucho para elevar
la imagen de Ponce en los E.U.
Ojalá que aumente el número de publicacio-
nes póstumas de Ponce, y crezca el número de
sus grabaciones en México y escuchemos, por
10 menos, conciertos en vivo por radio o te-
levisión y literatura impresa de "Ponce siempre
presente", todo combinado para producir una
constelación en torno a la Estrella que añada
bril\o a nuestro firmamento musical.

Traducción de ESPERANZA PULIDO

3.-Por medio de los departamentos de mú-


sica de los bachilleratos y las universidades ex-
plotar las posibilidades de programas que in-
cluyan la música culta de México. La música
folklórica y la música popular carecen de pro-
blemas. Es verdad que cuesta menos trabajo
contratar concertistas individuales, con un es-
fuerzo mucho menor de hospedaje, transporte
y alimentos.
4.-Es tiempo de que los grupos mexicanos
que nos visitan les añadan a sus programas
obras de Ponce tan impresionantes como el
famoso Huapango, los Sones de Mariachi y Sen-
semayá, todas obras maestras, en realidad. Qui-
zá en toda la literatura de Ponce haya por 10
menos una obra que algún conjunto musical,

-35-
La labor de Investigación Folklórica de
Manuel M. Ponce
CARMEN SORDO SODI

La obra de Mauuel M. Ponce ocupa una des etnomusicólogos del futuro, iniciando así
de 10s principales capítulos de la hi storia de la la escuela de la etnomusicología, entre cuyos
música mexicana, no solamente por la prodi- alumnos eminentes cabe mencionar a Fritz Bo-
galidad de su parte creadora, sino porque, ade- se, George Herzog, Misczyslaw Kolinski, Edith
más de haber sido un extraordinario pedagogo Gerson-Kiwi y Marius Schneider. Este grupo
musical, incursi onó en otros campos en los que fue el que llevó a cabo la mejor y mayor parte
no he' 110S detenido suficientemente nuestra aten- de la investigación y edición de la Primera An-
ción: su labor musicológica, su personalidad li- tología SonO/a del M undo, con materiales re-
teraria, su poesía, sus crónicas y críticas musi- copilados por ellos mi mas para el Archivo de
cales, sus trabajos editoriales y de promoción Berlín . Palpable resulta esta influencia en los
musical internacional y sus investigaciones en trabajos de invetigación folklórica y recopila-
el ámbito de la etnomusicología y del folklore. ción musical que se impuso Ponce.
A no ser por la recopilación realizada por Pon-
ce de muchas de las más conocidas melodías Al fundar en París la revista GACETA MU-
tradiconales que circulan en la actualidad, for- SICAL, su vinculación con el mundo de la et-
mando parte de nuestra cultura musical nacio- nomusicología fue mayor: varios etnomusicólo-
nal, éstas se hubieran perdido. Tal rescate, por gas colaboraron con él, escribiendo artículos
sí solo, colocaría al autor de la Balada Mexi- para la incipiente publicación, como el eminen-
cana en un lugar prominente. te organólogo Andrés Schaeffner, el Dr. Brai-
Es indudable que el nacionalismo de Ponce loiu, Jacques Chaillet, entre otros.
se acentúa durante su primer viaje de estudios Por aquel entonces, la etnomusicología era
a Europa, principalmente cuando, como alumno desconocida en nuestro país. Le tocó a Ponce
del Conservatorio de Berlín, sufrió el choque damo informes acerca de esta nueva ciencia,
de las corrientes imperantes y vivió las primi- primero por medio de sus escritos y de la
cias de lo que sería la etnomúsica dentro de un revista mencionada, desde París. Posteriormente
marco científico al que no estaba acostumbra- a su regreso a México, se empeñó en la for-
do. Los musicólogos berlineses se planteaban mación de investigadores musicales y recopila-
pregu ntas conducentes a la resolución de la dores de folklore, consiguiendo introducir aquí
probl emática referente al conocimento integral la carrera de folklorólogo, tanto en la Es-
del fe 1ómeno sonoro y su vinculación con el cuela de Música de la Universidad, como en el
hombr p Lo que la música es para el hombre en Conservatorio Nacional de Música, de cuya ca-
sus mú lti ples funciones vitales y en sus diver- rrera fue no sólo el promotor, sino el principal
sos medios ambientales, era el objeto de dis- maestro. Tuvo como alumnos en esta cátedra,
cusión entre músicos, investigadores musicales a distinguidos investigadores y compositores, co-
y antropólogos, principalmente de Francia, Ale- mo Francisco Domínguez, Concha Michel, Ame-
mania, Holanda y Hungría, cuando Ponce era lia Millán , Virginia Rivera, Vicente T. Mendoza,
alumno de Martin Krause. Ahí sufrió el choque Carlos Chávez, Alfonso del Río, Nabor Hur-
de las corrientes imperantes y tuvo la oportu- tado y Pablo Castellanos, entre muchos otros.
nid ad de estar en contacto con los grandes mu- Gracias a ellos hemos podido contar, si no
sicólogos de la escuela de Berlín: Carl Stumpf, con un estudio completo, cuando menos con
Abraham van Hornbostel, Curt Sac~s y Robert un panorama de la música tradicional y folkI6-
Lachmann, quienes formaron a los más gran- rica de Méxieo .

. -t:.a6~
El pequeño pianista mexicano, que fuera edi-
tada por Ricordi, México, en 1976, la cual con-
siste de 40 piezas tradicionales mexicanas, adap-
tadas para la enseñanza elemental del piano,
repitiendo así, aunque con varios temas nuevos,
lo que anteriormente hiciera su maestro.
Ponce fue uno de los promotores del Depar-
tamento de Folklore que fundara en 1921 la
Secretaría de Educación , mucho antes de la
creación del Instituto Nacional de Bellas Artes.
Al promulgarse en diciembre de 1946 la ley
orgánica que dio lugar al Instituto mencionado,
los departamentos de Música y Folklore de la
Secretaría se convierten (según el artículo 60.
de esa ley) en el Departamento de Música del
flamante Instituto, y el Departamento de Fol-
klore se reduce a la Sección de Investigaciones
Musicales del INBA, misma que se transforma,
en 1976, gracias a un proyecto mío, en el ac-
tual Centro Nacional de Investigación e Infor-
mación Musical del INBA (CENIDIM), del
que fui fundadora y primera directora y en cu-
El maestro Ponce con Armando Montiel Olvera en yos archivos se encontraban, hasta 1977, mu-
un viaje de estudio a Tamiahua, Veracruz. .. . .. chos de los trabajos de recopilación de Ponce:
Apasionado de la investigación musical, sus manuscritos de su puño y letra, correspondien-
trabajos de recopilación de melodías tradicio- tes a las investigaciones que realizó el maestro
nales, tanto entre los grupos étnicos, como en para el extinto Departamento de Folklore, prin-
los diversos habitat del pueblo mestizo, fue in- cipalmente en los estados de Michoacán, San
fatigable y encomiable. Dentro y fuera del país Luis Potosí, Oaxaca, Nayarit, Zacatecas, Jalis-
se le conocía más, a nivel popular, como autor co, Yucatán, Guanajuato y Aguascalientes. El
de canciones mexicanas que como compositor rescate de estas "fi\.:has Je trabajo" de las in-
de música culta. Las canciones del pueblo le vestigaciones folklórico-mu sicales de Ponce, se
dieron las primicias de la fama, pero él nunca debe al ilustre etnomusicólogo y compositor
se las atribuyó: siempre dijo que lo único que catalán Baltasar Samper, exiliado político espa-
había hecho era armonizarlas, dejándolas como ñol, quien tomó la nacionalidad mexicana. Des-
las canta el pueblo. Otra cosa es el uso que pos- de su llegada a México, Samper trabajó para
. teriormente hizo de algunas de esas melodías en nuestro gobierno, habiendo sido nombrado pos-
partes de sus obras. teriormente miembro de la Sección de Inves-
Tomando a Francia y a Alemania como ejem- tigaciones Musicales del INBA, lugar donde le
plos, Ponce aplicó en México el folklore a la conocí y de quien tanto aprendí durante los sie-
pedagogía infantil, tanto en lo que escribió para te años que tuve la suerte de trabajar a su lado.
los jardines de niños, como en la enseñanza del En la época de aquellas investigaciones, Pon-
piano. Tituló la primera serie de piezas fáciles ce propuso un plan de trabajo a las autorida-
para niños Veinte piezas fáciles para los peque- des de la Secretaría de Educación:
ños pianistas mexicanos, edición realizada bajo l.-Antes todo, recoger las tonadas popula-
el patrocinio del Ateno Musical de México en res, obedeciendo a un plan general, cuya base
marzo de 1935. En todas estas piezas usó te- sería la división de nuestro territorio en zonas
mas folklóricos. de estudio y exploración, formadas por las re-
Curiosamente, Pablo Castellanos escribe en giones más ricas en canciones (estados de Mi-
diciembre de 1966 la introducción para su obra choacán, Jalisco, Oaxaca, Veracruz, las impor-

:-37-
tantes y fecundas zonas del Norte y del Bajío, Ponce comentó lo siguiente a Carlos González
etc., etc.) . Peña:
. .. Hace dos años que me dedico particu-
2.-Nombrar un comité directivo que podrían larmente a recoger y estilizar las canciones
integrar, además de un delegado de la Secreta- populares mexicanas. He tenido dificultades
ría de Educación Pública, un músico ("por por la falta de apoyo oficial y no he empren-
Dios, que sea músico") entusiasta por este gé- dido un viaje de estudio a través de toda la
nero de trabajo literario, que se encargaría del República. ¡Ese hubiera sido mi deseo! ...
texto de las canciones.
Aunque la lista que proporciono a continua-
3.-Este comité enviaría a las diferentes zo- ción no contiene todas las melodías recopiladas
nas delegados con preparación adecuada de es- y armonizadas por Ponee, al menos se puede
tudios serios de composición musical y provistos dar una idea clara de lo que logró hacer:
de gramófonos y otros aparatos fonográficos
Acuérdate de mí mujer ingrata
para imprimir discos y cilindros con los di-
rectamente tomados de los campesinos y de los Adiós mi bien
"cantadores populares". A la orilla de un palmar
Antes te amaba
4.-Los delegados tomarían, asumsmo, foto-
A tus amigos
grafías de los lugares donde recogieran las can-
ciones de las "danzas" religiosas y profanas, de Cielito lindo
los instrumentos musicales más característicos Ciuden su vida
de la región, y apuntarían los datos interesantes China del alma
acerca de la producción de los cantos, fechas, De tres flores
etc. Dolores hay
5.-Las investigaciones se harían, de prefe- Dos seres hay
rencia, en los lugares más alejados del ferroca- Hace ocho meses
rril, donde se supone que no ha llegado la India mía
plaga del jazz, o de los couplets citadinos. Isaura de mi amor
6.-La traducción de los cantos y bailes se- Jarabe Zacatecano
ría hecha por músicos competentes, quienes los Joven divina
escribirían en notación actual, mas cuidando de La Adelita
no alterar ni el ritmo, ni la melodía recogida
La barca del marino
por el gramófono.
La Cucaracha
7.-Las melodías se escribirían en un pen- La Pajarera
tagrama, reservando otros dos para la armoni- La Pasadita
zación o acompañamiento, si así se deseare.
La Peña
8.-Las melodías catalogadas y ordenadas La Posada
por regiones, o asuntos (canciones de amor, La Revolución
humorísticas, picarescas, etc. ) , se publicarían
La Trigueña hermosa
en un volumen, ilustradas con las notas y foto-
grafías adecuadas. La Valentina
La Zandunga
En teoría, el plan fue aprobado, más no así
el presupuesto para llevarlo a cabo, de lo que Las Mañanitas
mucho debemos lamentarnos ahora, pues de ha- Lejos de tí; (según Carlos Vázquez hay tres
berse podido comprar los aparatos necesarios, manuscritos de Ponce con este mismo tí-
tendríamos hoy día una muy valiosa antología tulo, uno corresponde a la versión original
sonora del folklore nacional. Respecto a la fal- de la canción del propio Ponce y, los otros
ta de apoyo para la investigación folklórica, dos constituyen versiones del pueblo).

