ORACION PODEROSA A NUESTRA SEÑORA DE LO IMPOSIBLE

Hoy les traemos la poderosa oración a nuestra Señora de lo imposible o "Virgen de lo

imposible" esta es una advocación mariana que se refiere a la Virgen María en su papel de
intercesora ante Dios para lograr lo imposible. Esta devoción se basa en la creencia de que
la Virgen María tiene el poder de hacer posible lo que parece imposible a través de su
intercesión divina. Muchas personas recurren a esta advocación en momentos de
dificultad o necesidad, confiando en la ayuda y protección de la Virgen María para superar
obstáculos aparentemente insuperables.

Antes de empezar la oración, haz clic en “Me Gusta” y comenta, “Virgen de lo imposible
ayúdame en este momento de tanta necesidad”. Para expandir estas bendiciones activa la
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¿Estás listo?

La Virgen de lo Imposible es venerada en un santuario en Patu, Brasil, desde 1758, cuando

el coronel Antonio de Lima Abreu Pereira y su esposa trajeron la imagen desde Portugal y
construyeron una capilla en agradecimiento por un favor recibido.

En 1948, se demolió la capilla para erigir un santuario más grande que se convirtió en una
de las siete maravillas de Rio Grande do Norte. El título de "lo imposible" se debe a los tres
hechos extraordinarios atribuidos a la Virgen: haber sido concebida sin pecado original,
ser Virgen Madre y Madre de Dios.

La Virgen de lo Imposible es una advocación mariana que ha ganado gran popularidad

entre los fieles católicos debido a su poderosa intercesión en situaciones difíciles y
desesperadas. Esta devoción se centra en la creencia de que la Virgen María, como madre
amorosa y compasiva, puede obrar milagros y hacer posible lo que a simple vista parece
imposible.

La figura de la Virgen de lo Imposible está asociada con la idea de que ante los ojos de la
Virgen no hay nada que sea imposible, ya que su amor y su poder divino son infinitos.
Muchas personas recurren a ella en momentos de angustia, enfermedad, problemas
económicos o cualquier otra situación complicada en la que necesitan un milagro.

La devoción a la Virgen de lo Imposible se ha extendido por diferentes países y

comunidades católicas, y se celebra con fervor en diversas fechas a lo largo del año.
Muchos fieles han experimentado la ayuda y el consuelo de la Virgen en momentos
críticos de sus vidas, atribuyéndole la realización de milagros y prodigios que han
cambiado su destino.

La oración a la Virgen de lo Imposible es una expresión de fe y confianza en su intercesión

divina. A través de esta oración, los fieles buscan el amparo y la protección de la Virgen
María, pidiéndole que les ayude a superar las dificultades y obstáculos que se presentan
en sus vidas. La creencia en su poder para hacer posible lo imposible es un pilar
fundamental de esta devoción mariana.

La Virgen de lo Imposible es una advocación mariana que inspira esperanza, fe y confianza

en el poder divino de la Virgen María. Su intercesión ha sido invocada por generaciones de
fieles que han encontrado en ella un refugio seguro en momentos de adversidad. Su amor
maternal y su capacidad para obrar milagros la convierten en una figura venerada y
amada por millones de personas en todo el mundo.

La Virgen de lo Imposible es venerada por numerosos fieles católicos que atribuyen a su

intercesión la realización de diversos milagros y prodigios. A lo largo de la historia, se han
registrado testimonios de personas que han experimentado la ayuda y la protección de la
Virgen en situaciones difíciles y desesperadas. A continuación, se presentan algunos
ejemplos de los milagros atribuidos a la Virgen de lo Imposible:

Curaciones inexplicables: Se han reportado numerosos casos de personas que han

experimentado curaciones milagrosas después de haber rezado a la Virgen de lo
Imposible. Enfermedades graves, dolencias crónicas e incluso situaciones médicamente
imposibles de resolver han sido superadas gracias a la intercesión de la Virgen.
Protección en situaciones peligrosas: Muchas personas han atribuido a la Virgen de lo
Imposible la protección en momentos de peligro, como accidentes automovilísticos,
situaciones de violencia o desastres naturales. Se han registrado testimonios de personas
que han escapado ilesas de situaciones extremadamente riesgosas gracias a la
intervención de la Virgen.