-38-
Los Tecuanes de las mismas, hecho que indudablemente obe-
Los Xtoles dece a las ligas psicológicas y afectivas de Pon-
ce con la poesía: su entrañable amistad con
Mañanitas de Aguascalientes
poetas de la talla de López Velarde, González
Marchita el alma; (esta canción se le cono- Martínez, Urbina, etc., y, el hecho de que él
cía también desde el siglo pasado con el mismo era poeta y acostumbraba entre amigos
nombre de "La ilusión perdida" y se le y en la intimidad hablar en verso. Las letras
atribuye a Antonio Zúñiga, trovador y que escribió para algunas de sus canciones de
compositor popular que cerca de 1875 vi- concielto son prueba de su delicado estilo y
vía en Silao, Guanajuato). buena rima.
Me he de comer un durazno
Palomita Alguien ha dicho que la mUSlca mexicana es
toda canción y la música de Pon ce, no sólo por
Perdí ya toda esperanza
concepto y uso de las melodías tradicionales del
Por tí mi corazón pueblo, sino por su proyecclOn, es toda can-
Qué lejos ando ción: una canción a México.
Qué pronto
Rayando el sol
Si algún ser
Soñó mi mente loca
Soy del rancho
Soy paloma errante
Te amo
Vengo a saber si tú me amas
Ven oh luna
Ya no llores, enjuga ese llanto
Ya sin tu amor
Yo me propuse
Yo mismo no comprendo Ponee con niñas tarascas y la ciega Severiana Ro-
dríguez, quien cantó para él muchas canciones po-
Yo no sé qué decir pulares mexicanas.
A esto, cabe añadir un comentario sobre en
cuáles obras de concierto introdujo Ponce algu-
nos temas folklóricos, producto de su propia
investigación. Y así encontramos: "Cuiden su
vida", en el Ferial; "Mañanitas" y "Jarabe" en
la Rapsodia Núm. 2; "Me he de comer un du-
razno" y "Acuérdate de mí", en Balada Mexi-
cana; "Cielito lindo", en Preludio Mexicano,
melodías yuca tecas y chiapanecas en el Scher-
zino Maya, etc. Otras obras nacionalistas con-
tienen melodías que habían sido rescatadas con
anterioridad por Melesio Morales, García Cu-
bas, Ricardo Castro, Ríos Toledano, J. lriarte,
Tomás León, etc., aunque sin un propósito tan
definido como el de Ponce.

A lo largo del estudio y análisis de sus re-


copilaciones musicales, es notoria su afición des- Ponce en la feria de San Marcos.
medida por la canción y por los buenos textos

-39-
RECTIFICACION DE ALGUNOS ORGANISTAS
MEXICANOS

La escuela organística de México, durante como lo doctores Arturo Arnaiz y Freg, Ig-
e te siglo, fue iniciada en 1934 por los maes- nacio Bernal, Miguel Bueno, Rodolfo Rojas
tros Jesús E trada y Miguel Bernal Jiménez, Zea, entre otro ; y también extranjeros, como
poco de pué de su regreso de Europa, en don- lo maestros Fernando Germani, Helmut Reil-
de por varios años habían cursado altos estu- ing, Ferrucio Vignanelli etc., de cuyo comen-
dios musicales. Con ba e en esa escuela, mu- tarios y opiniones dio amplia cobertura la pren-
cho destacados organi tas mexicanos, desde hace a nacional.
má de un cuarto de siglo, han cOlinuado la tra-
dición organística mexicana mediante la cátedra Convencido el Gobierno Mexicano, despué
y los conciertos, que en nuestro país y en el ex- de haber efectuado consultas, dentro de las cua-
tranjero ofrecen, dando con elJo profundo real- le la que se hizo al Instituto Smithsoniano de
ce a e te arte. O sea, que no hace falta "crear Washington, se decidió preservar eso tesoros
escuela" aquí, como afirma Felipe Ramírez Ra- artístico, iniciándo e su reconstrucción en el
mírez en reciente entrevista. año de 1975, labor que se terminó en 1977.
Una vez reconstruido los órganos, se solicitó
Las apreciacione que hizo Felipe Ramuez, in i tentemente se hicieran oír de nuevo, como
en el comentario aparecido en Diorama de la lo prueba, por ejemplo, el artículo de Manuel
Cultura de Excelsior están llenas de impresiones Aguilar de la Torre del 18 de diciembre de
y anhelos de ocultar realidades, lo cual denota 1977, publicado en Diorama de la Cultura de
falta de ubicación y de información. Es justo Excélsior y la copiosa correspondencia, que el
por lo tanto aclarar la erie de conceptos ver- mi mo maestro Víctor Urbán envió a la Direc-
tidos por ese músico, ya que con ellos se des- ción General de Bellas Artes, en su calidad de
virtúan lo hecho , logro ,dato y fecha , que Director del Con ervatorio acional de Música.
enmarcan la ya larga actividad organística en
nue tro país. Por otra parte, en relación con el órgano del
En primer lugar, la inten a labor que e des- Auditorio acional , no se entiende por qué Fe-
plegó para recon truir los magnífico órganos lipe Ramírez habla de u reinauguración ¿Aca-
de la Catedral de México, de truídos por el o se recon truyó, remodeló o reformó ese ins-
incendio de 1967, la emprendió el organista Víc- trumento? Lo único que hizo el músico quere-
tor Urbán, egún e puede comprobar en la tano fue tocarlo por tercera ocasión el pasado
nota de protesta publicada por Excelsior el sá- domingo 18 de julio, des pué de que lo hiciera
bado 2 de diciembre de 1972, en la que maes- Víctor rbán el 15 de febrero de este año, en
tros y alumnos del In tituto de Liturgia, Música concierto privado para el Director de Bellas
y Arte, hacían er a la opinión pública que ins- Arte y otra autoridade del INBA, egún se
talar un órgano electrónico en el recinto cate- informó al público en la nota aparecida el 21
dralicio, iba en contra de la dignidad del Tem- de febrero en Ultima Noticia de Excélsior; y
plo Mayor de México, dado que era posible más recientemente, el 30 de junio pasado, el
la re tauración de lo órgano hi tórico . mi mo organi ta Víctor Urbán lo tocó para más
de 5 000 per ona , entre la que se encontra-
A lo afane de e e grupo de mú ico , se su- ban el Subsecretario de Educación Pública, el
maron lo de la nión acional de Organis- Director del Politécnico y otras autoridade más,
ta , con el total apoyo y pre tigio del entonces acontecimiento que e dio a conocer el 29 de
u pre idente han rario, mae tro Je ú Estrada junio en Excélsior. Con el recital de febrero,
y I d de tacadas personalidade mexicana rbán hizo escuchar de nuevo el instrumento,

-40-
después de varios años de silencio, manifestán- Música y Danza del INBA cerraron las puer-
dose las autoridades del INBA sobre la nece- tas a toda iniciativa presentada por los antiguos
sidad de volver a utilizar ampliamente el mag- titulares del órgano. No se comprende por qué
nífico instrumento. ahora, a "todo vapor", organizan un festival,
cuando durante casi 6 años estuvieron renuen-
Este órgano se instaló en el recinto de Cha-
tes a patrocinarlo
pultepec, gracias a la tenaz labor del maestro
Jesús Estrada, quien lo inauguró el 23 de no- El órgano, para que lo tocara Felipe Ramí-
viembre de 1958 con un concierto al que si- rez, no fue necesario "remozarlo", puesto que
guieron 3 recitales del afamado organista britá- eléctrica y mecánicamente siempre ha estado
nico E. Power Biggs. en condiciones de ser tocado, gracias a los cui-
dados de sus organeros que lo han mantenido
A partir de esa fecha, el maestro Jesús Es-
en excelente estado. Lo que se hizo fueron adap-
trada, en su calidad de organista Titular, .1uxi-
taciones a la sala desde inicios de este año,
liado siempre por el subtitular maestro víctor
quitándose, entre ellas, unos paneles que cubrían
Urbán, promovieron durante 13 años los Fes-
las fachadas del órgano.
tivales Internacionales de Organo, en los que
participaron connotados organistas mexicanos, La idea de efectuar conciertos populares en
como Alfonso Vega Núñez, Jesús Carreño, Da- 10 que resta del año, no fue del organista Fe-
niel Trejo, Manuel Zacarías, Juan Bosco Co- lipe Ramírez. Este proyecto fue entregado al
rrero, Roberto Oropeza, Francisco Javier Her- Director de Bellas Artes en febrero por los
nández, Hermilo Hernández, Abel Rodríguez, maestros Ramón Noble y Víctor Urbán, que
Dorothy Goul1ete y los propios Jesús Estrada presentaron detallado plan de conciertos, que
y Víctor Urbán, así como también famosos mú- es el que ahora aparece con una nueva pater-
sicos extranjeros, como Fernando Germani, Ma- nidad, incluyendo la idea del homenaje al Maes-
rilyn Mason, Jiri Ropek, Clyde Halloway, Geor- tro Jesús Estrada que se proyectó para el mes
ge Markey, Renzo Buja y otros más. de octubre, que en este caso resulta contradic-
torio por el trato que le dieron las autoridades
A uno de aquellos Festivales fue invitado del INBA al fellecido maestro jalisciense, a quien
Felipe Ramírez por el maestro Jesús Estrada como pago a sus esfuerzos y entusiasmo de
para que tocara un concierto, propuesta que años, le suprimieron, conjuntamente con Víc-
aceptó el organista queretano, no obstante "la tor Urbán, la tit1l1 aridad del órgano, sin mediar
"acústica inadecuada" que según el invitado ha- explicación ni indemnización por los 20 años
bía en el Auditorio y el continuado rechazo de de servicios.
que hizo gala durante años, por ser ese instrumen-
to italiano y no alemán. O sea que la "satisfac- La labor de investigación se ha realizado en
ción" que tiene ahora el organista, es resultado México desde hace varias décadas; prueba de
de un sorprendente cambio, cuyos resortes se ello son las ediciones impresas, las conferen-
ignoran. cias, los discos y los conciertos que se han mul-
tiplicado con los años, gracias, por ejemplo, al
A mayor abundamiento, el órgano del Audi- patrocinio de la Universidad Nacional Autóno-
torio se hizo oír durante muchos años, desde su ma de México, la Secretaría de Educación PÚ-
inauguración, en múltiples conciertos para el blica y recientemente a FONAPAS. Esto de-
grueso público, "siempre en domingo, siempre muestra que no ha habido "carencia de inves-
a las doce y siempre a dos pesos el boleto", tigadores" y que no sólo Felipe Ramírez "ha
frases del maestro Angel Salas de quien fue la tenido la suerte de encontrar, por primera vez,
idea y quien desplegó todo su entusiasmo para música organística mexicana del siglo XVIII".
que los muchos organistas mayores de México
Los maestros Bernal Jiménez y Jesús Estra-
tocaran en aquellos Domingos Populares de la
da, hasta poco antes de su fallecimiento, resca-
Cultura.
taron tesoros de la música virreinal mexicana,
En este sexenio enmudeció el istrumento, de- labor que permitió reunir, estudiar, analizar,
bido a que las autoridades de la Dirección de transcribir e instrumentar, en ocasiones, múlti-

-41-
pIes obras de los siglos XVI, XVII Y XVIII. Necedad sería seguir abundando en esta ma-
Miguel Bernal en el Colegio de las Rosas y teria, por conocidos que son los hechos, logros
la Catedral de Morelia y Jesús Estrada en las y datos. Tranquilamente hay que situarse en el
Catedrales de México, Durango, Oaxaca, Gua- nivel de la cultura musical de México, parte
dalajara y Puebla fueron al encuentro de obras de la cual sostiene la escuela organística mexi-
que se creían perdidas para siempre. Conse- cana y la investigación, que de la música vi-
cuencia de esa labor (apoyada la de Jesús Es- rreinal, hicieron Estrada y Bernal con las só-
trada por la Universidad), son las obras de lidas bases académicas que requiere esta disci-
Hernando Franco. Antonio de Salazar, Manuel plina.
de Sumaya, Ignacio Jerusalem y Stella, Juan
Matías de los Reyes y otros más, que abara En resumen, no hace falta "crear una escue-
forman parte del acervo cultural de México. la", los interesados en aprender la tienen desde
Esta herencia de los músicos del virreinato, no hace años a su disposición, aquí en México.
sólo se ha escuchado en concierto, radio y tele- Con todo lo anterior se ha satisfecho la ne-
visión, sino que también ha sido grabada en cesidad de aclarar, dentro de un cuadro de rea-
Voz Viva de México de la Universidad Nacio- lidades, cosas demasiado sabidas y elementales,
nal Autónoma de México y dentro. del enfoque para salir al paso a tan insólitas afirmaciones
histórico, en el libro Música y Músicos de la hechas por el maestro Felipe Ramírez Ramírez.
Epoca Virreinal, editado por la Secretaría de
Educación Pública, el maestro Jesús Estrada Firman este escrito:
reconstruye el ambiente de la época, la vida de lUAN B. ESTRADA GUTIERREZ
los compositores e intérpretes y las circunstan-
RAMON NOBLE O.
cias en que se crearon aquellas obras, además
de abordar las interrelaciones entre el medio y VICTOR URBAN
esta manifestación artística; y otro libro aún MIGUEL REYES
inédito: La enseñanza musical en la Nueva Es- PABLO HERNANDEZ
paña. lA VIER GARDUNO SANSAUBE

-42-
CRONICA
LIBROS
ESPERANZA PULIDO

JOSE ANTONIO ALCARAZ, Hablar de para poder percibir cosas de ese jaez. Al artista
Música (Conversaciones con compositores del lo hacen sus obras y a las obras los tiempos.
Continente Americano). Universidad Autóno- Necesario es que éstos corran lo suficientemente
ma Metropolitana, Coordinación de Extensión para colocar a cada quien en su verdadero si-
Universitaria, México, D. F., 161 pp. tio ...
Buena idea tuvo José Antonio AJcaraz de El substítulo de "Conversaciones" le sienta
reunir en un libro las importantes conversacio- perfectamente a este libro. En el caso de Cage,
nes y entrevistas que ha tenido con algunos de por ejemplo, pronto abandona José Antonio el
los más conspícuos compositores de América: tono de entrevistador para iniciar una plática
Carlos Chávez, Mario Lavista, John Cage, Ser- de igual a igual con John Cage, a quien su
gio Cervetti, Aarón Copland, Virgil Thomson, intercocutor le intriga e interesa, según puede
Roger Sessions, George Crumb, Lukas Foss, uno irlo percibiendo paso a paso, sobre todo
Edgar Varese y Alberto Ginastera, o sea: dos en el incidente entre Cage y Virgil Thompson,
de México, siete de los Estados Unidos, uno de en el que insiste posteriormente J.A. al conver-
la Argentina y uno de Uruguay. Quizá José An- sar con este último. Posee el autor un "sistema"
tonio vuelva sobre la carga con algunos otros especial para arrancarles secretos y comunica-
compositores contemporáneos de este Continen- ciones a sus " víctimas". El secreto de tal "sis-
te, para que su obra no se quede trunca. Claro tema" proviene del conocimiento estricto que
que habría de llevarlo a cabo entre los más jó- de cada uno de los compositores elegidos tenía
venes valores, pero para ello tendría quizá que J.A. antes de abordarlos. No solamente cono-
permitirles unos cuantos años adicionales de cía la obra integral de cada uno, sino también
evolución. mucho de sus psicologías en el terreno de los
Partió, cual debía ser, en dominios de Car- conocimientos y las limitaciones. Llevaba en ca-
los Chávez, dividiendo sus conversaciones con da caso preparado un cuestionario que con
él en tres partes a cual más atractivas, entre las frecuencia hacía a un lado para proseguir una
que la última incitó grandemente mi interés: conversación libre, de acuerdo con el sesgo que
El testimonio de Carlos Chávez sobre Silvestre iba tomando. La pregunta inicial: "¿Cuáles son
Revueltas. No me expliqué la razón por la que para usted los problemas más importantes a
el maestro Chávez le haya pedido a su inter- que se enfrenta actualmente el compositor?",
locutor que publicara lo que iba a decirle sobre aparece en el libro con Cage, Cervetti, Copland
Revueltas hasta después de su muerte. Hubiera Mario Lavista y Ginastera. En George Crumb,
sido mucho mejor que contribuyera con sus hacia finales de la entrevista y en los demás
rectificaciones a borrar la mala impresión que está implícita en el transcurso de la conser-
teníamos muchos sobre relaciones poco amis- vación.
tosas entre los dos grandes músicos. Ahora quie- Las más interesantes conversaciones me pare-
ro creer que se trataba de maledicencias con- cieron integradas en las "confesiones" de Cage
tra Chávez, pero ¿por qué no aclararlo él mis- y Chávez. Después de leerlas se producen en
mo? Hay cosas que cuesta trabajo explicarlas. uno reacciones determinadas, aunque con to-
Estanislao Mejía fue mi maestro y nunca le das aprende uno algo que no sabía, o de lo
conocí tan siniestras intenciones, como indicó que se hallaba inconsciente. Indudablemente
Chávez, pero yo era entonces demasiado joven José Antonio Alcaraz es extremadamente "du-

-44-
cho" en el arte de "conversar" con gente famo- Esta clasificación es muy original en el deve-
sa del mundo internacioal de la música. Lo rea- nir de las "fluctuaciones sonoras" de la obra pia-
liza con gran seriedad, pero intercalando aquí nística de Debussy. Naturalmente el autor colo-
y allá un poco de sal y pimienta ... ca todos los títulos dentro de sus categorías co-
rrespondientes.
JOS E EDUARDO MARTINS, La sonoridad
pianística de Claudia Debussy. Novas Metas
Ltda. Sao Paulo, Brasil, 1982, 256 pp. No es ninguna novedad que en la obra total
de Debussy reine una gran flexibilidad. Raros
son los movimientos rígidos -expresa el au-
Afirma la prologui ta de esta obra, Julia d'AI-
tor- dando como ejemplo Las Bailarinas de
mendra, directora del Instituto Gregoriano de
Delfos, en lo que quizá no todo mundo podría
Lisboa, que en el libro en cuestión se analizan
coincidir. El término /Ubato se hallará siempre
por primera vez (el subrayado es nuestro) las
presente en la obra pianística de referencia -di-
sonoridades pianísticas de Claudia Aquiles De-
ce-- pero adentrarse en la importancia agógica
bussy. El au tor, José Eduardo Martin , un pia-
del rubato debussi la re ulta grandemente com-
nista brasileño que es a imismo investigador,
plejo, porque infiere una comprensión total del
podrá no haber sido el primero en realizar e ta
término para el intérprete. Generalmente se en-
tarea, pero tal ca a no disminuye en lo absoluto
tiende por rubato la comprensión amplia de
los méritos de un trabajo que le requirió varios
stringendo-calando, lo cual induce apenas una
años de pesquisas y resultados muy dignos de
elasticidad y flexibilid ad del rilmo; pero Debus-
consideración y elogio.
sy lo usa en formas diversas. En obras como
Martins dividó su obra en dos partes: dedicó R eflejos en el agua y La plus que lente predo-
la primera al contenido de la obra panística de mina el rubato de principio a fin. Pero en otras
Debussy; la segunda, al análisis de la misma. varía considerablemente. Desde los comienzos de
Después de proponer una nueva cronología pa- su obra, el autor acompaña sus conceptos con
ra dicha producción pianística -en lo cual sí pertinentes ejemplos dentro de cada una de las
demostró su originalidad- entra Martins en el cinco fase especificadas, sin omitir los térmi-
mundo sonoro del compositor impresionista, nos clalificantes que Debussy escribió en fran-
adoptando, en parte, el porcentaje de intensida- cés, en detrimento de los usuales italianos.
des establecidas por J arosovski:
Al iniciar el capítulo consagrado al timbre,
p- pp - 68% Martins parte de aquella conocida frase de De-
f- ff - 22% bussy: "raros son aquéllos a quienes les basta
pppp - mp - 70.3 % la belleza del sonido" y consecuentemente a los
mi - f total - 29.7% procedimientos pianísticos (conocidos general-
mente como "ataques") que permiten proyec-
Martins acepta el procedimiento de porcen- tarla. Debussy no fue parco en sus indicaciones
tajes, pero variándolos en la siguiente forma, conducentes a la comprensión de sus intencio-
(de acuerdo con las cinco fases en que dividió nes, ni Martins en escudriñar tales términos en
su trabajo): títulos simbólicos; títulos literarios; cada obra, términos que él sonsaca de un tirón,
títulos programáticos; títulos abstractos y adop- produciéndonos una sensación muy especial.
tando solamente las intensidades p - pp; f - ff, Con rapidez casi fílmica pasan ante nuestros
de acuerdo con sendas fases: ojos una serie de ambientes sonoros que, no
obstante sernas familiares, adquieren un senti-
p-pp f - ff do particular, evocando nuestros tiempos de es-
Primera fase: 59.6% 28.2% tudiantes, cuando Antonio Gómezanda -genial
Segunda fase: 66.1% 22.6% intérprete de Debussy- nos deleitaba, ejecu-
Tercera fase: 74 % 17 % tando los Preludios con sonoridades pianísticas
Cuarta fase: 74.9% 18 % nunca antes percibidas por nosotros, sus discí-
Quinta fase: 6.).8% 24.4% pulos.
LUIS BRUNO RUIZ La Biblia y la Danza, La danza es un folklore popular. El folklore
Editorial Tribuna, México 1982. 102 pp. es un bien cultural que pertenece a un pueblo,
que 10 cultiva y lo desarrolla a través del tiem-
Nos complace reproducir el Pr610go que pa- po. El pueblo hebreo ha sido desde sus prin-
ra esta bella obra de Luis Bruno Ruiz escribi6 cipios un pueblo que se expresó siempre a tra-
Sergio Nudelstejer, distinguido Director de la vés del canto y la danza, que son complemento
Tribuna Israelita y escritor por sus propios fue- de la existencia y del ser mismo. Lo folklórico
ros. Nada más oportuno y completo podríamos incluye decantación última en el seno del alma
agregar, so pena de caer en reiteraciones. La colectiva. Lo popular puede ser simple tumo
Redacción. de gustos o preferencia en el uso de un bien
La danza y la música son tan antiguos que cultural, propio o tomado de fuera; por tanto,
se remontan a los principios de la civilización. susceptible de mudanza, sustitución o abandono
Una de las milenarias tradiciones del Génesis en el momento menos pensado.
acerca de la raza humana explica que la mú-
sica fue inventada por Jubal, al mismo tiempo La danza en todos los tiempos ha tenido un
que sus hermanos Abel y Caín introducían la profundo contenido artístico y está profunda-
ganadería y la metalurgia. La música, como mente ligada al hombre y su desarrollo en el
la danza, ocuparon un lugar muy destacado en tiempo. De ahí que como señala el propio au-
la vida de la antigüedad en la liturgia, para acom- tor de este libro, "en ella está la más alta poe-
pañar un movimiento rítmico en las actividades sía, y por 10 tanto, el mejor tema para ser dan-
que se ejecutaban en grupo, a fin de que el zado".
trabajo, realizada al unísono, resultase más agra-
Obra digna de leerse y estudiarse, La Biblia
dable, y como acompañamiento en todos los
y la Danza es una verdadera primicia en el mun-
acontecimientos importantes, individuales o na-
do cultural y artístico. Su autor es apreciado
cionales.
en México. Nacido en Pachuca, Hidalgo, hizo
sus estudios en el Distrito Federal y en Nueva
La música y la danza de Israel, como algu-
York. Se graduó como cirujano dentista en 1954,
nos otros aspectos de su cultura, debió mucho
más su sensibilidad e inquietud cultural 10 lle-
a los cananeos. Los primeros grupos profesio-
varon a estudiar filosofía y letras, pintura y mú-
nales de danza y de música, iniciados en los
sica, inclinándose desde muy joven por la ex-
primeros estadios de la monarquía bajo David
y Salomón, fueron probablemente copiados de presión poética.
la práctica entre los propios cananeos. Ya en 1948 Bruno Ruiz colaboró como crí-
tico de arte, especialmente de ballet y danza
En el Antiguo Testamento se hace referencia escénica, en diversas publicaciones. Tuvo la
tanto a la música como a la danza religiosa y oportunidad de presenciar durante un tiempo los
secular. En los primeros tiempos parece ser que procesos coreográficos de los ballets y las ba-
las mujeres predominaron como bailarinas y ses clásicas de la danza en la compañía del
como cantoras sagradas; por ejemplo Miriam Marqués de Cuevas, 10 que permitió profundi-
(Ex. 15, 20-21), o las mujeres que dieron la zar en este arte. En el año de 1956 escribió la
bienvenida a David después de su victoria sobre primera Historia de la danza en México, edi-
Goliat. ciones Libre-Mex.