Solución a problemas económicos: Algunos fieles han experimentado mejoras

significativas en su situación financiera después de encomendarse a la Virgen de lo
Imposible. Se han reportado casos de personas que han encontrado trabajo, han salido de
deudas o han recibido ayuda inesperada en momentos de crisis económica.

Protección contra el mal: La Virgen de lo Imposible es invocada por muchos fieles como un
escudo protector contra las influencias negativas y las fuerzas del mal. Se han registrado
testimonios de personas que han experimentado paz y tranquilidad espiritual después de
encomendarse a la Virgen en momentos de angustia o tentación.

Milagros familiares: Muchas familias han experimentado reconciliaciones, sanaciones

emocionales y restauración de relaciones rotas después de encomendarse a la Virgen de
lo Imposible. Se han reportado casos de familias que han superado conflictos internos y
han encontrado la paz y la armonía gracias a su intercesión.

Estos son solo algunos ejemplos de los milagros atribuidos a la Virgen de lo Imposible.
Cabe destacar que la fe y la devoción de los fieles desempeñan un papel fundamental en
la manifestación de estos prodigios, ya que se cree que la Virgen responde a las súplicas
de aquellos que confían plenamente en su poder divino.

¡COMENCEMOS!

“Oh Virgen de lo Imposible, Madre amorosa y compasiva, acudo a ti en busca de

tu poderosa intercesión. Sé que ante tus ojos nada es imposible y que tu amor
infinito puede obrar milagros en nuestras vidas. En este momento de dificultad y
desesperanza, te pido que escuches mi súplica y me ayudes a superar los
obstáculos que se interponen en mi camino.
Virgen María, tú que has sido testigo de innumerables milagros y prodigios, te
ruego que pongas tu mirada bondadosa sobre mí y me concedas la gracia que
tanto anhelo. Sé que tu poder es ilimitado y que tu amor por tus hijos es
incondicional. Confío plenamente en tu intercesión y en tu capacidad para hacer
posible lo imposible.

Encomiendo a tus manos mis preocupaciones, mis angustias y mis temores. Tú,
que eres la Estrella de la Mañana, la Luz que guía nuestros pasos en la oscuridad,
ilumina mi camino y ayúdame a encontrar la solución a mis problemas. Con tu
protección maternal, sé que podré superar cualquier adversidad y alcanzar la paz
y la serenidad que tanto anhelo.

Oh Virgen de lo Imposible, tú que eres fuente de consuelo y esperanza para

todos los que acuden a ti con fe sincera, te pido que me ayudes a mantener viva
la llama de la esperanza en mi corazón. Que tu amor incondicional me fortalezca
en los momentos de debilidad y me impulse a seguir adelante con valentía y
determinación.

Te suplico, oh Madre querida, que intercedas ante Dios Todopoderoso en mi

favor y me concedas la gracia que te pido con fervor. Confío plenamente en tu
bondad y en tu misericordia, y sé que no me abandonarás en mi hora de
necesidad. Que tu manto protector me cobije y me guíe por el camino del bien y
la verdad.

Virgen María, Reina del Cielo y Madre de todos los creyentes, te entrego mi vida
y mis deseos más profundos. Escucha mi oración, atiende mi súplica y haz posible
lo imposible en mi vida.

Oh Virgen de lo Imposible, madre amorosa y protectora, hoy me postro ante ti

con el corazón rebosante de gratitud y amor. En este momento de profunda
emoción, quiero agradecerte por todos los milagros que has obrado en mi vida y
 en la vida de aquellos que amo. Tu intercesión ha sido mi luz en la oscuridad, mi
refugio en la tormenta y mi esperanza en medio de la desesperación.