De una manera histórica y artística, el autor Hombre creativo y de pluma fácil, su obra
del presente libro, el eminente crítico y fino va desde la poesía al teatro, pasando por la
poeta Luis Bruno Ruiz, nos lleva por las pá- narrativa. Ha publicado, entre otros: El Hom-
ginas de esta obra a penestrar en los secretos bre Inclinado (Poesía), 1950, que obtuvo pre-
y la hermosura de la danza. Libro sugerente, lle- mio en el aniversario de la UNAM; Agua Clara,
no de emociones estéticas, viene a ser un serio 1961; Poemas Terrestres, 1961; Sinfonía de un
y valioso aporte al mayor conocimiento de este Sueño, 1966; Variaciones de la Angustia, 1968;
arte. Poesía de Protesta, 1967; Sonetos a la Danza,

-46-
1977; Tres Poemas Zapatistas, con prólogo de La amistad que me une con tan distinguido
Luis Rius, 1969; Poesía para Danzar y Poemas hombre de letras data ya de muchos años y
de Amor y Sueño (aún sin editar). una de nuestras más personales vivencias lo fue
una visita a Toledo, la antigua capital de Es-
En su poesía con coreografía deben mencio- paña y cuna de la cultura, la poesía y la músi-
narse estas obras que ya se han presentado: ca sefardi, donde coincidimos por azares del
Espacio y Tiempo, para coreografía de Waldeen; destino.
Mudras, para Pimpo de Aguirre; Tiempo In-
dostánico para Maya Silva; Tienda de Sueños, El libro que hoy se ofrece al lector, es sin
para Guillermo Keys Arenas (1954) , Constan- duda alguna, un valioso aporte al mejor cono-
za Hool, (1974) y Lilia L6pez (1980); Eva, cimiento de la dazna, una de las expressiones
para Athenea Baker. artísticas que tiene proyección universal. La Bi-
blia y la Danza es, además, un documento va-
De sus obras de teatro han aparecido: El lioso para el esudioso del arte, y sin duda al-
cumpleaños de la Muerte, 1966; Marcela y la guna un homenaje y un reconocimiento a un
Paloma, 1967; La Jaula, 1975 y Fedra en la pueblo milenario que en su vida, junto con sus
Noche, 1978. Como narrador ha creado la no- sufrimientos y adversidades, ha sabido cantar
vela Ocelotl, El Profeta Terrestre, que lleva ya y bailar a la vez que construir. El tema de la
dos ediciones, 1956 y 1977, Y un estudio sobre danza y la música tienen un poderoso efecto
el teatro de Jean Paul Sarte. emocional y psicológico en todos los pueblos,
constituyendo a la vez un tema preeminente en
Su actividad periodística es muy variada e la antigua literatura, en la Biblia, el Libro de
intensa, colaborando con importantes periódicos los Libros, fuente innagotable de inspiración
y revistas de México y Europa. Su columna para poetas, escritores, pintores, músicos y aun
sobre crítica de ballet, en el diario Excélsior es para el hombre de nuestro tiempo.
ampliamente leída, siendo considerado el Dr.
Luis Bruno Ruiz uno de los más serios y cultos SERGIO NUDELSTEJER
críticos de nuestro país. México, D. F., Dic. 1981

Ponce con su esposa CIerna.

-47-
Revista de Revistas

TONO.-EI segundo número de la revista del fueron a España a luchar por la República, y
CENIDIM es espléndido. Corresponde, apenas, un fragmento de la Rumba de Caturla.
al primer trimestre del presente año, pero su
contenido permite presagiarle un futuro fructuo- El resto de los artículos, por demás valiosos,
so. Aparte de dos artículos sobre Silvestre Re- provienen de un músico peruano, un músico y
vueltas procedentes, el primero, de la musicó- un literato cubanos y una musicóloga norteame-
loga cubana Victoria Eli Rodríguez, y el se- ricana: Aurelio Tello, Idalberto Suco Campo,
gundo, recopilado por José Antonio Alcaraz Hilario González y Ann Mac Millan.
de algunas de las notas que solía escribir el
compositor para programas de la Orquesta Sin- REVISTA MUSICAL CHILENA.-El últi-
fónica de México, hay otros de no escaso in- ma número recibido abarca de enero a septiem-
terés. bre del año 1981. Estos tiempos que corren
nos obligan a todo mundo a atrasamos en nues-
Reconocemos en Victoria Eli Rodríguez un tros trabajos. Y podemos aún considerarnos
valor de la musicología latinoamericana. Ella afortunados quienes publicamos alguna revista,
estableció un paralelo entre Revueltas y su si no nos vemos obligados a condenarlas al os-
compatriota Caturla, con afirmaciones convin- tracismo, o a la muerte definitiva. ¡Cuánto de-
centes. Son, en verdad, notables los rasgos que bemos luchar quienes nos entregamos de lleno
hermanan, casi como mellizos, al compositor a estas tareas!
mexicano y al compositor cubano, pese a los Con el placer de siempre leímos este número
siete años que le aventajaba Revueltas a Ale- de la Revista Musical Chilena, en el que cola-
jandro García Caturla; pero murieron ambos boran Luis Merino, María Esther Grebe, Juan
el mismo año de 1940. En su Convergencia a Antonio Letelier, Raquel Bustos, distinguidos
Dos la autora desmenuza aquellos rasgos y obras músicos y musicólogos de aquel país hermano.
en que coinciden ambos geniales compositores, De éstos, solamente Alfonso Letelier es compo-
hasta el extremo de producimos admiración el sitor. Y de él el artículo "Los Sonetos de la
para nosotros tardío conocimiento de algo por Muerte" en su acontecer musical: trece bellí-
otra parte muy notable y curioso. Al mismo simos poemas de Gabriela Mistral, transcritos
tiempo acrecentó nuestra admiración por Gar- por Juan Antonio Massone en el artículo que
cía Caturla. y es muy satisfactorio que ya co- precede al de Letelier, bajo el título de El sos-
mencemos a leer algo desconocido tocante a tenido dolor de "Los Sonetos de la Muerte".
nuestro gran compositor.
Massone analizó los poemas desde el punto de
vista literario, mientras que Letelier, al decidirse
Entre muy sabrosas notas de Revueltas a cier- a ponerles música, lo realizó "con la esperanza
tos programas de la OSM, se olvidó José An- de que la estructura musical lograra, sin debi-
tonio Alcaraz de aquella tan simpática referente litarse, reflejar ese clima de tragedia con que
a Ocho por Radio y algunas más; pero fue él Gabriela Mistral envolviera esta obra que por
el primero en llevar a cabo una recopilación de
experiencia vivida, o por capacidad artística, le
tan valioso material.
abriera las puertas de la celebridad". El autor
ofrece enseguida un auto análisis de su obra,
Como Suplemento, ofreció TONO el himno
que promete gratas sorpresas a quienes la des-
escrito por Revueltas para los mexicanos que conocemos .

.,.-,048-
NZ NEUE ZEITSCHRlFT FOR MUSIK.- Por la corre pondencia de Carolina Schiegel,
En el último número recibido de Junio-Julio o de Fann y Lewald conocemos las luchas de
de este año, Brigitte Hoeft nos proporciona un e tas mujeres para poder proseguir una ca rrera
sesudo artículo sobre La Mujer en la Música, de composito ras. Schumann el generoso, el com-
refiriéndose principalmente a las compositoras prensivo, defendió a la mujeres compositoras
del siglo XIX. Comienza su trabajo con un en su revista. Una de éstas fue Jo efi na Lang
enunciado de Robert Schumann en su revista ( 18 15-1 860), composi tora de lieder. (Mendels-
antecesora de ésta que dice literalmente : "Los sohn la elogió extrao rdinariamente), así como
nombres de nuestras compositoras se pueden Schumann y Brahms. - Fanny Hansel, la her-
escribir dulcemente sobre un pétalo de rosa, man a de Mendelssohn estudió composición y
por lo que ningún rasgo de las obras de las escribió entre otras muchas cosas, cuatro lieder
damas se me escapa. E así que una muchach a que su hermano aprobó y le hizo editar. Clara
que ponga su atención en las cabezas de las Schu mann Wieck compuso música a la sombra
notas, olvidándose de otras cabezas, puede te- de un genio como su esposo Robert. A princi-
ner diez veces más derecho de realizarlo que pios de su matrimonio ella estudiaba contrapun-
nosotros los hombres, únicamen te atentos a la to con él y escribió entonces los Preludios y
inmortalidad". Fugas Op. 16. los cuales precedieron a un ciclo
de canciones, pero cuando comenzaron a lle-
Cuando escribió tan poética gentileza -co- gar los hijos, él la convenció de que dejara la
menta la autora-Schumann debe haber estado composición y se dedicara a los niños. Clara
pensando en las piezas que su esposa Clara com- le obedeció, pese a ya tener en su haber hasta
ponía en sus últimos tiempos de unión matri- un Concierto para Piano y Orquesta. Clara de-
monial. Pero enseguida B.H. se refiere, por con- be de haberse sentido ave rgonzada de competir
traste, a la crueldad de Hanslick hacia las mu- con un genio como su marido y no volvió a
jeres compositoras, a quienes llama diletantes componen después de la muerte de éste. A me-
y anti musicales. El sarcástico crítico no deja diado del siglo XIX nació Loui e Adolphe Le
títere con cabeza. Se ignora -agrega la auto- Beau ( 1850-1927) . Dotada para la música co-
ra- que Hanslick haya conocido las obras de menzó a componer desde muy temprana edad.
todas las mujeres que componían entonces. ¿Por Pretendió estudiar con Clara Wieck, pero ha-
qué, entonces juzgarlas por parejo? Se sabe por biendo surgido una incomprensible rivalidad en-
responsables autoridades que la mujer jugó un tre ambas, fue imposible establecer una rela-
papel musical importante en los primeros tiem- ción amistosa; pero Louise Adolphe prosiguió su
pos del cristianismo, aunque ya en el siglo ITI carrera de compositor a hasta que Hanslick la
D.C. los hombres comenzaron a obligar a esa atacó con tan fastidiosa ironía, que la hiza aban-
"Torre de Fortaleza" como llamaban a la mu- donar temporalmente la composición. Más ade-
jer, a conservarse apartada en las ceremonias lante reanudó sus tareas de composición y es-
religiosas, cuyos menesteres deberían ser sólo cribió un libro sobre las mujeres compositoras.
cosa de hombres. En el siglo XVI Enrique VIn -Ya en pleno siglo XX Lili Boulanger- her-
de Inglaterra se refería al talento musical de mana de la gran Nadia - inició una carrera de
su cuarta mujer Ana de Cleve. En Alemania compositora que la muerte habría de cortarle
Federico el Grande tenía dos hermanas compo- en plena juventud. De ella y de las colegas que
sitoras. Y así otras. Tras estos antecedentes, la le sucedieron no podremos ocuparnos ahora,
autora entra al siglo XIX. pero la autora les dedica debidos reconocimien-
tos.

-49-
CONCIERTOS
ORQUESTAS leja , porque ya está siendo conocido y apre,
ciado donde se valúan los méritos reales .
SINFONICA NACIONAL.-El principal
acontecimiento de esta orquesta en el presente
trimestre fue la ejecución de La Historia del En el tercer programa de esta última serie
programó Dos Ambientes Sonoros de Rodolfo
Soldado y La Consagración de la Primavera de
Halffter, de los que escuchamos una versión
Stravinski. Por lo que se refiere a "La Historia"
se trató de un a puesta en escena, con la co- que satisfizo plenamente al autor allí presente
laboración de gente conspícua: aparte de la y a quienes conoCÍamos la obra de antemano.
soberbia dirección musical de Sergio Cárdenas, Después, Gerhard Oppitz, un pianista alemán
al frente de siete excelentes músicos de la OS , alucinante, fue el solista del Quinto Concierto
destacaron en la escena Enrique Villa; en la de Beethoven que interpretó en perfecta unidad
coreo<>rafía Guillermina Bravo ; en la danza An- con su acompante orquesta. Terminó con una
tonia °Quiroz; el Soldado tuvo magnífica perso- versión de concierto de El Sombrero de Tres Pi-
nificación en Arturo Beristáin ; Claudia Brook cos de Manuel de Falla, programada con una
fue el narrador ; Alejandro Aura el personaje pequeña coreografía ,en la que tomó parte co-
satánico. José Antonio Alcaraz agilizó el texto mo cantante Guillermina Higareda y un "Cua-
con su característico talento para estos menes- dro de danza del Club España, A. C.", con su
teres. Pese a ser la primera vez que Sergio Cár- directora María Antonia "La Morris".
denas dirigía la obra, lo llevó a cabo con pre-
cisión, entusiasmo y esa seguridad que da el es- ORQUESTA FILARMONICA DE LA UNI-
tudio y la preparación adecuados. El hecho de VERSIDAD. -En su segunda temporada de es-
haberlo realizado sin la partitura por delante te año la OFUNAM está ofreciendo una do-
así lo reveló, descontando el correcto paso con cena de conciertos dobles con los directores
que marchó esa puesta en escena. Enrique Diemeke, Eduardo Díazmuñoz, Laszlo
Rooth, Efraín Guigui y Armando Zayas, del
La "Consagración" es obra de más enjundia 10 de septiembre al 5 de diciembro. Diemeke
y experencia vasta . Cuando Sergio Cárdenas la programó música mexicana de Ponce, Chávez,
haya dirigido un buen número de veces tendrá Cossío, Revueltas y Moncayo. Entre los de oc-
por fuerza que sentirse más satisfecho. Los di- tubre, Laszlo Rooth ofrece el Edipo Rey de
rectores jóvenes tienen toda una vida por de- Stravinski y Eduardo Díazmuñoz las Escenas de
lante . .. En varios aspectos de su carrera, S.C. Ballet, la Sinfonía de los Salmos y Fuegos de
está demostrando especiales habilidades para Artificios del propio Stravinski, Rooth vuelve
grandes logros. La labor que ha llevado a cabo a programar música mexicana: Preludios Sin-
en Aguascalientes así lo demuestra. fónicos de Raúl Ladrón de Guevara, La Ninfa
Eco de Eugenio Delgado y un Divertimento de
Jesús Villaseñor y Díazmuñoz, (¡Bien, por
ORQUESTA SINFONICA DE MINERIA.- Rooth!), un Concierto para orquesta y corno
Jorge Velazco es otro director mexicano que va de Javier Alvarez, Obertura Concertante de Ro-
apenas alcanzando la madurez de su vida. El dolfo Halffter e Iridiscencias de José Luis Gon-
pertenece a la clase de dirigentes intelectuales, zález (Vuelven a la palestra aquellos de los
avalados por una vasta cultura adquirida en la miembros del Taller de Composición de Carlos
universidad y en la vida, Seguramente llegará Chávez que andaban rezagados) .

-50-
ORQUEST A FILARMONICA DE LA CIU- ya entraron ell conflicto de horario los domin-
DAD DE MEXICO.-Esta orquesta que la gos. Esto no debería importar en una ciudad de
creíamos en crisis por la situación económica del tantísimos millones de habitantes, pero sí im-
país, anuncia su última Temporada de este año, porta (y sobre todo en esta época de derrum-
con Fernando Lozano como Director Artístico y be económico general).
los directores huéspedes Sergio Ortiz, Enrique Di-
mieke (este joven está realizando una carrera La SINFONICA ACTONAL inicia su tem-
meteórica como director de orquesta) y José porada de otoño (octubre a diciembre), con su
Guadalupe Flores (otro joven valor mexicano Titular, Sergio Cárdenas, quien últimamente ha
que va por buenos rumbos). Como solistas incrementado muy considerablemente us bono
anuncia FONAPAS a Silvia Navarrete, Carlos prdesionale y artí ticos.
Prieto, Jorge Risi, Jorge Suárez, Jan Gustely y
Guadalupe Parrondo. Con excepción de Jorge I FONICA DE VERA CRUZ. Después de
Risi y Jon Gustely, los demás son mexicano , dos años de vida, bajo la dirección de Manuel
porque hasta por esos rumbos parecen andar de Elías, esta orquesta de unos 60 mú icos, en
muy e casos los dólares que requieren los ar- u mayo ría polacos, dejó de existir por la cri-
tistas extranjeros. ¡Enhorabuena para nuestros sis económica que nos llegó como inesperada
compatriotas artistas! Como de costumbre los avalancha. Lá tima, porque no sabe uno qué
conciertos se efectuarán los martes en la Ollín va n a hacer esos polacos con su país en con-
Yoliztlí y los domingos en el Teatro de la Ciu- diciones apenas un poquito mejores que las
dad. Nuestras tres orquestas sinfónica mayores nue tras. ¡Pobre humanidad!

-51-
GRABACIONES
J.S. Bach, El Clave bien Temperado, Volú- da. No así la del pianista, quien está obli-
menes I y Il. ANGELICA MORALES von gado a continuar desarrollando un esquema
SAUER, pianista BWW 846-893. ORION OAS dinámico y eligiendo las voces que deban
81415 / 20. Sei discos estereofónicos. preponderar. Estas dos condiciones consti-
tuyen la principal diferencia elltre las inter-
Cualquier pianista o c1avecinista que haya pretaciones de ambos ejecutantes de los 48
grabado para el mundo de la música los 48 preludios JI fugas. Las nuevas grabaciones de
Preludios JI Fugas del Clave bien Temperado de Angélica Morales von Sauer de los dos vo-
Juan Sebastián Bach es un coloso. Angélica Mo- lúmenes y la de Martins del primero, son
rales, al realizarlo, entra en esta categoría; y el típicos ejemplos de lo afirmado arriba. Co-
1 BA, al patrocinarlo, se convierte en mecenas mo alumna de Emil von Sauer, a su vez dis-
extraordinario. Como no hemos escuchado aún cípulo de Liszt, uno podría esperar roman-
tan preciosa grabación, doblemente valiosa pa- ticismo en Angélica Morales. Más no es así.
ra nosotros por tratarse de una pianista mexi- Su juego aparece pulcro y cuidadoso; sus
cana, debernos contentarnos ahora con tradu- tiempos moderados; su escala dinámica res-
cir algunas críticas de una de las más famosas tringida; la ornamentación precisa y acerta-
revistas norteamericanas consagradas al disco: da; el énfasis del sujeto de las fugas siempre
La Stero Review. Y comenzamos por la del co- importante; sus ritmos metronómicos (aun en
nocido crítico Paul Turok quien afirma, des- las cadencias evita los ritardandi). En suma,
pués de comparar las grabaciones da Martins es el suyo un pianismo controlado, sin agita-
y Morales (el primero, sólo grabó el primer ciones.
volumen) :
CLASSICAL REVIEWS.-Uno de los 24
Mucho más impresionante es la grabación críticos de esta Sección compara las grabacio-
de ambos volúmenes, realizada por Angéli- nes de Horszowski, Morales y Martins):
ca Morales von Sauer, pianista nacida en
México y alumna y viuda de Emil van Sauer. Aceptamos el hecho, no absoluto, de que
Su Bach -evidentemente conservadoT- po- la edad traiga consigo la madurez, la sabidu-
see gran estilo, autenticidad y técnica diestra, ría y la perspicacia. He aquí tres experimen-
todo ello reminiscente de Wanda Landokska tados intérpretes de Bach que obviamente han
( ic). Esta grabación, patrocinada por el Ins- pensado larga y sesudamente en esta cumbre
tituto Nacional de Bellas Artes de México, de la literaura pianística.
es excelente.
Dos de ellos. Miszieslav Horszowski y An-
De S. L: gélica Morales van Sauer supieron lo que
En muchos aspectos, la interpretación del hacían, al desechar cualquier frivolidad y pro-
Clave Bien Temperado de Bach empieza pa- yectar un convivio entre el ejecutante y el
ra el pianista en el punto mismo donde lo compositor y no entre el ejecutante y el au-
deja el c1avecinista. Ambos ejecutantes tu- ditor. Nunca podrán dos intérpretes aproxi-
vieron que confrontar problemas similares y marse a Bach desde el mismo ángulo; sin
ambos debieron seleccionar tiempos y articu- embargo, ambos veteranos se llegaron a él
laciones apropiados; pero una vez obtenidos desde un nivel de exaltación. Angélica Mora-
por el c1avecinista, su misión quedó termina- les es casi una niña al lado de Horszowski

-52-
(quien es cosa de veinte años mayor que ducir el total de un buen número de elogiosos
ella) ... El productor Giveon Cornfield dijo comentarios (unánimes) procedentes de los Es-
que Angélica Morales había realizado sus tados Unidos, donde fue realizada la hazaña
sesiones " con una marcada fluidez [no hay de Angélica. Tenemos esperanzas de poder es-
que olvidar que ella tiene las 48 obras en cuchar pronto esta maravillosa grabación.
su memoria. La R .] , increíblemente escasas
segundas tomas. Cuando las juzgó necesarias Afortunadamente pudimos estar presentes la
me asombraba la riqueza de sus interpreta- mañana del 22 de noviembre, cuando fue de-
ciones, coloridos y matices. Nunca sonaron velada la placa con que la Escuela Superior de
iguales dos tomas de un mismo pasaje" . Cual- Música que dirige Francisco Núñez, le dedicó
quier duda que hubiera uno podido tener su nueva y flamante sala de conciertos a la
respecto a esta afirmación desapareció al per- eminente pianista mexjcana en presencia suya y
cibir espontáneo cambio de articulación y con asistencia del Director del INBA, Lic. Ja-
pedaleo, como sucedió en el segundo prelu- vier Barros, la Jefe del Depto. de Música María
dio del primer tomo, por ejemplo. Existe am- Luisa Lizárraga y otras destacadas personalida-
plia evidencia de que las segundas tomas fue- des del ambiente de la música. Que sea esta la
ron muy limitadas (esto lo decimos sin in- primera prueba de reconocimiento efectivo del
tención alguna de adulaciones ... "). genio de nuestra eximia artista. Angélica Mo-
rales von Sauer.
Premura y falta de espacio nos impiden tra-

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NOTICIAS
FALLECIMIENTO DE CARL ORFF.- el compositor, en parte por el poco canto es-
Aunque el gran compositor y pedagogo Carl cuchado y la superabundancia de guitarras, mú-
Orff murió el 29 de marzo pasado, hasta ahora sica andaluza, un "zorongo" del propio Lorca,
pudimos obtener todos los datos de tan infaus- impropiamente usado, etc.
to acontecimiento. De las más o menos 34 obras
mayores y 24 ediciones de lieder, métodos di- MUSICA CONTEMPORANEA.-La UNAM
dácticos, etc., del catálogo orffiano, en México y la UAMI han organizado una serie de con-
solamente eran conocidas Carmina Burana y ciertos de obras mexicanas contemporáneas.
Catulli Carmina. Estas dos famosas obras y el El último le fue dedicado a Mario Lavis-
sistema Orff para la enseñanza musical de los ta, de quien se ejecutaron Canto de Alba, Quo-
niños fueron grandemente apreciadas aquí a tations. Simurg, Cante, Pieza para dos pianis-
raíz de sus ejecuciones y lecturas. Por tal moti- tas y un piano, con la participación de Marie-
vo el fallecimiento del compositor alemán ha lena Arizpe, Aarón Bitrán, Federico Ibarra, el
sido muy sentido. dúo Castañón Bañuelos, Alvaro Bitrán, Leono-
ra Saavedra, Lilia Vázquez y la presentación del
PIERRE BOULEZ.-EI distinguido compo- acto por José Antonio Alcaraz.
sitor y director de orquesta francés Pierre Bou-
lez recibió del Centro Pompidou una renova- LA OSN y SERGIO CARDENAS EN
ción de su contrato como director del Centro AGUASCALIENTES.-María de los Angeles
de Investigación Musical que con tanto éxito Calcáneo, quien fuera alumna de Manuel M.
ha dirigido. Ponce, no ha informado de los festejos hidro-
cálidos en memoria del centenario de su maes-
ANIVERSARIOS.-Sergiu Celibidache cum- tro. Entre éstos se destacaron especialmente las
plió este año 85 años. Igor Markevich, 70. Ale- actuaciones de la Orquesta Sinfónica Nacional
xander Tansman 85. Parece que entre los mú- y su director Sergio Cárdenas, por quien fuera
sicos notables aumenta la longevidad. ella invitada de honor. Aparte de los concier-
tos ofrecido por la OSN, Sergio organizó unos
LORIN MAAZEL.-A partir de septiembre cursos especiales de música en los que la ni-
1982, el famoso director ocupa el puesto de ñez fue favorecida. Este fue el mejor de los
Director de la Opera de Viena. Maazel nació en honores que pudo haber recibido el maestro
París (1930) de padres norteamericanos y fue Ponce en su centenario natal.
criado en los Estados Unidos. Se casó con la LA SINFONICA DE MIAMI, FLORIDA,
pianista Israela Margalit con la que ha tenido estaba en huelga desde febrero del año en cur-
dos hijos. Su último puesto permanente fue con so, después que diez de sus músicos fueron
la Orquesta de Cleveland. despedidos. Era una buena orquesta sin director
ULTIMA OPERA DE ZIMMERMANN.- (Rainer Miedel estaba como interino). Tenía
Con Federico García Lorca como "objetivo", 18 años de existencia y la formaban 80 músi-
Zimmermann compuso, por encargo de una ra- cos. Habiendo sido imposible solucionar estos
diodifusora alemana su quinta opera que titu- problemas fue clausurada la orquesta en julio
ló Die Wundersame Schustersfrau (La esplén- pasado, pero hasta septiembre se hizo efectiva
dida mujer de Suhuster) y fue escenificada re- tan drástica solución.
cientemente por la Opera de Hamburgo en FORO COYOACANENSE.-Entre los actos
Schwetzingen. La crítica se metió duramente con conmemorativos del Centenario de Ponce, este