Gracias, Virgen de lo Imposible, por escuchar mis súplicas y por obrar maravillas
en mi camino. Tú, que eres la Madre de la Misericordia, has extendido tu manto
protector sobre mí y has guiado mis pasos por senderos de paz y bendición. En
cada momento de prueba, en cada tribulación, has estado presente, velando por
mi bienestar y concediéndome fuerzas para seguir adelante.

Hoy, en este instante sagrado, elevo mi voz hacia ti para expresar mi más
profundo agradecimiento. Gracias por tu amor incondicional, por tu bondad
infinita y por tu constante protección. Que mi corazón rebosante de gratitud sea
un testimonio vivo de tu poder y de tu amor eterno.

Virgen de lo Imposible, te entrego mis alegrías y mis penas, mis sueños y mis
temores. Que tu luz divina ilumine mi camino y me guíe siempre por la senda del
bien y la verdad. Que tu presencia amorosa me acompañe en cada paso que doy,
en cada decisión que tomo, en cada momento de mi existencia.

Gracias, Virgen de lo Imposible, por ser mi consuelo en la aflicción, mi fortaleza

en la debilidad y mi esperanza en la adversidad. En ti confío plenamente,
sabiendo que tu amor maternal nunca falla y que tu poder sobrenatural todo lo
puede. Amén.”

UNA VEZ FINALIZADA LA ORACIÓN QUIERO QUE RECEMOS JUNTOS TRES PADRES
NUESTROS, OTROS TRES AVE MARÍAS Y TRES GLORIA:

“Padre nuestro que estás en el cielo santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu
reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy, nuestro pan de cada día
y perdona nuestras ofensas. Así como también nosotros perdonamos a los que nos
ofenden, no nos dejes caer en tentación y líbranos de todo mal.
Dios te salve, María llena eres de gracia, el señor es contigo, bendita tú eres, entre todas
las mujeres y bendito es el fruto, de tu vientre Jesús. Santamaría madre de Dios, ruega por
nosotros los pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte.

Gloria al Padre y al Hijo y al Espirítu Santo como era en el principio ahora y siempre por
los siglos de los siglos. ¡Amén!”

Vamos de nuevo:

“Padre nuestro que estás en el cielo santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu
reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy, nuestro pan de cada día
y perdona nuestras ofensas. Así como también nosotros perdonamos a los que nos
ofenden, no nos dejes caer en tentación y líbranos de todo mal.

Dios te salve, María llena eres de gracia, el señor es contigo, bendita tú eres, entre todas
las mujeres y bendito es el fruto, de tu vientre Jesús. Santamaría madre de Dios, ruega por
nosotros los pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte.

Gloria al Padre y al Hijo y al Espirítu Santo como era en el principio ahora y siempre por
los siglos de los siglos. ¡Amén!”

Recemos por última vez:

“Padre nuestro que estás en el cielo santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu
reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy, nuestro pan de cada día
y perdona nuestras ofensas. Así como también nosotros perdonamos a los que nos
ofenden, no nos dejes caer en tentación y líbranos de todo mal.

Dios te salve, María llena eres de gracia, el señor es contigo, bendita tú eres, entre todas
las mujeres y bendito es el fruto, de tu vientre Jesús. Santamaría madre de Dios, ruega por
nosotros los pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte.

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo como era en el principio ahora y siempre por
los siglos de los siglos. ¡Amén!”
 Recuerda que Jesucristo, nuestro señor, nos dijo que todo lo que pidamos a su Padre, en
su nombre, será dado y todo lo que se pide teniendo mucha fe, Dios no los concede,
porque él es un padre bueno y misericordioso, que quiere darle lo mejor de este mundo a
sus hijos, confiemos en él y sigamos sus mandatos y verás como tu vida se llena de
bendiciones, que Dios nuestro señor, te brege el mejor día de tus vidas y derrame su
bendición en tu casa, en tu vidas, en tu trabajos y en todos tus familiares.

¡En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén!

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