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Foro organizó un concierto, con la colaboración obras para violín, piano y guitarra. La Socie-
de Paolo Mello (pianista) Luis Sergio Hernán- dad de Alumnos del Conservatorio ofreció un
dez, (violinista) y Roberto Limón (guitarrista). programa Ponce en el Auditorio Silvestre Re-
Paolo tocó admirablemente un grupo de obras vueltas, El Fondo Nacional para Actividades
pianísticas y le acompañó a Sergio otras para Sociales publicó un bello libro de Corazón Ote-
violín y piano. Roberto ejecutó las admirables ro dedicado a la obra guitarrística de Ponce
Variaciones sobre las Folías de España . etc.

ESCUELA NACIONAL DE MUS1CA.-Por UN CONCURSO DE VIOLIN EXTRAOR-


su parte la ENMUNAM festejó también el Cen- DINARIO.-En la ciudad de lndianápolis, se
tenario de Ponce con un Festival Internacional inauguró es septiembre pasado un concurso de
Didáctico "Manuel M. Ponce", dedicado a la violín que habrá de efectuarse cada tres años.
infancia, para el que fueron invitados varios En este concur o inaugural se llevó el Primer
maestros extranjeros. Premio la violinista rumana de 23 años, Mi-
chaela Martin quien, aparte los 10,000 dólares
HECTOR GUZMAN.-Este joven organista del premio ganó otros 1,000, por la mejor eje-
mexicano, graduado en el Conservatorio Nacio- cución de la obra Improvisaziolle del composi-
nal de México y la North Texas State Univer- tor finlandés Joonas Kokkone, especialmente
sity, de Denton, Texas, (estudió aquí con Víc- escrita para este evento; 650 dólares como se-
tor Urbán), fue electo recientemente como miem- gundo premio de las publicaciones Paganinia-
bro de la Sociedad Pi Kappa Lambda de dicha na; más una medalla de oro; un recital en Car-
Universidad, honor que solamente se concede negie Hall de Nueva York; otro en la sala de
a aquellos alumnos sobresalientes (y Héctor ob- conciertos de la Biblioteca del Congreso de
tuvo un Cum Laude en su examen final como Washington ; varias giras europeas y norteame-
Licenciado en Música). El arte organístico de ricanas, incluyendo conciertos como solista de
Héctor es apreciado en los Estados Unidos y la orquesta de la B.B.C. de Londres y la orques-
fue el primer organista latinoamericano que pu- ta Halle de Manchester. Tal cantidad de pre-
do competir en el Gran Premio de Chartres, mios a un solo concursante nunca antes habían
Francia. Actualmente continúa sus estudios de sido concedidos.
dirección de orquesta con Anshel Brusilow y
órgano con Dale Peters en la propia Universi- ESTRENO DE DOS OPERAS MEXICA-
dad del Norte de Texas, donde se graduó. NAS.-Por fin , tras varias dificultade venci-
das, fue estrenada La Güera, ópera en dos ac-
AÑO PONCE.-No se le nombró así, pero tos de Carlos Jiménez Mabarak, que halló gran
debió haberlo sido, porque se cumplía el cen- entusiasmo entre los amateurs del teatro lírico
tenario del nacimiento del compositor. Aunque que en México siguen siendo numerosos. A la
no tanto como era de esperarse, los actos en su güera Rodríguez quizá le habrían parecido un
honor fueron algo nutridos: la sociación Pon- poco tibios los episodios que de su vida mostró
ce los inició con un concierto de obras voca- Jiménez Mabarak, pero Bolívar y el Barón de
les del maestro, presentado por José Antonio Humboldt sonreirían satisfechos dondequiera
Alcaraz, en el que tomaron parte Rosita Ri- que se encuentren ahora. La música es de gra-
moch y Ma. Luisa Salinas. La Sinfonía Nacio- ta y retenible audición.
nal, con Sergio Cárdenas al podio: tres progra-
mas con obra sinfónicas y el Concierto para El otro estreno -ya veterano- le corres-
Piano ejecutado por Guadalupe Parrondo. Un pondió a El Espejo Encantado, sobre la obra
disco marca Angel de la obra completa de Pon- homónima de Salvador Novo, en interpretación
ce para la guitarra, (puesto que permanece, de José Antonio Alcaraz, cuyo espectáculo "ob-
éste ha sido uno de los principales aconteci- viamente musical", siendo, según J.A. "ópera
mientos del año en cuestión). El Dep. de Difu- sin música", es, después de todo, ampliamente
sión Cultural del INBA organizó varios actos musical, puesto que Alicia Urreta -directora
musicales, en FONAGORA y en Coyoacán de musical del acto- hizo concurrir melodías de

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35 compositores, a partir de Monteverdi, hasta MUSICA DE COMPOSITORES MEXICA-
Alban Berg y Carlos Chávez, pasando por La NOS EJECUT ADA.-Este año ha sido -des-
Cucaracha de revolucionario lineaje mexicano, de mucho tiempo atrás- el más rico en eje-
y otras yerbas, a los que José Antonio adaptó cuciones de obras mexicanas. Las hubo para
la semántica con su acostumbrada pericia. Dice orquesta, y teatro lírico, y toda clase de instru-
un anuncio por ahí: "Péguenos, pero páguenos", mentos de los siguientes autores: Julián Carri-
porque ha de saberse que se trata de una com- llo, Manuel M. Ponce, Juan León Mariscal,
pañía lírica autosuficiente (con frecuencia au- Carlos Chávez, Bias Galindo, Silvestre Revuel-
toinsuficiente) desde el punto de vista econó- tas, Luis Sandi, Miguel Bernal Jiménez, José
mico, y ¡claro! dependiente de su público, el Pablo Moncayo, Raúl Cosío, Federico Ibarra,
cual, en esta ocasión, no le pega y sí le paga, Manuel Enríquez, Francisco Núñez, Leonardo
por lo que el espectáculo lleva trazas de subsis- Velázquez, Lan Adomián, José Antonio AJca-
tir largo tiempo en el Urueta y hasta obtener raz, Lilia Vázquez, Roberto Medina, Eugenio
una placa de esas que notifican una larga es- Delgado, Mario Lavista, Miguel Alcázar, Da-
cena y quizá -ojalá- unas mil representacio- niel Catán, Manuel de Elías, Manuel Mora,
nes. E.P. Juan Cuauhtémoc Herrejón, Víctor Manuel Me-
deles y otros que escapan de la memoria.

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DIGEST
MANUEL M. PONCE international world of music. - Unfbrtunately
he wrote a song called Estrellita that soon be-
The present issue has been dedicated to the came famous the world over, increasing the
Mexican composer Manuel M . Pon ce, whose fortunes of mally music editors, arrangers and
centenary of his birth we have comrnenmorated performer, but Ilot its allthor's. POllce didn't
this year. He was born the 8 December 1882, care very much for money, but just the same, he
but since there were certain doubts regarding had a special liking for that stolen child. In
the exact year of his birth , professor Cristian his Violin Concerto, olle of his latest works,
Caballero got a copy of Ponce's birth certifica te, which he dedicated to Henryk Szeryng, Estre-
which we are pride to publish now for the first llita made its entrance with a certain kind of
time. We also offer om readers a transcription coquetry. - We have in Mexico three com-
of what we think to be the composer's very first posers knowll all over the world through a sin-
anicle on mllsic ever published. It appeared in gle composition: Juventino Rosas' Over the
19 J6 in a hon lived magazine that dealt with Waves (Sobre las Olas); Jose Pablo Moncayo's
monographies of noted new Mexican artists. Huapango and Malluel M. Ponce's Estrellita.
Afterward the readers will find a number of Only Juventino Rosas profited as a composer
anicles on Manuel M. Ponce by weH known by sllch international market's preference; not
nationai and international musicologists and o Moncayo, who wrote beautiful and worthy
musicians, sllch as our very distinguished col- music and Manuel M. POllee who, besides be-
laborator, Dr. Robert Stevenson , from UCLA; ing Mexico's principal pioneer of Nationalism,
professor Raymond Lopez, from East Los An- should have a place among the world's most
geles College; Professor Uwe Frisch; Carmen impo rtant composers. Now that Mexico City's
Sordo, a graduate from the University of West ational University has recorded the who1e of
Los Angeles, the concert pianists Carlos Vaz- Ponce's output, let's hope his most valuable
quez and Paolo Mello. Each one of these dis- works will be heard wide and faL He deserves
tingllished collaborators, whose articles were it as rnuch as any of the Latin American com-
especiaHy written for Heterofonia, took turns in posers of intemational repute, such as Villa-
elucidating Ponce's manyfold talents - com- Lobos, Carlos Chávez Silvestre Revueltas, etc.
position being his mo t important one for the E.P

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EL CONSERVATORIO
ACTIVIDADES DEL c. N. M. DURANTE LOS
MESES DE JUNIO Y JULIO DE 1982

RECITALES DE VIOLONCELLO.-En el ), "Lo Muro Vardes" de Jo é Pablo Mon-


periodo comprendido del jo. al 29 de junio, e cayo y Prokofieff.
real iza ron 21 recitales de alumnos de las clases
de Violoncello del Conservatorio. COFO DEL CONSERVATOR/O.--Cnn mo-
tivo del Día de la Marina el 2 de junio, la
La presentación de e to veintiún recital e Secretaría de Marina, organizó un Concierto de
de violoncello, fue una demostración del nuevo Gala en el teatro de la Ciudad de México, con
panorama musical en lo que se refiere a celli - la asistcncia del C. Presidente de la República,
ta mexicanos, ademá representó el trabajo pe- en el cual tomó parte nuestro Coro del Con-
dagógico de los maestros e pecialista de la ma- ervatorio, interpretando brillantemcnte las Dan-
teria, Sally van den Berg, Zoia Kamy heva, ::;as Po[ovetúanas de Borodin y trozo ele Car-
Alvaro Bitrán y Leopoldo Téllez, de la In ti- mina Bllrano ele Orff.
tución y del e~fuerzo de cada uno de los alum-
EXAMEN DE CANTO.-Continuando la
no.
audicione de Comprobación Educacional, Je-
ús Ramón Morales Armenta discípulo de la
Participaron alum nos desde el ler. año ha -
Mtra. Rosa Rimoch presentó ellO de junio,
la el 6to., con obras desde J. S. Bach hasta
u examen de 40. año de Canto, interpretando
Vaughan William s y Téllez Oropeza, destacán-
obra de Durante, el interesante "Monólogo del
dose Araceli Henández Mejía, Carlos Pecero,
Tepo" de Emilio del Cavaliere, Haendel, Lie-
Héctor Robles, J airo Saquicoray y Orlando
der de Schubert, Brahm y Tchaikovski, Arias
Tdrovo.
de Mozart y obra mexicanas de M. M. Ponce
y Salvador Moreno, acompañado al piano por
Los mae tras Laura León , Catherine Sim-
el Mtro. Diego García de Parede .
monds, José del Aguila. Are1i Ricalde y otro
pianistas de tacado, tomaron parte como acom- RECITAL DE ORCA NO.-EI ]] ele junio,
pañantes. el organi ta Rodrigo Treviño Uribe, quien aca-
ba de regresar de Alemania presentó un inte-
RECITALES DE FLAUTA DE PICO.-EI re ante recital de Mú ica Alemana para Or-
joven maestro Horacio Franco Meza, organizó gano desde el Siglo xvn al XX.
3 recitale de u alumno de flauta de pico,
llevados a cabo los días 2, 3 Y 14 de junio, in- La obra escogidas para e te recital fueron
terpretando Música Renacenti ta de Conjunto, de los iguientes compositores: Bextehude, J. S.
Solos y Duo Barroco de Arbe u, Susato, Sa- Bach, Joseph Ahrens, David Johann Nepomuk,
lomone Ro si, Thomas Morley, Haendel, Tele- Paul Hindemith y Max Reger.
mann y otro compositore del periodo renacen-
ti tao En .1980. Rodrigo, obt uvo el diploma de
Concerti ta del Conservatorio y al mismo tiem-
RECITAL DE PIANO.-EI 2 de junio Ma- po la beca del Servicio Alemán de intercambio,
ría del Socorro González, discípula del Mtro. para realizar estudios de post-agrado con el pro-
Leopoldo González, presentó un recital de pia- fesor Peter Wackwitz en la Hochschule der
no con obras de Beethoven, Schumann, Debus- Künste de Berlín Occidental.

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RECITAL DE PIANO.-El 14 de junio la violín de la Mtra. Rasma Lielmane. Se presen-
distinguida Mtra. María Teresa Rodríguez pre- taron Oswaldo Soto Calderón, Ana Luisa Esca-
sentó a su discípula Beatriz Helguera Lizalde, lante, Alfredo Reyes, Pedro Hernández, Eliazar
en un R ecital Examen de 90. año de Piano con Hernández y Jorge Budziszewski Mariscal. Se
obras de Haendel, Bach Beethoven, Monca- interpretaron obras de Vivaldi, Mozart, Men-
yo, R avel y Chopin. delssohn, Kabalevsky y Chaikowski. El acom-
pañamiento corrió a cargo de la piani ta Mag-
RECiTAL DE CANTO.-El 15 de junio, dalena Mariscal.
se llevó a cabo el R ecital Examen de Canto de
MUS /CA RENACENTlSTA.-El 18 de ju-
Sonia Cekado discípula de la Mtra. Rosa Ri-
nio la Mtra. Colette Harris, organizó una inte-
moch, interpretando obras de Scarlatti, Caldera
resante audición de Música Renacentista con
arias de Moreno, Bainbridge Crist, Rudolf Friml
sus alumnos . Las obras que e interpretaron
y G. Gershwin, con el acompañamiento al
correspondieron a lo siguiente autores: Cor-
piano del maestro Diego García de Peredes.
nish , Mudarra, Ortiz, Henry VIII, Andriessen ,
Byrd, Ammerbach y otros. Los intérpretes que
RECITAL DE CONTRABAJO.-Muy inte-
intervieron en la sección instrumen tal ejecuta-
resante re ultó el Recital de Contrabajo que
ron dichas obras con flautas de pico, laud, vi-
presentó el 16 de junio Pedro Ruiz Mendoza,
huela, viola da ga mb a, c1avecín y percusiones,
discípulos de la Mtra. Kamysheva Zoia, con
obras de Marcello, Beethoven, E. Madensky, además de conjunto vocal y soli stas.
E. Grieg, G. Schlemiller, acompañando al pia- BANDA SINFONICA DEL CONSERVA-
no por Cathy Simmonds. TORIO.-E I 18 de junio se llevó a cabo un
concierto de la Banda Sinfónica de Aulmnos
EXAMEN DE CANTO.-EI 16 de junio se del Conservatorio Nacional de Música, en oca-
presentó Flor de María Palacios Fabila, discí- sión al primer an iver ario de su fundación, bajo
pula de la Mtra. Rosa Rimoch, en su examen la dirección del Mtro. Salvador Márquez Sal-
de can to interpretando obras de Paisiello, Per- cedo. En el programa se interpretaron obras de
golesi, Mozart, Enríquez de Valderrábano y Sal- Bach, Chaik ovski, Schubert, Robert Hanson y
vador Moreno, acompañada al piano por el Dmitri Sho takovich. En este concierto todos
Mtro. Eduardo Marín. los alumnos demostraron su entusiasmo, sobre
todo al interpretar el Scherzo y Final de la Sin-
EXAMEN DE CANTO.-EI 16 de junio
fonía No . 5 de este compositor.
la Mtra. Rosa Rodríguez, presentó a su discí-
p ulo Mauricio Rábano P alafox, en su examen EXAMEN PROFESIONAL.-EI 18 de JU-
de 50. año de canto, con obras de Benedetto nio se efectuó el examen profe ional para obte-
Marcell0, lieder de Schubert, Bellini , H andel, nerse el Título de Maestra Especializada en la
Fauré, Lalo, alias de Ciléa y Verdi y de Manuel En eña nza Musical Escolar, de M aría Concep-
de Falla, acompañado al piano por el Mtro. ción Bucio Rangel, asesorada por el Mtro. Teo-
Jorge Noli . doro Alemán Nava. El título de la tésis presen-
tada fue: "La música como factor educativo
RECITAL DE FLAUTA.-EI 17 de junio para el desarrollo psicomotriz social y creativo
la Mtra. Brenda Sakofsky, presentó a su discí- en lactantes y maternales". El jurado estuvo in-
pulo Gabriel Alcázar, en su examen para obte- tegrado por los Mtros. Adoración Fabila, Juan
ner el Diploma de Flautista Ejecutante, con Vera, Teodoro Alemán Nava, Aura Emma Pa-
obras de Scheindler, Giuliani , Ibert, Poulenc y checo Pinzón y Armando Montiel Olvera.
Doppler, acompañado al piano por José Luis
García Corona. .. AUDlCION PIANISTICA.-EI 21 de junio
la Mtra . Stella Lechuga, presentó a varios alum-
AUDIClON DE LA CATEDRA DE VlO- nos de su cátedra de piano en una audición
LIN.-El 17 de jumo, se llevó a cabo una au- de comprobación, como práctica de los estudios
dición a cargo de los alumnos de la cátedra de realizados .

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RECITAL DE FLAUTA.-EI joven flauti- 2do. RECITAL DE CLA VECIN.-Claudine
ta Dagoberto Estrada Martínez, discípulo del Gómez Vuistas, discípula de la Mtra. Luisa Du-
Mtro. Rubén Islas presentó el 21 de junio un rón presentó su 2da. prueba para obtener el
recital, en el cual interpretó obras de Matt Do- Diploma de Ejecutante de Clavecín el 24 de
ran, E. Bozza, acompañado por el celista José junio, interpretando obras de J . S. Bach, J.
Lui Rodríguez Ayala. En la 2do. parte tocó Ph . Rameau, A. Vivaldi Bach, A. Soler y D.
la interesante "Picnic Suite" de C. Bolling, acom- Scarlatti. Fungieron como sinodales los maes-
pañado por un grupo formado por el pianista tros Francisco Javier Garduño, Horacio Franco
Eduardo Marín, el guitarrista Roberto Medrana, Meza, Emma Gómez, Aura Enma Pacheco Pin-
el contrabajista Emanuel Henderson y en la zón y Armando Montiel Olvera.
batería RodolEo Sánchez.
SECCION INFANTlL.-El 25 de junio el
EXAMEN DE CLAVECIN.-El 23 de ju- Mtro. Juan Manuel Ceja, organizó una audición
nio Claudine Gómez Vuistaz, discípula de la con sus alumnos de flauta dulce y guitarra del
Mtra. Luisa Durón , presentó su recital examen sector infantil, como demostración del aprove-
de 70. año, tocando brillantemente la Partita chamiento de los niños a su cargo. Se tocaron
No. 1 de Juan Sebastián Bach, 6 obras de J. obras del libro de Julio S. Sagreras y Sonatinas
Ph. Rameau, el Concierto Opus 3 No. 12 de anónimas del siglo XVIII.
A. Vivaldi Bach y Sonatas de Soler y Scarlatti.
MUSICA BARROCA.-El 25 de junio la
CONCIERTO DE CLAUSURA DE CUR- Mtra. Emma Gómez, organizó un interesante
SOS 1981-1982.-El 23 de junio se llevó a ca- concierto de Conjuntos de Cámara del Periodo
bo un importante concierto, en ocasión de la Barroco con varios de us alumnos, intelpretan-
clausura de cursos del Conservatorio, tomando do obras de A. Scarlatti, G. F. Handel, J. O.
parte la Orquesta Sinfónica de Alumnos y Coro Boismortier, J. J. Quantz, J. S. Bach y J. C.
del Conservatorio dirigidos por los mae tras Pepusch, para violoncello y bajo continuo, flau-
Jorge Delezé y Alberto Alva. ta y trío para flauta, violoncello y bajo conti-
nuo y flauta, violin c1avecín y violoncello.
El programa escogido para esta ocasión, fue
el, Concierto para Violín y Orquesta en Re Ma- CUARTETO DE CUERDAS DEL CONSER-
yor de Chaikovski, llevando como solista al vio- VA TORIO.-EI 28 de junio el Cuarteto de
linista Jorge Budzisewsky Mariscal. En la 2da. Cuerdas del Conservatono, integrado por Ve-
parte se interpretó La Creación de F. J. Haydll rónica Medina, violín 10. Jorge Delezé P. , vio-
en versión reducida por el Coro del Conserva- lín 20., Artemio Núñez, viola, e I1defonso Ce-
torio, teniendo como solistas a la oprano Ca- dilla, violoncello, presentó un concierto de cá-
rolina Vadillo, Tenor Gerardo Rábago y el mara en el cual colaboraron, además, los gui-
barítono Ramón Morales Armenta. tarristas Alberto Ubach y Eduardo Rodríguez,
ejecutando las interesantes obras siguientes:
RECITAL EXAMEN DE FLAUTA.-EI Condeno para guitarra y cuerdas de Vivaldi,
24 de junio María Elena Guevara Castro, dis- Variaciones sobre las folías para guitarra y cuer-
cípula del Mtro. Rubén Islas, presentó su re- das de F. Sor, Nocturno en La Mayor de Bo-
cital examen de 50. año de flauta,interpretando rodin, Cuarteto en Do Mayor de Mozart y Con-
obras de C. Saint-Saen , J. S. Bach, Arthur cierto para 2 guitarras y Cuarteto de cuerdas
Honegger, Reynaldo Hahn y Georg Ph. Tele- de Vivaldi.
mann, acompañada por el pianista Eduardo Ma-
rín. RECITAL DE PIANO.-El 28 de junio Jo-
sé Luis Arcaraz López discípulo del Mtro. José
2da. AUDIClON PIANISTICA .-La Mtra . Luis Arcaraz, presentó su recital de 70. año de
Stella Lechuga presentó el 24 de junio una 2da. piano con obras de J. S. Bach, Beethoven, Cho-
audición de sus alumnos, como práctica de la pin, A. Tcherepnin y M. M. Ponce. El jurado
especialidad. estuvo integrado por los Mtros.: Andrés Acos-

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la, Paolo Mello y Guillermo Salvador Fernán- z. Kodaly con Ciro Ortega viola y el piani la
dez. Gilberto Gamboa, Sonata sim ple de Gutiérrez
Reras, co n el flauti sta Rodolfo Vázquez y la
RECITAL DE CANTO.-Noel Quiroz Sán- pianista Patricia García, Primera gavota para
chez discípulo de la maestra Irma González, pre- piano a 4 mano de M. M. Ponce con los pia-
sentó el 29 de junio su examen público para nistas Estela Campo y Efrén Guzmán, Trío de
obtener el Diploma de Cantante con obras de M. M. Pon ce (j ero movimiento) con el violi-
Schumann, Strauss, Handel , Bach, Haydn, Do- nista Eliazar Hernández, Fagot Juan Bosco Ca-
nizetti, Mascagni, Revueltas, Moreno, B. Ga- rrero y piano Jorge Espinosa.
lindo y F. Langas. El jurado e tuvo integrado
po r los Mtros. Rosa Rimoch , Consuelo Martí- Las interesa ntes 4 micropiezas de Leo Bro-
nez, Alirio Campos, Aura Emma Pacheco Pin- wer, con los gui tarrista Lucía de Lourdes Gar-
zón y Armando Montiel Olvera. cía y Roberto Medrana, Suite para dos guita-
rras de M. M. Ponce con Alberto Ruiz Ascen-
GERARDO RABAGO PALAFOX.-Este cio y Andrés Ca ales Galván, Sonatina para
al umno de la Mtra. R osa Rimoch, presentó el flauta y piano de Melcolm Arnold con Rodolfo
29 de junio su evamen público de 50. año de Vázquez y Carlos Alberto Pece ro, Sonata para
can to, interpretando obras de: A. Falconieri , guirarrn y clal'ecín de M. M . Ponce con Fer-
J. S. Bach, G. F. R aendel , Schubert, G. R os- nando Lanz Muñoz y Homero Valle. Idilio
sini , G. Fauré, F. Poulenc, A. Montiel Olvera, mexicano para 2 pianos con Magnolia Orea
J. Rodrigo y J . Ni n. El jurado estuvo integrado Caria y Jorge Espinosa Paz y por último la Ba-
por los maestros Alirio Campo, Consuelo Mar- lada mexicana en ve rsión para 4 manos de M.
tínez y Jorge Lagun e . M. Ponce con Socorro González y Alberto Pe-
cero.
20. CONCIERTO DE VIOLlN.-EI 30 de CURSO PARA MAESTROS.-En lo pri-
junio se llevó a cabo un a audición con los meros días del mes de ju lio la Coordinación Ge-
alullln os de violín de la mae tra Rasma Lielme- neral de Educación Artística en colaboración
ne, como demostración de su aprovechamiento. con la Delegación Sindical de Maestros del Con-
Tomaron parte alumnos desde los primeros ervatorio, organizó un interesante " Curso de
grados de estudio hasta el 100. año. El grupo Pedagogía General y Psicología del adolescen-
estuvo acompañado al pi ano por la Mtra. Mag- te" , dedicado a los maestro ele la di ve rsa e-
dalena MariscaL pecialidade del plantel.

RECITAL DE FLAUTA.-Claudio Agea CURSO DE VERANO.-El Conservatorio


Bocanegra, di cípulo del Mtro. Héctor Orope- acional de Mú ica, con la colaboración de la
za, presentó el 30 de junio su examen de 70. Dirección General de Coo rdinación de Educa-
año de flauta, interpretando obras de Fauré, ción Artística del LN.B .A., o rganizó el Segundo
Doppler, Hindemith y la interesante Suite para Curso úe Verano a nivel infantil, en el periodo
tlauta y varios instrum entos de Claude BolJing. comprendido del lo. al 17 ele julio.
Tomaron parte en el acompañamiento, el pia-
nista Héctor Oropeza, Contrabajista Antonio Se impartieron las materias de Solfeo, Con-
Avendaño y la Percusioni sta Gabriela Jiménez. juntos Corales, Introducción a la Música y Con-
ju ntos de Orqllestas a nivel infantil. Los maes-
MUS/CA DE CAMARA.-Para finalizar el tros Francisco Zúñiga, Miguel Agustín López y
ciclo de lo exámenes que se llevaron a cabo vario al umnos pa antes, como Perla López
durante el mes de junio, el Mtro. Homero Va- R ío, Gabriela Jiménez, Oscar Martínez, Pablo
lle, presentó el examen público de su clase de Torres, Elzbeth Guerrero, Micaela Huízar y
Música de Cámara, con las siguientes obra y otros maestros, impartieron los cursos y orga-
ejecutantes: Preludio y fuga a 4 manos de M. nizaron un pequeño Concierto de Clausura con
M. Ponce, con los pianistas Gilberto Gamboa los participantes, cuyas edades fluctuaron entre
y Adolfo Silva, Adagio para viola y piano de los 7 y 11 años de edad.

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Mucho de e tos niño realizaron las prue- PERCUSIONISTAS .-El 30 de septiembre,
bas de admisión, para ingresar al Conservatorio, e llevó a cabo el examen público de 50. año
precisamente en el Sector Infantil. de percusiones de los alumnos de la clase del
Mtro. Homero Valle, Ju'an Carlos del Aguila
ACTIVIDADES DEL CONSERVATORIO Cortés, Gabriela Jiménez Lara, Norberto Nan-
NACIONAL DE MUSICA DURANTE LOS dayapa Velazco y Alejandro Reyes Moreno,
MESES DE AGOSTO, SEPTlEMPRE quienes ejecutaron brillantemente obras para
diversos instrumentos de percusión, siendo los
y OCTUBRE DE 1982
sinod ales el Mtro. Javier Sánchez Cárdenas y
Armando Montiel Olvera.
Durante el mes de agosto, e llevaron a cabo
las pruebas de admisión de los aspirantes a
CLA VEClNIST A.-EI 10. de octubre, Sa-
ingresar al plantel para el periodo lectivo 1982/
lomé Hidalgo Wong, discípula de la Mtra . Em-
1983.
ma Gómez presentó su 2da. prueba para obte-
ner el Diploma de Clavecinista Ejecutante, con
Más de 20 maestros del Conservatorio to-
obras de John Bull, F. Couperill., J. S. Bach, D.
maron parte como jurado en dichas pruebas y
Scarlatti, y G. Legeti, siendo los sinodales lo
de 1000 solicitudese, se admitieron por esta vez
maestros Luisa Durón, Francisco Javier Gardu-
700 alumnos de ler. ingreso que sumados a los
ño, Emma Gómez, Aura Emma Pacheco Pinzón
de reingreso arrojaron la cantidad de 1600 alum-
y Armando Montiel Olvera.
nos .

EXAMEN DE VIOLIN.-El día 3 de sep- lNA UGURACION DE CURSOS.-EI lo.


tiembre Cecilia Romero POllce, presentó su re- de octubre el Conservatorio organizó nn con-
cital examen, para obtener el Diploma de Con- cierto para la inauguración de CUISOS 1982 /
certista de Violín. Las obras escogidas para 1983, en el Auditorio del planteL Tomaron par-
esta prueba fueron la Sonata No . 3 Op ¡ 31 en te el Mtro. Héctor Rojas, interpretando al pia-
Sol Mayor de L. V. Beethoven, Partita No. 3 no obras del Mtro. Manuel M. Ponce y el Coro
en Mi Mayor de P. Sebastian Bach, Sonata del Conservatorio dirigido por el Mtro. Al-
Breve para violín y piano de Manuel M. Pon ce, berto Alva , interpretó los Liebeslieder Op. 52
Sonata para violín y piano de Maurice Ravel de J . Brahms. Los pianistas acompañantes fue-
e Jntroducción y Rondó caprichoso de C. Saint- ron esta vez los maestros Jo é Lui GOllzález
Saens. Formaron el jurado los siguientes maes- y Patricia Vázquez.
tros : Aran Bitran, Icilio Bredo, Francisco Ja-
vier Montiel Llaguno, Aura Enma Pacheco Pin- En la parte intermedia del programa, el Di-
zón y Armando Montiel Olvera. rector del Conservatorio Nacional de Música,
Mtro. Armando Montiel Olvera dirigió al pú-
GRUPO DE JAZZ.-La Mesa Directiva de blico unas breves palabras comunicando algu-
la Sociedad de Alumnos 1982/1983, presentó nos de los último logros obtenidos y pidiendo
al Grupo de Jazz Xallnate y Arbol , el día 27 a todos los maestros lo mejor de su voluntad
de septiembre, en el Auditorio "Silvestre Re- para continuar ulJa labor ascendente en pro de
vueltas", con obras exclusivamente de autores nuestro arte musical, a pesar de las dificulta-
norteamericanos. des que atraviesa nuestro país.

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INDICE GENERAL DEL VOLUMEN XV - 1982

Enero-Febrero Marzo, No. 76


ROBERT STEVENSON, Relaciones de Carlos Chávez en Los Angeles .... . 3
ESPERANZA PULIDO, George Enesco. Músico Universal . .............. . . 20
JORGE VELAZCO, Juan Bosco Correro .................................. . 23
ALBERTO PULIDO SILVA, Estética y Música Electrónica .............. . . 27
AGUSTIN SANDU, Explorando en le Mundo de Enesco ........... : ........ . 33
SELVIO CARRIZOSA, 9a. ]<'eria y Festival de la Guitarra en Moreha ...... . 36
ESPERANZA PULIDO, Simposio y Festival Enesco en Bucarest ........... . 39
Libros y Mú sica Impresa ...................... ........... ...... ...... ..... . 42
Conciertos, Noticias, Grabaciones .......................................... . ..5
DIGEST .................................................................. . 52

EL CONSERVATORIO
JESUS C. ROMERO, Historia del Conservatorio Nacional de i\Iúsica (Il) .... 56
Actvidades del Conservatorio Nacional de Música .......................... 63
No. 77, Abril-Mayo-Junio (Dedicado a Rodolfo Halffter)
EDITORIAL ............................................................... 5
CRISTOBAL HALFFTER, Ausencia y Presencia de R. Halffter en la
Música Española ..... ......... ...... .. ......... ... ... ....... ... ..... ... 6
LEO N SPIERER, El Concierto para VioHn y Orquesta de Rodolfo Halffter ... 17
KURT P AHLEN Rodolfo Halffter en la Música de su Tiempo .......... .. 24
JORGE VELAZéo, Rodolfo Halffter ................ .. .............. ....... 38
E.P., Gl'abaciones .. . ... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 44
FRANCISCO CURT LANGE y E.P., Libros . ............................... 46
Revista de Revi stas, Conciertos, Noticias ......................... ......... 51
EL CONSERVATORIO
DR. JESUS C. ROMERO, Historia del Consel'vatorio Nac. de Música (IlI) .,. 60
Actividades del Conservatorio Nac. de Música .......... ... ................. 64
No. 78, Julio-Agosto-Septiembre
EDITORIAL ......................................... ·.·.· .. ··......... ..... 3
ESPERANZA PULIDO, La Mujer Mexicana en la Música ................. ..
CARMEN SORDO SODI, Compositoras Mexicanas de Música Comercial ...... 16
VERA STRAVINSKY y ROBERT CRAFT, Stravinsky y la Salud F ísica .. 21
KARL BELLINGHAUSEN, El Tesoro de lo s Diamantes de Vidrio .......... 26
ALBERTO PULIDO SIVA, Estética Musical y Música Electrónica ........ 30
JOHN ROCKWELL, Conlon Nancarrow, Poeta de la Pianola ............... 35
KARL BELLINGHAUSEN, Dos Cantatas Desconocidas de Sumaya 39
Libros ..................................................................... 42
ALFRED E. LEMMON, F estival Internacional Cervantino ................... 44
DIGEST ....... .... .............. ...... .................................... 51
EL CONSERVATORIO
DR. JESUS C. ROMERO, Historia del Conservatorio Nacional de Música (IV) .. 54
Actividades del Conservatorio Nacional de Música ............. .. ........... 64
No. 79, Oetubre-Noviembre-Diciembre (Dedicado a Manuel M. Ponee)
EDITORIAL ....................... .. ................. .. .................. .. 3
Acta de Bautismo de Manuel M. Ponce .................................... 4
CRISTJAN CABALLERO, La Fecha Cierta del Nacimiento de Ponce ........ 5
RUBEN M. CAMPOS, Manuel M. Ponce ................................. 6
ROBERT M. PONCE, La Música Mexicana ................................ 8
ROBERT STEVENSON. Un Homenaje a Manuel M. Ponce en su Centenario .. 10
!JARLOS VAZQUEZ, Manuel M. Ponce y el Piano ............. ............. 14
UWE FRISCH, El Concierto para Violín y Orquesta de Manuel M. Ponce .. 25
PAOLO MELLO, Manuel M. Pon ce, Músico Polifacético .................... 24
RAYMOND LO PEZ, Un Profesor norteamericano, de ascendencia mexicana
habla de Manuel M. Ponce .. . ............... . . .... ... .... ............. 30
CARMEN SORDO SODI, La Labor de Investigación Folklórica de M. M. Ponce 36
Rectificación de Algunos Organistas Mexicanos . ............................ 40
CRONJCA y DIGEST, Actividades del Conservatorio en Junio y Julio 1982 .. 59

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El Conservatorio Nacional de

Música y los editores de la revista

musical HETEROFONIA desean a

todos sus suscriptores, lectores y

amigos lo mejor para el año 1983.

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